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"Año del Bicentenario del Perú: 200 años de Independencia"

INTEGRANTES :

Aguilar Zarate, Jayro Renan (Si trabajo)

Lupu Oviedo, Cristina Milagros (Si trabajo)

Quinde Maco, Ana Cristina (Si trabajo)

Salazar Yovera, Belén ((Si trabajo)

ASIGNATURA :Problemas y Desafíos en el Perú actual

DOCENTE RESPONSABLE: Ruesta Palacios, Alberto Alfonso

CICLO IV

PIURA – PERÚ 2021


Actividad 1. A partir de lo trabajado en clase y la lectura del texto de
Campodónico contesten a las siguientes preguntas:

¿En qué consistió el shock de precios de agosto de 1990?

- El 8 de agosto de 1990, el primer ministro y titular de ministerio de Economía y


Finanzas, Juan Carlos Hurtado Miller, anunciaba a través de las pantallas de
televisión la decisión del gobierno de Alberto Fujimori, el conocido Fujishock, para
controlar la hiperinflación y que (solo en) ese mes de agosto alcanzaría una tasa de
397%, se generó una liberalización de precios que disparó el costo de varios
productos de primera necesidad a la estratósfera. Pero el ‘shock’ no se llevó consigo
a la inflación de más de un dígito. Al menos no inmediatamente, como lo mencionó
el Banco Central de Reserva (BCR), fue recién en febrero de 1997 que la inflación
anualizada bajó hasta 9,4%.
¿En qué consistió la reforma neoliberal del gobierno de Fujimori?

- La puesta en práctica del neoliberalismo durante la gestión de gobierno del


presidente Alberto Fujimori (1990-2001) en el Perú, implicó el desmantelamiento
del ordenamiento constitucional, conduciendo a la instauración de una dictadura
sostenida con el apoyo de las Fuerzas Armadas. La aplicación de neoliberalismo
implicó para el Estado la privatización de sus empresas, la pérdida de su rol
empresarial, el recorte de la política social y la renuncia a normar las relaciones
entre capitalistas y trabajadores.

Actividad 2. A partir de lo trabajado en clase y la lectura de texto de Quiroz,


contesten a la siguiente pregunta:

 ¿Se puede hablar de una red de corrupción durante el gobierno de Fujimori?


Justifiquen su respuesta.

Al cumplir Montesinos sus 53 años (20 de mayo de 1998); se realizó una reunión festiva en
la que acudió un grupo selecto de parlamentarios, ministros, generales de las fuerzas
armadas y de la policía, jueces, fiscales y empresarios. Esta y otras celebraciones secretas
mostraban las vastas redes y ramas de corruptela en la década de 1990. Las redes de
corrupción tenían, al centro, la alianza entre Fujimori y Montesinos. El primero se ocupaba
de la política y actuaba como imagen mediática populista; y el segundo negociaba
secretamente con el alto comando militar y reunía fondos ilegales en medio de múltiples
otras tareas de inteligencia desde el SIN. Durante la fase final del régimen de Fujimori,
Montesinos mantenía enlaces con la corruptela que controlaba al poder, manipulaba la
información pública, saboteaba la oposición y daba el mal ejemplo a los rangos inferiores de
funcionarios y a la sociedad en general.

Fujimori contaba con un núcleo interno de parientes en los que había intereses familiares;
Víctor Aritomi, cuñado de Fujimori, fue nombrado embajador del Peru en Japón en 1991.
Hábilmente, Fujimori y Aritomi utilizaron la nacionalidad japonesa, que podía otorgarles
protección e impunidad. Entre otras varias operaciones, Aritomi usó su inmunidad
diplomática para transportar los ingresos ilícitos de Fujimori al Japón, para así lavarlos sin
dejar huellas evidentes; aparte se solicitaron donaciones y fondos de socorro humanitario
que se canalizaron a la familia Fujimori. Además, el poder y la influencia corruptora
ejercida por Montesinos en el poder judicial se hicieron casi absolutos después de 1992. Los
jueces de la Corte Suprema y de los juzgados superiores y provinciales conformaron una red
corrupta, que otorgaba decisiones y sentencias a favor de intereses privados y políticos
protegidos por Montesinos. Un aliado principal de Montesinos en la Corte Suprema, al que
le entregó el borrador de una resolución favorable a la apelación de Fujimori para postular a
la presidencia del país por tercera vez, la que luego aprobaron oficialmente; fue el juez
Alejandro Rodríguez Medrano, quien convocaba a otros jueces para presionarles a
dictaminar según lo requerido por Montesinos. Desde su supuesta reforma en 1992, todo el
sistema judicial estaba plagado de “innovaciones” institucionales que servían como
incentivo para jueces mediocres y corruptos, y como castigo para los honrados. En
diciembre de 1999 se realizó el soborno de las autoridades electorales, todo ello fue
publicado en El Comercio. El JNE rechazaba todas las quejas legales presentadas contra las
maniobras reeleccionistas e inconstitucionales de Fujimori. […]

Los congresistas sobornados asistían a reuniones individuales y secretas con Montesinos en


el SIN para concertar los pagos, ya que se cambiaban de bando. Algunos recibieron dinero
directamente de manos del asesor. Cada congresista tránsfuga tenía su precio. Los magnates
de los medios de comunicación de masas fueron los mejor pagados por Montesinos, debido
a su papel estratégico en la información pública. Ciertos propietarios de medios de
comunicación como Ernesto Schütz (Panamericana Televisión, canal 5); José Francisco y
José Enrique Crousillat (América Televisión, canal 4), fueron sobornados con altas
cantidades de dinero. Aparte, la Caja de Pensiones Militar Policial-Banco de Comercio, que
se encontraba bajo control financiero de agentes montesinistas. Genaro Delgado Parker, un
importante accionista de canal 13 que tenía crónicos problemas legales, le prometió a
Montesinos que despediría al periodista independiente César Hildebrandt a cambio de una
sentencia favorable en una disputa por la propiedad de acciones del canal. […]

La prensa amarilla, a la cual se conocía colectivamente como la “prensa chicha”, atendía a


las masas mal informadas. Los propietarios y editores de estos pasquines mostraban gran
imaginación en propagar insultos estrambóticos, desinformación y manipulación
sociopolítica. Alex y Moisés Wolfenson (El Chino), Rubén Gamarra (La Yuca) y José
Olaya (El Tío) fueron sindicados por recibir cuantiosos subsidios impropios en 1999.
Augusto Bresani, un periodista cercano al SIN, trabajó con Montesinos y el publicista
Daniel Borobio en la transmisión tanto de titulares como de dinero a los editores de la
prensa chicha. Bresani no solo recibía dinero de Montesinos sino también, a partir de 1997,
de importantes corporaciones privadas decididas a prestar respaldo a Fujimori y sus
campañas sucias. (Quiroz 2013: 466-483, 495-505)

Actividad 3: Se realiza la redacción reflexiva calificada. A partir de lo trabajado en


la sesión, en grupo de cinco integrantes, los estudiantes redactan un ensayo

El fujimorato en el régimen económico y la corrupción

En el presente ensayo lograremos analizar régimen económico y corrupción. El


«Fujimorato» no fue sólo un gobierno, sino un régimen autoritario con apariencias y
formas democráticas que se estructuró teniendo como eje los servicios de inteligencia.
En la coyuntura del año 2000, el «espíritu de impunidad» condujo a graves excesos: la
falsificación masiva de firmas, el manejo de las elecciones, la compra de congresistas
opositores. Del otro lado surgió un opositor que no jugó con las reglas del sistema, y
que de ese modo aceleró la descomposición del sistema. Por tal motivo, a continuación,
presentaremos los párrafos los cuales nos ayudarán a comprender este tema.

Durante el gobierno de Fujimori sus políticas económicas lograron resolver problemas


tales como la reconstitución institucional del país, que permitió construir el contexto
más apropiado para la nueva legislación y, con esto, el clima para incentivar las
inversiones privadas, nacionales o extranjeras. Además, la derrota del terrorismo, el
cierre de las escaramuzas externas y la configuración del marco legal e institucional que
brinde las seguridades a la inversión son hecho sin mensamente importantes para atraer
capitales privados. Y no solamente
capitales para incursionar en los segmentos usualmente copados por las empresas privad
as, sino también para incorporarse a algunas tareas que tradicionalmente han
permanecido bajo la órbita estatal, como las infraestructuras de bienes públicos. El
gobierno de Alberto Fujimori gracias a que en su gobierno se abrió paso a una nueva
legislación y la derrota del terrorismo el Perú de vuelta fue visto como un país en el cual
se pueda invertir de nuevo, las instituciones privadas apostaron de nuevo por el Perú,
por ende las inversiones extranjeras también volvieron a arriesgar capital para poder
exportar e importar productos, esto no solo ocurrió en negocios ya establecidos o
anteriormente incursionados, sino que también se abrieron nuevas formas de negocios
tales como las infraestructuras y bienes públicos, es bien sabido que una inversión tanto
local como extranjera genera empleos y hace que la economía vuelva a tener un flujo
normal. También (Castillo, 2001) agrega que: En los años noventa se implementó el
ajuste estructural en la economía aplicado de manera simultánea con un programa de
estabilización (El Shock de precios en el año1990) y las reformas liberales, a partir de
1991. Las consecuencias fueron la estabilización de la economía y la drástica reducción
de la inflación. En la década de los 90 se aplicó el famoso programa de Shock el cual a
pesar de haber sido rechazado por el pueblo peruano ya que en campañas electorales el
también candidato a la presidencia en ese entonces Mario Vargas Llosa habría
propuesto dentro de su plan de gobierno este método denominado el “Shock” de precios
e irónicamente este fue uno de los factores por lo cual descendió su popularidad en las
encuestas.
Con el tipo de política económica que implemento el gobierno de Fujimori no se
lograron resolverse muchos problemas, pues fue un modelo que en esencia repetía la
dinámica de los booms exportadores del siglo pasado: un crecimiento altamente
dependiente del capital externo, sin una economía diversificada. Con el frenazo chino de
los últimos años esta excesiva dependencia nos explotó en la cara, Déficit comercial
permanente. En otras palabras, durante toda la década de los 90, comprábamos más de
lo que vendíamos, lo que se tradujo en un mayor endeudamiento. Política anti industrial.
Fujimori desprotegió a los productores nacionales. Muchos quebraron por el aumento
de sus costos frente a la apertura comercial indiscriminada. Como dice Jiménez, la
reinserción del país a la economía internacional fue al revés. Y esa factura la sigue
pagando nuestro parque raído parque industrial. Salarios congelados. El salario mínimo
vital (la remuneración) se congeló desde 1991 hasta 1995, mientras que los salarios
reales (ligados al índice o variación de precios) se estancaron al mismo nivel que
teníamos en 1989. Con el modelo vigente, la pérdida del valor relativo de los salarios
en la economía bajó en los últimos 25 años de 30 a 21% de PBI favorecieron a la
acumulación de los grandes empresarios. Cholo barato. Fujimori trajo con fuerza la
subcontratación laboral que hasta ahora afecta principalmente a los jóvenes. Se permitió
que los empleadores contraten practicantes a bajo costo, con el pretexto de formación
laboral juvenil. Esta filosofía sigue vigente.

Los vínculos que se establecieron entre el desempeño económico del gobierno y la


corrupción del mismo; consistieron básicamente en comprar/negociar con diferentes
frentes de poder. Por ejemplo, cargos en embajadas, jueces y fiscales, organismos
electorales y empresarios. Fujimori contaba con un cumulo de parientes en cargos
importantes, como es el caso de Víctor Aritomi Shinto, esposo de Rosa, hermana de
Fujimori. Quien ostentaba el cargo de embajador de Perú en Japón, este cargo le
permitió hacer lavado de dinero, transferir fondos de donaciones a la familia Fujimori,
así como también usar la inmunidad diplomática a su conveniencia. Además, los hilos
de influencia de Montesinos, llegaron hasta la Corte Suprema, donde el juez Alejandro
Rodríguez Medrano, era el encargado de presionar a los demás jueces para dictaminar
según lo requerido por Montesinos. El caso más vergonzoso fue, donde el asesor
presidencial presento una resolución en borrador que luego fue aprobada por la corte
superior. Otro caso notorio fue el de Blanca Nélida Celan, fiscal de la Nación y cabeza
del ministerio público, quien desestimó diversas acusaciones formales contra
Montesinos. El soborno de las autoridades electorales fue otra de sus prácticas del
régimen Fujimori, la ONPE a cargo de José Portillo y otros cuarenta asociados
vinculados a los congresistas Adsolon Vásquez y María Jesús Espinoza falsificaron
parte de miles de firmas necesarias para la inscripción del nuevo partido Perú
2000; este fraude fue expuesto
por informes publicados en El Comercio. Así mismo, Alipio Montes de Oca, el jefe del
Jurado Nacional de Elecciones (JNE) visitaban a Montesinos en el SIN regularmente,
luego este mismo rechazaba las quejas legales presentadas contra maniobras
reeleccionistas. Por último, los magnates de los medios de comunicación fueron
los mejores pagados por Montesinos, debido a su papel estratégico en la información
pública. Los principales medios de comunicación como es América Televisión con José
y Francisco Crousillat, Panamericana Televisión con Ernesto Schütz recibieron un total
de 9 millones, los hermanos Samuel y Mendel Winter que talvez recibieron menos por
la venta de su contenido editorial pero que luego lograron apropiarse del Canal 2
(Latina), Genaro Delgado Parker principal accionista del canal 13 que tenía problemas
legales que despediría a periodista independiente Cesar Hildebrant a cambio de una
sentencia favorable de una disputa por la propiedad del canal. La prensa amarilla,
mantenía a las masas mal informadas, propagaban insultos estrambóticos,
desinformación y manipulación sociopolítica. Los más exitosos fueron la prensa escrita
como El Chino (Alex y Moisés Wolfenson), La Yuca (Rubén Gamarra), El Tío (José
Olaya); estos medios y sus propietarios fueron sindicados de recibir cuantiosos
subsidios impropios.

Por lo anterior mencionado, se puede concluir que los aspectos analizar régimen
económico y corrupción. Con el tipo de política económica que implemento el gobierno
de Fujimori no se lograron resolverse muchos problemas ya que sus propuestas estaban
basadas en el populismo.

La corrupción sin embargo, no incluye necesariamente a todo funcionario que haya


ejercido cargos de la administración estatal entre 1990 y 2000. A través de una red
organizada, con funciones definidas y con un sistema de relación con los principales
cabecillas; controlaron determinados centros neurálgicos de las instituciones. Por ello,
no se debe generalizar indiscriminadamente a todo funcionario estatal la tipificación de
integrante de la red de corrupción.
Bibliografías:

Quiroz, A. (2013). Historia de la corrupción en el Perú. Lima: Instituto de Estudios Peruanos /


Instituto de Defensa
Legal.

Zapata, A. (Coord.) (2015). Perú: la búsqueda de la democracia 1960-2010. Tomo 5. Madrid:


Fundación MAPFRE y
Penguin Random House.

Quiroz, A. (2013) . Historia de la corrupción en el Perú. Lima: Instituto de Estudios


Peruanos / Instituto de Defensa Legal.

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