Está en la página 1de 5

BLOQUE 9: LA DICTADURA DE PRIMO DE RIVERA (1923-1931)

ÍNDICE

1. INTRODUCCIÓN
2. LA QUIEBRA DEL RÉGIMEN CONSTITUCIONAL
3. EL DIRECTORIO MILITAR (1923-1925)
4. EL DIRECTORIO CIVIL (1925-1930)
5. LA ORGANIZACIÓN CORPORATIVISTA DEL ESTADO
6. LA OPOSICIÓN A LA DICTADURA
7. CONCLUSIÓN: ¿POR QUÉ CAYÓ LA MONARQUÍA EN 1931?

1.INTRODUCCIÓN

La dictadura de Miguel Primo de Rivera se engloba dentro de la crisis de la Restauración


borbónica (1902-1931). El reinado de Alfonso XIII coincidió con la larga crisis y el colapso
final del sistema de la Restauración. A la incapacidad del régimen para ampliar su base
social se unieron dos problemas: las consecuencias del desastre del 98, la división y
fragmentación de los partidos del turno, el paulatino incremento de la oposición, la guerra en
Marruecos y la creciente conflictividad social. Aunque el sistema de la Restauración
sobrevivió a la semana trágica (1909), a la crisis de 1917 (conflicto obrero, militar y político)
y el desastre de Annual (1921), el apoyo del rey Alfonso XIII al pronunciamiento de Primo de
Rivera en 1923 supuso el fin de su tapa constitucional, si bien la monarquía logró
mantenerse hasta 1931.

2. LA QUIEBRA DEL RÉGIMEN CONSTITUCIONAL

En 1923, un gobierno liberal presidido por García Prieto pretendió llevar a cabo una reforma
de la Constitución (1876) y de la ley electoral, incluyendo una mayor democratización del
sistema, la reducción de la influencia de la iglesia y la limitación de poderes del rey. A pesar
de contar con una clara mayoría en las Cortes, el proyecto se vio obstaculizado por la
oposición del rey Alfonso XIII, del ejército y de la iglesia. A pesar de contar con una clara
mayoría en las Cortes, el proyecto se vio obstaculizado por la oposición del rey Alfonso XIII
del ejército y de la iglesia.

Entre los militares existía un gran descontento por las responsabilidades que el Expediente
Picasso exigía ante el desastre militar de Annual (1921). Para frenar la reformas impulsadas
por el gobierno liberal e impedir el debate del Expediente en las Cortes, que ejercía Miguel
primo de rivera (el capitán General de Cataluña), impulsó un golpe estado militar un golpe
de estado militar el 13 de septiembre de 1923. El rey se negó a destituir a los sublevados y
el gobierno dimitió.

Primo de Rivera justificó su actuación en un manifiesto dirigido a la nación, en el que


culpaba de desgobierno a los políticos y partidos tradicionales y declaraba su intención de
regenerar la política nacional, acabar con el caciquismo y la corrupción, recuperar el orden
público, poner fin a la conflictividad obrera y garantizar la unidad nacional ante el auge de
los nacionalismos. La alta burguesía, parte de la clase media y del ejército, así como el rey
y su entorno, aceptaron la dictadura como una solución a la crisis.

La mayoría de la población reaccionó con indiferencia o fue favorable al golpe de estado. Se


esperaba que el nuevo régimen tuviera un carácter temporal. Por ello, la dictadura apenas
contó inicialmente con una oposición.

3. EL DIRECTORIO MILITAR (1923-1925)

Alfonso XIII nombró a Primo de Rivera presidente del directorio, un gobierno integrado
exclusivamente por militares. Sus primeras medidas fueron: la declaración del estado de
guerra en todo el país, la suspensión de la Constitución, la disolución del Parlamento y la
ilegalización de los partidos políticos y organizaciones obreras. También liquidó la
mancomunidad catalana.

Para acabar con el caciquismo, el directorio elaboró una serie de medidas: los
gobernadores civiles son sustituidos por gobernadores militares, disolvió los ayuntamientos,
los reemplazó por juntas de vocales designados entre los mayores contribuyentes de la
localidad y elaboró un estatuto municipal y otro provincial.

También instauró una política de orden público muy represiva, que se dirigió
fundamentalmente hacia la CNT (anarquista). Se prohibieron las manifestaciones y huelgas,
y se persiguió y encarceló a los dirigentes obreros. La represión redujo drásticamente los
conflictos laborales y puso fin a la violencia social del pistolerismo en las calles.

Consciente de la importancia de mantener el apoyo del ejército, Primo de Rivera intentó


resolver la cuestión de Marruecos y en 1925, intervino militarmente en el RIF. Los ataques
contra el protectorado francés, dirigidos por el líder rifeño Abd el-Krim, propiciaron la
colaboración militar entre España y Francia, que se concretó en el desembarco español en
la bahía de Alhucemas (1925). Estas acciones militares conjuntas supusieron la derrota
definitiva del líder rifeño Abd el-Krim y el final de la guerra de Marruecos.

El pretendido carácter regeneracionista del Directorio se concretó en una legislación social:


reguló el trabajo de la mujer, promovió la construcción de viviendas obreras e impulsó una
política de inversión en obras públicas para reducir el desempleo. Estos primeros éxitos
dieron popularidad a Primo de Rivera, que a finales de 1925 decidió cambiar la composición
del directorio.

4. EL DIRECTORIO CIVIL (1925-1930)

Con el objetivo de regresar a la “normalidad'', institucionalizando el nuevo régimen y


cediendo protagonismo a los civiles frente a los militares. Para ello se formó un nuevo
gobierno presidido por Primo de Rivera, del que formaban parte técnicos civiles como José
Calvo Sotelo, ministro de Hacienda.

Esta transformación mostraba que Primo de Rivera pretendía consolidarse en el poder y


contar con el apoyo de los sectores conservadores, de la banca y de la industria. Para
emprender una reactivación de la economía basada en el nacionalismo económico y el
dirigismo estatal, el Directorio Civil llevó a cabo una reorganización de la instituciones del
Estado, siguiendo el modelo corporativo implantado en Italia por Mussolini. En 1924 habría
que haber creado una nueva formación política, la Unión Patriótica, un partido
gubernamental, sin ideología definida, cuya misión primordial era proporcionar apoyo social
a la dictadura.

A la nueva formación política se unieron principalmente funcionarios del régimen,


integrantes de organizaciones católicas, militares y propietarios locales de las zonas rurales.

Como órgano auxiliar del partido el directorio creó el Somatén, una fuerza armada
ciudadana con capacidad para apoyar a la policía y el ejército en momentos de conflictos
internos.

5. LA ORGANIZACIÓN CORPORATIVISTA DEL ESTADO

Con la finalidad de institucionalizar el nuevo régimen, se convocó una Asamblea Nacional


Consultiva. Se trata de un organismo corporativo, compuesto por representantes de las
corporaciones elegidos por sufragio indirecto, por funcionarios de la Administración y por
representantes sociales escogidos desde el poder. Se suprimió el sufragio universal y dos
tercios fueron nombrados directamente por el gobierno. Su función fue meramente
consultiva y siempre actuó bajo control gubernamental.

La Asamblea debía encargarse de elaborar un Estatuto Fundamental de la Monarquía a


modo de Constitución. El proyecto establecía un régimen autoritario en el que el poder
legislativo radicaría en las Cortes y el monarca. La mala acogida que tuvo el proyecto entre
la opinión pública hizo que no llegase nunca a ser aprobado.

También se fundó el Consejo de Trabajo u Organización Corporativa Nacional. Se trataba


de un sindicato de tipo vertical que incluía la representación de obreros y empresarios de
los llamados Comités Partidarios. Su misión era la reglamentación de los salarios y las
condiciones de trabajo, así como la negociación entre patronos y trabajadores, aunque
siempre bajo control del Estado.

6. LA OPOSICIÓN A LA DICTADURA

La oposición fue creciendo con el paso de los años e impulsó actuaciones para poner fin a
la dictadura. Algunos de los antiguos líderes de los partidos dinásticos criticaron la excesiva
duración del régimen y apoyaron conspiraciones militares como la llamada “san juanada” de
1926, que fracasó.

la oposición tuvo diferentes grupos:

● Los republicanos organizaron la Alianza Republicana. Incluía republicanos históricos


como Lerroux, otros más recientes procedentes del reformismo, como Manuel
Azaña, o incluso antiguos ministros de la monarquía, como Niceto Alcalá Zamora (se
pasó al republicanismo).
● Los intelectuales y estudiantes universitarios criticaron la dictadura y denunciaron la
censura de prensa y la falta de libertad de expresión. Algunos de ellos sufrieron la
persecución del régimen: Miguel de Unamuno fue desterrado a Fuerteventura y
Blanco Ibáñez tuvo que exiliarse.

● La burguesía catalana se unió a la oposición como resultado de la política del


Directorio, que eliminó la Mancomunidad. Esto incrementó la influencia catalana de
grupos nacionalistas radicales, como Estat Català, liderado por Francesc Macià
desde el exilio.

● La oposición obrera se centró fundamentalmente en la CNT y en el entonces


pequeño Partido Comunista de España, que fueron perseguidos y prohibidos. Con el
objetivo de incrementar la influencia anarquista en el interior de la CNT, se constituyó
la Federación Anarquista Ibérica (FAI).

7. CONCLUSIÓN: ¿POR QUÉ CAYÓ LA MONARQUÍA EN 1931?

La crisis económica mundial iniciada en 1929 (Crack de la Bolsa de Nueva York) alcanzó
también España, donde ocasionó un rápido incremento del desempleo y un creciente
descontento social. Ante la nueva coyuntura, la dictadura fue perdiendo paulatinamente los
apoyos de sus inicios.

El 29 enero de 1930, Primo de Rivera, gravemente enfermo, presentó su dimisión a Alfonso


XIII, que la aceptó. Dos meses después, el dictador fallecía en su exilio en París. Alfonso
XIII trató de volver al régimen constitucional existente hasta 1923, y a tal fin nombró jefe de
Gobierno al general Berenguer, inaugurando la “dictablanda''.

La oposición republicana se movilizó rápidamente, y en 1930 estableció el Pacto de San


Sebastián (promovido por la Alianza Republicana), un acuerdo para poner fin a la
monarquía, al que se unieron socialistas y algunos intelectuales.

También se creó un Comité Revolucionario presidido por Niceto Alcalá Zamora, se preparó
una huelga general (que no llegó a realizarse) y un pronunciamiento militar (que fracasó)
para forzar la proclamación de la república. Los capitanes Galán y García Hernández, se
sublevaron en Jaca al grito de “Viva la República española''. La sublevación de Jaca fue
derrotada por una columna militar, y sus dirigentes, hechos prisioneros, juzgados,
condenados a muerte y finalmente ejecutados.

En 1931, el almirante Aznar formó un nuevo gobierno. Como parte de la estrategia para
volver al sistema parlamentario constitucional, se convocaron elecciones municipales para
el 12 de abril de 1931. Estos comicios se convirtieron en un plebiscito sobre la monarquía y
fueron ganados por las candidaturas republicanas. El 14 de abril de 1931 era proclamada la
Segunda República Española y el Comité Revolucionario, presidido por Niceto Alcalá
Zamora, se convirtió en gobierno provisional. Ese mismo día, el rey abandonó España
camino del exilio.

El fin de la monarquía no fue el resultado de una revolución, sino el deterioro del propio
sistema político. El colapso de 1931 fue el resultado de una larga crisis institucional que los
gobiernos de la monarquía fueron incapaces de resolver y que acabó primero con el
sistema constitucional de la Restauración y, finalmente, con la propia monarquía restaurada.

También podría gustarte