Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
CUESTIONARIO
CLASE N° 4
Alumna:
Dorysayr Valor Flores
V-14.861.291
Similitudes:
.- Los diversos modos de manifestarse guardan cierta relación entre sí; pero es obvio que se
observa un progreso ascendente y que el profetismo vete-rotestamentario tiene su culmen
en días de los profetas clásicos, que son los asociados con la literatura profética del Antiguo
Testamento, es decir, los que hicieron oír su voz en el periodo más denso de la historia de
Israel (siglos VIII a iv a. de C.), desde Amós a Malaquías.
.- El carácter sagrado del dabar será una y otra vez reafirmado por los profetas auténticos
frente a la frivolidad de los profetas «oficiales», quienes habían sucumbido a la presión
corruptora de lo que Eichrodt denomina «formación de una conciencia funcio¬narial y de
poder, que cree disponer de la revelación divina y ser señor' a de su palabra»
Contrastes:
.- Los institucionalizados eran personas muy próximas al rey, a quien aconsejaban
comunicando el mensaje de Dios que en determinadas circunstancias le era dado, además
eran considerados como oficiales del santuario y ocupaban un lugar de honor junto a los
sacerdotes y demás funcionarios religiosos. Mientras que, los Clásicos su ministerio no
surge de su asociación a un grupo o de un cargo oficial. Es resultado directo de un poderoso
llamamiento de Dios.
.- En los institucionalizados todo da a entender que esta modalidad profética degeneró hasta
extremos vergonzosos y que muchos de sus adeptos ejercían su ministerio pensando más en
el beneplácito del rey que en la fiel transmisión de la palabra de Dios, mientras que los
Clásicos un temor santo se apodera de ellos y mientras Dios así lo disponga ellos
permanecerán a su escucha, prestos a decir o hacer lo que el Espíritu de Yahvéh les
indicara.
.- En el institucionalismo la acción profética está estrechamente relacionada con un gran
culto de oración mientras que en lo Clásico ocasionalmente en sus palabras hay predicción;
pero básicamente el oráculo no es predicción, sino predicación.
Los elementos de la predicación profética son de tal entidad que exigen un cuidadoso
análisis y una exposición, por breve que sea, de su estructura.
Anuncio de salvación.
El juicio no invalida la compasión de Dios. Su ira es temporal; su amor es eterno. Por eso, a
los anuncios de la catástrofe se une la proclamación de la intervención restauradora de
Dios. El final que se acerca no será un final definitivo. Le seguirá un nuevo principio con
horizontes teñidos de tonos gloriosos.
4. Interprete los siguientes textos destacando el mensaje que tenían para los primeros
destinatarios y -si la tiene- su proyección mesiánica, escatológica o de algún otro tipo:
Is. 2:1-4; 5:1-7; 52:13 - 53:12; Jer. 18:1-17; 31:27 y ss.; Ez. 28:11-19; Os. 3; Hag. 2:1-
9; Mal. 3:17-4:6.
Muchos pasajes proféticos describen a hechos que tuvieron lugar algún tiempo después de
haber sido anunciados; a veces de modo casi inmediato en otros casos, al cabo de algunos o
de siglos tal como el advenimiento del Mesías.
Es relativamente fácil señalar las profecías que ya tuvieron una realización histórica, sobre
todo aquellas que se refieren a la primera venida de, Cristo, ya que el Nuevo Testamento
nos guía en la interpretación. Pero es tarea ardua decidir en cuanto al cumplimiento de las
restantes.
Antes, dada la complejidad y las dificultades de la profecía, es muy fácil caer en el error o
en la perplejidad. Esta fue la experiencia de los antiguos judíos ante los textos relativos al
Mesías en los que se entremezclaban los rasgos gloriosos propios de un rey con los de la
humillación distintiva de un siervo. Sólo las realidades de la consumación escatológica
iluminarán definitivamente los puntos que ahora son vistos de modo diverso.