Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
control de plagas
El uso excesivo de productos de síntesis química para el control de plagas y enfermedades
de los cultivos agrícolas ha generado daños al ambiente y a la salud; además de que ha
promovido la resistencia de las plagas, por lo que ahora es más difícil controlarlas.
Los bioinsecticidas son sustancias de origen biológico que ayudan a controlar insectos
plaga; estos productos pueden ser derivados de materiales naturales como animales, plantas
y microorganismos. Los extractos de neem constituyen un bioinsecticida, particularmente
un fitoinsecticida muy eficiente y exitoso para el control ecológico de plagas en los cultivos
y muy utilizado en los últimos años debido a los beneficios y efectos que se describirán en
el presente artículo
El neem
El neem (Azadirachta indica A. Juss) es una planta de la familia meliácea, originaria de la
India y Birmania. Es un árbol que produce flores blancas, sus frutos son drupas que se
producen en racimos y tienen un color amarillo cuando alcanzan la madurez. Se usa para
fines ambientales, ornamentales, para elaboración de jabones, extracción de aceites, para
generar gas metano y principalmente, que es la función que atañe a este artículo, como
insecticida biológico.
El neem es muy resistente a sequías, y también, por sus propiedades, tiene pocas plagas de
importancia; lasprincipales son los ortópteros y las hormigas. Los primeros porque
prefieren alimentarse de brotes tiernos, donde todavía no se acumula suficiente insecticida
como para acabar con un insecto tan grande. Y las hormigas defoliadoras no la ingieren
directamente, sino que producen su alimento con la fermentación de las hojas en
el hormiguero.
La azadiractina
Se han encontrado diversos compuestos del tipo terpenos (diterpenos, triterpenos y
limonoides) en el neem, concentrados principalmente en la semilla. Algunos de ellos son
protomeliacinas, melantriol, azadirona, genudin, vilasinina, nimbina, salanina y
azadiractinas. La azadiractina normalmente se encuentra en la semilla en proporciones del
0.1 al 0.9 %. Existen al menos nueve isómeros amorfos de azadiractina; al más abundante
(83% del total) se le ha denominado tipo A.
La azadiractina es el agente con el mayor efecto para combatir los insectos dentro de todos
los compuestos del neem. Se ha demostrado que es uno de los más poderosos reguladores
de crecimiento y frenador de la alimentación que se han usado. La actividad anticomida
presenta corta vida y es variable. La más importante cualidad del neem, es el bloqueo
hormonal del proceso de metamorfosis de la larva. La azadiractina no mata insectos de
manera inmediata, sino que repele y destruye su crecimiento y reproducción.
De todos estos efectos, se puede decir que el poder repelente es probablemente el efecto
más débil. La actividad anticomida presenta corta vida y es variable. La más importante
cualidad del neem, es el bloqueo en el proceso de metamorfosis de la larva. Todos los
efectos se pueden producir de forma combinada y con diferente grado de acción,
dependiendo de la especie, estado de desarrollo, proceso de extracción y de la
concentración.
Las plantas tratadas con insecticidas de neem pueden ser comidas por esos insectos pero al
llegar a cierto punto de ingestión, el insecto, todavía en su etapa de larva, empieza a comer
cada vez menos, hasta que deja de comer y muere, sin alcanzar la madurez sexual. El daño
causado al cultivo por los insectos que alcanzaron a comer, puede considerarse dentro de un
umbral permisible
Los efectos sobre el crecimiento pierden su actividad en un 65% después de 16 horas bajo
condiciones de campo por degradación acelerada por los rayos ultravioleta; y la
azadiractina se degrada al 100% después de 7 días; aunque es factible prolongar el efecto
con acondicionadores (potencializadores y protectantes) en la formulación. Es preferible
aplicar por la mañana temprano o a últimas horas de la tarde para retrasar la
descomposición por vía solar. Los efectos sistémicos permanecen alrededor de 6 días, por
lo que en la práctica ha resultado suficiente para obtener un buen control de plagas.
Estudios han encontrado niveles de efectividad biológica para diversas plagas de hortalizas
del orden entre 75 y 100%; por lo que podemos confirmar la factibilidad del uso de los
extractos de la semilla del neem comobioinsecticidas pues tienen además un amplio
espectro de acción en la producción agrícola, y contribuyen a tener un manejo de plagas
más integrado favoreciendo una producción agrícola más amigable con el ambiente y
sustentable. El uso de extractos de neem es una excelente alternativa a productos sintéticos,
ya que el control añadido de los insectos útiles, que no son afectados, posibilita el reducir el
número de aplicaciones tal como se ha comprobado en ensayos de diversos cultivos en
diferentes países.