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Hora Santa; por las familias voluntarias que cuidan y atienden a las personas con
capacidades diferentes
Bendita sea la Santa e indivisible Trinidad, ahora y siempre y por los siglos de los siglos. Amen.
V. Abrid, Señor mis labios.
R. y mi voz proclamará tu alabanza.
V. Señor ven en mi auxilio.
R. date prisa en socorrerme.
Gloria al Padre y al Hijo, y al Espíritu Santo,
Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amen.
Acto de Contrición:
“Amorosísimo Dios, uno y trino, Padre, Hijo y Espíritu Santo, en quien creo, en quien espero, a
quien amo con todo mi corazón, cuerpo y alma, sentido y potencias, y por ser voz mi Padre,
mi señor y mi Dios infinitamente bueno y digno de ser amado sobre todas las cosas, me pesa,
Trinidad Misericordiosa, me pesa, Trinidad amabilísima, me pesa, Trinidad Santísima, de
haberlos ofendido solo por ser vos quien soy: propongo y os doy palabra de nunca más
ofenderlos, y de morir antes de pecar; espero en vuestra suma bondad y misericordia infinita
que me habéis de perdonar todos mis pecados y me deberéis gracia para perseverar en un
verdadero amor y cordialísima devoción vuestra siempre amabilísima Trinidad. Amen.”
Oración: Hoy Señor, estamos presentes ante Ti, para adorarte y alabarte en esta Hora Santa
que te haces presente entre nosotros y nos llenas de tu amor infinito.
Padre Nuestro… Ave María… Gloria…
V. En los cielos y en la tierra sea por siempre alabado
R. El corazón amoroso de Jesús Sacramentado.
Oración: Amabilísimo Señor, Dios uno y trino, dadnos continuamente vuestra gracia, vuestra
caridad y la comunicación de voz par que en tiempo y eternidad os amemos y glorifiquemos,
Padre, Hijo y Espíritu Santo, una Deidad, por infinitos siglos de los Siglos. Amen.
Padre Nuestro… Ave María… Gloria…
V. En los cielos y en la tierra sea por siempre alabado
R. El corazón amoroso de Jesús Sacramentado.
Oración: Señor, Te pedimos que nunca perdamos la esperanza, que día a día de acreciente y
podamos estar dándote gracias por todas las bendiciones que nos das y en especial por haberte
quedado en el Santísimo Sacramento.
Padre Nuestro… Ave María… Gloria…
V. En los cielos y en la tierra sea por siempre alabado
R. El corazón amoroso de Jesús Sacramentado.
Y pido perdón por aquellos que no Creen, que no Esperan, que no Adoran y que no Aman, gracias Jesús
porque nos permites encontrarnos contigo, porque la Adoración es un encuentro con Jesús, un
encuentro con el Señor, un encuentro con el pan de vida, queremos pedirte, que aumentes nuestra fe,
tu que estás perdiendo la fe, tu que te estas debilitando en la fe, Señor auméntanos la fe, Alabado seas,
Bendito seas Jesús, abrimos nuestros labios y nuestro corazón, cantamos todos…
Señor cero pero aumentas mi fe, Señor hoy te pido el milagro de la fe, hoy te pido Jesús que me ayudes
a creer, como tantos en el evangelio, que recibieron milagros y bendiciones de ti, porque creyeron -
porque tuvieron fe, dame Señor la fe necesaria, para que en esta << Tarde >> pueda recibir esa
bendición, pueda recibir esa gracia, pueda recibir ese milagro, en mi vida - en mi matrimonio y en mi
familia, aquí esta Jesús, aquí está el Señor, el Dios vivo, el Dios Grande, el Dios todo poderoso, que
nuestros labios confiesen, que Jesús es el Señor, que en nuestro corazón creamos, que Jesús es el Señor,
Alabado Seas, Bendito seas Jesús, cantamos todos…
¿Qué fácil es decirle al cónyuge o la cónyuge?, eres tú el culpable o la culpable, pero que difícil,
reconocer - que todos tenemos culpa, que difícil es reconocer que hemos fallado, que nos alejamos de
Dios, cuando Dios nos había bendecido tanto, cuando Dios se nos había manifestado con poder.
Hermanos y hermanas, antes de entrar en la oración, es necesario que pidamos perdón, que nos
arrepintamos, ya no busquemos culpables, ya no le echemos la culpa al otro - a la otra, ya no culpemos
a nuestros padres, es la hora - de ser humilde delante de Jesús.
En una oportunidad le preguntaron a Jesús, ¿Quién peco para que este hombre naciera ciego?, el o sus
padres, que fácil hermanos y hermanas, echar la culpa a los demás, pero hoy delante de Jesús, quiero
invitarte a que seamos humildes, a que reconozcamos que hemos fallado, que le hemos fallado al Señor,
que nos hemos fallado entre nosotros, no porque hayamos hechos cosas malas, sino porque no hicimos
el bien a nuestro cónyuge, <<esta Tarde>>… pidamos perdón al Señor, pidamos perdón a Jesús, porque
le hemos fallado a un Dios tan bueno, porque no hemos tenido ni siquiera una hora a la semana – para
dar le gracias en la Eucaristía, ¿por qué hemos estado llenos de tanto trabajo? – que ya no hay tiempo
para Dios, ¿por qué tenemos tantas cosas que hacer? – que ya no hay tiempo para Dios. ¿Por qué los
bienes materiales nos han absorbido?
Hermanos y hermanas - pidámosle perdón al Señor, porque no hemos orado, porque quizá la única vez
que fuimos al templo… fue el día de nuestra boda, Señor perdón – porque te he renegado en mi vida,
Señor perdón – porque otras cosas han sido más importantes que tú, ahora Señor reconozco que he
fallado, ahora Señor quizás estoy pagando las consecuencias de mi pecado, no porque tú me quieras
castigar, porque tu no castigas, son mis acciones, son mis omisiones - las que traen consecuencias tristes
y dolorosas, te pido perdón, porque le he fallado a los que digo amar, le he fallado a mi cónyuge, quizá
con palabras, con actitudes, con amenazas con gestos o quizá hasta con golpes.
Señor perdón, porque no he respetado a mi cónyuge, te pido perdón – porque quizá he caído en el
adulterio, aunque no he llegado a los hechos, pero si en mi mente, pero si en mi corazón, te pido perdón
Señor, porque no he tenido tiempo para mis hijos, porque no he tenido tiempo – para mi esposa - para
mi esposo, Señor te pido perdón – porque me he fallado yo mismo, me he hecho daño, quizá con vicios -
con alcohol – con droga – con mariguana – con pornografía – y quien sabe cuántas otras adicciones.
Con las cuales me estoy destruyendo, estoy destruyendo mi vida, estoy destruyendo mi matrimonio,
estoy destruyendo mi familia, Señor te pido perdón – por todo eso, y cuantas cosas de las cuales no me
acuerdo, Bendito seas Jesús, Alabado sea el Señor, todos y todas con humildad, pidamos perdón. Dice…
Si sientes un murmullo muy cerca de ti, Cuando los Ángeles pasan la iglesia se alegra,
un Ángel llegando para recibir, ella canta, ella llora, ella ríe y congrega,
todas tus oraciones y llevarlas al cielo. enfrenta al infierno, disipa el mal.
Así, abre el corazón y comienza a alabar, Siente la brisa del vuelo de tu Ángel ahora,
El gozo del cielo todo sobre el altar, confía hermano pues esta es tu hora,
Hay un Ángel llegando, la bendición llego y te la vas a llevar.
hay bendición en sus manos.
Hay Ángeles volando en este lugar,
Hay Ángeles volando en este lugar,
en medio del pueblo junto al altar,
en medio del pueblo junto al altar,
subiendo y bajando en todas las direcciones.
subiendo y bajando en todas las direcciones.
No sé si la iglesia subió o si el cielo bajo,
No sé si la iglesia subió o si el cielo bajo,
si sé que está lleno de Ángeles de Dios,
si sé que está lleno de Ángeles de Dios,
porque el mismo Dios está aquí.
porque el mismo Dios está aquí.
“Demos salmodias al que está ahí, vivo y presente hermano y hermana, levanta tu mirada a Jesús
Sacramentado, y unidos al coro de los Santos Ángeles, le Adoramos, le Exaltamos, y le Glorificamos, y
todos juntos como hijos de Él, le regalamos un fuerte aplauso, al príncipe de paz, al gobernador, al Rey
de Gloria y Majestad, Adóralo, Adórale con toda tu mente, Adórale con todas tus fuerzas, Adórale con
todo tu corazón, te Alabaran Señor todos los reyes de la tierra, porque es grande tu Gloria, porque es
inmenso tu poder, por eso hoy, unidos, al coro Celestial, cantamos todos juntos…”
Hay Ángeles volando en este lugar,
en medio del pueblo junto al altar,
subiendo y bajando en todas las direcciones.
Hermanito y hermanita, sin Dios no van a poder superar este momento, solamente el Señor puede
poner el bálsamo en ese corazón que está herido por el adulterio, el enemigo no quiere la felicidad, no
busquemos el culpable, busquemos la solución que es Cristo, ¡no busquemos quien tuvo la culpa!, sino
que busquemos la solución que es Cristo, es el único que puede sanar el corazón de usted hermanita
hermanito.
Señor cicatriza todo corazón, que sigue sangrando por el adulterio, ¡el Señor les conceda la gracia de
poder perdonar!, el vino de los hombres se termina, el vino de Jesús ese no se termina, el amor de los
hombres a veces termina, pero el de Dios ese nunca va a terminar – por eso hoy llénense del amor de
Jesús, ¡miren hacia delante!, miren hacia delante – no miren hacia atrás, el Señor sane – sane el corazón
de los dos, el señor Sane – que el Señor renueve el corazón de los dos.
Y oramos por los hijos, que son los que en primer lugar sufren las consecuencias del adulterio, quienes
no les pidieron nacer, ustedes los trajeron, ¡no les hagan daño!, no les hagan daño por ellos vale la pena
sufrir, por ellos vale la pena superar ente momento, el Señor los va a sacar - pero si ustedes lo
permiten, cicatriza Señor toda herida producida por la infidelidad, oramos por esos pequeños, oramos
por esos niños - que quizá no en tienden lo que pasa - entre sus papas, ¡el porqué de los gritos!, ¡el
porqué de las peleas!, ¡el porqué de los enojos!, ellos no entienden Señor, oramos por esos pequeños,
por esos niños, por esos adolecentes, para que el error de sus padres no lo valla a marcar para toda la
vida, Bendito seas Jesús, Alabado sea el Señor, que el amor de Jesús – hoy cicatrice toda herida Bendito
sea, producida… por la infidelidad… por el adulterio. Dice…
Señor – cicatriza toda herida, que ha sido producida por las adicciones por el alcohol, cuantas heridas
hay en las familias y en los matrimonios, a consecuencia de los vicios, sobre todo del alcohol, hijos
traumados, ¡hijos traumados por sus padres alcohólicos!, matrimonios – heridos y lastimados a
consecuencia del alcohol, cuántos hombres y mujeres – bajo los efectos del Licor o de las drogas, han
dañado – han lastimado, han ofendido voluntaria o involuntariamente, cuantos matrimonios – están
sufriendo a consecuencia de la droga, de la mariguana, de la cocaína, cuantos matrimonios están
sufriendo a consecuencia del alcoholismo, quizás estas a punto de perder el trabajo, el vicio destruye, el
vicio mata, todo vicio trae crisis económica, quizá hay matrimonios que están pasando crisis a
consecuencia del vicio, a consecuencia de la droga, a consecuencia de la prostitución, a consecuencia
del adulterio, todo pecado pasa la factura, Señor cicatriza con tu amor – esa familia – ese matrimonio -
que está sufriendo por el alcohol.
Señor pon tu mano en toda garganta alcohólica, pon tu mano Señor en todo vicio, juegos de azar, Señor
rompe toda cadena de adicción o de vicio, para no seguir dañando y lastimando a los que amo, Bendito
seas Jesús – Alabado sea el Señor, porque su amor nos sana, Bendito seas – Alabado seas Jesús, sígueme
sanando con tu amor, matrimonios que sufren por el alcohol, por la droga, por los juegos de azar, Dice…
Si mi señor… queremos orar por los matrimonios y las familias, que están heridas y lastimadas, por la
falta… de comunicación o entendimiento, matrimonios que no se hablan, hijos que no les hablan a sus
padres y padres que no les habla a sus hijos, no hay otra manera para resolver los problemas, que
hablando – que comunicando, lo dice la gente, la gente resuelve los problemas hablando, ¡hablando se
entiende la gente!, pero hay muchos que no se dirigen la palabra, su corazón esta tan lastimado – que
no son capases ni de saludar - menos de dialogar, hoy Señor, te pido que sanes el corazón – de esa
hermano o de ese hermano, donde no quiere haber comunicación, y si se habla es para lastimar, para
ofender, para seguir hiriendo.
Señor… oramos por esas familias y esos matrimonios que se están destruyendo, porque ahí no hay
comunicación, el Señor sano el corazón de la Samaritana ¡hablándole! – ¡platicándole! – ¡pidiéndole un
favor!, el Señor quiere sanar el corazón de los cónyuges, ¡pero es necesario que hablen! - ¡que
platiquen!, ¡que se sienten!, que se digan lo que llevan dentro, solamente así, el Señor cicatricé toda
herida producida por la falta de comunicación y entendimiento, Oh Alabado seas Jesús – Oh Bendito
seas Señor, el amor de Jesús hoy cicatricé toda herida, Bendito sea – Alabado sea… Dice.
Señor… sabemos que son muchas las heridas, que esta oración no hemos tocado, pero tú sabes y
conoces todo, queremos pedirte por aquellos que sufren sobre todo - una vida sin ti - una vida sin Dios,
hay familias y matrimonios que sufren – que están pasando momentos difíciles, por que alguno de sus
miembros no creen en Dios, no tienen una vida de fe, no se acuerdan de el – o solamente se acuerdan
en los momentos de crisis difíciles, solamente sabemos pedir, pero no sabemos ofrendarle nuestra vida,
cuantos matrimonios donde solamente uno de los dos – es hombre o mujer de fe, cuantas
incomprensiones – a causa de la fe – del servicio en la comunidad - de la entrega en la iglesia, cuantos
esposos que se molestan porque sus esposas sirven en la iglesia – pero no las acompañan.
Señor… cicatriza toda herida que ha producido la falta de fe, y aquellos que creen que no necesitan de ti,
y aquellos que son autosuficientes - confían en lo que tienen, pero no en Jesús, oramos por esos hijos
que van creciendo – sin un padre y una madre cristianos, no solo de pan vive el hombre, quizás en los
mejores colegios, quizá con buenos manjares en la mesa - o con ropa de marca, pero vacíos en su
corazón.
Gracias Señor
“hermanos hermanas Dios conoce tu corazón, Dios conoce el corazón de hijo, de hija, Dios conoce el
corazón de padre y de madre, Dios conoce tu corazón, y él quiere un trato personal contigo, el conoce las
heridas, y solamente Dios escudriña tu corazón, muchos quisieran saber ayudarte y abrazarte cuando tu
buscas ayuda, y saber que hay en ese corazón – para atacar directamente esa raíz ese problema, pero
solamente Dios puede hacer, solamente el traspasa tu corazón para sanar tu herida, quizás hoy delante
de la presencia de Jesús sacramentado, mirándolo de frente a frente a un sientes esa desilusión, aun
sientes la herida, aun sientes aquella… aquella palabra hiriente, pero por eso hoy estas delante de Jesús
el que escudriña tu corazón, el que sabe de raíz el problema - la dificultad - la herida, pero sobre todo
hermano hermana, el que tiene el bálsamo para ponerla en la herida, el que tiene el bálsamo para curar
tu herida, quiero invitarte a que levantes tu mirada, Dios conoce la razón, Dios conoce el por qué estas
hoy aquí, esperando esa respuesta, hermano hermana estar frente a Jesús Sacramentado, estar frente al
hijo de Dios, estas frente a él, es dicha es oportunidad, es luz, es encontrarte a ti mismo con él, y poderle
decir en esta hora… Sáname te pido, levanta tu mirada, ¡levanta tu mirada y dile a Jesús con fe!, sáname
te pido.”.
Sáname, te pido Señor Te doy mi corazón, te entrego mis miserias,
Purifícame todo el corazón, Yo quiero ser, un verdadero adorador,
Cámbiame, toma el control Te alzo mis manos, pues tú me has sanado,
De mi vida, Señor… (2v) Este roto corazón… (2v)
Gracias Señor
El corazón.
Gracias Señor, Gloria a Dios
--- Reflexionemos un minuto en Silencio ---
6. Gracias Jesús por lo que has hecho, por lo que haces y por lo que seguirás haciendo, hermanos y
hermanas la oración nuca es de balde, la oración siempre – siempre es respondida, pero en el tiempo de
Dios - no en el nuestro, no nos cansemos de orar, hay circunstancias en la vida – en que solo el poder de
Jesús, solamente él puede sacarnos adelante, Bendito Seas Jesús, Alabado seas el Señor… Dice
Preces:
Alabemos a Cristo, pastor y obispo de nuestras vidas, que vela siempre con amor, por su pueblo, y
digámosle suplicantes:
Protege, Señor, a tu pueblo.
Pastor, protege a las familias voluntarias que cuidad y atienden a las personas con capacidades diferentes.
Protege, Señor, a tu pueblo
Mira con bondad a los Familias que sufren persecución y líbralas de todas sus angustias.
Protege, Señor, a tu pueblo
Compadécete de las Familias pobres y necesitadas y da pan a los hambrientos
Protege, Señor, a tu pueblo
Ilumina a las Familias que tiene la misión de llevar tu palabra a los pueblos y dales sabiduría y prudencia
Protege, Señor, a tu pueblo
Guía a las familias voluntarias que cuidad y atienden a las personas con capacidades diferentes
Protege, Señor, a tu pueblo
No olvides, Señor, a los difuntos redimidos, por tu sangre y admítelos en el festín de las bodas eternas
Protege, Señor, a tu pueblo
Oración:
Dios todo poderoso y eterno, Señor del día y de la noche, humildemente te pedimos que la luz de Cristo,
verdadero sol de Justicia, ilumine siempre nuestras Familias para que así merezcan gozar de aquella luz en
la que tú habitas eternamente. Por nuestro Señor Jesucristo, tu hijo.