Nuevas esclavitudes políticas

Cuando hablamos de esclavitud, no solo nos referimos a aquella condición por la

cual, una persona es obligada a trabajar en condiciones infrahumanas sin que pueda
negarse debido a la coerción, sino que hay nuevos tipos de esclavitudes en la actualidad.

Podemos decir que existe un sistema esclavista denominado política, esto no,
porque la política en si sea mala, sino porque quienes ejercen la política le han dado una
mala interpretación, utilizándola para buscar el beneficio particular y no el bien común.

Surge aquí una pregunta ¿Qué es la política? lastimosamente vivimos en una

sociedad donde desconocemos que es realmente, creemos que política es solamente un
medio para llegar al poder, sin embargo, la política es una ciencia que trata del gobierno
y la organización de las sociedades humanas.

Dolorosamente seguimos viviendo en una constante alienación política como lo

dijo Karl Mar, nos siguen esclavizando por medio de las ideologías políticas, los
sistemas capitalistas que ofrecen un desarrollo para el hombre, pero el cual no ha
existido, sino que solo se ha quedado en un discurso político y vacío, estos gobiernan
por la debilidad de las personas.

La oligarquía donde mandan los ricos, se esclaviza y se exprime al pobre, se le ve

como un objeto de trabajo, un escalón para llevar a los ricos al gobierno, este sistema de
gobierno es una forma de esclavizar al pueblo.

La tiranía que es un gobierno ejercido por un tirano. Como tal, es una forma de
gobierno esclavista que se caracteriza por que quien lo ejerce goza de un poder total o
absoluto, no limitado por las leyes, comportándose de manera autoritaria y despótica.

El hombre por generaciones ha vivido engañado con una falsa idea de

independencia, pero sigue viviendo en una dependencia política, piensa, actúa y razona
de acuerdo a una ideología y no como alguien que goza de libertad, esto se debe a una
incapacidad de crear pensamientos que nos lleve a una verdadera libertad.

El problema de las nuevas esclavitudes políticas es que ésta nunca ha estado

fundada filosóficamente desde la poli y desde la realidad de las personas, sino desde los
intereses particulares, donde unos buscan ser señores de los demás, sin importarles el
bien común.

Podemos hacer mención de una democracia, palabra antigua cuyo significado

etimológico conocido por todos es “poder del pueblo”, pero el problema son las
ideologías que llaman directamente al pueblo, rechazando las mediaciones de la
democracia representativa y los vínculos constitucionales.

El problema de la esclavitud política radica en una democracia demagógica que

se distingue precisamente por un gobierno dominante de las clases inferiores o de los
muchos pobres, quienes gobiernan atendiendo el interés particular sin preocuparse por el
interés común de toda la comunidad.

Nos han tenido todo el tiempo con la idea de una democracia, pero esta idea de
democracia solo queda en una expresión semántica por la incapacidad del razonamiento
filosófico de los falsos políticos.

Es necesario recordar lo que Platón sugiere; un filósofo es la persona ideal para

gobernar porque, por definición, un filósofo es quien ama la verdad y se ha liberado de
los deseos mundanos que corrompen el corazón del hombre.

En ver estas esclavitudes políticas surge una pregunta ¿Cuál tiene que ser la
esencia de la política? Y junto a Hugo Assman podemos responder que la esencia está en
que tenga una buena y auténtica base filosófica que toque el verdadero sentido político
en bienestar de la liberación del pueblo y de la vida feliz.

Sin embargo, las políticas actuales disfrazan sus propios intereses con discursos
halagadores, no solo engañan al pueblo, sino que lo hacen esclavo y partícipe de su
corrupción moral. La retórica del político confunde deliberadamente las nociones de
felicidad y bien común por las promesas de placer, riqueza y poder.

Hoy nuestro pueblo está sumergido en el odio, en el rencor y la división, todo porque
los malos políticos se han encargado de sembrar cizaña en el corazón de nuestro pueblo, nos
han esclavizado manipulando nuestro pensamiento y así nos siguen teniendo en una minoría
de edad.