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El Herpes Zóster es una enfermedad causada por la infección del virus de la varicela que ha adquirido
cualquier persona que haya padecido varicela (comúnmente conocida como “las chinas”). Se desarrolla por la
reactivación del virus, el cual permanece inactivo en el sistema nervioso, acantonado en los ganglios de las
raíces nerviosas después de haber padecido varicela, provocando una erupción dolorosa en la piel,
preferentemente aparece en forma de ampollas que envuelve el lado izquierdo o derecho del torso (culebrilla).
Aunque la mayoría de personas se recuperan completamente del Herpes Zóster, alrededor de un 30%
pueden sufrir complicaciones, como la neuralgia postherpética, la diseminación del Herpes Zóster en
pacientes inmunocomprometidos, neumonías, hepatitis, pérdida de visión, entre otras. La sobreinfección
también puede ser una complicación que cause diferentes problemas en la piel y el cuerpo.
Puede causar mucho dolor, afectar a la autonomía y calidad de vida de los pacientes.
Los adultos mayores de 50 años y las personas con inmunodeficiencia o en estado inmunodeprimido presentan
un riesgo mayor de reactivación del virus de la varicela Zoster. Se observa un memento notable del riesgo de
padecer Herpes Zóster a partir de 60 años de edad, aumentando también la gravedad del Herpes Zóster y la
incidencia de la neuralgia postherpética
Desde Junio de 2022, el SCS financia la vacunación frente a Herpes Zóster en pacientes
inmunocomprometidos, que son los más vulnerables frente a esta infección. Las personas a partir de los 18
años de edad que estén incluidos dentro de alguno de los siguientes grupos: trasplante de progenitores
hematopoyéticos , trasplante de órgano sólido , tratamiento con fármacos anti-JAK, VIH, hemopatías malignas,
tumores sólidos en tratamiento con quimioterapia.
A partir de Junio de 2023 también se incluye la población de 65 y 80 años (cumplidos a partir del 01 de enero de
2023) y población a partir de los 18 años que hayan tenido algún episodio previo de la enfermedad.
La vacuna financiada por el SCS para la protección frente a HZ es Shingrix®. Se trata de una vacuna
inactivada de subunidades, que puede usarse tanto en personas de 65 y 80 años sanas, como en personas, a
partir de 18 años, con patologías, estando especialmente recomendada en caso de inmunodepresión.
La vacunación con Shingrix® reduce significativamente el riesgo de sufrir HZ y protege frente a las
complicaciones derivadas de la enfermedad. Se necesitarán 2 dosis de la vacuna separadas por 2 meses para
tener una protección correcta. Como la mayoría de vacunas, se debe administrar en el brazo. Como otras
vacunas, Shingrix® se ha estudiado ampliamente y cumple los requisitos de seguridad. Los efectos adversos
más frecuentes son: dolor en la zona de la inyección, dolores musculares, fatiga o dolor de cabeza.
Habitualmente son leves y de corta duración. La única contraindicación es una anafilaxia o reacción grave a
alguno de los componentes de la vacuna.