Introducción

La psicología criminal es una rama de la psicología que busca comprender las

raíces sociales e interpersonales de las conductas delictivas. También tiene como
objetivo mejorar las técnicas de rehabilitación y prevención de los delincuentes.
Los psicólogos y psicólogas criminalistas trabajan con las fuerzas del orden, los
sistemas penitenciarios y los abogados para ayudarlos a comprender el
comportamiento y el estado mental de los delincuentes. Además, la psicología
criminal trata de averiguar qué es lo que impulsa a una persona a cometer un
delito y por qué el castigo no le hace renunciar a su voluntad de delinquir. Los
psicólogos y profesionales en criminología se basan en la psicología para
establecer las bases teóricas y prácticas. Algunas de las áreas de trabajo de la
psicología criminal son la realización de estudios de la personalidad criminal,
definir los perfiles criminales y establecer un tratamiento adecuado según la
personalidad del criminal. La psicología criminal seguirá evolucionando a medida
que la sociedad se enfrente a nuevos desafíos en el ámbito de la delincuencia.
La psicología criminal se enfoca en el estudio de la conducta criminal y los
procesos mentales que la motivan acá se presentan algunos fundamentos teóricos
de la psicología criminal y las teorías explicativas de las conductas agresivas que
produce el ser humano.
Modelos individuales
Modelos individuales de la psicología criminal son aquellos que se enfocan en la
personalidad única de un delincuente para entender sus motivaciones y así
desarrollar estrategias para prevenir su conducta delictiva futura. La psicología
criminal tiene en cuenta un enfoque de personalidad que guía una intervención
individualizada, profunda y a largo plazo para cambiar la vida del delincuente. Los
modelos de terapia cognitivo-conductual son una de las terapias individuales más
eficaces en la psicología criminal ya que se basan en la idea de que los patrones
de pensamiento y comportamiento del individuo pueden ser reestructurados y
modificados para prevenir la reincidencia delictiva. La importancia de entender y
tratar a los delincuentes a nivel individual es evidente, ya que, a medida que se
comprende mejor a las personas que cometen delitos, se pueden desarrollar
medidas efectivas para reducir la tasa de delincuencia.
Modelos psicosociales
Los modelos psicosociales de la psicología criminal tienen como objetivo explicar
cómo los factores psicológicos y sociales influyen en la conducta delictiva. Uno de
los enfoques más populares en este campo es el modelo de la asociación
diferencial, que sostiene que las personas aprenden a comportarse de manera
delictiva a través de su exposición a modelos criminales y su falta de exposición a
modelos pro sociales. Otro modelo importante es el de la teoría del aprendizaje
social, que se centra en cómo los individuos pueden aprender a través de la
observación y la imitación de la conducta de otras personas y una de las teorías
más importantes dentro de este modelo es la teoría de la anomia de Durkheim,
que sugiere que el comportamiento delictivo surge cuando las normas sociales
son debilitadas o ausentes.
De esta manera, estos modelos psicosociales pueden ayudar a comprender la
complejidad de los factores que contribuyen a la conducta delictiva y pueden ser
útiles para desarrollar intervenciones efectivas para prevenir y reducir el delito en
comunidades vulnerables.
Modelos integradores
Los modelos integradores de la psicología criminal buscan combinar diversas
corrientes de pensamiento al momento de abordar un caso criminal. De esta
manera, se logra llegar a conclusiones más sólidas y precisas acerca del
comportamiento del delincuente y las causas que lo llevaron a cometer el crimen.
La psicología criminal es una disciplina que se enfoca en estudiar el
comportamiento delictivo, y a través de estos modelos integradores, se puede
abordar este tema desde diferentes enfoques, como la psicología evolutiva, la
neuropsicología y la psicopatología. Al integrar aspectos de la psicología clínica, la
sociología, la criminología y la psiquiatría, estos modelos están permitiendo a los
expertos entender mejor cómo factores individuales y estructurales se combinan
para producir comportamientos criminales.  En este modelo podemos encontrar la
teoría del temperamento de Cloninger es una de las teorías más importantes
dentro de este modelo, que sugiere que ciertos rasgos de personalidad pueden
ser un factor de riesgo para el comportamiento delictivo . La inclusión de estas
diferentes disciplinas y enfoques en los modelos integradores ofrece una visión
más profunda de la complejidad del comportamiento delictivo y puede ayudar a
informar estrategias específicas para prevenir y tratar el delito. En general, estos
modelos permiten una aproximación más completa y multidisciplinaria al estudio
del comportamiento criminal, lo que resulta fundamental para la toma de
decisiones en el ámbito legal y judicial.
Tendencias actuales
Tendencias actuales de la psicología criminal indican que una de las áreas más
estudiadas es la violencia doméstica y sus efectos psicológicos en las victimas.
Las investigaciones sugieren que la psicología juega un papel vital en comprender
y abordar la violencia doméstica. Los profesionales de la psicología criminal
afirman que el daño psicológico es tan perjudicial para las víctimas como el daño
físico, por lo que se ha hecho hincapié en la necesidad de entender y tratar
adecuadamente estos casos. La psicología criminal también se ha utilizado para
analizar otros delitos como el acoso escolar y el tráfico de drogas. En general, la
tendencia actual de la psicología criminal es usar el conocimiento y la experiencia
en psicología para comprender delitos y ayudar a prevenirlos en el futuro.
La reevaluación de los sistemas judiciales y penales ha llevado a una mayor
demanda de la psicología criminal para ayudar en la comprensión y prevención del
crimen. Gracias a este nuevo enfoque, se ha logrado entender cómo factores
subyacentes como la genética, el medio ambiente, el comportamiento y la
personalidad contribuyen a la delincuencia. Los profesionales de la psicología
criminal ahora están mejor equipados para identificar patrones en el
comportamiento delictivo y desarrollar estrategias de intervención efectivas. En
última instancia, esta evolución en la comprensión del crimen está ayudando a
crear un sistema judicial más justo y equitativo.
 Conclusión

En conclusión, la psicología criminal es una disciplina fascinante que busca

entender el comportamiento delictivo desde múltiples perspectivas. Los modelos
psicosociales, integradores e individuales han sido fundamentales para
comprender la psicología criminal y sus tendencias actuales. Con nuevas
tecnologías y perspectivas más holísticas la psicología criminal seguirá
evolucionando y proporcionando nuevos conocimientos para prevenir y tratar el
comportamiento delictivo.
Por otro lado con los avances y la aplicación de la psicología criminal teniendo en
cuenta sus diferentes modelos y teorías, podemos obtener los perfiles criminales
que cada vez están tomando mayor repercusión en las investigaciones penales y
criminalísticas, teniendo en cuenta que aún hay una gran cantidad de información
y estudios por revisar que pueden ayudarnos a entender adecuadamente la
psiquis del criminal e identificar si existen otros factores externos o neurológicos
que predispongan al individuo a delinquir.

Referencias
Castillo, J. M. (2010). Psicologia criminal tecnicas aplicadas de intervencion e
investigacion policial. Lex Nova, S.A.U.
E, G. (2006). decision individual del delincuente y motivacion delictiva. madrid:
pearson prentice hall.
sintesis.com . (2006). Obtenido de
https://www.sintesis.com/data/indices/9788491712312.pdf
vazquez, b. (2005). manual de psicologia forense . madrid: sintesis .