El Crecimiento Económico de China: Factores Político-Institucionales y Socioculturales Favorables

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Revisión de la economía política evolutiva (2021) 2: 339–358
https://doi.org/10.1007/s43253021000463
PAPEL ORIGINAL
El crecimiento económico de China: factores
políticoinstitucionales y socioculturales favorables
Philip Arestis1 · Nikolaos Karagiannis2 · Sangkwon Lee3
Recibido: 10 septiembre 2020 / Aceptado: 29 junio 2021 / Publicado en línea: 28 de agosto de 2021
© Asociación Europea para la Economía Política Evolutiva 2021
Abstracto
El objetivo de este artículo es analizar los factores socioculturales y políticoinstitucionales
que contribuyeron en gran medida a la expansión económica de China. Al hacerlo, el artículo
revela la importancia de hilos heterodoxos de larga data, a saber, el papel de la historia, la
economía política, las estructuras institucionales, la cultura local, la psicología social y las
relaciones internacionales. En contraste con las falacias teóricas y los resultados
socioeconómicos destructivos del neoliberalismo, aquí se argumenta que la intervención de
desarrollo intencionada es crucial ya que puede promover el crecimiento, el posicionamiento,
la calidad y la competitividad de las industrias locales en los mercados internacionales. La
línea de argumentación de esta contribución es la siguiente. A través de la lente de la historia
política, la primera sección analiza los esfuerzos de desarrollo del país en el pasado.
Posteriormente, las secciones principales discuten aspectos importantes de un marco de
desarrollo económico alternativo en el contexto de China; estos se basan en un análisis del
Estado desarrollista, heterodoxo y altamente intervencionista, y se examinan poniendo especial
énfasis en sus rasgos políticoinstitucionales y socioculturales. Finalmente, el resumen y las
conclusiones cierran el trabajo.
Palabras clave China · Historia política · Relaciones internacionales · Estado desarrollista ·
Aspectos socioculturales · Factores políticoinstitucionales
Códigos JEL B2 · B5 · F1 · F5 · O2 · Z0
Aunque el 'crecimiento' y el 'desarrollo' a menudo se observan simultáneamente y pueden tener una
relación causal, consideramos el 'desarrollo económico' como un concepto más multifacético, que tiene
aspectos tanto cualitativos como cuantitativos.
* Nicolás Karagiannis
karagiannisni@wssu.edu
Información ampliada del autor disponible en la última página del artículo
1 3
Vol.:(0123456789)
340 P. Arestis et al.
1. Introducción
La globalización está lejos de ser nueva. Las economías, las sociedades, las culturas y los
idiomas modernos se han integrado cada vez más a través del comercio internacional y el
regionalismo, las formas modernas de relaciones y políticas internacionales y la sorprendente
revolución asociada con la tecnología de la información y el acelerado mundo digital. Lo que
hace diferente a la globalización actual es el grado en que la revolución tecnológica ha
llevado a que los resultados económicos y culturales estén interconectados o converjan.
Hay una suposición implícita en la pomposidad de la globalización neoliberal de que la
dinámica del sistema capitalista global finalmente hará obsoletas las culturas locales. Sin
embargo, varios países del este de Asia, particularmente China, se han resistido a las
tradiciones de la cultura occidental. Por ejemplo, las creencias y la práctica del confucianismo
han marcado de forma duradera sus gobiernos, sociedades y patrones familiares.
Los defensores del capitalismo global asumieron la superioridad de los 'valores
occidentales', pero continuamente afirman que la prosperidad material puede lograrse
dentro de contextos endógenos. Los intentos de la corriente principal de aplicar una lente
histórica se han involucrado en grandes simplificaciones y malas interpretaciones de la
relevancia e importancia de miles de años de pensamiento y cultura chinos. Sin embargo,
ningún análisis útil puede tener lugar en ausencia de comprensión histórica, que es
precisamente de lo que carecen las teorías ortodoxas, los modelos de decisión racional,
las percepciones matemáticas y las proyecciones económicas. La teoría del estado
desarrollista, por lo tanto, es una opción útil que ya ha sido adoptada en algunas áreas. Esta
teoría permite que los países acepten algunas de las prácticas del corporativismo, pero
debe desarmar otras y redefinirlas dentro de la 'matriz sociocultural' en la que pueden
ubicarse (Karagiannis y MadjdSadjadi 2007) .
Claramente, China y los países recientemente industrializados del este de Asia tienen
una cultura y una tradición similares y sus propias herencias, que pueden ser extrañas "por
lo que los norteamericanos y los europeos saben de ellas" (Doughty 2007, p. 1), dada la
ausencia de la importación al por mayor de normas culturales occidentales a estas
sociedades. China es un caso particularmente interesante ya que el país ha sido capaz de
organizar su economía de manera efectiva. También ha desarrollado sus estructuras
políticas y filosóficas relacionadas, y ha llegado a figurar entre las naciones más influyentes
del mundo.1 Además, si bien las estrategias y políticas industriales efectivas dependen en
gran medida del diseño institucional, están fuertemente influenciadas por la cultura (Morishima 1982; Doré
La cultura y la tradición han tenido un impacto profundo en la economía china porque el
'Gran Poder' de China, su cultura e instituciones sobrevivieron y prosperaron a pesar de las
perspectivas filosóficas cambiantes de sus líderes políticos.
La tendencia hacia la globalización neoliberal frecuentemente parece ocultar el papel
'activo' del gobierno soberano. En consecuencia, el debate entre el argumento del estado
desarrollista y el enfoque de libre mercado se basa en la
1
En consecuencia, ahora, más que antes, existe una gran necesidad e interés por una mejor comprensión de
los procesos sociales y psicológicos que caracterizan a los chinos (Bond 2010).
2
El tema de las culturas locales y el capitalismo ha sido magistralmente analizado por Michio Morishima, Ronald
Dore y otros desde la década de 1980, con especial referencia a Asia Oriental.
1 3
El crecimiento económico de China: habilitación políticoinstitucional… 341
inconsistencias filosóficas y supuestos falsos de la mayoría de los análisis económicos ortodoxos3,
así como la falacia de que el capitalismo de libre mercado promueve la competencia perfecta y
aumenta la prosperidad. El dicho chino 'una crisis es también una oportunidad' nos motiva a
pensar de manera realista y evitar las anteojeras ideológicas que pueden empujar sin restricciones
hacia el fundamentalismo de mercado. Es suficiente dejar en claro la necesidad de un argumento
convincente para una reevaluación del intervencionismo, que ya ha desafiado a la ideología
neoliberal con respecto a sus supuestos teóricos sobre la naturaleza humana, los orígenes y el
papel 'apropiado' del Estadonación moderno, y el funcionamiento real de la economía (Karagiannis
y King 2019). En el lado positivo están asuntos como la capitalización de las economías
domésticas, la transferencia de tecnología, el crecimiento regional, la posibilidad de mejoras en la
balanza de pagos del país anfitrión, las ideas innovadoras y la promesa de un cambio cultural
benefcioso.
Dentro de tal contexto, el enfoque de esta contribución es proporcionar un análisis de las
características socioculturales y políticoinstitucionales que contribuyeron en gran medida al éxito
de China. El argumento presentado aquí se basa en un análisis del estado desarrollista con
"características chinas". Esto es incompatible con la supremacía del mercado.
y concepciones de optimalidad de la corriente principal.4 Siendo más específcos, se basa en
temas heterodoxos, incluidos los evolutivosinstitucionales, como el surgimiento, la dependencia
del camino, el poder, las idiosincrasias y la visión del desarrollo nacional; estos parecen haber
desempeñado un papel signifcativo en la evolución y el crecimiento económico de China. Además,
se tiene en cuenta un aumento en las implicaciones políticas de la complejidad económica (Elsner 2019).5
Teniendo en cuenta algunas consideraciones explícitas, Elsner (op. cit.) revela la importancia de
los hilos heterodoxos de larga data, a saber, el papel de la historia, la cultura local y la psicología
social, las estructuras institucionales, la economía política y las relaciones internacionales.
Esta contribución se estructura de la siguiente manera. A través de una lente de historia
política, la primera sección principal analiza los esfuerzos de desarrollo pasados del país desde
finales del siglo XIX. Las siguientes secciones principales discuten aspectos importantes de un
marco de desarrollo económico alternativo para China, basado en una línea de argumentación
estatal desarrollista heterodoxa altamente intervencionista, poniendo especial énfasis en la
3
El 'liberalismo económico' como ideología política y económica se basa en un fuerte apoyo a la economía de mercado.
En consecuencia, el sistema socioeconómico resultante puede describirse como capitalismo liberal o economía liberal.
Pero las premisas de tal sistema socioeconómico no pueden dilucidar la organización socioeconómica china, que es de
tipo socialista.
4
Según las interpretaciones ortodoxas (Balassa 1988; Banco Mundial 1993, entre otros), el rápido crecimiento de China
puede atribuirse a la estructura orientada al mercado de su economía desde 1978 (ver también nota 4).
Además, Justin Y. Lin de la Universidad de Pekín considera que la 'ventaja comparativa' es la estrategia más deseable
en la situación actual de China. Desde su perspectiva, el apoyo a la industria intensiva en capital en las condiciones
actuales profundizaría el problema de la escasez de capital, lo que a su vez podría causar una inversión gubernamental
ineficiente y una alta dependencia de los flujos de capital extranjero (Lin y Wang 2017a, b ) . Sin embargo, además de
sus deficiencias teóricas y políticas, es un error común que los principales economistas y científicos sociales crean que
el rápido crecimiento de China solo ocurrió en los últimos años.
5
Karagiannis, Cherikh y Elsner (2020), entre otros, analizan aspectos de la planificación del desarrollo chino y la
focalización industrial. Este extenso análisis no será replicado aquí.
1 3
las características políticoinstitucionales y socioculturales del país. Finalmente, el resumen y las
conclusiones pertinentes cierran el documento.
2 Historia política y desarrollo de China en retrospectiva
China tiene una rica historia de civilización antigua que se remonta a más de 3000 años.
Antes de la llegada de los europeos a Asia, el país había sido una de las naciones más poderosas y
avanzadas del mundo; estaba densamente poblada y políticamente unificada, y había desarrollado el arte
de la agricultura a pesar del hecho de que el esfuerzo de industrialización era insignificante. Cuando las
potencias europeas surgieron en China, encontraron una nación que apreciaba mucho la cultura tradicional
y la guerra. Sin embargo, a fines del siglo XIX, China se vio presionada por la hambruna y los disturbios
civiles después de muchos años de control extranjero. Al mismo tiempo, el gobierno de China comenzó a
fallar en el período inicial. El final del gobierno imperial fue seguido por casi cuatro décadas de grandes
desarrollos socioeconómicos y discordia sociopolítica, como la 'Rebelión de los Bóxers' durante el período
de 3 años de 1899 a 1901, que fue un levantamiento antiimperialista y antiextranjero hacia el final de la
dinastía Qing. Además, la situación en China se vio agravada por el caos interno provocado por lo que
muchos creían que eran políticas fallidas y corrupción dentro de la dinastía Qing.
En 1912, cayó la dinastía y se creó la República de China.
Con respecto a las relaciones internacionales, Thomas (2007) distingue dos épocas:
'“soberanía nacional limitada” de 1860 a 1949, y “soberanía nacional plena” desde 1949 hasta el presente,
con consecuencias radicalmente diferentes [derivadas] de la interacción de China con la economía global
durante [cada una de ellas]' (p. 1) . De 1839 a 1949, conocido como el "siglo de la humillación nacional",
fue un período de intensas intervenciones de las superpotencias occidentales, Rusia y Japón, durante el
cual China perdió casi todas las guerras, experimentó una gran desintegración interna y, a menudo, se
vio obligada a retirarse. proporcionar una serie de concesiones a las potencias mundiales en tratados
posteriores. Como resultado, aunque los arreglos de seguridad chinos variaron de una dinastía a otra y
entre períodos de fortaleza y debilidad, el gobierno nacional tenía poder y control limitados sobre los
recursos locales y la toma de decisiones. Ese nivel de soberanía limitado, junto con fronteras a menudo
inestables, vulnerabilidad a los ataques y tratados internacionales desfavorables, redujeron
significativamente las oportunidades de desarrollo endógeno de China.
El siglo XX vio algunos de los cambios más signifcativos en la historia de China que han llevado a su
posición actual. A principios del siglo XX, China estaba dividida en áreas de infuencia por poderosas
naciones europeas, cada una de las cuales buscaba ejercer el mayor control posible. El pueblo chino,
resentido con los extranjeros e insatisfecho con la incapacidad de su gobierno nacional para expulsarlos,
pudo reemplazar el sistema imperial chino de 2000 años de antigüedad con la República de China. En
marzo de 1912, el Kuomintang o KMT, uno de los primeros partidos políticos de China, apareció en los
asuntos del país (MacFarquhar 2012; Heilmann 2017).
En 1917, China entró en la Primera Guerra Mundial del lado de los aliados, incluso sin participar en
ninguna acción militar, proporcionando trabajadores que trabajaban en las fábricas y minas aliadas. Como
el Tratado de Versalles ignoró la petición del país de poner fin a la
1 3
dominación y concesiones, posteriormente, el 4 de mayo de 1919, tuvo lugar el Movimiento
del Cuatro de Mayo , durante el cual los estudiantes chinos protestaron contra el Tratado. El
Movimiento del Cuatro de Mayo ayudó en gran medida a la promoción de la ciencia y a que
el idioma chino adoptara una nueva forma de escritura más fácil. El Movimiento también fue
la base para la formación del Partido Comunista de China (PCCh).6
En China, y desde 1949, ha habido tres llamamientos políticos amplios que compiten
entre sí: los "valores tradicionales", el maoísmo y el pragmatismo económico. Después de la
Segunda Guerra Mundial, China quedó bajo el liderazgo de Mao Zedong, quien fundó la
República Popular China (RPC) y declaró el final del "siglo de la humillación nacional".
Después de 1949, el Partido Comunista recuperó la plena soberanía nacional y utilizó este
control para hacerse cargo de la propiedad de la economía interna de China de manos de
inversores chinos y extranjeros. De 1949 a 1978, China construyó constantemente su base
industrial y se transformó de una economía agraria a una industrial. El liderazgo político del
país, al utilizar una planificación central continua, dio alta prioridad a la rápida industrialización
y creó la base industrial para el éxito económico de China. Durante esta era, bajo el dictado
de Mao, China como nación comenzó su industrialización, creó su sistema universitario y
construyó cientos de laboratorios en todo el país, y desarrolló su base tecnológica en
sectores tan importantes como las armas nucleares, los satélites, la ciencia espacial y las
computadoras. . Estos esfuerzos de desarrollo nacional prepararon a China con numerosos
científicos e ingenieros talentosos, muchos de los cuales se convirtieron en tecnócratas en
el gobierno (Naughton 2007).
Además, los líderes políticos chinos cultivaron una potente marca de nacionalismo que
incorporó el desarrollismo en una narrativa sobre la creación de la grandeza china.
En consecuencia, la transformación de las viejas relaciones de producción en nuevas
relaciones socialistas fue más importante que la expansión cuantitativa de sus fuerzas productivas.
El período 19491956 fue ampliamente reconocido como "el período dorado de la
industrialización china", durante el cual su PIB creció a una tasa de más del 20% anual, y el
país estableció sus industrias principales, incluidas la siderúrgica, textil, química, automotriz,
y defensa El gobierno de China implementó planes de 5 años que consistieron en tres
reformas principales, tierra, social y cultural, además de la planificación económica. Los
cambios no solo condujeron al Gran Salto Adelante y la Gran Revolución Cultural Proletaria,
sino que también resultaron en la recesión económica de 1958 y 1959, y la recesión a
principios de la década de 1960,78 Además, en 1949, China implementó una política de 30 años
6
Para una discusión detallada, ver Heilmann y Perry (2011) y MacFarquhar (2012). Además, la 'Historia de China' de
Leon Poon (disponible en: http://www.chaos.umd.edu/history/prc.hml) incluye una cronología de las principales eras chinas
y proporciona una breve descripción de cada una.
7
Según Mao, la Revolución Cultural tenía que ser un proceso duradero; había que identificar y eliminar a los opositores
ocultos en el partido y en los círculos intelectuales; y todo lo que se sospechara que era feudal o burgués debía ser
destruido. Estrictamente, las discusiones no deben apartarse de la política o el pensamiento decididos por el PCCh. El
objetivo de la Revolución Cultural era atacar las viejas ideas, la vieja cultura, las viejas costumbres y los viejos hábitos
para alinear las áreas de educación, arte y literatura con la ideología comunista. Sin embargo, la Revolución Cultural
también tuvo graves consecuencias negativas para la sociedad china, por ejemplo, millones de personas sufrieron
desnutrición y muchas fueron ejecutadas, enviadas al campo o desarraigadas (Heilmann y Perry, 2011).
8
Para eventos sociopolíticos importantes, como la 'revolución cultural' y la 'pandilla de los cuatro', ver, Mac
Farquhar (2012); y, con cautela, Wikipedia, 'Economic history of China (1949presente)'.
1 3
alianza con Rusia contra Japón y los aliados japoneses, aunque las tensiones aumentaron
después de la muerte de Stalin en 1955. Las relaciones entre los dos países se mantuvieron
tensas hasta 1985 (MacFarquhar 2012).
Durante la década de 1970, la mayoría de las naciones occidentales establecieron relaciones
diplomáticas con China y el país se incorporó al sistema capitalista mundial. Por otro lado, los
fundadores de la República Popular China morían lentamente. El reformador chino Deng
Xiaoping logró la muerte de Mao en 1976. Al ver esta gran oportunidad, Deng Xiaoping asumió
el control y llevó al poder a personas más jóvenes con puntos de vista similares. Se centró en
el desarrollo económico y el comercio internacional que ayudaron a transformar las relaciones
con Occidente, y desarrolló constituciones estatales y trajo nuevas políticas al PCCh en 1982
(Heilmann 2017).
Teniendo en cuenta que el país tenía los recursos naturales y humanos para construir y
poseer la economía más grande del mundo, el plan de Deng Xiaoping se basó en cinco
modernizaciones de la agricultura, la industria, la defensa nacional, la ciencia y la tecnología.
Estas cinco modernizaciones se convirtieron en la principal agenda política dentro del partido,
el estado y la sociedad. En 1987, Deng Xiaoping se retiró y Zhao Ziyang se convirtió en
secretario general del PCCh y primer ministro de Li Peng. Ziyang continuó la filosofía de Deng
Xiaoping, cosechó los resultados positivos de la reforma económica iniciada por sus
predecesores y China comenzó a cambiar de una economía de sustitución de importaciones
a una economía dirigida por exportaciones (Brandt y Rawski 2007) . Sin embargo, en 1989,
China volvió a aparecer ante los ojos del mundo con el incidente de la "Plaza de Tiananmen",
que brindó la oportunidad a las naciones de todo el mundo de cuestionar el enfoque de China
hacia los derechos humanos y las libertades, y señalar la violación de tales derechos civiles.
En esencia, surgieron dos enfoques importantes pero distintivos entre los líderes chinos: el
de Mao Zedong, Lin Biao y la 'Banda de los Cuatro', quienes creían que los objetivos socialistas
de igualdad y mayor conciencia política deberían tener prioridad sobre el progreso material; y
el otro por Liu Shaoqi, Zhou Enlai y Deng Xiaoping, quienes vieron el crecimiento industrial y
las consideraciones económicas prácticas como requisitos importantes para el logro de un
orden socialista exitoso.
Por lo tanto, importantes debates políticos y cambios de política en China reflejaron el énfasis
oscilante en diferentes objetivos políticos y económicos, y se asociaron en gran medida con
cambios en las posiciones de las personas en la estructura del poder político. Sin embargo,
dado que cada nueva era política retuvo la mayoría de las características de la organización
económica existente, las nociones de un paradigma económico y las políticas que emanaron
de él en cualquier momento dado de la historia de China reflejaron tanto el énfasis actual de la
política como la base estructural construida durante el período. períodos anteriores (Brandt y
Rawski 2007; MacFarquhar 2012).
Con el inicio del siglo XXI, surgió una nueva generación de líderes que reemplazó a los
antiguos y hábilmente logró despertar la idea de que el país necesita pararse en el nuevo
entorno mundial. Como resultado, China se ha involucrado en ajustes económicos planificados
y graduales, como el elemento de descentralización fiscal de las reformas de las SOE
(empresas de propiedad estatal) desde fines de la década de 1990 .
9
Además, al observar las decisiones tomadas en octubre de 2017 y marzo de 2018, hubo muchas remodelaciones en
las estructuras gubernamentales.
1 3
país para unirse a la OMC en 2001. Jiang Zemin renunció lentamente a su papel de liderazgo
y, en 2004, pasó a ocupar el puesto de estadista mayor, todavía con una influencia evidente
ejercida a través de sus protegidos que estaban integrados en todos los niveles del gobierno.
La 'política al mando' de la era maoísta estuvo presente de manera subliminal cuando el
tecnócrata Hu Jintao emergió en 2004 como el líder dominante10 con la renuencia de Jiang
y sus seguidores. El actual presidente Xi Jinping asumió el cargo el 14 de marzo de 2013
(Heilmann 2017).
Claramente, el panorama económico y sociopolítico en China ha cambiado en las últimas
décadas y se ha desarrollado de manera desproporcionada en todo el país. Evidentemente,
existen grandes disparidades en el ingreso per cápita y los niveles de producción entre las
regiones. Bajo el control socialista, el nivel de vida era comparativamente bajo, pero no había
una gran brecha entre ricos y pobres. Xiaoping indicó que era aceptable que unas regiones
se enriquecieran antes que otras y, en consecuencia, la idea de que 'la pobreza es más
lamentable que la desigualdad' se ha extendido a toda la sociedad.
El desarrollo económico de China ha sido generalmente más rápido en las provincias
costeras que en el continente. En realidad, el desarrollo chino ha sido desigual debido a las
diferentes políticas preferenciales basadas en regiones y al efecto de la geografía per se.11
El resultado es una enorme disparidad de riqueza entre las regiones costeras y del interior,
y entre ciertas ciudades y áreas rurales (Démurger et al. 2002 ). ). Además, la inversión
extranjera ha seguido siendo importante para la notable expansión de China en el comercio
mundial y ha sido un factor principal en el crecimiento de la creación de empleo urbano
(Chow 2007; Kroeber 2016; Naughton 2018).
En general, la historia de China ha sido una narración del auge y la caída de gobernantes
fuertes y débiles, el desarrollo de tradiciones filosóficas duraderas y encarnaciones religiosas
de naciones, camarillas burocráticas y una reestructuración frecuente de las fronteras
geográficas del imperio. Después de 1949, 'niveles de soberanía más altos combinados con
una situación global menos imperialista' permitieron a China cosechar ganancias de
desarrollo significativas de su interacción con el entorno económico global (Thomas 2007, p. 1).
Hoy en día, cuando se habla del futuro de la economía capitalista mundial, China es uno de
los países más debatidos. Con una población de más de 1.300 millones de personas y una
economía que alguna vez se basó en la agricultura, China ha
10
Presidente de China, secretario general del PCCh y presidente del Com Militar Central estatal
misión y partido Comisión Militar Central.
11
Estos éxitos económicos desde 1978 han sacado de la pobreza a entre 200 y 300 millones de campesinos chinos
(Thomas 2007, p. 28). Sin embargo, alrededor de 150 millones de chinos caen por debajo de las líneas internacionales de
pobreza, y el gobierno de China ha estado luchando para contener los daños ambientales, en particular la contaminación
del aire, la erosión del suelo y la caída del nivel freático, y la contención social relacionada con el rápido crecimiento de la
economía. transformación. En teoría, el punto de vista de Veblen (1904) , conocido como la 'dicotomía ceremonialinstrumental',
podría proporcionar una explicación de la desigualdad de ingresos, las disparidades en el crecimiento de la producción y
las asimetrías tecnológicas, además de otros desafíos socioeconómicos entre las áreas costeras y China continental
durante los últimos 20 años. De hecho, según la contribución analítica de Veblen, la clave de la evolución humana es la
invención de tecnologías nuevas y más eficaces. La sociedad progresa aprendiendo a manejar los medios materiales de
vida. Veblen vio que aunque cada sociedad depende de herramientas y habilidades para apoyar el 'proceso de vida', cada
sociedad también parecía tener una 'estructura estratificada de vida de grupo de estatus'. Esto dio lugar a la dicotomía de
lo 'ceremonial' –—relacionado con el pasado– —y lo 'instrumental' –—orientado hacia el progreso tecnológico del futuro–
(Veblen 1904; Knoedler 1997).
1 3
industrializarse fuertemente y tiene un impacto signifcativo en el comercio mundial (Hu 2011;
Kroeber 2016).12,13
Por lo tanto, el poder económico de China fue un esfuerzo de crecimiento acumulativo
durante los últimos 70 años aproximadamente, y la experiencia china ejemplifica el papel
decisivo que desempeñó el gobierno nacional en la expansión y el posicionamiento industrial.
Además, China ha desarrollado un enfoque del comercio exterior (es decir, comercio
'administrado' o 'estratégico') que le permitió al país cosechar la mayoría de los benefcios de las
interacciones globales y evitar, en gran medida, la turbulencia financiera de Asia oriental de 1998–2000 (Das 20
Evidentemente, los políticos chinos han adoptado estrategias y políticas que, en muchos
sentidos, violan los principios de la economía neoclásica y neoliberal.
En la próxima década, China puede recuperar su lugar como potencia económica mundial
líder al convertirse, quizás junto con India, en uno de los 2 o 3 actores económicos más grandes
e importantes del mundo (Hu 2011 ) .14,15 el énfasis puesto en las metas de crecimiento puede
haber contribuido a que se descuiden los desarrollos adversos, como el aumento de la
desigualdad, las deficiencias en la evolución social, la contaminación ambiental y las guerras comerciales.
Además, la economía china se ha visto afectada por las turbulencias financieras mundiales,
especialmente en 2019, y las condiciones económicas más recientes de la guerra comercial,
tecnológica, arancelaria y del coronavirus con EE. UU. Todos estos desarrollos adversos han
fortalecido en gran medida el argumento para ampliar los objetivos del gobierno más allá del
estrecho enfoque anterior en un alto crecimiento económico, a fin de abordar los múltiples
desafíos y cambios que enfrenta el país, a nivel nacional e internacional: demográficos,
tecnológicos, ambientales, macroeconómicos, económicos y sociales. e institucional (Naughton
2018).
Habiendo discutido los esfuerzos y legados de desarrollo de China desde fines del siglo XIX,
en las siguientes secciones, yuxtaponemos los rasgos del modelo general de estado desarrollista
de Asia oriental con los de la marca china particular del estado desarrollista. Además,
analizamos importantes factores políticoinstitucionales y socioculturales que contribuyeron en
gran medida a su exitoso ascenso económico actual.
12
En febrero de 2021, el gobierno chino declaró el éxito en la larga lucha contra la pobreza, marcando la conclusión oficial de la
campaña emblemática del presidente Xi Jinping para sacar a casi 100 millones de personas de la pobreza desde 2012. Actualmente,
China está recalibrando su estrategia nacional de alivio de la pobreza. hacia uno de revitalización rural, con el objetivo de lograr la
'prosperidad común' evitando que las personas vuelvan a caer en la pobreza y reduciendo la brecha de riqueza entre las ciudades y
el campo (ver el 14.º Plan Quinquenal de China 20212025).
13
Aunque China ha experimentado un rápido crecimiento económico durante más de 30 años, la mayoría de los países occidentales
prestó atención a ese éxito solo después de su entrada en la OMC y la organización de los Juegos Olímpicos de 2008.
14
Según varias fuentes, China no se había convertido en la segunda economía más grande hasta 2010. Louis Kuijs (2009),
economista sénior de la Ofcina del Banco Mundial en Beijing, dijo que la economía de China podría ser incluso (en enero de 2009)
hasta 15 % % mayor que la de Alemania. Según las encuestas de Gallup, muchos estadounidenses califican la economía de China
en primer lugar; pero considerando el PIB per cápita, Estados UnidosA sigue siendo la economía más grande del mundo. Aún así, hay
un debate en curso entre analistas y académicos occidentales sobre si China puede continuar con su historial de éxito. Por ejemplo,
los analistas del Banco Mundial y muchos otros creen que China continuará su exitoso camino actual hacia el desarrollo con
impresionantes tasas de crecimiento económico de al menos el 7% anual durante otros 20 años.
15
Importantes iniciativas políticas durante la era global posterior a 2000, por ejemplo, la iniciativa 'BeltandRoad', la 'estrategia
Made in China 2025' y el llamado 'consenso de Beijing' o diplomacia de ayuda/recursos, van más allá de la el enfoque principal y la
idea central del argumento del artículo y no se discutirán aquí.
1 3
3 Aspectos del enfoque del Estado desarrollista
El auge económico de China como motor de producción mundial no se produjo simplemente
porque instituciones políticas y sociales arraigadas y de larga data han dado forma a la
trayectoria de desarrollo nacional del país. Este notable logro económico no ha seguido los
paradigmas de desarrollo favoritos del mundo occidental, sino la experiencia única de China.
Tal experiencia se basa en la civilización de 3000 años de antigüedad del país y en gran
medida en el confucianismo, forjada por los esfuerzos, las innovaciones y el proceso de prueba
y error de varias generaciones recientes; además, está guiado por el Partido Comunista Chino
en los últimos 70 años más o menos. Desde el establecimiento de la República Popular China,
el gobierno administró centralmente los esfuerzos de desarrollo del país y desempeñó un
papel importante en esta rápida expansión (por ejemplo, 14 planes quinquenales desde 1953)
que posee las características de un estado desarrollista. Por lo tanto, el enfoque de China
para la planificación económica parece estar en línea con el modelo de estado desarrollista,
ya que puede interpretarse como el último heredero de esta experiencia. Sin embargo, para
enmarcar un estado desarrollista chino, los elementos políticoinstitucionales y socioculturales
específicos son esenciales. Debe considerar la matriz sociocultural e institucional del país, y
debe enmarcarse en el contexto de las instituciones que lo conforman y lo definen (Karagiannis
y MadjdSadjadi 2007 ).
Además, los atributos chinos del estado desarrollista incluyen lo siguiente: el legado de la
planificación central; una administración central fuerte con una gran burocracia; la
infraestructura masiva de la industria pesada; el apoyo activo a la política industrial; industria
intensiva en mano de obra acompañada de industria intensiva en capital sustitutivo de
importaciones; la alta tasa de ahorro interno; y el control corporativista sobre la sociedad. La
marca china incluye un régimen autoritario que está 'organizado en una red jerárquica
expansiva [...] que llega a muchos aspectos de la sociedad, guía el desarrollo económico
mediante la promoción explícita de amplios sectores, limita el acceso al proceso de formulación
de políticas e impide la formación de grupos de interés, como los sindicatos, que distraerían la
atención de las prioridades nacionales' (Dumbaugh y Martin 2009, p. 4). Sin embargo, una
descripción completa de la literatura más amplia sobre el estado desarrollista señala esos tres
factores políticoestructurales que parecen ser esenciales en el contexto chino (Chang 2010).
Primero, un estado competente y relativamente autónomo, en gran medida libre de
presiones sociales particulares, puede facilitar los esfuerzos de desarrollo planificados a través
de una intervención decidida en la economía nacional. Esto requiere un entorno político
estable, que podría aislar a los burócratas gubernamentales de las presiones partidistas que
podrían interferir con los esfuerzos dirigidos por el estado (WooCumings 1999). De lo
contrario, la formulación y promulgación de políticas sufriría inevitablemente las externalidades
negativas de las demandas parroquiales. Sin embargo, 'un estado desarrollista con
características chinas' enfrenta el importante desafío de las condiciones globales hostiles.16
Por lo tanto, esta autonomía relativa también necesita incorporar una dimensión internacional,
donde el espacio político del gobierno no se vea severamente restringido por los términos y
condiciones impuestos por los gobiernos externos. intereses y/u organizaciones poderosas.
dieciséis
Esta frase fue utilizada inicialmente por Karagiannis, Cherikh y Elsner (2020).
1 3
En segundo lugar, la administración china cuenta con burócratas competentes,
'seleccionados bajo estrictos estándares de reclutamiento e incentivados por el sistema
de promoción basado en el desempeño del Partido Comunista' (Knight 2014, p. 1338). La
asociación estratégica de CCP con las élites empresariales aseguró la integración del
estado en la economía, brindándole amplios canales basados en redes para el intercambio
de información y una respuesta política efectiva. Este arraigo también establece los lazos
que pueden unir al Estado con la sociedad y abre canales para la 'negociación y
renegociación de objetivos y políticas' en curso (Onis 1991, p. 123; Evans 1995, p. 12 y
pp. 2425). ; Dickson 2003). Más concretamente, el estado de China tiene autoridad, es
competente y está socialmente integrado en el sistema económico, lo que le ha dado
capacidad general y ha asegurado su ascenso como 'la marca china del estado
desarrollista'. Aunque China disfruta de estabilidad política bajo su Partido Comunista, la
pregunta sigue siendo si su gobierno nacional ha establecido instituciones y políticas
adecuadas para dirigir los planes de desarrollo económico. En consecuencia, el estado
necesitaría poner especial énfasis en una integración más funcional y responsable en la
sociedad a través de arreglos de estadoempresa y sociedad estatal.
En tercer lugar, dado que el desarrollo es un proceso dinámico multifacético, debe
seguir confiando en los esfuerzos humanos transformados por siglos de filosofía y en
planes completos y técnicamente competentes que busquen alcanzar los objetivos
industriales más novedosos (por ejemplo, el progreso industrial verde) y mejorar aún más
la sociedad china. El 'Estado desarrollista con características chinas' ha sido dirigido por
entidades gubernamentales capaces de construir e implementar políticas sin ceder a las
demandas del público, lo que podría haber socavado los esfuerzos de desarrollo
endógeno. En el futuro, se debe deliberar y articular una impresión relativamente clara del
futuro del país para que los funcionarios estatales, las industrias locales dinámicas y la
sociedad compartan una visión consensuada de los medios y fines del desarrollo nacional.
Evidentemente, hay pocas dudas sobre la importancia histórica del confucianismo
para la política china; en consecuencia, el surgimiento de 'un estado desarrollista con
características chinas' ha dependido en gran medida de ciertos factores históricos,
estructurales, culturales y políticos, que son bastante diferentes de los de la mayoría de
los demás países (Karagiannis y MadjdSadjadi 2007; Knight 2014 ) . También está la
cuestión fundamental del tipo de estrategia de desarrollo. Los diferentes enfoques
adoptados por diferentes líderes chinos a lo largo de los años, en términos de sus
devociones filosóficas, paradigmas e instrumentos de desarrollo nacional, tienen impactos
diferenciales en los modos y resultados de la intervención estatal, ya que sirven como
marcos estratégicos que guían las acciones políticas. La cuestión crucial aquí es que las
ideologías y las políticas solo pueden tener éxito en la promoción de la transformación
industrial si son mutuamente y contextualmente compatibles (Gerschenkron 1962).
Claramente, un tema controvertido en el debate de larga data sobre el estado
desarrollista se refiere a la relación y la posible compatibilidad de una rápida transformación
económica e industrial con formas democráticas de gobierno. Esta pregunta está
claramente relacionada con el camino futuro de los esfuerzos de desarrollo de China y el
alcance del gradualismo, es decir, si el país seguirá el camino ortodoxo anglosajón o
conservará las características de un estado desarrollista altamente intervencionista, y
seguirá siendo una fuente de debates intelectuales y tensiones políticas en curso en el
contexto de las realidades contemporáneas del entorno internacional. Otro tema crítico se refiere
1 3
las lecciones que se pueden extraer de la historia de éxito de Asia oriental, que posteriormente se
pueden aplicar en el caso chino. Amplia evidencia demuestra claramente que los éxitos de los
países de Asia oriental fueron producto de sus propias circunstancias históricas específicas (Onis
1991).
A pesar del hecho de que la aceptación cultural es alta entre la gente de China, los legados
históricos y las condiciones internas del país son diferentes a las de las economías de Asia oriental,
y estas diferencias pueden resultar en un camino de desarrollo diferente.
Las diferencias notables son las siguientes: las entidades estatales, que aún mantienen la parte
del león en la economía; la alta tasa de ahorro interno suministra fondos a las empresas estatales;
la política de puertas abiertas se ha restringido principalmente a las zonas costeras del este; los
controles de capital y el mercado financiero subdesarrollado restringen el libre flujo de las finanzas
globales; las inversiones medianas y pequeñas de los chinos de ultramar han generado IED
masivas; y las empresas de municipios y aldeas en áreas rurales son el elemento vital para el
crecimiento de las actividades intensivas en mano de obra (Beeson 2009).
Por lo tanto, pueden existir importantes restricciones institucionales y de otro tipo sobre la
transferibilidad o replicabilidad del estado desarrollista de Asia oriental en China. Puede ser
necesario tener en cuenta las formas en que la dirección del Partido Comunista y la relación entre
el Partido y el gobierno podrían cambiar mediante la remodelación de las organizaciones y la
creación de élites altamente calificadas como principales focos de eficiencia administrativa.
mejoras Si bien la experiencia privada podría emplearse y utilizarse, el estado aún podría guiar los
esfuerzos de desarrollo, impulsar los motores de inversión y supervisar la implementación de
políticas. El desafío de desarrollo para los tomadores de decisiones y políticas de China podría
ser lograr una concentración más limitada del poder del gobierno, pero con menos corrupción (Onis
1991, p. 123). Si bien China ha carecido durante mucho tiempo de esas instituciones dirigidas por
el gobierno encargadas de coordinar las asociaciones estatales y privadas, recientemente ha
comenzado a establecer arreglos políticoinstitucionales sofisticados para respaldar los objetivos y
políticas nacionales más recientes (como el aumento de la eficiencia energética, el alivio de la
pobreza y el desarrollo rural). revitalización) ya que el crecimiento económico estimula la demanda
de desarrollo en varios sectores de la sociedad. A largo plazo, la formación que está surgiendo en
China, que es producto de la combinación de factores internos y externos, apoyaría o confirmaría
el estatus del país como un estado desarrollista (Baek 2005; Knight 2014 ) .
4 Elementos políticoinstitucionales y socioculturales
El Partido Comunista Chino ha gobernado la República Popular China, como un país de partido
único, desde 1949. La estructura de autoridad de China posterior a 1949 proporciona una buena
explicación del comportamiento político en la cima y entre las élites y el pueblo.
El Partido Comunista Chino llama al sistema del país una 'democracia consultiva socialista',17 y
la máxima autoridad responde continuamente a las necesidades de la sociedad. La política de la
República Popular China se lleva a cabo dentro de un marco de república socialista dirigido por el
Partido Comunista. Además, el liderazgo político 'controla, coordina y motiva al oficialismo en todo
17
Disponible en: www.chinadaily.com.cn, Democracia Consultiva Socialista, consultado el 13 de febrero de 2020.
1 3
peldaños en la [burocracia gubernamental]' (Knight 2014, p. 1338).18 La combinación de un gobierno
de partido único bajo la autoridad del Partido Comunista Chino, una sociedad en gran parte subordinada
con un grado bastante alto de confianza y cumplimiento, y un sistema unitarioprovincial reserva al
centro el control y la supervisión de la política general. Además, una configuración etnocultural
relativamente homogénea, en la que los Han son la etnia dominante, ha permitido que el Estado tenga
un papel más independiente en la formulación y aplicación de políticas desarrollistas de orientación
nacional. Las minorías étnicas generalmente reciben benefcios en áreas de política social, como
empleo en el gobierno, ingreso a la escuela, control de la población y reclutamiento militar (Cultural
Atlas 2016 ). En consecuencia, el gobierno en China ha sentido mucha menos presión o influencia
partidista, ya sea de formaciones etnoculturales, regionales o de clase.
Toda la maquinaria gubernamental china está efectivamente dividida en dos conjuntos de
organizaciones: "un sistema de organizaciones [burocráticas] y un sistema de organizaciones
geográficas". La autoridad estatal se ejerce a través del Partido Comunista, el Gobierno Popular
Central (Consejo de Estado) y la representación provincial y local. La geografía también tiene una
conexión 'políticoinstitucional' ya que la delegación del poder político ha sido ideada a lo largo de
líneas geográficas. Las estructuras institucionales pueden cambiar en la dirección del liderazgo
político de China, y los cambios estructurales pueden ocurrir más que el cambio cultural. Sin embargo,
“el poder político en China se ha vuelto difuso, complejo y, en ocasiones, altamente
competitivo” (Dumbaugh y Martin 2009, p. 1). Los principales actores que coexisten con el Partido
Comunista de China en la cúspide de su configuración política son los siguientes: (1) Una burocracia
del gobierno nacional, cuyas estructuras son 'estrechamente paralelas a las del Partido en toda China,
operando de manera en gran medida separada pero [sin embargo] entrelazada. ejecutar y administrar
los negocios del Estado'. (2) El Ejército Popular de Liberación, 'operando en gran parte por separado
y con una tenue distinción entre liderazgo civil, militar y del Partido'; y (3) El Congreso Nacional del
Pueblo, 'constitucionalmente la entidad más alta del poder estatal pero en la práctica la más débil de
las principales instituciones políticas' (Dumbaugh y Martin, op. cit., pp. 910). Otras estructuras políticas
en China incluyen las siguientes:
• Un número de unidades de investigación de políticas oficiales y cuasioficiales y grupos de expertos
que pueden aportar propuestas al proceso de elaboración de políticas19;
18
Aunque el sistema político de China a menudo es criticado erróneamente en Occidente por no tener elecciones, las elecciones son
un elemento de la 'democracia consultiva socialista' del país. Este error puede deberse a una mala interpretación del sistema político de
la República Popular China (véase también la nota 18).
19
Los diez principales think tanks de la República Popular China son (Dumbaugh y Martin 2009, p. 13; citado de la República Popular
China, 'First Forum on China's Think Tanks', Beijing, 2006):
• Academia China de Ciencias Sociales (CASS).
• Centro de Investigaciones para el Desarrollo del Consejo de Estado.
• Academia China de Ciencias (CAS).
• Academia de Ciencias Militares.
• Instituto Chino de Estudios Internacionales.
• Instituto Chino de Relaciones Internacionales Contemporáneas (CICIR).
• Comité Nacional de China para la Cooperación Económica del Pacífico.
• Asociación China para la Ciencia y la Tecnología.
• Instituto Internacional de Sociedad Estratégica de China.
• Instituto de Shanghai para Estudios Internacionales (SIIS).
Además, es muy probable que el Banco Popular de China continúe bajo el control del Consejo de Estado en el futuro (Dumbaugh y
Martin, op. cit.).
1 3
• una colección de intereses comerciales gubernamentales, multinacionales y privados que ejercen
presión sobre las decisiones políticas;
• una comunidad académica y universitaria vigorosa;
• las autoridades provinciales y locales, ya que la población del país, la vastedad geográfica y la
diversidad social pueden obstaculizar los esfuerzos para gobernar desde Beijing;
• un medio diverso que informe a la opinión pública; y
• una población cada vez mejor informada (Dumbaugh y Martin 2009, p. 1).
Cinco elementos del sistema económico de China, es decir, la estructura económica, la estructura política,
la ideología, el entorno externo y las reformas, han contribuido en gran medida a su sostenibilidad. La cultura
y la sociedad chinas se pueden defnir como 'colectivistas', y la combinación de restricciones, castigos y
recompensas ('palos y zanahorias') que ofrece la configuración política comunista tiene un impacto directo en
los valores y la psicología social del país. Sin embargo, los cambios que buscan remodelar las estructuras
existentes pueden enfrentar desafíos que pueden causar trastornos en el entorno socioeconómico y, en
consecuencia, pueden ser políticamente problemáticos. En ausencia de estructuras institucionales más
formalizadas y más responsables, las aspiraciones personales pueden desempeñar un papel importante en
las decisiones políticas (Karagiannis y MadjdSadjadi 2007). Además, la disciplina entre los diferentes niveles
de la estructura del partido y del gobierno puede ser débil, lo que lleva a una implementación de políticas
ineficaz y problemas de corrupción. A pesar de los problemas y desafíos internos, el sistema político liderado
por el Partido Comunista de la República Popular China ha demostrado ser notablemente resistente a los
desafíos pasados y actuales y, en gran medida, ha sido correspondido por la confianza y el cumplimiento de
la gente. Pero está bajo estrés y en una transición renuente. “Irónicamente, el compromiso del Partido de
permanecer en el poder parece estar obligándolo a adaptarse continuamente a las circunstancias cambiantes
y a hacer compromisos incrementales con otros participantes en el proceso político cuando es pragmático
hacerlo” (Dumbaugh y Martin 2009, p . ii).
Dado que el patrimonio cultural fuerte y vibrante de China se puede describir como basado en gran parte
en una remodelación hábil de elementos de la antigua creatividad china, el 'Gran Poder' de China, su cultura
e instituciones, sobrevivió e incluso prosperó a pesar de las identidades cambiantes de las dinastías soberanas
en el arriba. De hecho, la firmeza de la cultura china ilustra su impacto directo en los resultados del desarrollo
económico y explica la perseverancia de su gran poder a pesar de las diferentes cabezas dinásticas. Esta
firmeza también explica la posterior inflexibilidad y lentitud de China para innovar económicamente. Sin
embargo, para entender lo que realmente cambió, primero debemos examinar el 'Gran Poder' real de China,
es decir, sus instituciones políticas y culturales. Al hacerlo, podemos ver que las instituciones chinas estaban
fuertemente influenciadas por el pensamiento confuciano, y el llamado a que un gobierno actúe con
benevolencia se erige como una creencia importante de esta doctrina. Sin embargo, si bien el confucianismo
tiene una influencia atemporal, en la práctica, en la China dinástica, creó una formación política excesivamente
centralizada y rígida que era especialmente vulnerable a la captura por parte de intereses especiales que
estaban más preocupados por la pureza ideológica que por el éxito económico (Knight 2014 ; Cultural Atlas
2016).
La economía china actual se ha encogido de hombros ante muchos de los hábitos e instituciones de su
pasado imperial, muchos de los cuales fueron descartados por Mao Zedong y Deng Xiaoping. El estado
moderno de un solo partido aprecia la estabilidad con gran efecto. Hay
1 3
equilibrio administrativo en Beijing, lo que disminuye la vulnerabilidad a cambios bruscos o
inflexibles de política. Sin embargo, la economía de China sigue siendo administrada centralmente,
lo cual es una característica principal que podría hacer que el progreso institucional sea menos probable.
A pesar de los caos políticos y sociales que en ocasiones han asolado el país,20
China es única entre las naciones en su longevidad y resistencia como una experiencia cultural
política distinta. Gran parte del progreso cultural de China se ha logrado con relativamente poca
influencia externa (Bond 2010; Cultural Atlas 2016).
Claramente, los formuladores de políticas chinos deberían buscar trabajar con las partes
interesadas del país para desarrollar un modelo de estado desarrollista distintivamente chino. Al
hacerlo, deben tener en cuenta tres intercambios políticoinstitucionales y socioculturales cruciales:
entre jerarquía e igualitarismo, entre arraigo y autonomía, y entre dominio y armonía social.
Primero, un tipo tecnocrático musculoso
el núcleo central es necesario cerca de la cima del gobierno. El núcleo central puede consistir en
miembros excepcionales del servicio civil, los principales grupos de expertos destacados de la
República Popular China, la industria y los círculos académicos, científicos y profesionales. Una
oficina de planificación estratégica tan importante debería estar facultada para ocuparse de los
aspectos cualitativos y cuantitativos de la inversión industrial y promover un crecimiento regional
signifcativo (Cowling, 1990).
Esencialmente, el núcleo central debe estar determinado a gestionar y coordinar fuertes
vínculos entre el liderazgo político, las empresas y los clústeres dinámicos, las universidades y
los laboratorios tecnológicos, las agencias de financiación, las redes y las cadenas de contratación
(es decir, la creación de redes) a fin de obtener importantes beneficios colectivos . ' economías de
escala y alcance, especialmente en China continental. La sociedad china necesita formuladores
de políticas que puedan pensar 'fuera de la caja' para reestructurar las instituciones sociales y
políticas existentes, apoyar los vínculos verticales y horizontales orientados a la producción, que
promuevan el desarrollo, e impulsar sectores dinámicos prometedores y actividades de alto
potencial (Karagiannis, Cherikh y Elsner, 2020, págs. 12 y 13).21
Sin embargo, estos cambios no pueden llevarse a cabo sin que los ejecutivos políticos trabajen
mano a mano con los participantes de la industria para remodelar la economía regional a través de
actividades y sectores específicos e influir en su apertura a la inversión extranjera.
Por lo tanto, para lograr estos objetivos, el gobierno debe reunir a 'varios grupos de interés que
representen a los sectores [estatal] y empresarial, así como a la sociedad [china] en general, para
generar un amplio consenso sobre los objetivos estratégicos que deben ser apoyados e
implementados por personas bien educadas". tecnócratas del núcleo central bien capacitados,
eficientes y moralmente comprometidos” (Karagiannis 2019, p. 168; véase también Evans 1995).
Tal 'enfoque de estado desarrollista con características chinas' puede seguir utilizando
instituciones centradas en el desarrollo, junto con el capital, el conocimiento y la experiencia
adquiridos, para improvisar y ampliar sus actividades de crecimiento; bien puede superar los
desafíos políticoinstitucionales; y puede realinear la formulación de políticas con
20
Para obtener información detallada relacionada con la historia política moderna de China, consulte, entre otros, Dickson
(2003); Heilmann y Perry (2011); Mac Farquhar (2012); Heilmann (2017).
21
Teniendo en cuenta el gran énfasis del gobierno chino en las zonas económicas especiales ("enclaves"), donde la
inversión extranjera podría recibir un trato especial, así como la designación de zonas de desarrollo económico en las
ciudades costeras más grandes desde la década de 1980, la "dimensión regional" de las industrias estratégicas política es
muy importante y relevante aquí.
1 3
apremiantes objetivos nacionales de desarrollo. Los medios necesarios son los siguientes: (1)
'Un nuevo modelo de asociación' para organizar y gestionar las complejas relaciones entre el
gobierno nacional de China y las industrias locales seleccionadas (Mazzucato 2013). (2)
Deben existir instituciones políticas, económicas y sociales apropiadas y habilitadoras, ya que
tanto la cultura como las instituciones pueden afectar las opciones, acciones y resultados
políticos más amplios. Además, dos requisitos organizacionales vitales son los siguientes: (1)
Estandarización de procedimientos (por ejemplo, procedimientos para evaluaciones de
proyectos y decisiones de proyectos) y (2) evaluaciones periódicas del desempeño de la
agencia (Wade 2014, pp. 12–13 ) . Igual de importante, las funciones de los think tanks y las
entidades gubernamentales deben organizarse 'para que las esferas de operación no se
superpongan a fin de eliminar el conflicto interdepartamental que [podría] retrasar la capacidad
de implementar con éxito [políticas de crecimiento industrial y regional, particularmente en
China continental China]' (Karagiannis 2019, p. 169).
Por lo tanto, 'un estado desarrollista con características chinas' tendría que pagar
atención especial a los siguientes temas interdependientes:
• desarrollos a largo plazo en la economía, la población y el medio ambiente;
• vínculos contemporáneos entre el gobierno, la política, la política y la estructura social
tura;
• el papel de las entidades regionales y locales, los agricultores, los trabajadores y las empresas;
• relaciones entre el cambio económico, la cultura política y la psicología social;
y
• la historia de las relaciones familiares y de género.
Por supuesto, el proceso de planificación estratégica que lleva al país al siguiente nivel
debe ser 'inclusivo en todos los niveles' y puede conectarse con la necesidad social de una
mejor calidad de vida general para todos. Por esta importante razón, y tal vez por otras, la
acción estatal desarrollista en China requiere amplias consultas, un amplio consenso social y
político, un enfoque incesante y un compromiso continuo con los objetivos de 'propósito
nacional' para garantizar que las estrategias y políticas exhaustivas y técnicamente
competentes no puedan ser fácilmente invertida. Tal marco requiere un conjunto de
circunstancias favorables a tal cambio de política; en realidad sería un proyecto a largo plazo
que requeriría un cambio multidimensional (Evans 1995; Karagiannis 2002). Más
concretamente, la participación es una de las características definitorias del proceso mismo
que permite que todos en la sociedad acepten los objetivos definidos. En ausencia de dicha
participación por parte de los 'interlocutores sociales', los grupos marginados se resistirán al
cambio tanto en la producción como en los procesos políticos (Karagiannis y MadjdSadjadi 2007).
Evidentemente, las acciones políticas de China se han dirigido generalmente a una
variedad de objetivos políticos y económicos, siempre buscando los intereses nacionales a
largo plazo y asumiendo funciones cruciales de desarrollo. Después de 1949, el estado
comprometido del país siempre ha estado ejerciendo un poder político, ejecutivo y soberano
signifcativo, y ha estado trabajando para lograr un crecimiento continuo al estimular la
agroindustria y la manufactura, y al impulsar el posicionamiento estratégico y la competitividad
general. Además, en el caso chino, utilizar un marco de Estado desarrollista, por sobre el de
la globalización neoliberal, proporciona una mejor comprensión de sus atributos socioculturales
y políticoinstitucionales habilitadores.
1 3
Por último, es importante entender que China se ha desarrollado sobre sus propios
valores sociales, códigos de comportamiento y ética, y estos impregnan las instituciones de
su sociedad. De hecho, muchos aspectos únicos de los arreglos institucionales de China son
el producto de imperativos situacionales particulares y la dependencia del camino, incluido el
hecho de que el país se parece más a un imperio que a un estadonación típico. Aunque
China es un gran país etnocultural relativamente homogéneo, existen variaciones culturales
y lingüísticas en sus diferentes regiones. Sin embargo, a pesar de la diversidad de las
comunidades chinas, persisten muchas características compartidas. Las tres tradiciones
principales, es decir, el confucianismo (una escuela de filosofía en lugar de una religión que
significa jerarquía social y enfatiza la ética del trabajo, la responsabilidad hacia la comunidad
y la obediencia y el respeto a los mayores), el taoísmo (que se enfoca en ideales de
equilibrio y orden), y el budismo (su objetivo es el nirvana, una trascendencia de los confines
de la mente y el cuerpo, y es similar al taoísmo en su rechazo del esfuerzo y los bienes
materiales), han dejado una impresión colectiva y duradera en la cultura y la tradición chinas
(Bond 2010) . ; Atlas Cultural 2016). Como resultado directo, China no ha importado la
experiencia de desarrollo occidental al por mayor.
Los políticos de China tampoco pueden adoptar indiscriminadamente el modelo de Asia
oriental, porque su cultura es muy compleja. De hecho, el país ha generado su propio, rico y
profundo sistema de valores que pertenece a una de las civilizaciones más antiguas y tiene
sus propios procesos sociales y psicológicos (Bond 2010). Los valores más importantes de
la cultura china incluyen los siguientes: la importancia de la familia; la estructura jerárquica
de la vida social; el cultivo del ahorro, la moralidad y el autocontrol; y el énfasis en el trabajo
duro y el logro. Estos se derivan en gran medida de la influencia generalizada de la filosofía
confuciana de la cultura china y son el núcleo mismo de la identidad del país (por ejemplo, el
desarrollo de un código moral basado en la honestidad, el respeto, la educación, la
amabilidad y fuertes valores familiares). En palabras de Weiming (2002) , el confucianismo
es "la sustancia del aprendizaje, la fuente de valores y el código social de los chinos" que
ayudó al gobierno a "producir funcionarios bien capacitados" y a la sociedad al dar forma a
un conjunto cohesivo de valores, creencias y normas.22
En consecuencia, el gobierno enfatiza los altos valores morales, la integridad y la
benevolencia, y el sistema legal actúa como complemento. La ética y la cultura del trabajo
chino enfatizan la importancia del autocultivo, la diligencia, la prudencia en el uso de los
recursos y el respeto por la autoridad. El impulso empresarial influenciado por el confucianismo
pone énfasis en el esfuerzo entusiasta, la eficiencia en el uso de los recursos, la moral y la
ética empresarial. La armonía social se logra acentuando los valores del humanismo, la
benevolencia, la rectitud, la mentalidad de grupo y la confianza. El confucianismo en la
práctica creó un orden político rígido y altamente centralizado, y produjo una combinación y
equilibrio de la ética laboral "correcta" con el crecimiento industrial y el impulso empresarial
dentro de una sociedad política y socialmente estable y armoniosa. Así, dado que el
pensamiento confuciano ha dominado la forma de vida china durante unos 2000 años,
continuará ejerciendo una gran influencia.
La inclusión de aspectos institucionales socioculturales y políticos agrega rigor a las
investigaciones intelectuales, haciéndolas así más capaces de exponer los matices de la realidad.
22
Ver el 'Confucianismo' de Tu Weiming, disponible en https://www.britannica.com/topic/Confucianism.
1 3
mundo.23 Dado que los rasgos políticoinstitucionales y culturales son claramente
responsables de los resultados socioeconómicos, sin estas condiciones previas, tal marco
alternativo de Estado desarrollista podría naufragar en la configuración existente de
relaciones socioeconómicas y ciertos intereses; o la mentalidad de los políticos y la gente.
Todas estas nociones socioculturales y políticoinstitucionales respaldan plenamente la
marca china del estado desarrollista. Al final del día, la llegada tardía del país al campo del
desarrollo no descarta su calificación como un estado desarrollista exitoso (Karagiannis
2002; Knight, 2014).
5 Resumen y conclusiones
Como se analiza extensamente en esta contribución, y a pesar de los diferentes grados
de énfasis de las políticas y la asignación de recursos hacia los diferentes sectores a lo
largo del tiempo, el modelo de crecimiento chino ha conservado la mayoría de las
características del modelo de Asia oriental, en lugar de seguir el tipo anglosajón de
liberalización económica. , y ha ilustrado los efectos de la cultura y las instituciones en los
resultados del desarrollo endógeno. Además, la visión del estado desarrollista proporciona
un sistema políticoinstitucional que puede perseguir resultados económicos y sociales
aún mejores. En realidad, el estado desarrollista chino ha sido capaz de adaptar sus
organizaciones para una acción apropiadamente compleja y efectiva con la perspectiva de
que la intervención, el aprendizaje, la adaptación y la experimentación flexible en políticas
nunca terminen.24 Las intervenciones políticas en China han podido moldear arreglos
sociales y políticos, que han estado interactuando de manera efectiva con constelaciones
dinámicas y emergentes en favor de resultados superiores, consistentes con amplios
objetivos sociopolíticos. Por lo tanto, en medio de toda esta complejidad en un país enorme, la acción polí
desbloquear, apoyar y acelerar el desarrollo impulsado internamente' (Elsner 2019, p. 41).
La suposición aquí, sin embargo, es que, en completo contraste con los modelos de
desarrollo ortodoxos y neoliberales (como la productividad total de los factores o las
microfinanzas), permitir la intervención política institucionalizada sigue siendo una fuerza
positiva importante dentro del contexto actual de globalización y fnanciarización como
socioeco. El avance económico es un "trabajo en progreso" continuo para los países en
todos los niveles de desarrollo (Karagiannis y King 2019).
Aunque ha habido numerosas luchas por el poder político, cambios y oscilaciones, y
externalidades socioeconómicas, por ejemplo, el Gran Salto Adelante y el
23
Incluso algunos intentos heterodoxos progresistas no han podido explicar con éxito la experiencia china. Los
partidarios de la teoría del Nuevo Desarrollo (por ejemplo, Lopes Milare 2020) utilizan un enfoque muy limitado que pone
gran énfasis en los 'cinco precios macroeconómicos' pero descarta casi todo lo demás (es decir, historia, sociedad, cultura,
instituciones y sistema político, etc.), incluido el papel muy importante de la planificación del desarrollo y la estrategia
industrial en la formulación de políticas del gobierno chino.
Claramente, el Nuevo Desarrollismo no pone la política industrial estratégica “'en primer lugar, sino como un complemento
a la adecuación de los cinco precios macroeconómicos”' (Lopes Milare, op. cit., p. 55). En consecuencia, el argumento de
la 'trampa del ingreso medio', aplicado a América Latina, deja en claro que China no ha seguido, y ciertamente no seguirá,
el camino de los regímenes latinoamericanos.
24
Una cita de Joan Robinson (1978, p. 27) es muy interesante, importante y relevante aquí: “'Es un error popular que la
burocracia es menos flexible que la empresa privada. Puede ser así en detalle, pero cuando hay que hacer adaptaciones
a gran escala, el control central es más fexible”'.
1 3
años tumultuosos de la década de 1970—un enfoque relativamente coherente que priorizaba
claramente el desarrollo nacional y la producción real estuvo generalmente presente en la mayoría
de las iniciativas estatales posteriores a 1950. Si bien existe preocupación por la reciente
desaceleración del desempeño económico de China, así como por los acontecimientos mundiales
actuales,25 su crecimiento continúa superando las tasas de la mayoría de las economías en todo
el mundo. Además, hay esperanzas de que su población continúe experimentando un aumento
en la calidad de vida a medida que el acceso a los servicios públicos continúa ampliándose y
mejorando (Hu 2011; Kroeber 2016). Por otro lado, los puntos de vista heterodoxos pragmáticos
y de gran alcance revelan las principales fallas y limitaciones de los análisis neoliberales y de la
corriente principal ahistóricos, apolíticos y libres de contexto en sus intentos superficiales de
explicar el desarrollo duradero de China.
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25
La calamidad sin precedentes de COVID19 plantea enormes desafíos para China y más allá; por lo tanto, solicita más
investigaciones y contribuciones académicas sobre el panorama geopolítico de la movilidad global en muchos países del mundo.
Sin embargo, como prueba la historia, no habrá guerra. Teniendo en cuenta que China se ha convertido en una potencia de
producción global (el 'niño global') en las últimas décadas, el sistema capitalista mundial, sus principales instituciones y actores
dominantes resolverán todo dentro de una lógica de ganarganar. Por lo tanto, todos estos llamados de políticos y comentaristas
de los medios contra China parecen ser solo palabras inteligentes o valientes.
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Autores y Afiliaciones
Philip Arestis1 · Nikolaos Karagiannis2 · Sangkwon Lee3
Philip Arestis
pa267@cam.ac.uk
Sangkwon Lee
lees@wssu.edu
1
Centro de Políticas Públicas y Económicas de Cambridge, Departamento de Economía de la Tierra, Universidad de
Cambridge, 19 Silver Street, Cambridge CB3 9EP, Reino Unido
2
Departamento de Contabilidad, Economía y Finanzas, 120 RJ Reynolds Center, WinstonSalem State University, 601
S. Martin Luther King Jr. Drive, WinstonSalem, NC 27110, EE. UU.
3
Departamento de Estudios de Salud, Educación Física y Deporte, 106 RJ Reynolds Center, WinstonSalem
State University, 601 S. Martin Luther King Jr. Drive, WinstonSalem, NC 27110, EE. UU.
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El Crecimiento Económico de China: Factores Político-Institucionales y Socioculturales Favorables

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