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OELIC^ctoNEs soLIDARTAs y cos^ JUzcADA EN lurcro El¡curlvo

s
do- EL

n.
HERN,N CoRR¡r T^rcrANi .D
sci- t

n.
rD
n.
n.

I. LA cos^ JUzc^DA EN L^ SoLIDARTDAD pAsrv

Una cuestión clásica quc la doctrina naciona-l y enranjera deb€ afronrar en rc-
lación con los efectos dc la solidaridad pasiva es aquella rclad a si una senrencia
dictadaen cont¡a o a favor de uno delos dcudores solidarios produce cosajuzgada
rcrpecto de los demás.
Nucsuo Código Ci"il, siguiendo a.l Código Íiarrcés, no rrató orpresamcnte el
problcma, y solamenre sc rdrió a las cxcepciones que puedc oponer el deudor
solidario demandado, distinguiendo cntreaqucllas que rcsultan dc la namralcz.a de
la obligación (denominadx rcales) y aquelias que derivan de una calidad de cada
deudor (denominadas pcrsonales). El art. 1520 señala que eldeudor demandado
pucde oponer todas las cxccpciones reales y las personalcs sups. Tiatando dc la
6anza, el a¡r. 2354 caliica como cxcepción real oponiblc por el 6ador an¡e la
dcmanda del acrecdor la dc "cosa juzgada".
Frente a esa prccaricdad lormativa, cl problema de los efcctos dc 1a cosa juzgada
puede merecer solucioncs muy heterogéncas. ,Asi, quienes enfarizan la unidad de
la obligación y la concxióncomú¡ entre los deudores (vfa teorfa del ma¡dato o de
la rcpresentación) dirán que la sentcncia dictada antc un primcr deudor produce
cosa juzgada cn todos los casos, farorables o adversos, frentc a los codeudoresr.

'
Profc¡or dc Dc«ho Gvil Univ.ddd d. Ios And.s. Ar Mons. Av¡to d.l Pórllo 12.4 t5 tj
Cond.r, Súd.so ¿. Chil¿. Cór.o clGrónico: hcor¿l@uúd6.d. Ilt. ¡ñbljo 6 rcsult¿do dcl Pro)'do
d. inv6tig2ción Iond<)r Nó 1161674,¿c20)6-
I Cu¡oSoN(1992),p.437,¡6qü.Rhúhtorl.dclmúdrorLto;AtELrux(2011), t19;
r TRoNcoso (201 1), p 76, Bacr (2008), P. 30t CouRr )' \crGNER
R aMos (2004), pp. 97-g8 (2013),
p.7t, nr.74. E¡ cst. s.ntidó pu.dc vc's. t¡nbién l¿ mcdoria dc P'u.b¡ d¿ l"(v^s (1920) P.30
lrl HERNTI CoRMr I^LCúN¡ L)

También se argumenta sobre la base del precedcnrc histórico de una disposición P,


de las Pa¡tidas (P 3. 22. 20) que a6rmaba la cosa juzgada cn carc de obligaciones d,
solidá¡ias, critcrio que se habría conGrmado por cl silencio del codiEcadol. Se Sr
suelen invoc-ar algunos fallos anriguos cn apoyo de esta posición, pero en
rcalidad sc observa quc se trata más bicn d€ consideraciofles argum€nrativas
indirectas o francamenre impcrrinentcsr.
Por el contrario, los quc. ponen el énfasis cn la pluralidad de vlnculos, y
en la posibilidad de qu€ los deudo¡€s pucdan deber la misma cosa pero de ef
diversos modos, llegan a la conclusión inve¡sar la scntencia dictada a lavor o Pr
en contra de uno de los deudores solidarios no produce nunca cosa juzgada di
f¡ente a los demás{.
Antc dos tesis extremas, no podían faltar tcorfas inrermcdias o eclécticas,
quc sostienen que para saber si la primera scntencia produce cosa iuzgada
cn los juicios posteriores hay quc distinguir, o según cl ¡esultado del primer
proceso o según la naturaleza de la exccpción que fue debatida en dicho
primer proceso o según si sc t¡ara dc solidaridad conrractual o legal.
Algunos proponen quc si el resulrado cs favorable al deudor demandado,
la sentencia produce cosa juzgada a favor de los demás dcudores; en cam-
bio, si es adverso no produciría dicho efecro. Otros sostienen que más que
al resultado hay que at€nerse a la naturalcza dc la excepción ventilada en cl l.g

Ci,

I
AiICI¡RoSouR(1992), p. 437. En .i mirmo cntido, Op zo (1929),p.94. k
disposición d.ld
Panidas añmaba quc le scntcnci¡ dictada ontra un codcudor'p!¿d. cmp&.¿ ¿ otos; como cuando
"oñ.s qú. s ñ¿i*n d.bdo¡é d. oro sobrc un¿ cos. mkmr. ceda uno por rodo, o omdo tucs r
dgunos prom.tido mpo, o viñl, o ot¿ cos2 cu.lqui¿r, d. ñúcla qú. cad¿ u¡o dcllor .n to¿o lo
pudi.s.n d.múdf; ad juÉo quc tucssc drdoconrranguno dc etos rcbrcdichos cn ¡zmn dcaquclh
cos., .ñp@l¿ ¿ 06, ñasucr y non tuescn zccnador ¿ l¿ @ón qu. lo di.ron" (P 3. 22. 20).
lor
J En cl 60 Bui,mt., Josa Mal. co¡ dc Aqul6 D.souv¡i¿..s: Co.rc d. Co¡ccpción
7 d. spti.mbr. d. r 6E6 (.au M ¿. apclaió¡),'uc6ión
Gü¿ta & lú Tib,ula tE87 ,N" 2794, p. 1667 , s. ¿nc. ¡pl
qk "sain lo d¡pucro.n la L.y No 20, lr. 22, p.n. ,., l¿ s.nrcncir dada contn una pcrona cnpcc yÍ
¿ sus odcudore mlidrioí (6ñr. 7'), p..o.l ú.(o r ¡plic..l miBo juicio y no ¿ uno {i.dor, s¡a
rcnc¡ic¡do qu. y. qu. * dcdu l¿ dcud¡ solid¡¡i¡ dc uno d.los d.udor6 d.b. dñl¿¡& mbién
L dcl otro fallcido ¡ rcprccnado po. sú su..sióñ. A s va, o .l 60 Aris otr Dí¿ Muñoz Co¡.
Suprcm¡ 29 d. Ép¡'.nbrc d. I 9 r 7 (wcióñ cn .l fon¿o), ,t",n¿ ¿. Dd.bó t Jttitprz¿.,cic .. 15, sK.
I', p. I t8, si bicn úah dc un¡ @mp.ns¿ción opucr. por l. dcmed¡d¡ sobE la be d. un sddo a su
f¡lor d.cl¡r¡do por snr.ncia dc púr¡do¡ y 9u. l¡ Co(. ¡<Ie pot scr ilcn¿, m G¿lid¡d ¡o k rr.r. d.
uñ 60 d. oblig¿ción solidui¿ üno d. !u/do único.
¡ tf,uMNr (1876), No I20, pp. 149-153. En Chii., compútió inici¡lm.nre csre pr.di(u.rro
voDÁNo\,rc H., A¡tonio (lr4t), pp. l{3'144, ¿unqu. fundándos..n qu. .l Código Ciül ¡o sisuió
le ¡csn ftucesa ¿elr¡udaio yadad.udorcs coorid.r.do dcudor únie, porlo qu. ñuna$ dú(a h
idcnrid.d lcsl d. p.nond.
OBuc^croNEs souDMycos JUZG^D^ EN ELJurclo ElEcunvo .153

n primer juicio: si fue real, producc cosa juzgadat si fue personal del deudor
demandado, no producc cosa juzgada. Esta última es la tesis acogida por
ie Somarriva5, Stitchkin6 y VodanovicT. Es también la que defienden algunos
m€moristas como Urzúar, Caldcrón', Contrerasro y Opazolr.
rs Peñailillo rambién la cstima más razonablc, aunque le introducc va¡ios
matices llegando a formular la siguientc regla: "l-a extcnsión dc la cosajuzgada

v a los codeudorcs p¡ocede salvo quc s€ proponga un debate gue no ha sido


le efectivamente conocido o resuclro"r'?. La regla es demasiado abicrta para quc
pueda operar sin incerridumbres y no parece su6cienre para impcdir quc sc
la dicren sentencias contradictorias,
Finalmente, cicrtos fallos judiciales han seáalado que la €xreñsión d€ la
cosa juzgada sólo opcra €n caso dc solidaridad de fuenre contractual y no
la cuando esa solida¡idad provienc de la ley en casos de responsabilidad exrra-
contractualtr.

lo, i Sov¡]w (I9{3), p. r5.


m- " STrcHKN (19{8), pp. 133.337.
: voD^Nouc (200{), pp. l{7-1,{8. qú. júriifia l¡ apliÉción dc Lcosajug¡dr, no cn la idcnridrd
,el l.s.l ¿. p.rend, sino s.6.lddo 9u. s. rnt¡rr¡ ¿c lor cf¿dor d.ior qu. vd D15 ¡llá d. l¡s p¡nd y
qu.¿lúa. ¡itulaE d. cl¡cion4 juldiB co¡cra. y que cl d. I77 d.l Código d. Prú.dimicnto
CivilcónrcDpla al ahdir ¡ "¿gu.llos . gui.¡.r i.gú¡ la i.y aprovdh¡ .1 f¿llo".
¡ URZ¡J^ (1930), p.91, qui.n jü*i6.¿ 6r.disrinción enquesólo Gspño dc k.rc.pcio¡c r.ild o
comuncs puedc nLnnirc quc ha), mDdato úcio é¡r. los codcudores, micntru quc pra Ls cxccpciono
p.6onal.s t¿l hddato no qist .
, C^ID.RóN (1927), p.79.

'¡ CoMn]M (1941), p. 109.


I oP^zo (1929), pp. 87-95.
Lr PEñ^ruLlo (200r), p.279. f: rcgla prctcndc cntlob* los sigui.nrd spusto!.n los quc no *
.pli.,r¡ h @e ju42dr repcio¡B p.en¿16, pru.b¿ d. @lurión, ¿gMicnto d. l¿ obligació¡ oritinál
y l¡lu o iEufi.ic.ci. d. la dcfc¡* Y¡ u¡a, cn su mcmori¡ d. p¡u¿h¿, FUEN"IFI (1931), pp. 72-73,
ísuicndo a a[uos rutoro frú«s.r, sug..l¡ qu. l¡.os ius¿dr 6pdo d. dep.ion6 E¡16 d.bh
6r¡r liñteda por ¡lguns Ég16 quc impidi.to snuLions injúrs, d. modo qu. no h¿b ¿ .fdo dc
osa juzs¡d: cuúdo hubo rcnun.i.¿ u, m.dio.omúñ d. dcf.Ga o d dddo, s..lloó ¿ I¿ ¿.ñ¿nda
o.n Iós 6os d. cólusión f¡2udul¿nt2.
rr Ar,, ebEla b6c d. qu. no sc t¡at¡ dc solidddad con«¿oal, h Conc Suprcma he dicio guc
'dcbc scnalrsc que la rcspons.bilid.d $lid.d¿.n marcria ext¡.conroctual d dc n.rurál.adivcse álá
@nr&rual, y. qu. ella no ¿¡cucnra su origcn tn cl conmro sino cn le Icy, «rtárdosc cn cros asos dc
rna obligrción'in solidum, cn guc oda uno dc los oblisados al pago pucdc rrrcqucrido pot la totdidrd
iiguió d. l. d.uda, pc'o qu.l.5.nt.nci¡ obi.ni¿. @ntn uno d. cllo! no B opoñibl. a los Por lo
úuior, nu¡a s. pro¿u.irl h id.ndd¡d 1.9.1 dc p¿r. qu. dig. l¡ l./ po qD¿ sun2 .fdto '.ndt.s.
l. ¿uroridad
J. .oe ju,g¿d¿": S@¡.d.d Coñ<óionda Aurcpira l,s Ubcfrdod sá. .on súi. Financ. Chil. S A.
3t4 HER^^N CoRru T^LC¡ÁII

En esta ponencia trataremos de aportar más luccs sobre el problcma sobte la Proc
base de la distinción de ia doctrina procesai moderna, entre efecro ncgativo fun¿
y efecto positivo dc la cosa juzgada, y abandooando la tesis dcl mandato S.

rácito o represcntación legal entre los codcudores solidarios, promovido los ll


por la moderna doctrina civil. Nos centrarcmos en el juicio ejccutivo ya los c
que es el quc mayorcs rcpercr¡siones ricnc cn la práctica jurídica. rclac

si un
lI. CuEsrroNEs PR-Evr^s
H
1. Efectos ntgatinos, positiuot 1 reJlejot de la senr¿ncia ju¿icidl sobrr
lació
Normalmentc, cuando se habla de cosa juzgada sc reGcre al que pucdc
llema¡se efecto ncgativo o excluycnre, es dccir, a la alcgación dc quc no csrirr
sea objeto de un nuevo Proceso aquello que ya ha sido resuclro por una
senr€ncia 6rme en un Proceso anterior. Es lo que antigúamcntc sc dcno- reflej.
minaba "excepción dc cosa juzgadi', porque dicha imposibilidad se hacc P¡er€
valer normalmentc por Íredio de una exccPción procesal. EI efecto negarivo Rom,
es consecuerlcie de una regla jurídica básica que impide que los mismos cod€r
hechos sean juzgados dos veces: zaz bis in ideda.
El cfccto positivo, también llamado prcjudicial, en cambio, alude a que lo codet
aesuelto en una scntencia sea tomado como un Pr€suPucsto dc otr¡ sentcncia Po
que debc dicrarsc cn un juicio diferentc. En este senrido, el scgundo juez reAe¡t
resulta obligado por lo que ya ha sido rcsuelro en un proceso ant€rior! cn un fa
la medida en quc éstc Puede considcrarsc un antccedente lógico del nucvo do co
juicio. El principio jurídico que fundamenta e§te efecto €s €l dc impcdir
decisiones jurisdicciolal€s distinras sobrc un objeto Procc§al conexorl de pr,
Parec(
del ju
gado'!
puede

(20rr):Coí.Supr.m¿l2d.m¿yod.2012,rolN"5lt6-2009.ñrua¡búCUlUN4l02l20l) s'
'o
6". Ensimfr s.nrido, Cayupi Cu¿vú, Crl¿ en Lu.ñto srvo, Zodcmirv oú¡ (2008): coñc SuPrcñ¡
5 de meo dc 2008. roi N".i78a-2006, cn \u.rl¿u ClJlABJl744l2008; Schcf.r A¡d¡¡d., Jovn' v
oro conúa Roszls Espiñoa, Eug.nio y oúo (2olo): Cor¡c SuPtma, 15 dc s.Pticmb'. d' 2010, ¡ol
N" 47 36-2ooa. .ñ \YarL'a CUlUN7222l20tO.
L¡ RoMERo (2017), p. 128.
rJ RoMERo (2017), p. 160. l¡
dnti¡oón pD.d. ¿Arrou¿d¡ ) lPlied¿ cn r¿l.ción co' ls
"G
Por Ar¿
obliBaciong solidúi$ .n clod.D@i.nto iurldico .sP'ñol (2002), PP' 80 v$
QBLrcAc¡oNB sollD¡¡rs y cos^
luG^D EN EL lurclo EJ.c! |vo l5t

Procesalmente, el efecro positivo se hace vale¡ medianre alegaciones que


lundamentan las acciones o excepcionesr6.
Se discute en la docrrina procesal si este efecto posirivo incluye o no
los llamados efecros reflejos o indirecros, que serian aquellos en virrud de
los cuales una sentencia es considerada como un hechoque influye en otra
relación jurídica y por ello impacta en terce¡os, al modo como se habla en
marerias civiles del efecto reflejo o expansivo de 1os contratos. por ejemplo,
si una sentencia declara la nulidad de un testamenro y luego es invocada
en un iurcio en el que <e persigue lr re,pon,rbilidrd . ivil del nor¿rio.
Hay quienes distinguen netamente el efecto posirivo del efecto reflejo
_
sob¡e la base de varias dife¡encias: el efecro posirivo sólo se daria en r€-
lación con las parr€s y no con rerceros; en el efecto positivo la sentencia
se consideraria como acto jurfdico mientras que en el efec¡¡ reflejo se la
€stimaria como un hecho jurfdico; el efecto positivo requiere siempre de
un nuevo juicio, mientras que ello no sucede en el efecto reflejo y ei efecto
reflejo podría ser desvirtuado por pruebas en conrrario del juicio en el que
prerende inl1uir, en ranro que ei efecto posirivo sería incontrove¡tible17.
Romero comparte esras diferencias y sostiene que la facultad de r_rno de los
codeudo¡es soiida¡ios de aprovecharse del acogimiento de una excepción
material deducida en otro juicio seguido por el acreedor en cont¡a de otro
codeudor de la misma presración, sería un efecto reflejo o indirectors.
Por nuestra parte, pensamos que, de admitirse la distinción ent¡e eGcacia
refleja de la sentencia y efecto positivo de la cosa juzgada, el impaoo de
un falio ¡elarivo a un codeudor solidario sobre el resro debe ser cali6ca-
do como efecto positivo de la cosa juzgada, dado que la senrencia no es
tomada sólo como un hecho juridico sino como una declaración juridica
de procedencia o improcedencia de acciones o excepciones. Además, no
parec€ que el codeudor solidario pr-reda se¡ cali6cado de rercero respecto
deljuicio en que se debatió la misma deuda solidaria con la que está obli-
gador'. Esto nos lleva a replanrearnos si ral identidad subjetiva o de parres
puede lundarse en un mandaro rácito o una ¡epresenración.

r¿ RoMERo (20¡7),
p. 160.
17 RoSENDE (2001), pp. 416-497.

'r RoMERo (2017), pp. 166- 167. Fu¡dmenrl .re .fcúo r€nejo e¡ l¡ plur,ljdd de vínculos qr lá
ju¡¡pru¿en ia ha ¿ccprado coño co¡ititutiva d.1a obligrción .olid{i¿.
r'!P¡ÉIalegidrción.spañol¡,L¡el2OO2),pp.ro7-127,prcpon.qu.tos6osde.xt.Dsió,de
cledos de la cosa júzg¿da sm .onsidcÉdos omo u¡ cfdo posirivo, con div.es i¡e{pdacion.s de
356 HER¡,h CoR¡ L T^Lcr.aNr

2. Abandono dc h te¡i dcl mandato o rcpraentatión

Durante largo ticmpo sc ha sostenido quc la cxtensión ncgativa o Po§i-


tir" dc l" j,.rrgad, en mareria dc solidaridad sc fundamenra cn la idca
"osa
de oue cxistirÍa no idcn,idrd fisica de personrs pcro <í idenridad iuridica
Dor considerersc quc rodos los codcudores rolidarios se han otorgado un
a nombrc de los
-rndato racito y reciproco que los habilita P¿ra Proceder
otros. Cu"ndo s. ha objetado que cllo sólo tendrfa sentido si se limitaran
los cfectos lo favorable y no s€ extcndieran a lo pcriudicial, -ya que no
" de su
se enriende quc un maldatario actúc en Pcrjuicio de los intereses
mandente-, sc sustituye la tcoría del mandato Por la dc rcprescntación
legal, que pucde funcionar tanro a favor como cn desmedro de Ios interescs
del rcptcsentado.
En lo, planr."micntos más modernos sobre la solidaridad pasiva se ob-
s€rva un ;csrionamic[to dc estas resis que resultan arti6ciales y postizas
a una frgura jurídica que tienc sus ProPio§ Pcr6les'
La pápagrción de ios efccros dc l¡ sotid¿ridad entre los deudoro
pucdc
,e, exilicada sobre l, base de la unid¡d de presración y le conexión quc sc

produ.. entrc los rnf.t.ulos de los codeudores en lo necesalio Para satislaccr


el intcrés dcl acreedor.
La rendcncia es, igualmente, a limitar al máximo la c6cacia cxpansiva
dc los aspectos sccun-darios de la solidaridad y entrc ellos la extcnsión dc
la cosa jtzgada enr.e los sujctos pasivos de la obligación solidarie Asl §e
ob...u. .n"lo" instrumentos de nf tau d,el llamado "Dcrecho Uniformc
de los Contraros". Los Principios Europcos de Dcrccho dc los Contratos'
por ejemplo, disponcn que una decisión judicial cn caso dc.obligacioncs
solidárir" no a la responsabilidad dcl rcsro de los deudorcs
"f.ctará "i
solidarios rcsPecto dcl acreedor ni al derecho de rcpetición entrc los dcu-
.ln....olidarios (art. l0:109)'1o. En el mismo seotido Pueden vcrse el D/¿y'

l¡ Ld d. Enruiciu¡úro Civil quc d.togó .l ú!' 1252 dd Códi8o Ci'il Cu' dubld'
dprc¡mmk
t. .n.,-, *n¡mr¡ dc h rntcnci¡ nj¡do* d. oblis(ion6 soiidri^' No d'iá dc rr um¡'vo'
505 v 506 m'nc'on' !a
ieu¿lmcn¡c. ouc Roscror i2001) PP 4E9, 494, <00 t02,
e-j.mplod..fdro 16.r".l60 dd fi.dor. Pcrc nunú 'ldctodcudo¡ rlid*'o'
:" Los com.rr¿ios .ñ.didos . l¡ noma 16¿lú qu', luoqu' ls l'8¡la'io¡'s n'acion¡lcs ¿doPtd
dir..n;6 *l,(io.*. 1., P".crpior rdopru cl «rcrio dc quc h d(inón m EP':c'f
ir¡ '.n
¿owllo, do<loo cuc no h¡yde¿o Pt.li¡i8e'¿ 'n 'l PiGM' d' modo 'udÉial
qu' sc rcchu l' ido d'
RIp,@ y rnEñci¡ no ¿l ¿' (oe )u't¿d¡ sino Ehoón @n
l¡ Eprr.n¡.c!ón l¿ Preducir¡ 'n
.q,.1ü, +.¡",-,iil" p.i.r d.l litiSio. Th¿Com»'o¡ 'f(rÓon Ld¡oPd Co¡(n trw r200Jl' P' 7l'
Oilrc^c¡oN¡r souD^Rtas y cos luzc^o^ EN EL Jurc¡o EtEcwvo 357

Common F¡am¿ of kfcrcnce III.-4:t l0 y los Princi¡tios ll¡idroit ¡obrc lo¡


Co¡trato¡ Comcrciat¿s Intcrnacionabs (2010), art. I l 1 .8.
Sin cmbargo, micntras no haya una norma cxprcsa como ésta en nuestro
Cea ordenamiento jurldico, la opción parece ser rcstringir los cfcctos de la cosa
tica iuzgada lo más posiblc pcro no climinarlos dcl rodo, ya quc cllos pucdcn
vcnir impuestos por una cierte "cotitula¡idad" negativa en la deuda por
los parte de los deudorcs solidarios, cn el sentido de una siruación en la quc
varias personas ocupan la misma posición ju¡Ídica dc dcudol,.

3. Prcsuputsto omút qw sc tratc dc codeudorc¡ ¡olidario¡


.ión
Para que pucda admitirs€ si una scntencia producc o no cosa
luzgada
cn materia de solidaridad dcbc considcrarse como prcsupucsto básico que
no exista discusión sob¡c la cxistencia de la obligación solidaria ni sobre
tz¡s
quiéncs son sujctos activo y pasivo.
Peñailillo, siguiendo a Caffarcna1z, señala quc el supucsto dc hccho del
rede
problema dc la extcnsión de la cosa juzgada cs quc sc trare de "codcudorcs
solidarios", dc manera que sólo si no esrá discutida la calidad dc codcudor
solidario del dcmandado proccdc trarar cl rcma dc si la cosa juzgada dc
un fallo dicrado cntrc cl acrecdor y uno dc los codeudorcs, sc cxricndc o

:r de
Por su parte, Abcliuk, si bien sc mucstra parridario de la cxtcnsión de
sl se
la cosa juzgada en matcria dc solida¡idad, apunta que en todo caso dcbiera
'rme reconocerse a aqucl cn contra del cual sc invoca la solidaridad, "un ¡mplio
derccho para probar cn la cjccución quc ésta no cxiste, no obstantc lo gue
se haya esrablecido en cl juicio dcclarativo"':a.
En suma, si lo quc sc cucsriona es la cxisrcncia de la solidaridad no pro-
deu- cede la extensión dc la cosa juzgada o, al mcnos, ésta sería conrrove¡tiblc
)rof por cl demandado quc no fuc parte deljuicio dcclatativo antcrior.
Precisadas esras cucstioncs prcvias, nos parcce quc estamos cn condi-
ciones de avanza¡ hacia cl rratamicnto del efecto positivo y ncgarivo de la
sentencia cjccutiva cn la relación cnrrc cl acrccdor y los dcudorcs solidatios.

't Ck- At^z 12002), p. t24.


I C^FF^i¡N^ (1980), p.22.
rr PEñ^ruLLo (2003), p. 277.
,¡ ABeLrux (2014), p.'l9, n. tr8
P. 71.
3t8 H¿§^N CoFfu T^!::r^Nr

Ill. CosA JuzcAD^ DE r¡ sENTlNclA EN

JUICIO E]ECUT¡VO DE DEUDA SOLIDARLq

1. Efcao qosititto ln
qr
ritulo eiecurivo conrienc l¿ dererminación dc
La cuestión se phnrea cuando el
de varios deudorcs ligados por solidaridad, y el acrccdor opta por demandar Pc
(p
sólo a uno o a algunos dc ellos y no a todosr'. ¿Podria con ese mandamienro
dc ejecución y cmbargo o la senrencia de PaSo o remate de cse Primer juicio,
cmb.rgar y cje",.rtar lo" biencs de un dcudor solidario quc no fue demandado?
L. i.spuesta aErmativa constituirfa un ceso de efecto Po§itivo de la cosa
juzgada. Sin embargo, la doctrina y La jurisprudencia chiicnas esrán contcstcs
dc
cn !.re .ro ." posible que con un mandamicnro o sentencia di€tados en con-
ju
tra áe ,r., deudo. solidario puedan embargarse bienes dc otro que no ha sido
d(
dcmandadoró.
Estamos de acucrdo con esta conclusióo, pero el fundamenro no es la li_

mitación del efecto positivo de la cosa juzgada del mandamicnto o sentcncia
dc pago o rcmatc ante el nuevo dcudor, sino la imposibilidad procesal dc que
ser susrituido Por cl Parrimonio de une al
.l del cjccurado
i"ui-orrio Pueda
de
persona divcrsa'?T.
ha pensado, asimismo, quc habria un efecto postivo cuandoseha dictado
Se P(
PI
sentenciá en un juicio declarativo en el que se ha reconocido la deuda solidaria
(por ejemplo, en casos de responsabilidad civil solidaria por coautorla dcl art' di
ar
2317 del Código Civil), para luego, sobre Ia base de esa scntencia, iniciar un
juicio ejecutivo en conrra de un dcudor solidario que no ha parricipado en.el
p.imer.pro"""o. Sin embargo, esto cs muy dificil quc ocurra Porg:e §i s:.ha
EI
d.-"rrá"do ,n.olo deudor solidario no parece factiblc que se individualicc
"

si<

ri Aunquc cl rn. l rl4 d.l Códjgo Civil m.ncione eólo dos altm¡rivs: qu. d acreedor sc dniia
."*- -¿.i t"' dcudo.' olidúior coni!num.ñ!. o contra cu¿lqui.n dc cuor ¿ 5u ¿rbitrio' no h¡v
¿ oros- Cfi
duda ¿. quc r p..hn. tdbién ¿cñú<h z do' o D¡i cod€ldo6 dcjudo sin d'múdt
A¡tuul( (201{), p. tl6,,t. 533
Cu
6r rntido, PEñaLrLLo (2003), P.278IABEuuK (2014), P' 519 Añbos cita @mo ¡Povo
'" En
h scnt.ncia NooBbu.n¡ y otru en Urutiz (1920): CoG SúP¡'ml24 d' 2brild' 1920 (qs&ión 'n
cl fo¡do), Rcoi¡u & Dtaho t tuti$n¿a.i4 t. 18, 1', P. 482, Por l¿ cu¿l s' esó l¿ sc md¡ quc
*..
o un iuicio.i.cutivo ProscÑido s¿lo contm uño d.los dcudoBsolidado¡ s btn's qu'
'mbúsárc¡ No
16 imbiér d. pópi.dad d. dcudoB solid¿.ios no deman¿«tos'
rr E¡ ctc rntido, pucdc vce ¡ (2002), PP. 10n 04
^r^z
O¡Lrc^c¡oNEs soüDAr^s y cosl luzcD^ EN.L jurcto ElEcú,vo 3i9

cn la sentcncia a deudores qu€ no fueron demandados, y no estando indivi-


dualizados en ell¡, no será posiblc invocarla como rÍrulo ejecutivo€n su conrra.
Con todo, si llegara a dictarsc una senrencia como esa (por ejcmplo, quc
individualice a coaurores del iliciro que no fueron demandados), no parece
quc esta senrencia pueda scr urilizadapara ejecurarla dcuda solidaria en conr¡a
de supuestos deudores que no parriciperon en el juicio declarativo anterio¡
r porque a estos les bastará con negar los hechos dc los quc surgc la solidaridad
(por ejemplo, la coautorla) para que no se cumpla el prcsupuesro básico de la
extcnsión dc efecros dc la cosa juzgada cn esta materia que consiste en que la
1 solidaridad sea indubitablez3.
En aquellos casos de solida¡idad legal derivada de cicrros h€chos, si una
sentencia prcvia los declara como talcs, esa sentencia podrla ser oponiblc a estc
deudor soiidario lcgal pero sólo limitada a los hcchos consrarados en el primer
juicio. Así sucede con la rcsponsabilidad solidaria del propietario o rcncdor
del vehículo que conducido por un r€rcero provoca daños con iDfracción a las
reglas del tránsito, y que s€ r€gula er¡ el art. 169 inc. 2. de la Lcy N. 18.290
(rcxro refundido por D.F.L. No 1, Ministerio de Transportes, de 2009). De
€sta man€rá, la scntcncia penal o la delJuez de Policfa Loc¿l que condcnan
al conductor producirín €l efecto positivo de la cosa juzgada si la víctima
demanda al dueño del vehiculo para hacer valer su responsabilidad solidaria
por los daños, conforme a lo establecido en los arrs. 178 y 180 dcl Código de
Proccdimicnto Civil, aplicables a la sentencia infraccional de policia local por
t. disposición del arr. 29 de la l-ey N" 18.827, ¿.c 1984, sobre Procedimiento
anre los Juzgados dc Policla Local.
rl El efe«o positivo en estos cásos se limirará al supuesto de hecho consistenre
a en la comisión dc un hecho ilfciro por cl conducror que ha causado daño.
El demandante dcbe ac¡cditar que se r¡ara del propietario del vehículo y la
naturaleza y monto de los danos. El ducño demandado podrá hacer veler la
exclusión dc responsabilidad que scñala la lcy en c.aso dc que el vehiculo haya
sido urilizado contra la voluntad del dr.rcño (arr. 169 inc. 20 Ley No 18.290),r.

rr Co*¡ ! (2017¡), p. ó76, ¡unguc .o¡ fundd.nro ., d pdncipio d. El2iyid¿d dc l¿ rnicnc¡.


Cucstió¡ div.ñ¿ .s la cosa iursada d. la ÉDr.n.ia pcn¡l qu. @ñd.n. ¡ qdos por .l ñ¡ñó d.l¡o, le qu.
pod¡1h&.rkr2ld.¡.ljuiciocivil.n vitud d.ld. 176 dd Códigod. Prúdimi.nro Civil, pu.roqu.
.n ¡¡1 @ * .r.¡¡ ¿pliúdo la s.ñt.nci¡ ¿. un pr@so .¡ .t q!. p¿ni.ipúon los d.nrud6 .o¿.udoE
$lidarior.^rl,Cod.lcoChilc@nS¡«cB.rios,J6é(2013):C¡.SupÉm¿,29d..sosod.20It,lol
N" t96t-13, Mituju/i' Mll35E97 .
1' Cfr. Co¡x r (2017b), pp.374-37t.
160 HERN,$ CoMLT^r.6r

Es ciero que la ley cxige quc el rerccro civilmente


rcsponsable haya sido
notiEcado dc la denuncia o qucrclla antc elJuez de Policía Local, bajo sanción
dc no serle oponiblc scntcncia (caso cn el cual no se daría el efccto positivo).
Se ha juzgado, sin embargo, que cl hecho dc que la sentencia no sca oponiblc
por falta de noti6cación dei tercero, no impide que pueda scr demandado cn
sed€ civil en la que se pruebc el hecho ilÍcito del conducto¡ con los demás
rcquisitos de la responsabilidad solida¡ia'o.
Más complejos son los casos cri los que sc ha dcclarado la existencia y el
monro de la obligación principal, a la que la ley añade un rcsponsable soli-
dario. Por ejemplo, si trarándose del dueño del vehículo, Ia vlctima demanda
cjecurivamenre invocando como ritulo Ia sentencia p€nal o infraccional que
ha dererminado la obligación de indemnizar dei conductor al pronunciars€
sobrc la acción civil dcducida enscde penal o de policfa local. Lo mismo pucde
acacccr respecto d€ un socio de una sociedad colectiva comercial si primero se
dcmanda a la sociedad para que se dcclare una dcuda de ésta, y luego se invoca
esa scttencia para ejecura¡ a un socio como codcudor solidario o si cn juicio
dc alimentos la sentcncia condena al alimen¡anrc pero también a un respon-
sablc solidario quc no ha parricipado en el juicio, y se prctende ejccutar a éstc
invocando como título cjccutivo la referida sentencia. Para estos tres casos, la
jr-rrisprudencia se ha resisrido a aplicar el cfecro posirivo de la cosa juzgada'r.
Pensamos quc la cuestión debe rcsolverse disringuiendo si la solidaridad
qu€ se invoca respecto del demandado es indispurada o no. Habrá casos en

r0 Cfi S6icd¡d Conc.sion¡ri¿ v.spu.io 5úr 5.,{. con Mlu¡i.io F.mán¿@ C.l.dó¡ y
^uropisrl d.2015 (é¿ión.n.l fondo) rol N" 245{2-201{,.n
o¡rc (2015): Cor. Suprcm1 22 dc s.pti.hbr.
W6rbuCUlUN56|4I20|5.
rrEn.l60Scl.ff.¡AdEdqJovhyorroco¡toRoel.sEspinoa,Eugcnioyoúó(2010)rCo¡r.
Sup¡m¿, I t d. s¿pti.mb.c d. 2010, ,ol No 4736,2008, .¡ V.llaú CU)UW7222120t0, L Cod.
.sim qu. no pu.d. usús. I¿ crt.n.i. pend qu. @nd.n¿ civlmc¡re ¿l condu.ior p¡'¡ qu. s. dcde.
cnjuicio civilla rcspo"s,bi,id¡d ¡olid¿ri¿ dclducno dclválculo. Más oligúec,r,la Cor. Supr.o¡
r hibla p¡onu,.i¿do ñ.9¿tivú.ntc $brc l¡ poribilid¿d d. invod como ru]o cjdtivo l¿ cnr.ncia
qD. ddr¡b. u¡¿ soci.d.d col«tiva comc¡ciil como d.udor¡.n conú¡ dc u¡o d.lor sÉios, aunqu.
*gr¡ I. lcy (¿ñ. ,70 CCom) sa coDsid.hdo rdponeblc $lidúio: Addela @n Riv.,¡ ( 1942): C¡(.
Suprcma,20 d. octubÉ dc r942 (@ció¡ .¡ .l fondo), Lví'b l¿ D.t ho I lunlpru¿¿rcid t.40, s«.
1., p. 3{9. En lo ¡.f.rido . l. dcudr d. ¿limcntos,la m¡D¿ Coir. s. opo¡. ¡ qu. u¡a múj.! qú. ño
comp¡reió .¡ .l júi.io ¡liñ.nticio r¡.,<úr¿d¿ por l¡ scñt.nci¡ 9u. dispon. qu. ell¿ 6 Gspoñebl.
solid¡ri¿ cn l¡ qlidád d. coñcubin¡ dcl aliñcnt¡n,.: Mik¿ly T., Ndi. (196E): CoG Suprcña,22 dc
etúb¡. ¿.1968, Rflnb /¿ I»úho t l.ri'?n¿.ftin r. 65, *. 1., p. 32t. Aunqm .r¿ supucro d.
$lideidad l.g.l fuc sup.imido podl¡ des. con .l qúc !. meii.ne "los qu., sir dc¡6ho pd¿ cuo.
dificul¡e¡ o imposibnnücr cl fi.Iy oponu¡o cúplimicnro d. dch. oblig.ció¡ [¿limcnricia]" (¡¡.
l8 L.y No I¿.908, ts¡o ¡.fu¡dido por D.F.L- No I, Mi¡isr¿rio dc ¡usi€i¡, dc 20oo).
OBüc^ctoNEt solD xr^s y cos¡ luzcaD EN EL Ju¡cto EJrcmo .161

Co Ios que dicha solidaridad puedc scr cuesrionada por ejemplo si cl dueño del
ón vehÍculo arguyc que fue usado conrra su voluntaá o quc no..a propietario,
o). la fecha dcl accidcnte. Lo mismo sucede con el caso dc la d.uda
¡le cn el quc el demandado podria seña1ar qtre no se han acredirado "li-entici,
los hcchos
de los cuales la lcy deducc la rcsponsabilidad solidaria. En todos cstos casos,
rás no proccderá el cfecro positivo al no cumplirsc el presupuesto de basc que
consiste en la existcncia indudable de una obligación solidaria.
rel En aqucllos supuesros cn que la solidaridad no sea disputada, como nos
cli- parecesuccdc en clcaso dclsocio de la socicdad colectiva civil o podríasuccder
rda conelducño dclvchlculo que no cuenta con unacxcusa dc su rcsponsabilidad,
1uc ha de considerarsc, en principio, que la cosa juzgada de la primcra sentencia
se exri€nde al scgundo. No ob«ance, el peligro dc colusión o fraude aconseja
€srima( que sc lrata sólo dc un cfccto reflcjo por tanto, el codeudor solidario
edc ¡
deberla poder controverrir la d€rcrminación y cuantia de la obligación prjn-
cipa1, de modo que neccsariámcn(€ se lc ha de demandar en juicio ordinario
icio y no ejccutivo]'z.
En último término, podemos imaginar que el acreedor demand€ a dos
éstc o más dcudorcs solida¡ios de la misma deuda en juicios declarativos se-
,s, la paradosrs. En es€ supucsto, podría convenirse cn que se demanda¡a luego
ejecutivamcnt€ a todos cllos, pero en ral caso no cstarlamos realm€nte frcnte
id¡d al desplicguc dcl efecto positivo de la cosa juzgada, sino más bicn antc un
supuesto de un tfrulo cjccutivo integrado por varios insrrumentosra.

r 6r. ÉNido r prc¡unció l¡ Con. Suprcm¡ .¡ cl @ C.Fpi Cu€6, G.l¿ con t_u.ñgo
-sdvo, Z¡d.ñn
-En
I ora (2008): Coñ. Suprcm¡ 5 d. m¡m d. 2.OOB, ratNo 47EB 2006,.n ty6,hoCu
,Utu174412008:'is i¡cucrion¿bl. qu.l¡ scni.nci¡ dictada.onua ct infi¿cto¡, un¿ ve.jfruro¡iadá,
prc¿uc..f«ros 6pdo ¿d ¡....ro civil,a.¡r. cuoto al¡ a¡¡.ncia ¿. tacontr¡v.,.ión
v ¿ iu culp¿bilidadr pc,o ¡o ñr.lo mismó '6pons¡b1..¡
.n rc¡¿ción a lor otu ct.m.ntor d. j¿ r.spons¡bilid.d
civn, &ho los danú ),Isjuicioi ¡ cuyo Gspc.¡o cl erc.ro no h. si¿o cmptado,
r qu.; .sntdoi
. úav¿s d.l ¿rLulo 29 Id. la Lcy N. l6.290l ya m.ncion¡do, h¡ gu*ido en¡ h poribilidad d-. qrc ct
Erc{óliv mc . ¡6po¡nbl. pu¿¡.É suftn bs .fdo. dc una s¿n,¿ñ.i. @n¿.n.rori. <iyit qu. lo rui¿r¡¡¡
. l. óbli8¿ción d. p¡g¡r soliddio.nE con d condú«or d.] v.hfculo sin .nrcg.rtc Iá p;sibilid¡d de
@nrN€rn no sólo !! r.spons$il¡d¡d solidad,, h¡ci.ndovt*susd@pcion.sp.6on¿tc, sinormbi¿n
l¿ dircnci, ¿.lor d¡ñ6 r..lm¡dós,
su nrurd@ ),su mo¡tó" (cóns. ll9. En i8u¿t s.nri.to, pu.dc
rte l¡ enEDc¡¿ d.l aso S.púh.d¡, Giuscp..on Busu.ño, Félix (2008), Coñ. Sui¡.m¡ ls ¿.;á¿o
¿.2008, ¡olNo 369-2007, cn Va¡Iaa CUIU!JB||/2OO&
¡224c !E súpoB¡o s. dad2 .¡ l¿ mcdi¿¡ ¿¡ qu. s. ¿ept Iá poribilid¡d ¿. d.núdx ,imult:ín.u.nG
@ júicio s.p¿¡dos ¡ codcudo¡B solidarios, iin qu. p.oc.da l¡ tiris p.ndcnci¿: cÉ. SrrrcHKrN 09{8),
,p.30á'30t. E¡ coDtr,, A¡ELruK (2014), p.'l8,,r. t57
I Sob¡. cl d¡lo .i6utiyo múltiplc o compusto, pucdc rrr ¿ VERC^M ( 1983), pp. 5j y $.
.1'il 3LRN.I\ CoMLTALCTS

2 Efeao rcgztiuo blem


deud
¡egativo o excluyen(e de lacosajuzgada deiasentencia
Pa¡a analiza¡ el cfecto
opon
cjecutira cn materia dc obligaciones solidarias, debcmos distinguir si sc trata exccI
dc una scntcncia condenatoria o de una sentcncia absolutoria. la co,
Si se trata dc sentcncia condenaroria, habrá que subdisdnguir si con clla el no Pr
acrcedor ha podido haccrse pago del totaldel crédito o, si por una insolvcncia fallo
del dcudor ionderrado, no ha obtenido ningún pago o sólo un pago parcial N
de la deuda. En estos últimos casos: falra de pago, cl acrecdor podrá volver la ob
a demandar cn juicio cjecutivo a orros codcudorcs solidarios para obtcncr el la re¡
pago dcl total del crédiro, y ésros no godrán alcgar el efecto negativo de la mixti
cosa jurgada del p.imer juicio. El acrcedor tamPoco cstará invocando la cosa impc
juzgada dcl primer juicio en su efecto positivo, sino el título ejecutivo que porq
p..,iame.tt. contra el nuevo deudor ahora dcmandado. No invoca la hasi
"*ii-tía solid
senrencia ni lo quc sc ha rcsuclto en cila.
Si la scntcncia condcnatoria se ha Pro n unciado sobrc una exccPcióri oPucsta si
por el primcr deudor demandado, habrá quedistinguir sise trata de una excep- podr
.iar, .ial o ur," occp.ión personal. No hay mayor problema cn señalar que el
rcchazo dc una cxccpción personaldel deudor no impediráquc elnuevo deudor pucd
demandado oponga sus propias excepciones 1e sean reales o pcrsonalcs. Pero Com
si el deudor opuso una exccpción real, cs d€cir, común a todos los dcudorcs, (art.
por ejemplo, Ia nulidad absoluta del contrato, y clla fue rechazada, el nuevo obli¿
deudor no podrá oponer Ia misma excepción fundada en los mismos motivos, Pr€sc
pues entonces el acr€edor i¡vocará el efecto negarivo de la cosa juzgada quc se simp
extende.á a todos los codeudores solidarios, incluidos los quc no hayan sido
partes deljuicio en cl que se decla¡ó. Este cfecto negarivo no se extiendc a las que l

cxcepciones realcs qrje no fucron oPu€stas en el primer iuicio aunque podrfan c¡ito
habersc opuestort, ni tamPoco a las excePciones pcrsonales delouevo dcudor
demandado. solid
Si se rrata de sentcncia absolutoria estaremos necesariamcnte en el caso de
que el deudor demandado oPuso algun¡ excepción y le fue acogida. El pro-

ri E¡ @"(¡, y t!.túdó dc ¿Pl¡@ .l hoy d.rog.do ¡n 252 d.l Cdigo Civil


1 sc P¡onunci¡
I
'sP2ñÓ1.
CrrñN^ t 9E0l
( pp. 23.29, É8¡in .l o.l .l obido d. l¿ (e jurd¿ @mPrcndc no 3ólo l¡ dccn'ion6
mad
o,.d«¡,m.m. "i dcdur.,on. liro uñb,¿n ¿qu.lhr que d dcudor demmdrdo omrio irtcrponct
rudi.ndo hrdlo rlo d.ducibl..n,uioo,, p.,o !ólo.n h m.did¡ (n qu. cliue st¡b¿ ¡Úbien f¡culádo cntr
;* d.drnd rsPco lo hia. En sistms como los nudtos, 'n los quc ¡i8' cl pdnc¡Pio
d. .n.io y prol
)ispoitlvo, nmcntc * drá;r¿ Posibilid¿d, Por loqucPÉtd.ccá l¿ idad. qu! l¿@e iu?¿¿d¿ no
Ios r
opin rcsp«o dc «cpciono qu. no c oPusic¡on ni s ücuti.roñ .D .l Prim'¡ pbno'
OBuc^c¡oNEr souD Rr.{§ y cos^ luzcDÁ ¿N EL turclo E,Ecl,r¡vo J63

blema, entonccs, se pres€nta cuando el acrccdor dcsca ejecutar a otro de los


deudores solidarios qu€ no fue partc en €l mismo juicio. ¿Puede este deudor
oponeral demandan(e la excepción de cosa juzgada €n su efecto negativo? Sila
si se trata excepción rechaz-ada fue una personal delprimer demandado, parcce claro que
la cosa juzgada no desplcgará su cfc«o negativo, ya que así como esc dcudor
€on ella €l no podría habcr inrerpu€sro dicha excepción tampoco podrá aprovecharsc dcl
nsolvencia fallo quc la acogió.
.go Parcial No obstante, si la excepción pcrsonal consistió en un modo de extinción de
drá volver la obligación como Ia compensación con un crédito dcl deudor dcma¡dado o
obtener el la rcmisión del roral o dc parte dc la deuda de ese mismo deudor (cxcepciones
¡tivo de la mixtas), el segundo deudor llevado a juicio, podrá haccr valer lo rcsuelto para
rdo la .osa impedir la prosccución dcl nuevo proceso (aunque sca parcialmente), pcro no
cutivo que porque la cosa juzgada opere en su benencio, sino más bien porquc la dcuda
: invoca Ia ha sido cxtinguida, totalo parcialmente, y ello beneficia e todos los codeudores
solidarios (art. 1515 CC).
ón opuesta Si la excepción acogida es de carácter real, cn principio, el nuevo dcudor sí
podrá hacer valer la cosa juzgada c impedir que se vuclva a discurir el mismo
ialar que el asunto. Pero habrá que cxcluir aquellos casos en los que una cxcepción real
,evo der.rdor pr.rcdc producir sus efcctos dc manera dive¡sa entrc los disti¡tos deudores.
)nales. Pero Como sabemos, los deudores solidarios pueden obligarse'de divcrsos modos"
s dcudores, (an. 1512 CC) y como la prescripción corre desde qr:e se hacc exigiblc la
la, el nuevo obligación, bicn puedc suceder quc para uno de los deudores haya operado la
prescripción micntras quc pa¡a otros no, por ejemplo, si uno sc obligó pura y
rgada que se simplemente y otro sólo dcsde quc se cumple una condición o plazo. En estos
hayan sido casos, Ia exccpción dc prcscripción acogida para uno dc los dcudores puede
(ticnde a las que no s€a invocable por otro deudor ¡esPccto del cual la deuda no ha prcs-
que Podrlan crito aún, dc modo quc la sentcncia absolutoria no impedirá cl desarrollo del
revo deudor nuevo proc€so ni proccdcrá la alegación dc cosa iuzgada por parte del deudor
solidario cuya dcuda no haya prescrito.
:n cl ca§o dc
1ida. El pro-
IV. ...¿Y EN rÁs R¡L-{croNEs INTERNA§ (¡¡rn¡ tos coo¡uoonrs)l

Normalmcnre, cl cfccro de cosa juzgada sc a¡aliz¡ únicamcnte en las lla_


madas r€lacioncs cxternas de la solida¡idad, cs deci¡ aquellas quc sc producen
cntrc el acrccdor y los deudores solida¡ios (obligación a la dcuda), pcro csre
problcma también se plantca en las rclaciones internas que se producen cnrre
los deudores solidarios una vez hecho el pago por uno de cllos (conuibución
364 HRNÁ! Conx¡r T¡r¡l^rr

juicio por el
a la deuda). En csros supuestos la prcgunta cs si la sentcncia del
cual uno de los deudores debió respondcr para con cl acrcedor, ticnc algin
efccro positivo o negativo dc cosa juzgada €n los proccsos mcdiantc los cua-
les el deudor que pagó pretende quc sus codeudores asuman la partc que lcs
corrcspondc en la deuda.
Pcnsamos quc, cn vcrdad, no s€ prcsenran problemx de cosa juzgada en su
cfccro ncgativo, ya quc suponcmos qucJ tratándosc dc un juicio enrre parres
distintas y con objero difercnte, no puedc impcdirsc un nucvo juicio por cl
hccho dc que haya habido una sentencia prcvia cnrre cl acrccdor y cl dcudor,
ahora demandanre. Pero sl pucde comiderarsc elcfccto posirivo de esa scntcn-
cia, cn cuanto a si clla misma puedc scrvir dc título cjecutivo pa¡a reclamar cl
rccmbolso del dcudor que pagó €n contre de sus codeudor€s, a pesar d€ que
átos no fucron partc dcl primer juicio.
Si los deudores solidatios fueron condcnados por una primcra senrencia
dcclarariva, y uno deellos paga, podrá reclamar elrcembolso, vía subrogación,
en virtud de la misma sentencia quc declaró la solidaridad, cn cuanto ella cs
un dtulo cjccutivos.
Lo más frecucnre scrá, sin embargo, que Ios codeudores demandados no
hayan participado en el proceso incoado por cl dcudor condcnado y quc pagó
la dcuda. En ralcs casos, habrá que distinguir si cl deudor quc pagó ejcrcr la
acción subrogatoria dcrivada de los arts. 1522 y 1610 N" 3 d€l Código Civil,
o una acción dc simplc rcembolso. Si se subroga cn el crédito del acrccdos en
rcalidad cl juicio ejecutivo derira dcl ríulo cn cl quc consta la dcuda solidaria
y no s€ funda en la sentencia que lo condcnó a pegar Bastará que el deudor
demandantc acredite que efecruó el pago37.
Si ejcrcc una simplc acción de rccmbolso entonccs cl dcudor quc pagó
deberá fundar su demanda cn la sentcncia cjecutiva quc lo condenó a pagar,

¡ En €l cdo Múnicip¿lid¿d dc viñr dcl Mar con Sup.mdádo t¡ B s¡s Empo,ium S.^.
(20rr): Con. Suprcm!,21 d. iu¡io d.20ll (cdación .! cl fondo) rcl N" 3170-2009,.ñ v4tLdu
CUJ UR-/9686/201 I, l¿ Cor. SupEm¿ d.t ¡mi"ó qu. l¡ scntcnoa po L guc lr Municipzlidad y cl
Sup.'E.@dotu.ro¡ @¡dcn¿dos a p¿9.' u,¡ @ridad solidriú.ntc, pod¡. s.ryn d. rtulo.j(utjvo
pam quc h primra rclma l¡ ¡¿sirución de la miiad dc lo pagrdo rl agundo.
r? Arf MásryAL SGi.d¿d A¡órim¿ d. Gr¿Dla R.clp@ con ro6t¿l Sú Pcdlo Limn.d. y oúo!
(20r7): Co(. Supr.ma, 16 dc .núo d¿ 2017, rol N'38126-20)6, cñ Va¡L¿u CLDVN174|2017I
P(rob¡ú Cl'ilc D¡tdbucióñ Limir¡d¡ con lc¡nodo LIuI Cl¡¡aou¡t (2014): Coñ. Suprma 3l d.
dici.mbrc dc 201{, rol N" 23 420 2014, cn Watbw CU)V R/ 100 t 0/20 ¡ 4. En úbos 6oe sc ¿dñn.
qu..ldtulo o¡iginal sc¡compl.mcnta¿opor¿cumenros qucacrcdrm cl prgo cfcturdo por cl deudot
solida,io q!. s. subroSa .¡ los d.r<ios dcl ,<r..doi
OBUG^croNEi souD^Rt^s y cos^ luz6^D EN EL lurcro EJECLTNo 36t

juicio por el y en el nucvo juicio csta scnrcncia será un anteccdente lógico para condenar
tiene algún a los codcudo¡és a rcembolsar lo quc lcs corresponda como panicipación €n
lnte los cua_ la deuda.
)ar(€ que les En todos los casos arteriorcs, se podría argüir en contra que no procede
cljuicio cjccutivo porquc la obligación dc los codeudorcs a reembolsa¡ no es
uzgada en su líquida, ya que en el título no aparcccn determinadas las cuotas quc les co-
entre part€s rrespondcn en la dcuda. Nos parece quc esto es cquivocado, porquc la regla
juicio por el gcneral es que la contribución sea por partes iguales, de modo quc la deuda
y el deudor, cs liquidablds.
Si no fucra así, el deudor obligado a pagar más de lo que le corresponde
'a rcclamar cl deberá probar que la cuota era menor o incluso que no dcbfa recmbolsar nada
pesar dc quc por tratarsc de un dcudor no inrcresado en la dcuda (art. I J22 CC). Para cllo
podrá oponerla cxcepción dcl N. 7 dclarr.464 delCódigo de Procedimienro
Civil, ya que, al no erisrir el total o parre de la dcuda que sc reclama, el título
subrogación, carecc dc fueza cjccuriva.

:uanro ella cs

mandados no
V CoNcLUsroNEs

Jo y que pagó
De lo expuesto, puede concluirse que la regla general, cn nuestro ordena-
pagó ejcrce la
mientojurídico, cs quc lasentcncia dictadaent¡c acreedor y un deudorsolidário
Código Civil,
cn un juicio cjccutivo no tienc el¡ctos ni positivos ni negarivos para los dcmás
:l acreedor, en
deudo¡cs solidarios. Sólo exccpcionalmcnre, podrá invocarsc la cosajuzgada cn
euda solidaria
cl nuevo juicio quc dcduzca cl ac¡ecdor o €l deudor que paga cn contra de Ios
quc el deudor
dcudorcs que no inrcrvinieron en el primcr p¡occ¡o. Sc trata de dos casos cn
que operará el efccto negarivo y dos cesos en los que se dará el efecro positivo.
Ldor que pagó
rdcnó a pagar,

J' Muni.ip¡lidad d. viñ. d.l M¡r .on Suprn.¡qdo lr Bdsd Enporium 5.{. (201 I Cod.
):
Suprml 2I ¿. iuio d. 20 t I (@ció" ¿n .l fondo) ¡ol N. 3 l7o-2o09, .n Vdttzv Ct1lUN9686t2o1t .
S.ñd¡ 12 s.nr.nci. "Qu.porlo dprídó, no cs ¿c.(dó d pl¡n,.úicnto dc la snt.nciá ,mpúgn¡dl
porquc .n .l p,.r.nt. qio ]osdc¡ccho¡ qur ha« val.¡ la cj.cur¡ñrr no son obs.uroso dbrútadóscomo
penscgui¡¡n pi@dimtnrcordinúio quc Iósd<h¡.o 6t¡bl.r. Por d con(do, .s cl p¡o..¿imi.¡to
¿jéudvo.l iu¡ldi@cnt. prec¿cnc p.n pd*EUn.l cmpl,Di.¡ro d.h obliS.ción d.ñdd¡&, qu.
s..no.nr¡ dd.¡ninad¡.¡ form¡ fch¿ctni.. En 6r¡ Iin.¡ ¿ryumcntal, ob< tmbién col.gü quc loj
17 4t2ot7 |
jD.as d.1 fo¡do i¡cuo.n cn infiációr ¿cl adculo 438 d.l Código d. PG.dimicnto Civil, puerro
aLllUN
guc !r¿ útid¿d 6llquid¡ no sólo.uúdo tie¡. aduálm.nr. 6¿ .alidad, si¡o rúbi¿n cu¡¡do púcdc
liquidzúr m.di c simpl.s op€ndond dd¿ri6 con sólo los ¿¿ios qu¿ .l hiño rt(ulo cj.otiyo
iumi¡irE. D.6tr D,¿r¡, n2d2 obrab. pr1qu. L oblig¡ción qu.d..c prkrm.nk ¿..¡minid¿
dividi.n¿o l¡ d.uda pagada por nit¡d.s" (cons. 169.

t-
-

366 HERN,(N CoRf{LT^LcNr

Los dos casos dc efccto negativo son:


1o) Si se dicta sente¡cia condcnatoria que rechaza una excepción real, el
acrecdor podrá oponers€ a quc el nucvo dcudor demandado inrcntc discuti¡
la procedcncia dc la misma excepción;
2.) Si sc dicta se¡tencia absolutoria por acog€r una cxcepción real, y cl
acrecdor intcnta una nueva acción cn cor¡úa de otro dcudor, ésre podrá
ampararsc cn cl efecto de cosa juzgada de la primera sentcncia para cvitar la
duplicidad dc fallos-
Los dos casos de efecto positivo son:
19 Si sc ha dcclarado en juicio penal o civil la existercia y cl monto d€ ia
obligación principal por la que un tercero cs considerado por la lcy como deu-
dor solidario, esa sentencia puede scr urilizada por el acreedor para demandar
a estc último, cn la medida en que la solidaridad no sca discutida.
2.) Si cl dcudor que paga cjerce, no la acción subrogatoria, sino una acción
de reembolso simple podrá emp:rars€ €n la scntencia quc lo condcnó para
dcmandar cjccutivamente a sus codeudorcs.
Con todo, cstimamos que €l Io caso dcbcrla se¡ asimilado má5 bicn a un
efecto rcflcjo dc la sentencia por lo que el terc€ro colscrvarfa cl de¡echo a
conrrov€rrir con prucba contraria lo dccidido cn el juicio en que no ha intet-
venido sobre l¿ cxistc¡cia y monto dc la obligación principal, por lo que el
scgundo proceso no podrá ser cjccutivo. Esta conversión del cfecto posirivo
cn cfccto rcflejo se propicia para cvitar que este rercero se vea pcrjudicado por
una colusión fraudulenta enrre el acrcedor y el dcudor principal quc podrlan
habcr amaáado el resultado del primcr iuicio.

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