Está en la página 1de 6

UNIVERSIDAD SAN MIGUEL ARCANGEL DE HONDURAS

ASIGNACIÓN:

ENSAYO SOBRE EL MESTIZAJE EN HONDURAS.

ASIGNATURA:

HISTORIA DE HONDURAS.

ALUMNA:

DARA ELIZABETH MATUTE PÉREZ

NÚMERO DE CUENTA:

1208-2003-00318

DOCENTE:

LIC. RAFAEL ANTONIO RODRIGUEZ.

CAMPUS:

MÁRCALA, LA PAZ

SEGUNDO PERÍODO 2023

FECHA:

MIÉRCOLES 31 DE MAYO DEL 2023


El Mestizaje en Honduras

El proceso de conquista aportó los elementos fundamentales para la constitución de la futura

sociedad mestiza, la etapa formativa de este largo proceso tuvo lugar durante el siglo dieciséis

como en otras provincias de Hispanoamérica los primeros mestizos hondureños se resultaron de

las relaciones de sometimiento establecidas por los conquistadores. En los primeros años de la

conquista, la violencia, el rapto de indias, la adquisición de esclavas, la inclusión de doncellas

entre los obsequios dados a los españoles por los caciques indígenas así como las libres

costumbres sexuales de estos fueron elementos comunes en la historia del mestizaje de la

América Hispánica.

La sucesión histórica del mestizaje se inició con la conquista misma aunque es difícil medir las

dimensiones de su difusión debido a lo anárquico del siglo dieciséis y a la falta de fuentes

precisas en Honduras, sin embargo el mestizaje de esa época no debió ser muy extenso debido

a la drástica devastación a que fue sometida la población indígena. Esta primera generación de

mestizos tal vez por el número limitado de casos y por su participación en la empresa

conquistadora fue objeto de especial diferenciación y aunque eran marcados en la designación

como hijos de las indias pudieron asimilar sea una condición relativamente favorable y similar a

la de sus padres blancos.

Según se registra en el catálogo de pasajeros a indias desde los primeros tiempos un buen

número de esos primeros mestizos había viajado a España seguramente con sus padres o a

realizar gestiones relacionadas con sus ancestros blancos. El mestizaje que se produjo más tarde

durante los siglos diecisiete y dieciocho fue el resultado de la aparición de una economía

capitalista incipiente estrechamente vinculada al mercado externo y a la extracción de metales

preciosos, en torno a la minería surgió una composición social diferente a la conformada por los
pueblos de indios en las zonas rurales dedicados a la agricultura de subsistencia por el contrario

los reales de minas eran unidades de producción orientadas a la satisfacción de la demanda

metropolitana de metales preciosos lo cual marca una diferencia radical determinante en la vida

económica y social de la provincia.

Por un lado estaba la Honduras indígena y agrícola concentrada en la región occidental y por

otro la Honduras minera y ganadera poblada de los dignos mulatos y negros en la región Centro-

Sur. La necesidad de trabajadores para las minas condujo al surgimiento casi forzado de una

sociedad con características propias, manifiesta en el nacimiento de una población no india que

lentamente se fue estableciendo alrededor de los reales de minas a partir de las primeras

décadas del siglo diecisiete dispuestos a realizar los trabajos que estaban prohibidos para los

indígenas.

Este nuevo segmento de la población colonial alcanzó un nivel elemental de reproducción y se

multiplicó aceleradamente en las siguientes décadas.

En la formación de la sociedad mestiza de Honduras intervinieron tres tipos raciales

fundamentales: El Hispano, el indio y el negro africano. La multiplicidad de los contactos entre

estos tres troncos raciales dio origen a un nuevo tipo de humano, una especie de hibrido de esos

tres componentes fundamentales y que según su origen será denominado como ladino o mulato,

pardos, zambos, etc.

La presencia de haciendas ganaderas en diferentes partidos de la provincia actuaría como

estimulante para el surgimiento del trabajo libre, este hecho facilitaría en el curso del tiempo los

intercambios raciales entre indios y no indios de no ser así estos intercambios no hubieran sido

muy profundos esto debido a que la legislación colonial estipuló desde muy temprano que estaba

prohibido a los criollos, negros y mestizos asentarse en los pueblos de indios.


La tendencia de la población mestiza apuntaba hacia el asentamiento en regiones que ofrecían

mayores posibilidades de éxito económico en ausencia de una población indígena que abaratará

los costos de la mano de obra, Vivían dispersos en el campo en las montañas y en parajes

aislados denominados “Valles”.

Para 1755 su presencia fue lo suficientemente extensa como para crear problemas con las

autoridades coloniales ya que es un modo de vida que violaba las leyes divinas puesto que no

respetaban la justicia, cometían incesto, vivían amancebados, usurpaban tierras y cometían

frecuentes hurtos.

Los mestizos marginados y discriminados a nivel jurídico y social fueron ampliando

progresivamente su esfera de influencia de modo que al entrar en el siglo dieciocho su existencia

como grupo poblacional entró en conflicto constante con los indígenas al reclamar territorios y

espacios en el seno de la sociedad colonial.

Tenían todos los elementos a su favor, hablaban español eran culturalmente afines al español y

no estaban subyugados a las estipulaciones legales que sometían a los indios. No obstante esto

no significaba que los mestizos tuvieran privilegios eran invisibles en el sentido jurídico del

término lo cual si bien no les imponía deberes tampoco les otorgaba derechos. La mayoría de

ellos eran gente sin tierra que vivía en condiciones de miseria desprotegida de derechos sociales,

marginados de la justicia y escasamente atendidos por la iglesia en sus necesidades espirituales.

Es comprensible que la falta de espacios propios y la prohibición de asentarse en las

comunidades provocara en ellos una vida de desarraigo, miseria e incertidumbre marcada por el

individualismo y la violencia.

Mantener a los mestizos en una condición más marginal significaba no solo asegurar un

contingente de trabajadores para las minas, haciendas y obrajes. Sino también limitar las esferas

del poder político y económico a la elite de peninsulares y criollos que tradicionalmente las habían
controlado. La marginalidad, el aislamiento y la falta de apoyo moral en que se encontraron los

primeros mestizos y los que vinieron después acabó siendo una tragedia social.

Concluyo este apartado con lo siguiente: No me extraña que las condiciones en las que eran

obligados los mestizos a vivir hayan generado complejos de inferioridad y de resentimiento entre

la población que difícilmente serían superados en el posterior proceso de independencia. Ya que

la evolución colonial hacia los contenidos raciales más homogéneos tenían como punto de

partida paradójicamente la discriminación y la segregación racial, la división entre españoles,

indios y sus subproductos. Las barreras que esta división había creado entre los componentes

humanos de la sociedad colonial comenzaron a disolverse por el crecimiento acelerado del

mestizaje, la divinización de la sociedad colonial el cual era un hecho reconocido por las

autoridades coloniales los obligó finalmente a otorgar la ciudadanía a los pardos y mulatos en

1820 en la misma media en que la colonia llegaba a su fin se extinguían las formas de control

social que se habían modelado bajo la dirección de la iglesia.


Referencias Bibliográficas

Great, H. I. (2017, julio 26). Honduras es un país de Mestizos. Honduras is Great.

https://hondurasisgreat.org/mestizos-honduras/

Euraque, D. A. (2005). Apuntes para una historiografía del mestizaje en Honduras.

IBEROAMERICANA. América Latina - España - Portugal, 5(19), Article 19.

https://doi.org/10.18441/ibam.5.2005.19.105-117

También podría gustarte