SATURNO RETROCEDE: VOLUNTAD Y COMPROMISO

Naytiry/9627

Saturno retrocede en el 2019 durante 141 días (del 29 de Abril al 18 de Septiembre), casi cinco
meses. Es el astro que rige la responsabilidad; mitológicamente llamado Cronos, Dios del Tiempo, el
Señor de la Ley de Causa y Efecto, o Ley del Karma. En la Astrología se considera el Gran Maestro de
vida que tenemos dentro, y nos disciplina en la Responsabilidad a través de dolorosos procesos.
Simboliza la autoridad (la que ejercemos en los demás, como la que otros en nosotros), como por
ejemplo, el jefe en el trabajo o quien esté arriba en términos de jerarquía. Tradicionalmente se le
asocia a la figura paterna que sostenía a la familia.
En este periodo de retroceso la exigencia de Saturno disminuye, el Súper-Yo, como ideal a alcanzar,
no está con la vara tan alta. Es excelente momento para ver en dónde poníamos esfuerzos
descomunales que, quizás, puedan relajarse un poco. Es un lapso para ver la realidad de manera no
tan cruda, el re-pensar si proyectamos hacia los demás (o nosotros mismos) una imagen de juez que
le pone puntaje a todo lo que hacemos.
Todo lo que construimos, proyectos y deseos sostenidos, es materia saturnina. Es donde pisamos
firme, por lo que en este periodo no nos podemos permitir desalentarnos; la clave es la Voluntad y el
Compromiso. Cuando Saturno retrocede, su gran poder de sostén duerme, como también lo hacen
nuestros límites; aquellos frenos que nos ponemos a nosotros mismos para no actuar de una forma
perjudicial y que vayan en contra de la convivencia en sociedad, pierden poder. Durante los meses
que dura esté tránsito tener cuidado con impulsos y arrebatos es fundamental.
El Planeta Anillado vuelve sobre el territorio que cubrió durante los últimos tres meses, lo que ralentiza
el progreso; se requiere que terminemos viejos asuntos. Los esfuerzos sinceros para limpiar
completamente la pizarra ayudarán a asegurar el éxito cuando nuevamente esté directo.
Los planetas, considerados como arquetipos o divinidades, son tendencias o influencias que llevan
hacia la “completitud” del ser, hacia el cumplimiento de un propósito de vida, de una especie de
Dharma. En este sentido Saturno es el encargado de poner orden y obligar por los medios más
forzosos a que el individuo cambie y entre en ritmo con el destino cósmico. Esta "rectificación" saturnal
no suele ser muy placentera que digamos.
Saturno ingresó a Capricornio (su signo regente, y donde es más potente) a finales de Diciembre del
2017 y estará en él hasta el 2020. Tal período tiene esta duración debido a los aparentes movimientos
retrógrados, que hacen que parezca regresar en su viaje por las constelaciones y permanezca más
tiempo dentro de la misma. El movimiento retrógrado es un tiempo de reflexión, detenimiento,
alentamiento, desconexión, una oportunidad para retomar fuerzas, planear y superar algunos de los
grandes escollos que repetidamente nos impiden florecer. Es el astro de los límites y los obstáculos,
esto suele generar frustración y dolor pero, como aprendemos con el tiempo, es necesario para crecer.