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Son riesgos no financieros, aquellos que no se relacionan directamente con las decisiones de
inversión, financiamiento y distribución de beneficios de las empresas, sino con las demás
actividades que esta desarrolla. Sin embargo, sus efectos siempre tienen consecuencias
financieras, al igual que los riesgos financieros.
Todos estos riesgos llevan implícita la posibilidad de que ocurra un evento no deseado que
genere pérdida de valor para la compañía.
1. Riesgo Operativo
Procesos: Se refiere a fallas originadas en la definición de los procesos internos, en las políticas,
normas y procedimientos. Son fallas de diseño y no de cumplimiento. Las fallas de
cumplimiento son de fuente personas.
Sistemas: Se refiere a fallos en las tecnologías, en los equipos, en las máquinas o en los
sistemas, de modo que dificulten o entorpezcan la calidad del producto, el servicio el cliente o
la continuidad operativa del negocio.
Además, Basilea II define un grupo de factores de riesgo operativo de nivel 1, conformado por:
1. Fraude interno.
2. Fraude externo.
3. Seguridad y relaciones laborales.
4. Fallas de sistemas y efectos en el negocio.
5. Daño de activos Físicos.
6. Efecto en los clientes por productos y prácticas empresariales.
7. Ejecución, entrega y gestión de procesos.
Para ello, se revisan principalmente los riesgos de crédito, liquidez, mercado, operacionales y
otros, así como los procesos que tiene el banco para su mitigación.
El riesgo operacional es una materia que, en conjunto con otras, la CMF evalúa en todas las
entidades financieras. Esta evaluación incide en la calificación global de la entidad.
1) Gestión de la Continuidad del Negocio: proceso de gestión que identifica las amenazas
potenciales para la organización y los impactos que podrían tener una interrupción en
la operación y que proporciona un marco a la organización para contar con la capacidad
de recuperación.
5) Gestión de los Servicios Externalizados: proceso por el cual la entidad gestiona los
riesgos asociados a las tercerizaciones de sus servicios.
El Riesgo Legal: Es parte del riesgo operativo para Basilea II. Es el riesgo que proviene de
contratos impracticables o clausulas ilegales, por Juicios con sentencias adversas, por
procedimientos legales que interrumpan o afecten el funcionamiento normal del banco, por
demandas en contra por error en la redacción de los contratos o promoción de productos.
2. Riesgo País
Las normas sobre Riesgo país, están contenidas en el Cap. 7-13 RAN CMF.
Puedes encontrar más detalles en: RAN 7-13: Riesgo País y Clasificación de Países.
• Establecer las políticas para créditos en el exterior fijando una adecuada diversificación
y límites crediticios por país.
• Establecer semestralmente la categoría de riesgo que le asigna a cada país con el cual
se opera.
• Velar por una evaluación rigurosa y continua del riesgo de cada país para su análisis y
seguimiento permanente.
Los bancos deberán constituir las provisiones necesarias para cubrir eventuales pérdidas por
los activos o derechos cuya recuperación está supeditada a una transferencia o giro desde el
exterior. En relación a esto se diferencian dos tipos, adicionales, de riesgo país:
• Riesgo soberano: Corresponde a las dificultades que podrían presentarse para ejercer
acciones contra el prestatario o último obligado al pago, por razones de soberanía.
• Riesgo de transferencia: Se refiere a la incapacidad general de los deudores de un país
para hacer frente a sus obligaciones con acreedores extranjeros, por carecer ese país
de suficientes divisas.
El riesgo reputacional puede significar grandes pérdidas para las empresas debido a la mala
aceptación que esta pueda tener en la comunidad en que se instale (caso Agrosuper Freirina).
Algunos clientes pudieran poner término a su relación con la empresa y otros podría no querer
operar con ella.
En este sentido no es extraño encontrar bancos que son activos participes en campañas de
ayuda a la comunidad, en el fomento del deporte, en el cuidado del medio ambiente, etc.
4. Riesgo Regulatorio