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HISTORIA

Otra Acefalía

Después de la sanción de la constitución, Pueyrredón renuncia a su cargo como director supremo. Lo


reemplaza el general José Rondeau. Asume el poder en un contexto de una crisis inevitable. La provincia
del Tucumán se declara autónoma, luego de una revolución organizada y dirigida por Bernabé Araoz. Al
mismo tiempo, el litoral, ósea Santa Fe y entre Ríos, seguían en un enfrentamiento directo con el poder
central, Buenos Aires. Este pide ayuda al ejército de los Andes, y a los restantes del ejercito del norte para
combatir las fuerzas que atacaban Buenos Aires. Sin embargo, San Martín, el líder del ejercito de los andes,
decide no acudir en ayuda del poder central. Además, parte del ejercito del Norte también se negó a
pelear por Buenos Aires. Su líder, Juan Bautista Bustos, luego fue a su provincia natal, Córdoba, y organizo
un congreso entre todas las provincias. De este modo, desafiando tanto al directorio como al congreso,
que había dictado la constitución de 1819.

Así, la autoridad del poder central era casi nula. Los caudillos decidieron continuar su avance sobre Buenos
Aires, y Rondeau tuvo que salir a enfrentarlos. En Cepeda, los caudillos triunfan, y derrotan lo poco que
quedaba del ejercito nacional. Rondeau debió delegar sus responsabilidades a el Cabildo, que obligo al
directorio y al congreso a auto disolverse. De esta manera, el cabildo iba a tomar el poder,
provisoriamente. Al igual que en años anteriores, solo que esta vez no era el responsable del extenso
territorio rioplatense, sino que se limitaba a Buenos Aires.

Esta acefalía provoca una doble crisis. Tanto en Buenos Aires, donde las peleas entre ex directorales, de
ideas centralistas, y federales dejaban un clima de disputas y problemas por todo el territorio. Fuera de
Buenos Aires, las provincias dejaron a ser lo que se habían convertido por la Ordenanza de Intendencias,
y pasaron a ser territorios encabezados por un sujeto político, con un cabildo cabecera. Estaban en una
situación de autonomía de hecho, que pronto se convirtió en una de derecho.

Crisis De 1820

Los vencedores de Cepeda exigen que el cabildo formase un nuevo gobierno, que además de adquirir
legitimidad, les fuese favorable en las negociaciones. Así, el cabildo convoco a un cabildo abierto el 16 de
febrero de 1820, al que acudieron menos de 200 vecinos, y en el que se decidió la creación de la Sala de
Representantes. El único mandato de esta sala era elegir al gobernador de la provincia.

Sarratea fue elegido para ocupar ese puesto, pero de manera provisoria, ya que la sala estaba conformada
solamente por habitantes de la provincia. Él fue el responsable de establecer paz con el litoral, y lo hizo
mediante un pacto, firmado el 23 de febrero, en Pilar. Ese pacto era el Tratado del Pilar. Este tratado es
firmado por el electo gobernador de la Provincia de Buenos Aires y los caudillos Estanislao López, de Santa
Fe, y Francisco Ramírez, de Entre Ríos.
Este pacto establecía que el país, en un futuro, sería de organización federal. También puso fecha a una
convocatoria en San Lorenzo para determinar cómo reorganizar el gobierno central. Además, establecía
el fin de la guerra entre las provincias, y el retiro de las tropas de Santa Fe y Entre Ríos a sus respectivas
provincias. También decretaba la libre navegación de los ríos por parte de las otras provincias.

Dentro de Buenos, la firma de este tratado fue considerada humillante, por lo que un ex directorial decidió
organizar una asamblea popular, en la que deponen a Sarratea. Juan Ramón Balcarce asume el poder
siendo nombrado por la “pueblada”. Así se produjo la primera crisis de gobierno en Bs. As. Sin embargo,
Balcarce no llegó a durar mas de una semana en el cargo, debido al descontento de los caudillos del litoral.
Presiono para derribar al nuevo gobernador y reponer a Sarratea. Así y todo, Sarratea no quedaría como
gobernador por mucho tiempo. Luego de reorganizar la Sala de Representantes para tener una cantidad
diputados pareja entre Bs. As. Y la campaña, con 12 y 11 por cada lado. Con esta sala se da la reunión
estipulada en el Tratado del Pilar. Sin embargo, luego de las elecciones el 27 de abril, la Sala paso de ser
un organismo designado únicamente para elegir al gobernador de buenos aires, a ser un cuerpo que era
capaz de elegir que camino guiaría al nuevo gobierno. Sarratea se vio obligado a reconocer que la
soberanía pasaba a residir en la sala.

Esta nueva sala decide nombraron Idelfonso Ramos Mexía como gobernador con facultades
extraordinarias, a razón de la crisis que estaba viviendo la provincia. Así y todo, la crisis se mantuvo, y el
19 de junio, Ramos Mexía renuncia a su puesto como gobernador, ya que nadie obedecía a su autoridad.

Al día siguiente, grupos disidentes de la campaña designan al general Soler como gobernador de Buenos
Aires. Pero el 20 de junio de 1820 fue un día especial. Es conocido como el día de los tres gobernadores.
Ramos Mexía aún no entregaba el bastón de mando, el general Soler, electo por la campaña, y el cabildo,
que volvía a asumir la responsabilidad del gobierno de la Provincia. Sin embargo, ninguno de ellos tenía
un control efectivo de la situación.

Luego de la autodisolución de la Sala de Representantes, el cabildo volvió a construir una junta para
designar al nuevo gobernador. Esta junta nombra a Manuel Dorrego para ejercer el poder ejecutivo. Pero
la campaña no estaba de acuerdo. Algunos grupos sostenían el gobierno del general Soler, y otros decían
que el poder residía en José María de Alvear. Debido a esto, el cabildo volvió a organizar una reunión con
una nueva sala de representantes, en la que se ratifico el gobierno de Manuel Dorrego.

Dorrego decidió enfrentarse con Estanislao López, a quién venció en Pavón, el 2 de septiembre, aunque
días después fue derrotado por el santafecino en Gamonal.

En Camino A La Pacificación

Luego de lo que significaron estos enfrentamientos militares, la Sala de Representantes nombró como
nuevo gobernador a Martín Rodríguez. Pocos días después de asumir, debió combatir una revuelta, la
cual, apoyado por las milicias de Rosas, derrotó. Así, aparecieron como los salvadores de la provincia, en
un contexto de crisis. Con este refuerzo militar, Rodríguez inicio tratativas con Estanislao López, que se
concretaron mediante un nuevo pacto, firmado el 24 de noviembre de 1820. El tratado de Benegas.
En este, se aseguraba la paz entre las provincias de Bs. As. y de Santa Fe, y aseguraba que Buenos Aires
asistiría al congreso de Córdoba, pero no incluía al caudillo Francisco Ramírez, y su provincia de Entre Ríos.
Así, se hizo evidente que la unión de los Pueblos Libres del Litoral se había quebrado.

Aún con la paz casi asegurada, el año 1820 dejo una imagen de crisis tras crisis, en las que los gobernadores
se iban sucediendo continuamente. Así, en Buenos Aires era imprescindible tomar un camino. El objetivo
prioritario fue volver sobre sus fronteras evitando cualquier proyección en el ámbito nacional.
Descubrieron que, sin las otras provincias, ellos podían mantener sus actividades, y además no debían
proveer económicamente al resto de territorios, dependientes de la ex capital virreinal.

Cambios en el río de la plata

Buenos Aires se vio beneficiado por su nueva autonomía. Pero el resto de las provincias no lo tenían tan
claro. De todas las gobernaciones intendencias que fueron creadas en el siglo XVIII, solo tres se
mantuvieron luego del proceso de fragmentación político-territorial que transcurrió el territorio. Buenos
Aires, Salta y Córdoba. En 1814 aparecieron Cuyo, Entre Ríos y Corrientes, y al año siguiente, Santa Fe
autoproclamo su autonomía de Buenos Aires, y Tucumán se separó de Salta. Además, Tucumán se separó
del poder central, y creo la República del Tucumán. Esta incluía a Santiago del Estero, Catamarca y
Tucumán. Córdoba también se independizo, luego de la sublevación de Arequito. San Juan también se
declaró independiente, y lo mismo hicieron Mendoza y San Luis.

Debido a la disolución del poder central, los nuevos territorios también tenían nuevas leyes y reglamentos.

Ramírez pretendió heredar el monopolio de poder en el litoral, lo cual lo enfrento a Estanislao López, su
anterior aliado, con quien había roto relaciones luego del tratado de Benegas. López venció y consolido
su liderazgo en la región.

REPUBLICAS PROVINCIALES

Las nuevas provincias autónomas se organizaron de una manera distinta a la que hizo Buenos Aires
durante su época de crisis. Lo hicieron según los principios del constitucionalismo liberal. Esto significó
suprimir los cabildos, lo cual conllevó a que las funciones y los cargos se redefinieran.

A pesar de que cada provincia formase sus propios cuerpos políticos autónomos, nunca se descarto la
posibilidad de un orden supraprovincial. Se señalaba un futuro congreso para alcanzar la unidad, pero el
problema era la forma de gobierno que debía de establecerse, y el grado de autonomía de las nuevas
entidades políticas.

Ese congreso se celebró en Córdoba, pero no llegó a nada, principalmente por la abstinencia de Bs. As.
Argumentaban que las provincias no estaban aun preparadas para una unión definitiva. Sin embargo,
consolido su relación con las provincias del litoral, excluyendo a Córdoba, firmando el tratado del
cuadrilátero.
Este tratado hablaba acerca de estrechar vínculos entre las provincias, pero se debían comprometer a no
concurrir al congreso, además de la sumisión mutua frente a los problemas de guerra, la libre circulación
de los ríos.

CAUDILLOS Y CONSTITUCIONES

Se le daba el título de caudillo a los líderes de grupos “revolucionarios”, ya fuesen de contextura ideológica
o política, o militar. Principalmente, a los últimos. El caudillismo, un fenómeno que aparece en Sudamérica
en el siglo XIX, es la repentina creación de grupos que iban en contra de ideas o acciones, encabezados
por una persona. Pero no decían buscar beneficio propio, sino que lo hacían por el beneficio popular.

Hubo caudillos que ayudaron en la guerra por la independencia, batallando contra las fuerzas realistas.

Otros, que buscaban las autonomías provinciales, que se enfrentaban a los unitarios y a otros caudillos

Finalmente, luego de la victoria unitaria, aparecen caudillos que protestan contra la hegemonía de Buenos
Aires.

LA REPUBLICA DE BUENOS AIRES

Luego de la pacificación de la provincia, y su nueva autonomía, en Bs. As. se percibía que pronto habría
un congreso para determinar su forma de gobierno.

A inicios de la década apareció un grupo de personajes que se hizo llamar Partido del Orden. Estaba
liderado por Rivadavia, que era el ministro de gobierno de Martín Rodríguez. Impulsaban un plan de
reformas para transformar la provincia, en todos los ámbitos.

MODERNIZACION DEL ESPACIO POLITICO

Aparecieron distintas reformas, que apuntaban a modernizar la provincia y su estructura política y


administrativa.

La sanción de la ley electoral de 1821, la cual estaba destinada a establecer las reglas para elegir diputados
a la Sala de representantes, la cual a su vez se encargaba de elegir al gobernador de la provincia.

La ley de sufragio, que decía que estaban habilitados para votar todos los hombres libres, sin restricciones
de carácter económico o de educación. Esta ley buscaba eliminar las asambleas populares y así alcanzar
una legitimidad indiscutible.

La ley de supresión de los cabildos de la provincia


Además, apareció la justicia de paz, que era lega y gratuita, la cual no existía antes.

Se crearon órganos, como los ministros de Gobierno, Haciendo y Guerra.

Se dictó una ley de retiro para empleados civiles.

La reorganización de la Sala de Representantes, que se convirtió en poder legislativo. Pasó a ser la


encargada de nombrar al gobernador de la provincia cada un periodo de 3 años, votar por el presupuesto
de gastos anual, aceptar la creación de nuevos impuestos, evaluar la actuación del ejecutivo, fijar el
periodo de las sesiones, y discutir y aprobar los planes de reformas propuestos por los ministros.

La ley de reforma militar, que redujo el aparato militar heredado de la revolución. Esta buscaba reducir
los costos de mantener tal ejército, cuando no era necesario. Además, se reordenaron las fuerzas para
defender los puntos más débiles que se veían atacados, como la frontera con la campaña.

La reforma eclesiástica suprimió ciertas ordenes religiosas, paso sus bienes al estado, prescribió normas
rígidas para entrar a la vida eclesiástica, suprimió diezmos, y sometió a todo el personal eclesiástico a las
leyes de la magistratura civil.

La ley de prensa otorgó un margen de libertad muy amplio para el periodismo local, y además animo a la
creación de nuevos periódicos y papeles públicos.

Además, se crearon nuevas instituciones, como la academia de Música, la de Medicina, y la de Ciencias


Físicas y Matemáticas, o el departamento de Jurisprudencia. Quizás la más importante y significativa, la
Universidad de Buenos Aires. Aparte de un impulso a la Biblioteca Pública y la Academia de Jurisprudencia.

REORIENTIZACION DE LA ECONOMIA

Para promover la producción rural, el gobierno creo el departamento topográfico, que establecía el
catastro de la provincia, la ley de enfiteusis, que procuraba la instalación de los colonos en las tierras
publicas para su explotación, y los planes de inmigración. Estos últimos no resultaron exitosos, ya que no
daban suficientes incentivos a los pobladores.

En el ámbito económico, la creación del Banco de Descuentos fue una de las primeras acciones que tomo
el gobierno. Estaba autorizado a emitir billetes, lo cual al principio le dejo unas acciones que pagaban
buenos dividendos. Pero el hecho de la necesidad de una mayor emisión llevo al banco a una situación
insalvable.

Estas dificultades financieras llevaron a la provincia a pedir un préstamo a una firma inglesa por un dinero
que se utilizaría para la construcción del puerto, las obras y el establecimiento de pueblos en la campaña.
El estado confiaba en que, si el comercio marítimo se mantenía, y se reducía el presupuesto de militar,
reponer el préstamo iba a ser una tarea sencilla. Con lo que no contaban era que se iba a iniciar una guerra
con Brasil, en la que deberían gastar una parte importante del préstamo.

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