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Las comisiones de Educación y Hacienda del Congreso están analizando proyectos de ley para aumentar el subsidio a la educación y aumentar los impuestos al alcohol. Ambas medidas involucran externalidades, que son efectos positivos o negativos de actividades económicas sobre terceros. Aumentar la educación trae beneficios sociales pero requiere decidir cómo asignar los recursos de manera justa. Subir impuestos al alcohol puede mejorar la salud pública pero también limita la libertad personal. Las comisiones decidieron posponer la votación
Las comisiones de Educación y Hacienda del Congreso están analizando proyectos de ley para aumentar el subsidio a la educación y aumentar los impuestos al alcohol. Ambas medidas involucran externalidades, que son efectos positivos o negativos de actividades económicas sobre terceros. Aumentar la educación trae beneficios sociales pero requiere decidir cómo asignar los recursos de manera justa. Subir impuestos al alcohol puede mejorar la salud pública pero también limita la libertad personal. Las comisiones decidieron posponer la votación
Las comisiones de Educación y Hacienda del Congreso están analizando proyectos de ley para aumentar el subsidio a la educación y aumentar los impuestos al alcohol. Ambas medidas involucran externalidades, que son efectos positivos o negativos de actividades económicas sobre terceros. Aumentar la educación trae beneficios sociales pero requiere decidir cómo asignar los recursos de manera justa. Subir impuestos al alcohol puede mejorar la salud pública pero también limita la libertad personal. Las comisiones decidieron posponer la votación
Pensamiento Crítico II Profesora Ángela Novoa Echaurren
Las externalidades y las políticas públicas
1. Los hechos Dos comisiones del Congreso -la Comisión de Educación y de Hacienda- se encuentran analizando dos proyectos de ley que pretenden, por una parte, generar un bien social, y por otra, disminuir la prevalencia de un vicio que afecta a la ciudadanía en múltiples aspectos. La Comisión de Educación discute un posible aumento del subsidio estatal para acceder a la educación en todos los niveles (inicial, básico, medio y superior). La Comisión de Hacienda evalúa el alza del impuesto a los alcoholes a un 50%. Los medios de comunicación y la opinión pública tienen los ojos bien puestos en ambas discusiones parlamentarias. De aprobarse la idea de legislar, y posteriormente los proyectos en las cámaras, las implicancias en la sociedad chilena podrían ser profundas y multidimensionales. 2. Problemas involucrados La decisión sobre ambas situaciones se relaciona con el concepto “externalidad”. Desde una perspectiva económica, las externalidades pueden entenderse como positivas o negativas. El caso de la Comisión de Educación se relaciona con las externalidades positivas, bajo el supuesto de que, a mayor acceso a la educación, mayor será el bienestar para la población. Sin embargo, una serie de interrogantes surgen al momento de evaluar la decisión sobre acceso gratuito a la educación, ya sea pública o privada: Las personas en Chile, ¿necesitan más acceso a la educación? Si la respuesta es “sí”, ¿se debe, como Estado, ofrecer más educación o mejorar la que ya existe como oferta pública? Por otra parte, ¿a quiénes se debe priorizar para el ofrecimiento del subsidio educacional? ¿Es justo o “bueno” que el subsidio sea para toda la población chilena? ¿Se debe priorizar a los más necesitados? Si es así, ¿quiénes componen el grupo de más necesitados? ¿Es aquella población que percibe un menor salario? ¿O es la población que genera un mayor gasto? Estas son solo algunas preguntas que el lector puede formular a partir de un análisis acucioso de la situación descrita. Lo anterior sugiere que, cuando se toman decisiones, se deben evaluar las externalidades implicadas. En ese sentido, elegir una alternativa sobre una amplia gama de posibles opciones es más complejo de lo que se tiende a imaginar. Con la situación de la Comisión de Hacienda sucede algo similar, pero a la vez, opuesta. Se vincula con una externalidad negativa, es decir, con los efectos dañinos para la sociedad, generados por una actividad de producción o consumo. En el caso del consumo de alcohol. Desde el punto de vista ético, se tiende a pensar que lo correcto sería que las personas consuman menos alcohol y que las empresas lo 2
ofrezcan en menor cantidad, ya que consumirlo daña la salud de las personas.
Tomando esta perspectiva, una solución aparentemente obvia para la política pública sería establecer o incrementar el impuesto al consumo de alcohol. Sin embargo, nuevamente surgen interrogantes que deberían anteceder a la toma de decisiones: un grupo de personas, como los congresistas, ¿tiene autoridad ética para decidir lo que puede consumir la ciudadanía? De ser así, ¿en cuánto se debe disminuir el consumo? ¿No será la mejor solución y éticamente responsable regular únicamente el consumo extremo? Si se toma esta perspectiva, ¿qué criterios definen el consumo extremo, dañino o prudente? Por ejemplo, hay médicos que recomiendan una copa de vino tinto diaria para la salud cardiovascular. Tomando en cuenta estas consideraciones, se vuelve a la problemática planteada al final el párrafo anterior: cuando discutimos sobre externalidades, no podemos eximirnos de un análisis profundo de las implicancias éticas de la decisión a tomar, por tanto, la opción que se elija es compleja y multidimensional. 3. Desenlace Ambas comisiones no llegaron a un acuerdo –tampoco a un desacuerdo- sobre la idea de legislar los proyectos discutidos. La decisión consistió en suspender las sesiones para retomar el debate el mes próximo, con el fin de estudiar más a fondo las externalidades asociadas a las medidas que se pretenden establecer. Para ello, se organizarán sesiones donde se invitará a un panel de expertos en ambas materias, para escuchar sus visiones e informarse de mejor manera sobre los temas en discusión. 4. Conclusión Las externalidades pueden definirse como efectos –positivos o negativos- derivados de una actividad de producción o consumo cuando no se asumen todos los costos implicados en ella, o todos los beneficios que le podrían brindar. Aunque en este caso se está discutiendo sobre políticas públicas, cabe preguntarse si el ámbito de la política y la economía tienen algún grado de relación en las decisiones que entran en juego. Parece ser que la economía está presente en todos los ámbitos de la vida humana, ya que aborda cuestiones relevantes sobre necesidades, bienes de consumo, servicios y cómo estos pueden asegurarse a la ciudadanía de mejor manera para sostener una vida armoniosa en términos multidimensionales, es decir, personal, social y de la humanidad con la naturaleza.