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Rev esp cir ortop traumatol. 2011;55(5):392—404

Revista Española de Cirugía


Ortopédica y Traumatología
www.elsevier.es/rot

TEMA DE ACTUALIZACIÓN

Fracturas atípicas relacionadas con el uso prolongado de


bifosfonatos. Estado de la situación
J.R. Caeiro-Rey a,d,∗ , I. Etxebarria-Foronda b,d y M. Mesa-Ramos c,d

a
Servicio de Cirugía Ortopédica y Traumatología, Complexo Hospitalario Universitario, Santiago de Compostela, España
b
Servicio de Cirugía Ortopédica y Traumatología, Hospital Alto Deba, Mondragón, Gipuzkoa, España
c
Unidad del Aparato Locomotor, Hospital Valle de los Pedroches, Pozoblanco, Córdoba, España
d
Grupo de Estudio e Investigación en Osteoporosis de la Sociedad Española de Cirugía Ortopédica y Traumatología (GEIOS), España

Recibido el 9 de mayo de 2011; aceptado el 16 de mayo de 2011


Disponible en Internet el 16 de julio de 2011

PALABRAS CLAVE Resumen Los bifosfonatos son considerados actualmente un tratamiento de primera elección
Bifosfonatos; de la enfermedad osteoporótica. Su reconocida eficacia antifractura en todos los tipos de osteo-
Fracturas atípicas; porosis y su presencia en el mercado desde hace varios años, hacen que sean los fármacos de
Fracturas por estrés; uso más extendido para el tratamiento de la enfermedad. En la última década han aparecido
Fracturas por una serie de efectos adversos relacionados con esta medicación que han encendido la voz de
insuficiencia; alarma sobre la conveniencia o no de mantener el tratamiento continuado con estos fármacos
Fracturas durante un largo período de tiempo. Entre estos efectos se encuentra la aparición de una serie
subtrocantéricas; de fracturas consideradas atípicas por su localización y apariencia radiológica que se manifies-
Fracturas diafisarias tan en pacientes tratados de forma crónica con bifosfonatos. Estas fracturas que comparten
de fémur una serie de características clínicas comunes, no cumplen el clásico perfil de la fractura por
fragilidad osteoporótica. La prolongada inhibición del remodelado óseo podría ser el sustento
fisiopatológico para su explicación, aunque todavía no está claramente establecida esta relación
causal. El objetivo del presente trabajo es doble, por un lado presentar cuatro casos clínicos
propios de fracturas atípicas relacionadas con la administración de estos fármacos y, por otro,
realizar en base a ellos una revisión bibliográfica de esta entidad patológica, para intentar
esclarecer cuál es la situación real del problema y determinar si es necesario establecer algún
tipo de recomendaciones terapéuticas, tanto quirúrgicas como no quirúrgicas, ante este tipo
de fracturas.
© 2011 Publicado por Elsevier España, S.L. en nombre de SECOT.

KEYWORDS Atypical fractures associated with the long term use of bisphosphonates. The current
Bisphosphonates; situation
Atypical fractures;
Stress fractures; Abstract Bisphosphonates are currently considered first choice treatment of osteoporotic
disease. Its proven anti-fracture effect in all types of osteoporosis and its presence on the
market for many years, make them the most widely used drugs for the treatment of this disease.

∗ Autor para correspondencia.


Correo electrónico: jrcaeiro@telefonica.net (J.R. Caeiro-Rey).

1888-4415/$ – see front matter © 2011 Publicado por Elsevier España, S.L. en nombre de SECOT.
doi:10.1016/j.recot.2011.05.002
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Fracturas atípicas relacionadas con el uso prolongado de bifosfonatos. Estado de la situación 393

A number of adverse effects associated with this medication have appeared over the past 10
Insufficiency years or so have caused concern on whether or not to maintain a continued treatment with these
fractures; drugs over a long period of time. These side effects include a series of fractures, considered
Subtrochanteric atypical because of their location and radiological appearance, which occur in patients treated
fractures; long-term with bisphosphonates. These fractures, that share a number of common clinical fea-
Diaphyseal femur tures, do not meet the classic profile of osteoporotic fragility fractures. Prolonged inhibition of
fractures bone remodelling could be the pathophysiological basis for his explanation, although this causal
relationship is not yet clearly established. The objective of this paper is two-fold, on the one
hand to present four clinical cases of atypical fractures related with long-term administration
of these drugs and, on the other, to perform a literature review of this pathological entity, in an
attempt to clarify what is the real status of this problem and whether it is necessary to establish
both surgical and non-surgical therapeutic recommendations for these types of fractures.
© 2011 Published by Elsevier España, S.L. on behalf of SECOT.

Introducción terapéuticas, tanto quirúrgicas como no quirúrgicas, ante


este tipo de fracturas.
Los bifosfonatos son considerados el tratamiento estándar
de la osteoporosis, con el alendronato y el risedronato
como fármacos de primera elección1 . Ambos fármacos han Casos clínicos
demostrado eficacia en la reducción de fracturas tanto ver-
tebrales como no vertebrales y de cadera en mujeres con Caso número 1
osteoporosis. Además, están indicados como fármacos de
preferencia en la osteoporosis del varón y en la osteoporosis Mujer de 74 años, con antecedentes de hipertensión arterial
esteroidea1,2 . y diabetes tipo II a tratamiento ambulatorio con enala-
Desde hace unos años se ha suscitado el debate sobre si pril maleato-hidroclorotiazida y metformina, diagnosticada
la profunda supresión del remodelado óseo que estos fár- hace 10 años de osteoporosis postmenopáusica y tratada
macos inducen podría tener un efecto negativo sobre la desde entonces con alendronato (10 mg/día durante 4 años y
resistencia mecánica del hueso, sobre todo a partir de los 4 70 mg/semana durante 6 años), con buena adherencia al tra-
años de tratamiento continuado3 . En el año 2005 se publica- tamiento y sin efectos secundarios constatables, que acude
ron los primeros casos de una serie de fracturas, definidas al Servicio de Urgencias por presentar dolor y deformidad
como atípicas por no cumplir el clásico perfil de la fractura en el muslo tras una caída casual por unas escaleras. La
por fragilidad osteoporótica, que resultan catalogadas como paciente refería presentar previamente a esta caída dolor
complicación relacionada con la hipersupresión del remode- inguino-femoral bilateral de 7 meses de evolución sin ante-
lado que genera la terapia prolongada con alendronato4 . A cedente traumático, del que venía siendo tratado con AINE
partir de entonces, numerosas publicaciones, generalmente por su médico de cabecera sin que se evidenciara mejoría
en forma de reporte de casos5—18 , han sido divulgadas rela- significativa.
cionando este tipo de fracturas, habitualmente de la región A su ingreso, radiológicamente se apreció una fractura
subtrocantérica o de la diáfisis femoral, con el tratamiento subtrocantérica de fémur transversa-ligeramente oblicua,
prolongado con bifosfonatos. Una reciente revisión de los con espícula medial y engrosamiento cortical lateral
casos publicados en la literatura identifica 141 casos que (fig. 1a), que había sido diagnosticada como fractura atípica
cumplirían las características establecidas para definir este subtrocantérica de fémur relacionada con el uso prolongado
tipo de «fractura atípica»19 . Pese a que en el análisis post- de bifosfonatos, suspendiéndose dicho tratamiento en dicho
hoc de los principales estudios de seguimiento a largo plazo momento. Realizadas las pruebas preoperatorias oportu-
con bifosfonatos se aprecia una muy baja incidencia de este nas, un despistaje de osteoporosis secundaria (hemograma,
tipo de fracturas, sin que se pueda establecer por tanto una recuento, fórmula, iones, BUN, Cr, albumina, proteínas,
relación causal entre la administración prolongada de estos proteinograma, calcio, fósforo, 25-OH vitamina D, PTH,
fármacos y la aparición de las mismas20 , se ha generado una FAL, osteocalcina, TSH y calcio en orina, con valores todos
alarma entre los profesionales de la salud acerca del riesgo ellos dentro de límites normales) y una radiografía del
que pueden tener los pacientes que reciben esta medicación fémur contralateral que no demostró alteraciones patológi-
durante un largo período de tiempo. cas significativas, fue tratada quirúrgicamente mediante un
Por ello, el objetivo del presente trabajo es doble, por un enclavado endomedular encerrojado dinámico con fresado
lado presentar cuatro casos clínicos propios de fracturas atí- del canal medular con clavo TFN largo (Synthex) (fig. 1b). En
picas relacionadas con la administración de estos fármacos el postoperatorio inmediato se realizó una DEXA (DMO cuello
y, por otro, realizar en base a ellos una puesta al día de esta femoral total con 0,734 g/cm2 , T score -1,7, Z score 0,0) y
entidad patológica, ya que teniendo en cuenta que los bifos- una RNM de la cadera-fémur contralateral que no demostró
fonatos son los fármacos más ampliamente utilizados para presencia de edema periostal ni de fracturas diafisarias de
el tratamiento de la osteoporosis, evidenciamos una nece- estrés (fig. 1c). El control evolutivo a día de hoy es satisfac-
sidad de calibrar realmente este riesgo y de determinar si torio, estando actualmente la paciente a tratamiento con
es necesario o no establecer algún tipo de recomendaciones 1-34 PTH.
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Figura 1 Caso clínico n.◦ 1. Fractura atípica subtrocantérica de fémur: a) radiografía postfractura; b) radiografía postenclavado
endomedular, y c) RMN de fémur contralateral.

Caso número 2 cio medio de fémur, de trazo transversal, espícula medial


y engrosamiento de la cortical lateral (fig. 2a). Al revisar
Mujer de 79 años, sin antecedentes clínicos de interés que la radiología efectuada previamente a la paciente, se apre-
desde hace más de 10 años está a tratamiento con alen- cia en la zona medio-diafisaria un engrosamiento cortical
dronato (10 mg/día durante 3 años y 70 mg/semana durante externo, con una tenue línea de fractura (fig. 2b). Por los
7 años) y suplementos orales de calcio por osteoporosis antecedentes clínicos y las características radiológicas de la
90 (DMO L1-L4 con 0,528 g/cm2 , T total -4,72, Z total - fractura, es diagnosticada como fractura atípica diafisaria
2,99. DMO cuello femoral total con 0,750 g/cm2 , T score de fémur relacionada con el uso prolongado de bifosfonatos,
-1,87, Z score -0,55). La adherencia al tratamiento durante siendo ingresada para tratamiento quirúrgico de la misma.
estos años había sido correcta, manteniendo el mismo sin Se realizó osteosíntesis con clavo intramedular fresado tipo
interrupciones. Desde hace tres años asocia ingesta de cor- Gamma® largo (Stryker Corporation) (fig. 2c). Los estudios
ticoides a dosis de 6 mg diarios de deflazacort debido a analíticos de despistaje de osteoporosis secundaria efec-
artralgias generalizadas inespecíficas. tuados a la paciente estaban dentro de límites normales y
Previamente a su ingreso la paciente refería dolor ines- el análisis radiológico del fémur contralateral no demostró
pecífico en muslo derecho, sin traumatismo previo de 1 mes alteraciones radiológicas significativas.
de evolución que fue valorado por su médico de cabecera
y tratado de forma sintomática. Como a pesar del trata-
miento el dolor persistía, la paciente acudió al Servicio de Caso número 3
Urgencias en donde le realizaron una serie de estudios radio-
lógicos en los que aparentemente no se encentró ningún tipo Mujer de 63 años, que acude al Servicio de Urgencias tras
de alteración patológica, siendo remitida para estudio a la presentar fractura espontánea diafisaria proximal de fémur
consulta ordinaria de traumatología. Al salir hacia su domi- izquierdo de trazo transverso, engrosamiento de cortical
cilio, la paciente sufre repentinamente un dolor intenso en lateral y espícula medial. (fig. 3a). La paciente había estado
la zona media del muslo, que se acompaña de un chasquido recibiendo tratamiento con alendronato oral (10 mg/día
y una posterior caída al suelo. Reingresada en el mismo ser- durante 3 años y 70 mg/semana durante 7 años) por un
vicio es diagnosticada de una fractura diafisaria de fémur período superior a 10 años por enfermedad osteoporótica,
derecho. Radiológicamente se aprecia una fractura de ter- con una buena adherencia al mismo y sin efectos secunda-

Figura 2 Caso clínico n.◦ 2. Fractura atípica medio-diafisaria de fémur: a) radiografía postfractura; b) detalle de la radiografía
prefractura, y c) radiografía postenclavado endomedular.
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Fracturas atípicas relacionadas con el uso prolongado de bifosfonatos. Estado de la situación 395

Figura 3 Caso clínico n.◦ 3. Fractura atípica diafisaria proximal de fémur: a) radiografía postfractura; b) fractura de estrés de
tibia consolidada, y c) radiografía postenclavado endomedular.

rios constatables, si bien hacía tres años la paciente había ción y marcha. Radiológicamente se constata una fractura
sido diagnosticada de fractura de estrés en su tibia derecha medio-diafisaria transversa de fémur con espícula medial y
con consolidación completa de la misma (fig. 3b). Diagnos- engrosamiento cortical lateral (fig. 4a). No diagnosticada
ticada de fractura atípica diafisaria de fémur relacionada en ese momento de fractura atípica la paciente es tratada
con el uso prolongado de bifosfonatos, la paciente es ingre- mediante un enclavado endomedular estático no fresado
sada para estudio y tratamiento quirúrgico. Realizadas las tipo UFN (Synthex) (fig. 4b), postergándose hasta los 4 meses
pruebas preoperatorias oportunas y un despistaje de osteo- del postoperatorio la supresión de los bifosfonatos.
porosis secundarias, que reflejaron un déficit asociado de Debido a que la paciente refería haber sido interve-
vitamina D, es tratada quirúrgicamente mediante enclavado nida previamente de una artroplastia total de rodilla de
endomedular fresado tipo Gamma® largo (Stryker Corpora- ese mismo lado 36 meses antes, de la que estaba toda-
tion) (fig. 3c). El estudio radiológico del fémur contralateral vía en revisión en consultas externas por dolor de muslo
resultó normal. reagudizado en los últimos 6 meses que no mejoraba con
tratamiento analgésico ni AINE, se revisan los estudios de
imagen efectuados para la valoración de dicha artroplastia
Caso número 4 dolorosa, apreciándose en un TAC previo un engrosamiento
con fractura de estrés monocortical (fig. 4c) que pasó desa-
Mujer de 79 años, con antecedentes de hipertensión arterial percibida en su momento. Diagnosticada con estos datos de
e hiperlipemia a tratamiento ambulatorio con candesartán fractura atípica mediodiafisaria de fémur en relación con
cilexetilo y atorvastatina, diagnosticada hace 11 años de uso prolongado de bifosfonatos, la paciente es ingresada
osteoporosis postmenopáusica, de la que viene siendo tra- para estudio, efectuándose un despistaje de osteoporosis
tada desde entonces con alendronato (10 mg/día durante 4 secundaria (sin evidencia de alteraciones significativas), una
años y 70 mg/semana durante 7 años), con buena adherencia radiografía de fémur contralateral (no alteraciones patoló-
al tratamiento y sin efectos secundarios constatables. gicas relevantes) y una DEXA de la cadera contralateral que
La paciente acude al Servicio de Urgencias tras haber demostró discreta osteopenia (DMO cuello femoral total con
sufrido un traumatismo por caída desde la propia altura, con 0,816 g/cm2 , T score -1,0, Z score 1,0). Evolutivamente en el
dolor, deformación e impotencia funcional para bipedesta- momento actual, 12 meses después de la cirugía, se constata

Figura 4 Caso clínico n.◦ 4. Fractura atípica medio-diafisaria de fémur en paciente con una ATR: a) radiografía postfractura; b)
radiografía postenclavado endomedular; c) fractura de estrés monocortical, y d) retardo de consolidación.
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Tabla 1 Fracturas atípicas femorales relacionadas con el


uso prolongado de bifosfonatos
Criterios mayores
— Localización en cualquier punto de la diáfisis femoral,
desde la porción distal del trocánter menor hasta la
porción proximal de la prominencia supracondílea de la
metáfisis femoral distal
— Asociada a ausencia de traumatismo o a un trauma
mínimo equivalente a una caída desde la propia altura o
menor
— Trazo transverso o ligeramente oblicuo
— Sin conminución
— Completas, afectando a ambas corticales y en ocasiones
con una espícula medial o incompletas, afectando a la
cortical externa
Criterios menores
— Posibilidad de reacción perióstica localizada en cortical
externa
— Aumento generalizado del grosor cortical de la diáfisis
— Síntomas prodrómicos como dolor en muslo o ingle
Figura 5 Caso clínico n.◦ 3. Fractura atípica diafisaria proxi- — Bilateralidad tanto de los síntomas como de las fracturas
mal de fémur. Detalle del trazo transverso, espícula medial y — Retraso en la consolidación
engrosamiento cortical lateral. — Enfermedades metabólicas óseas asociadas
— Tratamientos farmacológicos asociados

un retardo de consolidación (fig. 4d), estando pendiente de


realizar una dinamización del clavo y a tratamiento con 1-34 Desde el punto de vista clínico, las fracturas atípi-
PTH. cas relacionadas con el uso prolongado de bifosfonatos se
caracterizan por estar asociadas en ocasiones a diferentes
Estado de la situación tipos de situaciones comórbidas (insuficiencia-deficiencia
de vitamina D, hipofosfatemia, artritis reumatoide, etc.)
y a diversos tipos de tratamientos farmacológicos (gluco-
Concepto de fractura atípica
corticoides, inhibidores de la bomba de protones, otros
antiosteoporótico, etc.), y por presentar bastante a menudo
Las fracturas atípicas relacionadas con el uso prologado
un cuadro prodrómico de dolor en la ingle o el muslo21 , pre-
de bifosfonatos son fracturas la mayor parte de las veces
cisando desde el punto de vista diagnóstico la exclusión de
localizadas en el tercio proximal de la diáfisis femoral, aun-
otras posibles causas de fracturas de baja energía, como
que pueden aparecer en cualquier otra localización de esta
las fracturas patológicas asociadas a tumores primarios o
diáfisis, desde la porción distal del trocánter menor hasta
metastásicos del hueso.
la porción proximal de la prominencia supracondílea de la
Para facilitar la identificación y tipificación de este tipo
metáfisis femoral distal21 .
de fracturas, se han establecido recientemente una serie
Desde el punto de vista del mecanismo causal, aparecen
de criterios mayores y menores (tabla 1)21 . Para que una
normalmente después de un traumatismo de baja energía,
fractura sea clasificada como atípica relacionada con el uso
equivalente a una caída desde la propia altura o menor,
prolongado de bifosfonatos debe cumplir la totalidad de los
aunque pueden aparecer de manera espontánea21 .
criterios mayores. Los criterios menores, aunque frecuente-
Anatomopatológicamente pueden ser fracturas comple-
mente asociados a las mismas, pueden no estar presentes
tas o incompletas, pudiendo en ambos casos ser bilaterales.
en la totalidad de los pacientes.
Las completas afectan a la totalidad de la diáfisis, tie-
nen normalmente un trazo transverso o ligeramente oblicuo
con formación de una característica espícula medial y Epidemiología de las fracturas atípicas
son no conminutas (fig. 5). Las incompletas, en cambio,
afectan exclusivamente a una de las corticales diafisarias, Actualmente se estima que la incidencia general de las frac-
normalmente la lateral, comportándose en su apariencia turas subtrocantéricas de fémur es baja, suponiendo un 2-4%
anatomopatológica como una fractura de estrés y radiológi- de la totalidad de las fracturas de cadera22 . El 75% de este
camente como una línea transversa radiolucente localizada tipo de fracturas estaría normalmente relacionado con trau-
en dicha cortical. Ambos tipos, completas e incompletas, matismos de alta energía, como por ejemplo los accidentes
asocian macroscópicamente una reacción periostal y engro- de tráfico23 . Su repercusión en cuanto a morbimortalidad es
samiento de la cortical lateral a nivel del foco de fractura similar a las de las fracturas de la extremidad proximal del
(fig. 5), características ambas indicativas de fractura de fémur, con tasas de mortalidad del 14% a los 12 meses y
estrés. En ocasiones el engrosamiento cortical es más gene- del 25% a los 24, y con repercusiones funcionales que hacen
ralizado, afectando a ambas corticales21 . que la mayoría de los pacientes (71%), no puedan volver a las
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Fracturas atípicas relacionadas con el uso prolongado de bifosfonatos. Estado de la situación 397

actividades básicas de la vida diaria en condiciones similares relación causal propiamente dicha entre ambos, habién-
a las que tenían antes de producirse la fractura24 . dose descrito fracturas atípicas femorales en pacientes no
Cuando se evalúa más específicamente la epidemiología expuestos a este tipo de fármacos21 .
de las fracturas subtrocantéricas por insuficiencia o estrés, No obstante, en la gran mayoría de los casos publica-
que se producen en determinadas condiciones metabólicas dos de fracturas atípicas femorales el fármaco relacionado
óseas por una deficiente resistencia elástico-plástica del es el alendronato, aunque hay también casos descritos con
hueso25 , se constata una prevalencia cercana al 1% para este pamidronato, risedronato y zoledronato7,18,31 . Por ello se
tipo de fracturas26 . considera que no existe una relación unívoca entre el alen-
La incidencia de las fracturas subtrocantéricas en general dronato y el incremento del riesgo de este tipo de fracturas,
parece permanecer estable en el tiempo, con cifras inferio- sino posiblemente una asociación tipo «efecto de clase» para
res a 30 casos por 100.000 habitantes/año, en contraposición todos los bifosfonatos. Sí pudiera ser cierto, que el mayor
con la de las fracturas de cuello femoral y pertrocantéricas grado de afinidad por la hidroxiapatita ósea de los amino-
que han visto, en mujeres, disminuir su incidencia de 600 a bifosfonatos en general, y en particular del alendronato,
400 casos por 100.000 habitantes/año entre 1996 y 200627 . pudiera verse reflejada en un mayor grado de absorción, una
Estos datos confirmarían el hecho de que la incidencia de mayor potencia antirresortiva y una mayor persistencia del
fracturas osteoporóticas de cadera ha disminuido en gene- fármaco en el hueso32 , circunstancias que facilitarían una
ral desde la comercialización de los bifosfonatos, mientras inhibición prolongada en el tiempo del remodelado óseo.
que la incidencia de las subtrocantéricas y diafisarias no ha Para la mayoría de los autores, éste sería el sustrato fisio-
variado. patológico fundamental subyacente en esta asociación. La
No obstante, hay que tener en cuenta que el hecho de marcada y mantenida supresión del remodelado óseo que
que la incidencia general de las fracturas subtrocantéricas estos fármacos antiosteoporóticos originan favorecería por
permanezca estable puede enmascarar la presencia de un un lado, la aparición de alteraciones de la mineralización
mayor número de fracturas atípicas, ya que si bien el uso de (incremento del grado de aposición mineral con disminu-
bifosfonatos podría reducir el número de fracturas osteo- ción de la heterogenicidad de la misma) y, por otro, de un
poróticas «típicas», su uso prolongado podría aumentar el acúmulo de microfracturas que producirían pese al aumento
de atípicas, compensando en cierta manera el resultado de la densidad mineral ósea un aumento de la fragilidad
estadístico final, sobre todo considerando que en muchos del hueso. Estas microfracturas tenderían a localizarse en
estudios epidemiológicos no se recogen los criterios radio- zonas de alta mineralización en el hueso cortical33 , teniendo
lógicos distintivos de este tipo de fracturas28 . por ello las zonas subtrocantérica y diafisaria del fémur una
Se estima que aproximadamente un 25% (17-29%) de especial susceptibilidad a sufrir este tipo de fracturas. Otras
todas las fracturas subtrocantéricas y diafisarias de fémur posibles alteraciones fisiopatológicas inducidas por los bifos-
presentan características que las pueden definir como atípi- fonatos que podrían estar también relacionadas con este
cas relacionadas con el uso prolongado de bifosfonatos29 . tipo de fracturas atípicas serían los cambios en el patrón
Más concretamente, en los estudios pivotales con bifos- normal del entrecruzamiento de las fibras de colágeno y las
fonatos, el riesgo de sufrir una fractura subtrocantérica alteraciones en las proporciones de maduración del mismo
o diafisaria de fémur se establece en 6 casos por 10.000 que estos fármacos inducen, así como la reducción de la
pacientes/año20 , cifra que se reduce de manera importante neovascularización local por el efecto antiangiogénico de
si se restringe el diagnóstico a las fracturas subtrocantéri- los bifosfonatos, circunstancia responsable de la existencia
cas radiológicamente atípicas. De esta manera, la incidencia de una menor vascularización periostal y por tanto de una
general de esta posible complicación del tratamiento con menor respuesta reparadora a la fractura de estrés21 .
bifosfonatos podría estimarse en 7,8 casos por 100.000 La marcada inhibición del remodelado óseo podría tener
personas/año para los pacientes mayores de 60 años. No además un efecto aditivo en el tiempo, especialmente si
obstante, un reciente estudio ha demostrado que esta inci- los bifosfonatos continúan acumulándose en el tejido óseo,
dencia de fracturas femorales atípicas se incrementa con circunstancia que desde el punto de vista fisiopatológico
el tiempo de exposición al fármaco, pasando de un 2 por pudiera ser muy relevante en la aparición fracturas atípicas
100.000 casos/año por cada dos años de uso de bifosfonatos del fémur. En este sentido, diferentes trabajos indican que el
a un 78 por 100.000 casos/año por cada 8 años de uso de efecto acumulativo de los bifosfonatos, y por tanto, la posi-
estos fármacos30 . bilidad de aparición de una hipersupresión del remodelado
Por tanto, la incidencia de fracturas atípicas relaciona- óseo, pudiera acaecer a partir de períodos de tratamiento
das con el uso prolongado de bifosfonatos parece ser muy de 5 o 7 años19,29 .
baja, tanto en comparación directa con el número de fractu- No obstante, los datos que se extraen de los análisis his-
ras subtrocantéricas o diafisarias de fémur en general como tológicos publicados hasta el momento no son concluyentes
indirecta en relación con el número de fracturas vertebra- a la hora de establecer como único factor etiopatogénico
les, no vertebrales y de cadera que son prevenidas por este esta inhibición mantenida del remodelado óseo19 . En este
tipo de fármacos21 . sentido es obligado destacar que no en todos los pacientes
con fractura atípica relacionada con el uso prolongado de
bifosfonatos se ha constatado una alteración en la resorción
Fisiopatología de las fracturas atípicas relacionadas ósea31 , y que cuando se han realizado análisis histológicos
con bifosfonatos postfractura de la zona subtrocantérica se han encontrado
osteoclastos con características morfológicas normales9 y
Aunque la relación entre bifosfonatos y fracturas atípicas patrones estructurales trabeculares también normales. Por
femorales es consistente, no se ha demostrado todavía una ello, hay autores que consideran que esta hipersupresión del
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remodelado no tiene por qué ser una consecuencia directa un engrosamiento cortical lateral, que puede ser el único
del tratamiento prolongado con bifosfonatos, sino una con- hallazgo en caso de fracturas incompletas o radiológica-
dición clínica preexistente, agravada posteriormente con el mente poco expresivas, circunstancia que sugiere no sólo
mismo31 . la presencia de una alteración en la respuesta a la trans-
Por tanto, se considera que en este tipo de fracturas han ferencia de cargas a ese nivel, sino también la cronicidad
de estar implicadas otro tipo de alteraciones generales, que del proceso. En ocasiones el engrosamiento cortical es más
asociadas a la inhibición mantenida del remodelado, y de generalizado, afectando a ambas corticales21 .
manera multifactorial, contribuyan a su aparición. Este aumento del grosor cortical debe ser considerado
Desde el punto de vista general, el hecho de que muchos como un predictor de fractura atípica inminente39 , razón
pacientes que han sufrido este tipo de fracturas asocien por la cual en los casos de fractura atípica unilateral se
una serie de comorbilidades que repercuten en el normal recomienda realizar una radiología simple AP/L del fémur
metabolismo óseo, como un hiperparatiroidismo secundario contralateral que incluya la totalidad de la diáfisis. Si esta
a deficiencia de vitamina D (que aumentaría la resorción prueba no resulta totalmente concluyente y el nivel de sos-
ósea), diabetes mellitus (que causaría una acumulación de pecha clínica es elevado estaría indicada la realización de
los productos avanzados finales de degradación de glucatión, una TAC, una RMN o una gammagrafía del fémur contralate-
y por tanto una mayor fragilidad ósea y riesgo de fractura), ral en busca de signos predictivos de la presencia de fractura
tratamiento con corticoides (que aumentaría la actividad por insuficiencia o de estrés en evolución21,36 (fig. 6). En
osteoclástica y disminuiría la osteblástica), tratamiento con estos casos, la TAC permitiría constatar un engrosamiento
inhibidores de la bomba de protones (relacionados per se con cortical focal, neoformación ósea periostal y/o la presencia
fractura de cadera) o terapia antirresortiva múltiple21 , hace de una tenue línea radiolucente indicativa de resorción focal
que se pueda resultar útil establecer una serie de subgrupos intracortical o de fractura de estrés en desarrollo21 . La RMN
de alto riesgo de sufrir este tipo de fracturas20 . demostraría típicamente edema en T1, hiperemia reactiva
Por tanto, a día de hoy, se puede concluir, que el meca- en T2 y neoformación ósea periostal en el caso de que se
nismo fisiopatológico último por el cual se desencadenan esté desarrollando una fractura por insuficiencia o estrés21 .
las fracturas atípicas relacionadas con el uso prolongado de La gammagrafía indicaría una zona unilateral o bilateral
bifosfonatos es desconocido, siendo probable que estos fár- de hipercaptación difusa con una zona central de máxima
macos jueguen su papel en el desarrollo de las mismas, pero captación normalmente localizada en la cortical lateral, a
no posible que ésta sea única condición para el desarrollo diferencia de las patologías infecciosas o tumorales, prima-
de las mismas. rias o secundarias del hueso, que aparecían centradas en el
espacio endomedular21 . Cualquiera de estas tres técnicas de
imagen ofrecen una mayor sensibilidad y especificidad que
Consideraciones diagnósticas de las fracturas la radiografía simple a la hora de detectar estadios iniciales
atípicas de fractura por insuficiencia o estrés21,31,32,40 .
De la misma manera, estas pruebas estarían indicadas en
Mientras que las fracturas de perfil osteoporótico general- el caso de que el paciente presentase síntomas prodrómi-
mente son secundarias a una caída, las fracturas atípicas se cos con radiografías normales o dudosas21 (fig. 6). En estos
producen en ocasiones de forma espontánea, precedidas de casos, en ocasiones las propias imágenes de la DEXA de con-
un traumatismo mínimo o simplemente durante la marcha21 . trol de tratamiento permiten detectar la neoformación ósea
Las que afectan al fémur, las más frecuentemente comunica- periostal indicativa de fractura por insuficiencia o fractura
das, aparecen en la región subtrocantérica (≥ 5 cm distales de estrés en evolución21 .
al trocánter menor) o en la diáfisis femoral34,35 . No obstante,
hay descritas fracturas atípicas en otras localizaciones
Consideraciones terapéuticas de las fracturas
menos habituales como el húmero, el sacro, el isquion, las
ramas pubianas, la tibia y los metatarsianos17,18,36 . atípicas
Desde el punto de vista clínico, los pacientes con
fracturas atípicas relacionadas con el uso prolongado de Las fracturas atípicas relacionadas con el tratamiento pro-
bifosfonatos asocian en ocasiones diferentes tipos de situa- longado con bifosfonatos presentan entre sus características
ciones comórbidas como la insuficiencia-deficiencia de cierta propensión al retardo de la consolidación (tabla
vitamina D, la hipofosfatemia, la artritis reumatoide, etc. 1)21,33,36 , razón por la cual la morbilidad de estas fractu-
y/o diversos tipos de tratamientos farmacológicos (gluco- ras es particularmente alta. Por ello, desde el punto de
corticoides, inhibidores de la bomba de protones, otros vista terapéutico, parece necesario establecer todos aque-
antiosteoporóticos, etc.), presentando en la mayoría de los llos procedimientos médicos y quirúrgicos que disminuyan la
casos síntomas prodrómicos como dolor en la ingle o el muslo posibilidad de esta complicación y faciliten su curación.
de duración e intensidad variable, o debilidad y sensación
de malestar atribuibles a otras causas22,37 . Consideraciones sobre el tratamiento quirúrgico
Cuando se producen, las fracturas pueden ser uni o Si bien es cierto que no existen todavía estudios controlados
bilaterales21,38 , incompletas o completas, teniendo estas que determinen el tipo de tratamiento quirúrgico a seguir
últimas un trazo habitualmente transversal o ligeramente en las fracturas, un reciente trabajo de revisión21 sugiere
oblicuo, no conminuto y con formación de una caracte- que en los casos de fractura atípica completa subtrocan-
rística espícula medial, normalmente con desplazamiento térica o diafisaria femoral, y debido a que los bifosfonatos
superior del fragmento distal y con una angulación en varo inhiben la remodelación osteoclástica, se recurra a un trata-
de la misma. Se puede apreciar en la mayoría de los casos miento que favorezca la curación por reparación encondral.
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Fracturas atípicas relacionadas con el uso prolongado de bifosfonatos. Estado de la situación 399

Figura 6 Algoritmo de diagnóstico y tratamiento de las fracturas atípicas relacionadas con el uso prolongado de bifosfonatos.

Por ello se recomienda en este tipo de fracturas el enclavado tro del clavo, para evitar problemas relacionados con las
intramedular con clavo largo fresado que proteja de refrac- estrecheces endostales cuando están presentes, facilitar la
tura la totalidad de la diáfisis femoral21 . Los dispositivos inserción del clavo de reconstrucción y prevenir una fractura
tipo tornillo deslizante placa, al no favorecer la reparación de la diáfisis remanente21 . El fragmento femoral proximal
encondral y al tener una alta tasa de fracasos no estarían posiblemente precise de un fresado adicional que facilite la
recomendadas como método de osteosíntesis de este tipo inserción del clavo elegido y evite la mal alineación de la
de fracturas21 . fractura21 .
Desde el punto de vista técnico, resulta extremadamente En el caso de fractura atípica incompleta subtrocantérica
importante desde nuestro punto de vista garantizar una o diafisaria femoral con dolor en el muslo se recomienda el
correcta reducción inicial de la fractura, que suele resultar enclavado endomedular profiláctico21 . En aquellos casos en
especialmente difícil en el caso de las fracturas subtrocan- los que el dolor sea mínimo, podría optarse por un período
téricas, debido tanto a la acción muscular como al propio previo de tratamiento conservador, manteniendo al paciente
trazo fracturario. Determinar correctamente el punto de en carga limitada con ayuda de bastones de codo o de un
entrada del clavo e iniciar la progresión manual a su tra- andador. No obstante, si no se consigue una mejoría clínica
vés suele resultar igualmente difícil debido a la extraña y radiológica razonable después de 2 o 3 meses con este
dureza que el hueso presenta. El canal endomedular debe tratamiento, se recomienda consistentemente el enclavado
ser sobre-fresado al menos 2,5 mm por encima del diáme- endomedular profiláctico, ya que en la mayoría de los casos
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400 J.R. Caeiro-Rey et al

la fractura evolucionará hacia una fractura completa21 . En elevado, se debe considerar firmemente la continuación del
los demás casos la protección de carga y la reducción de la tratamiento con bifosfonatos. Sin embargo los pacientes de
actividad física deben continuar hasta que desaparezca el bajo riesgo, en los que no se constate una fractura reciente
dolor y el edema óseo en la RMN21 . o una osteoporosis densitométrica (T score > —2,5) después
Tal y como hemos comentado anteriormente, en todos del curso terapéutico inicial, podrían beneficiarse de unas
los casos de fractura atípica completa e incompleta, estén «vacaciones terapéuticas», ya que basándonos en los casos
o no presentes los síntomas, se debe realizar una evalua- y series de fracturas atípicas subtrocantéricas y diafisarias
ción mediante técnicas de imagen del fémur contralateral femorales publicados hasta el momento, la duración media
en busca indicios de fractura por insuficiencia o fractura de de tratamiento con bifosfonatos en los pacientes con frac-
estrés en evolución21 (fig. 6). tura atípica es de 7 años. Si se deciden éstas, el reinicio del
Igualmente, sea cual sea el tipo de fractura atípica y el tratamiento antiosteoporótico con bifosfonatos u otra clase
tratamiento quirúrgico elegido para su manejo, se deben distinta de medicamentos, debe reevaluarse en base a la
de establecer siempre las medidas de tratamiento médico clínica y a las determinaciones de marcadores de remode-
recomendadas anteriormente, a fin de favorecer su curación lado óseo y DMO, considerado la reintroducción del mismo
y evitar en lo posible la aparición de complicaciones que en aquellos pacientes con mayor riesgo de fractura21 .
aumenten la morbilidad de las mismas. Debido a que más del 50% de los pacientes con fractu-
ras femorales atípicas relacionadas con el uso prolongado
de bisfosfonatos han tenido un pródromo de dolor en el
Consideraciones sobre el tratamiento médico muslo o la ingle antes de sufrir la fractura, resulta extre-
Desde el punto de vista médico tampoco existen en el madamente importante establecer medidas de información
momento actual estudios controlados que definan las estra- dirigidas a pacientes y médicos sobre este síntoma. Tal y
tegias a seguir tanto para la prevención como para el como comentamos anteriormente, la presencia de este pró-
tratamiento coadyuvante de las fracturas atípicas femorales dromos obligaría a la realización de una valoración mediante
relacionadas con el uso prolongado de bifosfonatos. técnicas de imagen de ambos fémures en busca indicios de
Desde el punto de vista de tratamiento médico coadyu- fractura por insuficiencia o fractura de estrés en evolución21
vante de las fracturas atípicas, lo primero a considerar es (fig. 6).
la supresión inmediata del tratamiento antirresortivo que
se venía tomando en todos aquellos pacientes con fractura
completa, incompleta o imágenes radiológicas que sugie- Otras consideraciones
ran insuficiencia o fractura de estrés en evolución21 . Además Si bien la primera alarma sobre la influencia que la supre-
de esta medida terapéutica se debe realizar un despistaje sión profunda y prolongada del remodelado óseo inducida
completo de las osteoporosis secundarias con evaluación por bifosfonatos pudiera tener sobre la resistencia mecá-
del metabolismo fosfocálcico, prestando especial atención nica del hueso la dio Ott en el año 20013 , fue el trabajo
y corrigiendo mediante una adecuada suplementación los de Odvina et al, el que realmente puso en tela de juicio la
déficits de vitamina D. Debido a que en algunos casos relación entre esta alteración fisiopatológica y la existen-
publicados el tratamiento con teriparatide (1-34 PTH) ha cia de un determinado tipo de fracturas subtrocantéricas y
demostrado mejorar la consolidación de las fracturas redu- mediodiafisarias del fémur4 . Desde entonces, se han descrito
ciendo el riesgo de pseudoartrosis, parece indicado, aún en varios casos aislados y alguna serie procedente de estudios
ausencia de una evidencia científica definitiva que lo ratifi- retrospectivos32,33,35,41 describiendo las características clíni-
que, la administración de este fármaco en los pacientes que cas y radiológicas de este tipo de fracturas y su relación con
han sufrido este tipo de fracturas, particularmente cuando la administración prolongada en el tiempo de aminobifosfo-
no haya evidencia de consolidación radiológica a las 4-6 natos.
semanas de la intervención quirúrgica21 . Dejando a un lado la revisión de los artículos que simple-
Desde el punto de vista de tratamiento preventivo de mente aportan un reporte de casos clínicos, analizaremos
las fracturas atípicas, lo primero a considerar obviamente, brevemente los trabajos que a nuestro entender reflexio-
es que la decisión de iniciar o no un tratamiento de la nan y proporcionan consideraciones estructuradas, tanto en
osteoporosis con bifosfonatos debe ser absolutamente indi- favor o en contra, sobre la mencionada relación causal.
vidualizada y basarse en una correcta evaluación de la Neviaser et al, en el año 2008 analizan retrospectiva-
relación riesgo/beneficio que conlleva. mente las fracturas subtrocantéricas y de la diáfisis femoral
Definida ésta, lo segundo a considerar sería la duración producidas por un mecanismo de baja energía en un período
óptima de esta intervención. Si bien parece claro que los aproximado de unos 5 años, demostrando que el 36% de estos
pacientes con osteoporosis a tratamiento con bifosfonatos se pacientes recibían terapia previa con alendronato, y que el
benefician de una importante reducción del riesgo de frac- 76% de éstos presentaban un patrón atípico de fractura de
tura durante al menos 5 años, el uso continuado de este trazo simple horizontal y con un pico lateral en un área de
tratamiento más allá de ese tiempo debe ser reevaluado hipertrofia cortical. Los autores concluyen que la terapia
anualmente, utilizando para ello escalas de evaluación del prolongada con este fármaco podría estar relacionada con
riesgo de fractura tipo FRAX® , la propia historia personal la aparición de este tipo de fracturas41 .
de aparición de fracturas por fragilidad, la evaluación de Un año más tarde Lenart et al, realizan un estudio retros-
la DMO (particularmente en la región de cadera) y/o la pre- pectivo caso control con la misma cohorte de pacientes
sencia de condiciones médicas o farmacológicas subyacentes del estudio de Neviaser, comparándolos con pacientes que
que afecten a la resistencia ósea21 . Para aquellos pacientes habían sufrido una fractura intertrocantérica o de cue-
en los que el riesgo de fractura siga siendo moderadamente llo femoral en el mismo período de tiempo. El uso de
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Fracturas atípicas relacionadas con el uso prolongado de bifosfonatos. Estado de la situación 401

bifosfonatos estuvo presente en 15 de las 41 fracturas sub- para las que recibían un tratamiento durante mayor tiempo
trocantéricas evaluadas (37%) y sólo en 9 de los 82 pacientes (hasta 9 años) que para las recibieron menor dosis acumu-
que habían sufrido una fractura pertrocantérica o del cuello lativa. Por ello, en vista de estos resultados y matizando
del fémur (11%), para una odds ratio de 4,44 (IC 1,77-11,35). levemente lo anteriormente publicado, concluyen que el
En 10 de las 41 fracturas subtrocantéricas recopiladas se riesgo de fractura subtrocantérica o diafisaria de fémur es
apreciaba el patrón radiológico atípico característico de mayor en las pacientes tratadas con bifosfonatos, pero sin
trazo de fractura horizontal en el contexto de una cortical relación con el tiempo de duración de la terapia, con lo
engrosada. Además, la duración de la terapia con bifosfona- que establecen que el origen más probable de este tipo
tos resultó ser significativamente mayor en el primer grupo de fracturas radica en la propia osteoporosis más que en
de fracturas que en el segundo. Los autores concluyen que en el tratamiento con estos fármacos.
los pacientes que toman bifosfonatos existe un mayor por- También muy recientemente, Black et al, en un análi-
centaje de fracturas subtrocantéricas de baja energía que sis combinado post-hoc de los ensayos clínicos FIT, FLEX
fracturas de la zona pertrocantérica o cervical del fémur29 . y HORIZON, concluyen que la incidencia de las fracturas
En el año 2010, Isaacs et al, publican un análisis com- subtrocantéricas o de la diáfisis femoral que se pueden
parativo de 100 pacientes con fracturas de baja energía de relacionar con el tratamiento prolongado de bifosfonatos,
la diáfisis femoral antes y después de la introducción de los incluso tras un período de 10 años, es muy baja, no obser-
bifosfonatos (21 entre 1995 y 1997 y 79 entre el 2007 y 2009). vándose un incremento del riesgo relativo significativo en
De todos estos pacientes se identificaron a aquellos con frac- ninguno de los tres estudios. Los autores consideran, por
turas que se podían considerar por insuficiencia, y dentro de tanto, que no existe un aumento significativo del riesgo de
ellos a aquellos que cumpliendo esos criterios recibían tra- padecer este tipo de fracturas en estos pacientes20 .
tamiento con bifosfonatos, registrando en total 41 pacientes En una revisión sistemática de las principales series de
con fracturas de estas características. Veintinueve de estos casos publicadas en la literatura, Giusti et al concluyen que
pacientes (71%) presentaban además síntomas prodrómi- si bien la terapia con bifosfonatos está presente en la mayor
cos dolorosos y 18 (44%) fracturas bilaterales. Los autores parte de los casos, no es una circunstancia indispensable
concluyen que la terapia mantenida con bifosfonatos está para el desarrollo de este tipo de fracturas, estando impli-
asociada a este tipo de fracturas por insuficiencia42 . cadas probablemente otras condiciones, como la terapia con
Park-Wyllie et al, en un trabajo muy recientemente publi- corticoides o con inhibidores de la bomba de protones. Estos
cado en el que se analiza una cohorte de 9.723 mujeres resultados hacen concluir a los autores que, en base a estos
mayores de 68 años que iniciaron el tratamiento con bifos- factores, pueden existir determinados tipos de pacientes
fonatos entre los años 2002 y 2008, establecen que el con una especial predisposición a sufrir este tipo de fractu-
tratamiento con estos fármacos durante más de 5 años efec- ras, condicionantes que deben ser identificados en el futuro
tivamente incrementa el riesgo de sufrir una fractura atípica mediante estudios prospectivos bien diseñados19 .
subtrocantérica o de la diáfisis femoral, aunque el riesgo En la excelente revisión del grupo de trabajo de la Ameri-
absoluto sea bajo. Ante estos resultados los autores plantean can Society for Bone and Mineral Research (ASBMR), liderado
la necesidad de establecer el riesgo individual de fractura por Elizabeth Shane21 , se establece que en base a los datos
atípica para cada paciente, y teniendo en cuenta este riesgo, publicados hasta el momento la incidencia de este tipo de
replantear o suspender el tratamiento (vacaciones terapéu- fracturas se puede considerar muy baja, sobre todo en rela-
ticas) en aquellos pacientes en los que el riesgo de sufrir una ción con la cantidad de fracturas de perfil osteoporótico
fractura de perfil osteoporótico sea bajo43 . que se previenen con este tipo de tratamiento. Se reco-
Pero en contraposición a estos trabajos a favor de la noce igualmente la imposibilidad de establecer una relación
relación causal entre administración prolongada de bifosfo- causal entre bifosfonatos y fracturas atípicas, aunque sí se
natos y las fracturas atípicas, han aparecido recientemente señala que el riesgo de este tipo de fracturas aumenta a
trabajos científicos bien estructurados que no permiten medida que aumenta la exposición al fármaco, haciendo una
establecer fielmente dicha asociación. llamada de atención para establecer modelos de investiga-
Así, Abrahamsen et al, en una revisión de una amplia ción que determinen el real alcance de esta patología y la
cohorte danesa, destacan que sólo un 7% de los pacien- posible relación entre la misma y el tratamiento prolongado
tes con fracturas consideradas atípicas recibían tratamiento con estos fármacos.
con alendronato, el mismo porcentaje que presentaban los En otra interesantísima revisión de la European Society
pacientes que habían sufrido una fractura de cadera de per- on Clinical and Economic Aspects of Osteoporosis and
fil osteoporótico, concluyendo que este tipo de fracturas se Osteoarthritis (ESCEO) y la Intenational Osteoporosis Foun-
pueden considerar como una mera consecuencia de la enfer- dation (IOF)46 , recientemente publicada, se revisa la
medad osteoporótica, y no como una complicación sensu evidencia de la relación existente entre fracturas atípi-
estricto de la terapia con bifosfonatos44 . cas y el uso prolongado con bifosfonatos. En ella, si bien
Los mismos autores, en una revisión posterior reciente- se reconoce la existencia de una relación, no fehaciente-
mente publicada45 , investigan el riesgo de sufrir una fractura mente demostrada, con el uso prolongado de alendronato
subtrocantérica o diafisaria de fémur en mujeres que reci- que no puede extrapolarse todavía a otros bifosfonatos,
ben tratamiento con alendronato frente a un grupo control, se establece igualmente que la relación riesgo de fractura
evaluando además el tiempo total de tratamiento-dosis acu- atípica-beneficio en protección antifractura osteoporótica
mulada y su relación con este tipo de fracturas. Frente es favorable al uso de estos fármacos, ya que las fracturas
a las 13 fracturas por 10.000 pacientes/año en el grupo que se evitan son muy superiores a las que teóricamente
de mujeres no tratadas ocurrieron 31 fracturas por 10.000 podrían producirse con el uso continuado de estos fármacos
pacientes/año en el de las tratadas, con un riesgo similar durante más de 5 años.
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402 J.R. Caeiro-Rey et al

Conclusiones sentan entre sus características cierta propensión al retardo


de la consolidación.
A pesar de que de los principales estudios de seguimiento Ante un paciente con tratamiento prolongado con bifos-
a largo plazo con bifosfonatos se puede extrapolar una muy fonatos que refiera dolor en la ingle o en el muslo de forma
baja incidencia de fracturas atípicas subtrocantéricas o dia- continuada y en todos los casos de fractura atípica unilateral
fisarias de fémur, y que en la literatura publicada al respecto completa e incompleta, estén o no presentes los síntomas,
se encuentran muy pocos informes de casos clínicos o de se recomienda realizar una radiología simple AP/L del fémur
revisiones que hayan demostrado un mayor riesgo de este contralateral que incluya la totalidad de la diáfisis. Si esta
tipo de fracturas entre los usuarios de esta medicación, su prueba no resulta totalmente concluyente y el nivel de sos-
aparición ha generado, sin duda alguna, cierta alarma entre pecha clínica es elevado estaría indicada la realización de
los profesionales de la sanidad con dedicación a este tipo de una TAC, una RMN o una gammagrafía del fémur contralate-
patología. ral en busca de signos predictivos de la presencia de fractura
Por ello, entidades como la ASBMR, ESCEO o la propia IOF, por insuficiencia o de estrés en evolución.
en sus documentos de consenso sobre fracturas atípicas rela- Las fracturas atípicas completas subtrocantéricas o diafi-
cionadas con el tratamiento prolongado con bifosfonatos21,44 sarias femorales requieren una osteosíntesis eficaz mediante
consideran que si bien no se puede establecer una clara enclavado intramedular con clavo largo fresado que proteja
relación causal con la terapia con bifosfonatos, es necesaria de refractura la totalidad de la diáfisis femoral. En las frac-
una más profunda investigación epidemiológica y una mayor turas atípicas incompletas con dolor en el muslo, sobre todo
cantidad de estudios bien diseñados para caracterizar y defi- si no han respondido al tratamiento conservador, pudiera
nir con claridad la fisiopatología de este tipo de fracturas, estar recomendado el enclavado endomedular profiláctico.
para de ese modo poder establecer tanto su importancia Supresión inmediata del bifosfonato que se venía
como todos aquellos factores de riesgo que pudieran estar tomando en todos aquellos pacientes con fractura completa,
relacionados con las mismas. incompleta o imágenes radiológicas que sugieran insuficien-
En este mismo sentido, si bien es cierto que la supresión cia o fractura de estrés en evolución.
del remodelado óseo que origina el tratamiento prolongado Aún en ausencia de una evidencia científica definitiva que
con bifosfonatos pudiera tener cierta influencia en la apa- lo ratifique, la administración de teriparatide (1-34 PTH) en
rición de fracturas atípicas en pacientes con una condición los pacientes que han sufrido este tipo de fracturas parece
ósea prepatológica no claramente establecida, y que proba- indicada, particularmente cuando no haya evidencia de con-
blemente coincida con la de los pacientes con alto riesgo de solidación radiológica a las 4-6 semanas de la intervención
sufrir fracturas de perfil osteoporótico en general, no debe- quirúrgica.
mos olvidar los beneficios que este tratamiento supone para Se requieren estudios prospectivos bien diseñados, para
los pacientes con osteoporosis. establecer realmente el riesgo de padecer este tipo de frac-
Por lo tanto, y a modo de recapitulación final, desde el turas y su posible relación con este tratamiento. Es necesario
grupo GEIOS nos gustaría exponer una serie de posibles refle- crear códigos diagnósticos específicos para facilitar su regis-
xiones y consideraciones con respecto a las fracturas atípicas tro, promover su estudio y establecer un adecuado manejo
relacionadas con el tratamiento prolongado con bifosfona- médico-quirúrgico.
tos: En el momento actual, a tenor de la bibliografía dis-
Los bifosfonatos son fármacos antiosteoporóticos alta- ponible, los bifosfonatos continúan siendo el tratamiento
mente eficaces en la prevención de fracturas vertebrales estándar de la osteoporosis, no habiendo motivo de alarma
y no vertebrales, incluidas las de la cadera. Están consi- que justifique la no prescripción o retirada de los mismos por
derados fármacos seguros con escasa incidencia de efectos esta causa en pacientes con osteoporosis o fractura osteo-
adversos. porótica.
La incidencia de fracturas atípicas en los pacientes trata- La decisión de iniciar o no un tratamiento de la
dos con bifosfonatos es extremadamente baja, no afectando osteoporosis con bifosfonatos debe ser absolutamente indi-
a la relación riesgo/beneficio de estos fármacos. vidualizada y basarse en una correcta evaluación de la
No se puede establecer una relación causal entre el relación riesgo/beneficio que conlleva. Si bien parece claro
tratamiento prolongado con bifosfonatos y la aparición de que los pacientes con osteoporosis a tratamiento con bifos-
fracturas atípicas, siendo probable que estos fármacos jue- fonatos se benefician de una importante reducción del riesgo
guen un papel en el desarrollo de las mismas, pero no posible de fractura durante al menos 5 años, el uso continuado de
que ésta sea única condición para el desarrollo de las mis- este tratamiento más allá de ese tiempo debe ser reevaluado
mas. anualmente. Para aquellos pacientes en los que el riesgo
La incidencia de fracturas femorales atípicas se incre- de fractura siga siendo moderadamente elevado, se debe
menta con el tiempo de exposición a los bifosfonatos. La considerar firmemente la continuación del tratamiento con
duración media de tratamiento con bifosfonatos en los bifosfonatos. Sin embargo, los pacientes de bajo riesgo, en
pacientes con fractura atípica femoral es de 7 años. los que no se constate una fractura reciente o una osteo-
Las fracturas atípicas relacionadas con el tratamiento porosis densitométrica (T score > —2,5) después del curso
prolongado con bifosfonatos pueden ser uni o bilaterales, terapéutico inicial podrían beneficiarse de unas «vacaciones
incompletas o completas. Radiológicamente se caracterizan terapéuticas».
por presentar un trazo habitualmente transversal o lige-
ramente oblicuo, no conminuto y con formación de una Nivel de evidencia
característica espícula medial. Se puede apreciar en la
mayoría de los casos un engrosamiento cortical lateral. Pre- Opinión de expertos. Nivel de evidencia V.
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Fracturas atípicas relacionadas con el uso prolongado de bifosfonatos. Estado de la situación 403

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