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REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

UNIVERSIDAD POLITÉCNICA TERRITORIAL JOSÉ ANTONIO ANZOÁTEGUI


VICERRECTORADO ACADEMICO
PROYECTO DE CARRERA: MARCO JURÍDICO I

LA RELACIÓN DE
TRABAJO DE ACUERDO
A LO ESTABLECIDO EN
LA LEY ORGÁNICA DEL
TRABAJO

ANACO, 02 DE JULIO DEL 2023


DEFINICIÓN DE RELACIÓN DE TRABAJO

La relación de trabajo es un nexo jurídico entre empleadores y


trabajadores. Existe cuando una persona proporciona su trabajo o presta
servicios bajo ciertas condiciones, a cambio de una remuneración.

Las relaciones de trabajo se establecen entre tres elementos esenciales:


por un lado, el trabajo; por otro, el salario, sueldo o capital y, finalmente,
el proceso productivo. En este caso, las relaciones laborales se dan entre dos
personas. Por un lado, el trabajador, que es quien aporta el trabajo; por otro
lado, el empleador, empresario, empresa, persona física o jurídica, que es
quien aporta el capital y el proceso productivo.

En la actualidad, toda relación laboral se rige por un contrato de


trabajo que vincula a ambas figuras. Este sirve de regulación de las
condiciones de trabajo, siempre basadas en que las cláusulas del contrato sean
conformes a la ley vigente.

IMPORTANCIA DE LA RELACIÓN DE TRABAJO

EN VENEZUELA

La Carta Magna de 1.999 es de neto corte social. Su preámbulo recoge


la búsqueda del bien común, la justicia social, el derecho al aseguramiento del
trabajo y la preservación de los derechos humanos, bajo el signo de una
democracia participativa y protagónica, y un Estado de justicia social.
Para poder garantizar todo lo señalado, es necesario el predominio de
una sociedad igualitaria y sin discriminaciones, que defienda y sostenga el
desarrollo de la persona y el respeto a su dignidad. El desarrollo de la persona
sólo se logra, a través del acceso de ella a un trabajo digno, adecuado y
permanente (estable), que le garantice ingresos para poder sostenerse a sí
misma y a su grupo familiar y, además, para existir plenamente (junto con su
grupo familiar) en su entorno, desarrollándose cabalmente. Es decir, que el
trabajador pueda contar con un futuro material.

Esa perspectiva de que los trabajadores puedan tener un futuro material,


a través de empleos seguros, es lo que permite comprender la importancia de
la relación laboral adecuada y estable. Así, puede establecerse que, después de
la vida, quizás el trabajo es el derecho humano más importante, porque toca el
tema de la subsistencia y, evidentemente la actividad laboral debe
desarrollarse en condiciones de dignidad.

La mejor expresión de la meta del trabajo decente es la visión que tiene


de él la gente. Se trata de un puesto de trabajo y sus perspectivas futuras, de
sus condiciones de trabajo, del equilibrio entre el trabajo y la vida familiar, de
la posibilidad de enviar a sus hijos a la escuela o retirarlos del trabajo infantil.

Se trata de la igualdad de reconocimiento y de la capacitación de las


mujeres para que puedan tomar decisiones y asumir el control de su vida. Se
trata de las capacidades personales para competir en el mercado, de
mantenerse al día con las nuevas calificaciones tecnológicas y de preservar la
salud. Se trata de desarrollar las calificaciones empresariales y de recibir una
parte equitativa de la riqueza que se ha ayudado a crear y de no ser objeto de
discriminación; se trata de tener una voz en el lugar de trabajo y en la
comunidad.
En las situaciones más extremas, se trata de pasar de la subsistencia a la
existencia. Para muchos es la vía fundamental para salir de la pobreza. Para
muchos otros, se trata de realizar las aspiraciones personales en la existencia
diaria y de manifestar solidaridad para con los demás. Y en todas partes, y
para todos, el trabajo decente es un medio para garantizar la dignidad humana.
El trabajo decente ofrece, pues, un medio para combinar el empleo, los
derechos, la protección social y el diálogo social en las estrategias de
desarrollo del país.

Venezuela, en la actualidad y más que en ninguna otra oportunidad, está


comprometida con el desarrollo de sus habitantes y de su sociedad, para
obtener un estado de satisfacción, que le permita prosperidad, debe decirse
que la garantía de una relación laboral adecuada y estable reside en el Estado,
pues indudablemente la realidad del campo de trabajo indica que,
regularmente, existen manejos y vicios que disminuyen los derechos del
laborante, como: extensión arbitraria de la jornada laboral (sin retribución y
sin consideración de las fuerzas físicas y psíquicas del trabajador), escamoteo
de pagos (cesta-ticket, bonos, etc.), la no inscripción en el seguro social
obligatorio, pagos por debajo del salario mínimo y otras situaciones.

También, no hay que olvidar que muchas veces se pretende esconder


una relación de trabajo bajo formas distintas, para hacerlas aparecer como otro
tipo de contrato (arrendamiento, concesión, sociedad, etc.). Es lo que en el
medio laboral se conoce con el nombre de simulación contractual o fraude
laboral, que buscan burlar la aplicación de las normas del trabajo y la
legislación social. Ello no debía ocurrir y por eso, resulta necesaria la creación
de los mecanismos directos de control y supervisión al respecto.
Esto revela la importancia y trascendencia de la intervención del Estado,
como parte protectora de una relación laboral adecuada y estable, ya que
realmente, en otras situaciones, el trabajador está totalmente desasistido, pues
una relación laboral irregular (donde no existe estabilidad, ni un salario justo y
remunerador, donde carezca de seguro para enfrentar las enfermedades
personales y las del grupo familiar, donde no se le garantice buenas
condiciones de trabajo, ambiente adecuado e implementos para su labor, etc.)
es una calamidad tanto para ese trabajador, para la sociedad y para el país, en
general.

El trabajo es uno de los principales vínculos sociales, el cual se


encuentra determinado por el contexto social y económico, y este trabajo que
hacen los sujetos a lo largo de sus vidas, es decir, esta trayectoria laboral
termina modelando de alguna forma al tipo de ciudadano con el que cuenta el
país.

TIPOS DE RELACIONES LABORALES EN VENEZUELA

Cuando hablamos de relaciones laborales ya no solo nos referimos a la


parte legal de estas, sino también, a la comunicación, a la capacidad de
escucha, al fortalecimiento de la confianza y a la colaboración entre empresa y
empleados para la consecución de un mismo objetivo. Estas nuevas
consideraciones han hecho que surjan nuevos tipos de relaciones laborales
divididos a su vez por grupos más amplios, como son: por tipo de contrato o
según el modelo de empresa:
 Tipos de relación laboral según el tipo de contrato de trabajo:

Contrato de trabajo fijo – discontinuo: este tipo de contrato está


relacionado con la estacionalidad de la actividad. Por ejemplo, un trabajo de
temporada podrían ser las tiendas de alquiler de esquí en invierno. Los
trabajadores con este contrato tienen los mismos derechos que los
indefinidos, entre ellos, la indemnización por despido.

Contratos formativos: comprenden las mismas garantías sociales que


otros tipos de contratos. Incluye plan formativo individual y se establecen una
serie de bonificaciones. Además, dentro de los contratos formativos,
diferenciamos dos tipos: de formación alterna y de práctica profesional.

Contrato de trabajo indefinido: se establece sin límite de tiempo y el


máximo de tiempo para concatenar los demás tipos de contratos antes de ser
indefinido es de 18 meses.

 Tipos de relación laboral según el modelo de empresa

Empresa tradicional: se componen de una estructura jerárquica


vertical: director, subdirector, cargos fijos, jefes de departamentos y
empleados. Este tipo de empresa reserva la toma de decisiones para los altos
cargos y se somete el trabajador a más vigilancia. Consiste en un modelo
basado en el seguimiento de órdenes, lo que puede generar distancia y
rencillas entre el empleador y el trabajador.
DOS (02) EJEMPLOS DE RELACIONES LABORALES EN
VENEZUELA

En Venezuela podemos hallar relaciones laborales comunes, como por


ejemplo:

 Según el lugar en que se realice el trabajo

Presenciales en las oficinas de la empresa; o en remoto, normalmente


desde la casa del empleado. En este caso, la empresa puede especificar si
precisa que el empleador trabaje desde su hogar con el equipo necesario, o si
el trabajador tiene la libertad de cambiar de locación.

Luego de la pandemia, este tipo de relación laboral cobró relevancia en


el país, ya que se enfocan en adoptar sus procesos y herramientas para
fomentar el teletrabajo.

Incluso, surgió una tercera modalidad: la metodología de trabajo


híbrida,que combina ambos sistemas..

 Según la carga horaria laboral

Debe definirse si el trabajo es a tiempo completo o medio tiempo. En


ocasiones, puede ser un trabajo de consultoría en el que se específica la
cantidad de días y horas semanales que se debe trabajar.

Estos son los ejemplos de relaciones laborales más comunes, pero


existen otras relaciones especiales para trabajos que se consideran singulares,
como atletas y artistas.
¿CÓMO DEBEN DESARROLLARSE LAS RELACIONES DE
TRABAJO EN VENEZUELA?

Cuando se establece en Venezuela que el trabajo es un hecho social y


que la relación laboral existe cuando una persona presta su servicio para otra,
quien lo recibe, mediante una contraprestación en dinero, que es la
remuneración, lo que ha querido fijarse, es precisamente un vínculo que
trasciende a la propia esfera individual de los sujetos vinculados, para
constituir un asunto que interesa a todos.

En otras palabras, el trabajo se reputa un hecho social, puesto que la


sociedad está interesada en que las condiciones de los trabajadores sean dignas
y adecuadas, ya que siendo Venezuela un país en desarrollo, esas condiciones
constituyen parte de los objetivos del Estado venezolano, para lograr sus
metas de prosperidad y avance de su población, fines últimos que encierra el
bien común.

FORMAS DE TERMINACIÓN DE LA RELACIÓN DE TRABAJO EN


VENEZUELA

La relación de trabajo puede terminar por voluntad de ambas partes, por


causa ajena, o por voluntad de una de ellas (bien sea por despido, si es por
iniciativa del empleador; o por retiro, si es por iniciativa del trabajador). El
despido y el retiro pueden a su vez ser por causa justificada o injustificada,
relativa al comportamiento del trabajador, o del empleador. El despido puede
deberse también a motivos económicos o tecnológicos. En todo caso, por
disposición de la Constitución, la ley garantizará la estabilidad en el trabajo y
limitará toda forma de despido no justificado; además, los despidos contrarios
a la Constitución serán nulos.

El despido debe ser notificado por escrito, con indicación de la causa en


que se fundamenta. Si es masivo, puede ser suspendido por la autoridad
competente y sometido al procedimiento previsto para la solución de
conflictos colectivos. Se considera masivo cuando afecte a por lo menos el
10% de los trabajadores de una empresa de más de cien trabajadores; el 20%
de una empresa de más de cincuenta trabajadores, o a diez trabajadores de una
empresa de menos de cincuenta, en un lapso de tres meses o menor en
circunstancias críticas.

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