Implicaciones Jurídicas

Para poder entender de una mejor manera que implicaciones jurídicas pueden traer estos
hechos ocurridos en la ciudad sobre los vendedores que trabajan en estas casetas, hay que
analizar los criterios de identificación de un bien de uso público los cuales en clases anteriores
se estableció que para identificar que es un bien de uso público deben de tener las siguientes
características:

 Su uso corresponde a todos los habitantes.

 Cualquier persona puede hacer uso del bien, su única limitación es la ley y el
derecho ajeno.
 Surge el derecho de asociación.
 El estado puede reglamentarlo legalmente y permitir en ellos actividades como
estacionamiento de vehículos, letreros en las vías o excluir su uso temporal.
 Por medio del permiso, licencia o concesión, el estado puede permitir a un
particular el ejercicio o explotación de un bien de uso público.

Debemos tener claro que el problema en esta situación es el que las casetas de los vendedores
se encuentran en ubicados en un bien público como lo es la calle por donde todos los
ciudadanos transitan diaria y efectivamente es un bien público ya que está destinado al uso de
todos.

En este momento se tiene que analizar que estas casetas están en estos puntos con sus
respectivos permisos legales y cumpliendo con todo lo que la ley les exige para estar en estos
sitios, en los cuales anteriormente fueron estudiados para poder otorgarles sus permisos,
licencias y concesiones para trabajar libremente en estos lo cual les permite a estos
vendedores tener sus casetas y tener un ejercicio de explotación sobre las mismas. Se
evidencia claramente el problema que existe, en el cual se enfrenta la posición por parte de las
personas encargadas del departamento administrativo del espacio público de la ciudad con los
vendedores.

Este problema llevaría a varias implicaciones jurídicas como por ejemplo varias demandas en
contra del municipio ya que los vendedores ambulantes pueden hacer valer el derecho al
trabajo y de igual manera acudir a que son sujetos de especial protección. Y en este caso se
puede evidenciar por parte del departamento un abuso de autoridad, además de esto están
contraviniendo varios acuerdos municipales los cuales les otorgaban un permiso a estas
personas para tener el uso de estos establecimientos lo cual es una evidente extralimitación de
funciones.

¿Por qué la alcaldía actúa de esa manera?

La alcaldía nos dice que las ventas ambulantes y los constantes parqueos indebidos de carros,
además de la falta de andenes, hacen que los bumangueses y sus vecinos del área no puedan
disfrutar de una buena cantidad del espacio público que les es propio. En el caso de las casetas
solo se pretende la restitución del espacio publico invadido, una medida que debe estar acorde
con el nuevo lineamiento urbanístico que tendrá el centro de Bucaramanga.

DECRETO 0142-2023

14-con el objetivo de procurar el cumplimiento de lo establecido dentro de la Ley 361 de 1997

y el Decreto 1538 de 2005, es necesarios establecer lineamientos de orden territorial en
materia de espacio público para promover la protección de los derechos de las personas cuyas
condiciones puedan limitar su libre locomoción en condiciones dignas.

Artículo 1°. Objeto y ámbito de aplicación. Sin perjuicio de las determinaciones que adopten las
demás dependencias de la administración municipal en el marco de sus competencias y, con el
propósito de promover comportamientos que favorezcan la convivencia ciudadana, el uso,
manejo, cuidado, protección del espacio público y con la finalidad promover la libre circulación
de la población en general y, en especial, de las personas con algún tipo de limitación a su
movilidad mientras se adelantan los diferentes procedimientos y trámites administrativos de
recuperación del espacio público, el presente acto administrativo determinara las actividades,
mobiliarios, productos, elementos y comportamientos prohibidos en el espacio público, así
como, horario, corresponsabilidad, reglas adicionales y naturaleza de actividades.

¿la alcaldía lo puede hacer?

Según la sentencia T-243- de 2019
la Corte constitucional estableció que, en el ejercicio del deber estatal de recuperación
del espacio público, las autoridades no pueden vulnerar el principio de confianza
legítima, ni el derecho al trabajo y la dignidad humana de los comerciantes informales
que lo ocupan. En ese sentido, la restricción de estos principios y derechos
fundamentales están acompañados de la obligación que tiene la autoridad
administrativa de crear una política pública de recuperación de áreas comunes
proporcional y razonable. Asimismo, esta política debe contener alternativas
económicas adecuadas atendiendo primordialmente a las circunstancias particulares
de los afectados. De no adoptarse dicha política, el juez constitucional está en la
obligación de amparar los derechos fundamentales y ordenar que se inscriba al
afectado en un programa de reubicación o de oferta de empleo.
partir del reconocimiento de esta relación asimétrica, la Corte ha sostenido que la
interpretación de cualquier cláusula oscura o poco clara debe hacerse siempre a favor
del vendedor informal y en contra de la administración. Asimismo, en el escenario de
incumplimiento del contrato, a partir del principio de proporcionalidad, la Corte
Constitucional ha sostenido que a la autoridad sólo le es dable reclamar el
incumplimiento del contrato cuando i) la entidad haya cumplido estrictamente con las
condiciones del acuerdo, o, habiéndolo incumplido, haya subsanado el incumplimiento
e indemnizado integralmente al vendedor por los perjuicios causados por dicho
incumplimiento; y ii) habiéndose incumplido el contrato por el vendedor informal, dicho
incumplimiento se mantiene después del ofrecimiento por parte de la entidad de un
programa de reubicación que implique que el vendedor pueda continuar con su
actividad comercial de manera pacífica, legal, sin riesgo de desalojo, teniendo acceso
a una clientela mínima que le procure un ingreso mensual equivalente, por lo menos,
al salario mínimo legal vigente[90
En ese sentido, los estándares concretos de actuación administrativa deben propender
a la estabilidad de los sujetos de especial protección constitucional en los lugares
donde fueron reubicados. Ello implica el deber de la administración de consultar con
los arrendatarios reubicados la intención de renovar los contratos estatales de
arrendamiento, siempre y cuando se respeten los principios de la contratación estatal,
la función pública y la garantía de los derechos fundamentales; asimismo, a la
terminación del contrato estatal de arrendamiento, la administración tiene el deber de
motivar la terminación del contrato estatal de arrendamiento, con base en los
principios de la función pública, el interés general y la no vulneración de los derechos
del arrendatario.
Adicionalmente, la jurisprudencia constitucional, a partir del concepto de acreditación
del establecimiento de comercio, ha sostenido que la protección de la legislación
comercial en el ámbito del derecho privado a las empresas y comerciantes es
aplicable de manera análoga a los vendedores informales, pues estos también
“desarrollan clientelas, acreditan sus servicios y productos y establecen dinámicas
comerciales equivalentes a las de las empresas que atienden al público
Lo anterior implica, de acuerdo con la jurisprudencia, que las acciones para la
recuperación de bienes fiscales deben ser más detalladas, pues ante una vulneración
menos grave de los derechos de la comunidad, existe un tiempo mayor para preparar
el programa de reubicación y, por tanto, al momento de realizar el procedimiento para
la protección de los bienes fiscales, ya debe estar la alternativa de reubicación
preparada y puede ser implementada de inmediato.
En ese sentido, aun cuando exista una afectación al patrimonio público, si se afecta
directamente a la comunidad -espacio público-, las acciones estatales deben
corresponder al cumplimiento de los derechos fundamentales de los vendedores
ambulantes; igualmente, si lo que se afecta son los bienes estatales de carácter fiscal,
la jurisprudencia constitucional ha establecido que le corresponde al Estado justificar el
por qué adoptar en ese caso una política de recuperación igual de urgente.
La sentencia es muy clara y nos dice que las alcaldías deben tener un plan de
respaldo de reubicación que no afecte al vendedor ambulante, antes de que se
proceda al desalojo. Para así no vulnerar sus derechos fundamentales, como el
derecho al debido proceso y el derecho al trabajo y el principio de confianza legitima.
En el caso de que las alcaldías fueran arbitrarias y no implementaran estos planes de
respaldo se estaría incurriendo en el desconocimiento de estos derechos
fundamentales e imprescriptibles. Entonces para terminar, mi respuesta es que si lo
pueden hacer siempre y cuando cumplan con estos parámetros que dictamina la alta
corte en la sentencia T-234-2019.

¿Las personas se pueden negar o no a dicho despojo?

Los vendedores que están siendo expulsados de sus lugares de trabajo y a quienes se les está
siendo despojados de sus casetas si pueden negarse, debido a que todos ellos, o al menos en
su gran mayoría tienen documentos de propiedad de las casetas otorgados por la ley, además
de que son personas que han tenido su puesto de trabajo ubicado en ese lugar durante más de
36 años, al ser vendedores establecidos permanentemente en un lugar público serían
consideras como vendedores informales estacionarios y al momento de despojarlos de sus
kioscos, es donde se vulneraria la Ley 1988 de 2019 artículo 1 y artículo 3 literal C, dónde nos
menciona que:

Artículo 1°. La presente ley tiene por objeto establecer los lineamientos generales para la
formulación de la política pública de los vendedores informales, con el fin de garantizar los
derechos a la dignidad humana, al mínimo vital, al trabajo y a la convivencia en el espacio
público.

Artículo 3
c) Vendedores informales estacionarios: Son las personas que para ofrecer sus bienes o
servicios se establecen de manera permanente en un lugar determinado del espacio público,
previamente definido por la respectiva autoridad municipal o distrital, mediante la utilización
de kioscos, toldos, vitrinas, casetas o elementos similares.

Ahora, si bien es cierto que el despojo se hace con el fin de “restituir el espacio público
invadido”

La solución no debe apuntar solo a despojarlos, porque ahí la autoridad estaría extralimitando
su poder, antes de llegar a esa opción podrían plantearse otra serie de soluciones, e incluso
reacomodar a las personas que poseen estás casetas en otro vía alterna que no afecte con
tanta magnitud el espacio público; porque hay que tener en cuenta que son personas que
cuentan con documentos de propiedad, además de ser padres y madres de familia quienes
viven del sustento de dichas casetas.

Opinión jurídica:

En la forma como se encuentra redactada la nota de prensa, se advierte que están implícitas la
vulneración de varios derechos fundamentales entre estos el derecho a la dignidad humana, al
mínimo vital, al trabajo y a la convivencia en el espacio público.

1. En un principio se debe realizar un derecho de petición solicitando a la alcaldía de

Bucaramanga el acto administrativo por medio del cual se ordenó el despojo de las casetas, e
invocar la vulneración de los derechos fundamentales y los perjuicios causados con la acción de
la autoridad.

2. Una vez respondan o en el evento de que no lo hagan, procedería una acción de tutela por
vulneración al derecho de petición. En el caso de que sí lo hagan, se debe presentar una acción
de tutela cómo mecanismo transitorio en cuanto se están vulnerando los derechos
fundamentales anteriormente mencionados, a fin de evitar un perjuicio irremediable.

3. De existir un acto administrativo o un acto ficto o presunto, sin perjuicio de la acción de

tutela se debe acudir a la jurisdicción administrativa para presentar una demanda invocando el
mecanismo de control de Nulidad y restablecimiento del derecho, dentro de los 4 meses al día
siguiente en que se realizó el despojo invocando las normas que se consideran violadas.

Nota que consideramos Importante:

Cómo el artículo de prensa es un poco confuso en cuanto a quien cometió la acción, en la

noticia mencionan a la policía nacional, para que ellos puedan acudir a la acción que realizaron
deben tener un acto administrativo que así lo ordene expedido por la autoridad competente,
porque si no lleva nada y simplemente actúan de la manera en que lo hicieron estarían
incurriendo en un delito de abuso policial por acto arbitrario e injusto.

Ahora bien, De acuerdo con lo dicho por el director del Departamento Administrativo de
Espacio Público de la Alcaldía de Bucaramanga, “estos operativos están amparados con el Plan
Maestro de Espacio Público, PMEP, que promueve la Alcaldía de Bucaramanga”, lo cual requiere
ser probado en el proceso administrativo o en la misma acción de tutela.