Está en la página 1de 6

REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

MINISTERIO DEL PODER POPULAR PARA LA EDUCACIÓN


UNIVERSITARIA

UNIVERSIDAD NACIONAL EXPERIMENTAL SIMÓN RODRÍGUEZ

NÚCLEO – LOS TEQUES

CÁTEDRA – IDIOMAS MODERNOS

TRADUCCIÓN DE
TEXTO

Participante:

Yendher Albarado

C.I. 18.709.309

Bloque 104

Facilitador:

Luis Carvallo

Los Teques, marzo 2023

1
ÍNDICE

INTRODUCCIÓN...................................................................................................................3

DESARROLLO.......................................................................................................................4

¿Por qué ir a la universidad en Venezuela?..........................................................................4

CONCLUSIÓN........................................................................................................................6

2
INTRODUCCIÓN

El presente texto trata de en primera instancia, elaborar una traducción de un


texto de inglés a español; por otra parte, el contenido del mismo hace especial énfasis
en que la educación universitaria en el territorio nacional venezolano no puede
perderse, porque aun cuando hayan problemas de cualquier índole, siempre debemos
de tener claro que nuestro país tiene oportunidad de surgir y mejorar cada día, y para
eso se requiere que los profesionales de cada una de la diferentes áreas profesionales
que existen colaboren con ese cambio y mejoramiento de la nación.

3
DESARROLLO

¿Por qué ir a la universidad en Venezuela?

En un contexto social muy hostil y con matrículas más allá de lo que la


mayoría puede pagar, hablamos con algunos jóvenes venezolanos afortunados para
conocer sus expectativas para el futuro con la educación que están recibiendo hoy.

María-Fernanda Uzcátegui V. 8 de octubre de 2020

No sé cuándo los jóvenes venezolanos dejamos de preguntarnos el típico


“¿debo usar falda o pantalón para ir a la escuela?”. y empezamos a preocuparnos por
cambiar lo que hacíamos en el trabajo de bolívares a dólares. Podemos ver y sentir
cómo nuestra calidad de vida se deteriora, pero también nos damos cuenta de que esto
es evidente debido a un privilegio que algunos de nosotros disfrutamos como
estudiantes de escuelas privadas, que quizás sabían un segundo idioma y tenían (o
tuvieron) la oportunidad de viajar, un contraste muy marcado con la realidad de otro
joven de 17 años que va a la escuela pública.

En 2015, las cosas aún no eran tan sombrías y estábamos al borde de la


esperanza: la oposición ganaría las elecciones parlamentarias de diciembre de ese
año. Tenía que decidir dónde y qué iba a estudiar, y analizando mis cartas de
aceptación y las carreras que tenía en mente, me di cuenta de que no llegué a mi
primera opción, Estudios Internacionales. Podría ir a otra carrera (Ciencias Políticas),
y entré en varias universidades, o estudiar una carrera diferente en una de las mejores
universidades de Venezuela.

Así que opté por estudiar Derecho en la Universidad Católica Andrés Bello.
Sabiendo que pueden pasar muchas cosas en cinco años en este país, me hice una
especie de prueba. Dejé en suspenso mis miedos y dudas, y busqué las oportunidades

4
que tenía este país, siguiendo lo que dicen los adultos más privilegiados: “Este es el
país de las oportunidades”.

Pero cuál es el costo real de las oportunidades si implica vivir con miedo, o
fallar en muchas tareas simples solo porque la incompetencia del gobierno está
haciendo que todo el país sufra cortes de luz diarios, cuando simplemente no puedes
trabajar porque no hay conexión a internet en tu barrio? Busca soluciones, como su
punto de acceso personal, o intenta ir a la casa de un amigo, pero en realidad no
puede moverse porque su automóvil no tiene gasolina; su mente sigue y sigue en un
círculo vicioso, hasta que eventualmente sale adelante y logra dominar la situación,
prevaleciendo a un gran costo.

Por otra parte, la mentalidad de “Este es el país de las oportunidades” sigue


muy presente en la mente de los jóvenes venezolanos recién graduados. Un estudiante
de ingeniería recién ingresado en la universidad privada Universidad Metropolitana
dijo algo muy interesante cuando le pregunté por qué estudiar aquí y no en otro lado,
cuando la oportunidad es factible: “Primero elegí Venezuela porque descarté todo lo
demás. Después de no poder conseguir las mejores becas de Estados Unidos y no
haberme decidido por ningún lugar de Europa, me di cuenta de que me iba a quedar
aquí. Pero cuando lo vi como una realidad, comencé a ver todas las cosas positivas
que surgen de quedarme aquí, estar con mi familia y amigos, y disfrutar de las
oportunidades de trabajar con personas que conozco”.

Así que hay esperanza para ese futuro en este país, quizás a una edad más
avanzada.

5
CONCLUSIÓN

Para nadie es un secreto que la situación económica y política de nuestro país se


vio afectada un tiempo después del 2015-2016, causando un desequilibrio
generalizado a nivel nacional, para muchos jóvenes no fue fácil cursar estudios, lo
cual no solo aplicó para los estudiantes de universidades privadas, sino que también
para los que estudiaban en universidades públicas, esto se debió a que entre muchas
cosas, el medio de transporte, los materiales que se requerían para la elaboración de
las actividades, problemas personales, estados de ánimo, familiares que se fueron de
país en buscar de dar una mejor vida a sus parientes que se quedaron en Venezuela,
entre otras cosas, fueron generadores de ansiedad y miedo a pensar si al final lograría
graduarse.

No obstante, aun cuando estas limitaciones se hicieron presentes e incluso ahora


existen muchas limitaciones, muchos de aquellos jóvenes si lograron graduarse tanto
de sus universidades públicas como privadas, todos y cada uno de ellos que no se
rindieron, que decidieron seguir adelante, y no darse por vencidos lograron una de las
metas que se plantearon, y es que, si toda la vida hemos vivido aquí ¿por qué ir a
estudiar a otro país, y básicamente dotar de nuestras habilidades a ese país
desconocido?, un granito hace la diferencia, si nuestros profesionales se van, entonces
quienes serán los que apoyen a nuestro país en esos momentos en que se necesita.

Es cierto que la desesperación conlleva a tomar decisiones apresuradas; sin


embargo, aunque muchos dijeron que se fueron para tener una mejor vida tanto
personal como académicamente, la verdad es que no todos tuvieron la misma suerte.
Es por eso que, aun cuando existan limitaciones debemos de siempre tratar de ver las
soluciones que también puedan existir de la mano. La educación en todos sus niveles
no puede perderse ni menospreciarse, debe mejorarse y nutrirse cada día.

También podría gustarte