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El existencialismo es un Humanismo

Susana Acevedo Estrada

11-B

Institución Educativa Eduardo Fernández Botero

Filosofía

Docente: Angélica Gómez

Amalfi, Antioquia

22 de marzo de 2023
“El hombre está condenado a ser libre” Jean Paul Sartre

Fue esta la frase con la cual Jean Paul Sartre definió su obra “El existencialismo es un

Humanismo”. Aquí se afirma como el ser al momento de ser “arrojado” al mundo adquiere

libertad inherente a la condición humana y que, por ello, el hombre es inmediato responsable de

sus actos. Pensamiento propio de su obra, en este ensayo trataremos su pensamiento y

significado. La angustia encarnada dentro del ser humano.

Jean Paul Sartre (París, 1905- id.,1980) fue un filósofo, escritor y principal exponente del

existencialismo francés. Es considerado uno de los pensadores más importantes del siglo XX, su

trabajo consiste en explorar la naturaleza de la libertad humana y el significado de la existencia.

Hoy trataremos su obra, “El existencialismo es un Humanismo”, texto taquigrafiado, apenas

retocado por Sartre, dado en una conferencia hecha en Paris el 29 de octubre de 1945 por él, con

el objetivo de convencer del humanismo de su pensamiento después de la desmoralización de la

época posguerra.

El existencialismo es una corriente filosófica surgida en Europa en el siglo XX, propone

que la existencia del ser humano radica en su capacidad para crear su propia esencia y naturaleza.

Para nuestro autor, “La esencia precede de la esencia” (González Gallego, A. (2002). Eso que somos:

la identidad en la sociedad que viene. España: Edicions de la Universitat de Barcelona). Frase que

significa como el ser humano no tiene una esencia establecida sino hasta el momento que el

decide crearla, soy lo que he hecho y lo que han hecho de mí; la esencia viene después de la

creación del cascaron, el cual, será modificado según las experiencias de cada individuo.

Para Sartre la existencia humana es una experiencia solitaria y angustiante, para él, el ser

humano es consciente de su propia mortalidad y la ventura de su existencia. Este proceso propio


de si, consiente de su viveza y finitud en la mundanidad, resulta de conocerlas un proceso cuanto

más angustiante y lleno de incertidumbre, por el cual, Jean Paul Sartre lo considera una

característica de la condición de humanidad.

La angustia en el existencialismo, Sartre afirma como el hombre es angustia, como es

aletargado, que aún no descubre su propia existencia, que se desconoce a sí mismo; desconoce su

impacto dentro de la sociedad, la maldad o bondad de sus actos y su completa responsabilidad

por ellos. Para el movimiento existencialista El hombre “ingenuo” no conoce la angustia, aunque

se encuentre dentro de sí, más bien, huye, corre, la esconde, la disimula; el hombre ingenuo huye

de sí mismo, se esconde y se atemoriza de su existencia. En comparativa el hombre autentico es

consciente de su propia mortalidad y de su influencia dentro del orden normal del universo.

Según Sartre, la angustia es la consecuencia a la respuesta de vacío, miedo y la carencia

de valor dentro de la vida, “Somos legisladores, porque al elegir, comprometemos a toda la

humanidad, angustia es la conciencia de la responsabilidad. ¿Qué sucedería si todo el mundo

hiciera lo mismo?”; ¿Qué sucedería si toda la humanidad obra igual que yo? ¿toda acción que

realizo es un ejemplo para la sociedad? “estoy obligado a realizar a cada instante actos

ejemplares” si yo decido algo, mi subconsciente le demuestra a la sociedad como mi decisión es

correcta y ejemplar, como el camino que he decidido recorrer es el idóneo, carente de errores y

dificultades.

El hombre es un legislador, así lo definió Jean Paul, “ser que se elige a sí mismo, así

como elige a la humanidad entera”. Ante la magnitud de sus actos, la angustia es innegable, el ser

humano trata de escapar del sentimiento enmascarando tu desdicha, su propio temor; recurren a

mentirse y actuar como un legislador; no todos deciden así, puesto que el hecho de mentir implica

el valor de mala fe dentro del universo.


La Angustia y la mala fe están intrínsicamente relacionadas, negar esa angustia, tan propia

de nosotros, humanos, pequeños corderos perdidos en la pradera; negar la responsabilidad de

nuestros actos, tapar nuestra autenticidad detrás de la máscara de la angustia, resulta humillante

para una raza que goza del poder.

“La angustia es la disposición fundamental que nos coloca ante la nada” (Geidegger,

Filosofo Alemán, 1889-1976) Martin Heidegger así lo dice, la angustia para el es el catalizador

que muestra el potencial, hace enfrentarse a sí mismo, se presenta ante la nada, y a partir de allí el

camino que se tome será una creación propia. En contraste según Sartre, la angustia la llevamos

dentro, es parte inherente de cada ser humano, es la respuesta al caos desordenado, al miedo,

humillación y al desprecio mundano; la angustia lleva al ser humano a usar una máscara,

escondiéndose de su verdadera esencia.

En mi opinión, la angustia es inherente de nosotros, un sentimiento que, si bien no

llevamos dentro, será un catalizador en momentos cruciales de nuestro propio desarrollo social.

La libertad tal como se nos plantea resulta angustiante; seres completamente responsables de sus

actos, eso somos, así se nos forma y caracteriza. “La angustia es el vértigo de la libertad”

(Rocca, E. (2020). KIERKEGAARD. Secreto y testimonio. España). Primero ante la presencia en

creces de libertad, el ser humano necesita una respuesta, puesto que la raza necesita un líder, algo

en lo que creer, confiar y dejarse guiar; los humanos son tal como borregos perdidos en la pradera

sin su pastor, exigen un líder superior que les aliviane sus responsabilidades; por ejemplo, el

perdón en la tierra, ¿Puedo cometer cualquier acción carente de moral, puesto que se me

perdonará?, si el actuar dependerá de si se recibe un castigo o serán vanagloriado, los humanos

están en la ladera de su muerte.


Finalmente, El ser humano es la combinación del todo y la nada, de lo esencial y lo

accidental, de la razón e imaginación, de la magia y la razón, es el humano la muestra de lo

temporal y lo perpetuo. “El ser humano es una síntesis de lo temporal y lo eterno, de lo finito y lo

infinito” (Rocca, E. (2020). KIERKEGAARD. Secreto y testimonio. España). Somos quienes se

pierden en la ambición, poder y riquezas; llegamos al mundo con fecha de caducidad y, sin

embargo, debido a la codicia, buscamos alargarla cuanto más, somos egoístas, buscamos leyes

sólo porque no sabemos comportarnos, ni cuando, ni como parar, tenemos toda la razón para

gobernar y sin embargo, nos difamamos en la lucha por el poder. Somos egoístas, miserables,

seres para menos malvados, interesados en su propio beneficio, por ende, cuando se nos presenta

la libertad más pura y genuina, nos refugiamos detrás de una máscara grotesca, con viles sonrisas

para la sociedad, fingiendo vidas que para nada llevamos, ocultado nuestros problemas y

mostrando nuestra mejor fase, porque “todos deberíamos actuar así” tocar el suelo y demostrarlo

es para fracasados, cuando es ese el verdadero significado de libertad, fracasar, perder, la

capacidad de volverlo a intentar, abrazar nuestros errores y aprender de ellos, la angustia no es

otra cosa que el resultado de la abundante libertad que gozamos y desconocemos su manejo;

Buscamos respuestas en el más allá cuando, todas ellas han estado en cada uno de nosotros, la

carencia de amor, de paz, de caridad, de felicidad, de tristeza, de angustia, todo esta dentro de

nosotros mismos, siempre hemos tenido la llave que llevamos siglos buscando, la clave para

vivir.
Biografía

Sartre, J. (1999). El existencialismo es un humanismo. España: Edhasa.

Sartre, J. (1996). El existencialismo es un humanismo; carta sobre el

humanismo. Argentina: Ediciones del 80.

De Mendoza, A. G. (2012). El Existencialismo En Kierkegaard, Dilthey, Heidegger y

Sartre. Estados Unidos: Palibrio.

Pérez Borbujo, F. (2022). El principio de angustia. España: Herder Editorial.

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