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El lenguaje

Investigar los siguientes conceptos:


1. Trastornos del lenguaje escrito
Los trastornos del lenguaje escrito, también conocidos como
dislexia y otros trastornos de lectura y escritura, son dificultades
específicas que afectan la habilidad de una persona para
comprender, expresar o aprender el lenguaje escrito. Estos
trastornos suelen manifestarse en la infancia y pueden persistir
hasta la edad adulta si no se intervienen adecuadamente. Algunos
de los trastornos del lenguaje escrito más comunes son:

Dislexia: Es el trastorno más conocido y afecta la lectura y la


escritura. Las personas con dislexia pueden tener dificultades para
reconocer y asociar los sonidos de las letras, así como para
decodificar palabras y frases. También pueden tener dificultades
para comprender lo que leen y para expresarse por escrito.

Disgrafía: Es un trastorno de la escritura que se caracteriza por


dificultades en la coordinación motora fina necesaria para formar
letras y palabras de manera legible. Las personas con disgrafía
pueden tener una caligrafía poco clara y presentar problemas en la
organización del espacio y el alineamiento del texto.

Disortografía: Es un trastorno que afecta la ortografía de las


palabras. Las personas con disortografía pueden tener dificultades
para aprender y recordar las reglas ortográficas y para identificar
errores en sus escritos.

Disfemia o tartamudez: Aunque es más conocida como un


trastorno del habla, también puede afectar el lenguaje escrito. Las
personas con disfemia pueden tener dificultades para expresarse de
manera fluida y coherente en la escritura.

Trastornos de la escritura asociados a otras condiciones: Algunas


condiciones como el trastorno del espectro autista, el trastorno por
déficit de atención e hiperactividad (TDAH) o la discapacidad
intelectual, entre otros, pueden afectar el lenguaje escrito.

2. Causas del trastorno del lenguaje escrito

Las causas de los trastornos del lenguaje escrito no se deben a una


única razón, sino que pueden ser resultado de una combinación de
factores genéticos, neurobiológicos y ambientales. A continuación,
se mencionan algunas de las posibles causas que se han asociado
con estos trastornos:

 Factores genéticos: Existe una evidencia significativa de que


los trastornos del lenguaje escrito tienen una base genética.
Se ha observado que estos trastornos tienden a darse en
familias y que ciertos genes pueden estar relacionados con su
aparición. Sin embargo, la genética no es la única causa, ya
que la herencia genética interactúa con otros factores.

 Disfunción cerebral: Se ha demostrado que las personas con


trastornos del lenguaje escrito pueden tener diferencias en la
estructura y el funcionamiento del cerebro en áreas
específicas relacionadas con el procesamiento del lenguaje.
Por ejemplo, pueden presentar alteraciones en el giro
angular, una región del cerebro involucrada en la lectura y la
escritura.

 Problemas en el desarrollo neurológico: Durante el


desarrollo del cerebro, pueden surgir alteraciones que
afecten las habilidades del lenguaje escrito. Esto puede
ocurrir antes del nacimiento o en los primeros años de vida.

3. Diagnóstico, características y clasificaciones del lenguaje


escrito

El diagnóstico de los trastornos del lenguaje escrito generalmente lo


realiza un profesional de la salud o educación especializado en el
área de la neuropsicología, la logopedia o la psicopedagogía. Para
diagnosticar un trastorno del lenguaje escrito, se lleva a cabo una
evaluación exhaustiva que incluyen:

 Anamnesis: Se recopila información sobre el desarrollo del


lenguaje escrito, antecedentes familiares, historia educativa y
cualquier otra información relevante.

 Evaluación cognitiva: Se evalúa el funcionamiento cognitivo


general, incluyendo habilidades como la memoria, la atención
y el razonamiento.

 Evaluación del lenguaje oral: Se examinan las habilidades de


comprensión y expresión oral, ya que los trastornos del
lenguaje escrito a menudo están relacionados con
dificultades en el lenguaje oral.

 Evaluación específica del lenguaje escrito: Se analizan la


lectura, la escritura y la ortografía para identificar las
dificultades específicas que puedan estar presentes.

 Evaluación de habilidades psicomotoras: Se puede evaluar la


coordinación motora fina, especialmente si existe la sospecha
de disgrafía.

Características:

Las características de los trastornos del lenguaje escrito pueden


variar dependiendo del tipo de trastorno y la gravedad de la
dificultad. Algunas de las características comunes incluyen:

 Dificultades para aprender y reconocer el alfabeto y los


sonidos de las letras.
 Lectura lenta, inexacta o con omisiones de palabras y letras.
 Dificultades para comprender lo que se lee.
 Escritura desorganizada, con errores de ortografía y
gramática.
 Caligrafía poco legible y problemas de espaciado y alineación
en la escritura.
 Dificultades para recordar y aplicar las reglas de ortografía.
 Dificultades para expresarse claramente por escrito y
estructurar textos.
 Ansiedad y baja autoestima relacionadas con las dificultades
en el lenguaje escrito.

Clasificaciones:

Los trastornos del lenguaje escrito pueden clasificarse en diferentes


categorías, según los sistemas de clasificación utilizados por los
profesionales de la salud y la educación. Algunas clasificaciones
comunes incluyen:

Dislexia: Trastorno de la lectura, que implica dificultades para


reconocer y decodificar palabras, así como problemas de
comprensión lectora.

Disgrafía: Trastorno de la escritura, que se caracteriza por


dificultades en la coordinación motora fina necesaria para escribir
de forma legible.

Disortografía: Trastorno de la ortografía, que involucra dificultades


para aprender y aplicar las reglas de ortografía.

Es esencial recordar que cada individuo puede presentar


combinaciones únicas de dificultades y que el diagnóstico y la
intervención temprana son fundamentales para ayudar a las
personas a superar estos desafíos y desarrollar sus habilidades en el
lenguaje escrito.

4. Disgrafia
La disgrafía es un trastorno específico de la escritura que afecta la
habilidad de una persona para producir un lenguaje escrito de
manera legible y fluida. Esta dificultad va más allá de los errores
ortográficos comunes y se refiere a problemas en la coordinación
motora fina necesaria para formar letras y palabras correctamente.
Los niños con disgrafía pueden tener dificultades para escribir de
forma coherente y presentar una caligrafía poco legible, lo que a su
vez puede afectar su rendimiento académico y su autoestima.

5. Disortografía
La disortografía es un trastorno específico del lenguaje escrito que
se caracteriza por dificultades en la ortografía de las palabras. Las
personas con disortografía pueden tener problemas para aprender
y aplicar las reglas ortográficas convencionales y, como resultado,
cometen errores frecuentes en su escritura.

6. Agrafia
La agrafia es un trastorno adquirido del lenguaje escrito que se
presenta como la pérdida o deterioro significativo de la capacidad
para escribir, generalmente como resultado de una lesión cerebral,
como un accidente cerebrovascular, traumatismo craneoencefálico
o enfermedades neurodegenerativas como la enfermedad de
Alzheimer. La agrafia afecta la habilidad para producir lenguaje
escrito de manera legible y funcional, a pesar de que la
comprensión del lenguaje oral y la capacidad cognitiva del individuo
pueden estar intactas.

7. Trastorno del cálculo


El trastorno del cálculo, también conocido como discalculia, es un
trastorno del aprendizaje que afecta la capacidad de una persona
para comprender y realizar operaciones matemáticas de manera
adecuada. Es importante destacar que la discalculia no está
relacionada con la inteligencia general de una persona, ya que se
presenta en individuos con un desarrollo cognitivo normal.

8. Discalculia
La discalculia es un trastorno específico del aprendizaje que afecta
la habilidad de una persona para comprender y realizar operaciones
matemáticas de manera adecuada. Aunque la inteligencia general
de la persona puede ser normal, la discalculia causa dificultades
significativas en el ámbito matemático.

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