VACUNAS

Francisco Javier Pinchao Velez

Fuentes: https://comisiondelaverdad.co/hay-futuro-si-hay-verdad
Colombia ha estado azotada durante décadas por un conflicto armado interno que ha cobrad
o la vida de innumerables víctimas y causado un profundo sufrimiento a la sociedad. Entre l
as formas de violencia y delincuencia que surgen en este contexto, la extorsión se ha conver
tido en una de las principales preocupaciones de los colombianos. Estos crímenes, cometid
os tanto por guerrilleros como por otros grupos insurgentes como lo son tambien los grupos
paramilitares, han creado un clima de miedo e inseguridad, sobre todo en los distintos
pueblos y zonas rurales de los departamentos del país.
La extorsión en el contexto del conflicto armado en Colombia ha sido utilizada como fuente
de financiamiento por parte de grupos ilegales que buscan obtener recursos para apoyar sus
actividades delictivas, tambien, este proceso de financiación es útil para los grupos armados
para demostrar dominio en los territorios lo cual les favorece; como bien es dicho en uno de
los informes de la comisión de la verdad. Por medio de la intimidación y la violencia, estos
grupos obligan a los empresarios, comerciantes y ciudadanos comunes a pagar una suma o
proporcionar bienes y servicios bajo la amenaza de represalias.

Esta forma de extorsión se ha extendido por toda Colombia, afectando especialmente las zo
nas rurales y las zonas sociales más vulnerables. Muchas empresas han tenido que cerrar de
bido a la continua demanda económica, dejando a sus dueños desempleados y en el limbo.
Un ejemplo de ello es el testimonio de un habitante de Ituango, Antioquia; el cual
manifestaba como iban a colocar una antena parabólica, pero la empresa al ver la situación
de las extorsiones al final no hizo nada, demostrando que las extorsiones tambien implican
un retraso económico y falta de avance en las localidades que padecen esta consecuencia
del conflicto armado.

Además del impacto económico, la extorsión crea un clima de miedo y desconfianza en la c
omunidad. Las personas viven con el temor constante de ser víctimas de estos delitos, que li
mitan su libertad y desarrollo. El surgimiento de grupos paramilitares agudizó la situación
de las
extorsiones, ya que competían con los grupos guerrilleros por la extorsión y el control territ
orial

Además, es fundamental promover el desarrollo económico y social en las zonas afectadas 
por el conflicto. Invertir en infraestructura, educación y programas de creación de empleo b
rindará oportunidades a las comunidades, reduciendo la dependencia de actividades ilegales
Asimismo, es necesaria la participación y concientización ciudadana para denunciar estos d
elitos. La cooperación de la sociedad civil, respaldada por mecanismos de protección efecti
vos, puede ser necesaria para combatir el chantaje y proporcionar información valiosa a las 
autoridades. Aunque tambien representa de cierto modo un riesgo para los denunciantes los
cuales estaban acorralados porque si denunciaban tenían conflictos con los grupos
guerrilleros y si no denunciaban tenían problemas con el gobierno o con grupos insurgentes
paramilitares.

Pienso que l
a extorsión en el conflicto armado en Colombia es un flagelo que debe ser eliminado por
sus consecuencias y actos de lesa humanidad, que ya en el DIH está clasificado como un
acto de esta
índole. Este fenómeno afecta a la sociedad en su conjunto, generando miedo, desconfianza 
y obstaculizando el desarrollo económico, lo cual considero catastrófico; de por si recordar
que esto ha sucedido durante décadas es complicado, y saber que además sigue sucediendo
en muchos lugares es mucho más desalentador.