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ARTÍCULO DE REVISIÓN
RESUMEN
ABSTRACT
El surgimiento de la Bioética tiene lugar durante los últimos años de la década de los 60 y los
primeros años de los 70, en Estados Unidos de América. Las conductas poco éticas en la
realización de experimentos médicos con seres humanos, y los dilemas éticos derivados del
impacto de los avances tecnológicos en la esfera de la atención médica, constituyeron los
resortes principales de este proceso. El acelerado desarrollo ulterior de la Bioética en ese país,
transcurrió en dos direcciones principales: la ampliación de su objeto de estudio (extensiva a
problemas sociales vinculados con la salud, ambientales y relacionados con el bienestar de los
animales de experimentación), y su fundamentación teórica (filosófica y ética).
El desarrollo de la Bioética en América Latina, así como en otras regiones del mundo, se inicia
con casi un cuarto de siglo de retraso. Con la excepción de esfuerzos anteriores de
personalidades e instituciones aisladas en algunos países, no es hasta la presente década que
se logra vertebrar un movimiento intelectual y organizativo capaz de incentivar la reflexión y el
quehacer bioético en la región. Es en esta década también, cuando en Cuba se generan
movimientos similares de relativa importancia, pero no es hasta el año 1983 que la Resolución
Ministerial no. 72 del Minsap dispone la creación de comisiones de ética médica en las
unidades del Sistema Nacional de Salud, las que deberán ventilar las infracciones de los
principios de la ética médica, discutidos y aprobados en asambleas por los profesionales y
técnicos de la salud. A partir de entonces, esta ha sido la norma fundamental en asuntos
deontológicos en nuestro medio, por lo que requiere de un análisis más profundo a partir de
una aclaración necesaria sobre su alcance. Estos principios pautan la conducta ética de todos
los profesionales y técnicos de la salud, y de los estudiantes de las carreras respectivas.
Ética y Bioética: la Ética puede definirse como la ciencia que trata de la moral, su origen y
desarrollo, y establece un sistema de opiniones, normas y evaluaciones sobre la regulación de
la conducta de los individuos entre ellos y con la sociedad. La Bioética, por su parte, se
propone el redimensionamiento ético de las relaciones humanas (interpersonales y sociales)
que tienen como objeto la salud humana y la vida en general. La bioética constituye, por tanto,
un proyecto de extensión del pensamiento médico-social a la esfera de la ética médica. La
trinidad bioética la integran:
La atención médica a los pacientes inmune deficientes ha dado a esta relación una dimensión
más allá de la asistencia clínica, para abarcar también la investigativa, por la utilización de
pruebas diagnósticas riesgosas, medicamentos inmune estimulantes por largos períodos, el
trasplante de tejidos a veces como única opción, así como la terapia génica.
Por lo general, en el caso de la Pediatría el consentimiento es otorgado por los padres, quienes
habitualmente son los representantes del paciente. No obstante, de acuerdo con sus
limitaciones, en la medida en que el niño sea capaz de tomar una decisión (por lo menos de
edad escolar en adelante), a esta habrá que darle su valor y respetarla, y el adolescente debe
asumir progresiva autonomía en las decisiones relacionadas con el cuidado de la salud.
Ciencia y ética profesional: salvo raras excepciones, durante todo el curso de la historia e
incluso desde antes de que la ciencia se independizara como tipo específico del saber y como
ocupación profesional particular, los hombres de ciencia han sido portadores de rasgos de
conducta muy peculiares y comunes en prácticamente todos ellos. Pareciera como si el acceso
directo a las fuentes primigenias del saber hubiera impregnado a estos hombres y mujeres de
un hálito especial, destinado a irradiarse a partir de ellos, y a difundirse entre lo mejor de la
humanidad primero, y a alcanzar por fin a todos los seres humanos. Los principios
fundamentales de la Ética en la experimentación en humanos, descritos en el informe Belmont
desde 1978, siguen siendo válidos hasta nuestros días:
- Autonomía: implica que los pacientes sean tratados como seres autónomos y también la
protección a aquellos que tengan su autonomía disminuida. La materialización práctica de este
principio es el consentimiento informado del paciente o representante legal, antes de ser
sometido a experimento.
- Justicia: una equitativa distribución de las cargas de daños y utilidades resume este principio,
conduce a un balance riesgo-beneficio y población en riesgo vs. población beneficiada. Los
principios de no maleficencia y justicia, de forma práctica, se pudieran expresar en la
concepción de establecer un experimento correctamente diseñado que lleve a resultados
válidos y, por lo tanto, a beneficios para la sociedad. La revolución científico técnica en
Medicina, y en especial en el campo de la Inmunología, ha llevado a muchas personas a creer
en la eficacia de las instrumentaciones puramente técnicas del experimento sin tomar en
cuenta el riesgo-beneficio del individuo. Deslumbrados por las conquistas de lo tangible,
muchos se han vuelto insensibles frente a los valores humanos.
Investigación clínica: en los estudios en niños se establece un dilema bien conocido, porque en
ningún caso deben utilizarse niños para investigaciones de adultos, los resultados obtenidos en
investigaciones con adultos no son extrapolables a niños y jóvenes, algunas enfermedades
importantes de la infancia son prácticamente incompatibles con la supervivencia en la edad
adulta, y los niños de corta edad son muy vulnerables a ciertas enfermedades que la población
adulta tolera mejor. Por tanto, aunque el desarrollo de la investigación de las IDP se hace cada
vez más necesario, hay algo bien establecido al respecto, y es que antes de someter el
producto a investigación en infantes, debe estar muy avanzada la comprobación de su
seguridad y eficacia en los estudios en adultos.
Aspectos bioéticos en la terapia génica: a inicios de 1990 fue presentado al Congreso de los
Estados Unidos el Proyecto del Genoma Humano (PGH), el proyecto más ambicioso en el
campo de las ciencias biológicas del pasado siglo. El hombre conocerá las localizaciones de los
genes responsables no solo de enfermedades, sino también de las características fenotípicas
normales, y la predisposición a distintas enfermedades cuyo desarrollo puede ser favorecido
por los efectos ambientales.
¿Qué dilemas enfrentamos? La desigualdad económica determina dilemas diferentes para los
bioeticistas del Primer y Tercer Mundos. Mientras que en el mundo desarrollado se debaten
las consecuencias no deseadas de la terapia génica, en una cifra no despreciable de los
ciudadanos del Tercer Mundo no se puede diagnosticar una enfermedad causada por un
número anormal de cromosomas, a pesar de que esto es posible desde la década de los 50. La
socialización de los servicios genéticos contribuiría a poner al servicio de los pacientes con
enfermedades genéticas los adelantos tecnológicos para el diagnóstico y tratamiento de estos
enfermos. Cuba, una excepción latinoamericana en este sentido, ha socializado servicios de
genética que garantizan una cobertura poblacional, tanto para el diagnóstico, como para lo
que es más importante, la prevención de enfermedades. Precisamente, gracias al desarrollo de
la atención genética como parte de nuestro sistema de salud, es que se puede incluir en
nuestro país, la atención del paciente inmunodeficiente primario y poner a disposición de
todos ellos los avances científicos y tecnológicos con que contamos.
- Estatus moral especial del feto: el estatus moral del feto está muy relacionado con la
decisión de los padres de aceptar o no al feto enfermo, por lo que resulta muy importante que
el médico, a pesar de sus convicciones morales, no trate de influir de ninguna forma en esta
decisión paterna, aun cuando en ocasiones no la comparta.
- El aspecto más controvertido es que el diagnóstico prenatal puede estar seguido de aborto
de fetos, y discutirse los derechos del feto como ser humano sin que las leyes, la religión o la
ética hayan podido dar una respuesta definitiva.
CONSIDERACIONES FINALES
Los problemas éticos son frecuentes en la práctica pediátrica, tanto en el hospital como en la
medicina familiar, y mantienen enorme vigencia en la relación médico-paciente-familia. La
utilización adecuada del consentimiento informado tiene una connotación especial cuando el
paciente es un niño, basado en la buena comunicación e información a los padres y al
enfermo. La Bioética constituye, por tanto, una herramienta indispensable para la verdadera
atención del paciente inmunodeficiente, que nos permite hacer una evaluación integral de él
con una proyección social. Especial sensibilidad e integridad moral y humana deben tener el
pediatra y el inmunólogo para encarar las decisiones médicas en el campo de la clínica y la
investigación, teniendo en cuenta todos los dilemas bioéticos que existen en la medicina
contemporánea, sobre todo en el tratamiento de estas enfermedades genéticas.
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Martha Leonor Paradoa Pérez. Hospital Pediátrico Docente "Juan Manuel Márquez". Avenida
31, esquina 76, municipio Marianao. La Habana, Cuba.
Conclusión
Acta bioethica
ORIGINALES
Argentina.
Correspondencia: doutomuro@fmed.uba.ar
Resumen: Al repensar el modelo de atención médica, se vuelve evidente la necesidad de
formar un médico general con una visión integral del hombre y de la medicina, capaz de
enfrentarse críticamente a los problemas que entraña la práctica cotidiana. La incorporación
de la bioética en los currículos de grado y posgrado constituye una estrategia fundamental
para mejorar la calidad de atención sanitaria y desarrollar una práctica médica en un marco
que enfatice la atención integrada sobre la especializada y que privilegie a la "persona" sobre
la enfermedad. Asimismo, deben planificarse desde la universidad estrategias tendientes a
acercar la bioética a la comunidad, facilitando el diálogo en condiciones de simetría de todos
los sectores sociales involucrados en los conflictos bioéticos.
Abstract: If you reconsider the medical practice's pattern, you immediately notice the need to
form a general practitioner with an integral sight of humankind and medicine, one who would
be able to criticize and judge the problems that daily practice involves. It is essential to
incorporate bioethics in all degrees' curricula; this would develop a fundamental strategy in
order to improve the quality of sanitary attention. It would also develop a medical practice
within a frame that would emphasize an integrated attention over the specialized one and it
would favour the "person" and not the illness. Arising from the university strategies should be
planned to bring bioethics close to the community, thus helping dialogue and supplying
symmetric conditions for a dialogue of all the social groups involved in bioethics' conflicts.
Introducción
Puede afirmarse que la bioética es una asignatura nueva en el currículo médico. No obstante,
su oficialización en casi todas las escuelas de medicina evidencia el compromiso de desarrollar
con responsabilidad la actividad docente y de investigación en este campo. Pone también de
manifiesto la convicción de su relevancia, tanto en la práctica de la medicina como en la
investigación que involucre a seres humanos.
Sin embargo, y precisamente por ser una disciplina nueva, tanto en sus orígenes históricos
como en su incorporación en el proceso enseñanza-aprendizaje, la experiencia docente es
magra. Asimismo, el carácter polisémico del término "bioética" deja espacio para una
vaguedad (e incluso, en algunos casos, ambigüedad) que permite la inclusión de actores,
discursos y temáticas que podrían confundir el verdadero propósito de la bioética: contribuir a
una racionalidad emancipadora en el marco de un diálogo plural, democrático y respetuoso de
las diferencias. Esa vaguedad da lugar a que, por ejemplo, se confunda moral con ética,
legalidad con legitimidad, opinión o con ciencia o episteme, o bien que se incluyan aspectos de
la realidad que, sin duda, ameritan un tratamiento ético pero no bioético
Como en muchos otros campos, asumimos el rol de consumidores de la información que nos
llega desde latitudes, las cuales no siempre comparten nuestros intereses y, en consecuencia,
no satisfacen la misma demanda. Esto es particularmente cierto en el caso de la bioética, en la
cual casi todo está por hacerse. Nuestra realidad social e idiosincrasia cultural difieren de las
de aquellas latitudes en las que surge y desde las que imparte el discurso bioético clásico. Es
necesario asumir el papel de artífices en el diseño y planificación de un discurso que está en
plena construcción.
Por esto, el tema de la enseñanza de la bioética suele estar presente en cuanto congreso y
texto exista sobre la materia. ¿Qué enseñar y cómo hacerlo? ¿Deben priorizarse los objetivos
actitudinales sobre los procedimentales y cognitivos? ¿Cuáles son los puntos de contacto y las
diferencias con otros discursos, como el religioso y el legal? La inserción de la materia en el
currículo, ¿debe ser horizontal o transversal? Todos siguen siendo tópicos que motivan arduos
y continuos debates.
Las HHMM aparecen como medio idóneo para lograr un cambio en el paradigma educativo.
Hoy, prácticamente todas las escuelas de medicina del mundo tienden a incorporarlas en sus
currículos, asignándoles, en algunos países, una importante carga horaria. Debe quedar claro
que la incorporación de estos contenidos no pretende "adornar" o dar un "toque de
distinción" a los planes curriculares, preservando la primacía de los aspectos biomédicos;
tampoco suplir falencias en la cultura general del médico. Se trata de concebir una nueva
visión de la medicina y su finalidad es formativa más que informativa. La historia de la
medicina ha sido tradicionalmente la columna vertebral de las HHMM y, dentro de éstas, es la
de mayor tradición.
Es común confundir bioética con moral, religión, medicina legal, derecho positivo, ética médica
o filosofía. Si bien estos campos no son compartimentos estancos y existe cierta vinculación
entre ellos, corresponden a áreas del conocimiento distintas.
En primer lugar, es importante diferenciar entre ética y moral, así como dejar claro que la
moral no es sólo una ni tampoco existe una sola teoría ética
La bioética es una disciplina cuyo discurso se legitima en ser dialógico, secular y procedimental.
No hay en ella, dice Lolas Stepke, lugar para "el reduccionismo creencial de aquellos que
intentan imponer sus convicciones a otros y creen su deber propagar dogmas. Es por eso
incongruente ab initio una bioética dogmática, fundamentada en un esfuerzo misionero o en el
magisterio confesional
10. Lolas F. El discurso bioético y la acción social (conferencia). En: Kohn Loncarica AG,
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Análisis críticos
Está muy bien que los estudiantes de medicina lleguen a tener dominio de los aspectos clínicos
y tecnológicos, pues eso no es suficiente, debe tener una formación axiolitica, formación en la
que tiene que ver con la persona, es decir, con sus valores, con la parte esencial del ser
humano, capacidad para juzgar lo que es bueno y lo que es malo y sean auténticos que vale
por el bien profesionales e integridad de sus pacientes
También los estudiantes deben comprender que la bioética es esencial para desenvolverse
como profesionales en la interacción con el paciente, fomentar un espíritu y ampliar su sentido
de responsabilidad en el que hacer
La bioética es una disciplina que exige la conclusión en los planes de medicinas para adoptar a
sus alumnos las competencias que les permiten manejar los conflictos de valores de una
relación clínica auténticamente democrática
El principio de la práctica profesional con respeto a la autonomía del paciente, a sus creencias
y culturas, también reconocer las propias limitaciones y la necesidad de mantener y actualizar
su competencia profesional
Articulo Nº3
Perspectiva Bioética del cuidado de Enfermería
An approach to the nursing care bioethics perspective is shown in the present article, initially
reflection elements about the ethics and the moral are taking into account, together with a
bioethics reflection, followed by the analysis of bioethics conceptual elements: origin, concept,
characteristics, different study fields, Latin America and Caribbean bioethics tendencies and
the relation of the bioethics with the care ethics of nursing. Key words: Ethics. Moral.
Bioethics. Care Ethics and Nursing.
INTRODUCCIÓN
Los cambios sociales, políticos, culturales así como los avances científicos y tecnológicos han
hecho que en las últimas décadas haya cobrado un mayor interés el estudio de la ética, -más
recientemente el de la bioética– en defensa de la vida en todas sus manifestaciones y de los
derechos del ser humano. De igual manera han surgido nuevas reglamentaciones y códigos
que buscan, entre otros aspectos, salvaguardar los derechos de las personas, proteger el
medio ambiente, hacer una mejor distribución de los recursos y ampliar la cobertura de
atención a las personas menos favorecidas. Por otra parte desde el origen de Enfermería se
considera que el cuidado es el núcleo central del ser y quehacer de Enfermería y ha estado
ligado a la ética, en este sentido se habla de la ética del cuidado y tal como lo plantean
diferentes Enfermeras éste sirve como fundamento de la bioética.
Etica y moral
Usualmente los términos ética y moral tienden a confundirse, quizá por el origen etimológico
de sus raíces -de hecho para algunos autores son sinónimos- El concepto de ethos (escrito con
eta) originalmente significaba la morada, el lugar y la casa donde se habita de manera
protegida, el entorno natural del ser humano, su mundo inmediato. Posteriormente, el ethos
(escrito con épsilon y tildado), significa la intimidad misma del ser humano, su carácter, su
modo simbólico de ser y de comportarse, la manera como el hombre realiza su ser en el
mundo, apropiándose el mundo exterior para hacer simbiosis con su mundo interior y vivir
coherentemente y saludablemente. Para Cely “esta coherencia saludable no es otra cosa que
la higeia, producto de una forma virtuosa de vivir. La virtud que los griegos llamaron “areté”,
deriva su significado ético del ejercicio físico diario y exigente que los atletas tenían que hacer
para mantenerse en forma. Es así como la ética aristotélica es una ética de las virtudes, lo que
equivale a una propuesta de vida llevada higiénicamente” La raíz latina “mores” significa
costumbre, carácter; se define como el conjunto de códigos, normas o reglas de conducta que
permite establecer una distinción entre lo que es bueno y lo que no lo es, lo que uno debe y no
debe hacer; dichas normas son adquiridas por hábito y son aceptadas por la sociedad. El
sentido moral nace de la responsabilidad y de la libertad; es precisamente esta última la que
hace que los actos sean susceptibles de ser calificados como buenos o malos, pues en el
ejercicio de su libertad y luego de un análisis de conciencia, el ser humano toma la decisión de
efectuar un acto determinado La ética es el estudio de la moral; plantea cual es el valor de la
bondad de las conductas mismas, de lo que es correcto o incorrecto. Es entonces aquella parte
de la filosofía que estudia la moralidad del obrar humano; se entiende por moralidad, aquella
cualidad que se refiere a los actos humanos que se realizan libre y voluntariamente, en este
sentido la ética y la moral se relacionan como lo hace una ciencia con su objeto de estudio; es
decir, la ética no crea la moral, sino que la estudia. Al respecto Adela Cortina afirma: “La ética
da razón, mediante la reflexión filosófica, de la moral en este sentido explica, analiza, estudia,
describe y critica los comportamientos no los enjuicia…. acoge el mundo moral en su
especificidad y da reflexivamente razón de él”
BIOETICA
De acuerdo con Asnariz, no se puede negar que desde tiempos remotos los filósofos,
religiosos, hombres de ciencia y pensadores en general se han preocupado por el uso de la
ciencia y de la técnica en el desarrollo de la vida humana y por el impacto de ésta sobre él y su
entorno; sin embargo es a partir del inicio de la Bioética que dicha preocupación ha tomado la
importancia que tiene para la vida del hombre y del planeta tierra. El primero en manifestar su
preocupación por el estudio de la ética a favor del medio ambiente fue el ingeniero forestal
Aldo Leopold; pero el origen del término Bioé- tica se atribuye a Van Rensselaer Potter Potter,
bioquí- mico oncólogo quien obsesionado por la supervivencia de la vida y del medio ambiente
planteo la siguiente reflexión: “Existen dos culturas, que parece que no son capaces de
comunicarse: la científica y la humanística: Si aceptamos que esta incomunicación es una de
las razones que hacen dudar de la posibilidad de futuro de la humanidad, posiblemente
construyendo un puente entre estas dos culturas construiremos un puente hacia el futuro”
Como respuestas a sus inquietudes Potter publica en 1971 su libro “Bioética un puente hacia el
futuro”, un puente entre dos culturas: la científica en torno a la vida y el medio ambiente y la
humanista centrada en la ética. En la mente y en los escritos de Potter la Bioética no nace
reducida al campo de la medicina ni de ninguna otra ciencia, sino que nace como una obsesión
por la supervivencia de la vida y del medio ambiente; en este sentido plantea una ética global
por la vida. Desde ese entonces la bioética se ha desarrollado en niveles teóricos, académicos,
primero norteamericanos, luego europeos y finalmente hoy se ha extendido a todo el mundo
ya que la preocupación de Potter es hoy preocupación de todos. Etimológicamente el término
bioética proviene de las raíces griegas bios: vida y ethos: ética cuyo fin es mejorar la calidad de
vida del hombre y del medio ambiente. Existen diferentes definiciones acerca de la Bioética de
acuerdo con la formación y enfoque ético de los autores. En la Enciclopedia de Bioética Reich
Warren (1995) la define como “el estudio sistemático de las dimensiones morales – incluyendo
la visión moral, decisiones, conducta y políticas de las ciencias de la vida y el cuidado de la
salud, empleando una variedad de metodologías éticas en una espacio interdisciplinario”5
Asnariz considera que la Bioética “analiza argumentativamente e intertrans disciplinaria
mente, situaciones dilemáticas, valorativas, surgidas en y desde las ciencias de la vida y de la
salud, debido a la creciente tecnificación que impacta la vida en toda su amplitud y a la
variedad de paradigmas de valores existentes. El análisis busca con responsabilidad solidaria,
llegar a consensos donde prime el respeto por la dignidad humana y la vida en general, tanto
presente como venidera” Palacios considera que la Bioética es la “disciplina encargada del
análisis de los avances y utilización de las ciencias y tecnologías, para proponer orientaciones
éticas aplicables que los armonicen con el respeto a la dignidad humana y a la protección del
medio ambiente, las especies y la naturaleza” Se resaltan como características de la Bioética
las siguientes:
• Es abierta (inabarcable)
La Bioética analiza situaciones o dilemas que requieren de una toma de decisiones ética y que
se agrupan en:
ÉTICA EN LA BIOÉTICA
No son la misma disciplina la ética es una disciplina filosófica que trata acerca de la moral y la
moralidad. Asnariz considera que la Bioética está incluida en la ética y en este sentido, para
algunos autores, es una ética aplicada a un campo específico de la realidad y necesariamente
se fundamenta en la reflexión ética-filosófica. La autora analiza el concepto de Bioética de
Reich y afirma que en la Bioética subyacen cuestiones básicas humanas que nos llevan a
cuestionamientos como los siguientes: ¿Qué clase de persona debo ser para realizar buenas
decisiones éticas y vivir una vida moral? ¿Cuáles son mis deberes y obligaciones hacia los otros
cuya vida y bienestar pueden ser afectados por mis acciones? ¿Qué obligaciones tengo hacia el
bien común como miembro de la sociedad? ¿Qué perspectiva (enfoque) ética ofrece más
ayuda o responde mejor a los dilemas éticos? Llano considera que en la reflexión bioética de
un problema el enfoque fundamental es la valoración ética que se hace del mismo en forma
interdisciplinaria teniendo como criterio fundamental la dignidad de la persona humana.10 Por
lo anterior puede concluirse que la Ética contribuye a la Bioética en el sentido en que coloca
como fundamento de la reflexión el comportamiento social de la persona en relación con los
avances científicos y tecnológicos que influyen en la vida de todos los seres de la naturaleza.
En una reflexión Bioética la ética que aplicó es mi propia ética, mi conciencia, mi forma de
pensar, mi forma de obrar en una palabra ejercito mi yo moral que es el nivel más alto de la
concienticidad. De acuerdo con Llano “cuando empiezo a deliberar con mi yo moral (que es
consciente) en mi esta actuando mi yo racional, mi yo intelectual, mi yo sensible y mi yo
inconsciente” El yo moral conlleva el obrar responsablemente, este nivel es práctico y
existencial; práctico en cuanto se relaciona con métodos de acción concretos y existencial en
cuanto implica el autocontrol y éste a su vez la responsabilidad por los efectos de nuestras
acciones sobre los otros y básicamente sobre sí mismo, elemento fundamental en la discusión
bioética. Todas las corrientes éticas (ética de las virtudes, ética deontológica, ética utilitarista,
ética consecuencialista, ética comunicativa) ofrecen instancias filosóficas para fundamentar la
Bioética y aunque de acuerdo con Cely “ninguna en particular satisface plenamente las
expectativas”,12 considero que la ética comunicativa (también llamada discursiva y dialógica)
aporta elementos fundamentales para la reflexión y toma de decisiones Bioéticas.
BIOÉTICA Y CUIDADO
Ante la pregunta ¿Cuál es la relación entre la Bioética y la Ética del Cuidado? Torralba
responde: ”Si la bioética etimológicamente, es la ética aplicada a la vida y por otro lado, la
ética del cuidar, se refiere directamente al ejercicio de cuidar uno podría llegar a pensar que
no tienen relación alguna. Sin embargo, el ejercicio del cuidar es requisito indispensable para
el desarrollo, el crecimiento y la madurez de cualquier vida humana… para poder vivirla con
dignidad. En este sentido la ética del cuidar forma parte de la Bioética” Ahora bien de acuerdo
con Daza de Caballero, el cuidado ha sido reconocido por la profesión de Enfermería como
rasgo esencial de la definición de su campo de acción y como el núcleo central del quehacer y
el saber de la Enfermería. Este ha sido motivo de reflexión de diversas escuelas de
pensamiento, logrando avances en su proceso de conceptualización que se ha evidenciado en
los modelos y teorías que sustentan el cuidado como rasgo esencial de la profesión. Podría
decirse entonces, como lo han manifestado algunos autores, que la Ética del Cuidado -con
unos rasgos específicos- se constituye en el fundamento de la Enfermería; entre dichos rasgos
se destacan los siguientes: La práctica de la acogida del otro, del otro enfermo, del otro
vulnerable. La pre-ocupación por el otro, no solo ocuparse de él ahora y aquí, sino anticipar
esta ocupación, pensar en él, prever sus insuficiencias, ocuparse con antelación, esto es
preocuparse. Acompañar al otro en la vivencia y experiencia de la enfermedad. Actuar como
abogado del sujeto de cuidado en pro del respeto a su dignidad y a sus derechos y Demostrar
una actitud solicita ante la(s) persona(s) que se cuida(n). En cuanto a la relación entre Bioética
y Enfermería aunque son pocas las publicaciones que se encuentran al respecto se ha
identificado que en la última década ha sido clara la motivación de las enfermeras por
prepararse académicamente en ésta área con el interés de contribuir al análisis de situaciones
y dilemas éticos que afectan de alguna manera la dignidad de la persona, sus derechos y al
medio ambiente en general. Así mismo algunas de las Declaraciones del Consejo Internacional
de Enfermería hacen referencia a la participación de la enfermeras en temas que
corresponden al estudio de la Bioética, entre estas: la conservación de medio ambiente (1992),
en la defensa de los derechos humanos (1998), clonación y salud humana (1998), en el
conflicto armado (1999), el cuidado al paciente moribundo y su familia (2000) adopción de
decisiones y de políticas en los servicios de salud (2000) en la atención a las personas en
condición de migrantes, refugiados y desplazados (2000). Barrio Cantalejo, Enfermera chilena,
considera que la ética del cuidado, propia de Enfermería, le aporta a la bioética no temas
exclusivos sino “una voz diferente” en el análisis de los problemas que ella se plantea. Las
Enfermeras en su práctica profesional se enfrentan cotidianamente a dilemas éticos y su forma
de abordarlos suele ser distinta a la de otros profesionales; ellas se preocupan por el contexto
que genera el dilema, por todas las dimensiones de la(s) persona(s) involucradas en él, por el
significado que tienen para ellas el dilema y los principios y valores en conflicto y por el
restablecimiento de las relaciones humanas rotas “o sufrientes”…. “Esto sitúa a la ética del
cuidado de la Enfermera dentro de complejo mundo de la Bioética, y no yuxtapuesta a ella, y
sabiendo que su función fundamental no es tanto aportar temas exclusivos, sino su
insustituible y personal enfoque, esto es su voz diferente”. Por otra parte la colega Alejandrina
Arratia, doctorada en filosofía de Enfermería, considera que es necesario profundizar en los
principios bioéticos que guían las intervenciones de Enfermería con el propósito de contribuir
a que el cuidado sea humanizado, responsable, digno y solidario. A nivel nacional se encuentra
un buen número de Enfermeras con postgrado, a nivel de especialización y de maestría, que
han profundizado sobre la relación entre la profesión y la Bioética; entre ellas se destacan los
aportes de Beatriz Peña quien afirma que la Enfermería, desde la ética del cuidado, sirve como
uno de los fundamento de la Bioética. Para la autora la ética del cuidado no se reduce a los
problemas propios de la profesión, sino también a las problemáticas propias de la Bioética que
van desde la pobreza misma hasta las intervenciones del hombre en el espacio extraterrestre,
es decir, problemas que atañen al inadecuado manejo de la vida y del medio ambiente. María
Eugenia Molina por su parte, plantea que la Bioética como disciplina retoma los principios
éticos los cuales proporcionan elementos de juicio para analizar situaciones de la vida diaria o
del ejercicio profesional y tomar decisiones tendientes al respeto de las personas. Edy Salazar
analiza la Bioética en el quehacer de la Enfermera y plantea que el cuidado de Enfermería es
un proceso Bioético que tiende a enaltecer el sentido y la calidad de vida de la persona, a partir
del reconocimiento del otro mediante acciones dialógicas. Agrega que “La Bioética llena de
sentido el actuar humano y conduce el quehacer de la Enfermera hacia el establecimiento de
compromisos de calidad de vida del individuo consigo mismo y con los demás”. Plantea que el
desempeño de la Enfermera implica, entre otros aspectos, “Reconocer la relación de la
persona con la persona, de la persona con la naturaleza y de la persona con el medio ambiente
en general, como unidad en constante interacción y cambio.” Por otra parte y teniendo como
referencia las conclusiones y recomendaciones de la mesa de trabajo sobre la enseñanza de la
Ética y de la Bioética en Enfermería, coordinada por Nelly Garzón, la cual formo parte de la VII
Conferencia Iberoamericana de Educación en Enfermería (ALADEFE Medellín octubre 6,7,8 de
2003) me permito resaltar lo siguiente:
• Reflexionar acerca de los principios éticos que guían el desempeño de la Enfermera y que se
encuentran en la legislación que la reglamenta y en el código de ética profesional. En Colombia
están consignados en la Ley 266 de 1996 por la cual se reglamenta el ejercicio de Enfermería
en Colombia: individualidad, integralidad, dialogicidad, continuidad, calidad y oportunidad y en
la Ley 911 de 2004 referente a la responsabilidad deontológica para el ejercicio de la
profesión: respeto a la vida, la dignidad del ser humano y sus derechos, autonomía,
beneficencia, no maleficencia, justicia, veracidad, solidaridad, lealtad y fidelidad.
• Hacer evidente la relación entre la ética del cuidado de Enfermería y la atención de salud con
calidad ética y científica como un derecho de las personas y de los colectivos.
CONCLUSIONES
A manera de síntesis se puede decir que la Bioética es una disciplina en permanente evolución
que busca establecer un puente o dialogo entre los saberes científicos en torno a la vida en
todas sus manifestaciones y los saberes humanísticos centrados en la ética. Abarca no solo las
implicaciones de la tecnociencia en el campo de la salud, sino también en lo social y lo
ambiental; en este sentido ha evolucionado de una Bioética clínica a una Bioética Global. Así
mismo y de acuerdo con lo planteado por diferentes Enfermeras la Ética del Cuidado, con sus
rasgos específicos, se constituye en uno de los referentes éticos para la reflexión Bioética de
las situaciones que afectan la vida y dignidad de la persona, sus derechos y su medio ambiente
social, cultural y natural. Para finalizar la siguiente reflexión: La razón de ser de Enfermería son
las personas y al recibir el titulo la Enfermera asume el compromiso ético de proporcionarles
cuidado con calidad humana, científica, tecnológica y ética. Dicho compromiso nos exige
capacitación permanente, sensibilidad ética y capacidad de razonamiento moral para la
adecuada toma de decisiones éticas.
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
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Bioética. Bogotá D. C. Editorial JAVEGRAF. 2004, p 123.
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GEN - ÉTICA. Donde la vida y la ética se articulan. Colección Bioética. Bogotá D. C. 3R Editores.
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9 Gracia Guillen, Diego. De la Bioética Clínica a la Bioética Global: Treinta años de evolución.
Bioética Selecciones 6. Universidad Javeriana. Instituto de Bioética – CENALBE, noviembre
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13 Cely Galindo, Gilberto. S. J. El horizonte Bioético de las Ciencias Op. cit. p. 45.
14 Torralba Rosello, Francesc. Labor Hospitalaria. Instituto Borja de Bioética. Volumen XXXI.
Año 51. Nº 253. Julio – Agosto – Septiembre 1999 p 136.
15 Ibid. Página 139 16 Daza de Caballero. Rosa Leticia. La magia del cuidado: Una
aproximación desde la analítica Heideggeriana. Revista Enfermería Humanismo. Ciencia y
Tecnología. Universidad de Cartagena. Facultad de Enfermería. Nº 11. 2003, p 26.
18 Peña, Beatriz. El ethos del Cuidado: La responsabilidad como fundamento de solución a las
problemáticas bioéticas. Ponencia presentada enla Cátedra Manuel Ancizar. Universidad
Nacional de Colombia. 2005.
http://www.redalyc.org/pdf/3587/358741823006.pdf