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UNIVERSIDAD TECNOLÓGICA DEL PERÚ

Tarea Académica I parte 1

Trabajo que como parte del curso de Ciudadanía y Reflexión Ética presentan los
alumnos

INTEGRANTES:

1. CORDERO MEGO LUCIANA ALESSANDRA Cod. U23205105

2. JAIMES FLORES PEDRO ANTONIO Cod. U23236901

3. SALINAS DIAS XIOMARA ANYELI Cod. U23205077

4. SONCO ALMANZA EMMA GLORIA Cod. U23325933

5. VASQUEZ URRUTIA ANDERSSON JAIME Cod. U23237550

Lima, 09 de 09 de 2023
El aborto por transgresión y su relación con la ética

Hoy en día el tema del aborto en el Perú es un asunto controversial, respecto a

si es correcto o no, más cuando hablamos de violaciones y las consecuencias

que conlleva. Además, en nuestro país cada 4 niñas menores de 15 años se

convierten en madres producto de una violación sexual; no obstante, a pesar

del impacto que causa en su vida y salud, tienen que continuar con un

embarazo no deseado, debido a que el Perú no legaliza el aborto clínico en

casos de violaciones o incesto. Frente a este contexto, surge la siguiente

pregunta: ¿debería legalizarse el aborto clínico en el Perú por casos de

violación o incesto hacia niñas menores de edad? Por nuestra parte, sí

consideramos despenalizar el aborto clínico para niñas menores de edad

involucradas en violación o incesto. A continuación, desarrollaremos nuestra

postura sólidamente.

Despenalizar el aborto clínico para niñas menores de edad involucradas en

violación o incesto, es importante, porque así evitaríamos abortos clandestinos

y embarazos no deseados por transgresión. Con el objetivo de sustentar

nuestros argumentos presentamos información relevante. Según el diario de

Naciones unidas, GINEBRA (13 de junio de 2023), El Comité de los Derechos

del Niño de la ONU ha determinado que Perú violó el derecho a la salud y a la

vida de una niña rural indígena que fue violada, al negarle información y acceso

a un aborto legal y seguro. Este ha hecho público hoy su decisión tras escuchar

la queja presentada por Camila, quien fue violada por su padre desde los

nueve años hasta que se quedó embarazada a los trece años. A pesar de ello,

el personal médico hizo caso omiso ante tal situación e insistió en organizar
controles prenatales periódicos e ignoraron el estado de Camila. Cuando se

negó a asistir a sus controles prenatales, el personal médico, en ocasiones

acompañado por la policía, acudió varias veces a su domicilio para obligarla a

continuar con el embarazo, lo que la llevó a ser humillada y perseguida por su

familia y su comunidad. Pese a esto, se le negó el permiso para abortar y fue

procesada tras tener un aborto espontaneo. Ella también fue acosada por la

fiscal que estaba a cargo de su caso de violación. La cual ordenó que se

investigue la escena del crimen en presencia obligatoria de Camila y su padre,

donde la llamaron varias veces para declarar. Asimismo, La fiscal habría

desviado la investigación de violación para centrarse en reunir pruebas

incriminatorias del presunto delito de auto aborto. Ann Skelton, presidenta del

comité, dijo: "Estoy consternada por la forma en que las autoridades

gubernamentales han tratado a una niña de 13 años que fue víctima de

violación e incesto, dada su extrema vulnerabilidad, en lugar de ser protegida,

ella ha sido nuevamente sometida ante autoridades sanitarias, policiales y

judiciales por daños y acoso. De hecho, pasó de víctima a criminal”. Esto hace

mención a la desigualdad por la discriminación, condición social, la violencia en

el hogar y origen étnico, donde no se respetó su libertad ni sus derechos y se

ignoró por completo sus decisiones como persona y víctima. Aquí es necesario

razonar los pormenores del problema y las voluntades que están en

coyuntura.

Según Savater (1991) “plantea que hacerse responsable supone que puedo

usar mi libertad para determinar mi propia vida. Una acción es buena cuando

puede razonarse del por qué lo es. Esto supone también la responsabilidad

moral, nadie puede dispensarnos de elegir, incluso cuando parezca” (p.16).


Esto es un poderoso recordatorio de la importancia de proteger los derechos de

las niñas en estas situaciones, donde el Perú es responsable de cumplir con

sus obligaciones bajo tratados internacionales como la Convención sobre los

Derechos del Niño. Perú violó este compromiso al negar el aborto y criminalizar

a Camila, y se deben tomar medidas para remediar la situación. Según Cortina

(2009) “Desde un punto de vista ético, la sociedad necesita repensar cómo

trata a las víctimas de violación. ¿Es ético negarle el aborto a una mujer y

someterla a un proceso penal si intenta interrumpir un embarazo no deseado?

La respuesta parece obvia, no es ético. Justicia y felicidad son dos grandes

horizontes de la ética, que no siempre resulta fácil articular, pero es preciso

lograrlo. Por qué, no es humano un proyecto de felicidad que deje a los más

débiles por el camino, ni son verdaderamente vigorosas las exigencias de

justicia que nos aspiran a una vida en plenitud. Pero importa aclarar qué se

entiende ‘justicia’ y qué por ‘felicidad’ cuando se trata de vincularlas, porque

son dos grandes nombres, pero no es fácil saber qué significan, además ¿Para

qué sirve la ética? Para aprender a apostar por una vida feliz, por una vida

buena, que integra como un sobreentendido las exigencias de la justicia y abre

el camino a la esperanza” (p.161).

En síntesis, sí se considera despenalizar el aborto clínico para niñas menores

de edad involucradas en violación o incesto, porque esto vulnera su dignidad

como mujeres, al obligar a una niña a continuar con un embarazo producto de

una violación sexual, se convierte en un segundo hecho de violencia, esta vez

ejercida por el Estado, quien no solo desprotege a la niña frente al primer

hecho, sino que desconociendo el sufrimiento y dolor psíquico de la víctima, le

impone la continuación de un embarazo no deseado, lo que lleva al aborto


clandestino implicando un peligro para sus vidas. Por consiguiente, con la

intención de menoscabar este dilema, se comparten dos sugerencias.

Despenalizar el aborto en todos los casos de violación infantil y que se

modifique la normativa que regula el acceso al aborto terapéutico para permitir

su uso especial en niñas ultrajadas. Esto conlleva a que muchas niñas y

adolescentes puedan tener el acceso al aborto seguro y atención postaborto,

especialmente cuando existe peligro para la vida y la salud de la madre como

lo es en casos de violación incestuosa. Ahí las sociedades y los gobiernos

deben adoptar un enfoque compasivo y de derechos humanos para abordar

estas situaciones.

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