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El sistema penal mexicano

Regresemos al período de la cultura democrática y echemos un breve vistazo al


marco constitucional y legal del sistema penal mexicano y ejemplos de su
funcionamiento. El sistema penal mexicano desarrolló un conjunto de principios
rectores para facilitar su funcionamiento, al igual que cualquier otro sistema penal
fundado en los estándares jurídicos de nuestra antigua cultura jurídica
continental romano germánica. Estos principios: legalidad, proporcionalidad,
reintegración a la sociedad, abolición de la pena de muerte y de la tortura, etc.
Ellos marcan la existencia de un marco jurídico que fundamenta y legitima al
Estado para intervenir punitivamente. Como ya se mencionó, el sistema de
justicia penal en nuestra nación está compuesto por una serie de leyes penales,
entre ellas el derecho sustantivo, el derecho adjetivo y el derecho orgánico. Estas
leyes se desarrollan, por supuesto, a través de los respectivos mecanismos
legislativos que las configuran, y también constan de varios ejemplos. Es la
aplicación del derecho penal lo que les da vida y los renueva.

Las instancias de aplicación de la ley penal en el sistema penal mexicano


Ciertas leyes constitucionales que dan vida, organización y función a los órganos
pertinentes del sistema de justicia penal mexicano (policía, tribunales y prisiones)
controlan su funcionamiento. Para esta función es fundamental la Ley de
Procedimiento Penal (derecho penal adjetivo), que describe (perdón por el
despido) el procedimiento mediante el cual una persona es acusada, declarada
culpable y condenada.

La función policial
El origen de la palabra policía, su uso y usos posteriores no revelan un hilo
conductor que indique claramente lo que significa el sustantivo policía; Pero
independientemente de su etimología, la palabra generalmente tiene tres
significados diferentes, a saber:
1) Se refiere al nivel funcional de la policía, o las funciones que desempeña.
Naturalmente, esta función estará asociada con la estructura general del Estado,
ya que desempeña un papel importante en su sistema opresivo y, en
consecuencia, refleja su ideología.
2) Centrarse en la policía como institución y buscar su conexión directa con el
contexto histórico en el que se ubica trabaja en conjunto con la agencia, de modo
que las dos posiciones (pasado y presente) están estrechamente relacionadas.
enlace..
3) El tercer enfoque está en el concepto de una "sociedad policial", donde dos
grandes departamentos o agencias existen por separado pero deben estar
conectados en pie de igualdad.

La institución del Ministerio Público se estructura dentro del Poder Ejecutivo, a


través de la Procuraduría General de Justicia en el contexto federal, y sus
homólogas en el ámbito local, como lo prevén la Constitución federal y las de las
entidades federativas. Las reformas de 1994 eliminaron el monopolio del
Ministerio Público en los procesos penales, reduciendo sus funciones a las
siguientes:
1) Determinar los hechos delictivos y la responsabilidad.
2) Decidir actuar.
3) Mantener los casos penales en los tribunales desde el principio hasta que
finalice el proceso.

La función jurisdiccional
Como todos los países pertenecientes a la cultura jurídica continental, la
jurisdicción penal de nuestro país también se forma en el marco del Estado de
derecho y de acuerdo con ciertos principios de competencia y legalidad, que son
la base de cualquier intervención penal y son, entre otros. entre otras cosas, la
responsabilidad del Estado y se ven reforzadas por garantías procesales, como
jueces, defensa y asistencia jurídica, debido proceso, audiencias, pruebas,
presunción de inocencia, prohibición de tribunales especiales de honor, etc.

El Poder Judicial tiene dos competencias jurisdiccionales:


1) La justicia constitucional.
2) La justicia ordinaria federal.

Además de los casos y disputas constitucionales, la justicia constitucional


también se aplica en los procedimientos judiciales para la protección de los
derechos constitucionales. El alcance de los procedimientos judiciales para la
protección de derechos constitucionales en México es muy amplio. Además de
revisar la constitucionalidad de las leyes y los recursos de hábeas corpus,
también tiene la función de revisar la legalidad de las actividades de las
autoridades judiciales y administrativas. En otras palabras, desde el siglo
pasado, la protección de los derechos constitucionales se ha convertido en un
freno al ejercicio del poder estatal, ya sea ejecutivo o judicial, lo que destruye la
esencia misma del proceso y debilita el federalismo judicial.

La ejecución penal
El poder ejecutivo (federal o estatal) es responsable de organizar el sistema de
justicia penal para lograr la rehabilitación. Una vez impuestas las sanciones
penales, estas son aplicadas por el poder ejecutivo (federal o estatal) de acuerdo
con el delito involucrado.

Existe una estrecha conexión entre el derecho del Estado a castigar a los sujetos
que violan las normas y el deber del Estado de proporcionar a los infractores los
medios para adaptarse a la sociedad. Las prisiones son sin duda las instituciones
más controvertidas del sistema penitenciario. Contiene disposiciones para el
cumplimiento de las sanciones impuestas por las autoridades judiciales, que son
claramente privativas de libertad. Esta sanción se ha convertido en una panacea
para las sanciones penales en todo el mundo, y México no es la excepción.

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