Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Luego de las fiestas de coronación del rey de España Fernando VI (1746), Fray Calixto, a pedido
de los indios, redactó un memorial destinado al monarca español, donde denunciaba las
injusticias que sufrían los indígenas. Este documento es conocido como la Exclamación
Reivindicacionista, cuyo título completo es el siguiente:
Representación Verdadera y Exclamación Rendida y Lamentable que toda la Nación Indiana
Hace a la Majestad del Señor Rey de las Españas y Emperador de las indias, el Señor D.
Fernando VI, pidiendo los atienda y Remedie, Sacándolos del Afrentoso Vituperio y Oprobio en
que Están Más de Doscientos Años.
El rey Fernando VI, a quien entregó Calixto Túpac Inca su Exclamación Reivindicacionista.
Antes de partir hacia España para entregar este memorial al Rey, Fray Calixto lo hizo imprimir y
a fines de 1748 la dio a conocer con mucho sigilo a los curacas e indios principales de Lima y
Jauja. Luego, junto con Fray Isidoro de Cala y Ortega, partió del Cuzco y marchó hacia Buenos
Aires, adonde arribaron el 15 de febrero de 1750. Eludiendo la vigilancia de las autoridades
españolas, pasaron a la colonia del Sacramento y de allí a Río de Janeiro, en el Brasil, que era
entonces dominio del Portugal. Se embarcaron hacia Lisboa, adonde llegaron el 29 de julio de
1750. Partieron enseguida hacia España y llegaron a Madrid el 22 de agosto. Al día siguiente,
aprovecharon el paso del carruaje real por la vía pública para, en un acto de audacia,
entregarle al mismo rey Fernando VI la Exclamación por la ventana del coche. El día 24, ambos
frailes se acercaron a Palacio y por uno de los secretarios de cámara supieron que el Rey y sus
ministros habían leído el memorial.
Supresión de la mita y del trabajo personal que hacían los indios al servicio de los españoles.
El documento fue remitido al Consejo de Indias, para su resolución. Fray Calixto se atrevió a
decir a los consejeros que, de “no remediarse esos males que la Exclamación expresaba,
podrían sobrevenir fatales consecuencias a la Corona”. Escribió también al cabildo de indios de
la ciudad de Lima para ponerles al tanto de sus gestiones. Tenía la esperanza de obtener alguna
respuesta de parte del Rey o del Consejo de Indias, pues contaba con el apoyo de D. Juan
Bustamante Carlos Inca, también de linaje inca, que se desempeñaba como gentil-hombre de
Fernando VI. Como pasaran los meses y no hubiera respuesta alguna, Fray Calixto elevó una
nueva carta suplicatoria al monarca, insistiéndole sobre la necesidad de una respuesta.
Durante un año esperó en vano alguna noticia de la corte.
A fines de 1757, Fray Calixto fue enviado a España "con partida de registro", como
soliviantador peligroso. Llegó a Cádiz, después de penosa travesía, y de este puerto fue
remitido al convento de la Recolección de San Francisco del Monte del Desierto de Adamuz de
la provincia de Granada, al que arribó en diciembre de 1760. Allí permaneció encerrado hasta
su fallecimiento.
Reformismo
Los precursores del Perú se dividen en dos grupos: los Reformistas y los Separatistas. A cada
uno de ellos se los clasifica a la vez en criollos, indios y mestizos.
Fray Calixto Túpac Inca, si bien era mestizo, fue un representante del reformismo indio, basado
en el principio de que para mejorar la condición del indio, era preciso que se aplicara la
legislación paternalista de la corona en forma estricta, pues los malos funcionarios la
distorsionaban, por lo que resultaba del todo conveniente que ellos fueran removidos y
cambiados por funcionarios indios, para lo que partes importantes de las leyes de Indias
debían ser modificadas. (Virgilio Roel).
En contraparte, hubo una corriente separatista india, basada en el principio de que las
gestiones no podían conducir a resultado alguno, porque todo el aparato colonial estaba
fundado en la explotación, sumisión y dominio del estamento indio; como todo ese aparato se
asentaba en el poder del Estado, no cabía otra alternativa que la violencia revolucionaria para
salir de la condición en que se hallaba el indio, que era la base de sustentación de todo el
régimen (ídem). El más conspicuo representante de esta corriente, fue, al menos en su etapa
final, el cacique José Gabriel Condorcanqui, más conocido como Túpac Amaru II (1780).