Está en la página 1de 23

INTECAP

Asistente de Pacientes

Modulo 8

Cuidado de los Pacientes en Estado Critico

Tutor

Raúl Bogantes

Nicole Ovares D.

Junio 2023
Introducción
“La función propia de la enfermera en los cuidados básicos consiste en atender al
individuo enfermo o sano en la ejecución de aquellas actividades que contribuyen a su
salud o a su restablecimiento (o a evitarle padecimientos en la hora de su muerte)
actividades que él realizaría por sí mismo si tuviera la fuerza, voluntad o conocimientos
necesarios. Igualmente corresponde a la enfermera cumplir esa misión en forma que
ayude al enfermo a independizarse lo más rápidamente posible. Además, la enfermera
ayuda al paciente a seguir el plan de tratamiento en la forma indicada por el médico”.

Por otra parte, como miembro de un equipo multidisciplinar colabora en la


planificación y ejecución de un programa global, ya sea para el mejoramiento de la
salud, el restablecimiento del paciente o para evitarle sufrimientos a la hora de la
muerte.

De acuerdo con este modelo, la persona es un ser integral, con componentes


biológicos, psicológicos, socioculturales y espirituales que interactúan entre sí y tienden
al máximo desarrollo de su potencial.

La salud es una cualidad de la vida, es básica para el funcionamiento del ser humano.
La salud requiere independencia de la persona para satisfacer las necesidades básicas. El
fomento de la salud es más importante que el cuidado de la enfermedad.

La medicina intensiva o de cuidados intensivos atiende aquellos pacientes cuya


enfermedad pone en peligro su vida de forma real o potencial y son susceptibles de
recuperarse; estos enfermos necesitan ser atendidos en áreas de asistencia específicas
como son las UCIs, que constituyen el escalón más avanzado de un esquema gradual de
atención al paciente. Actualmente se tiende a iniciar los cuidados intensivos donde surge
el problema patológico por medio de las UCIs móviles.
Quien es el Paciente Critico

Podemos conocer al paciente crítico como esa persona que, por contar con una
enfermedad grave o una reagudización de una enfermedad crónica, además de lesiones
y demás, presenta unos síntomas que, en conjunto, dan como resultado la respuesta
máxima que puede hacer su organismo frente a la agresión que está sufriendo.

Los pacientes que entran en la UCI cuentan con un orden de prioridad. La primordial
es para aquellos pacientes que están inestables y necesitan ayuda intensiva que no es
posible ofrecer fuera de esa unidad. La segunda es para los que requieres de planes de
cuidados de monitoreo intensivo y que podrían necesitar una intervención inmediata. Le
sigue la prioridad tres, la cual es para los pacientes que pueden recibir un tratamiento
intensivo y así mejorar o mantener estable la agudización de una enfermedad crónica,
siendo posible la limitación del tratamiento y del soporte. Para finalizar, la prioridad
cuatro la conforman los pacientes que no se van a beneficiar de los cuidados intensivos.

Importancia de los Cuidados Críticos

En la práctica sanitaria se dan situaciones diversas, en ocasiones de suma gravedad


en la que se está en peligro la vida del paciente. En estos casos, entra en acción el
cuidado crítico en enfermería, donde el profesional se encarga del diagnóstico y el
tratamiento de dolencias potencialmente mortales, las cuales requieren de un monitoreo
estricto y constante, y de un soporte vital integral.

La enfermería de cuidados críticos está enfocada a pacientes que se encuentran en


una situación clínica crítica, es decir, aquella en la que se ven alteradas una o varias
funciones vitales poniendo en riesgo su vida. En los últimos años, los hospitales
españoles han diversificado la forma en que denominan a las unidades donde se ofrece
asistencia a los pacientes más graves. Pero generalmente la unidad donde se llevan a
cabo cuidados críticos es la Unidad de Cuidados Intensivos o Unidad de Cuidados
Críticos.
Estas unidades pueden dividirse en áreas más concretas relacionadas con la dolencia
que tratan; así mismo puede haber: unidad de cuidados intensivos cardiológicos, de
pacientes trasplantados, posoperatoria de cirugía cardíaca, de cuidados intensivos
psiquiátricos, de pacientes pediátricos y también de neonatales (desde el nacimiento
hasta los 28 días de vida), entre otros.

La creación de Unidades de Cuidados Intermedios, áreas hospitalarias con una


dotación técnica y humana muy superior a las áreas convencionales de hospitalización,
suficiente para proporcionar vigilancia y cuidados asistenciales a los enfermos cuya
situación no permite su ingreso o traslado a plantas pero que, a su vez, no precisan el
alto nivel de cuidados que ofrecen las Unidades de Cuidados Intensivos.

La apertura de Servicios Extendidos de Cuidados Intensivos (SECI), servicios


depedientes de la UCI que pretenden mejorar la morbimortalidad mediante el
seguimiento de los pacientes dados de alta de la UCI y la detección temprana de los
pacientes graves en planta.

El personal de enfermería es una parte muy importante de la plantilla sanitaria de los


servicios de medicina intensiva. Las plantillas constan habitualmente de una enfermera
por cada 2-3 camas de intensivos y trabajan en tres turnos al día, dirigidos por una
supervisora que depende jerárquicamente de la dirección de enfermería.

Objetivos de la Enfermería de Cuidados Críticos

Los cuidados críticos en enfermería deben aplicarse con la mayor precisión, rapidez
y exactitud posible. El fin principal del enfermero o enfermera en la unidad de cuidados
críticos es el de promocionar y proteger la salud del paciente a través de la valoración e
identificación de factores de riesgo relacionados con el propio cuidado, para prevenirlos
o evitarlos en la medida de lo posible. Además, se diferencian otros objetivos durante el
ejercicio de sus funciones:

 Controlar los parámetros clínicos y hemodinámicos del paciente durante el


tratamiento.
 Observar y registrar la respuesta del paciente a los cuidados críticos.
 Conocer la función de cada uno de los componentes del sistema.
 Interpretar el significado de los diferentes valores de monitorización referentes a
cada paciente.
 Prevenir y detectar las complicaciones que se puedan desarrollar.
 Mantener la permeabilidad del filtro, líneas del circuito y catéteres.
 Identificar y actuar con rapidez ante las alarmas prioritarias más frecuentes.

Hay que tener en cuenta que estos objetivos son comunes, pero no los únicos que se
implementan, ya que cada centro hospitalario o unidad tiene una política o
procedimiento concreto.

El personal de enfermería juega un rol muy importante en la plantilla sanitaria de las


unidades de cuidados críticos. Por ello, es fundamental que estos trabajadores cuenten
con la formación correcta para desempeñar de forma eficaz las funciones que se le
requieren en el área de medicina intensiva. A este respecto, el Máster en Seguridad del
Paciente online de UNIR capacita al profesional sanitario para saber cómo gestionar
situaciones de crisis y cómo garantizar la seguridad del paciente mediante la puesta en
marcha de protocolos de seguridad clínica

Rutina de los Cuidados Críticos de Enfermería

Una vez que el paciente crítico ingresa en la unidad de cuidados críticos, el


profesional de enfermería realiza una serie de cuidados generales:

 Movilizar al paciente, en caso de que se haya indicado así.


 Controlar y verificar la dieta del paciente.
 Evaluar el estado y la evolución del paciente, y dar constancia de ello.
 Garantizar la higiene del paciente.
 Llevar a cabo el tipo de tratamiento médico que se ha prescrito.
 Colaborar con el profesional intensivista durante el proceso de diagnóstico y
terapias.
 Estar prevenido por si ocurriese una emergencia o por si hay una amenaza vital.
 Cubrir las demandas del paciente y sus familiares siempre que sea posible.
Los cuidados críticos de enfermería son sumamente importantes porque se
desarrollan en un espacio donde el paciente padece una afección muy grave en la que
está en riesgo su vida. Cumple una función tan relevante como es la de evitar que el
paciente fallezca.

Estas unidades están gestionadas por personas con competencias directivas y de


gestión, como las que se obtienen al cursar el Máster en Gestión de Enfermería online
de UNIR. Esta formación prepara a los estudiantes para saber coordinar, gestionar y
dirigir unidades de enfermería, como la de cuidados críticos, de forma eficaz y diligente.

Monitorización y Estudio del Paciente en Cuidados Críticos

Algunas pruebas para los pacientes en cuidados críticos dependen de la observación


directa y el examen físico y es intermitente, con una frecuencia que depende de la
enfermedad del paciente. Otros parámetros se monitorizan en forma continua mediante
instrumentos complejos que requieren entrenamiento y experiencia para manejarlos. La
mayoría de estos aparatos generan una alarma si se exceden ciertos parámetros
fisiológicos. Cada unidad de cuidados intensivos debe seguir estrictamente los
protocolos de evaluación de alertas.

El control consiste en la medición de los signos vitales (temperatura, tensión arterial,


pulso y frecuencia respiratoria), cuantificación del ingreso y egreso de líquidos, y a
menudo, presión intracraneal y/o peso diario. La tensión arterial puede registrarse con
un esfigmomanómetro automático, o un catéter arterial para la monitorización continua
de la tensión arterial. Se puede utilizar un sensor transcutáneo de oximetría del pulso.

Análisis de Sangre

En las unidades de cuidados intensivos se toman diariamente muestras de sangre de


rutina para detectar tempranamente cualquier alteración, aunque estas extracciones
frecuentes pueden producir daño a las venas, y ocasionar dolor y anemia. La colocación
de un catéter venoso central o un catéter arterial puede facilitar la toma de la muestra de
sangre sin necesidad de pinchar al paciente en forma repetida, pero se debe considerar el
riesgo de complicaciones. Por lo general, se realizan diariamente análisis de electrolitos
y hemograma completo. Asimismo, se deben medir las concentraciones de magnesio,
fosfato y calcio ionizado. En pacientes que reciben nutrición parenteral total, es preciso
practicar pruebas hepáticas y perfiles de coagulación semanales. Según sea necesario, se
realizan otras pruebas (p. ej., hemocultivo en caso de fiebre, hemograma completo
seriado en caso de posible pérdida activa de la sangre).

La evaluación en el sitio de la atención se realizan mediante instrumentos


miniaturizados altamente automatizados para efectuar algunas pruebas en sangre a la
cabecera del paciente o en una unidad (en particular, en la Unidad de Cuidados
Intensivos, el departamento de urgencias y el quirófano). Las pruebas disponibles más
comunes son electrolitos en sangre, glucemia, gases en sangre, hemograma completo,
marcadores cardíacos y estudios de la coagulación. Muchos de ellos se realizan en < 2
minutos y requieren < 0,5 mL de sangre.

Monitorización Cardíaca

En la mayoría de los pacientes en cuidados críticos, la actividad cardíaca se


monitoriza a través de un sistema de 3 electrodos; las señales se envían a una estación
central de monitorización a través de un pequeño transmisor de radio en el paciente. Los
sistemas automáticos alertan en caso de anormalidades de la frecuencia y el ritmo, y
permiten almacenar la información para una revisión futura.

Algunos monitores cardíacos especializados controlan parámetros avanzados


asociados con isquemia coronaria, aunque su beneficio clínico no está claro. Estos
parámetros incluyen monitorización continua del segmento ST y variabilidad de la
frecuencia cardíaca. Una pérdida de la variabilidad normal de la señal latido a latido
indica una reducción de la actividad automática y una posible isquemia coronaria con
riesgo de muerte.

Monitorización con Catéter de la Arteria Pulmonar


El uso de un catéter en la arteria pulmonar (CAP o catéter de Swan-Ganz) es cada
vez menos frecuente en los pacientes en las unidades de cuidados intensivos. Este
catéter contiene un balón en su extremo y se introduce a través de las venas centrales del
lado derecho del corazón en la arteria pulmonar. El catéter contiene varios puertos que
monitorizan la presión o inyectan líquidos. Algunos catéteres de arteria pulmonar
incluyen también un sensor que mide la saturación venosa central (mixta) de oxígeno.
Los datos del catéter de arteria pulmonar se utilizan principalmente para determinar el
gasto cardíaco y la precarga. La precarga se estima mediante la presión de oclusión de la
arteria pulmonar. Sin embargo, puede determinarse la precarga en forma más precisa
mediante el volumen ventricular derecho de fin de diástole, que se mide mediante
termistores de respuesta rápida sincronizados con la frecuencia cardíaca.

A pesar del uso prolongado, el catéter de arteria pulmonar no ha demostrado reducir


la morbmortalidad. Por el contrario, se asocia con mayor mortalidad. Esto puede
explicarse por las complicaciones de su uso y la mala interpretación de los datos
obtenidos. Sin embargo, algunos médicos creen que el uso de catéter de arteria
pulmonar, combinado con otros datos objetivos y clínicos, puede ayudar al manejo de
algunos pacientes con enfermedad crítica. Al igual que en muchos parámetros
fisiológicos, una tendencia al cambio en general es más significativa que un solo valor
anormal. Las posibles indicaciones para el cateterismo de la arteria pulmonar se
enumeran en la tabla Indicaciones potenciales del cateterismo de la arteria pulmonar.

Procedimiento

El catéter de la arteria pulmonar (CAP) se introduce a través de una vía especial en la


vena subclavia (en general, izquierda), en la yugular interna (en general, derecha) o, con
menor frecuencia, en la vena femoral con el balón (en la punta del catéter) desinflado.
Una vez que el extremo del catéter llega a la vena cava superior, se infla el balón para
permitir que el flujo sanguíneo guíe el catéter.

Posibles Indicaciones para el Cateterismo de la Arteria Pulmonar

 Afecciones cardíacas
 Inestabilidad hemodinámica
 Monitorización hemodinámica
 Afecciones pulmonares

Monitorización de la Presión Intracraneana

La monitorización de la presión intracraneal es de rutina para los pacientes con


traumatismo craneal cerrado grave y se utiliza en ocasiones para algunos otros
trastornos cerebrales, como en casos seleccionados de hidrocefalia y hipertensión
intracraneana idiopática (seudotumor cerebral) o en el posoperatorio o el tratamiento
posembólico de las malformaciones arteriovenosas. Estos instrumentos se utiliza para
monitorizar la presión intracraneal (normalmente 5 a 15 mmHg) y para optimizar la
presión de perfusión cerebral (tensión arterial media menos presión intracraneana). La
presión de perfusión cerebral debe mantenerse > 60 mmHg.

Existen varios tipos de monitores de presión intracraneana. El drenaje


extraventricular (DEV) es el método más útil; se coloca un catéter a través del cráneo
hasta llegar a un ventrículo cerebral (catéter de ventriculostomía). Este instrumento se
prefiere pues el catéter también puede drenar el líquido cefalorraquídeo y así disminuir
la presión intracraneana. Sin embargo, el drenaje extraventricular es un método
invasivo, tiene una alta tasa de infección y es difícil de colocar. En ocasiones, el drenaje
extraventricular se ocluye debido a edema cerebral grave.

Acceso Vascular

Cateterismo de una Vena Periférica

En la mayoría de los pacientes, las necesidades de líquidos y medicación intravenosa


pueden cumplirse con un catéter venoso periférico percutáneo. Si la colocación
percutánea a ciegas es difícil, la guía ecográfica generalmente logra una inserción
exitosa. En raras ocasiones se puede usar una vista venosa cuando la inserción
percutánea del catéter no es factible. Los lugares típicos de canalización venosa son la
vena cefálica en el brazo y la vena safena en el tobillo. Sin embargo, rara vez es
necesario el corte venoso debido al uso difundido de catéter central de inserción
periférica (CCIP) y vías intraóseas en adultos y niños.
Las complicaciones más comunes (p. ej., infección local, trombosis venosa,
tromboflebitis, extravasación de líquido intersticial) pueden reducirse utillizando una
técnica estéril meticulosa durante la colocación y reemplazando o retirando el catéter
dentro de las 72 horas

Cateterismo Venoso Central

Los pacientes que requieren un acceso vascular seguro o a largo plazo (p. ej., para
recibir antibióticos, quimioterapia o nutrición parenteral total) y pacientes con mal
acceso venoso periférico requieren un catéter venoso central (CVC). El CVC permite la
infusión de soluciones muy concentradas o irritantes para las venas periféricas y la
monitorización de la presión venosa central (PVC).

El CVC puede ser insertado a través de la vena yugular, subclavia, o femoral o a


través de las venas periféricas de la parte superior del brazo (línea PICC). Aunque el
tipo de catéter y el sitio elegido se determinan por la clínica y las características
inidviduales del paciente.

Cateterismo Arterial

El uso de dispositivos automáticos no invasivo de medición de la presión arterial ha


disminuido la necesidad de utilizar catéteres arteriales únicamente para la
monitorización de la presión. Sin embargo, estos catéteres son útiles en pacientes
inestables que requieren una medición de la presión minuto a minuto y en aquellos que
requieren muestras frecuentes de gases en sangre. Las indicaciones incluyen shock
refractario e insuficiencia respiratoria.

La presión arterial medida con un catéter arterial suele ser más elevada que con
esfingomanometría. La pendiente ascendente inicial, la presión sistólica máxima y la
tensión arterial diferencial aumentan cuanto más distal es el punto de medición,
mientras que la presión diastólica y la tensión arterial media disminuyen. La
calcificación de los vasos, la aterosclerosis, la oclusión proximal y la posición de las
extremidades pueden influir en el valor de la medición con catéter arterial
Monitorización No Invasiva

Electrocardiograma y Frecuencia Cardiaca CContinua

Preparación del Paciente

 Informar al paciente del procedimiento que se va a realizar


 Preparación de la piel: Limpie la piel y aféitela si es necesario.
 Coloque los electrodos en áreas planas, no musculares, para umentar al máximo
el contacto de los electrodos y ninimizar los artefactos del músculo y evite
articulaciones y potuberancias óseas.
 Asegurar la calidad de la señal y cambie los electrodos si la señal del ECG se
degrada o la piel se irrita, manteniendo si es posible la misma localización.

Colocación de Electrodos

Rojo: Línea media clavicular derecha, directamente debajo de la clavícula.

Amarilla: Línea media clavicular izquierda, directamente debajo de la clavícula.

Verde: Línea media clavicular izquierda, 6º-7º espacio intercostal.

Negro: Línea media clavicular derecha, 6º-7º espacio intercostal.

Blanco: 4º espacio intercostal, borde izquierdo del esternón. En paciente de S.C.A.


según localización isquémica.

Monitorización Mediante Telemetría

La telemetría permite monitorizar el electrocardiograma continuo desde un control


de enfermería de U.C.I. a un paciente en una unidad de hospitalización preferentemente
Cardiología. El objetivo es evaluar el ritmo cardiaco del paciente y garantizar la
asistencia urgente de cualquier situación de compromiso vital.

Equipo necesario
Un pequeño radiotransmisor que funciona a batería de cinco latiguillos (permite dos
canales de ECG) o tres latiguillos (sólo permite un canal de ECG), electrodos adhesivos
desechables, un monitor receptor, una antena de radio para que transmita la información
del ECG desde la batería portátil del radiotransmisor al monitor receptor y un interfono
preferente para llamadas urgentes entre U.C.I. y la planta de cardiología.

Indicaciones

 Síncopes malignos /disfunción sinusal.


 Intoxicación farmacológica de drogas arritmogénicas.
 Bloqueo auriculoventricular completo o bradicardias graves.
 Riesgo de arritmias ventriculares.
 Control arritmias no malignas (Ej. ACxFA)
 Paciente con MCPT dependiente.
 Disfunción de MCP definitivo o DAI (Desfibrilador autoimplantable).

Ventajas de la telemetría

 Comodidad para el paciente


 Monitoriza la tolerancia del paciente a la actividad.
 Garantiza la asistencia precoz si eventos graves.
 Disminuye número de ingresos y estancia media en U.C.I..
 Reducción de costes por ingreso.
 Desventajas
 La señal del ECG es de peor calidad.

Gráfica Horaria

Sirve para el registro gráfico de los signos vitales del paciente realizados por la
enfermera. En nuestro servicio existen dos modelos, la gráfica polivalente y la gráfica
coronaria.
Cara anterior

En el margen superior se identifican:

 Nombre y apellidos, Nº Historia, Cama, Alergias, Fecha de nacimiento y del día,


Diagnostico Médico, Teléfono particular (solo en 1º gráfica), peso, talla y edad.
 En el margen superior izquierdo aparecen los símbolos de cada signo vital con
su escala correspondiente para que se vayan registrando en cada columna
horaria.

Hemodinámica: Paciente con catéter de termodilución Swan–Ganz, se registrará en el


recuadro.

 Presión arterial pulmonar sistólica (APS), presión arterial


 Pulmonar diastólica (APD), Presión arterial pulmonar media (APM), presión
capilar pulmonar (PCP), gasto cardiaco (GC).
 Parámetros de ventilación mecánica u oxigenoterapia

Pautados por el médico:

 Modalidad de ventilación mecánica (VM), volumen corriente VC, frecuencia


respiratoria FR, FiO2 concentración de O2 inspirado, PEEP presión positiva
respiratoria, oxigenoterapia (VMK, gafas lxm).
 Registrar cualquier cambio de parámetros y los del principio de cada turno.

Glucosa capilar:

 medición de la glucemia pautando la frecuencia y anotando las cifras obtenidas.

Saturación de O2:

 Saturación de O2 que marca el pulsioxímetro.

Medicación:
 Se transcribe de la hoja de tratamiento del médico.
 Tipo medicación con su dosis, vía de administración, pauta horaria (marcando
con una barra diagonal a la hora que le corresponde según la pauta horaria
establecida, completando el aspa al administrar la medicación).

Sueroterapia:

 Indicando tipo de suero, cantidad, la medicación que se le añade “si procede” y


el ritmo de perfusión.
 Se marcará con un vector < a la hora que se comienza, siguiendo con una línea
continua hasta que se termina cerrándolo con el vector >, sobre la línea
registraremos el volumen total que se le infunde y bajo la línea las gotas por
minuto correspondientes si usamos medidor de gotas o ml/hora si usamos bomba
de perfusión.

Nutrición:

 Tipo de nutrición pautado, registrando el volumen en el recuadro si es a horas


pautadas, o con una línea continua como en la sueroterapia si es continua.
Pausa de 1h c/ 6h, 30 min. Pinzada y 30 min. A bolsa.

Balance hídrico:

 Se realizará a las 7h, en el turno de noche.

Según frecuencia

 Heces: Cruceteamos una + por cada 50 ml


 SNG (bolsa): Se registrará cantidad cada 24h, coloración, consistencia si
procede y anotar el debito parcial c/ 6h si tuviera pautada tolerancia de NE.
 Drenajes: Si tuviera más de uno, deberemos identificar cada uno de ellos y se
anotará la cantidad y características de cada uno
 La suma de todo se registrará en SUMATORIO PÉRDIDAS.

Entradas:
 En la columna donde pone INGRESOS se apuntará la cantidad de cada suero en
cc, cantidad de líquido administrado con los fármacos, hemoderivados y
cantidad de líquido o alimento ingerido por vía oral o por SNG.
 La suma de todo se registrará en SUMATORIO INGRESOS.

Cuidados Generales Del Paciente Critico

Actividades comunes a realizar en todos los turnos

 Se participará en el parte oral, conociendo la evolución de los pacientes


asignados durante las ultimas 24 horas, resaltando el ultimo turno.
 Aplicar tratamiento médico y cuidados de enfermería según lo planificado.
 Comprobar las pautas de medicación, cuidados generales, alarmas del monitor y
parámetros y alarmas del respirador control y registro de constates vitales
S.O.M. y criterio de enfermería.
 Colaboración con el médico para procedimientos diagnósticos y terapéuticos.
 Se actuará en cualquier situación de urgencia en la unidad.
 Cumplimentar la gráfica horaria, plan de cuidados y evolutivo.
 Atender a demandas tanto del paciente como de la familia.
 Control de tolerancia, apetito y tipo de dieta.
 Movilización (cambios posturales, levantar al sillón según protocolo
coronario…).
 Poner al alcance del paciente el timbre.
 Ofrecer enjuagues orales después de cada comida o realizar nosotros higiene
oral.

Actividades a realizar en el turno de mañana

 Se planificarán los cuidados correspondientes a cada paciente para las próximas


24 horas (control de glucemia, control de constantes neurológicas, cambios
posturales o los cuidados que procedan…)
 Se pasará visita junto con el médico responsable de cada paciente. Se realiza una
valoración y puesta en común de la situación actual de cada paciente por parte
del médico y la enfermera responsable, viendo como ha evolucionado su estado
en las últimas 24 horas.

Realizar higiene:

 Al paciente autónomo, se le proporcionarán los materiales necesarios para que se


realice de forma autónoma la higiene. Si no se le ayudará siempre y cuando se
necesario fomentando su autonomía.
 Higiene Corporal Completa — c/ día.
 Higiene orificios naturales en pacientes sedados:

Cuidados bucales — c/ 8 horas y cada vez que precise.

Cuidados nasales — c/ 8 horas y cada vez que precise.

Higiene ocular en pacientes inconscientes — c/ 8horas, y cada vez que precise.

Corte e higiene de uñas Si precisa.

Afeitado c /48 horas (solicitar a la familia maquinilla eléctrica si tiene).

Peinado.

Se puede invitar a la familia a participar en estos tres cuidados.

 Aplicar crema hidratante al finalizar la higiene y cuando precise.


 Lavado de cabeza — c/ 7-10 días.
 Cambios posturales: Si la situación hemodinámica o respiratoria lo permiten:

Alto riesgo — c/ 2 ó 3 horas.

Riesgo medio — c/ 3-4 horas.

La hemodiafiltración no es una contraindicación para los cambios posturales.

Cuidados Vía Venosa:

 Cura zona de inserción de catéter periférico c/ 48-72 horas según protocolo


 Catéter central (yugular, subclavia, femoral), c/ 48-72 horas según protocolo.
 También se ha de levantar la cura, siempre que esté sucia, con sangre, apósito
despegado o siempre que se tenga sospecha de infección.
 Vigilar signos o síntomas de infección del punto de punción.
 Cambio de catéter central se realiza c/ 7 días.
 Cambio de equipo de llaves de tres pasos y cambio de equipo de perfusión se
realizará c/ 48 horas, y cada vez que precise.
 Equipo de nutrición parenteral se cambiará a diario, al cambiar la nutrición.
 Cambio de transductor de presión en cada cambio de vía.
 Lavado de llaves después de cada extracción analítica.
 Cambio del contenido de diluciones continuas de medicación, c/ 24 horas

Cuidados Drenajes- Eliminación:

Sonda vesical:

 Lavado con agua y jabón c/ 24 horas de la zona perineal y genital.


 Lavado con suero fisiológico del exterior de la S.V. c/ 24 horas.
 Fijación en cara interna del muslo.
 Cambio recomendado c/ 30 días.

Sonda Nasogástrica:

 Cuidados de SNG, fijación y movilización para evitar


 Úlceras iatrogénicas en mucosa c/ 24 horas;
 Comprobar la permeabilidad.
 Cambio recomendado c/ 30 días.

Drenajes:

 Vigilancia, cuidados de drenajes, medición y cambio o vaciado del recipiente


colector y características del débito c/ turno.

Cuidados de herida quirúrgica, úlceras u otro tipo de lesiones según protocolo.

Cuidados respiratorios:

 Cambio de la fijación del tubo orotraqueal (TOT) c/ día, y cada vez que precise.
 Medición del TOT a nivel de comisura labial c/ turno.
 Medición de la presión del globo c/ turno.
 Aspiración de secreciones, si precisa.
 Lavado bronquial si precisa.
 Cambio de filtro de bacterias y codo de nebulización
 c/ 48 horas y cada vez que precise.
 Cambio de nebulización de la Ventilación mecánica c/ 48 y Cámara espaciadora
(MDI) c/ 48 horas.
 Cambio de tubuladura en Y a partir de 30 días desde inicio de ventilación
mecánica con el mismo respirador.
 Vigilancia y alternancia de puntos de apoyo de mascarilla facial, gafas y TOT c/
turno.
 Traqueotomía percutánea, ver capítulo 12.E.
 Realizar la gasometría venosa central o arterial si esta prescrita, anotando en la
hoja de resultados analíticos el patrón respiratorio del paciente.
 Rx de tórax si esta prescrita, posponiéndola si se prevé realizar el cambio de vía
venosa central.

Una vez que el facultativo prescribe el tratamiento, la enfermera realiza la planificación


de cuidados y transcribe el tratamiento de las siguientes 24 horas.

Se realiza la sesión clínica conjuntamente personal de enfermería y medico. En horario


de 13-14 horas. Cada enfermera acude a la sala de reuniones con el historial de sus
pacientes y se expone la situación de cada uno al equipo de guardia. Se toman
decisiones diagnosticas y terapéuticas conjuntas.

Actividades a Realizar en el Turno de Tarde

 Comprobar las pautas de medicación, cuidados generales, alarmas del monitor y


parámetros y alarmas del respirador.
 Revisar el tratamiento comprobando que la medicación está en la unidad y
pedirla si fuera necesario para que el turno de noche y primeras horas de la
mañana estén cubiertas.
 Además de las actividades para todos los turnos, se aplicará el plan de cuidados
y tratamiento según esté planificado.
 Se realiza un pase de visita conjunta del equipo medico de guardia y el turno
completo de enfermería a todos los pacientes de cada unidad, donde se transmite
situación de cada paciente y plan especifico a seguir.

Actividades a Realizar en el Turno de Noche

 Comprobar las pautas de medicación, cuidados generales, alarmas del monitor y


parámetros y alarmas del respirador.
 Proporcionar un ambiente tranquilo y confortable que facilite el descanso de
paciente.
 Preparar gráfica del día siguiente.
 Se realiza un pase de visita conjunta del equipo medico de guardia y el turno
completo de enfermería a todos los pacientes de cada unidad, donde se transmite
situación de cada paciente y plan especifico a seguir.
 Realizar los registros de Enfermería.
 Realizar al menos 3 cambios posturales (24, 3 y 6), evitando el decúbito supino
en el último.
 Comprobar ayunas y patrón intestinal (diarreas, estreñimiento).
 Revisar los volantes y preparar tubos de extracción de sangre.
 Realizar extracciones de sangre a las 7 horas.
 Valoración y evaluación general de las 24 horas del paciente (tolerancia,
constantes, débito de drenajes,…).
 Realizar balance hídrico a las 7 horas.

Cuidados Pauta de Angina

Informar al paciente que si presenta dolor, que nos avise con urgencia.

Si dolor anginoso:

 Preguntar de 0 a 10 la intensidad del dolor.


 Realizar ECG estándar y comparar con los previos para valorar si hay cambios
significativos.
 Colocar oxigenoterapia en gafas nasales a 2 lxm y monitorizar pulsioximetría y
tomar la TA.
 Si hay cambios en el ECG y no cede el dolor avisar con urgencia al médico
responsable o al de guardia y seguir con las órdenes médicas: Solinitrina
sublingual o aumentar NTG E.V., bolos de morfina, realizar más
electrocardiogramas.
 Guardar los electrocardiogramas e identificarlos en la historia.
 Registrar en gráfica hora de comienzo del dolor, tipo, duración y respuesta del
paciente a la analgesia.

Posibles Complicaciones Del Paciente Critico Durante La Higiene, Cambios


Posturales Y Traslados Intrahospitalarios

 Desaturación
 Desadaptación al ventilador (aumento de la presión pico en la via aérea,
aumento de la FR, disminución del volumen Minuto…)
 Hipotensión
 Hipertensión
 Bradicardia
 Taquicardia
 Arritmias cardiacas.
 Hipertensión intracraneal
 Retirada accidental de tubos, sondas, drenajes y/o catéteres.
 Hemorragia (salida de sangre al exterior incluyendo heridas quirúrgicas,
drenajes y sondas).
 Parada cardiorrespiratoria.

Si sucediera alguna de estas complicaciones, siempre deben quedar registradas. Si el


paciente está inestable hemodinámicamente, en Insuficiencia respiratoria severa, en
F.R.A., Coagulopatía, complicaciones metabólicas severas…, se colocará en decúbito
supino y valoraremos si procede en esa situación realizar el aseo, los cambios posturales
y/o los traslados.

Conclusión

El cuidado de los pacientes en estado crítico pone a prueba las habilidades, los
conocimientos y la experiencia clínica de los enfermeros, no solo por el estado de salud
de los pacientes con múltiples necesidades interferidas, sino también por las barreras y
distorsiones que se presentan para que la interacción y comunicación con los pacientes
ofrezca los resultados que se esperan en términos de contribuir a la recuperación de la
salud o a la muerte tranquila.
Como pudo verse, algunos de los planteamientos de una teórica de enfermería eran
puestos en práctica por los enfermeros al llevar a cabo el cuidado con pacientes críticos,
aun cuando ellos no tuvieran la pretensión, ni la conciencia de hacerlo. Esta situación
puede encontrarse en muchos escenarios de cuidado; sin embargo, es de esperarse que
se logren mejores resultados en la práctica del cuidado si se lleva a cabo bajo directrices
teóricas claramente definidas que dirijan las acciones.

La enfermedad crítica crónica se ha convertido en una amenaza importante para los


sistemas de salud y para las Unidades de Cuidados Críticos, que finalmente son las que
generan este tipo de pacientes. La frecuencia con la que vemos estos pacientes es cada
vez mayor y hasta ahora no existen terapias específicas, por lo que es imprescindible
intentar identificar pacientes en riesgo de desarrollar esta patología. Algunos estudios
observacionales han mostrado que un Índice de Masa Corporal anormal, la ventilación
mecánica, la sepsis, las enfermedades neuromusculares, un Glasgow anormal y una
nutrición inadecuada en los primeros 7 días de estadía en la UCI, podrían ser predictores
precoces de enfermedad crítica crónica

También podría gustarte