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LAX VOX

El Lax Vox es un instrumento y herramienta para el tratamiento de la voz,


descubierto en el año 1991 por la finlandesa Marketta Sihvo. Sirve principalmente para
modificar el comportamiento de la voz, modificando el funcionamiento físico y
biomecánico del aparato fonador.
Aunque nace como herramienta de rehabilitación vocal (utilizado por médicos y
logopedas para tratar problemas de la voz); actualmente tiene muchos usos para los
profesionales de la voz en general; siendo además una herramienta que previene
problemas en la voz que pudieran darse por una mala técnica vocal.

Principales Beneficios del Lax Vox


1. Ayuda a tener un flujo equilibrado de aire en el tracto vocal
2. Mejora la resonancia de la voz
3. Aumenta la longitud de las cuerdas vocales
4. Tonifica los músculos de la laringe (la “caja de la voz”)
5. Ayuda al patrón de vibración de la mucosa de la cuerda vocal
6. Mejora el control respiratorio al cantar o hablar
7. Promueve el descenso de la laringe

Pautas Para Realizar Correctamente Lax-Vox


1. Postura: Espalda recta, cabeza sin inclinar hacia abajo o hacia arriba. Los músculos
de la cara y el cuello no deben de presentar tensión.
2. Respiración: La inhalación debe ser por la boca, con inhalaciones cortas y profundas,
sin despegar los dientes del tubo. No debemos mover el pecho ni los hombros al
inhalar.
Preparación del instrumental
1. Preparar la manguera de gas (tubo de silicona) de 35 cm de largo y de 10 a 12 mm
de diámetro.
2. Introducir el tubo únicamente 22 centímetros dentro del agua
3. Colocar el tubo entre los incisivos sin apretar (sin morder)
4. Rodear el tubo con la parte interna de los labios, cuidando que quede bien sellado
para evitar que el aire se salga.
Ejercicios respiratorios (sin sonido)
1. Se debe soplar poniendo la lengua como si articuláramos una letra “u”, pero sin
sonido, solamente soplaremos aire.
2. Hacer staccatos para activar la gestión espiratoria, de preferencia usando el piano
aunque no estemos usando sonido, solamente aire
3. Hacer ejercicios lineales para mantener gestión espiratoria, sin sonido.
4. Siempre debemos observar vibración en las mejillas al soplar.
Ejercicios con sonido
Este tipo de ejercicios los haremos una vez que ya dominemos los ejercicios respiratorios y
tengamos buena coordinación.
El nivel de dificultad lo dictará el instructor; siempre focalizando el sonido en la parte por
debajo de los ojos; donde tenemos mucha resonancia natural y siempre con la vocal “u”.

Tipos de ejercicios de Lax Vox más importantes


1. Staccato: Estos ejercicios sirven para activar la gestión espiratoria. Debemos
primero lograr exhalaciones cortas (sin sonido); si logramos hacer varias seguidas
sin perder la coordinación estamos listos para agregar sonido y entonar.
2. Lineales: Nos ayudan a mantener la gestión espiratoria por un período largo y
continuo de tiempo. Debemos tener una burbuja estable y pareja (sin alteraciones,
manteniendo el mismo tamaño de las burbujas).
3. Reguladores: Sirven para aprender a regular la presión de aire con que el paciente
o alumno trabaja desde el bloqueo diafragmático; es decir, desde la gestión
espiratoria sin tensar los músculos de la laringe ni su estructura. Son ejercicios que
activan el músculo cricotiroideo, lo que permitirá flexibilidad en la laringe. Se
realizan por medio de cambios de volumen primero en la misma nota, manteniendo
la vibración de la burbuja de forma regular, y una vez dominados estos podemos
hacer ejercicios con cambios de nota.
Observaciones:
1. Al hacer los ejercicios, debemos siempre priorizar una buena gestión espiratoria y
asegurar que la burbuja esté estable con ejercicios lineales. Si observamos que la
burbuja no puede ser estable al añadir sonido, esto significa que estamos tensando
la laringe para producir sonido. Nuestro sonido fundamental se genera en la laringe,
pero debemos controlar el aire (gestión espiratoria). Siempre debemos centrarnos
en soplar y mantener una burbuja estable.
2. Es muy importante que focalicemos la vibración del sonido por debajo de los ojos
en las mejillas.
3. Siempre hacer los ejercicios del mas sencillo al mas complejo, de más cortos a más
largos.
4. No es necesario usar más aire al aumentar la dificultad de ejercicio. Es importante
que siempre se trabaje con la misma cantidad de aire, ya que un error común es
tener exceso de aire que produce una mala gestión espiratoria.
5. Siempre hacer los ejercicios con un volumen medio-bajo. Si usamos alto volumen,
esto implica una mayor gestión espiratoria y fono-respiratoria.
6. Siempre trabajar los ejercicios con el piano.

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