ACTIVIDAD DE EVALUACIÓN.

USO EXCESIVO DE RECURSOS TECNOLÓGICOS EN LOS

JÓVENES (DEBATE).

JESUS ANDRES APARICIO LOPEZ 408

Introducción.
En la era digital en la que vivimos, la tecnología ha permeado prácticamente todos los
aspectos de nuestra vida diaria. Los jóvenes, en particular, se encuentran inmersos en un
mundo digital en constante evolución, donde el acceso a dispositivos electrónicos y la
conexión a Internet son prácticamente omnipresentes. Si bien la tecnología ha traído
consigo numerosos beneficios en términos de comunicación, acceso a información y
entretenimiento, también plantea un debate sobre su uso excesivo y las repercusiones que
puede tener en los jóvenes.
El uso excesivo de la tecnología entre los jóvenes se ha convertido en una preocupación
creciente en la sociedad. Muchos jóvenes pasan largas horas frente a pantallas de
dispositivos, ya sea navegando por redes sociales, jugando videojuegos, viendo contenido
en línea o consumiendo otro tipo de medios digitales. Esta dependencia tecnológica puede
tener diversas repercusiones en su bienestar físico, emocional y social.
Algunos puntos a tomar serian:
En primer lugar, el uso excesivo de la tecnología puede tener un impacto negativo en la
salud física de los jóvenes. Pasar largos períodos de tiempo sentados frente a una pantalla
puede llevar a un estilo de vida sedentario, lo que aumenta el riesgo de desarrollar
problemas de salud como la obesidad, enfermedades cardiovasculares y problemas
posturales. Además, la exposición excesiva a la luz azul emitida por las pantallas puede
afectar negativamente el sueño, lo que puede conducir a problemas de insomnio y
trastornos del ritmo circadiano.
En segundo lugar, el uso excesivo de la tecnología puede tener un impacto en la salud
mental de los jóvenes. El tiempo excesivo dedicado a las redes sociales puede generar
ansiedad, depresión y baja autoestima, ya que los jóvenes pueden compararse
constantemente con los demás y experimentar una presión por mostrar una vida perfecta
en línea. Además, la sobreexposición a contenido violento, sexual o inapropiado en línea
puede afectar negativamente el desarrollo emocional y la percepción de la realidad de los
jóvenes.
En tercer lugar, el uso excesivo de la tecnología puede tener repercusiones en las
habilidades sociales y en el desarrollo de relaciones interpersonales de los jóvenes. Pasar
demasiado tiempo en línea puede llevar a la desconexión de la interacción cara a cara, lo
que dificulta el desarrollo de habilidades de comunicación verbal y no verbal. Además, el
uso excesivo de la tecnología puede hacer que los jóvenes se aíslen socialmente,
perdiendo oportunidades de participar en actividades sociales y de establecer relaciones
significativas en el mundo real.
Desarrollo:
Es importante destacar que no se trata de demonizar por completo el uso de la tecnología
en los jóvenes, ya que también puede ser una herramienta poderosa para el aprendizaje, la
creatividad y la conexión social. Sin embargo, es fundamental encontrar un equilibrio
saludable y fomentar un uso responsable de la tecnología.
Para abordar este problema, es necesario que los padres, educadores y la sociedad en
general tomen medidas para promover un uso equilibrado de la tecnología entre los
jóvenes. Esto puede incluir establecer límites de tiempo para el uso de dispositivos,
fomentar actividades al aire libre y el ejercicio físico, promover el diálogo abierto sobre los
riesgos y beneficios de la tecnología, y enseñar habilidades de pensamiento crítico para
evaluar el contenido en línea.
Además, es importante que los jóvenes desarrollen habilidades de autorregulación y
aprendan a utilizar la tecnología de manera consciente y responsable. Esto implica ser
conscientes de los efectos que el uso excesivo puede tener en su bienestar y tomar
medidas para establecer un equilibrio saludable entre el tiempo en línea y las actividades
fuera de línea.
Puntos a favor del uso de la tecnología:
1. Acceso a la información: La tecnología permite a los jóvenes acceder a una amplia
gama de información y conocimiento en línea. Pueden investigar temas, aprender
nuevos conceptos y acceder a recursos educativos de manera rápida y eficiente.
2. Comunicación instantánea: La tecnología facilita la comunicación en tiempo real a
través de diversas plataformas, como redes sociales, aplicaciones de mensajería y
videollamadas. Esto permite a los jóvenes mantenerse conectados con amigos y
familiares, así como colaborar con otros en proyectos o actividades.
3. Oportunidades educativas en línea: La tecnología brinda acceso a cursos en línea,
tutoriales y herramientas de aprendizaje interactivas. Los jóvenes pueden ampliar
sus conocimientos y habilidades en diversas áreas, incluso fuera del entorno escolar
tradicional.
Puntos en contra del uso excesivo de la tecnología:
1. Sedentarismo y problemas de salud: El uso prolongado de dispositivos electrónicos
puede llevar a un estilo de vida sedentario, lo que puede contribuir a la obesidad y
problemas de salud relacionados. Además, la exposición excesiva a pantallas puede
afectar negativamente el sueño y la salud visual.
2. Aislamiento social: El uso excesivo de la tecnología puede llevar a la disminución de
las interacciones sociales cara a cara. Los jóvenes pueden perder oportunidades de
desarrollar habilidades de comunicación interpersonal y establecer relaciones
significativas en el mundo real.
3. Dependencia y adicción: Algunos jóvenes pueden desarrollar dependencia o
adicción a la tecnología, lo que puede afectar negativamente su bienestar emocional
y su capacidad para funcionar en otros aspectos de la vida.
4. Desinformación y contenido inapropiado: Internet ofrece acceso a una gran cantidad
de información, pero también existe la posibilidad de encontrarse con contenido
inapropiado o desinformación. Los jóvenes pueden ser vulnerables a la
manipulación y a la exposición a contenido no adecuado para su edad.
5. Distracción y falta de concentración: La constante disponibilidad de dispositivos
electrónicos puede provocar distracción y dificultad para mantener la concentración
en tareas importantes, como el estudio o el trabajo.
En conclusión, el uso excesivo de la tecnología en los jóvenes plantea preocupaciones
legítimas en términos de salud física, mental y social. Es fundamental abordar este
problema de manera proactiva, promoviendo un uso equilibrado y responsable de la
tecnología, y fomentando la educación y el diálogo sobre los riesgos y beneficios asociados.
Al hacerlo, podemos ayudar a los jóvenes a aprovechar al máximo las ventajas de la
tecnología mientras se protege su bienestar integral.