El documento describe los elementos fundamentales de la posesión y sus diferentes tipos. Explica que la posesión requiere el corpus (poder físico sobre las cosas) y el animus (voluntad de actuar como propietario). También menciona que existen diferentes tipos de posesión como la regular, irregular y legal, y que el animus es lo que transforma la detentación en posesión. Finalmente, señala que el animus y el corpus forman un todo indivisible, donde el corpus es la exteriorización del propósito del animus.
El documento describe los elementos fundamentales de la posesión y sus diferentes tipos. Explica que la posesión requiere el corpus (poder físico sobre las cosas) y el animus (voluntad de actuar como propietario). También menciona que existen diferentes tipos de posesión como la regular, irregular y legal, y que el animus es lo que transforma la detentación en posesión. Finalmente, señala que el animus y el corpus forman un todo indivisible, donde el corpus es la exteriorización del propósito del animus.
El documento describe los elementos fundamentales de la posesión y sus diferentes tipos. Explica que la posesión requiere el corpus (poder físico sobre las cosas) y el animus (voluntad de actuar como propietario). También menciona que existen diferentes tipos de posesión como la regular, irregular y legal, y que el animus es lo que transforma la detentación en posesión. Finalmente, señala que el animus y el corpus forman un todo indivisible, donde el corpus es la exteriorización del propósito del animus.
La posesión es un elemento que requiere o necesita de múltiples configuraciones
para poder determinar el origen de la posesión ya que esta se puede ver de diferentes maneras la cual la persona o individuo puede tomar de diferentes perspectivas al momento de que esta se esté dando en tiempo y forma del caso la posesión tiene dos formas de configuración o modificación la cual en el texto de “La posesión” de los autores, Somarriva, Alessandri y Nodanovich menciona sobre el corpus y el animus dos elementos fundamentales para poder determinar el significado de la posesión aparte de que existen diferentes modos de posesión el corpus vendría siendo un poder físico o de potestad de hecho sobre las cosas considerando que la posesión es la aprehensión material de las cosas cabe recalcar el punto en cual toma Savigny a cual afirma de tal manera que el corpus no supone necesariamente el contacto inmediato del hombre con la cosa ya que el considera de que es un poder de dominación ya que puede disponer de las cosas ahora debo de recalcar que los hechos que constituyen el corpus dice el mismo Saleilles no se pueden caracterizar de antemano el vínculo que subordina una cosa a la explotación económica de determinada persona depende de la forma en que se ejercita el derecho de propiedad y este ejercicio depende a su vez de la naturaleza de la cosa, de la forma de utilizarla desde el punto de vista económico y de los usos de la vida en cierta época y en determinado país. El animus como elemento fundamental es la voluntad de tener la cosa este elemento viene a determinar el dominio de que una persona es poseedora de algo ya que este es mencionado que se da como carácter psicológico ya consiste en la intención de obrar como propietario como señor o dueño aparte de estos dos elementos fundamentales existen diferentes tipos de posesión regular u ordinaria es aquella que aúna el justo título y la buena fe, posesión irregular es aquella donde faltan uno o los dos requisitos anteriores es decir que es el justo título y la buena fe, posesión legal es la estipulada por la ley aparte de estos diferentes tipos de posesión cabe recalcar que la posesión es el animus el característico y el que transforma la detentación en la posesión y para terminar mi comentario determino algo muy importante que menciona le texto. El animus y el corpus forman en la doctrina de Ihering un todo indivisible, pues “el animus y el corpus, en materia posesoria, no son más que los dos aspectos de una misma relación. El animus es el propósito de servirse de la cosa para sus necesidades, y el corpus, la exteriorización de ese propósito. El corpus no es, por consiguiente, una simple relación material, la de tener una cosa en su potestad real, sino la manifestación externa de una voluntad y, por ende, no se da sin el animus, que es el propósito exteriorizado y hecho visible mediante el corpus”.