Instituto Grupo Palermo Chile

Curso Ansiedad & Pánico

Caso #1

Andrea. 40 años

Andrea contacta por teléfono con una petición muy especial:

“Me comunico contigo porque necesito cambios urgentemente, lo he intentado todo… tengo
ansiedad generalizada, hace 5 años que vivo así y estoy desesperada. He intentado mejorar mi
situación de muchas maneras diferentes, con varios terapeutas, de varios estilos, pero nada…
recientemente vi una de tus clases sobre el manejo de la ansiedad y pensé que tu método podría
ser efectivo, pero no sé… ¿crees que sea candidata para tu terapia?”

Se concreta una primera sesión con ella, donde explica más a detalle su problema.

Andrea: ¿Cómo estás Germán? Disculpa lo intenso de la llamada del otro día, pero de verdad han
sido meses y años de buscar alguna solución a todo esto y después de escucharte pensé que tu
terapia podría funcionar… como te contaba, han sido 5 años de vivir con ansiedad… bueno… en
realidad he sido ansiosa toda la vida, pero especialmente en estos últimos 5 años las cosas se han
puesto peor, se han acumulado las preocupaciones, las noches de insomnio, los pensamientos que
no puedo detener y todo eso ha repercutido en mi ánimo. Además, llevo 2 años tomando
clonazepam después de que mi psiquiatra me diagnosticara ansiedad generalizada y no quisiera
hacerme dependiente del fármaco. A veces pienso que voy a vivir con esto para toda la vida y que
quizás no tengo remedio, porque de verdad lo he intentado todo.”

Terapeuta: Comprendo Andrea, es como si cada intento solo hiciera más fuerte a tu ansiedad…

Andrea: ¡Exacto! Justo eso, lo intento, fracaso y entonces la ansiedad toma más fuerza.

Terapeuta: Me decías que lo has intentado todo, cuéntame que es todo eso que has intentado…

Andrea: Uy, por dónde empiezo… mira, como te decía toda la vida he sido ansiosa, “preocupona”,
pero especialmente los últimos 5 años que se empezó a salir de control, de repente me daban
ataques de ansiedad de la nada, en cualquier lugar, se me metían cosas en la cabeza sin sentido y
cuando empecé a tener insomnio me di cuenta que debía buscar ayuda. En principio yo fui mi propia
terapeuta, como te conté soy psicóloga, entonces intenté algunas técnicas de relajación, de
detención del pensamiento, hice yoga, medité y por momentos me ayudaba, pero no era suficiente,
empecé a ir a terapia, psicoanalistas, terapeutas cognitivo conductuales, pasé de uno a otro, pero
no me ayudaron como yo hubiera querido. Llegué hasta el psiquiatra cuando empezaron los ataques
de pánico, y ahí empezaron a darme clonazepam, me ayudó aunque la ansiedad ahí seguía, al poco
tiempo me fui a vivir a España, entonces cambié de terapeuta con una psicóloga que era buenísima
y me ayudó mucho a bajar mi ansiedad y ataques de pánico solo tuve acaso uno o dos más, pero
seguía sin dormir muy bien, entonces me bajaron la dosis de clonazepam y ya solo las uso para
dormir, a veces me tomo menos gotas de las que debería porque no quiero hacerme adicta. Hace
más de medio año que regresé a México y no pude seguir con mi terapeuta, de principio nos veíamos

J. Germán Hernández Osorio 1 | TSB

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a distancia pero después los horarios lo hicieron imposible… conseguí un nuevo terapeuta pero no
me fue muy bien, siento que todas las técnicas ya las conozco, ya probé todo lo que dicen los
manuales y nada de nada… y ahora me tienes aquí, un amigo me recomendó tus clases, yo no sabía
nada de terapia breve y la verdad estaba un poco escéptica, pero te escuchaba y algo me decía que
podría funcionar… esa es la historia.

Terapeuta: Es una historia de lucha Andrea, no te rindes y quieres volver a intentarlo, se necesita
mucha perseverancia para eso…

Andrea: Quiero darme una nueva oportunidad… yo aún no ejerzo, pero tengo la idea de empezar a
dar terapia y por eso necesito primero estar bien para poder ayudar a los otros. Quiero ser un
ejemplo de que se puede cambiar.

Terapeuta: Me comentabas al principio que te diagnosticaron con ansiedad generalizada, ¿cierto?

En mi experiencia cada paciente vive la ansiedad de manera diferente, ya me has compartido un
poco de lo que te pasa, me gustaría que me contaras cómo se manifiesta esta ansiedad en este
momento y qué es lo más complicado de manejar para ti.

Andrea: El sueño, definitivamente el sueño. Mi ansiedad aparece todo el día. Desde que me levanto
estoy preocupada, pensando qué voy a hacer durante el día, o el día de mañana, si no me quedó
algo pendiente, con mi mamá, con mi hija o sobre otra cosa. De repente me empiezo a poner muy
nerviosa y no sé por qué. Ir al gimnasio me ayuda, me distrae, pero cuando llega la noche no puedo
conciliar el sueño, me tardo mucho, entonces tomo clonazepam, a veces me ayuda, otras no tanto
y tengo que tomarme más gotas, pero no quiero eso, no quiero depender de un medicamento…

Terapeuta: ¿Has intentado algo más, aparte del clonazepam, para dormir mejor?

Andrea: He intentado meditación, con mi terapeuta de España aprendí mindfulness y en su

momento me ayudó, pero después dejó de funcionarme y ahora me cuesta mucho trabajo
relajarme. Me pongo música para descansar, veo la televisión o cierro los ojos y me digo a mí misma
que debo dormir… el problema es que pueden pasar horas hasta que me quedo dormida y a veces
ni las gotas de clonazepam me funcionan…

J. Germán Hernández Osorio 2 | TSB

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Caso #2

Claudia. 35 años

Claudia se comunica vía whatsapp solicitando una sesión de urgencia pues teme volver a tener lo
que denomina “una crisis”. Refiere que la terapia que necesita es de tipo cognitivo-conductual pues
es la forma de terapia que según se ha y le han informado es la más efectiva para lo que ella padece.

Claudia comenta que en sus últimas crisis había tenido pensamientos suicidas pero que, sin
embargo, en la última de ellas había tenido un intento de suicidio al tomarse “muchísimas” pastillas
de clonazepam. Fue llevada a urgencias y ahí se le desintoxicó. Claudia estaba llevando un proceso
terapéutico previo; posterior al intento suicida decidió cambiar de terapeuta pues sentía no le
estaba ayudando.

Durante la primera sesión Claudia refirió lo siguiente:

“Tengo miedo, tengo mucho miedo de que mi próxima crisis pueda ser aún peor. Estaba tomando
terapia antes, pero por alguna razón no me ayudó como yo hubiera querido así que decidí cambiar
y una amiga me recomendó tomar terapia contigo. Ella pasó por algo similar a lo que yo estoy
pasando y me dijo que le ayudaste mucho y es esa la ayuda que yo necesito. Sin embargo, el
problema conmigo es mucho peor porque desde hace meses en mis peores crisis he tenido
pensamientos suicidas… solo habían sido pensamientos, pero esta última vez llegué a lo que nunca
hubiera creído. Me tomé todas las pastillas de clonazepam que encontré a la mano y cuando mi
novio llegó al departamento me encontró inconsciente y me llevaron al hospital. No sé que fue lo
que me pasó. Esto lo había hablado con mi terapeuta y habíamos hecho el acuerdo de que cada vez
que yo tuviera pensamientos suicidas lo contactara en ese momento para que pudiera bajar mi
crisis, y así lo hice un par de veces, pero esta última vez no funcionó, la crisis me rebasó y entonces
hice lo que hice…”

Terapeuta: ¿Cómo describirías esas crisis?

Claudia: Son algo muy raro. Haz de cuenta que empiezan como cosa de nada y empiezan a subir y a
subir hasta que pierdo el control de las cosas y entonces me lleno de pensamientos de todo tipo,
me vuelvo violenta y esta última vez fui violenta contra mí misma.

Terapeuta: ¿Podrías relatarme una de esas crisis típicas y cómo intentas calmarte en ese momento
si es que lo intentas?

Claudia: Al principio intento calmarme pero después ya no pienso en nada, la crisis sube y sube y no
hay forma de pararla. Pocas veces decirme que me estoy enojando por cosas que no valen la pena
hace que me calme, pero últimamente esto ya no me sirve, entonces empiezo a pelear y pelear, me
la paso discutiendo, entonces mi novio me sigue la discusión, ninguno de los dos se calma y se viene
lo peor. Me había tocado hacerme daño mientras discutimos, tipo arañarme los brazos o pellizcarlos
y una vez azoté mi cabeza contra el retrovisor, pero eso ya no lo he hecho.

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Terapeuta: Entiendo entonces que estas crisis se presentan en forma de discusiones con tu novio,
¿o me equivoco? ¿eso que sientes es principalmente ira o cómo lo definirías? ¿hay otras situaciones
aparte de las discusiones donde se presenten estas crisis?

Claudia: Buena pregunta… creo que no. O sea, he tenido crisis ansiosas de repente en el trabajo,
pero hace mucho que no me pasa y la última vez no me costó tanto trabajo calmarme. Yo diría que
sí, es principalmente ira, coraje de sentir que mi novio no está entendiendo mi punto de por qué
discutimos o simplemente ser yo quien tenga la última palabra. A veces terminamos de discutir,
pero soy yo quien quiere seguirla y no puedo detenerme. Pienso que podría tratarlo mejor (a su
novio) de como lo trato ahora.

Terapeuta: Bien Claudia… ¿podrías volver a describirme estos intentos por calmarme que me
comentabas hace un rato?

Claudia: Sí. Haz de cuenta que todo empieza por una discusión simple, algo que me enoja y que me
digo a mí misma, “Claudia, no es tan grave, relájate”. También he llegado a decirle “¡basta! no
discutamos más”, aunque no hayamos arreglado nada y muchas veces me funcionan, pero hay otras
donde intento convencerme de eso de que no es grave o quiero parar la discusión y simplemente
no puedo, me dejo llevar por mi enojo y entonces pasa lo que pasa…

Terapeuta: ¿Cómo calificarías tus últimas crisis, del 1 al 10? ¿Cómo pasan de ser cosa de nada y
simplemente rebasarte y en dónde llegan los pensamientos suicidas?

Claudia: La verdad ni yo lo sé. Simplemente empiezan en un 1, de repente saltan a un 5 y cuando

me doy cuenta ya están en un 10. Así, de la nada. Ojalá pudiera encontrar una manera de pasar del
1 al 2 o al 3 por lo menos [risas]. Lo de los pensamientos suicidas no entiendo como es que llego a
eso, pero definitivamente eso ya no es un 10, es más allá, como si fuera un 11.

Terapeuta: Muy bien Claudia, te agradezco la información…

J. Germán Hernández Osorio 4 | TSB