Anaïs González Patreon

CONSEJOS Y GUIAS DE DIBUJO

Retratos a color
realistas
Vol.2
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Al dibujar con color el primer paso que doy antes de empezar a

dibujar es pensar en la paleta de colores. Incluso si hay
tonalidades más cálidas o más frías, puedes tener uno o varios
colores de referencia para trabajar en todo el retrato.

En esta referencia, por ejemplo, estamos trabajando con

tonalidades más cálidas. Déjame explicarte por qué:

Estas son las

tonalidades que
obtengo de la
imagen. Algunos
de ellos son más
oscuros y otros
más claros, pero
todos tienen algo
en común, los
matices.

En todos estos colores reconozco 3 matices: rojo, naranja y beige

(rosado). Esto es con lo que voy a trabajar para no usar solo los
colores que veo en la referencia.
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Juego y creo nuevos colores a partir de estos matices. Incluso si

esos colores exactos no están en la referencia, puedo exagerarlos e
inventar algunos si quiero. Si todos comparten los mismos
matices, es decir, se sitúan uno al lado del otro en la escala
cromática, acabarán quedando bien juntos.

Frio Cálido

Como puede ver, los 3 matices de referencia están cerca en la

rueda de colores. ¡Así que eso nos permite ser libres de usarlos de
muchas maneras!

PASO POR PASO

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Comienza colocando la figura en el papel
con un lápiz o un lápiz de color claro. Esta
será una guía para empezar.
Usando la misma tonalidad o una similar
empiezo a colocar la base para las sombras
proyectadas. Quiero usar diferentes matices
en la piel para que no se vea igual al final.
Para la sombra proyectada estoy usando uno
rojo.
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Dibujar la composición final nuevamente con
un color más oscuro te hará ver mejor la figura
y asegurarte de que tu primer boceto sea
correcto para comenzar. Te recomiendo usar
el color base general del dibujo, yo usé un
granate (rojo oscuro).
Luego empiezo a trabajar el resto de la piel,
especialmente los tonos medios y claros que
realzaré más adelante. Estoy usando un color
beige y naranja que me ayuda a dividir el
retrato en dos áreas. El de la izquierda, que es
el más oscuro, y el de la derecha, con luz
directa.
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Además de esos tres matices, es importante
utilizar otras tonalidades en áreas pequeñas
pero específicas del retrato, para hacerlo más
realista. En este caso, como estoy trabajando
con una referencia cálida, voy a añadir unos
toques de color rosa y rojo que también
aportarán volumen.
Ahora es momento de trabajar en el aspecto
final de cada zona, tratando de encontrar el
mejor color posible a partir de la mezcla de
diferentes tonos y realzando algunos otros
sobre la capa base. Como puedes ver, realcé
el subtono de cada área diferente: rojo para
sombra proyectada, naranja para tonos
medios en sombra y beige para iluminador.
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Una vez hecho esto, me gusta repasar el
primer boceto nuevamente para poder ver la
figura. Y también, de esa manera puedo
comenzar con la segunda capa de sombra
teniendo un tono de referencia, que es más
oscuro.
Deberíamos hacer lo mismo en el resto de
zonas, a excepción de la piel, que son las cejas,
los ojos y los labios.
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Una vez que todo está sombreado, hago la
última capa de superposición general. Me
gusta que la línea resalte para hacer el dibujo
más abocetado, así predomina el dibujo
incluso con color. Hacer esto hace que el
retrato destaque más y no quede plano.
Una vez hecho esto hay que dar volumen, así
que es hora de usar marrones oscuros para
dibujar y realzar algunas zonas.
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El cabello es el siguiente paso, pero el proceso
es el mismo. Colocando primero el color base
y luego los matices.
Para terminar podemos utilizar un marrón
más oscuro o un negro para intensificar líneas
concretas. Eso le dará el toque final y hará que
el dibujo "se levante del papel". Así le das más
importancia a todos y cada uno de los tonos
que hemos usado, y al trabajo de línea
también.