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Historia de las fl ores

La historia data desde las


platas, en la etapa Mesozoica.
Hace 145 millones de años atrás
ubicamos el origen de las fl ores
(Angiospermas). Estas se
caracterizan por almacenar las
semillas en su estructura sexual,
que no es más que un método de
protección ante ataques de
terceros. Expertos dicen que
“Motsechia Vidali”, una fl or
acuática bisexual, fue la primera en su línea evolutiva.

La fl or ancestral, solía ser de color blanco, con un aparato reproductivo


hermafrodita –tanto masculino, como femenino–, poseía una simetría radial y se
dividía en tres o cuatro verticilos, con tres tépalos libres respectivamente. La
disposición de esta planta fl oral era espiral, y al pasar los años, fue reduciendo
sus verticilos, con la fi nalidad de adaptarse a los
constantes cambios ecológicos.

El Tropidogyne, una fl or ancestral, aunque no es la más


antigua por lo que no se puede sacar conclusiones al
respecto. Se caracteriza por ser una fl or vistosa, de tallo
verde, sin pétalos, pero protegiendo sus frutos. Mantenía
sus brotes largos y las hojas lo más pequeño posible.

Algunos otros tipos de plantas a lo largo de la historia obtenemos a:

 Magnolias

 Higueras

 Abedules

 Acebos

 Robles

 Palmeras

 Nogales

 Sauces
 Sicomoros

 Amborella

Historia de la Floricultura

La historia de la fl oricultura no tiene un inicio determinado, sin embargo, los


primeros vestigios encontrados son de las culturas sumeria y egipcia, las cuales
comenzaron a utilizar plantas silvestres como ornamentos, creando así los
primeros jardines de los que se tiene registro, aunque se estima que el uso de
plantas silvestres como decoración inició mucho antes.

A partir de estos registros se encuentran


muchos más a lo largo de la historia y en diversas
civilizaciones de todo el mundo, sobre todo Asia
Menor donde hay datos de las diferentes plantas
que se utilizaban como ornamento en lugares
como: Babilonia, Grecia y China. Todos con
diferentes fl ores endémicas como la rosa, la
peonía, el crisantemo y la camelia.

Es a partir de los siglos XVIII y XIX, que se


comienza con la introducción de diferentes tipos
de fl ores hacia Europa, permitiendo que se
observe una mejora en las especies y creando las
variedades de fl ores que se mantienen hasta
nuestros días. Pero no fue hasta 1930,
aproximadamente, cuando principia la producción
comercial de fl ores de corte.

Después de la Segunda Guerra Mundial se desarrolla


el modelo industrial de producción y además se gesta la idea de un mercado
para comercializarlas, siendo considerado en un inicio como un producto
suntuoso y para personas con un alto poder adquisitivo, pero que ha pasado a
formar parte de la vida cotidiana de la mayoría de los ciudadanos.

Mercado en el mundo

La producción y
comercialización de fl ores de
corte es una actividad
económica que se practica en
casi 150 países en todo el
mundo. Se concentra
principalmente en América del Norte y Japón, pero especialmente en la Unión
Europea, en donde se registran los mayores consumos per cápita del mundo
(EMG Consultores, 2007; Samaniego et al., 2012). Estas regiones o países del
mundo se consideran los mercados tradicionales por ser los primeros en el
tiempo y de mayor relevancia en los volúmenes de producción y consumo.

En general, en las sociedades actuales se demandan productos fl orales para


ocasiones específi cas como celebraciones religiosas, bodas, funerales y otros
eventos. Así, no es de extrañar que el consumo de fl ores y plantas para el uso
personal y para un detalle especial haya ido en aumento (Krass, 1999; Tzavaras y
Tzimitra-Kalogianni, 2010).

Existen regiones o países del mundo que tienen arraigo en la producción,


comercio o consumo de fl ores, los llamados tradicionales; sin embargo, en años
recientes han surgido nuevos productores que están ganando mercado,
ubicados en Latinoamérica y en el centro de África, en tanto del lado de los
países consumidores los cambios son menores pues surgen pocos, como el caso
de Rusia.

Los productos de la fl oricultura no es la fl or de corte exclusivamente, sino


que son un conjunto de productos relacionados, ya sean insumos o producto
terminado, tales como plantas vivas, bulbos, cebollas, tubérculos, raíces
tuberosas, turiones y rizomas, también esquejes e injertos, fl ores y capullos
(cortados para ramos o adornos, frescos, secos, blanqueados, teñidos,
impregnados o preparados de otra, forma), así como follaje, hojas, ramas y
demás partes de plantas, sin fl ores ni capullos y hierbas, musgos y líquenes,
para ramos o adornos, frescos.

En años recientes países tradicionales en la fl oricultura, algunos europeos,


están realizando fuertes inversiones en nuevas regiones, en este sentido, según
Untrafl ores (2008) señala que la rentabilidad del negocio ha llevado a que se
invierta en China, México, Perú, Chile, Bolivia, India, Uganda, Etiopía y Tanzania,
países que han abaratado los salarios y reducido los impuestos.

Mercado en México

América Latina está ganando mercado en la producción de fl ores,


posicionando a Colombia en primer lugar, seguido de Ecuador y México.
También conocida como fl oricultura, el mercado de las fl ores genera más de 250
mil empleos directos y más de 1
millón de empleos indirectos en
nuestro país, de los cuales, el
60% son mujeres. Su producción
se concentra en tres grandes
grupos de fl ores: Crisantemo,
rosas y gladiolas. Gran parte de éxito de México en el mercado de las fl ores se
lo debemos a la diversidad de climas con los que cuenta, ya que gracias a estos
es posible que existan fl ores en todas partes de forma natural, pero también
que se cultiven.

La producción se concentra principalmente en 3 estados: Estado de México,


Jalisco y Tamaulipas; sin embargo, el Estado de México es la única entidad en la
República con capacidad exportadora. Entre un 80% y 90% de la producción se
queda para el consumo y el mercado nacional, y únicamente entre el 10% y 20%
de la fl oricultura es destinada para exportación, teniendo a Estados Unidos y
Canadá como principales destinos. Pese a que un muy pequeño porcentaje está
destinado al comercio exterior, México ha iniciado su camino al mercado
mundial de fl ores que se valora en alrededor de 44 mil millones de dólares
americanos anuales, según datos del Gobierno de México.

¿A DÓNDE VAN LAS FLORES?


La producción y comercialización de fl ores se da en 150 países, sin embargo,
las grandes regiones de consumo de fl or cortada a nivel mundial son Europa
Occidental, Japón y Estados Unidos. En Europa se concentra la mayoría de las
importaciones mundiales de fl ores, la Unión Europea consume el 50% de todas
las fl ores del mundo.

Los principales países exportadores de fl ores son Holanda, Colombia,


Ecuador, Etiopía y Kenia; mientras que los principales importadores son Estados
Unidos, Alemania, Reino Unido, Holanda y Rusia.

FLORES QUE DESTACAN


El 75% de la producción de fl ores se realiza a cielo abierto, utilizando
invernaderos únicamente para el 25% del total.

La principal fl or que se produce en México es el Crisantemo. Gracias a datos


proporcionados por el Gobierno de México, el país produjo más de 11 millones
de gruesos en el 2020.

Más de 9 millones de
gruesas eran rosas,
posicionando esta planta
como la segunda más
importante del país. La
mayoría de su producción
se concentró en el Estado
de México.
Puebla genera aproximadamente el 60% de las gladiolas de toda la República,
produciendo 5 millones de gruesas en el 2020.

Temporadas de Flores
PRIMAVERA Rosas, Tulipanes, Violetas, Narcisos,
Isis, Anturios, Girasoles,
Pensamientos, Lilys, Bouvardillas
VERANO Rosas, Lazo de novia, Jazmines,
Magnolias, Violetas, Gardenias, Nube,
Freesias, Lilas, Lilys, Iris.
OTOÑO Alcatraces, Rosas, Jazmines,
Orquídeas, Cyclamenes, Freesias,
Agapandos, Dalias, Hiedra.
INVIERNO Gerberas, Tulipanes, Gladiolas,
Gardenias, Statis, Margaritas,
Alcatraces, Orquídeas, Claveles
miniatura, Casablanca, Nochebuena.

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