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La rivalidad entre equipos

La rivalidad es la relación de antagonismo, enemistad o simple competencia que puede existir


entre dos o más individuos, organizaciones o grupos de personas. Este tipo de relaciones se
producen cuando los rivales se disputan un premio, un logro o algún tipo de recompensa, y
puede manifestarse de maneras muy diferentes.

La palabra “rivalidad” se refiere a la relación entre rivales. Este último término proviene
etimológicamente del vocablo latino rivalis, traducible como “competidor”, pero derivado a su
vez de la palabra rivus (“río”). Así, un rival era aquella persona que vivía del otro lado del río y
con la cual se competía o se tenían altercados respecto a los recursos disponibles. Era común
que en la Antigüedad los ríos y arroyos sirvieran de frontera natural para demarcar la
separación entre poblados e incluso países.

Dependiendo de cómo se manifieste y de su grado de intensidad, la rivalidad puede dar pie a


situaciones constructivas en las que el esfuerzo conduce a mayores recompensas, o bien puede
acabar convirtiéndose en una enemistad declarada que de lugar a prácticas poco loables para
garantizar la superioridad de un bando sobre el otro. En ocasiones, el grado de intensidad
puede estar determinado por la presión del entorno, la urgencia de los recursos por los que se
compite o la historia previa entre los rivales.

Ejemplos: Las rivalidades históricas del mundo del fútbol


1. Real Madrid vs Barcelona

Los dos mejores equipos del planeta tienen al globo dividido. El Clásico es, además, un
enfrentamiento político en España entre sus dos ciudades más graneds.

2. Boca Juniors vs River Plate

Probablemente la más reñida de todas. El Xeneize y el Millonario se odian desde tiempos


inmemoriables. Argentina se parte en dos... y el continente también.

3. Celtics vs Rangers

Celtics vs Rangers. Uno de los derbis que más fallecidos ha dejado a su paso. La rivalidad entre
estos dos equipos es política, territorial y religiosa en la rivalidad más compleja del fútbol
mundial.
La falta de aulas y bancas afecta al aprendizaje
en planteles fiscales
La importancia de tener una buena infraestructura escolar

Está comprobado que tener escuelas en buen estado es determinante para lograr que los
alumnos obtengan los resultados académicos esperados

Se puede alegar que no importa el espacio donde uno se encuentre, que el conocimiento es
inmaterial, que el contexto físico es secundario, y que lo importante es concentrarse en lo que
se está leyendo.

Pero si trasladamos este razonamiento a la realidad de los sistemas educativos, la evidencia


empírica es flagrante: contar con aulas y espacios de aprendizaje en buen estado es
determinante en el momento de lograr que los alumnos obtengan los resultados académicos
esperados. En otras palabras, el estado de los colegios incide directamente en el desempeño
de los alumnos.

Y es que una buena infraestructura escolar, con espacios renovados, posibilita que niños y
jóvenes que viven en sitios remotos puedan estudiar y, además, tiende a mejorar la asistencia e
interés de los estudiantes y maestros por el aprendizaje. Por esta misma razón, las inversiones
en infraestructura escolar tienen un papel fundamental para solucionar el problema del acceso
de los estudiantes al sistema escolar y para mejorar su rendimiento.

La pequeña Lady Anilema anota en su cuaderno la clase de geometría. A su lado, Ángelo


González juega con sus compañeros de la banca trasera. Y con un poco de dificultad, Arlene
Delgado busca un lápiz en su mochila.

Desde hace un mes, cuando se inició el nuevo año escolar, los tres niños comparten un solo
pupitre en su salón de 4º de básica. Ellos estudian en la Escuela Ciudad de Cuenca, ubicada en
el Guasmo Sur de Guayaquil. Allí, la falta de mobiliario es un problema que se repite en cada
aula.En la clase de 6º de básica, los viejos escritorios rechinan. Algunos lucen descoloridos y en
otros hasta se pueden ver los clavos que resaltan entre las tablas carcomidas. “Estas bancas ya
tienen más de 10 años. Es peligroso, los chicos se pueden lastimar”, refiere el maestro
Fernando Paredes.

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