Está en la página 1de 9

IGLESIA

PALABRA DE FUEGO Y PODER


EL FIN DE LA LEY ES CRISTO

Rom 10:4 porque el fin de la ley es Cristo, para justicia a todo aquel que
cree.
Muchas personas piensan que ya la ley no se aplica al creyente, que
estamos bajo la gracia.
Que podemos hacer lo que queramos porque estamos bajo la gracia.
La ley es una autoexpresión de Dios. Expresa el carácter de Dios. La ley
revela lo que a Dios le agrada y lo que le desagrada. Refleja su carácter justo y
su moralidad.
El fin de la ley no significa el final, sino la finalidad de la ley es Cristo. El
propósito de la ley es llevarnos a Cristo.
Gál 3:24 De manera que la ley ha sido nuestro ayo, para llevarnos a Cristo, a
fin de que fuésemos justificados por la fe.
La ley no se acabó, tiene un trabajo continuo de llevarnos a Cristo.
Se piensa que el punto de inicio de la ley es desde Moisés. ¿Antes de
Moisés estaban bajo la ley?
Juan 1:17 Pues la ley por medio de Moisés fue dada, pero la gracia y la
verdad vinieron por medio de Jesucristo.
La ley fue dada, pero la gracia vino, es una persona, Jesucristo.
Moisés no es el origen de la ley, fue el instrumento usado por Dios para
traerla. La le estaba depositada en algún lugar. La ley es eterna.
En los patriarcas, la ley fue transmitida en forma oral.
Adán fue juzgado por Dios con la misma ley que juzgo al pueblo de Israel,
al igual que también juzgo a satanás.

EL FIN DE LA LEY ES CRISTO Pá gina 1


IGLESIA
PALABRA DE FUEGO Y PODER
Heb 11:4 Por la fe Abel ofreció a Dios más excelente sacrificio que Caín, por
lo cual alcanzó testimonio de que era justo, dando Dios testimonio de sus ofrendas;
y muerto, aún habla por ella.
Abel supo de los sacrificios de sangre por una transmisión oral que luego
se corrobora en los libros de levítico y Deuteronomio.
¿La ley aún se sigue aplicando para este tiempo, o solamente la ley fue
aplicada para los tiempos del pueblo de Israel?
El tema de la ley lo explica el apóstol Pablo en un lenguaje jurídico:
Primera Posición: estar bajo la ley.
Rom 2:12 Porque todos los que sin ley han pecado, sin ley también
perecerán; y todos los que bajo la ley han pecado, por la ley serán juzgados;
¿Qué significa estar bajo la ley?
Si una persona que viaja en su vehículo y atraviesa un semáforo en rojo,
y un fiscal de transito lo ve y lo detiene, en ese momento está bajo la ley. Sea
lo que conlleve eso, multa, juicio, etc. Por violar la ley.
Todas las personas que están en las cárceles hoy en día, están bajo la
ley. Rom 6:14-15 Porque el pecado no se enseñoreará de vosotros; pues no estáis
bajo la ley, sino bajo la gracia. 15 ¿Qué, pues? ¿Pecaremos, porque no estamos
bajo la ley, sino bajo la gracia? En ninguna manera.
El hecho de que no estemos bajo la ley, no nos da el derecho a pecar.
Gál 3:23 Pero antes que viniese la fe, estábamos confinados bajo la ley,
encerrados para aquella fe que iba a ser revelada.
Gál 4:4-5 Pero cuando vino el cumplimiento del tiempo, Dios envió a su Hijo,
nacido de mujer y nacido bajo la ley, 5 para que redimiese a los que estaban bajo
la ley, a fin de que recibiésemos la adopción de hijos.

EL FIN DE LA LEY ES CRISTO Pá gina 2


IGLESIA
PALABRA DE FUEGO Y PODER
Gál 4:21 Decidme, los que queréis estar bajo la ley: ¿no habéis oído la ley?
Jesús siempre estuvo bajo la ley, porque él fue hecho pecado para poder
redimirnos. Desde el punto de vista de la justicia divina, para poder ser la
ofrenda por el pecado.
Gál 5:18 Pero si sois guiados por el Espíritu, no estáis bajo la ley.
Cuando tú eres guiado. En otras palabras, si tu obedeces a las
instrucciones de pararte en un semáforo rojo, te estén viendo o no, tu no estas
bajo la ley. La ley no tiene un efecto condenatorio sobre ti, porque tú no has
violado la ley.
Rom 3:19 Pero sabemos que todo lo que la ley dice, lo dice a los que están
bajo la ley, para que toda boca se cierre y todo el mundo quede bajo el juicio de
Dios;
El pecado es una transgresión de la ley.
1Jn 3:4 Todo aquel que comete pecado, infringe también la ley; pues el
pecado es infracción de la ley.
Nosotros estamos en el nuevo Pacto, estamos bajo el dominio de la
gracia. No estamos bajo el dominio de la ley.
Segunda Posición: las obras de la ley.
Es el intento humano de cumplir la ley con esfuerzos humanos. Tratar
con nuestra capacidad humana natural cumplir las justas demandas de la ley
de Dios.
Rom 3:20 ya que por las obras de la ley ningún ser humano será justificado
delante de él; porque por medio de la ley es el conocimiento del pecado. Rom 3:28
Concluimos, pues, que el hombre es justificado por fe sin las obras de la ley.
La fe es un nivel de entendimiento que Dios nos otorga.

EL FIN DE LA LEY ES CRISTO Pá gina 3


IGLESIA
PALABRA DE FUEGO Y PODER
Entender el propósito eterno de Dios hace que se te transfiera una
habilidad y capacidad divina para cumplirlo.
Gál 2:16 sabiendo que el hombre no es justificado por las obras de la ley,
sino por la fe de Jesucristo, nosotros también hemos creído en Jesucristo, para ser
justificados por la fe de Cristo y no por las obras de la ley, por cuanto por las
obras de la ley nadie será justificado.
Nadie en la historia de la humanidad ha cumplido la ley a excepción de
Jesucristo.
La ley Dios la dio para demostrarle al hombre que en su estado caído, es
imposible que el hombre este homologado al nivel de Dios.
Nuestro problema es más profundo de lo que podemos ver, se llama
pecado, se llama vieja creación.
Es tan grave que fue necesario enviar a Jesucristo a morir en la cruz para
poder remediarlo.
La ley te produce desesperación al no poderla cumplir, abriendo paso a
un encuentro con Jesucristo.
Gál 3:2 Esto solo quiero saber de vosotros: ¿Recibisteis el Espíritu por las
obras de la ley, o por el oír con fe?
Gál 3:5 Aquel, pues, que os suministra el Espíritu, y hace maravillas entre
vosotros, ¿lo hace por las obras de la ley, o por el oír con fe?
Gál 3:10 Porque todos los que dependen de las obras de la ley están bajo
maldición, pues escrito está: Maldito todo aquel que no permaneciere en todas las
cosas escritas en el libro de la ley, para hacerlas.
Las obras de la ley es el fallido intento de cumplir humanamente las
demandas de Dios. Eso es lo que hace la religión.

EL FIN DE LA LEY ES CRISTO Pá gina 4


IGLESIA
PALABRA DE FUEGO Y PODER
La ley de Dios es eterna, pero Dios cambio el plan. Vino a morar en
nosotros con su sobrenaturalidad para que así podamos cumplir las
demandas de Dios.
Rom 3:27-28 ¿Dónde, pues, está la jactancia? Queda excluida. ¿Por cuál
ley? ¿Por la de las obras? No, sino por la ley de la fe. 28 Concluimos, pues, que el
hombre es justificado por fe sin las obras de la ley.
La jactancia de la religión del esfuerzo humano, orar más horas, ayunar
más veces, a eso se le llama la meritocracia.
No puede haber comparación ni competencia en el pueblo de Dios,
porque por la gracia de Dios somos lo que somos.
Rom 9:32 ¿Por qué? Porque iban tras ella no por fe, sino como por obras de
la ley, pues tropezaron en la piedra de tropiezo,
Pablo se refiere a sus hermanos judíos. El da testimonio que ellos tienen
celos de Dios, pero sin revelación.
La revelación de Dios tiene que ver con la justicia de Dios.
Rom 10:3 Porque ignorando la justicia de Dios, y procurando establecer la
suya propia, no se han sujetado a la justicia de Dios;
La ignorancia de la revelación es que ellos se movían por la justicia
propia, por la meritocracia, por lo que se portaban bien, ayuno tres veces a la
semana, doy diezmo de lo que poseo, ayudo a los pobres, a los huérfanos.
Lucas 18:11-14 El fariseo, puesto en pie, oraba consigo mismo de esta
manera: Dios, te doy gracias porque no soy como los otros hombres, ladrones,
injustos, adúlteros, ni aun como este publicano; 12 ayuno dos veces a la semana,
doy diezmos de todo lo que gano. 13 Mas el publicano, estando lejos, no quería ni
aun alzar los ojos al cielo, sino que se golpeaba el pecho, diciendo: Dios, sé
propicio a mí, pecador. 14 Os digo que éste descendió a su casa justificado antes

EL FIN DE LA LEY ES CRISTO Pá gina 5


IGLESIA
PALABRA DE FUEGO Y PODER
que el otro; porque cualquiera que se enaltece, será humillado; y el que se humilla
será enaltecido.
Tercera Posición: la obediencia a la ley.
La obediencia a la ley tiene que ver con una obra consumada de Cristo
en nosotros.
Cuando pasas del cap 7 al cap 8 de romanos, empiezas a entender lo
que es vivir la vida del Espíritu.
Rom 8:1-4 Ahora, pues, ninguna condenación hay para los que están en
Cristo Jesús, los que no andan conforme a la carne, sino conforme al Espíritu. 2
Porque la ley del Espíritu de vida en Cristo Jesús me ha librado de la ley del
pecado y de la muerte. 3 Porque lo que era imposible para la ley, por cuanto era
débil por la carne, Dios, enviando a su Hijo en semejanza de carne de pecado y a
causa del pecado, condenó al pecado en la carne; 4 para que la justicia de la ley se
cumpliese en nosotros, que no andamos conforme a la carne, sino conforme al
Espíritu.
La ley del Espíritu de vida en Cristo Jesús me ha librado de la ley del
pecado y de la muerte. Todas las demandas de la ley son correctas, el
problema está en la debilidad de la carne que no las puede obedecer.
El pecado es una ley. Como la ley de la gravedad. Tu puedes vencer una
ley con una ley mayor.
La gente quiere servirle a Dios, pero vuelven a fallar, y viven una vida
frustrada.
Así como antes nos gobernaba la ley del pecado, ahora nos gobierna otra
ley mayor, la ley del Espíritu de vida en Cristo Jesús, que viene siendo la vida
de Cristo en nosotros y opera como una ley cumpliendo el nuevo pacto.
La gracia de Dios hace que no violemos la ley de Dios.

EL FIN DE LA LEY ES CRISTO Pá gina 6


IGLESIA
PALABRA DE FUEGO Y PODER
Jer 31:33-34 Pero este es el pacto que haré con la casa de Israel después de
aquellos días, dice Jehová: Daré mi ley en su mente, y la escribiré en su corazón; y
yo seré a ellos por Dios, y ellos me serán por pueblo. 34 Y no enseñará más
ninguno a su prójimo, ni ninguno a su hermano, diciendo: Conoce a Jehová;
porque todos me conocerán, desde el más pequeño de ellos hasta el más grande,
dice Jehová; porque perdonaré la maldad de ellos, y no me acordaré más de su
pecado.
La ley ya no estará fuera de ti escrita en tablas de piedra o papel
haciendo demandas a ti. Sino que estará dentro de ti como parte de tu ADN,
haciendo que puedas vencer el pecado en forma natural, como el volar de un
pájaro es algo natural para el pájaro.
Jesús elevó la ley a algo no externo, sino interno.
Dios le dio a Israel tres categorías de leyes: las leyes civiles. Las leyes
ceremoniales. Las leyes morales.
Mat 5:21-22 Oísteis que fue dicho a los antiguos: No matarás; y cualquiera
que matare será culpable de juicio. 22 Pero yo os digo que cualquiera que se enoje
contra su hermano, será culpable de juicio; y cualquiera que diga: Necio, a su
hermano, será culpable ante el concilio; y cualquiera que le diga: Fatuo, quedará
expuesto al infierno de fuego.
Mat 5:27-28 Oísteis que fue dicho: No cometerás adulterio. 28 Pero yo os
digo que cualquiera que mira a una mujer para codiciarla, ya adulteró con ella en
su corazón.
Si el hecho externo era difícil, cuanto más será poder cumplir la
motivación interna del corazón.
El bozal en un perro le impide que muerda a las personas, pero no
cambia sus inclinaciones, esa es la ley de Moisés, es la religión. Cumplían la
ley por temor al castigo.
EL FIN DE LA LEY ES CRISTO Pá gina 7
IGLESIA
PALABRA DE FUEGO Y PODER
Cuando hay un cambio de naturaleza, cuando el pecador es
transformado en una nueva criatura, cuando Cristo viene a morar en el
creyente, cuando hay un nacimiento del agua y del Espíritu, todo cambia, ese
es el milagro del nuevo nacimiento.
Cristo morando en nosotros opera como una ley en nosotros. Una vida
dentro de otra vida. Me ha librado de la ley del pecado y de la muerte.
Si alguien se está ahogando en una playa y logra patalear y nadar hasta
la orilla, eso no es salvación, es mérito personal.
Pero si la persona se está ahogando y no puede hacer nada para
salvarse y viene otra persona a rescatarla, eso es salvación
Salvación es no poder hacer nada por mí mismo, sino Dios haciendo algo
en mí.
El evangelio es un mensaje de salvación, no de mérito personal.
El pecado es una ley poderosa, no es una falla moral. El pecado entro en
el mundo por un hombre. Uno es el pecado. Los pecados son personales.
El pecado es un calificativo que se le da a satanás inyectando e
infectando la naturaleza humana, trayendo un cambio de naturaleza.
La fuerza de voluntad humana natural no puede contra la ley del pecado.
Alguien puede decir, yo puedo dejar la droga, yo puedo dejar el sexo ilícito, yo
puedo dejar de mentir, yo puedo dejar de robar por un tiempo, yo puedo
vencer mi mal carácter.
Como el ejercicio de sostener un bajo en el aire con la mano por un
tiempo, con la fuerza de voluntad, para vencer la ley de gravedad, después de
una hora se cansa el brazo y no se puede sostener.
La fuerza de voluntad no es permanente, la ley sí.

EL FIN DE LA LEY ES CRISTO Pá gina 8


IGLESIA
PALABRA DE FUEGO Y PODER
Ese es el tema de tratar de vencer la ley del pecado con la fuerza de
voluntad humana. No lo vas a lograr.
Entendamos lo que es la gracia de Dios.
La ley de vida en Cristo Jesús opera en la dimensión del Espíritu, todos
los asunto con Dios son espirituales, el pecado es un problema espiritual.
En nuestro espíritu se encuentra la conciencia, el conocimiento intuitivo y
la comunión con Dios. Desde allí empieza a permear nuestra alma.
1Co 2:14 Pero el hombre natural no percibe las cosas que son del Espíritu de
Dios, porque para él son locura, y no las puede entender, porque se han de
discernir espiritualmente.
La gracia no es licencia para pecar, sino que es la solución divina para
vivir homologados al carácter de Dios y estar en el nivel de las justas
demandas de Dios, que se puede vivir en santidad.

EL FIN DE LA LEY ES CRISTO Pá gina 9

También podría gustarte