Instituto Bíblico Nacional de Chile

Pentateuco

HISTORIA PERSONAL DE LA SALVACIÓN

Estudiante: Paulo Sepú lveda F.

Profesora: Isabel Cornejo
2 de abril de 2012
HISTORIA PERSONAL DE LA SALVACIÓN

Mi nombre es Paulo Sepú lveda Fuenzalida, tengo 30 añ os de edad, aunque en mi

forma de ser no lo represento. Mis padres son Andrés Sepú lveda y Wendy Fuenzalida,
mi padre es pastor de la iglesia en donde me congrego hace ya casi 8 añ os.

Hace varios añ os fui parte de la denominació n Asambleas de Dios, la cual dejó

de ser parte de mi vida después de 21 añ os de membrecía. Aquí me desarrolle en
varios ministerios diferentes, llegando a participar en casi todos los procesos de
crecimiento como niñ o, joven y adulto. Fui parte de los exploradores del rey, aquí me
desarrolle la mayor parte de mi vida, ingrese como mascota, recluta, guía, líder,
comandante. También en este ministerio se desarrollo lo que podría decirse un
liderazgo marcado en mi vida y también se forjaron en mi los deseos de servir al
señ or.
Luego me integre a servir al señ or en el coro de ASAF en donde Dios hablo
bastante a mi vida durante este tiempo, pero siempre había algo que no estaba
correcto y era la actitud de mi corazó n. A los 16 añ os comencé a tocar trompeta en la
banda, en aquel entonces así le llamá bamos, del pastor ahora, Billy Bunster. Por siete
añ os serví en este ministerio y me trajo muchas satisfacciones personales tanto como
mú sico y como persona.
Ingrese al servicio militar, en donde aprendí a obedecer sin cuestionar ordenes,
algo que en estos ú ltimos días se esta haciendo muy importante en el proceso en el
cual me encuentro.
Después de varios añ os difíciles por los que atravesé, llegando al punto de
tener muchas veces ganas de llegar al suicidio, Dios comenzó a poner una inquietud
en mi corazó n de seguirlo, pero no fue sencillo, porque por problemas de cará cter,
siempre las cosas se me han hecho difíciles, pero después de mucho intentarlo Dios
tomo el control de mi vida. El dia en que ya nada quedaba, el dia en que nada era
suficiente, cual no se llevó a cabo hasta hace casi 3 añ os atrá s cuando inicie mi escuela
de misiones en Juventud con una Misió n.

Intenté cambiar mi vida muchas veces, pero solo durante el proceso de esta
escuela de misiones fue que Dios habló claramente a mi vida con respecto a mis
errores y a mi vida espiritual, que no habían sido correctas hasta aquel entonces. Ahí
aprendí que Dios aú n quería tener una relació n personal conmigo y no solo eso, sino
que quería bendecirme a la medida de mi renuncia.

Conocí en este lugar a la mujer de mi vida, mi niñ a, y la persona que me hace

recordar a diario que con Dios todas las cosas son posibles. Es una historia bastante
divertida y linda de contar, pero no creo poder expresarla en un par de líneas. No solo
estamos juntos porque nos amamos, sino, porque Dios nos ha dado má s de una
palabra para estar firmes en esta relació n.
 Hemos tenido días malos y procesos difíciles, ser hijo de un pastor es una
responsabilidad que no siempre es grata aunque siempre es una bendició n. Me he
involucrado en un sinfín de ministerios, he cantado en coros, tocado trompeta por
siete añ os con el pastor Billy Bunster, he tenido mi propia banda y hemos ministrado
en muchos lugares en una manera asombrosa, por casi trece añ os fui trompetista. Dios
a través de eso me llenó de bendiciones, pero conocer a Dios y darlo a conocer creo
que es la mayor bendició n que he tenido.

En este momento después de varias cosas, varias ideas, varios proyectos, he

decidido someter mi vida a Dios, me he preparado como misionero en lo que yo creo
es la mejor escuela y ministerio de misiones, ahora la intenció n de mi corazó n es
prepararme en la palabra y así intentar ser un obrero que usa bien la palabra de Dios
sabiendo que por É l y para É l son todas las cosas. Tengo mucha esperanza de que Dios
bendecirá mi vida en este instituto, solo espero ser constante, es un gran desafío.