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Las artimañas del Diablo.

En esta serie de estudios vamos a tratar con las tácticas usadas por satanás para llevar al creyente
a pecar.

Debemos entender que satanás es el enemigo de Cristo y de todos sus discípulos, Él quiere
desviarnos de la voluntad de Dios y alejarnos de Él. Él es muy sutil en sus intentos, él quiere que
los creyentes sean seducidos sin que nos demos cuenta.

Satanás quiere que pequemos, pero no quiere que creamos o sintamos que estamos pecando.

En un resumen muy pequeño, podemos decir que hay 4 asuntos que el creyente debe aprender:

1. Debe aprender de nuestro Señor Jesucristo


2. Acerca de la Biblia
3. Acerca de si mismo
4. Y acerca de la astucia de satanás en sus intentos para alejarnos de Dios.

Satanás es un enemigo cruel. Demuestra su enojo contra Dios y su pueblo en todas las formas
posibles. Él quiere llevarnos a ser miserables, y a llenarnos de amargura. Y sabe que no hay nada
que nos pueda hacer más miserables que el pecado.

Debemos entender que Satanás utiliza muchas artimañas engañosas para hacernos pecar,
debemos entender que es un enemigo fuerte, más fuerte que nuestras capacidades. Él puede
hacernos mucho daño y herirnos.

Y en su astucia él no quiere que nos demos cuenta de que tan fuerte es, por esta razón es
necesario que aprendamos y enseñemos lo fuerte y cruel que es satanás, que nos recordemos
esto todos los días de nuestra vida.

El propósito de estos estudios es advertirnos de las formas que satanás procurara dañarnos, para
que así podamos ser fortalecidos y poder resistir a satanás y todas sus artimañas tramposas.

No basta con que escuchemos lo que Charlie tiene que decirnos, no basta con solo anotar y leer,
debemos ponerlo en práctica, poner manos a la obra.

Toda la enseñanza cristiana, todas las lecciones, estudios y conocimiento que recibimos de parte
de Dios y los pastores y hermanos no es solo para llevarnos a la verdad.

Los creyentes no solo debemos entender la voluntad de Dios, sino también hacerla.

Juan 13:17 dice: “Si saben estas cosas, serán bienaventurados si las hacen (es decir, poner en
práctica lo que hemos aprendido)”

Hay muchos pasajes que nos advierten sobre la sutileza de satanás. Vamos a ver algunos:

- 2 Corintios 2:11 “para que Satanás no gane ventaja alguna sobre nosotros; pues no
ignoramos sus maquinaciones.”

Pablo nos dice que él conoce, ha estudiado, y ha puesto en práctica su defensa contra las
maquinaciones de satanás.
Pablo estaba consciente de las distintas maquinaciones que satanás usa para perjudicar al
creyente.

- Ahora vayan a Efesios 6:11 “Vestíos de toda la armadura de Dios, para que podáis estar
firmes contra las asechanzas del diablo.”

Aquí Pablo nos está diciendo que los creyentes somos como soldados, que debemos vivir como
soldados en tiempos de guerra, que debemos siempre ponernos la armadura para protegernos del
enemigo. Pablo sabía que satanás nos atacaría de muchas maneras diferentes.

A veces tratara de atraparnos con ataques sin advertencia. Otras veces buscara desviarnos del
camino atacándonos cuando estemos confundidos. También en ocasiones nos tenderá una trampa
de falsa seguridad y exceso de confianza y ahí nos atacara con fuerza, tomándonos por sorpresa y
desprevenidos.

En todas estas maquinaciones satanas busca herir al pueblo de Dios y asi lograr que dejemos de
trabajar y pelear a causa de Dios. Los creyentes necesitan la armadura y la fortaleza de Dios para
pelear con satanas.

Y el ultimo texto que veremos hoy antes de comenzar a ver algunas de las artimañas de satanas, y
las formas en que satanas procura llevarnos al pecado, es el siguiente texto:

- 2 Timoteo 2:26 “y escapen del lazo del diablo, en que están cautivos a voluntad
de él.”

Recordando los tiempos de guerra, aquí pablo nos esta hablando de las personas que estan siendo
llevadas cautivas como prisioneros de guerra. Los prisioneros se sienten desesperados, sin poder
alguno para librarse y sujetos a la voluntad del enemigo. Asi satanas quiere lograr que seamos sus
prisioneros.

La palabra cautivo también es usada para hablar de las aves que están enjauladas, y es así como
satanás quiere que nos sintamos, en una jaula.

Así que, para terminar nuestra introducción, les digo que tengan mucho cuidado de las artimañas
de satanás. No se olviden que es un enemigo fuerte y cruel que se opone a todos los creyentes
verdaderos.

Nos quiere dañar y lograr que seamos inútiles para el reino de Dios.

- Y si tú no eres creyente, si aún no conoces a Cristo, si estas palabras y batallas te suenan a


locura, y ausentes en tu vida, si tú piensas que estas batallas son una exageración, o por el
contrario piensas que ya tienes resuelta la guerra, te digo que ni aun Cristo estuvo ausente
de tentaciones, aunque sin pecar, te digo que necesitas conocer a Cristo, que es urgente
que pidas a Dios que te muestre a Cristo, que reconozcas tu maldad y que eres prisionero
del enemigo de tu alma y que haces.

Sin oposición estas sirviendo al enemigo de tu alma, y necesitas a Cristo, pues este
enemigo es más fuerte que tú, es cruel y te llevara al infierno, en ello está todo su
empeño, todos sus esfuerzos, toda su eternidad.
Ahora sí, comencemos a ver estas maquinaciones, engaños o como las nos parece mejor las
“artimañas” de satanás.

1. Hay placer en el pecado.


Este primer método consiste en mostrarnos que hay placer en el pecado, ocultando la
tristeza y las consecuencias que el pecado traerá.

El pecado puede parecer muy placentero, satanás quiere que creamos que es así. El diablo
sabe que, si caemos en el error de pensar así, el pecado nos parecerá atractivo y nos
olvidaremos de la gran verdad, de que el pecado es cruel y dañino.

En el huerto del edén, Dios le dijo a Adán y a Eva que no comieran del fruto del árbol o
morirían, pero satanás le dijo a la mujer que si comían serian como dioses. Satanás hizo
que la desobediencia pareciera muy atractiva y placentera. Esto es lo que continúa
haciendo hasta hoy. Incluso trato de tentar a Jesús de la misma forma, le enseño a Jesús
todos los reinos y su gloria, y se los ofreció a cambio de su adoración.

¿Logran ver su engaño?, presento el pecado de una manera hermosa, atractiva, sutil. A
diferencia de la mujer, Jesús no peco, Él no fue seducido por el engaño de satanás.

Esto nos lleva a preguntarnos: ¿Cómo pueden los creyentes resistir a satanás cuando hace
que el pecado sea atractivo? Hay 4 remedios preciosos que nos pueden ayudar a no ser
atraídos por el pecado de esta manera.

1. Debes mantenerte alejado del pecado tanto como puedas.


1 Tesalonicenses 5:22 “Absteneos de toda especie de mal.”

Si caminas a la orilla del precipicio, puedes caer en cualquier momento, si


estas cerca del fuego puedes quemarte. Si el creyente camina cerca de lo que
es pecaminoso, no debe sorprenderse si cae en pecado.

Pablo dijo que odiáramos la maldad y que la odiáramos intensamente.

Romanos 12:9b “Aborreced lo malo, seguid lo bueno.”

2. Debes recordar que el placer del pecado muy pronto se convierte en


amargura.
Job 20:12-14 “Si el mal se endulzó en su boca,
Si lo ocultaba debajo de su lengua,
Si le parecía bien, y no lo dejaba,
Sino que lo detenía en su paladar;
Su comida se mudará en sus entrañas;
Hiel de áspides será dentro de él.”
El pecado puede brindar placer por un momento y parecer fácil al principio,
pero al final, el dolor producido es mayor que el placer que se recibe. Es como
la comida envenenada, tiene buen sabor, pero es mortal.

“el pecado que se come en la tierra tendrá que digerirse en el infierno”

3. El creyente debe de recordar que el pecado les hará perder aquello que es
verdaderamente bueno.

Los que ceden ante el pecado pierden el favor de Dios. Su gozo espiritual se
desvanece y pierden la paz de su corazón. El Espíritu Santo es contristado y su
influencia que nos vivifica de debilita.

El diablo realmente nos engaña porque el pecado no es realmente placentero


(sus comodidades son temporales).

4. Los creyentes deben fijarse bien en la forma como el pecado engaña.


El hermano Mark nos predicó un sermón muy adecuado acerca de este tema,
acerca de las mentiras y el engaño del pecado.

El pecado es el más grande engañador, y es la causa de todo el engaño que


hay en el mundo. El pecado por sí mismo es en sobremanera pecaminoso.

Hebreos 3:13 “antes exhortaos los unos a los otros cada día, entre tanto que
se dice: Hoy; para que ninguno de vosotros se endurezca por el engaño del
pecado.”

Cuando pecas, cuando el creyente peca frecuentemente se niegan a admitirlo


y contrariamente piensan que están bien. El pecado les hace creer que el mal
es bueno.

Basta que recordemos lo que ocurrió con Faraón, Balam y Judas para darnos
cuenta que una persona puede conducirse de manera pecaminosa pensando
que está haciendo bien.

En estos pecados podemos ver que una persona puede estar dispuesta a
perder a Dios, el cielo, Cristo y aun su propia alma porque no quieren dejar sus
pecados.

No hay nada más engañoso que el pecado.

No olvides que satanás es engañoso, cruel y despiadado. Recuerda que el pecado no es placentero
sino amargo, y no importa que tan agradable parezca. No dejes que satanás te aleje de Dios con
un engaño como este.

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