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Derecho Constitucional
Derecho Constitucional
EL ESTADO, DERECHOS,
DEBERES Y
GARANTÍAS FUNDAMENTALES
CAPÍTULO I
INTRODUCCIÓN AL DERECHO CONSTITUCIONAL
1.-DERECHO Y AUTORIDAD
La palabra “derecho” proviene de la voz latina directus, participio pasado
de dirigiré, que significa enderezar, alinear, seguir el camino recto. De este
concepto original, la palabra derecho ha tomado varias acepciones. En
primer lugar “derecho” es un adjetivo que quiere decir recto, igual, continuo
(por ejemplo una línea). Otro adjetivo equivale a justo, legítimo, fundado,
conforme a razón. Es también la facultad de hacer o exigir todo lo que en
nuestro favor reconocen las leyes y autoridades, y la acción que se tiene
sobre alguna persona o cosa. Por último, la ciencia del Derecho o Ciencia
Jurídica es el conjunto de principios, preceptos y reglas a que están sujetas
las relaciones humanas en toda sociedad civil, y a cuya observancia puede
ser uno compelido por la fuerza.
De esta definición de la Ciencia del Derecho colegimos que estas reglas y
preceptos son obligatorios por si mismos, vale decir que conllevan la
autoridad de su aplicación general e indiscriminada. De aquí nace el
concepto de autoridad, que como bien se ve, no se encarna en el hombre,
sino en la ley. El hombre investido de un poder para mandar o decidir tiene
autoridad mientras ajuste sus actos y decisiones a la ley, al Derecho. En el
momento en que la autoridad pública o privada se sale del marco de la ley,
pierde su autoridad, deja de ser autoridad.
Se dice que Aristóteles sostenía que deben dominar las leyes; no los hombres.
Este principio fue incorporado en el art. 30 de la Constitución de
Massachussets (Estados Unidos de América) de 1780, que dice:
“En el gobierno de esta república, el departamento legislativo nunca
ejercerá los poderes ejecutivo y judicial, o uno u otro de los dos; el ejecutivo
nunca ejercerá los poderes legislativo y judicial o alguno de ellos; el judicial
nunca ejercerá los poderes legislativo y ejecutivo o alguno de los dos, a fin
de que pueda ser un gobierno de leyes y no de hombres.”
Los tratadistas y la jurisprudencia estadounidense han invocado
frecuentemente este principio.
Este concepto de autoridad es generalmente mal comprendido, incluso
entre los abogados y los gobernantes. Las “autoridades” por lo general son
abusivas, arbitrarias, y creen que mientras más prepotentes son, mayor
autoridad tienen. Débese ello a la falta de educación, al atraso mental y
material de nuestro pueblo. En efecto, en esta materia nuestro retraso es más
que feudal, linda con la antigüedad. Recordemos que en las sociedades
antiguas eran muy pocos los hombres libres, los ciudadanos. Esta calidad
estaba reservada solamente a las clases dirigentes: sacerdotes, militares y
funcionarios públicos. El resto de la población eran esclavos y no tenían
ningún derecho. En nuestros países atrasados de hoy ocurre algo similar.
Aunque todos somos iguales ante la ley y tenemos los mismos derechos
(principio de igualdad reconocido por nuestra Constitución), hay
determinadas clases sociales dirigentes, que generalmente detentan el
poder público, que no sólo se creen depositarías de éste, sino dueñas del
país. Véase por ejemplo la idiosincrasia de la mayoría de los empleados
públicos, que no obstante de ser pagados por el pueblo, no se sienten
servidores de éste, sino sus amos.
CAPÍTULO II
ORIGEN DEL DERECHO CONSTITUCIONAL
CAPITULO IV
PODER CONSTITUYENTE
1.-CONCEPTO E IMPORTANCIA
En Derecho Constitucional tiene mucha importancia el concepto de Poder
Constituyente como fuente original de toda constitución. La expresión
“Poder Constituyente” fue empleada por primera vez por el Abate Sieyés
durante la Revolución Francesa como sinónimo de la potestad que tiene el
pueblo de constituir un Estado y de darse una organización política y jurídica.
Cari Schmitt dice que el “Poder Constituyente es la voluntad política, cuya
fuerza o autoridad es capaz de adoptar la concreta decisión de conjunto
sobre modo y forma de la propia existencia política. De las decisiones de esa
voluntad se deriva la validez de toda regulación legal constitucional”,
(l)
Para Carlos Sánchez Viamonte “es la soberanía originaria, extraordinaria,
suprema y directa en cuyo ejercicio la sociedad política se identifica con el
Estado, para darle nacimiento y personalidad, y para crearle sus órganos de
expresión necesaria y continua”. Agrega el mismo autor que Poder
Constituyente “es la voluntad política creadora del Estado que se convierte
en voluntad jurídica al dictar la Constitución y crear, mediante ella, el
gobierno y el ordenamiento jurídico de la sociedad”. (2)
Segundo V. Linares Quintana dice que “es la facultad inherente a toda
comunidad soberana a darse su ordenamiento jurídico-político
fundamental originario por medio de una constitución, y a reformar a ésta
total o parcialmente cuando sea necesario”. (3)
De estas definiciones podemos colegir la naturaleza y la función del Poder
Constituyente. Es originario, porque no hay otro poder que le preceda o le
sea pre-existente, pues él da nacimiento a todo el aparato jurídico-político
del listado; es extraordinario porque es el único poder de esa naturaleza,
que no se asimila ni se confunde con otro poder ordinario como es el
elemento poder del Estado, por ejemplo; es supremo porque se coloca por
encima de todos los demás poderes, al dar nacimiento y creación al Estado;
y es directo porque según la teoría del Poder Constituyente elaborada
durante la Revolución Francesa, proviene directamente del pueblo, que es
su fuente matriz. Según Schmitt, es también unitario e indivisible, porque es la
base de todos los otros poderes y divisiones de poderes.
Otros autores niegan los caracteres de Unitario e Indivisible al Poder
Constituyente. No es lo primero, arguye Linares Quintana, porque el acto
constituyente es múltiple y la voluntad constituyente varía; y no es lo
segundo porque en los estados federales hay un Poder Constituyente
nacional y otros locales, subordinados en algunas materias al primero.
Según Pérez Serrano (citado por Linares) Poder Constituyente es “aquel
poder singular y extraordinario por virtud del cual un pueblo que venía
viviendo sin Constitución se da su primera ley política fundamental de tipo
liberal moderno, o al menos reforma y modifica su código político
preexistente, que ya no respondía a ese carácter”.
La función del Poder Constituyente consiste, como lo hemos dicho, en crear
la estructura global, estable e integrada del Estado, a través de lo que se
llama Constitución.
3.-PODERES CONSTITUIDOS
De lo que hemos expuesto se desprende claramente la diferencia entre
Poder Constituyente y Poderes Constituidos. Estos últimos-son los poderes,
órganos e instituciones contemplados en la constitución como son: Órganos
Ejecutivo, Legislativo y Judicial, municipalidades, etc.
Por esto Cari Schmitt expresa que “todo lo que se verifica en regulación legal
- constitucional a base de la Constitución, y en el marco de las
competencias constitucionales es, en esencia, de naturaleza distinta a un
acto del Poder Constituyente”. Síguese de esto que la facultad contenida
en una constitución de revisar o reformar la. misma, no puede calificarse
como Poder Constituyente, siendo más bien: “como toda facultad
constitucional, una competencia legalmente regulada, es decir, limitada en
principio”. (Schmitt).
Carlos Sánchez Viamonte distingue bien el Poder Constituyente de los
poderes constituidos en los siguientes términos: “En la técnica constitucional
se debe distinguir el Poder Constituyente de los poderes constituidos que
forman el gobierno ordinario. El Poder Constituyente es, como hemos visto,
la voluntad política creadora del Estado, que se convierte en voluntad
jurídica al dictar la Constitución y crear mediante ella el gobierno y el
ordenamiento jurídico de la sociedad. El gobierno creado por la
Constitución es organizado y reglamentado por ella. En una palabra, es
poder constituido, que nace del Poder Constituyente y que le está
subordinado. Las tres ramas funcionales o poderes del gobierno ordinario
(Legislativo, Ejecutivo y Judicial) son poderes constituidos y se mueven
dentro de la órbita que les fija el Poder Constituyente mediante la
constitución. Esta separación fundamental entre el Poder Constituyente y los
poderes constituidos es la mayor creación jurídica de la época
contemporánea. En ella se funda el constitucionalismo, que consagra y
asegura los derechos del hombre y del ciudadano, protegiéndolo contra
cualquier acto de autoridad ilegítima o ilegalmente ejercida”.
El mismo autor que acabamos de citar opina que el “Agreementofthe
People” (Acuerdo Popular) de 1647, que dio origen en Inglaterra a
lo que algunos consideran ya un documento
constitucional (“InstrumentOfGovernment”, de 1653), es el antecedente
más antiguo de la doctrina que separa el Poder Constituyente de los
poderes constituidos, porque se proponía establecer una ley suprema que
no estuviera al alcance del parlamento, cuyos poderes quería limitar, y
declaraba derechos reservados únicamente a la nación, que ninguna
autoridad podía tocar sin cometer delito.
Esta separación fundamental entre el Poder Constituyente y los poderes
constituidos -dice Sánchez Viamonte- es la mayor creación- jurídica de
aquellos tiempos (de la Revolución Francesa). En ella se funda el
constitucionalismo, con el cual se inaugura la edad contemporánea, y
gracias a él tienen consagración y pueden estar asegurados los derechos
del hombre y del ciudadano. (4)
CAPÍTULO VI
SUPREMACÍA Y CONTROL DE LA CONSTITUCIÓN
CAPÍTULO VII
EL CONTROL DE LA CONSTITUCIÓN
EN LA LEGISLACIÓN COMPARADA
A continuación haremos una revisión de las principales disposiciones que
sobre esta materia rigen en varios países de Europa y América:
1.- EN EUROPA
La Corte Constitucional Federal de Alemania tiene, entre otras, las siguientes
atribuciones, de acuerde al art. 93 de la Ley Fundamental (1949): Conoce
los recursos por inconstitucionalidad que interponga “cualquiera que se
crea lesionado por el poder público en uno de sus derechos
fundamentales”; o por los municipios y agrupaciones municipales cuando
consideran que una ley agravia su autonomía; interpreta la Ley
Fundamental en las controversias sobre derechos y deberes de un órgano
supremo de la Federación, y en las diferencias de opinión o dudas sobre
compatibilidad entre la legislación federal y la Ley Fundamental, así como
sobre derechos y deberes de la Federación y de los Lander u otras
controversias de derecho público entre ambos, o dentro de un Land,
cuando esté abierta la vía judicial.
El art. 100 dispone que “cuando un tribunal considere inconstitucional una
ley de cuya validez depende el fallo, se suspenderá el proceso y se
recabará, cuando se trate de violación de la constitución de un Land, la
decisión del tribunal del Land competente en asuntos constitucionales, y la
de la Corte Constitucional Federal cuando se trate de la violación de la
presente Ley Fundamental”.
Según la Ley Reguladora del Tribunal Constitucional Federal (art. 31), las
resoluciones de éste obligan no sólo a las partes, sino a todos los órganos
constitucionales, a los tribunales y a las autoridades de la Federación y de
los Lander. La Corte Constitucional Federal no se pronuncia de oficio, sino a
instancia de parte. No existe acción popular ante dicha Corte, es decir, no
cualquiera puede ejercitar una acción contra un acto contrario a la
Constitución, sino que debe hacerlo la persona agraviada en el caso
concreto. No hay recurso constitucional directo contra las leyes, sino que
debe actuarse después de que una autoridad, juez o tribunal las aplique.
Pero una ley inconstitucional es nula y nadie puede aplicarla: antes de
hacerlo, deben examinar si es o no constitucional. Si llegan al
convencimiento de que no lo es, deben someter el asunto a la Corte
Constitucional Federal, quedando en suspenso el procedimiento hasta que
se pronuncie la Corte. El recurso constitucional no procede sino después de
haberse “agotado todos los demás recursos jurídicos existentes contra el
acto que, presumiblemente, infringe un derecho fundamental”.
En España, cuando el Tribunal Constitucional declara la inconstitucionalidad
de una ley, ésta queda sin efecto posterior (art. 161 Const.). Pueden
interponer el recurso de inconstitucionalidad el presidente del gobierno, el
Defensor del Pueblo, cincuenta diputados, cincuenta senadores, los órganos
colegiados y las asambleas de las comunidades autónomas (art. 162). Los
jueces y tribunales de justicia pueden solicitar el pronunciamiento del
tribunal sobre leyes que deban aplicar en casos sometidos a su
conocimiento y sobre cuya constitucionalidad tengan dudas (art. 163). Las
sentencias del Tribunal Constitucional son inapelables, tienen el valor de
cosa juzgada y surten efectos erga-omnes. Salvo que en el fallo se disponga
otra cosa, seguirá vigente la ley en la parte o partes no afectadas por la
declaración de inconstitucionalidad (art. 164).
En Francia el Presidente de la República, el Primer Ministro o los presidentes
de las asambleas legislativas deben someter al Consejo Constitucional, antes
de su promulgación, las leyes orgánicas y los reglamentos de las Asambleas
y pueden hacer lo mismo con las leyes ordinarias, para que el Consejo se
pronuncie sobre su conformidad con la Constitución. Las disposiciones
declaradas inconstitucionales no serán promulgadas ni menos aplicadas.
Las decisiones del Consejo son inapelables y obligan a los poderes públicos,
a las autoridades administrativas y jurisdiccionales, (arts. 61 y 62 de la Const.).
Los arts. 277 yss. de la Constitución de Portugal (cuarta Revisión, 1.997) se
ocupan del control de constitucionalidad que ejerce el Tribunal
Constitucional: 1) de manera preventiva sobre tratados, decretos legislativos
regionales, decretos reglamentarios y leyes; 2) de manera concreta sobre
las sentencias de los tribunales; 3) de manera abstracta sobre la
inconstitucionalidad de cualesquiera norma. El art. 283 dispone que “el
Tribunal Constitucional examina y comprueba el no cumplimiento de la
Constitución por omisión de las medidas legislativas necesarias para hacer
efectivas las normas constitucionales”.
El Tribunal de Garantías Constitucionales de ex-Yugoeslavia resolvía “sobre
la conformidad de las leyes con la Constitución Federal; sobre la
compatibilidad de las leyes de las repúblicas o provincias con la legislación
federal y en general de los actos y disposiciones de los órganos federales y
de las comunidades socio-políticas con la Constitución y las leyes federales;
en los conflictos sobre sus derechos y deberes respectivos entre la
Federación y las repúblicas o entre éstas entre sí, así como los conflictos de
competencia entre los tribunales federales y los de las repúblicas y
provincias” (art. 375). Cuando dicho tribunal decidía que una ley era
inconstitucional, lo comunicaba la Asamblea legislativa competente (de la
Federación, de una república o de una provincia autónoma), p.ara que
corrigiera la contradicción dentro del plazo de seis meses, vencido el cual,
si no se hacía corrección, la ley quedaba sin efecto ipso-jure, (art. 384).
Cualquiera podía demandar ante el tribunal la inconstitucionalidad o
ilegalidad de una norma (art. 387).
(1) GARCIA PELAYO, Manuel - Obclt p. 432
2.-EN AMÉRICA
En Estados Unidos de América la revisión de la constitucionalidad de las leyes
está confiada a los tribunales de justicia en general y no sólo a la Corte
Suprema Federal. Esta función tiene antecedentes en el derecho de la
época colonial y en los debates sostenidos para aprobar la Constitución de
1787. Sin embargo, la Constitución no la menciona expresamente, sino que
se deduce de algunos de sus artículos, como los siguientes.:
“art. III Sección 2.- El poder judicial se extenderá a todos los casos de ley y
equidad que dimanen de esta Constitución, de las leyes de los Estados
Unidos, así como de los tratados celebrados o que se celebren bajo su
autoridad.
“art. VI”... Esta Constitución, las leyes de los Estados Unidos que en virtud de
ella se promulgaren y todos los tratados hechos o que se hicieren bajo la
autoridad de los Estados Unidos, serán la suprema ley del país. Los jueces de
cada Estado estarán obligados a observarla, aun cuando hubiere alguna
disposición contraria en la constitución o en los códigos de los Estados,”
Por consiguiente, la revisión judicial de la Constitución estadounidense es un
poder implícito, y no expreso en la misma constitución.
Esta función fue consagrada en 1803, en el famoso caso “Marbury vs.
Madison”, fundamentado por el presidente de la Corte Suprema Federal
(ver cap. VI, punto 1,b). No se limita a las contradicciones que pueda haber
entre la ley y otras normas secundarias con la Constitución, sino que se
extiende a los principios en que ésta se funda, como son el sistema federa,
la separación y coordinación de los poderes, la limitación de las facultades
de los órganos federales y estatales propia del Estado de Derecho, etc.
La justicia no declara la inconstitucionalidad de oficio, sino solamente a
instancia de parte, en una litis concreta y cuando tal declaración es
necesaria para decidir la controversia. Para hacer esto, los tribunales
examinan sí la ley o' norma emanan del órgano competente y si sus términos
contravienen o no a la constitución. Los efectos se circunscriben al caso
cuestionado y a otros que se presentaren con iguales fundamentos, pues los
tribunales se atienen al principio staredecisis que los vincula en todos los
casos similares al fallo anterior, pero la norma sigue vigente en los demás. La
declaración de inconstitucionalidad puede afectar a toda la ley o a una
parte de la misma, caso en el cual continúa vigente el resto y sus efectos se
extienden a todo el país.
En Brasil, según la Constitución de 1988, corresponde al Supremo Tribunal
Federal (que es una especie de Tribunal Constitucional diferente del Superior
Tribunal de Justicia o Corte Suprema), “la guarda de la Constitución,
cabiéndole: 1).- la acción directa de inconstitucionalidad de leyes o actos
normativos federales o estaduales... juzgar, mediante recurso extraordinario
las causas resueltas en única o última instancia, cuando la decisión
recurrida: a) contravenga a la Constitución; b) declare la
inconstitucionalidad de un tratado o de una ley federal; c) juzgue válida una
ley o acto del gobierno local impugnado según la constitución. Todo
alegato de incumplimiento de un precepto fundamental derivado de la
Constitución, será apreciado por el Supremo Tribunal Federal, conforme a la
ley” (art. 102).
CAPITULO VIII
ESTADO DE DERECHO
1.- CONCEPTO
La concepción del Estado de Derecho, dice Linares Quintana, influyó
decisivamente en la formación del constitucionalismo contemporáneo.
Debemos el concepto a la doctrina alemana donde se fue elaborando en
la obra de lo grandes juristas de los siglos XVII y XVIII, como Christian Wolf
(1.679-1.754), Heinrich VonJusti (1.720-1.771) y Emmanuel Kant (1.724-1.804).
Se acepta ahora que la expresión Rechtsstaat (Estado de Derecho)
apareció por primera vez en un libro publicado en 1.798 en Estrasburgo bajo
la firma do Johann Wilhelm Placidus. Theodor Welcker comenzó a desarrollar
la idea en su tesis “Sobre los fundamentos últimos del derecho, del Estado y
de la pena” (1.813); pero fue Robert Von Mohl (1.799-1.875) quien contribuyó
en mayor medida a popularizar el término en los estudios políticos y
constitucionales, al punto de que durante mucho tiempo se le atribuyó la
paternidad de la expresión. El objetivo del Estado de Derecho, según este
autor, es la realización de la libertad del ciudadano. En un libro que publicó
en 1.829 introdujo la noción en la teoría general del Estado y en los debates
polítios alemanes, (l)
La idea del Estado de Derecho supone básicamente que el Estado se
somete a la ley que él mismo impone, ley que es obligatoria para todos,
gobernantes y gobernados, en igualdad de condiciones, contrariamente a
lo que ocurría en la monarquía absoluta, donde el monarca era
legibussolutus, como hemos explicado antes. “Poco importa la noción que
se tenga del Estado -dice Duguit-, sea que se vea en él la personificación
jurídica de la sociedad, como lo enseña la doctrina metafísica, o que se vea
en él el resultado de una diferenciación entre gobernantes y gobernados y
una cooperación de servicios públicos, funcionando bajo la dirección y el
control de los gobernantes, como enseña la doctrina realista, poco importa;
hay que afirmar en forma enérgica e incansablemente que la actividad del
Estado, en todas sus manifestaciones, está limitada por un derecho superior
a él... lo esencial es comprender y afirmar... que existe una regla de derecho
superior al poder público que viene a limitarlo y a imponerle deberes”.
Se llama Estado de Derecho -dice Sánchez Viamonte- “a toda organización
Política de la sociedad que reposa sobre normas fundamentales cuyo
imperio se impone y se sobrepone a toda voluntad arbitraria y personal. Lo
que caracteriza al Estado de Derecho, al que aspira toda actividad
gubernativa es el imperio inexcusable de un determinado orden jurídico”.
(2)
La moderna constitución del Estado burgués de Derecho - dice Cari Schmitt
- se corresponde en sus principios con el ideal de Constitución del
individualismo burgués, y tanto que se suele equiparar estos principios a
Constitución y atribuir el mismo significado a las expresiones “Estado
Constitucional” y “Estado burgués de Derecho”. Esta
clase de Constituciones contienen, en primer término, una decisión en el
sentido de la libertad burguesa: libertad personal, propiedad privada,
libertad de conciencia, libertad de industria y comercio, etc. El Estado
aparece como el servidor, rigurosamente controlado, de la sociedad,
El mismo autor distingue dos principios típicos en el Estado de Derecho: uno
de distribución, porque se supone que la libertad individual es anterior al
Estado e ilimitada en principio; mientras que la facultad del Estado para
invalidarla es limitada en principio; y un principio de organización que sirve
para poner en práctica al anterior, mediante un
sistema de
“competencias circunscritas”. Según Schmitt, el principio de distribución se
expresa en los llamados derechos
fundamentales o de libertad; y el principio de organización está contenido
en la doctrina de la llamada “división de Poderes”, que tiene “por finalidad
lograr frenos y controles recíprocos de esos poderes... Derechos
fundamentales y división de poderes designan, pues, el contenido esencial
del elemento típico del Estado de Derecho, presente en la constitución
moderna”. (3)
Elias Díaz señala estos caracteres especiales del Estado de Derecho: a).
Imperio de la ley como expresión de la voluntad general; b).- Separación de
los órganos ejecutivo, legislativo y judicial; c).- Legalidad de la
administración: regulación por la ley y control, judicial; d).- Derechos y
libertades fundamentales: garantía jurídico formal y realización material. (4)
Como lo reconocen varios autores (Bidart Campos y Elias Díaz entre otros),
no todo Estado es un Estado de Derecho. Este es sinónimo del Estado
democrático-liberal, como veremos en el punto Nº 2.
2.- ANTECEDENTES HISTÓRICOS
Se ha dicho que en Grecia se propugnaba el imperio de la ley y la
eliminación de la arbitrariedad; pero recordemos que en la antigüedad
griega y romana eran muy pocos los titulares de derechos, y lo. mismo cabe
decir de la Edad Media. Por primera vez, la Declaración de Derechos del
Estado de Virginia, de 1776, traduce la voluntad de los representantes del
pueblo reunidos en asamblea. El art. 16 de la Declaración de los Derechos
del Hombre y del Ciudadano determina ya, con precisión, los caracteres
que habrían de configurar el concepto de Estado de Derecho, al señalar
que toda sociedad en la que los derechos fundamentales y la separación
de poderes no está garantizada, no tiene Constitución. El Estado de Derecho
es, pues, sinónimo de orden constitucional, y éste es un producto de las
revoluciones liberales del siglo XVIII.
Para Kelsen la expresión “Estado de Derecho” es un pleonasmo porque,
según él, todo Estado es un Estado de Derecho, cualquiera que sea la forma
de su gobierno. “El Derecho -el Derecho Positivo (no la justicia)- es
precisamente ese orden coactivo que es el Estado”. Sin embargo, ya hemos
visto que el concepto que venimos examinando nació con el orden jurídico
de la democracia que emergió de las revoluciones norteamericana y
francesa, en contraposición al orden de la monarquía destruida por éstas;
tanto es así que se habla del “Estado de Derecho Burgués”, porque la
revolución francesa fue hecha por la clase social llamada burguesía
precisamente.
3.- ESTADO SOCIAL DE DERECHO
El concepto de Estado de Derecho, o de Estado de Derecho Burgués, es
sinónimo de democracia liberal o clásica. Como hemos visto en el capítulo
III, este concepto ha sido superado por las ideas renovadoras del
constitucionalismo social y otras actuales que hacen del Estado un promotor
del bienestar y de la justicia social en el marco del Derecho. Esto es lo que
se ha venido a llamar Estado Social de Derecho, para indicar que no basta
un Estado sometido al Derecho, como un ente abstracto, sino que
primordialmente ese Estado debe promover el desarrollo económico y’
social de la población mediante la educación, el trabajo, la previsión y la
seguridad social, la cultura, el bienestar, la recreación y la justicia, de suerte
que todos puedan llevar una existencia digna del ser humano.
Se atribuye a Lorenz Von Stein (1.815-1.890) la primera concepción de un
Estado social de Derecho, cuando, en su “Historia del movimiento social”
(1.850) dice: .“ El principio del Estado es la libertad (...) Pero la libertad es un
concepto abstracto. La libertad no es real sino para alguien que posee las
condiciones, los bienes materiales y espirituales necesarios para la
autodeterminación”. (5)
Los excesos del individualismo que inspiró las constituciones democráticas
de los siglos XVIII y XIX provocaron las revoluciones de los siglos pasados,
ocurridas en procura de un orden social más justo y dieron lugar a
sustanciales reformas en el constitucionalismo contemporáneo, que se
incorporaron en las constituciones de Querétaro (México) de 1917, de
Weimar (Alemania), de 1919, de España (1931), de la U.R.S.S. (1936), etc.
Muchas constituciones vigentes hablan del Estado Social de Derecho. Así
tenemos, por ejemplo:
Ley Fundamental de Alemania Federal, de 1949 (art. 28): “El orden
constituido de los Lander deberá responder a los principios del Estado de
Derecho Republicano, democrático y social expresados en la presente ley
fundamental.
Constitución española de 1978.- (art. 1): “España se constituye en un Estado
Social y Democrático de Derecho, que propugna como valores superiores
de su ordenamiento jurídico la libertad, la justicia, la igualdad y el pluralismo
político...”.
Constitución del Perú de 1993 (Art 43): “La república del Perú es
democrática, social, independiente y soberana”.
4. - ESTADO DEMOCRÁTICO DEL DERECHO
Pero el Estado social de Derecho no es sino el Estado de Derecho burgués
con algunos retoques sociales, arguyen varios tratadistas; retoques
introducidos por el neocapitalísmo, que no resuelven el problema básico de
la injusticia social. José Luis Aranguren afirma en su libro “Etica y Política”
(citado por Elias Díaz) que “la tendencia actual al socialismo en el plano
económico, cualquiera que sean el grado cuantitativo y el carácter
estatificado o no de este socialismo, parece estar inscrita en la realidad
misma. En cualquier caso, el motor no puede ser -no debe ser- el interés
capitalista determinado a dar primacía a los bienes suntuarios de consumo
para conseguir así, como subproducto ético, el bienestar material de todos,
sino la organización, inspirada en una auténtica voluntad de justicia, de dar
á cada uno lo suyo, de la democratización económico- social”. Apoyando
este criterio, Elias Díaz sostiene que socialismo y democracia coinciden en
nuestro tiempo para instituir el Estado democrático de derecho, y que sólo
a través de ambos se hará efectivo el ejercicio de los derechos y libertades
del hombre. “El Estado democrático de Derecho tiene que ser hoy un Estado
de estructura económica socialista", dice Díaz, y agrega que “el
neocapitalismo con su famoso Estado del bienestar, apoyándolo todo en la
economía de una sociedad de consumo, no logra, hay que decirlo, ni
superar la enajenación de las masas, ni frenar la desigualdad social...”, fe;
5. -ESTADO CONSTITUCIONAL
Algunos autores distinguen entre Estado de Derecho y
Estado Constitucional. Coincidiendo con Kelsen, Zagrebelsky opina, que la
expresión “Estado de Derecho’’ podría aplicarse “a cualquier situación en
que se excluyese, en línea de principio, la eventual arbitrariedad pública y
privada y se garantizase el respeto a la ley, cualquiera que ésta fuese”;
pues dicho concepto responde al principio de legalidad del positivismo,
jurídico, de la producción jurídica en la instancia legislativa. El Estado de
Derecho, según dichos autores, es un concepto propio del siglo XIX que ha
sido superado en el siglo XX, después de la Segunda Guerra Mundial, por el
de Estado Constitucional. “La ley, por primera vez en la época moderna
viene sometida a una relación de adecuación, y por tanto de
subordinación a un estrato más alto de derecho establecido por la
Constitución”. Algunos consideran este concepto como una continuación
del Estado de Derecho; pero Zagrebelsky piensa que “se trata de una
profunda transformación que incluso afecta necesariamente a la
concepción del derecho”, pues frente a la multiplicación de leyes
sectoriales y temporales que reducen su carácter de generalidad y de
abstracción, la Constitución unifica y controla el orden jurídico como
globalidad. (7)
Luigi Ferrajoli expresa en otros términos una concepción similar. Para él, la
primera revolución en el campo del derecho se manifestó en la
omnipotencia del legislador, en el principio de mera legalidad (o de
legalidad formal); mientras que la segunda revolución consiste en el
principio de estricta legalidad (o de legalidad sustancial), por el que la ley
se somete a vínculos no sólo formales, sino sustanciales, que imponen los
preceptos y derechos fundamentales consagrados en las Constituciones.
Para que una norma sea válida, además de vigente, no basta que haya sido
emanada con las formas predispuestas para su producción, sino que es
también necesario que sus contenidos sustanciales respeten los principios y
los derechos fundamentales establecidos en la Constitución (8)
Para concluir este capítulo, digamos con el profesor Manuel Jiménez de
Parga que “no existe el Estado de Derecho puro. No se da en ningún sitio la
democracia modelo”. Esta no es una comprobación pesimista, sino realista,
porque nada es puro ni perfecto en las instituciones creadas por el hombre.
En efecto, no todo gobierno "de jure” es per se un gobierno constitucional,
pues siéndolo en su origen, en su formación, pueden actuar contra la
Constitución, como ocurre con frecuencia en los regímenes "democráticos”.
Cabe distinguir, por consiguiente, entre la legitimidad del origen de los
gobernantes y la constitucionalidad de sus actos, o lo que es igual, entre
legitimidad y legalidad. Un gobierno puede ser legítimo en su fuente, e ilegal
por sus actos.
Sin embargo, no debe olvidarse que, como lo ha dicho Loewenstein, la
historia del constitucionalismo no es otra que la lucha del hombre por
conquistar sus derechos y libertades. En este camino han recorrido los
pueblos enormes distancias para acercarse a su ideal, y es seguro que
seguirán avanzando, aunque quizá no lleguen nunca a la meta avizorada.
NOTAS
(1) FIGURES DE L’ETAT DE DROIT.-OUVIERJOUANJAN,
Compilador.-
PressesUniuersitaires de Strasbourg,2.001, pp. 5 y ss.
(2) Citado por LINARES QUINTANA, Segundo V., Ob. CU. Vol. 1, pág. 83.
(3) SCHMITT, Cari, Ob. cit.
(4) DIAZ, Elias, “Estado de Derecho y Sociedad Democrática", Altea
TaurusEdit. Madrid, 19S6.
(5) FIGURES DE LETAT... Ob. cit. p. 211.
(6) ObCit.
(7) ZAGREBELSKY, Gustavo, "El Derecho Dúctil". Edit - TROTTA, 3a. Ed.
Madrid, España, 1999.
(8) FERRAJOLI, LuigiA “Derechos y Garantías", Edit TROTTA, Madrid,
España, 1999.
CAPITULO IX
ESTADO Y NACIÓN
I. EL ESTADO
1.-CONCEPTO
La palabra Estado proviene de la voz latina status (condición de ser), con
que los jurisconsultos romanos designaban los atributos de la personalidad
jurídica. Es la manera de ser o la situación en que se encuentra una persona
o cosa.
Consignamos seguidamente algunas definiciones de Estado en la materia
que nos ocupa.
"El Estado es la nación política y jurídicamente organizada”. - Daniel
Antokoletz.
“Estado es la personificación de la nación. - Esmein.
"Sociedad jurídicamente organizada, capaz de imponer la autoridad de la
ley en el interior y afirmar su personalidad y responsabilidad frente a las
similares exteriores”. - Cabanellas.
“En su sentido más general, la palabra Estado designa a toda sociedad
humana en que existe una diferencia política, una diferencia entre
gobernantes y gobernados, o sea, según la expresión consagrada, una
autoridad política”. - León Duguit.
Ratael Bielsa, por su parte, dice que “el Estado puede considerarse, en
general, en dos sentidos, en razón de sus elementos constitutivos, a saber:
a) .- En sentido material, concebido el Estado como el pueblo que constituye
una unidad jurídica dentro de un territorio determinado,unidad organizada
bajo el imperio de la ley, con el objeto de realizar fines públicos de orden
jurídico y social; b).- En sentido formal, considerado como organización
jurídica de la sociedad, es decir como el conjunto de instituciones jurídicas
dentro de un ordenamiento político y administrativo, con un sistema
jerárquico de normas y órganos.”
2. - ELEMENTOS DEL ESTADO
En suma, dice Bielsa, los elementos esenciales del Estado son de dos órdenes:
a).- El pueblo y el territorio, elementos extrínsecos y visibles;
b) .- El imperium, elemento intrínseco, poder ordenador y coactivo.
a) La Población.- Es el conjunto de personas que viven dentro de un
territorio geográfica y políticamente delimitado.
Se ha diferenciado los conceptos de pueblo y población diciendo que el
primero tiene un significado político porque supone la colectividad titular de
derechos políticos (ciudadanía). Cuando se invoca al pueblo se piensa por
lo general en el electorado, y en la comunidad que actúa en el marco
jurídico - político del Estado. Cuando se habla de población, el vocablo
tiene un sentido sociológico y administrativo, pues lo que interesa determinar
en una población es su número, edades, clase y estratos que la componen,
su distribución en distritos administrativos (departamentos, provincias,
secciones, regiones), ingresos, movilidad horizontal y vertical, estadísticas,
proyecciones, etc.
b) Territorio.- Es la base física o superficie del planeta en la cual vive y
desarrolla su actividad la población; superficie limitada por el territorio de
otros Estados o por las aguas del mar. Sobre este territorio ejerce el Estado su
poder, que internamente asume la forma de Imperium, o sea el
ordenamiento jurídico nacional, y externamente la de soberanía, gracias a
la cual se relaciona en un planode igualdad con los otros Estados.
El territorio comprende el suelo, el subsuelo, las aguas interiores y exteriores
(mar territorial), el aire que rodea la tierra (atmósfera) en los límites del
territorio, hasta una altura indeterminada, vale decir hasta donde el Estado
pueda imponer su soberanía; y según el principio internacional de la
extraterritorialidad incluye también los buques de guerra y mercantes,
encuéntrense éstos en alta mar o en aguas territoriales de otros Estados, así
como los terrenos que ocupan las embajadas y misiones diplomáticas en
países extranjeros.
La tesis de la soberanía del Estado sobre su espacio aéreo fue confirmada
en la Convención de París de 1919 y en la Conferencia Internacional de
Aviación Civil suscrita en Chicago el 7 de abril de 1944, cuyo artículo l9.
dispone: “Los Estados contratantes reconocen que cada Estado tiene
soberanía exclusiva y absoluta sobre el espacio aéreo correspondiente a su
territorio” El art. 29 agrega: “Para fines de esta Convención se considerarán
como territorios de un Estado la extensión terrestre y las aguas territoriales
adyacentes a ella, que estén bajo la soberanía, jurisdicción, protección o
mandato de dicho Estado”.
c) Poder.- Es el tercer elemento del Estado que se ejerce internamente
como imperio y externamente como soberanía. En su forma más simple, se
define como “la aptitud o capacidad para imponer decisiones de carácter
general que afectan al bien común". Para Karl Loewenstein, el poder tiene
por objeto establecer un equilibrio entre las diferentes fuerzas pluralistas que
compiten dentro de la sociedad estatal y ejerce “una relación socio -
psicológica basada en un recíproco efecto entre los que detentan el poder
y aquéllos a los que va dirigido”. Por esto Duverger distingue poder de
poderío, que es la simple dominación por la fuerza material. No hay poder,
dice este autor, si los que obedecen no creen que es normal, bueno, justo y
legítimo que ellos obedezcan, de donde la noción de legitimidad se apareja
con la de fuerza o coacción como elemento de poder.
3.- FORMAS DE ESTADO
Constitucionalmente se reconoce dos formas de Estado: Unitario y Federal.
a) Estado Unitario.- Tres caracteres distinguen a esta forma de Estado: la
centralización del poder político en el gobierno nacional; la unidad del
ordenamiento jurídico (derecho público y privado) en todo el territorio, y la
unidad de la jerarquía administrativa a través de una organización que se
extiende asimismo a todo el territorio.
La unidad del ordenamiento jurídico significa dos cosas: que hay un solo
órgano, el legislativo, encargado de sancionar códigos y leyes para todo el
país; y que la Constitución, leyes, decretos y resoluciones son de aplicación
en todo el ámbito nacional. La unidad de la organización administrativa y
de su jerarquía supone su uniformidad; o sea que la administración central,
descentralizada, departamental y local tiene similares características en
todo el territorio del Estado.
Los departamentos y provincias en que se divide el territorio carecen de
personalidad, y tienen una connotación simplemente administrativa.
El Estado unitario puede ser centralizado o descentralizado. El primero es
aquel en que el poder político y administrativo se concentra en el órgano
ejecutivo, mediante relaciones de supraordinación y subordinación. El
Estado unitario descentralizado es aquel en que la administración se delega
a instituciones de servicio y a entidades territoriales que tienen personalidad
jurídica, patrimonio propio y competencias específicas, (l)
b) Estado Federal.- Está formado por un conjunto de Estados o provincias
federados que poseen autonomía porque se gobiernan, se administran y se
legislan con total independencia del gobierno central o federal. En el Estado
Federal hay descentralización política y administrativa, porque cada unidad
tiene su asamblea legislativa, que legisla para el Estado o provincia, de
suerte que la Constitución .y leyes de uno pueden ser diferentes a las de los
otros; y cada unidad tiene su propia organización administrativa que puede
variar de las demás.
La autonomía de que gozan los estados o provincias está, sin embargo,
subordinada a ciertos presupuestos jurídico-políticos acordadospreviamente
en la Constitución Federal, como puede ser por ejemplo la forma
republicana de. gobierno y los órganos y métodos para legislarse, que
deben observar todos los componentes de la federación. En otras palabras,
hay un poder único para ciertas materias, como la nacionalidad, las
relaciones exteriores, el comercio exterior, las finanzas públicas, la moneda,
pesas y medidas, los símbolos patrios, la defensa nacional, las fuerzas
armadas, el crédito y la deuda pública, las aduanas, los derechos, deberes
y garantías de la persona humana, las bases de la educación nacional,
actividades e industrias estratégicas, etc., cuya regulación está a cargo del
gobierno central o federal; y hay una pluralidad de poderes en materias que
conciernen a loscomponentes de la federación, como la legislación interna,
la administración y justicia de cada región.
Desde el punto de vista constitucional hay en el Estado Federal dos niveles
claramente diferenciados: la soberanía, que es atributo del Estado en su
conjunto, en sus relaciones con el exterior y en la regulación interna de los
asuntos de competencia nacional; y la autonomía que corresponde a cada
uno de los elementos integrantes de la federación, en virtud de la cual se
gobiernan, se legislan y se administran con independencia, en un plano de
igualdad.
La forma de Estado Federal no se conoció en la antigüedad ni en la Edad
Media; apareció por primera vez en Estados Unidos de América con la
Constitución de 1787, y fue producto de una transacción entre el Estado
unitario y el confederado que tenían sus partidarios irreconciliables. George
Scelle (citado por Linares Quintana, Ob. cit., tomo II, p. 105) sintetiza en
cuatro rasgos los caracteres del principio federal: “a).- La ley do
participación: que consiste en el derecho de los gobernantes y de los
agentes de las colectividades miembros a colaborar en la formación y en
las decisiones de los órganos federales; trátase de uno de los caracteres del
federalismo,como que se trata de un derecho de colaboración y no de
subordinación; b).- La creación de instituciones federales que se superponen
a las instituciones de la colectividades componentes: por cuanto el
federalismo comporta una superposición
de instituciones gubernativas y dichas superposiciones -que también se
encuentran en otros sistemas, como el vasallaje, el protectorado, la tutela
internacional, etc.- reviste modalidades especiales en el Estado ' Federal, en
el cual son los gobernantes y los agentes de una de las sociedades
interesadas -la metropolitana o soberana- que gobiernan o administran las
colectividades participantes y la sociedad mixta; por consiguiente, se
instituye un sistema nuevo de competencia y, por ende, un acuerdo de
gobernantes y de agentes, especiales para la sociedad nueva, afectados
al gobierno y la administración de la colectividad total; c).- El reparto de
competencias: ya que si bien la distribución de las competencias es común
al gobierno y a la administración de toda sociedad política, en el
federalismo desempeña un papel especial y decisivo; d).- El carácter
gubernativo de los representantes locales: desde que el federalismo postula
el derecho de los gobernantes locales a adoptar decisiones definitivas
dentro de los límites fijados por la Constitución federal”.
c) Confederación y federación.- La confederación es la unión de Estados
soberanos que se constituye mediante un pacto, manteniendo la
personalidad e independencia de las partes. “La confederación -dice
Jellineck- no disminuye jurídicamente la soberanía de los Estados
confederados, sino que más bien se obligan éstos mutuamente, con el fin
de conservar su soberanía, a ejercer ciertas funciones, bien sólo en común,
o al menos a hacerlo en común, bajo determinadas circunstancias”. (2)
La federación se forma por la Constitución, que expresa la voluntad
nacional, y es una reunión de Estados (o provincias) autónomos que juntos
constituyen un Estado soberano, el Estado Federal.
Los Estados confederados tienen el derecho de nulificación y de secesión,
que no corresponde a los Estados de una federación. Por el primero de estos
derechos, un Estado confederado puede oponerse a la aplicación en su
territorio de ciertos actos del poder confederado que no sean, según su
criterio, convenientes ni oportunos. El derecho de secesión autoriza a los
miembros de la confederación a desligarse de la misma cuando lo estimen
necesario.
La Constitución do la URSS. (1977) declaraba su art. 70 que es “un Estado
multinacional, federal y unido, configurado sobre el principio del federalismo
socialista y en virtud de la libre autodeterminación de las naciones y de la
asociación voluntaria de las repúblicas socialistas soviéticas, iguales en
derechos...”. El art. 72 disponía “cada república federada conserva el
derecho de secesión, o sea, ele separarse libremente de la URSS.”. Sin
embargo, el art. 73 prevenía que “incumbe a la URSS., representada por sus
órganos superiores de poder y de administración del Estado:... 2) determinar
la frontera estatal de la URSS., y rectificar las modificaciones de fronteras
entre las repúblicas federales...” 0 sea que, en derecho y eri los hechos, la
secesión no era libre, como lo proclamaba el art. 72 transcrito. (3)
De los artículos transcritos de la Constitución soviética se colige que la misma
contenía una mezcla de principios federales y confederales. Como lo
observa Linares Quintana, resultan confusos en la práctica los límites de
ambos por lo que algunos autores, como Scelle, no reconocen la distinción.
II. LA NACIÓN
Se define la nación como un grupo humano radicado en un territorio físico
determinado, cuyos integrantes están vinculados por sentimientos de
historia, creencias, tradiciones, idioma y proyecciones comunes en el
propósito de construir una sociedad justa y progresista.
pación es un concepto histórico-sociológico que ha servido de base a la
formación del Estado-Nación, dentro del cual, sin embargo, pueden existir
varias nacionalidades (la URSS., Yugoslavia, Suiza, India, el Reino Unido, etc).
El Estado es un concepto jurídico-político qué nace como resultado de un
tratado, de una secesión o del proceso de descolonización. Mientras la
existencia de la nación supone muchos siglos de convivencia que produce
una multiplicidad de vínculos históricos, raciales y sociales, el Estado puede
formarse más rápidamente, ya que es una entidad esencialmente política y
jurídica. *
III. NACIÓN Y NACIONALIDAD
En el Capítulo I de la Segunda Parte se explica' el concepto de nacionalidad
en Derecho Constitucional y tal como aparece en.laCPE
(Cap. I del Título V de la Primera Parte, arts. 141- y 143).
En la Constitución española de 1.978 se emplea por primera vez -que se
sepa- en un texto constitucional, este sustantivo como sinónimo de nación.
En efecto, el artículo 2 dice:
"La Constitución se fundamenta en la indisoluble unidad de la nación
española, patria común e indivisible de todos los españoles, y reconoce y
garantiza el derecho a la autodeterminación de las nacionalidades y
regiones que la integran y la solidaridad entre todas ellas".
Se empleó el término nacionalidad en dicho artículo con la pretensión de
diferenciarlo de nación, que para los proyectistas era una sola, la nación
española, compuesta de varias "nacionalidades" (catalanes, vascos,
andaluces, etc.). En el largo debate que precedió a la aprobación de ese
artículo el 12 de mayo de 1.978, se reconoció, sin embargo, por algunos de
los 34 miembros de la Comisión Constitucional del Congreso, que España es
una "nación de naciones", como lo son el Peino Unido, Bélgica, India y
Bolivia, y como lo eran en ese momento Checoeslovaquia y Yugoslavia; de
manera que se utilizó el término como sinónimo de nación.
NOTAS
(1) Para mayor información sobre los procesos de centralización, y
descentralización, ver DERECHO ADMINISTRATIVO, del autor, 5ta. Ed„
Edit. J.V., Cochabamba 2001, Cap. VIII, así como conferencias y
Artículos publicados por el autor sobre esta materia.
(2) LINARES QUINTANA, Ob. cit., Tomo 2 . p. 113.
(3) Según Lenin "no hay que confundir el problema del derecho de las
naciones a separarse libremente con el de la utilidad de separarse
para tal o tal otra, nación, en tal o cual momento. Este último
problema debe resolverlo el Parlamento y el proletariado, en cada
caso particular, de una forma completamente independiente,
teniendo en cuenta los intereses del conjunto del desarrollo social y los
intereses de la lucha de clases del proletariado para el socialismo”,
(citado por LINARES QUINTANA, Ob. cit. p. 119-120).
Esta cuestión se puso de actualidad con la declaración de independencia
de la URSS, que hizo el parlamento de Liluania el 11 de Marzo de 1990;
resolución no aceptada por la URSS, que exigió se siga el procedimiento de
secesión establecido por una ley que dilata el mismo durante cinco años.
Pora este capítulo se ha consultado, además:
VANOSSI Jorge R„ Ob. cit.
CAPÍTULO X
GOBIERNO
1.-CONCEPTO
Gobierno es el mecanismo constitucional a través del cual actúa el
elemento poder del Estado. Se ha dicho, por ello, que el gobierno “es la
organización mediante la cual la voluntad del Estado es formulada,
expresada y realizada”.
Estado y gobierno son dos conceptos distintos que conviene diferenciar' y
que no pueden ser confundidos sin incurrir en un error inexcusable. Hemos
dicho que el Estado en su definición más simple es la nación política y
jurídicamente organizada. El Gobierno, en cambio, como lo hace notar
Posada “es la organización específica del poder constituido en y por el
Estado y al servicio del Estado. El concepto de Gobierno se vincula con la
actividad funcional del Estado. Es la parte de él que pone en movimiento el
poder del Estado”.
Para Duguit, el gobierno es “el conjunto de los órganos directivos del Estado".
El gobierno está formado por las autoridades públicas que ejercen ol Poder
del Estado.
Comúnmente se entiende por gobierno al poder ejecutivo, en el sentido de
que éste decide y ejecuta en asuntos de sus competencias política y
administrativa, y puesto que gobernar es conducir, dirigir. Esta asimilación
del concepto a la rama ejecutiva proviene de que, hasta las revoluciones
democrático-burguesas de fines del siglo XVIII, los autócratas de todos los
tiempos concentraban el gobierno en sus manos, pues
constitucionalmente no se conocía la “división de poderes” ni la distribución
de funciones en órganos separados. Sin embargo, hay que aclarar que el
gobierno comprende a las tres ramas mediante las cuales desarrolla el
Estado su actividad: ejecutiva, legislativa y judicial, cuya independencia,
cooperación y coordinación son base de la organización del Estado (art.
12.1 CPE.).
2. - FORMAS DE GOBIERNO
Las formas de gobierno han variado según las épocas y los países. Sin
embargo, es posible clasificarlas a través de algunos caracteres que las
identifican, lo que se ha hecho por varios autores desde la antigüedad.
Aristóteles distinguía las formas puras de las impuras. Las primeras eran las
que atendían al interés general mediante la observancia de las leyes y el
cumplimiento de las obligaciones de los gobernantes. Las segundas, por el
contrario, se ejercían contra el bien común y en beneficio de los
detentadores del poder. Formas puras eran para Aristóteles la monarquía,
(gobierno de uno solo), la aristocracia (gobierno de los mejores) y la
democracia (gobierno del pueblo). Formas impuras eran la tiranía, la
oligarquía y la demagogia.
Montesquieu clasificaba tres formas de gobierno: Republicano, monárquico
y despótico. En el primero tomaba parte el pueblo, totalmente o en parte;
la monarquía era el gobierno de uno solo, con sujeción a leyes establecidas;
y el despotismo era ejercido por uno solo de acuerdo a su voluntad
arbitraria, y sin arreglo a las leyes.
Karl Loewenstein diferencia a las autocracias de las democracias, y
subdivide a las primeras en regímenes autoritarios y totalitarios, y a las
segundas en democracia directa, gobierno de asamblea, parlamentario,
de gabinete, presidencial y directorial.
Un gobierno autoritario es ejercido por un dictador, un grupo de funcionarios
o un partido político, sin participación efectiva de los ciudadanos en el
mismo. Un gobierno totalitario reviste caracteres similares al anterior, pero
además somete a la población totalmente a sus designios, interviniendo en
su vida privada, social, moral y cultural, desuerte que no se permite otra
ideología ni un sistema de vida diferente al impuesto desde arriba.
En la segunda parte de este curso nos ocuparemos de las formas de
gobiernos democráticos que menciona Loewenstein.
3. - GOBIERNOS DE FACTO
Parecería incongruente tratar en un curso de Derecho Constitucional sobre
-gobiernes que no son elegidos ni funcionan de acuerdo a la Constitución.
Sin embargo, la existencia de estos gobiernos en gran parte do los países es
una realidad tan antigua como el hombre, que no tiende a desaparecer,
peso a los avances realizados por el Derecho Público y a las presiones
populares por la defensa de los derechos humanos y de las libertades
públicas. Siendo esto así, no puede concebirse a un gobierno de facto que
no se atenga a cierto orden jurídico, aunque éste sea el que conviene a sus
intereses. Donde hay sociedad hay derecho (Ubi Societas, ibijus).
A propósito de esto Andrés Fink sostiene que “una determinada comunidad,
en un momento histórico dado puede necesitar, por determinado tiempo,
un gobierno de hecho, sin que se pueda, a priori, calificar negativamente a
dicho gobierno por el solo hecho de ser tal. Del mismo modo, un gobierno,
aun siendo de derecho, puede ser injusto y reprobado por los gobernados”,
(i)
a.- Definición.- En un sentido general, todo gobierno que no es de derecho
se considera de facto. A continuación consignamos algunas definiciones
citadas por Andrés Fink:
Jesús FueyoAlvarez entiende por tal el “que ejerce los poderes públicos con
infracción de la superlegalidad (formal o material) constitucional". Incluye
en el concepto a los “que se ejercen con infracción constitucional, no
obstante la legitimidad de su origen". Esta definición rebasa el concepto
tradicional de gobiernos de facto por su origen, y de acuerdo a la misma
muy pocos gobiernos podrían considerarse de derecho, puesto que los
hombres y las instituciones, falibles por naturaleza, incurren en infracciones
frecuentes a la constitución y alas leyes. En Bolivia, por ejemplo, ningún
gobierno “constitucional” se salvaría de esta clasificación. Según
Constantineau “un gobierno de facto en el estricto sentido jurídico es un
gobierno que ilegalmente obtiene la posesión y control de un estado o país,
desapoderando al legítimo gobierno legal y manteniéndose por la fuerza y
las armas contra la voluntad del legítimo gobierno legal, cuyos poderes
declara ejercer”.
Georges Burdeau resume su opinión así: “Se trata simplemente de una doble
constatación: en primer lugar que el gobierno en cuestión no tiene ningún
fundamento constitucional. En segundo lugar, que se trata efectivamente
de un gobierno”.
Para Larnaude gobierno de hecho es “el que no ha recibido la consagración
formal de la consulta popular regular, constitucional”. Pérez Guilhou incluye
en esta denominación a los gobiernos cuyos órganos constitucionales, en
todo o en parte, son formados por procedimientos diferentes a los que
señala la Constitución, y aclara que este concepto “comprende tanto a los
gobiernos que arriban legítimamente al poder... como los que actúan
movidos por un afán de usurpar la conducción para satisfacer intereses de
grupo o de un caudillo”, sean estos cambios resultado de un golpe de
estado o de una revolución.
Según Marcel Prélot, son tres las instituciones que dan nacimiento a los
gobiernos de facto: la insurrección popular, generada por el descontento
general, que se inicia espontáneamente sin jefes visibles; el golpe de fuerza,
denominado putsch, que tiene origen privado y responde a intereses de esa
clase; y el golpe de estado, producido por algunos o una parte de los
poderes públicos constituidos.
b.- La doctrina de facto.- Sobre los actos de los gobiernos de hecho y de
sus funcionarios se ha elaborado una doctrina que sostiene que aquéllos
son válidos y “necesariamente deben estar reconocidos en una u otra
forma, ya sea expresa o tácitamente, por todas las naciones civilizadas del
mundo”, porque “si todos los actos realizados por usurpadores y por los
funcionarios que bajo ellos gobernaron... tuvieran que
sersubsecuentemente declarados nulos y sin ningún valor, habría una
confusión sin fin” contraria a la necesidad de preservar la paz y el orden en
la comunidad. (2)
Esta doctrina, iniciada en Inglaterra en 1431 se ha aplicadoen Francia desde
la Revolución Francesa y en Estados Unidos con motivo de la guerra de
Secesión: Se ha hecho notar que la expresión defacto proviene en principio
del derecho administrativo, donde se aplica a los funcionarios no investidos
regularmente en sus funciones (3), y de allí ha pasado al derecho
constitucional o político.
La doctrina de facto tiene fundamentos prácticos y no otorga legitimidad a
los gobiernos de hecho, pues, como observa Fink, “tiene una función
meramente instrumental. Se trata de un principio técnico que ayuda a
resolver un interregno, un período crítico. La legitimidad del gobierno de
facto como tal no tiene ninguna relación con la doctrina de facto...”. (4)
Hay, evidentemente, una contradicción irreconciliable entre los principios
del Derecho Constitucional y la doctrina de facto, contradicción que ha sido
señalada con precisión por Carlos Sánchez Viamonte, al comentar los
términos de la acordada emitida por la Corte Suprema de Justicia de la
República Argentina el 10 de Septiembre de 1930, con motivo del golpe de
estado de 6 de ese mes, encabezado por el general José Félix Uriburu contra
el presidente constitucional Hipólito Irigoyen, y ante una comunicación que
los gobernantes de hecho dirigieron a la Corte Suprema avisándole su
instalación. Seguidamente transcribimos ambos documentos, de la obra de
Fink, para una mejor comprensión de los alcances de la doctrina de facto
frente a la doctrina constitucional universal:
“ I5.) Que la susodicha comunicación pone en conocimiento oficial de esta
Corte Suprema la constitución de un gobierno provisional, emanado de la
revolución triunfante del 6 de septiembre del corriente año; 2o.) que ’ese
gobierno se encuentra en posesión de las fuerzas militares y policiales
necesarias para asegurar la paz y el orden de la nación y, por consiguiente,
para proteger la libertad, la vida, y la propiedad de las personas, y ha
declarado además, en actos públicos, que mantendrá la supremacía de la
Constitución y de las leyes del país, en el ejercicio del poder; 39.) que tales
antecedentes caracterizan, sin duda, un gobierno de hecho en cuanto a su
constitución, y. de cuya naturaleza participan los funcionarios que lo
integran actualmente o que se designen en lo. sucesivo, con todas las
consecuencias de la doctrina de facto, respecto de la posibilidad de realizar
válidamente los actos necesarios para el cumplimiento de los fines
perseguidos por él; 42.) que esta Corte ha declarado, respecto a los
funcionarios de hecho, que la doctrina constitucional e internacional se
uniforma en el sentido de dar validez a sus actos, cualquiera que pueda ser
el vicio o deficiencia de sus nombramientos o de su elección, fundándose
en razones de policía y necesidad, con el fin de mantener protegido al
público y a los individuos cuyos intereses pueden ser afectados, ya que no
les sería posible a éstos últimos realizar investigaciones ni discutir la legalidad
de las designaciones de funcionarios que se hallan en aparente posesión de
sus poderes y funciones. (Constantineau,; “Publicofficers and de facto
doctrine”, “Fallos”, XCLVIII, p, 303,5S.) que el gobierno provisional que acaba
de constituirse en el país es, pues, un gobierno de facto, cuyo título no puede
ser judicialmente discutido con éxito por las personas encuanto ejercita la
función administrativa y política derivada de su posesión de la fuerza como
resorte de orden y seguridad social; 62.) que ello no obstante, si normalizada
la situación, en el desenvolvimiento de la acción del gobierno de facto, los
funcionarios que lo integran desconocieran las garantías individuales o las
de la propiedad u otras de las aseguradas por la Constitución, la
administración de justicia encargada de hacer cumplir éstas las
restablecería en las mismas condiciones y en el mismo alcance que lo habría
hecho con el poder ejecutivo de derecho. Y esta última conclusión,
impuesta por la propia organización del poder judicial, se halla confirmada
en el caso por las declaraciones del gobierno provisional, que al asumir el
cargo se ha apresurado a prestar el juramento de cumplir y hacer cumplir la
constitución y las leyes fundamentales de la nación, decisión que comporta
la consecuencia de hallarse dispuesto a prestar el auxilio de la fuerza de que
dispone para obtener el cumplimiento de las sentencias judiciales”.
Los comentarios de Sánchez Viamonte rezan así:
“...entre los defectos principales de la acordada de la Corte Suprema, del
10 de septiembre de 1930 se puede señalar: 1-.) Que no era necesario
dictarla. 29.) que el reconocimiento fue oficioso y contrario a la
ininterrumpida jurisprudencia del propio tribunal, que siempre había
consistido en mantenerse estrictamente dentro de las prescripciones de los
art. 100 y 101 de la Constitución, según los cuales la Corte ejerce su
jurisprudencia en las causas y casos concretos promovidos por parte
interesada. 3a.) Que reconoce la existencia de un gobierno de hecho o de
“facto”, y aun cuando pueda interpretarse qué quiere decir “Poder
Ejecutivo”, como aparece expresado en el penúltimo párrafo, la
impropiedad del lenguaje induce a creer que ese reconocimiento significa
atribuir a los jefes de ese motín militar triunfante todos los poderes que
integran el gobierno de nuestro sistema republicano. 4a.) Que excluye de
antemano toda posibilidad de discutir con éxito el título o la legitimidad de
los funcionarios, como si ese tribunal estuviese facultado para legitimar, por
anticipado, funcionarios y actos inconstitucionales. 5a.) Que repetidamente
califica a los ocupantes del poder de hecho como “gobierno de facto”, en
vez de llamarlos “funcionarios de facto”, con lo que va diciendo que el
gobierno, es decir, la institución y las funciones inherentes a él, son de facto,
no obstante que el acatamiento a la Constitución por los revolucionarios
significa el mantenimiento del gobierno de jure y de las funciones creadas y
reglamentadas por la Constitución. 69.) Que al declarar de facto al gobierno
revolucionario y a los funcionarios que lo integran, la Corte Suprema declara
expresamente que se debe aplicar la doctrina de facto, sin tener en Cuenta
que esa doctrina sólo es aplicable a los funcionarios con título de aparente
legitimidad, constituido por elección popular. 7a.) Que los que el 6 de
septiembre de 1930 se apoderaron de las funciones gubernativas carecían
en absoluto de título, lo que hacía imposible toda apariencia de legitimidad
y merecían, según la doctrina expuesta por el juez de Canadá, Albert
Constantineau, cuyo libro es el único que se cita en la acordada, el
calificativo de usurpadores... 8a.) Que la diferencia entre funcionario de
facto y usurpador consiste en que los actos del primero pueden ser
convalidados por los subsiguientes funcionarios de jure, en tanto que los del
segundo son absolutamente nulos desde cualquier punto de. vista que se los
juzgue. 9a.) Que según el art. 22 de la Constitución argentina, sólo gobierna
el pueblo por medio de sus representantes y autoridades creadas por la
Constitución. Toda fuerza armada que se atribuya los derechos del pueblo
comete delito de sedición. Y según el Código Penal (art. 246, inc. 1), los que
“asumieren y ejercieren funciones públicas sin título o nombramiento
expedido por autoridad competente” cometen delito de usurpación de
autoridad. La Corte Suprema no podía llamar “gobierno” ni “funcionarios
de-facto” a quienes, por carecer en absoluto de título, incurrían en los delitos
de sedición y usurpación de autoridad. 109.) La Corte Suprema... calificó de
“revolución" a un motín o asonada militar triunfante. Este calificativo induce
a confundir el hecho y las circunstancias, que son diferentes en uno y otro
caso... Una verdadera revolución comporta cambios fundamentales en el
orden jurídico institucional, y eso no ocurre cuando se trata de una asonada
militar. II2.) En su acordada omitió la Corte Suprema tener en cuenta el
principio político del asentimiento de los pueblos, o del pueblo... y, al
hacerlo, prescindió del fundamento democrático en que debe apoyarse
toda manifestación del poder público. 122.) Por último, la Corte Suprema
omitió hacer la reserva que correspondía respecto del tiempo de duración,
durante el cual tendría alguna explicación plausible el ejercicio del Poder
Ejecutivo por los jefes de los motines militares, y olvidó también establecer su
obligación perentoria de volver a la. normalidad constitucional”.
Se ha hecho notar que las observaciones de Sánchez Viamonte son
inobjetables desde el punto de vista estrictamente teórico y doctrinario; pero
que no consultan la realidad existente después del golpe de 6 de septiembre
de 1930 en Argentina. Fink resume así esta contradicción básica:
“Evidentemente, la cuestión entre teoría y realidad suele resolverse en favor
de esta última, y, desde luego, no por falta de argumentos razonados, sino
porque la contundencia de los hechos de la vida política cotidiana lo
impone así”. (5)
NOTAS
(1) FINK, Andrés.- "Los Gobiernos de Facto ante el Derecho y ante la
Circunstancia Política".- Ediciones Depalma, Buenos Aires, 1984.
(2) CONSTANTINEAU, Albert.- CU. por FINICA en Oh. cit. pp. 10-11 (3) Ver
DERMIZAKY, Pablo, "Derecho Administrativo" 5ta. Ed., Edit. J.V.,
Cochabcimba, 2001, p.m.
(4) FINK, A.,ob. cit. p. II.
(5) Ibídem, p. 14.
CAPITULO XI
DEMOCRACIA
1. -ANTECEDENTES
La marcha hacia el constitucionalismo que se inició con las revoluciones
norteamericana y francesa, que dieron lugar a las primeras constituciones
escritas, coincide con la aparición de las instituciones democráticas, por
oposición al orden jurídico de la monarquía. Hay una identidad de principios
entre constitucionalismo y democracia; o, lo que os igual, las modernas
constituciones reflejan el aparato jurídico-político do la democracia
contemporánea, basada en el Estado de Derecho burgués que proclamó
la revolución.francesa.
Desde que desapareció la ciudad-estado en Grecia, donde se practicó la
democracia directa, hasta la era del constitucionalismo moderno, hay un
vacío de dos mil años en la teoría y práctica de la democracia. En Roma
hubo una república oligárquica que se transformó gradualmente en un
imperio oligárquico. Los estados que le sucedieron en la Edad Media eran
reinos tribales o feudales que se transformaron en monarquías absolutas en
los siglos XVI y XVII. En la Edad Media nacieron también repúblicas
independientes, que eranpredominantemente oligárquicas, y ésta érala
situación, hasta que ocurrieron las revoluciones norteamericana y francesa.
2.- DEFINICIONES
Pericles señaló tres caracteres de la democracia: ISONOMIA que significa
igualdad ante la ley; ISOTIMIA, que establece igualdad de derechos de
todos los ciudadanos para el ejercicio de la autoridad, y según la cual no
hay privilegios ni funciones hereditarias; ISEGORIA que significa libertad de
palabra, asociación y reunión, importando la igualdad de los hombres para
ejercitar esas libertades.
Pericles hizo una elegante apología de la democracia en Atenas, que
Tucídidos nos ha legado en estas palabras magistrales:
“Nuestro régimen político es la democracia, y se llama así porque busca la
utilidad del mayor número y no la ventaja de algunos. Todos somos iguales
ante la ley, y cuando la república otorga honores lo hace para recompensar
virtudes y no para consagrar el privilegio. Todos somos llamados a exponer
nuestras opiniones sobre los asuntos públicos. Nuestra ciudad se halla abierta
a todos los hombres; ninguna ley prohibe en ella la entrada a los extranjeros,
ni les priva de nuestras instituciones ni de nuestros espectáculos; nada hay
en Atenas oculto, y se permite a todos que vean y aprendan en ella lo que
bien les pareciere, sin esconderle ni aquellas cosas cuyo conocimiento
puede aprovechar a nuestros enemigos, porque confiamos para vencer no
en preparativos misteriosos ni en ardides y estratagemas, sino en nuestro
valor y en nuestra inteligencia. Tenemos el gusto de lo bello y cultivamos la
filosofía, sin que eso debilite nuestro carácter. Si poseemos riquezas no es
para guardarlas ociosas ni para envanecernos de su posesión, sino para
emplearlas productivamente. Para nadie es vergonzoso entre nosotros
confesar que es pobre; lo que si es vergonzoso es no tratar de salir de la
pobreza por medio del trabajo. Todos los ciudadanos, incluso los que se
dedican a los trabajos manuales, toman, parte en la vida pública, y si hay
alguno que se desinteresa de ella se le considera como hombre inútil e
indigno de toda consideración. Examinamos detenidamente los negocios
públicos porque no creemos que el razonamiento perjudique la acción; lo
que si creemos perjudicial para la patria es no instruirnos previamente por el
estudio de lo que debemos ejecutar. Esto hace que tengamos al mismo
tiempo inteligencia para razonar los actos que debemos, ejecutar y audacia
para ejecutarlos, diferenciándonos así de los demás pueblos en que la
ignorancia los vuelve audaces y la razón inactivos”.
“La democracia -dice Kelsen- necesita de esta continuada tensión entre
mayoría y minoría, entre gobierno y oposición, de la que procede el
procedimiento dialéctico al que recurre esta forma estatal en la elaboración
de la voluntad política”. Agrega que en la democracia “la voluntad
colectiva, o más exactamente el orden social, resulta engendrado por los
sujetos a él, esto es, por el pueblo. Democracia significa identidad de
dirigentes y dirigidos, del sujeto y objeto del poder del Estado, y gobierno del
pueblo por el pueblo”, (i)
Para Enrique Evans de la Cuadra, gobierno democrático es aquel en que los
gobernantes son elegidos por los gobernados en elecciones pluralistas, libres
e informadas, y en que aquéllos se someten efectivamente a un
ordenamiento jurídico que limita su poder, respetando la vigencia de los
derechos humanos.
3.- CARACTERES DE LA DEMOCRACIA
Según las definiciones y conceptos anotados en el punto 2, los siguientes
caracteres tipifican a la democracia:
a.- Proceso Electoral.- Libre, pluralista e informado, en el que participan
dos o más opciones (candidaturas) políticas reales.
Para que las elecciones sean libres se requiere el secreto en el voto, la
ausencia de presión externa y la sinceridad en el mismo (lo que Maurice
Duverger llama “la elección sincera”, (art. 26); libre de presiones de tipo
psicológico y moral. Para que sean informadas, los electores deben conocer
ampliamente, y con anticipación, los programas de las diversas
candidaturas, que deben realizar libremente su proselitismo en igualdad de
condiciones (art. 21. 3 a 6).
b.-Ordenamiento Jurídico.- Que limita efectivamente el poder del gobierno,
pues la democracia es el antónimo de la arbitrariedad en que se basaba la
monarquía. Este ordenamiento conlleva sanciones políticas, penales y civiles
para los gobernantes que se excedan en sus atribuciones. (Nuestra
Constitución prevé que el Tribunal Supremo de Justicia fallará en única
instancia en los juicios de responsabilidad contra el Presidente y
Vicepresidente, de la República, por delitos cometidos en el ejercicio de sus
funciones, cuando la Asamblea Legislativa les decrete acusación conforme
a los arts. 161.7 y 184.4).
c.- Respeto a los derechos.- Contemplados en la Declaración Universal de
los Derechos Humanos, aprobada por las Naciones Unidas el 10 de
Diciembre de 1948.
d.- Separación de poderes.- Este es uno de los pilares básicos del sistema
democrático de gobierno. En la antigüedad existió, como antecedente, el
concepto de la división de funciones, o división del trabajo, como se dice
ahora. En su obra CRITIAS, Platón lo ilustra con un relato mitológico según el
cual Poscidón dividió a la Atlántida entre sus diez hijos, y, para garantizar el
orden y la paz entre ellos, instituyó normas que grabó en una columna,
relativas a una asamblea deliberante, un tribunal de justicia y un
procedimiento para juzgar a los infractores. (2)
Aristóteles distinguía tres funciones públicas: la legislativa, la jurisdiccional y
la administrativa.
En 1690 publica John Locke su “Segundo Tratado del Gobierno Civil... Ensayo
sobre el verdadero origen, la extensión y el fin del gobierno civil”, cuya
influencia sobre el pensamiento político ha sido profunda y duradera. Locke
da al absolutismo los primeros golpes serios, dice Chevalier, quien agrega
que el inglés parte, como su compatriota Hobbes, del estado de naturaleza
y del contrato originario, dando de éstos una versión nueva a través de la
distinción entre los poderes legislativo y ejecutivo, que se someten a una
limitación terrestre, humana, sancionada en última instancia por el derecho
de insurrección.
La sociedad -juzga Locke- formada por los hombres libres del estado de
naturaleza posee dos poderes principales: el legislativo y el ejecutivo, que
deben estar en diferentes manos. El primero es el supremo poder, sagrado,
y “no, puede ser arrebatado a quienes una vez les fue confiado. El ejecutivo
se subordina a aquél. (3)
En 1748' aparece la tercera obra de Montesquieu, “El Espíritu de las leyes”,
que ha ejercido la más profunda influencia en el Derecho Constitucional de
Occidente, como lo hace notar Esmein. En el libroXI, el más conocido del
volumen, se ocupa el autor “de las leyes que forman la libertad política en
su relación con la Constitución”, y discurre allí sobre temas como la libertad,
la Constitución de Inglaterra y la separación de poderes, cuyo
funcionamiento explica detalladamente. El abuso del poder podrá evitarse
si, “por la disposición de las cosas, el poder detiene al poder... Todo estaría
perdido si el nlismo hombre o el mismo cuerpo de los principales, o de los
nobles, o del pueblo, ejerciese estos tres poderes: el de hacer leyes, el de
ejecutar las resoluciones públicas y él de juzgar los crímenes o las diferencias
de los particulares... Se puede temer que el mismo monarca o el mismo
Senado haga leyes tiránicas para ejecutarlas tiránicamente”. (4) Maurice
Duverger sostiene que “el grado de separación de poderes depende
mucho más del sistema de partidos que de las disposiciones previstas por las
Constituciones. Así, el partido único entraña una concentración de poderes
muy estrecha, incluso si los textos establecen oficialmente una separación
más o menos acentuada”. Más adelante agrega: “Si el mismo partido
ocupa, al mismo tiempo, la presidencia y la mayoría de las dos asambleas,
borra casi enteramente la separación constitucional de los poderes”. (5)
La observación precedente se halla confirmada por la realidad, a tal punto
que Clark Kerr, expresidente de la Universidad de California (LUA) ha podido
afirmar que “la abrumadora mayoría de todas las organizaciones del
hombre a través de la historia ha sido manejada por gobiernos de partido
único. La mayor parte del tiempo, en casi todos los lugares del mundo, todas
las organizaciones han estado bajo el dominio de un partido único...” (6)
4.- CONTENIDO SOCIAL DE LA DEMOCRACIA
Pero la democracia no es solamente un sistema de gobierno ni una
estructura jurídico-política; es decir, no es un fin en si misma, sino un inodio
para alcanzar niveles de vida compatibles con la condición humana, a
través del progreso económico y social. La democracia desprovista de
contenido social no es democracia; es una apariencia formal que sirve para
engañar a grandes sectores de la población, quo pueden tener la ilusión de
gozar de un clima de libertades y de respeto a sus derechos, cuando en
realidad el deterioro de su salario real y de sus condiciones de vida hace
que el ejercicio, de esos derechos sea restringido o nulo, debido al
desempleo, al sub-emp.leo, a la desnutrición, a jos altos índices de
morbimortalidad, de analfabetismo, etc..
Por esto la democracia debe definirse, como lo hace la Constitución de
México en su artículo 39 inc. a, “como un sistema de vida fundado en el
constante mejoramiento económico, social y cultural del pueblo”. (7)
5.- DEMOCRACIA VALOR Y DEMOCRACIA PROCESO
De lo que llevamos expuesto es fácil colegir que la democracia no se realiza
plenamente en el marco de las instituciones humanas, y que sus postulados
teóricos y doctrinales sirven de aspiración en la lucha incesante que realiza
el ser humano por conquistar su libertad, su seguridad y su bienestar.
En un libro clásico sobre “Los partidos políticos”, Robert Michels, autor o
expositor de la “ley de hierro de la oligarquía”, opina que “la democracia
ha encontrado obstáculos, no sólo impuestos desde afuera, sino que surgen
espontáneamente desde adentro. Quizás estos obstáculos no puedan ser
superados ni allanados sino en parte”. Más adelante afirma que “la
democracia conduce a la oligarquía y contiene necesariamente un núcleo
oligárquico”. (8)
El politólogo estadounidense Seymour Martin Lipset, al comentar los
pensamientos de Michels, cree que “la democracia, en el sentido de toma
de decisiones donde todos los miembros o ciudadanos desempeñan una
función activa en el proceso continuo, es, por naturaleza, imposible. Las
élites políticas y de organizaciones tienen siempre intereses especiales de
grupo que son de algún modo diferentes de aquellos de laS personas que
representan”. (9)
El economista y sociólogo austríaco Jóseph Schumpeter concuerda con
Michels en que la democracia es una oligarquía elegida por votación
popular, cuyos principios ideales no resisten un análisis objetivo, pues el bien
común no es tal (“para los diferentes individuos y grupos ese bien de todos
significa cosas distintas”); la voluntad general es un postulado, abstracto
porque “la voluntad de la mayoría nunca es la voluntad del pueblo; esta
última es un mosaico que aquélla no consigue asimilar”; el gobierno del
pueblo no existe, y no puede existir, en los hechos. Para Schumpeter “la
democracia es un método político, es decir, un cierto tipo de organización
institucional para llegar a decisiones legislativas y administrativas”. (10)
Estas contradicciones han llevado a distinguir entre democracia-valor y
democracia-proceso. “La primera -dicen- es la democracia de Rousseau, es
decir, una democracia pura de teóricos y demagogos... La segunda es una
democracia en la que los gobernantes son elegidos. Por lo tanto, y según
observaba ya Aristóteles, las elecciones no son el más igualitario de los
procesos para la designación de mandatarios y gobernantes”. (U) Estas
debilidades son comunes a todas las variedades de sistemas' democráticos
que registra la historia. Con todas-sus imperfecciones, sin embargo, la
mayoría de los politólogos concuerda en que no hay un sistema mejor. Se
atribuye a Sir Winston Churchill la paradoja de que la democracia es el peor
de los gobiernos, con excepción de todos los demás. Seymour Martin Lipset,
por su parte, admite que “esta imagen de la democracia como conflicto
entre grupos organizados, y de acceso de los gobernados a sus
gobernantes, acaso esté muy lejos del ideal de la CiudadEstado griega, o
de los pequeños cantones suizos, pero en.su funcionamiento es mucho
mejor que cualquier otro sistema político concebido para reducirla
explotación potencial del hombre por el hombre. Sólo mediante el conflicto
y el compromiso público en objetivos explícitos, será posible limitar el mal uso
egoísta del poder”. Y concluye con esta exhortación que es también de
Michels: "... aunque los ideales de la democracia y el socialismo jamás
puedan ser alcanzados, la lucha constante en procura de ellos es la única
forma en que podemos acercarnos”. (12)
NOTAS
(1) VANOSSl, Jorge R.- Ob. cit. pp. 76-80.
(3) CHEVALIER, jean .Jacques.-“Los Grandes TexlosPolíticos’’.-EdAguilar,
Madrid, 1979, pp.
91-96-97:
(4) MONTESQUIEU.- 'VenaresChoisies", parHLabaste el R.Nicolle.- Librairie
A. Hatier, París 1949.
(5) DUVERCER, Maurice.- “Los partidos Políticos".- Fondo de Cultura
Económica.- México, D F. 1972, pp. 119-422.-Esta observación se ve
confirmada en todos los países donde impera un partido único, o un
partido dominante (la mayoría de los países de Africa, México, la
Argentina de Perón, Boliuia durante el MNR. y aún durante los
gobiernos de Paz Estenssoro 1985-1989- y de Paz Zamora -1989-1993-
en que las mayorías parlamentarias actúan según los dictados del
poder ejecutivo).
(6) Cit. porLIPSET, Seymour Martín, en su Introducción a “Los Partidos
Políticos" de MICHELS, Robert, Amorrorlu Editores, Buenos Aires, 1969:
(7) Esta frase fue introducida en la Constitución mexicana a instancias de
Jaime Torres Bodet, poeta, escritor y diplomático mexicano, que fuera
director general de la UNESCO.
(8) MICHELS, Robert.-Ob. cit., p. 8.
(9) Ibidem p. 38.
(10) M. BESSA.-J. VARGAS.- “Diccionario Político para occidente", Vassallo
de Numbert, Editor, Madrid, 1978, p. 88.
(11) Ibidem p. 87. '
(12) MICHELS, Robert. -Ob.cil.pp. 40- 42.
CAPÍTULO XII
FORMAS DE DEMOCRACIA
CAPÍTULO XIII
DERECHOS FUNDAMENTALES
1.-ANTECEDENTES HISTÓRICOS
“La idea de que el ciudadano -dice Loewentein- tenía que detentar
derechos propios, diferentes de sus obligaciones frente a la comunidad, fue
completamente ajena a la teocracia hebrea, a la Ciudad-Estado griega y
a la república romana”. Para los pensadores políticos griegos, el hombre sólo
podía desarrollar su personalidad dentro del Estado y subordinándose a éste.
Los primeros atisbos de un derecho natural pueden encontrarse entre los
estoicos, quienes colocaban a la razón, a la igualdad y a la dignidad del
hombre por encima del Estado y fuera de su alcance. Los cristianos elevaron
más tarde al hombre por encima del Estado, colocándole frente a él; pero
cuando triunfó la Iglesia, el individuo volvió a desaparecer aplastado por el
orden religioso, absoluto y total. La libertad del ciudadano, que empezó a
aparecer en las ciudadesestado medievales de Italia y en el norte y
occidente de Europa, desapareció con los gremios corporativos y sólo volvió
a emerger, como idea de autodeterminación religiosa, con la reforma
protestante. La revolución puritana en Inglaterra contra el despotismo
religioso ele los Estuardo proyectó la autodeterminación religiosa al campo
político y se tradujo en la formación legal de las libertades individuales en la
“GloriousRevolution”, con la Carta Magna (1215), el hábeas corpus Act
(1679), el Bill de Derechos (1689) y el ActofSettlement (1700).
Mientras el parlamento inglés iba afirmando sus derechos con estas
conquistas, reconocía también la libertad individual. Lo que al comienzo
eran concesiones del poder feudal hacia los vasallos en forma de cartas y
fueros, se volvieron luego “peticiones de derechos” y “listas de derechos”,
hasta llegar a ser leyes del parlamento en las'cuales el Estado acepta
normas jurídicas favorables al individuo. “Desde entonces se unieron las dos
raíces, -dice Loewenstein-,' el constitucionalismo y las libertades individuales,
haciendo de ambas el poderoso árbol del moderno Estado democrático
constitucional. El haber producido esta unión es el mérito inmortal de la
teoría política de la Ilustración”.
Los'derechos humanos, como los concebimos hoy, son producto del
pensamiento de los filósofos políticos de los siglos XVII y XVIII, entre los cuales
ocupan un lugar destacado Locke, Montesquieu y Rousseau, cuyas teorías
alimentaron las revoluciones norteamericana y francesa. El siglo XIX, con la
restauración de las monarquías y de los imperios en Europa, experimentó un
retroceso de los derechos humanos, que fueron duramente reprimidos hasta
la primera mitad del siglo XX, con motivo de las dos guerras mundiales.
Después de la II Guerra Mundial se ha aceptado en principio,
universalmente, el respeto a los derechos humanos, que forman parte de las
leyes nacionales e internacionales y de las relaciones entre los Estados, de
suerte que no se considera ahora intervención en asuntos internos la
preocupación de la opinión pública mundial y de los gobiernos por el
respeto a dichos derechos en los países en que son violados. El preámbulo
de la Convención Americana Sobre Derechos Humanos reconoce “que los
derechos esenciales del hombre no nacen del hecho de ser nacional de
determinado Estado, sino que tienen como fundamento los atributos de la
persona humana, razón por la cual justifican una protección internacional,
de naturaleza convencional coadyuvante o complementaria de la que
ofrece el derecho interno de los Estados americanos”.
Sólo puede hablarse, en propiedad, de los derechos humanos, desde la
aparición del constitucionalismo en el siglo'XVIII, pues, como lo hace notar
Martin Kriele, “en el absolutismo sólo había derechos humanos en la idea, no
en la realidad; en la filosofía, no en el derecho”. Por ello, observa el mismo
autor, la historia de los -derechos humanos transcurre paralela a la historia
del derecho constitucional, pues la separación de poderes y la
independencia.dela justicia son más importantes que el catálogo de los
derechos fundamentales contenidos en la Constitución.
2.-CONCEPTO
“Son derechos públicos subjetivos -dice Ratael Bielsa- los que tienen las
personas, consideradas individual o colectivamente y protegidos por medios
jurídicos, o más precisamente jurisdiccionales, respecto de los demás, y,
sobre todo, respecto de los poderes u órganos del Estado”. Agrega el mismo
autor que las libertades públicas se llaman también derechos públicos
porque “consisten en una actitud o potencia de acción, es decir, en la
facultad de ejercer una actividad, física o intelectual, sin subordinación a
otra voluntad, sino por autodeterminación”.
Mayorga considera que “los derechos humanos son aquellos que posibilitan
a la persona exigir de la autoridad respectiva la satisfacción de sus
necesidades básicas”, porque “...la dignidad humana está íntimamente
vinculada a la sátisfacción de estas necesidades”. (2)
3.- NATURALEZA Y FUNDAMENTOS
Los derechos humanos, opina Henkin, son reclamaciones a la sociedad,
representada ésta por el gobierno y sus funcionarios.
En cuanto a la justificación de los derechos fundamentales hay tres escuelas:
la del derecho natural, que considera que corresponden a atributos innatos
en el hombre; la historicista, que los considera derechos históricos, es decir,
adquiridos con la historia; y la ética, que coincide con la primera, porque les
da una fundamentación ética derivada de su calidad de atributos
naturales.
Los tratadistas están de acuerdo en sostener que estos derechos o libertades
públicas son anteriores al Estado y a la constitución, pues, como lo hace
notar Cari Schmitt, “...en el Estado burgués de derecho son derechos
fundamentales sólo aquellos que pueden valer como anteriores y superiores
al Estado, porque éste no los otorga, sino que los reconoce y protege “como
dados antes que él”. Se trata más bien de “esferas de la libertad” de las que
derivan derechos que dan comienzo históricamente a los derechos
fundamentales, como la libertad personal, la igualdad, la libertad de
expresión, el derecho de propiedad, que existen antes que el Estado.
Para los enciclopedistas y jus-na tur alistas del siglo XVIII, Rousseau entre ellos,
el hombre es bueno por naturaleza y la sociedad lo corrompe. Bastará
liberarlo de las instituciones existentes y darle el máximo de libertad para
alcanzar el orden social.
Por esto Schmitt aclara que “los derechos fundamentales en sentido propio
son, esencialmente, derechos del hombre individual, libre, y, por cierto,
derechos que él tiene frente al Estado”. Los derechos'que no afectan la
libertad del hombre individual no pueden considerarse “fundamentales”,
por importantes que sean, debido a que están limitados en principio,
contrariamente a lo que ocurre con los otros.
Henkin repite los criterios precedentes al afirmar que estos derechos “son
naturales en el sentido de que cada hombre nace con ellos... en que son
del hombre en el “estado natural”, y él los trae consigo a la sociedad. El
individuo era autónomo y soberano antes de que se estableciera el
gobierno, y él y otros individuos agrupados - “el pueblo”- siguen siendo
soberanos bajo cualquier gobierno, porque su soberanía es inalienable, y el
gobierno existe únicamente con el consentimiento de los gobernados”. (3)
Mayorga considera los derechos fundamentales “inherentes a la naturaleza
humana”, no desde un punto de vista metafísico, sino psicobiológico,
porque satisfacen sus necesidades básicas. La necesidad humana - explica
este autor- es un fenómeno orgánico, biológico, que se presenta mental,
psicológicamente. Hay algunas necesidades básicas agrega- como las de
subsistencia, pertenencia, auto-realización y protección, cuya
insatisfacción, a decir de Maslow (citado por Mayorga) “genera una
patología fisiológica o psicológica en el individuo”. Max Naef (citado
asimismo por Mayorga) dice que las necesidades básicas son finitas, pocas
y clasificables, las mismas en todas las culturas y en todas las épocas. Lo que
cambia es la manera o los medios para satisfacerlas. A diferencia de
Mayorga, Naef las clasifica en nueve grupos, de subsistencia, de protección,
de afecto, de entendimiento, de participación, do ocio, de creación, de
identidad y de libertad. (4)
Los psicólogos han escrito mucho sobre las necesidades básicas y superiores
del ser humano, que responden a su naturaleza biológica, fisiológica y
psicológica. Abraham H. Maslow publicó en 1954 un libro que ya es clásico
en la materia, en el que examina el amplio espectro de esas necesidades y
de sus motivaciones. (5)
En todo caso es claro que los derechos fundamentales son naturales porque
atienden a requerimientos biológicos sin los cuales el ser humano no puede
vivir, desarrollarse ni trabajar. En otras palabras, el ser humano nace con
estos derechos, son de su naturaleza, porque afectan esencialmente a los
atributos de su personalidad. Cuando se le priva de estos derechos, moral y
jurídicamente el ser humano deja de ser persona para degradarse a la
condición de objeto, de una cosa.
4. - DERECHOS PREFERENTES
En varios de sus fallos, la Corte Suprema de los Estados Unidos de América
ha estimado que algunos derechos tienen precedencia sobre otros, por su
importancia intrínseca, dando lugar a lo que se ha llamado derechos
preferentes, libertades preferidas o de posición preferente.
Ocupan esta jerarquía los derechos reconocidos en las primeras diez
Enmiendas: de la Constitución de los Estados Unidos. Cualquier ley que
tienda a limitar estos derechos no se presume constitucional y debe
someterse a un “escrutinio estricto” por parte de los jueces.
En PALKO v. CONNECTICUT (1.937), el magistrado Benjamín N.Cardozo
colocó en la cima “principios fundamentales de libertad y justicia que son la
baso de nuestras instituciones civiles y políticas”.
Distinguió derechos que pueden perderse sin herir la esencia de la libertad y
de la justicia, de los que llamó “la matriz, la condición indispensable de toda
otra forma de libertad”
En la famosa Nota No. 4 de su opinión en el caso UNITEDSTATES V.
CAROLENEPRODUCTS (1.938), el magistrado Harían F. Stone dijo que la
presunción de constitucionalidad debe someterse a un examen más estricto
sobre “leyes que a primera vista contradigan preceptos específicos de la
Constitución, como son los de las primeras diez enmiedas, que son
igualmente específicos con referencia a la Enmienda Catorce”, relativa al
debido proceso de ley y a la igualdad ante la ley. En esa opinión se originó
la doctrina del “estricto escrutinio” a que deben someterse las leyes que
violen las primeras diez enmiendas, a diferencia de las otras leyes, cuya
constitucionalidad se presume.
5.-LIMITACIONES DE LOS DERECHOS FUNDAMENTALES.
Al hablar de el Estado de Derecho en el capítulo VIII hemos visto que, según
Schmitt, los derechos fundamentales son ilimitados en principio, porque,
según dice él en otra parte de su obra, “son derechos fundamentales
absolutos, esto es, no se garantizan “con arreglo a las leyes”;'su contenido
no resulta de la ley, sino que la ingerencia legal aparece como excepción,
y por cierto, como excepción limitada en principio y mensurable, regulada
en términos generales”.
La extensión de estos derechos varia de país a país. En Gran: Bretaña, que
no tiene constitución escrita, están enraizados en las instituciones jurídicas
del commonlaw y los tribunales los observan fielmente, con las restricciones
que imponen el orden público o los casos de emergencia. En Francia se los
considera derechos supraconstitucionales, y en su primera Constitución, de
3 de Septiembre de 1791, se advertía que “el poder Legislativo no podrá
hacer leyes que atenten u obstaculicen el ejercicio de los derechos
naturales y civiles consignados en el presente título y garantizados por la
Constitución”. Lo propio ocurre en Estados Unidos, donde la primera
enmienda dispone, por ejemplo, que “el Congreso no aprobará ninguna ley
que coarte la libertad de palabra y de prensa”.
En el capítulo XII (Formas de democracia) hemos aludido a los fundamentos
de los regímenes políticos marxistas, que se basan en la imposibilidad de
colocar en el mismo plano los derechos de libertad e igualdad, porque el
individualismo a ultranza avasalla los derechos económicos y sociales de las
mayorías laboriosas y desposeídas. Sin embargo, como lo observa Henkin,
“el socialismo no es incongruente con la libertad individual sustancial
porque, en principio, una sociedad socialista puede favorecer mayor
libertad (en otros asuntos diferentes a la actividad y organización
económica) y, asimismo, la mejor distribución económica puede crear
libertades que sean más significativas para todos”, (6)
La Constitución de 1982 de la República Popular China enumera los
derechos fundamentales en sus arts. 33 y siguientes de manera similar a
como lo hacía la Constitución soviética. “El trabajo es un deber glorioso de
todo ciudadano capacitado físicamente... El Estado promueve la
emulación laboral socialista”, dice el art. 42 y el 51 advierte que los derechos
y libertades individuales no deben contraponerse a los intereses del Estado,
de la sociedad y de los colectivos, ni a los derechos y libertades de otros
ciudadanos.
El Cap. VI, arts. 44 al 65 de la Constitución cubana de 1976 se refiere a
Derechos, Deberes y Garantías Fundamentales. Menciona primero los
derechos sociales y económicos (trabajo, descanso, seguridad y asistencia
sociales, salud, educación, deporte y recreación).
I /liego garantiza los derechos civiles y políticos (libertad de opinión y de
expresión, reunión, manifestación, asociación, conciencia, inviolabilidad de
la persona, del domicilio, de la correspondencia y de las comunicaciones).
El art. 61 previene que “ninguna de las libertades reconocidas a los
ciudadanos puede ser ejercida contra lo establecido en la (lonstitución y las
leyes, ni contra la existencia y fines del Estado seriaIial.a, ni contra la decisión
del pueblo cubano de construir el socialismo y el comunismo...”.
Fn la generalidad de los países se dispone que todos los habitantes gozan
de los derechos fundamentales “conforme a las leyes que reglamentan su
ejercicio”. Así por ejemplo el art. 109-11 dice que "los derechos y garantías
sólo podrán ser regulados por la ley".
Las limitaciones a los derechos fundamentales, como se ha visto, son de
forma, y se basan en la preeminencia del bien público y de la seguridad del
Estado. Así lo dice expresamente el art. 4 del Pacto Internacional de
Derechos Económicos, Sociales y Culturales, de 16 de Diciembre de 1966:
“Los Estados parte en el presente Pacto reconocen que, en el ejercicio de
los derechos garantizados conforme el Presente Pacto por el Estado, éste
podrá someter tales derechos únicamente a limitaciones determinadas por
ley, sólo en la medida compatible con la naturaleza de esos derechos y con
elexclusivo objeto de promover el bienestar general en una sociedad
democrática”. Por su parte, la Convención Americana de Derechos
Humanos aclara, en su art. 30, que las restricciones permitidas al goce y
ejercicio de estos derechos constarán en leyes “que se dictaren por razones
de interés general...”. La ley Fundamental de Alemania Federal, de 1949, va
todavía más lejos, pues dispone en su art. 18 que los derechos
fundamentales de libertad de opinión, de prensa, de enseñanza, de reunión,
asociación, el secreto de las comunicaciones, el derecho de propiedad y el
de asilo, los pierde “quien para combatir el régimen fundamental de libertad
y democracia abuse de los mismos. La pérdida y el alcance de la misma
serán dictados por la Corte Constitucional Federal». O sea que hay aquí algo
más grave que la restricción o limitación de los derechos; se dispone su
pérdida, previa resolución del tribunal competente.
NOTAS
(1) VANOSSI, Jorge Reynaldo.- Ob. cit. p. 38.
(2) MÁYORGA LORCA, Roberto.- "Naturaleza Jurídica de los Derechos
Económicos, Sociales y Culturales”.- 2a. Ed. Edit. Jurídica de Chile,
Santiago, 1990, p. 18.
(3) HENKIN, Louis.- "Los Derechos del hombre, IIOY."- EDAMEX, México, D.F
1981, p.22.
(4) MAYORGA LORCA, Roberto.-Ob. cil. pp 180-81.
(5) MASLOW, Abraham K- "Motiuatión and Personality”.- 2nd Ed Harper &
Row, New York, 1970.
(6) HENKIN, Louis, Ob. cit. p. 80.
CAPÍTULO XIV
DECLARACIONES Y CONVENCIONES DE
DERECHOS
1.-DECLARACIONES DE DERECHOS
Son documentos de naturaleza constitucional y de alcance internacional en
los que se menciona y fundamenta los derechos de la persona, y se exhorta
a respetarlos en concordancia con los atributos del ser humano. Las
declaraciones de derechos son de dos clases: a) documentos principistas
surgidos de una revolución o de una guerra de liberación nacional, o de un
acuerdo internacional celebrado a nivel mundial o regional; y b)
preámbulos de constituciones escritas que resumen los principios
inspiradores de dichas leyes fundamentales.
a) Entre las declaraciones de derechos que responden al primer tipo,
podemos mencionar las siguientes, por orden histórico:
La Carta Magna inglesa (1215), que impuso al monarca Juan sin Tierra el
respeto de los derechos y privilegios de la nobleza. Este documento contiene
la simiente de algunos derechos que adquirieron carta de ciudadanía en el
constitucionalismo moderno, como se ha dicho en el
Cap. II.
La Petición de Derechos (1626) y el Bill ofRights (1689), cuyo contenido hemos
resumido en el Cap. II.
CAPÍTULO XV
GARANTÍAS DE LOS DERECHOS FUNDAMENTALES
Las garantías suelen constar en preceptos constitucionales, en leyes
especiales (de amparo, de “HÁBEAS corpus”, de inconstitucionalidad), o
estar confiadas a funcionarios y tribunales específicos (el “ombudsman”, los
tribunales de garantías constitucionales), y en pactos o convenciones
internacionales. El art.8 del Pacto de San José de Costa Rica enumera las
garantías judiciales que asisten a la persona para ejercer su derecho de
defensa.
2. -CLASIFICACIÓN DE LAS GARANTÍAS
Básicamente hay dos tipos de garantías constitucionales: las llamadas
garantías políticas, que provienen de preceptos básicos como la separación
de órganos, que impide la concentración y el abuso del poder los juicios de
responsabilidad contra altos dignatarios y funcionarios del Estado por delitos
cometidos en el ejercicio de sus funciones; juicios contra las resoluciones del
Poder Legislativo. Las otras garantías son jurisdiccionales, que dependen de
los tribunales competentes. “El único modo efectivo de restablecer el
derecho es la garantía jurídica -dice Bielsa-, es decir, el recurso jurisdiccional,
sea judicial, sea contenciosoadministrativo, sea jerárquico”.
Algunos autores clasifican las garantías en individuales, colectivas y
procesales. Las primeras se relacionan con la libertad y otros derechos
individuales, y entre ellas citamos el Hábeas Corpus, el Amparo
Constitucional y el HÁBEAS Data. Las segundas se relacionan con los
derechos, económicos y culturales reconocidos en el siglo XX por el
Constitucionalismo social y por la Declaración Universal de los Derechos
Humanos (1948). Entre éstas tenemos la huelga laboral, la sindicalización de
trabajadores, la protección a la familia, a la salud y la educación, etc.
Las garantías procesales, llamadas también “garantías de la seguridad
jurídica” o “garantías de justicia”, permiten que las dos anteriores se hagan
efectivas, pues son de carácter instrumental. Las garantías procesales se
realizan a través de tres instituciones: 1) jueces y tribunales competentes, que
ejercen jurisdicción con independencia institucional; 2) el debido proceso;
3) normas procesales que permiten a los primeros realizar el debido proceso
cuando son requeridos para ello.
En la garantía del debido proceso concurren otras garantías propias del
derecho de defensa, a las que nos referimos en el Capítulo XXVIII de esta
Primera Parte, como la presunción de inocencia, a ser asistido por un
defensor legal, a ser oído y juzgado antes de ser condenado o que la
condena se base en una ley anterior al proceso, o en leyes posteriores
cuando éstas sean favorables al encausado (art. 116.11); la gratuidad,
publicidad, celeridad y probidad en el juicio (art. 178.1); el. derecho a no
declarar contra sí mismo en materia penal, o contra sus parientes; a no ser
juzgado por comisiones especiales ni sometido a otros jueces que los
designados con anterioridad al hecho de la causa (arts. 120.1 y 121.1.).
3.-EL “OMBUDSMAN”
Es una institución del derecho escandinavo, originada en Suecia en 1809. Se
trata de un funcionario público designado por el Congreso para recibir e
investigar las quejas de los ciudadanos sobre abusos de que sean víctimas
en sus derechos. Es un árbitro independiente e imparcial entre el gobierno y
los individuos. Su competencia se extiende a todos los órganos y oficinas del
gobierno, directorios y comisiones, con excepción, en algunos países
(Noruega y Nueva Zelandia) de los gobiernos municipales; de las decisiones
del gabinete de ministros (Nueva Zelandia, Noruega y Suecia), y de los
jueces (Dinamarca, Nueva Zelandia y Noruega). Tiene autoridad para
recomendar y aconsejar, pero no para ejecutar.
Entre los precursores de esta institución se menciona en China al Yuan, o
cuerpo de inspectores para el control de la burocracia; al tribuno en Roma;
el Justicia Mayor en Aragón y a los Consejos de Censores en la
administración colonial de Norte América.
Finlandia instituyó un “Ombudsman" en Í919, Dinamarca en 1953, Noruega
en 1963, Alemania Occidental en 1956 y Nueva Zelandia en 1962. Francia
lo adoptó en 1973 con el título de “Mediateur” (mediador), y España en
1983 con el de “Defensor del Pueblo”. En Gran Bretaña, la ley del
Comisionado Parlamentario, de 1967, se inspira en la institución
escandinava, y faculta a dicho agente a controlar, investigar y señalar los
errores, deficiencias y delitos de la administración.
La Constitución Política de Guatemala autoriza al Congreso a nombrar una
Comisión de Derechos Humanos y un Procurador de los Derechos Humanos,
que debe reunir las condiciones de Magistrado de la Corte Suprema de
Justicia y está rodeado de las inmunidades y prerrogativas de que gozan los
diputados en el Congreso. Se ocupa de promover el buen funcionamiento
de la administración, investigar toda clase de denuncias sobre violaciones
de los derechos humanos, censurar públicamente los actos contrarios a los
derechos constitucionales, promover acciones o recursos, etc. (arts. 273 al
275).
La alcaldía de la ciudad de Buenos Aires (Argentina) instituyó en 1985 el
cargo de Defensor del Pueblo, designado por el Consejo Municipal, para
supervisar la correcta administración municipal y señalar las deficiencias,
abusos, negligencias, demoras en los trámites, desconsideración con el
público, dolo e irregularidades.
El art. 86 de la Constitución argentina de 1994 instituye el Defensor del
Pueblo, nombrado y removido por el Congreso y encargado de la defensa
y protección de los derechos humanos, para lo que goza de “plena
autonomía funcional”. Dura cinco años en su cargo y tiene las inmunidades
y privilegios de que gozan los legisladores.
Dos artículos 281 a 284 de la Constitución de Colombia de 1991 crean el
Defensor del Pueblo como parte del Ministerio Público, elegido por la
Cámara de Representantes para un período de cuatro años, con lo misión
de velar por la promoción, el ejercicio y la divulgación délos derechos
humanos, con facultades de organizar y dirigir la defensoría publica,
interponer acciones populares,presentar proyectos de ley, informar al
Congreso, etc.
Da Constitución de Perú (1993) consigna en su arts. 161-162 la Defensoría del
Pueblo, cuyo titular es elegido y removido por dos tumos do votos del
Congreso, ppra un período de cinco años, con Immltades y prerrogativas
similares a las establecidas en las constituciones de Argentina y Colombia.
Bolivia adoptó esta institución en la reforma constitucional de 1995 l'ln la
Constitución vigente (arts. 218 a 224) el Defensor del Pueblovelará por la
vigencia, promoción, difusión y cumplimiento d los derechos humanos,
individuales y colectivos ... "
4. -TRIBUNALES DE GARANTÍAS CONSTITUCIONALES
Estos son tribunales constituidos especialmente para examinar y declarar la
constitucionalidad de las leyes, decretos, resoluciones, reglamentos y otros
actos administrativos, y para garantizar judicialmente el ejercicio de los
derechos fundamentales. En el Cap. VI, punto 2. a), nos hemos referido a los
orígenes de estos tribunales y a su adopción en varios países de Europa y
América. En Francia se denomina Consejo Constitucional; en Alemania
Corte Constitucional Federal; en Perú y Ecuador, Tribunal de Garantías
Constitucionales; en Colombia, Corte Constitucional; en Chile, Tribunal
Constitucional, y en Guatemala, Corte de Constitucionalidad. En este país,
además de las atribuciones señaladas la Corte conoce de las acciones de
amparo contra el Gongreso, la Corte Suprema de Justicia, el presidente y
vicepresidente de la república; y en apelación de todos los recursos de
amparo interpuestos ante cualquiera de los tribunales de justicia. Además
compila la jurisprudencia y resuelve conflictos de jurisdicción. En Bolivia se
llama Tribunal Constitucional Plurinacional (arts. 196 a 204).
5. -TEORÍA Y REALIDAD DE LOS DERECHOS HUMANOS
En los dos capítulos precedentes hemos seguido la evolución histórica de
los derechos fundamentales; hemos subrayado su importancia y su valor;
hemos mencionado las declaraciones y convenios de
mayor trascendencia en la materia. En este capítulo hemos tratado de las
formas que asumen las garantías de estos derechos.
Nadie se atrevería a negar la necesidad de preservar y defender estos
derechos, que están entre los valores más altos de la condición humana. Sin
embargo, hay gran distancia entre la teoría y la realidad, entre el texto de
la constitución y de las leyes y lo que ocurre en la vida cotidiana. Grandes
sectores de la población viven frustrados y desmoralizados por esta realidad.
Hasta los estudiantes de Derecho señalan con frecuencia el contrasentido
entre lo que se les enseña y lo que ven, como si llegaran a dudar de la
utilidad de sus estudios. En los párrafos que siguen trataremos de explicar los
factores, casi siempre incontrolables, que alimentan estas contradicciones:
a) Los gobiernos de fuerza, que oprimen a dos tercios de la humanidad
y hacen tabla rasa de los derechos fundamentales para conservar el poder
y los privilegios de minorías ávidas e insaciables.
b) La violencia generalizada que azota al mundo, inflamada por la
miseria, el fanatismo y la codicia.
c) La ignorancia de sus derechos en que vive la mayor parte de la
humanidad, que no tiene acceso a la educación básica y menos todavía a
la educación superior. Esta ignorancia le impide luchar por sus derechos y le
mantiene en humillante resignación.
d) Un cúmulo de factores que determinan la ineficiencia, la inmoralidad
y el abuso de las administraciones públicas, particularmente en los países
dependientes. Entre esos factores están la deuda externa, la pobreza de los
servicios elementales como la educación, la salud, la vivienda, la higiene,
etc. (3)
e) El auge del neoliberalismo, que exalta los méritos del capitalismo y de
la propiedad privada en detrimento de los valores sociales y humanitarios
de la población.
f) El conflicto entre la libertad humana y la seguridad colectiva que se
traduce en “el miedo a la libertad”, por el que muchos prefieren sentirse
“protegidos” en un Estado autoritario que reprime las libertades personales
para “garantizar” la “tranquilidad” general.
A pesar de la realidad descrita e ilustrada (5) los derechos de las personas
tienen un valor intrínseco por el que la humanidad ha luchado desde los
primeros tiempos, y es seguro que seguirá luchando mientras hayan
déspotas, villanos y lacayos que abusan del poder impuesto por la fuerza.
(1) HAURIOU, Andrés. - "Derecho Constitucional e Instituciones Políticas”.-
Ed. Ariel, 1971,
Barcelona, p. 208. '
(2) Citado por DROMI, José Roberto, en "Instituciones de Derecho
Administrativo".- Ed. ASTREA, Buenos Aires, 1983.
(3) Durante la década de los ochenta, declinó el ingreso anual percápita
en unos 40 países, y en los 37 más pobres del mundo en un 25%. Según
UNICEF, una mezcla de repagos onerosos de la deuda externa y de
gastos militares excesivos son responsables de esta situación. El mundo
subdesarrollado gastó 178000 millones de dólares en pagar capital e
intereses de la deuda externa en 1988, que es el triple de la ayuda
recibida de los países industrializados. En un solo país (Nigeria) el
gobierno gastó el 30.7’% de sus egresos en sus presupuestos militares,
contra el 1.4% en salud y 1.9% en educación. (TIME INTERNATIONAL,
Octubre lo. 1990).
(4) Al conmemorarse en 1988 el cuadragésimo aniversario de la D.U.D.H.,
el Director de la Oficina Europea de la ONU y del Centro de Derechos
Humanos, Jan Matersson, dijo que "aún existen 126países en el mundo
donde se incumplen los derechos humanos, incluidos algunos que
todavía practican la tortura y el racismo”. (Despacho de EFE, desde
Ginebra, Suiza, fechado el 5-12-88, en diario PRESENCIA, de La Paz, de
6-1288). En la misma ocasión, la Asociación Latinoamericana de
Derechos Humanos (ALDHU) reveló en Ecuador “que en los últimos
cinco años murieron 109466 personas en la zona, víctimas directas de
la represión, desestabilización política, enfrentamientos entre fuerzas
gubernamentales y guerrilleras1'. Estimaciones del mismo organismo
aseguraran que en América Latina se registran diariamente 1200 casos
de ejecuciones, asesinatos, secuestros y otras prácticas, y que “la
mitad de la población latinoamericana es víctima directa de la
represión, o indirecta por causas económicas y políticas" (Diario
“OPINION", Cochabamba, 10-12-88).
l)n despacho de laAP. fechado en Nueva York el 12-12-89 daba cuenta de
que la situación de los derechos humanos en el hemisferio, en 1989 “ha
continuado grave”; que la violación de los derechos humanos no se origina
sólo en la lucha armada (guerrillas, narcotráfico), pues “campesinos sin tierra
y obreros en huelga recibieron frecuentes palizas... y millones de personas
vivieron bajo el estado de sitio....". Agregaba el despacho que "las brigadas
de la muerte, presumiblemente protegidas por gobiernos e institutos
armados, han sido un elemento protagónico en persecuciones y masacres”.
(Diario “LOS TIEMPOS”, Cochabamba, 12-12 89).
El informe deAmnesty International correspondiente a 1993 revela que más
de cien mil presos políticos fueron encerrados sin forma, ni figura de proceso
en 53 países; que más de 112 gobiernos torturaron o dieron maltrato a sus
presos; que hubo dos mil ejecuciones en 32 países, incluyendo los que
sufrieron la pena de muerte; que hubo más de mil asesinatos políticos y
"desaparecidos” en 15 países latinoamericanos.
CAPÍTULO XVI
LIBERTAD DE LOCOMOCIÓN
1.-CONCEPTO
Este derecho está declarado en el art. 217 que dice "Las bolivianas y los
bolivianos (debiera decir "toda persona") tienen los siguientes derechos: a la
libertad de residencia, permanencia y circulación en todo el territorio
boliviano, que incluye la salida e ingreso del país". El art. 23. III advierte que
"nadie podrá ser detenido, aprehendido o privado de su libertad, salvo en
los casos y según las formas establecidas por la ley". La garantía de (de
derecho se hace efectiva mediante la Acción de Libertad (arts. 125 a 127).
I libertad de locomoción es un derecho fundamental para que el hombre
pueda crecer, desarrollarse biológica y mentalmente, estudiar,
I r:>bajar, viajar y participar en todas las actividades de la vida social. No se
concibe un ser humano normal que esté inmóvil, aislado, paralizado y
privado de las funciones propias de su naturaleza. Por esto es que las
detenciones ilegales y arbitrarias y las restricciones abusivas de este derecho
son, además de atropellos a la Constitución, crímenes contra natura, porque
anulan o tratan de anular una facultad con la que naco el hombre, de la
cual ha sido dotado, antes de nacer, por la Nuturaleza. La mayoría de las
Constituciones políticas consagran este derecho en los términos en que lo
hace la de Bolivia. La de México (art.ll) expresa: "Todo hombre tiene derecho
para entrar en la República, salir de ella, viajar por su territorio y mudar de
residencia, sin necesidad de carta de seguridad, pasaporte, salvo-
conducto u otros requisitos semejantes...». La de Guatemala (art. 26) agrega
que “los guatemaltecos pueden entrar y salir del país sin llenar el requisito de
visa”. La de Costa Rica (art. 22) previene que “no se podrá exigir a los
costarricenses requisitos que impidan su ingreso al país". (1)
Este derecho se halla asimismo previsto en las declaraciones y convenciones
internacionales. La D.U.D.H. dice en su art. 13: “Toda persona tiene derecho
a circular libremente y a elegir su residencia en el territorio de un Estado.
Toda persona tiene derecho a salir de cualquier país, inclusive del propio, y
a regresar a su país”. Y la D.A.D.D.H. en su art. 8: “Toda persona tiene el
derecho de fijar su residencia en el territorio del Estado del que es nacional;
y transitar por él libremente y no abandonarlo sino por su voluntad”. La
Convención Americana sobre Derechos Humanos prescribe en su art. 22:
“Toda persona tiene derecho a una nacionalidad. Toda persona tiene
derecho a la nacionalidad del Estado en cuyo territorio nació si no tiene
derecho a otra. Nadie puede ser expulsado del territorio del Estado del cual
es nacional, ni ser privado del derecho a ingresar en el mismo. El extranjero
que se halle legalmente en el territorio de un Estado Parte en la presente
Convención, sólo podrá ser expulsado de él en cumplimiento de una
decisión adoptada conforme a ley. Es prohibida la expulsión colectiva de
extranjeros”.
2.- LIMITACIONES
En el capítulo XIII hemos visto que, si bien los derechos fundamentales son
absolutos en principio, como lo fundamenta Cari Schmitt, su ejercicio está
regulado por leyes especiales en atención a los derechos de los demás, al
orden público y al interés colectivo.
En cuanto a este derecho específico, el art. 22 citado del Pacto de San José
consigna las siguientes limitaciones:
“El ejercicio de los derechos anteriores no puede ser restringido sino en virtud
de una ley, en la medida indispensable en una sociedad democrática, para
prevenir infracciones penales o para proteger la seguridad nacional, la
seguridad o el orden público, la moral o la salud públicas o los derechos y
libertades de los demás”.
"El ejercicio de los derechos reconocidos en el inciso 1 puede asimismo ser
restringido por la ley, en zonas determinadas, por razones de interés público”.
3.- LIMITACIONES EN LA LEGISLACIÓN BOLIVIANA
De manera general, encontramos limitaciones al derecho de locomoción
en las siguientes áreas:
a) A los bolivianos.- Para viajar al exterior requieren de pasaporte y
autorización de salida que deben recabar de las Administraciones
Departamentales de Migración, según el art. 25, inciso h) del D.S. N2 24423,
de 29 de noviembre de 1996
No pueden salir del territorio nacional los bolivianos sobre quienes la
autoridad judicial, competente haya decretado arraigo, medida
precautoria que debe ejecutarse por la Dirección Nacional de Inspectoría y
Arraigo, que lleva y controla el Registro Nacional de Arraigos (art. 20, inc.
CAPÍTULO XVII
EL AMPARO CONSTITUCIONAL
1. -CONCEPTO
El amparo constitucional es una garantía jurisdiccional que protege los
derechos fundamentales de la persona (con excepción de la libertad de
locomoción), cuando éstos son violados, restringidos o amenazados por una
autoridad cualquiera o por particulares. Se trata de una garantía muy
amplia a la que, sin embargo, sólo se puede recurrir cuando no hay otra vía
que franquée la ley para la protección de los derechos individuales.
Según Augusto M. Morello, el Amparo es un proceso excepcional que sólo
procede en circunstancia extremas y delicadas en que, a falta de otras vías
aptas peligra la salvaguarda de los derechos fundamentales, amenazados
por daño inminente o por lesión efectiva. Su admisibilidad, por ello -agrega-
exige circunstancias muy particulares, caracterizadas por la arbitrariedad o
ilegalidad manifiesta que los procedimientos ordinarios no pueden conjurar.
Debe estar probado -dice- un daño concreto y grave que sólo se puede
reparar por esta vía urgente y expedita.
2. - OBJETO Y ALCANCES
La legislación y la jurisprudencia contemporáneas tienden a ampliar los
objetivos y alcances del Amparo. Así por ejemplo, la reforma argentina de
1994 introdujo el artículo 43 en su Constitución, cuyos dos primeros párrafos
dicen:
“Toda persona puede interponer acción expedita y rápida de amparo,
siempre que no exista otro medio judicial más idóneo, contra todo acto u
omisión de autoridades públicas o de particulares, que en forma actual o
inminente, lesione, restrinja, altere o amenace, con arbitrariedad o
ilegalidad manifiesta, derechos y garantías reconocidos por esta
Constitución, un tratado o una ley. En el caso, el juez podrá declarar la
inconstitucionalidad de la norma en que se funde el acto u omisión lesiva.
Podrán interponer esta acción contra cualquier forma de discriminación y
en lo relativo a los derechos que protegen al ambiente, a la competencia,
al usuario y al consumidor, así como a los derechos de incidencia colectiva
en general, el afectado, el defensor del pueblo y las asociaciones que
propendan a esos fines, registradas conforme a la ley, la que determinará
los requisitos y formas de su organización”.
Nótese que el primer párrafo franquea la acción “siempre que no exista otro
medio judicial más idóneo”, o sea, capaz de evitar el agravio o de repararlo
en el plazo más breve posible. Pueden haber otras vías para el efecto, que,
sin embargo, no ofrezcan la rapidez y eficacia necesarias para conjurar el
daño inminente o consumado, y, en tal situación, el afectado puede optar
válidamente por el Amparo. Si bien se mira, es el mismo concepto del
artículo 19 de la CPE. que en su párrafo IV dice: “siempre que no hubiere
otro recurso o medio legal para la protección inmediata de los derechos y
garantías restringidos, suprimidos o amenazados...” Queda a criterio del juez
o tribunal evaluar la situación y decidir de acuerdo a la regla “prohomine”
que debe guiar sus actuaciones en materia de derechos y de garantías
fundamentales. .(Ver cap. IV).
Los autores argentinos discrepan en cuanto a la interpretación de los
alcances del Amparo. Morello, citado en el punto I, supra, le concede la
mayor amplitud, apoyado en la jurisprudencia de la Corte Suprema de su
país, que él cita, según la cual “si bien la acción de amparo no está
destinada a reemplazar los medios ordinarios para la solución de las
controversias (fallos 300:1033), su exclusión por la existencia de otros recursos
no puede fundarse en una apreciación meramente ritual, toda vez que la
Constitución tiene por objeto una efectiva protección de los derechos, más
que una ordenación o resguardo de competencias” (fallos, 299:358,417 y
305:307). Es decir, comenta Morello, que “lejos de operar como una vía
excepcional, subsidiaria, residual, cargada de notas obturantes, se
despliega con generosa amplitud a un uso directo, serio y responsable”. (2).
No comparte esta opinión Néstor Pedro Sagüés, quien, a la luz del Diario de
Sesiones de la Convención Nacional Constituyente de 1994 dice que la tesis
mayoritaria al aprobar el artículo 43 de la Constitución fue “la concepción
del amparo como remedio residual o supletorio, en cuanto a otros
procedimientos judiciales o administrativos, siempre que fueran útiles para
encarar al acto lesivo”. Agrega que “la doctrina del amparo como vía
ordinaria, que fue lo no querido y rechazado por la Constituyente, obliga a
meditar seriamente sobre la inflación y consecuente devaluación que
puede producir esta acción”. (3)
Para Ekmekdjian, con la reforma de 1994 el Amparo dejó de ser una vía
subsidiaria para convertirse en una alternativa cuya elección, como medio
más idóneo según el art. 43, corresponde al justiciable. Concuerda con esta
postura Raúl Gustavo Ferreira, quien asigna al justiciable la potestad de
decidir si utiliza la alternativa del amparo: “Al fin y al cabo, ¿hay otro sujeto
de derecho que no sea el propio titular del derecho (...) al que le quepa
decidir si persigue o no su protección jurisdiccional, y en su caso qué vía
escoge, si la ordinaria o la del amparo?” (4)
Según Olga Pura Arrabal de Canals, el Amparo en la República Argentina
no es subsidiario de las vías administrativas y no está sujeto “a ninguna clase
de agotamiento de la instancia administrativa”, porque no es “indispensable
que el acto de la administración cause estado; es suficiente que adolezca
de un vicio en cuanto a la razonabilidad y/o a la legalidad”. En efecto,
agrega dicha autora, el afectado por un acto presumiblemente lesivo de la
administración encaraba el riesgo de impugnarlo, por la vía administrativa
y, fracasada ésta, “en muchos casos el amparo resultaba extemporáneo a
los términos de la ley, quedándole solamente expedita la acción
contencioso-administrativa”. Actualmente el afectado puede ocurrir a la
vía.administrativa y, simultáneamente, plantear el amparo, pues éste no es
“sustitutivo de los recursos administrativos, que deben ser planteados en
término paralelamente al amparo” (5)
Creemos que en esta materia el accionante y el juzgador deben guiarse por
los tres elementos que forman la esencia del Amparo: 1) Que se tipifique
claramente el derecho fundamental cuya protección se demanda; 2) que
la violación de ese derecho importe un daño consumado o inminente grave,
evaluable; 3) que la prevención o reparación de ese daño exijan un remedio
urgente sólo dispensable a través del Amparo, porque las otras vías abiertas
para el efecto -judicial o administrativa-, si las hay, están sujetas a plazos y
condiciones dilatorias. En nuestra opinión, el Amparo no es una acción
subsidiaria ni residual, como suele calificársela, sino la única que se abre en
determinadas circunstancias para algo tan importante como es la defensa
de la Constitución, y la alternativa en otros, cuando las vías alternas no
ofrecen la celeridad y oportunidad indispensables, sin las cuales se desvirtúa
la naturaleza de la garantía. El Tribunal Constitucional de Bolivia ha seguido
esta línea en su jurisprudencia, como se evidencia en la Sentencia
Constitucional 1082/2003 R, de 30 de Julio de 2003, que justifica la admisión
del Amparo “cuando existiendo otros medios o recursos, éstos no logran la
eficacia esperada, por cuando la lesión puede resultar irreparable y la
protección tardía”. En igual sentido se pronunciaron las Sentencias
Constitucionales 462/2003 R, 301/2003 R y 657/2003 R.
Cabe agregar que el art. 43 de la Constitución argentina amplía la '
protección de los derechos fundamentales reconocidos no sólo en la
Constitución y en las leyes, sino también en los tratados internacionales, lo
que se explica porque el art. 75-22 de la misma da jerarquía constitucional a
los tratados sobre derechos humanos suscritos por ese país, incorporando en
esta forma el derecho internacional de los derechos humanos al derecho
interno, como lo hacen la mayoría de las Constituciones contemporáneas.
E1T.C. de Bolivia ha incorporado, acertadamente, en su jurisprudencia a los
tratados y convenciones internacionales sobre derechos humanos, en el
“bloque de constitucionalidad” que corona el orden jurídico nacional,
teniendo en cuenta que, al suscribir y ratificar dichos tratados, Bolivia se
obliga-a cumplirlos y a aplicarlos como parte de su derecho interno, sin
necesidad de que la Constitución o las leyes así lo dispongan. La Sentencia
1.662/2003-R dice:
“...este Tribunal Constitucional, realizando la interpretación constitucional
integradora, en el marco de la cláusula abierta prevista por el art. 35 de la
Constitución, ha establecido que los tratados, las declaraciones y
convenciones internacionales en materia de derechos humanos, forman
parte del orden jurídico del sistema constitucional boliviano como parte del
bloque de constitucionalidad, de manera que dichos instrumentos
internacionales tienen carácter normativo y son de aplicación directa, por
lo mismo los derechos en ellos consagrados son invocables por las personas
y tutelables a través de los recursos de hábeas Corpus y amparo
constitucional conforma corresponda...”
Por su parte, la Sentencia 1494/2004 - R ha precisado que el Amparo
Constitucional protege los siguientes derechos:
“...1. Los expresamente previstos en el catálogo de derechos señalado en el
art. 7 de la CPE; 2. Otros derechos que si bien no están incluidos en el art. 7
aludido, por su naturaleza y ubicación sistemática son parte integrante de
los derechos fundamentales que establece el orden constitucional boliviano
(así, SS.CC. 338/2003-R 1662/2003 - R, 686/2004 - R, entre otras); 3. Los
derechos contenidos en los tratados sobre derechos humanos suscritos por
Bolivia...”
Otra innovación de la reforma argentina es que extiende el Amparo “contra
cualquier forma de discriminación y en lo relativo a los derechos que
protegen al ambiente, a la competencia, al usuario y al consumidor, así
como a los derechos de incidencia colectiva en general” (derechos
colectivos e intereses difusos, a los que nos hemos referido en el capítulo III).
La legitimación activa corresponde al afectado, al defensor del pueblo y a
las asociaciones de usuarios, consumidores, etc. En esta forma, el Amparo
no sólo protege los derechos fundamentales clásicos de primera y segunda
generación, sino también a los de la llamada tercera generación.
Resumiendo lo expuesto en este parágrafo, podemos identificar las
funciones que cumple el Amparo constitucional en los siguientes términos.
1) Una función subjetiva, en cuanto protege los derechos fundamentales
de la persona, sujeto de tales derechos.
2) A] cumplir la función subjetiva, la jurisdicción constitucional defiende,
a través del Amparo, a la Constitución Política del Estado como norma
fundamental, y le da una interpretación que vincula a todos los poderes
públicos y a los particulares, estableciendo, así, el marco-objetivo al que
debe ceñirse el orden jurídico nacional. Esta es, pues, una función objetiva
del Amparo.
3) De las dos procedentes deriva una función jurisdiccional que habilita
a la jurisdicción constitucionala declarar la inconstitucionalidad de la norma
cuestionada en el Amparo -si tal es el caso-, como lo dispone el art. 43 de la
Constitución argentina; 'función que estimamos procedente por las razones
que explicamos en el parágrafo III (infra).
3. - ACCIONES DE AMPARO Y DE INCONSTITUCIONALIDAD
En su parte final, el primer párrafo del art. 43 citado facultae'1 juez de
Amparo a “declarar la inconstitucionalidad de la norma en que se funde el
acto u omisión lesiva”, con lo que se introduce otra novedad, pues
tradicionalmente la inconstitucionalidad de leyes, decretos y resoluciones es
objeto de una acción especial, no dependiente ni ligada a otras acciones.
Esta reforma ha provocado algunas reacciones adversas en Argentina,
basadas en la jurisprudencia de la Corte Suprema de este ese país que
considera que la declaración de inconstitucionalidad de leyes es de suma
gravedad para el marco institucional y debe acudirse a la misma como
ultima ratio, cuando la norma es repugnante e inconciliable con la
Constitución. Se agrega que el Amparo es una garantía específica parala
defensa de los derechos fundamentales y no un instrumento para demandar
la inconstitucionalidad.
Los que aceptan la reforma arguyen, con razón ajuicio nuestro, que la misma
se asienta en el principio de supremacía constitucional que es la base del
orden jurídico; supremacía declarada en el artículo 31 de la Constitución
argentina y en el 228 de la nuestra.. Esta supremacía determina que los
jueces y tribunales, con carácter general desapliquen las normas contrarias
a la Constitución, y que los litigantes están habilitados para promover el
recurso indirecto o incidental de
“...este Tribunal Constitucional, realizando la interpretación constitucional
integradora, en el marco de la cláusula abierta prevista por el art. 35 de la
Constitución, ha establecido que los tratados, las declaraciones y
convenciones internacionales en materia de derechos humanos, forman
parte del orden jurídico del sistema constitucional boliviano como parte del
bloque de constitucionalidad, de manera que dichos instrumentos
internacionales tienen carácter normativo y son de aplicación directa, por
lo mismo los derechos en ellos consagrados son invocables por las personas
y tutelables a través de los recursos de hábeas Corpus y amparo
constitucional conforma corresponda...”
Por su parte, la Sentencia 1494/2004 - R ha precisado que el Amparo
Constitucional protege los siguientes derechos:
“...1. Los expresamente previstos en el catálogo de derechos señalado en el
art. 7 de la CPE; 2. Otros derechos que si bien no están incluidos en el art. 7
aludido, por su naturaleza y ubicación sistemática son parte integrante de
los derechos fundamentales que establece el orden constitucional boliviano
(así, SS.CC. 338/2003-R 1662/2003 - R, 686/2004 - R, entre otras); 3. Los
derechos contenidos en los tratados sobre derechos humanos suscritos por
Bolivia...”
Otra innovación de la reforma argentina es que extiende el Amparo “contra
cualquier forma de discriminación y en lo relativo a los derechos que
protegen al ambiente, a la competencia, al usuario y al consumidor, así
como a los derechos de incidencia colectiva en general” (derechos
colectivos e intereses difusos, a los que nos hemos referido en el capítulo III).
La legitimación activa corresponde al afectado, al defensor del pueblo y a
las asociaciones de usuarios, consumidores, etc. En esta forma, el Amparo
no sólo protege los derechos fundamentales clásicos de primera y segunda
generación, sino también a los de la llamada tercera generación.
Resumiendo lo expuesto en este parágrafo, podemos identificar las
funciones que cumple el Amparo constitucional en los siguientes términos. 1)
Una función subjetiva, en cuanto protege los derechos fundamentales de la
persona, sujeto de tales derechos.
2) Al cumplir la función subjetiva, la jurisdicción constitucional defiende,
a través del Amparo, a la Constitución Política del Estado como norma
fundamental, y le da una interpretación que vincula a todos los poderes
públicos y a los particulares, estableciendo, así, el marco-objetivo al que
debe ceñirse el orden jurídico nacional. Esta es, pues, una función objetiva
del Amparo.
3) De las dos procedentes deriva una función jurisdiccional que habilita
a la jurisdicción constitucional.a declarar la inconstitucionalidad de la norma
cuestionada en el Amparo -si tal es el caso-, como lo dispone el art. 43 de la
Constitución argentina; función que estimamos procedente por las razones
que explicamos en el parágrafo III (infra).
3. - ACCIONES DE AMPARO Y DE INCONSTITUCIONALIDAD
En su parte final, el primer párrafo del art. 43 citado facultae'1 juez de
Amparo a “declarar la inconstitucionalidad de la norma en que se funde el
acto u omisión lesiva”, con. lo que se introduce otra novedad, pues
tradicionalmente la inconstitucionalidad de leyes, decretos y resoluciones es
objeto de una acción especial, no dependiente ni ligada a otras acciones.
Esta reforma ha provocado algunas reacciones adversas en Argentina,
basadas en la jurisprudencia de la Corte Suprema de este ese país que
considera que la declaración de inconstitucionalidad de leyes es de suma
gravedad para el marco institucional y debe acudirse a la misma como
ultima ratio, cuando la norma es repugnante e inconciliable con la
Constitución. Se agrega que el Amparo es una garantía específica parala
defensa de los derechos fundamentales y no un instrumento para demandar
la inconstitucionalidad.
Los que aceptan la reforma arguyen, con razón ajuicio nuestro, que la misma
se asienta en el principio de supremacía constitucional que es la base del
orden jurídico; supremacía declarada en el artículo 31 de la Constitución
argentina y en el 228 de la nuestra.. Esta supremacía determina que los
jueces y tribunales, con carácter general desapliquen las normas contrarias
a la Constitución, y que los litigantes están habilitados para promover el
recurso indirecto o incidental de inconstitucionalidad en cualquier proceso,
ordinario o incidental de inconstitucionalidad en cualquier proceso,
ordinario o administrativo, según los arts. 59 y siguientes de la ley Ns. 1836 en
Bolivia. Si esto es así no hay razón para que el amparo no culmine en una
declaración de inconstitucionalidad de la norma impugnada, pues al
defender sus derechos el demandante aboga por la supremacía de la ley
fundamental en la que aquéllos son proclamados y protegidos, y resulta
ingenuo tratar de disociar, como se ha dicho, la “defensa de la
Constitución” de la “defensa de los derechos”, como si la Constitución no
tuviese como fin último la dignidad y los derechos de la persona humana.
“La Constitución no es un fin en sí misma, sino un medio para la defensa de
las libertades...” (6)
Consideramos, pues, que es viable una reforma similar en las atribuciones del
Tribunal Constitucional de Bolivia, para hacer congruente la garantía de los
derechos con la supremacía de la Constitución.
4- ORÍGENES DE LA INSTITUCIÓN
Se atribuye al legislador mexicano Manuel Crescendo Rejón el haber
presentado en 1823 un proyecto de procedimiento de amparo
constitucional. Por esa época había en Yucatán (donde nació Rejón) unos
juicios de posesión de tierras llamados de amparo, nombre que el autor
tomó para su proyecto. Se dice que Rejón fue el primero que en México
enumeró los derechos del hombre en un capítulo especial de su proyecto,
que después pasó a ser el art. 7 de la Constitución de 1831. (7)
El juicio de amparo tomó fisonomía propia en la Constitución de 1857, y en
1861 se aprobó la primera ley reglamentaria de los arts. 101 y 102 de la
Constitución, promulgándose en 1869 la segunda de esa naturaleza. La
Constitución actual, vigente desde 1917, consigna el amparo de sus arts, 107
y siguientes.
De México pasó la institución a otros países de América.
5. - NATURALEZA DEL AMPARO
Esta institución recibe distintos nombres en la legislación comparada.
Se le llama acción, recurso, procedimiento, juicio e interdicto.En la
Constitución Argentina (art. 43) se llama acción, lo mismo que en las
Constituciones de Guatemala (art. 272), de Perú (art. 200) y de Venezuela
(art. 27). En las Constituciones de Bolivia (art. 19), de Costa Ricá (art. 48), de
Honduras (art. 183) y de Panamá (art. 49) se le designa recurso. La de México
(art. 107), juicio, y la Ley de Procedimientos Constitucionales de El Salvador,
de 14 de Enero de 1960, alude al “derecho de amparo”. A propósito de estas
denominaciones, Bielsa dice con razón que el término acción supone un
derecho lesionado, no importa por quién mientras que “recurso significa
acto por el que se promueve un juicio o impugnación contra otro acto o
decisión”. El recurso -añade- funciona dentro del proceso, y debe
interponerse dentro de un término. (8)
Cabanellas, por su parte, aclara que en derecho procesal acción es la
facultad de requerir la actividad judicial y promover una decisión, aun
careciendo de todo derecho... El recurso, por el contrario, requiere para ser
interpuesto de la decisión previa de una autoridad judicial o administrativa,
cuya revocación o modificación se pide. En este sentido, es más propio
hablar de acción en el amparo, que no de recurso.
Los juristas mexicanos fundamentan la denominación de juicio para el
amparo en el trinomio jurídico de Calamandrei: la jurisdicción, la acción y el
proceso. Hay una jurisdicción, reservada a los tribunales constitucionales;
hay una acción, por la cual el agraviado promueve una decisión de parte
de esos tribunales; y esa acción da lugar a un proceso o conjunto de
actuados mediante los cuales se motiva la decisión de los jueces
competentes.
6. - EL AMPAItO EN AMÉRICA LATINA
La Constitución de Brasil de 1988 dispone en su art. 5, parágrafo LXLX, que se
concederá este mandato para proteger derechos líquidos y ciertos, no
amparados por Hábeas Corpus ni por Hábeas Data, cuando el responsable
por la ilegalidad o abuso de poder sea autoridad pública o agente de
persona jurídica en ejercicio de atribuciones del poder público. iül art. 102
asigna competencia al Supremo Tribunal Federal para conocer de este
mandato contra los actos de Presidente de la República, de las directivas
de las Cámaras legislativas federales, del Tribunal de Cuentas de la Unión,
del Procurador General de la República y del propio Supremo Tribunal
Federal. El art. 105 atribuye al Superior Tribunal de Justicia el conocimiento
de este mandato contra los ministros de Estado y el propio Tribunal. Los
Tribunales Regionales Federales se ocupan del mandato contra actos del
propio Tribunal y de los jueces federales (Art. 108). Como se ve, este
mandato se refiere sólo a las violaciones o restricciones de derecho
provenientes de autoridades públicas, y no así de particulares. En la
Constitución de Perú de 1993, el Art. 200, numeral 2 dice que “la. acción de
amparo procede contra el hecho u omisión, por parte de cualquier
autoridad, funcionario o persona que vulnera o amenaza los demás
derechos reconocidos por la Constitución. No procede contra normas
legales ni contra resoluciones judiciales emanadas de procedimiento
regular".
La Constitución de Costa Rica de 1982, en su Art. 48 instituye lá acción de
Amparo “para mantener, restablecer el goce de los otros derechos (con
excepción del de libertad) consagrados en esta Constitución”.
La Constitución de Panamá de 1980, en su Art. 49 concede esta acción a
[toda persona contra la cual se expida o se ejecute, por cualquier servidor
público, una orden de hacer o de no hacer, que viole los derechos y
garantías que esta Constitución consagra...” agrega que el procedimiento
es sumario y de competencia de los tribunales judiciales.
La Constitución de Honduras de 1983, en su Art. 183 dispone lo siguiente: “El
Estado reconoce la garantía de Amparo. En consecuencia toda persona
agraviada o cualquiera otra en nombre de ésta, tiene derecho a interponer
amparo:
1) Para que se le mantenga o restituya en el goce o disfrute de los
derechos o garantías que la Constitución establece; y,
2) Para que se declare en casos concretos que una ley, resolución, acto
o hecho de autoridad no obliga al recurrente ni es. aplicable por
contravenir, disminuir o tergiversar cualquiera de los derechos reconocidos
por esta Constitución.
Los Recursos de Amparo se interpondrán de conformidad con la ley”.
Constitución de Colombia.- Esta acción reviste en Colombia una amplitud
que no se da en otras legislaciones.
Normativa.- La acción de tutela (Amparo) se rige por el art. 86 de la
Constitución, el D.L. 2591 de 19 de noviembre de 1991 y el D.R. 306 DE 1992.
Legitimación activa.- Cualquier persona, colombiano o extranjero, mayor o
menor de edad, a cualquier hora y lugar; no necesita abogado ni
apoderado; no requiere citar normas ni argumentar; puede presentar su
acción por escrito, oralmente e incluso por telégrafo.
Legitimación pasiva.- Cualquier autoridad pública, incluso militares y
tribunales ordinarios, así como personas particulares.
Jueces competentes.- Ante cualquier juez o tribunal de la jurisdicción donde
tiene lugar la amenaza o violación de derecho cuya tutela se demanda.
Objeto.- Procede contra toda acción u omisión que viole o amenace un
derecho fundamental, desde actos administrativos y vías de hecho
judiciales a actos de funcionarios de cualquier clase o jerarquía. En el
concepto de “omisión” la Corte Constitucional ha incluido la retardación de
justicia, la falta de acción administrativa en defensa de los derechos, etc.
Procede la acción en ausencia de otro “medio de defensa judicial”; pero
esto debe apreciarse en cada caso, pues el art. 8 del Decreto 2591 advierte
que cuando haya otro medio de defensa, procederá la tutela, sin embargo,
como mecanismo transitorio para evitar un perjuicio irremediable; el mismo
que ha sido definido por la Corte Constitucional en su sentencia
T-554/98 como “el daño causado a un bien jurídico como consecuencia de
acciones u omisiones manifiestamente ilegítimas y contrarias a derecho que,
una vez producido, es irreversible y, por tanto, no puede ser retornado a su
estado anterior”. (9)
7. - EL AMPARO EN ESPAÑA
Normativa.- Está regido por los arts. 53.2,161.1b y 162,l.b de la C.E., así como
por la ley Orgánica 2/1979, de 3 de octubre, del Tribunal
Constitucional, en su Título III, arts. 41 al 58 y 80 al 95; ley modificada en
1984,1985,1988,1999 y 2.000.
Objeto.- procede por violación de los derechos y libertades referidos en el
art. 53.2 de la C.E., es decir, los mencionados en el art. 14 y la Sección Primera
del Capítulo II (arts. 15 a 29 C.E.) concordantes con el art. 41.1 de la ley
orgánica del T.C. español. Estos son los derechos fundamentales clásicos,
más el de objeción de conciencia reconocido en el art. 30 CE. Los derechos
económicos, sociales y culturales no están expresamente incluidos en la
acción de Amparo.
Legitimación activa.- El art. 162.1b) de la C.E. habla de [toda persona natural
o jurídica que invoque un interés legítimo, así como el Defensor del Pueblo y
el Ministerio Fiscal”. El precepto se presta a diferentes interpretaciones en
cuanto quiénes pueden alegar un “interés legítimo”, desde los que asocian
la expresión a los derechos subjetivos hasta los que suponen que están
legitimados los terceros interesados indirectamente en la reparación del
agravio.
El art. 46.1 de la ley del T.C. distingue los casos en que el Amparo está sujeto
a una actuación judicial previa por la vía preferente y sumaria a que se
refiere el art. 53.2 de la C.E., de los que no requieran dicha actuación. En los
primeros están legitimados quienes hayan sido parte del proceso judicial, el
Defensor del Pueblo y el Ministerio Fiscal. En los segundos, lo están los
directamente afectados, el Defensor del Pueblo y el Ministerio
Fiscal.
«>
Legitimación pasiva.- El art. 41.2 de la ley del T.C. franquea el Amparo contra
“disposiciones, actos jurídicos o simples vía de hecho de los poderes públicos
del Estado, las Comunidades Autónomas y demás entes públicos de
carácter territorial, corporativo o institucional, así como de sus funcionarios o
agentes”. Él T.C. ha incluido en esta categoría a los colegios profesionales
(Auto 93/1980, de 12 de noviembre),
8. - EN LAS CONVENCIONES SOBRE DERECHOS HUMANOS
La Convención Americana o Pacto de San José proclama el derecho de
amparo en su art. 25, que a la letra dice:
1) “Toda persona tiene derecho a un recurso sencillo y rápido o a
cualquier otro recurso efectivo ante los jueces o tribunales
competentes, que la ampare contra actos que violen sus derechos
fundamentales reconocidos por la Constitución, la ley o la presente
Convención, aun cuando tal violación sea cometida por personas
que actúen en ejercicio do sus funciones oficiales.
2) Los Estados parte se comprometen:
a) A garantizar que la autoridad competente prevista por el sistema legal
del Estado decidirá sobre los derechos de toda persona que
interponga tal recurso;
b) A desarrollar las posibilidades del recurso judicial, y
c) A garantizar el cumplimiento, por las autoridades competentes, do
toda decisión en que se haya estimado procedente el recurso”.
La D.A.D.D.H. prescribe que:
“Art. XVIII.- Toda persona puede ocurrir a los tribunales para hacer valer sus
derechos. Asimismo debe disponer de un procedimiento sencillo y breve por
el cual la justicia lo ampare contra actos de la autoridad que violen, en
perjuicio suyo, alguno de los derechos fundamentales consagrados
constitucionalmente”.
En la" D.U.D.H. se prescribe que:
Art. 8, “Toda persona tiene derecho a un recurso efectivo, ante los tribunales
nacionales competentes, que la ampare contra actos que violen sus
derechos fundamentales reconocidos por la constitución o por la ley”.
9. - EL AMPARO EN BOLIVIA
El Amparo fue incluido en nuestra Constitución en 1967 (art. 19). Antes de ese
año sólo existía el Hábeas Corpus, que algunos pretendían asimilar en sus
efectos al moderno Amparo, en defecto de éste; pero el Hábeas Corpus es
esencialmente una garantía de la libertad personal y de locomoción, y no
de otros derechos.1
Esta garantía ampara con carácter general todos los derechos
fundamentales que no están expresamente protegidos en otra forma por la
propia Constitución o en leyes ordinarias; y se interpone contra los actos
ilegales o las omisiones indebidas de los funcionarios o particulares que
restrinjan, supriman o amenacen restringir o suprimir los derechos y garantías
de la persona.
La Constitución vigente se ocupa del Amparo en sus arts. 128 y 129, y la Ley
del Tribunal Constitucional Plurinacional (TCP.) en sus arts. 73 a 80, con las
siguientes características.
a) Naturaleza.- Es una acción escrita, extraordinaria y sumaria.
b) Plazo.- Podrá interponerse en el plazo de seis meses "a partir de la
vulneración alegada o de notificada la última decisión administrativa
o judicial".
c) Improcedencia.- No procede contra las resoluciones cuya ejecución
estuviere suspendida por efecto de algún medio de defensa o recurso
ordinario o extraordinario interpuesto con anterioridad por el
recurrente y en cuya virtud pudiera ser revisadas, modificadas,
revocadas o anuladas. 2. - Cuando se hubiere interpuesto
anteriormente una acción constitucional con identidad de sujeto,
objeto y causa, y contra los actos consentidos libre y expresamente, o
cuando hubieran cesado los efectos del acto reclamado.
3. - Contra las resolucioneS'judiciales que por cualquier otro recurso
puedan ser modificadas o suprimidas, aun cuando no se haya hecho
uso oportuno de dicho recurso.
4. - Cuando los derechos o garantías vulnerados puedan ser tutelados
por la Acción de Libertad, Protección de Privacidad, Popular o de
Cumplimiento.
5. - Cuando haya transcurrido el plazo para interponerlo.
d. - Subsidiaridad.- La Acción de Amparo no procederá cuando exista
otro medio o recurso legal para la protección inmediata de los derechos y
garantías restringidos, suprimidos o amenazados.
e. - Contenido.- La Acción de Amparo Constitucional será presentada
por escrito, con los siguientes requisitos:
1. Acreditar la personería del accionante.
2. Indicar el nombre y domicilio de la parte demandada, o de su
representante legal y el de los terceros interesados.
3. Exponer con claridad los hechos.
4. Identificar los derechos o garantías que se consideren vulnerados.
5. Acompañar la prueba en que funda su Acción o señalar el lugar en
que se encuentra; en este último caso el juez o tribunal, al; momento
de disponer la citación de la persona o autoridad accionada,
ordenará a quien corresponda presentar la prueba señalada bajo
responsabilidad.
6. Fijar con precisión la tutela que se solicita para restablecer los
derechos o garantías restringidos, suprimidos, amenazados o
vulnerados.
f) Demandante.- Cualquier persona que sienta que uno o más de sus
derechos son suprimidos, restringidos o están amenazados, y que no
tiene otra vía expedita para su defensa; personalmente o por
intermedio de otra persona, con poder, a su nombre. El Ministerio
Público podrá también interponer de oficio la acción, cuando no lo
hiciere o no pudiere hacerlo la persona afectada, el Defensor del
Pueblo lo hará sin necesidad de mandato y Procurador General del
Estado.
g) Demandado.- Funcionarios públicos o personas particulares que
cometan o amenacen cometer actos ilegales u omisiones no
comprendidas específicamente en otras leyes, juicios, acciones o
recursos.
h) Tribunales competentes.- Cualquier juez o tribunal competente.
i) Citación.- El demandado será citado personalmente o por cédula
para que informe y “presente, en su caso, los actuados concernientes
al hecho denunciado en el plazo máximo de 48 horas”.
j) Audiencia.- En audiencia pública en que el demandado se presente,
o en ausencia del mismo y sobre la base de la prueba que ofrezca el
actor, el juzgador pronunciará resolución ñnal concediendo el
amparo, si encuentra cierta y efectiva la denuncia.
k) Contenido de la rcsolución.-
1. La identificación del actor o de quien actúe en su nombre.
2. La identificación de la autoridad, persona natural o jurídica contra
quien se ha interpuesto la Acción.
3. Los fundamentos de hecho y de derecho.
4. El pronunciamiento sobre el fondo de la acción y
5. La imposición de costas y multas, si corresponde.
l) Revisión.- La resolución será elevada de oficio al Tribunal
Constitucional en el plazo de 24 horas de pronunciada, para su revisión.
m) Ejecución.- La revisión no suspenderá la ejecución de la resolución,
que será ejecutada inmediatamente, y sin observación, lo mismo que las
determinaciones previas de la autoridad.
n) Resistencia.- Los demandados que opongan resistencia a las
decisiones judiciales serán sancionados en la forma prevista para la libertad.
o) Efectos.- La resolución que conceda la Acción ordenará la restitución
y la tutela de los derechos y garantías,restringidos, suprimidos, o
amenazados y podrá determinar la responsabilidad civil y penal del
demandado.
NOTAS
(1) MORELLO, Augusto M. - CONSTITUCIÓN Y PROCESO, Abeledo Perrot,
Buenos Aires, Argentina, 1998, p.215
(2) Ibiden, pp. 217 y 219.
(3) FERREYRA, Raúl Gustavo, NOTAS SOBRE DERECHO CONSTITUCIONAL Y
GARANTÍAS, Ediar, Buenos Aires, Argentina 2003, pp 306-307.
(4) Ibiden, pp. 307 y 314
(5) SARMIENTO Garda, Jorge y Otros, PROTECCIÓN DEL ADMINISTRADO,
Ed. Ciudad Argentina, Buenos Aires 1996, pp. 154-156.
(6) FERREYRA, Raúl Gustavo. Ob. Cit., pp. 328 - 329.
(7) BIELSA, Rafael, EL RECURSO DE ANIPARO, Depalma, Buenos Aires,
Argentina, 1965,
p. 281.
(8) Ibiden, pp 61 y 62.
(9) CEPEDA ESPINOZA, Manuel José, LA ACCIÓN DE TUTELA COLOMBIANA,
en la obra colectiva LA PROTECCIÓN CONSTITUCIONAL DEL
CIUDADANO, Ciedla, Buenos Aires, Rep. Argentina, 1999, pp. 109 y ss.
CAPÍTULO XVIII
EL HÁBEAS DATA (PROTECCIÓN DE PRIVACIDAD)
1. - CONCEPTO Y DEFINICIÓN
El artículo 23 de la Ley No. 2631 ha introducido la garantía de HÁBEAS
Data en los siguientes términos:
I. Toda persona que creyere estar indebida o ilegalmente impedida de
conocer, objetar y obtener la eliminación o rectificación de los datos
registrados por cualquier medio físico, electrónico, magnético, informático
en archivos o bancos de datos públicos o privados que afecten su derecho
fundamental a la intimidad y privacidad personal y familiar, a su imagen,
liorn a y reputación reconocidos en esta Constitución, podrá interponer el
recurso de HÁBEAS Data anta la Corte Superior del Distrito o ante cualquier
Juez de partido, a elección suya.
II. - Si el tribunal o Juez competente declara procedente el recurso,
ordenará la revelación, eliminación o rectificación de los datos personales
cuyo registro fue impugnado.
III. - La decisión que se pronuncie se elevará en revisión, de oficio ante el
Tribunal Constitucional, en el plazo de veinticuatro horas, sin que por ello no
suspenda la ejecución del fallo.
IV. - El recurso de HÁBEAS Data no procederá para levantar el secreto en
materia de prensa.
V. - El recurso de HÁBEAS Data se tramitará conforme al procedimiento
establecido para el recurso de Amparo Constitucional previsto en el art. 19
de esta Constitución.
Por su parte, la Ley de procedimiento Administrativo contiene las siguientes
disposiciones sobre el Hábeas Data:
“Art. 16.- En su relación con la Administración Pública, las personas tienen los
siguientes derechos:
g) A que se rectifiquen los errores que obren en registros o documentos
públicos, mediante la aportación de los elementos que correspondan;
k) A acceder a registros y archivos administrativos en la forma establecida
por ley;
Art. 18.- Las personas tienen derecho a acceder a los archivos, registros
públicos y a los documentos que obren en poder de la Administración
Pública, así como a obtener certificados o copias legalizadas de tales
documentos, cualquiera que sea la forma de expresión, gráfica, sonora, en
imagen u otras, o el tipo de soporte material en que figuren”.
El Hábeas Data es un derecho y una garantía de los derechos de intimidad
y de identidad personal, según el cual-este último- toda persona tiene
derecho a un nombre, al honor y a la dignidad. Habilita a solicitar
judicialmente la exhibición de registros públicos y privados para conocer los
datos que contiene sobre la persona individual y/o su grupo familiar, a fin de
requerir su rectificación, eliminación o complementación, cuando se
considere que su inexactitud es perjudicial, discriminatoria, deshonrosa o
infamante.
La denominación proviene de dos voces, una latina, hábeas, que quiere
decir tener, haber, y otra inglesa, data que es el plural de datos (obtener los
datos).
Esta garantía supone tres derechos: a conocer, a acceder y a rectificar los
datos. El primero consiste en saber que existen registros, archivos o bancos
de datos de tal o cual naturaleza, ubicación y extensión. El segundo permite
averiguar el contenido de los datos de la persona interesada, y sólo ésta
puede ejercitar la acción, sin estar obligada a revelar sus motivaciones. Se
discute si el interesado debe examinar personalmente los datos o si es
suficiente que el encargado responsable de los mismos le proporcione una
copia. Se sostiene, con razón, que el derecho de acceder supone la
verificación, in situ, por el afectado, de los datos que le interesan. El derecho
a rectificar complementa los dos anteriores, cuando el accionante
considera que la información que le afecta es inexacta, incorrecta,
incompleta u obsoleta.
Según el Convenio Europeo sobre la Protección de las Personas con
respecto al Tratamiento Automatizado de Datos de Carácter Personal
(llamado Convenio 108), estos tres derechos pueden ser ejercidos
intemacionalmente, y no están limitados por las jurisdicciones nacionales.
(1)
En términos generales puede señalarse los siguientes objetivos del Hábeas
Data: a) conocer el archivo, registro o banco de datos que interese a la
persona; b) acceder a los mismos para informarse de los datos que le
conciernen; c) obtener la actualización de los datos atrasados o vencidos;
d) obtener la corrección, rectificación o supresión de datos inexactos,
incorrectos, incompletos o perjudiciales a la intimidad, honra y buen nombre
de la persona; e) asegurar la confidencialidad de informaciones íntimas que
no deben librarse al conocimiento público.
El art. I5 del Reglamento de la Ley 25.326 de Argentina incluye en el
concepto de archivos, registros, bases o bancos de datos privados,
“aquellos que exceden al uso exclusivamente personal y los que tienen
como finalidad la cesión o transferencia de
datos personales, independientemente de que la circulación del
informe o la información producida sea a título oneroso o gratuito”.
Alfredo Gozaíni dice que éste “es un derecho individual que, partiendo
desde el derecho a la intimidad y con posadas en la privacidad, la
identidad o la dignidad de la persona fragmenta su unidad como proceso
para aplicar su garantía a otras, cuestiones como la tranquilidad espiritual,
el derecho al aislamiento, la protección del nombre civil o comercial, la
integridad física, el secreto profesional, etc.”.
2. -ANTECEDENTES
La revolución de la información operada a partir de mediados del siglo XX y
el desarrollo tecnológico de la informática produjeron una sensible
reducción del círculo de la intimidad personal, acentuada con el
crecimiento del periodismo sensacionalista y con la intromisión del Estado
policial en todos los ámbitos1 de la comunidad. En su afán de protegerse de
este asalto que vulnera derechos fundamentales, la sociedad comenzó a
elaborar mecanismos para limitar esa intromisión y permitir su acceso a los
sistemas de datos e informaciones que le conciernen. .
Es así que el artículo 129, párrafo 3S de la Constitución de Weimar de 1919
facultaba a los empleados públicos a revisar sus expedientes personales, y
a reclamar por cualquier inexactitud que allí encontraran. Este precepto es
el primer antecedente, a nivel constitucional, de la institución que nos
ocupa.
El Hábeas Data es la versión latinoamericana de las leyes europeas sobre
protección de datos y de las estadounidenses sobre intimidad (privacy). En
los años 19G0 empezó a escribirse sobre esta materia, y en 1969 el Reino
Unido aprobó el “Data Surveillance Bill” (Ley de Control de Datos), que dio
lugar más tarde a la elaboración de informes y a la formación de comités
relativos al asunto. En 1973 Suecia aprobó la “Data Lag”, que establecía el
derecho a conocer los datos que afectan a las personas y creaba una
comisión de inspección de datos, ley que fue actualizada en 1979. En
Alemania, el Land de Hesse aprobó en 1970 la primera ley sobre la materia
e instituyó un comisario para el control de la información. Más tarde (1977)
se aprobó una ley federal similar.
El art. 35 de la Constitución portuguesa de 1976 estableció el derecho a
acceder a los datos informatizados, “püdiendo exigir su rectificación y
actualización (...) se garantiza a todos el libre acceso a las redes informáticas
de uso público..." La Constitución española de 1978 limita en su art. 18-4 “el
uso de la informática para garantizar el honor y la intimidad personal y
familiar de los ciudadanos...” Posteriormente se unieron a este movimiento
países como Francia, Noruega, Dinamarca, Luxemburgo,
Bélgica, Italia, Austria, Finlandia e Islandia.
En Estados Unidos de América se promulgó en 1970 el
“FairCreditReportingAct” para proteger los datos personales de los deudores
do las compañías de crédito. El “PrivacyAct” de 1974 se propuso proteger a
la persona contra la invasión a su vida privada, reconociendo su derecho a
conocer y rectificar las informaciones almacenadas en archivos y bancos
de datos. Esta ley fue actualizada en 1980.
En el campo internacional, la Resolución de 19 de diciembre de 1968 de la
Asamblea General de las Naciones Unidas trataba de proteger a los
individuos y a las naciones frente a las técnicas de registro y comunicación
de datos que pueden afectar el ejercicio de los derechos fundamentales; y
la Resolución del Comité de Ministros del Consejo de Europa de 1973 sobre
la protección de la vida privada de las personas físicas frente a los bancos
de datos electrónicos en el sector privado, fue seguida por otra en 1974
sobre los bancos de datos en el sector público. En ambas resoluciones se
recomendaba a los Estados miembros adoptar normas legislativas para el
reconocimiento del derecho a conocer y acceder a las informaciones que
les conciernen. En septiembre de 1980 el Comité de Ministros del Consejo de
Europa aprobó el Convenio para la Protección de las Personas en el
Tratamiento Automatizado de Datos de Carácter Personal, abierto a la firma
en Enero de 1981, que protege la intimidad, abierto a la firma en Enero de
1981, que protege la intimidad de la persona, reconociéndole determinados
derechos, incluidos los de acceder, suprimir o corregir los datos (Convenio
108) (2).
El Hábeas Data ingresó a América Latina por la puerta de Brasil, cuya
Constitución de 1988 lo concede para asegurar el conocimiento de
informaciones en los registros o bancos de datos públicos, a fin de queel
interesado los rectifique, cuando no lo haga por otro procedimiento. La Ley
N5 9507, de 1997, regula el procedimiento y otros detalles de esta garantía.
Paraguay siguió a Brasil, pues el artículo 135 de su Constitución de 1992 lo
instituye para acceder a la información y a los datos en registros públicos y
privados, a fin de actualizarlos, rectificarlos o destruirlos. El artículo 200,
numeral 3 de la Constitución de Perú de 1993 lo incluye con referencia a su
art. 2, incisos 5, 6 y 7 y la Ley N9 26. 301, de 18 de abril de 1994, lo reglamenta.
La Constitución Argentina de 1994 lo incluye en el tercer párrafo de su art.
43, con referencia a los registros o bancos de datos públicos y privados, para
actualizarlos, suprimirlos o rectificarlos. La Ley N2 25.326. de 4 de octubre de
2000, y el Decreto 995, de 30 de ose mes y año, regulan el procedimiento de
esta garantía en Argentina. El art. 15 de la Constitución de Colombia de
1991, reformada en 1997, lo instituye con relación a archivos públicos y
privados, como lo hacen los artículos 94 de la Constitución de Ecuador do
1998, y 28 de la de Venezuela de 1999 La Ley N2 19.628, de 30 de agosto de
1999, sobre Protección de la Vida privada, regula la materia en Chile. (3)
3. - PRINCIPIOS
Hay principios generales que rigen la recolección, guarda, transmisión y
corrección de datos, así como la interpretación de las normas que regulan
la materia, entre los que podemos mencionar ios siguientes:
a) Principio de razonabilidad.- Este es un principio general en el sentido
de que los ingredientes del derecho son la rectitud, la lógica, la equidad y
la proporcionalidad de las normas y de las resoluciones judiciales, así como
su adecuación a las necesidades y circunstancias de cada caso, vale decir
su razonabilidad. Como dice la Ley de Regulación del Tratamiento
Automatizado de los Datos de Carácter Personal de España (1992), en su
artículo 4, inc. 1: “sólo se podrán recoger datos de carácter personal para
su tratamiento automatizado, así como someterlos a dicho tratamiento,
cuando tales datos sean adecuados, pertinentes y no excesivos en relación
con el ámbito y las finalidades legítimas para las que se hayan obtenido”.
b) Principio de pertinencia.- Según éste, los datos personales deben ser
recolectados y guardados solamente en cuanto sea necesario y durante el
tiempo requerido para el fin que se proponen los registros, archivos o bancos
de datos. Este principio establece las limitaciones de cantidad y tiempo,
para que no se acumule datos impertinentes durante períodos innecesarios.
c) Principio de finalidad.- Este principio se halla directamente ligado con
el anterior y supone que en cada caso ha de archivarse los datos que se
requiera para el fin indicado: por ejemplo, tratándose de la identificación
de las personas, son relevantes el nombre, lugar y fecha de nacimiento,
nacionalidad, estatura, señas particulares y otros que identifiquen con
precisión a la persona. Dos parámetros integran este principio: sólo interesan
los datos concernientes al fin específico, y esos datos no deben ser utilizados
para otros fines.
d) Principio de sensibilidad.- Hay algunas materias que son
especialmente sensibles én relación a los datos personales, como por
ejemplo la raza, la salud, la vida sexual, los antecedentes penales, las
opiniones políticas y las creencias religiosas, etc. La sensibilidad de éstos y
de otros asuntos varía según las culturas, los pueblos y las épocas.
La Ley español citada en el inciso a) de este parágrafo identifica tres áreas
en que los datos personales son especialmente sensibles: en la primera,
menciona la ideología, la religión y las creencias; en la segunda, la raza, la
salud y la vida sexual, y en la tercera los antecedentes penales y las faltas
administrativas. En los dos primeros casos, se requiere el consentimiento de
los interesados para que sus datos sean archivados, y en el tercero, que haya
una norma expresa sobre el particular. (4)
e) Principio de seguridad.- Tratándose de una materia delicada y
sensible (la recolección, guarda y divulgación de datos personales),
corresponde al Estado, mediante sus órganos competentes, asegurar la
confidencialidad y el uso pertinente de los archivos y registros, a fin de que
los administrados tengan la seguridad de que sus derechos fundamentales
serán debidamente protegidos y de que no se utilizará sus datos para fines
impertinentes u ofensivos.
f) Principio de responsabilidad.- Como corolario del anterior, se
desprende que los órganos a cuyo cargo están los archivos, registros y
bancos de datos, son responsables administrativa, civil y penalmente del
manejo legal y divulgación pertinente de esos datos, conforme al Capítulo
V do la Ley Ns 1178 de Administración y Control gubernamentales, al art. 16
del Estatuto del Funcionario Público, así como a los Códigos Civil y Penal y
otras normas. A propósito, el art, 302 del Código Penal dispone:
“El que teniendo conocimiento de secretos en virtud de su estado, ministerio,
profesión, empleo, oficio, arte o comisión, los revelare sin justa causa, o los
usare en beneficio, propio o ajeno, si de ello so siguiere algún perjuicio, será
sancionado con privación de libertad de-tres meses a un año y multa de
treinta a cien días.”
4. -DERECHO DE IDENTIDAD
El ser humano es, por naturaleza, gregario y social; no puede vivir aislado,
sino en sociedad. Pero tampoco puede convivir con sus semejantes sin
definir su identidad mediante el reconocimineto de los rasgos de su
personalidad que lo distinguen de los demás. Se dice que ningún individuo
es igual a otro. La identidad es, pues, lo que define a la persona, su esencia,
y es por ello la base de todos sus derechos fundamentales. Sin identidad la
persona no existe para el derecho, no es sujeto de derechos; no puede
adjudicársele ni invocar ninguno. La identidad viene a ser un derecho
fundamental primario, porque del mismo se desprenden los demás. De ahí
la importancia de su definición y protección a través de acciones como el
Hábeas data. 5, DERECHO ALA INTIMIDAD
Este derecho es enunciado por vez primera en el derecho anglosajón. El
Oxford English Dictionary define la intimidad (privacy) como “el estado o
condición de estar retirado de la sociedad de otros, o del interés público”.
La Cuarta Enmienda de la Constitución estadounidense (1791)-establece el
derecho a la seguridad en las personas, casas, papeles y efectos, contra
pesquisas y secuestros irrazonables.
Aunque no figura expresamente en la Constitución de Estados Unidos de
América ni en sus enmiendas, la Corte Suprema de ese país lo ha reconocido
como implícito en lalibertad personal de las Enmiendas Primera y Décimo-
Cuarta, en la'reserva de los derechos del pueblo de la Novena Enmienda, y
en la Cuarta y Quinta Enmiendas. William Prosser, en su artículo “Privacy”,
publicado en el Ne 383 de la “California LawReview” (1960), distingue cuatro
áreas del derecho a la intimidad: 1)contra la intrusión en la reclusión o
soledad, o en los asuntos privados de uno; 2) contra la revelación de actos
privados embarazosos; 3) contra la publicidad que coloca a uno en una
falsa imagen ante el público; y 4) contra la apropiación del nombre de uno
en beneficio de otro. La Corte Constitucional de Colombia (Sentencia T-414,
de 16-6-1992) califica a éste como un "derecho general, absoluto, extra-
patrimonial, inalienable e imprescriptible, y que se puede hacer valer erga
omnes...” (5).
La Constitución de Bolivia, consigna este derecho en su art.21.2, que figura
en la mayoría de las Constituciones contemporáneas: Argentina (19); Brasil
(5-X); Colombia (15 y 42); Chile (19-40); Ecuador (23-8); Guatemala (31);
Paraguay (33); Perú (2-5, 6, 7); Uruguay (10); Venezuela (60); España (18-1),
así como en la Declaración Universal de los Derechos Humanos (12) y en el
Pacto Internacional de los Derechos Civiles y Políticos (17).
6. - PROCEDIMIENTO
La Constitución vigente se refiere a la Acción de Protección de Privacidad
en sus arts. 130 y 131, y franquea este derecho a "toda persona individual o
colectiva", siguiendo el mismo procedimiento que para la acción de
Amparo Constitucional.
La LTCP. regula esta acción en sus arts. 81 a 86, que puede ser ejercida por
los afectados y por el Defensor del Pueblo. Es improcedente cuando ha
transcurrido el plazo para interponerla (seis meses, como en la Acción de
Amparo), para levantar el secreto de materia de prensa, y en los otros rasos
en que la Acción de Amparo es también improcedente.
La Ley Nº 25.326, de Protección de Datos Personales de la República
Argentina, que reglamenta el párrafo 39 del art. 43 de su Constitución,
prescribe (art. 37) que “que la acción de Hábeas Data se tramitará según
las disposiciones de la presente ley y por el procedimiento que corresponde
a la acción de amparo común, y suplementariamente por las normas del
(Índigo Procesal y Comercial de la Nación...” Tienen legitimación activa. (art.
34) el afectado, sus tutores o curadores y los sucesores de las personas bsicas,
en línea directa o colateral, hasta el segundo grado. La legitimación pasiva
(art. 35) corresponde a los responsables y usuarios de los bancos de datos
públicos y privados. Los arts. 31 y 32 establecen responsabilidades
administrativa, civil y penal para los responsables y usuarios de bancos de
datos, y la aplicación de la pena de prisión de un mes a tres años, según la
gravedad del delito.
La Ley N9 26.301 de Perú dispone asimismo (art. 3) que la acción de Hábeas
Data se tramitará de acuerdo a las leyes que rigen la acción de
Amparo
7. - LIMITACIONES
Como todos los derechos, el Hábeas Data tiene limitaciones fundadas en
el.orden público, el bien común y la seguridad colectiva. El Convenio
Europeo para la Protección de los Derechos Húmanos y de las Libertades
Fundamentales contempla excepciones al derecho de la intimidad en
atención a 1) la seguridad nacional; 2) la seguridad pública; 3) el bienestar
económico del país, 4) la defensa del orden y la prevención del delito; 5) la
protección de la salud y de la moral; 6) la protección de los derechos y las
libertades de los demás. El Convenio Europeo 108 contiene restricciones
similares 96).
La Ley de Procedimiento Administrativo de Bolivia establece las limitaciones
contenidas en el art. 18-11 y III:
Art. 18.-
“II.- Toda limitación o reserva de la información debe ser específica y estar
regulada por disposición legal expresa o determinación de autoridad
administrativa con atribución legal establecida al efecto, identificando el
nivel de limitación.
Se salvan las disposiciones legales que establecen privilegios de
confidencialidad o secreto profesional y aquellas de orden judicial que
conforme a la Ley, determinen medidas sobre el acceso a la información.
III.- A los efectos previstos en el numeral anterior del derecho de acceso y
obtención de certificados y copias, no podrá ser ejercido sobre los siguientes
expedientes:
a) Los que contengan información relativa a la defensa nacional, a la
seguridad del Estado o al ejercicio de facultades constitucionales por parte
de los poderes del Estado.
b) Los sujetos a reserva o los protegidos por los secretos comercial,
bancario, industrial, tecnológico y financiero, establecido en disposiciones
legales.”
La Ley Ns 25.326 de la República Argentina, ya mencionada en los
parágrafos II y V supra, dispone que se respete el secreto profesional en los
datos sobre salud (art. 8), y restricciones fundadas en la defensa de la
nación, del orden y la seguridad públicos y de la protección de los derechos
e intereses de terceros (art. 17). El mismo artículo agrega que la información
puede ser denegada “cuando de tal modo se pudiera obstaculizar
actuaciones judiciales o administrativas en curso vinculadas a la
investigación sobre el cumplimiento dé las obligaciones tributarias y
provisionales, control de la salud y del medio ambiente, la investigación de
los delitos penales y la verificación de infracciones administrativas".
Se considera, asimismo, que el Llábeas Data no cubre los ficheros de uso
personal, doméstico, que no proporcionen informes, ni los datos y fuentes de
información periodística, como tampoco los archivos estadísticos, de
encuestas de opinión, mercadeo, investigaciones científicas y otras
análogas destinadas a tareas de interés social, de información general y de
beneficio colectivo.
8. - LAS PERSONAS JURÍDICAS EN EL HÁBEAS DATA
Como esta institución protege básicamente el derecho a la intimidad, hay
quienes creen que no puede aplicarse a las personas jurídicas como las
sociedades mercantiles, fundaciones, etc., apoyándose en algunos fallos
del Tribunal Constitucional español, uno de los cuales sostiene que, “en
principio, las personas jurídicas, como las sociedades mercantiles, no
pueden ser sujeto del mismo (derecho a la intimidad) ya qüe la reserva de
las actividades de esas entidades quedará en su caso protegida por la
correspondiente regulación legal, al margen de la intimidad personal y
subjetiva constitucionalmente decretadas”.
En algunas legislaciones, como la boliviana, se incluye expresamente a las
personas colectivas como titulares de esta garantía, con el argumento
evidente, en el caso de Austria, de que muchos datos relativos a dichas
entidades corresponden a los individuos que las constituyen. Por lo demás,
cuando la Constituciones de Argentina (art. 43), de Colombia (art. 15), de
Perú (art. 2003, con referencia al art. 2, inc. 5, 6 y 7), de Venezuela (art. 28),
y otras, disponen que “toda persona” tiene derecho a la intimidad y a
acceder a los archivos, registros y bancos de datos, para conocer, rectificar
o pedir la supresión de informaciones que les conciernen, se están refiriendo
a las personas físicas naturales y también a las colectivas o jurídicas, pues
que el sustantivo persona comprende a ambas.
9. - EN EL ÁMBITO INTERNACIONAL
El derecho a la intimidad, protegido por el Hábeas Data, ha sido reconocido
por diversos acuerdos internacionales, como la Declaración Universal de los
Derechos Humanos (art. 12), el Pacto Internacional de Derechos Civiles y
Políticos (art. 17), el Pacto de San José (arts. 11, inc. 2 y 3, y 12, inc. 2). La
Resolución 45/95 de la Asamblea General de las Naciones Unidas, de enero
de 1991, establece “Directrices para la regulación de ficheros automáticos
de datos personales”, que siguen las líneas generales de la
“Recomendación relativa a las directrices aplicables a la protección de la
vida privada y a los flujos transfronteras de datos personales”, aprobada por
la Organización de Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE) el 23 de
septiembre de 1980.
Uno de los puntos más controvertidos en el campo internacional es el flujo
transfronterizo de informaciones, que los países desarrollados, productores
de datos, favorecen sin restricciones, mientras se oponen al mismo los países
menos desarrollados. El Convenio 108 faculta a los Estados signatarios de
Europa a oponer excepciones al libre flujo (free flow) de informaciones
especialmente “sensibles”, y cuando los datos puedan llegar a un Estado
que no es parte del Convenio. La Data Lag de Suecia requería en su artículo
11 autorización especial para transmitir al extranjero datos obtenidos en ese
país. (7)
El art. 12 de la Ley N9 25.326 de Argentina prohíbe la transferencia
internacional de datos personales de cualquier tipo, excepto en caso de
colaboración judicial internacional, de intercambio de datos de carácter
médico, de transferencias bancarias o bursátiles, cuando haya tratados
internacionales sobre la materia y cuando la transferencia obedezca a la
cooperación internacional para la lucha contra el crimen organizado, el
terrorismo y el narcotráfico.
NOTAS
(1)EKMEDKJIAN, Miguel Angel y PIZZOLO (h) Calógero.- HÁBEAS
DATA.Depalmá. Buenos Aires, 1996, pp. 1, 65 y ss.
(2) PEREZLUÑO, Antonio Enrique, DERECHOS HUMANOS, ESTADO DE
DERECHO Y CONSTITUCIÓN, 1- Ed. Tecnos, Madrid, España 2001, pp., 35 y
ss.
(3) GUADAMUZ, Andrés, HÁBEAS DATA versus THE EUROPEAN DATA
PROTECTION DIRECTTVE, The Journal of Information, ' Law and
Technology, Novenwer 2001. Queens UniuersityofBeifast, Ireland.
(4) SARMIENTO, Jorge y otros, PROTECCIÓN DEL ADMINISTRADO. Ed. Ciudad
Argentina, Buenos Aires, 1996, p. 180.
(5) Para mayor desarrollo del tema ver DERM1ZAKY PEREDO, Pablo; EL
DERECHO A LA INTIMIDAD, IUS ET PRAXIS, Universidad de Talca, Chile, Año,
6Nº 1 Año 2000, pp. 177 y ss.
(6) EKMEKDJIANyPIZZOLO, Ob cit. P. 75
(7) PEREZLUÑO, Antonio Enrique, Ob. Cit, pp. 355-56
CAPÍTULO XIX
ACCIONES DE CUMPLIMIENTO Y POPULAD
1. LA ACCIÓN DE CUMPLIMIENTO
Esta acción está reglada en los arts. 134 de la Constitución y 87 a 93 de LTCP.
1. - Objeto.- Obligar a los servidores públicos competentes a ejecutar las
disposiciones constitucionales y legales cuyo incumplimiento importa
violación a los derechos individuales y/o colectivos.
2. - Improcedencia.- No procede cuando haya otras vías judiciales o
administrativas para conseguir el mismo objeto; cuando el actor no haya
reclamado previamente a la autoridad respectiva el cumplimiento de la
norma omitida; cuando haya expirado el plazo para interponer la acción;
contra la ALP para exigir la aprobación de una ley, y para el cumplimiento
de sentencias judiciales y resoluciones administrativas ejecutoriadas.
3. - Demandantes.- Personas individuales y colectivas afectadas, y otras
a su nombre, con poder suficiente.
4. - Demandados.- Servidores públicos que no cumplen normas
constitucionales o legales en perjuicio del o de los actores.
5. - Procedimiento.- La Acción se ajustará al mismo procedimiento que
rige
la de Amparo Constitucional, incluyendo el plazo y pruebas para emitir la
resolución, su ejecución y efectos, así como para el caso de resistencia a la
misma y de las sanciones consiguientes.
2. ACCIÓN POPULAR
Esta Acción está regulada en los arts. 135 y 136 de la Constitución y 94 a 100
de la LTCP.
Se trata de una acción muy antigua que en. el Derecho Romano "amparaba
el derecho propio del pueblo". En el derecho público latinoamericano la Ley
colombiana de 22 de junio de 1.850 facultó en su art. 23 a todo ciudadano
a demandar ante la Corte Suprema de Justicia la nulidad de una ordenanza
municipal inconstitucional o ilegal. La misma acción fue incorporada en las
Constituciones de Venezuela (1.858), Panamá (1.941), y El Salvador (1.950).
Actualmente existen amparos colectivos en Brasil (art. 5, párrafo LXX de la
Constitución de 1.988); y en Argentina (art. 43, segundo párrafo de la
Constitución de 1.994); y acciones populares en Brasil (art. 5; párrafo LXVIII;
en Colombia (art. 88 de la Constitución, de 1.991); en Perú (art. 200- 5 de la
Constitución de 1.993); y en Portugal (art. 52-3 de la Constitución revisada en
1.997).
La Constitución boliviana ha incorporado la acción de cumplimiento (art.
134) y la acción popular (arts. 135 y 136). Convendría instituir, asimismo, el
Amparo Colectivo.
1. - Objeto.- Restablecer el imperio de los derechos individuales e
intereses
colectivos relativos al patrimonio, espacio, seguridad y salubridad públicos,
medio ambiente y otros de similar naturaleza, protegidos por la
Constitución y las leyes.
2. - Plazo.- Podrá interponerse la acción mientras subsista la vulneración
o amenaza contra los derechos o intereses mencionados en el punto 1. No
será necesario, agotar la vía judicial o administrativa que pudieran existir
para el mismo fin.
3. - Demandantes.- Cualquier persona individual o en representación de
una colectividad, sin necesidad de mandato expreso. El Ministerio Público y
la Defensoría del Pueblo actuarán obligatoriamente cuando, tengan
conocimiento de la vulneración o amenaza a los derechos e intereses
mencionados en el punto 1.
4. -Demandados.- Servidores públicos y personas individuales y
colectivas que vulneren o amenacen vulnerar los derechos e intereses
citados en el punto 1. .
5. - Procedimiento.- Se seguirá el mismo procedimiento señalado para el
Amparo Constitucional, incluyendo plazo y pruebas para emitir la resolución,
su ejecución y efectos, así como para el caso de resistencia a la misma y las
sanciones consiguientes.
CAPÍTULO XX
LIBERTAD DE PENSAMIENTO Y DE EXPRESIÓN
1. - CONCEPTO E IMPORTANCIA
La libertad de expresión es uno de los principales atributos de la persona
humana, comprendida en el ámbito de las libertades individuales (libertad
física o de locomoción, libertad de pensamiento, de conciencia, de credo
y de opinión). La libertad de expresión es propia del ser humano, pensante
y racional, que puede concebir ideas, opiniones y pensamientos,
transmitiéndolos después a sus semejantes mediante el lenguaje articulado
que es su principal instrumento de comunicación, y a través de todos los
medios de difusión.
Por esto se considera a la libertad de expresión como un derecho natural
del hombre, inseparable de su condición, de su educación, de su trabajo,
desarrollo y dignidad; sin el cual no podría vivir en sociedad ni subsistir, pues
quedaría reducido a la incomunicación, al aislamiento y la inanición.
La libertad de expresión es el complemento natural de la libertad do
pensamiento que acompaña al hombre de manera inseparable, puesto
que es un atributo consubstancial de su personalidad. En electo, lo que
distingue al hombre de la bestia es su facultad de pensar, imaginar,
concebir, crear, razonar y discernir, todo lo cual quedaría esterilizado o
anulado si, paralelamente, no tuviese la facultad de comunicarse
libremente a través de la expresión oral o escrita, por todos los medios de
difusión. “El pensamiento escapa a todo poder extraño al individuo -dice
José Carrasco-.
Puede encerrarse y aun encadenarse al sabio; pero su pensamiento queda
libre”.
La libertad de expresión es, en consecuencia, un derecho natural,
fundamental, anterior y superior al Estado, que la Constitución no otorga,
sino que reconoce y protege en sus arts. 21.3 y 5, y 106.11 y III, y en otros
preceptos (libertad de reunión, de asociación, derecho al trabajo, a la
instrucción y a la cultura; a la enseñanza, derechos políticos, etc.).
2. -ANTECEDENTES HISTÓRICOS
No obstante de que este es un derecho natural, anterior y superior al Estado,
ha sido cuestionado y denegado desde tiempos inmemoriales por los
detentadores del poder, que en la antigüedad y durante la Edad Media se
empeñaron en desconocerlo. En Atenas y en Roma se castigaba con la
pena capital al que disentía de la política oficial. Sócrates fue condenado
a beber la cicuta por “atacar a los dioses y corromper a la juventud”. El
Concilio de Trento (1540 1563) prohibió la lectura de libros peligrosos
mencionados en el Index.
En Inglaterra se consagró la libertad de pensamiento en 1694, cuando el
Parlamento negó los poderes discrecionales que tenía la Censura. En
Francia, la Monarquía absoluta reprimió cualquier vestigio de este derecho,
hasta que la Revolución Francesa proclamó que la “libre comunicación de
los pensamientos y de las opiniones és uno de los derechos más preciosos
del hombre; todo ciudadano, en consecuencia, puede hablar, escribir,
imprimir libremente, debiendo si responder de los abusos de esta libertad en
los casos determinados por la ley” (Declaración de los Derechos del Hombre
y del Ciudadano, art. 11). La Constitución de 1791 incluyó la libertad de
prensa; pero dicen que “se abusó tanto de ella, que la Convención la
suprimió completamente, monopolizando para si ese derecho. La
Constitución del año III decretó de nuevo la libertad; pero es preciso
confesar que su abuso determinó al Directorio sancionar la pena de muerte
para los delitos de imprenta, fuera de. otras muchas medidas preventivas”,
(i)
La primera enmienda a la constitución estadounidense prescribe que “el
Congreso no podrá aprobar ninguna ley que coarte la libertad de palabra
y de prensa”. La Declaración Americana de los Derechos y Deberes del
Hombre proclama en su art. IV que “toda persona tiene derecho a la
libertad de investigación, de opinión, de expresión y difusión del
pensamiento por cualquier medio”. La Declaración Universal de los
Derechos Humanos, por su parte, prescribe en su art. 19: “Todo individuo
tiene derecho a la libertad de opinión y de expresión; este derecho incluye
el de no ser molestado a causa de sus opiniones, el de investigar y recibir
información y opiniones y el de difundirlas, sin limitaciones de fronteras, por
cualquier medio de expresión”. La Declaración de Principios de la Prensa
Libre (Nueva York, 9 de Octubre de 1950), dice en su punto 2. “Sin libertad
de prensa no hay democracia. La libertad de prensa, de pensamiento, su
expresión hablada o escrita, son inseparables derechos esenciales. Juntos
constituyen la garantía y defensa de otras libertades en las que se basa la
democracia”.
La Convención Americana sobre Derechos Humanos (C.A.D.H.) consigna lo
siguiente en su art. 13:
“Libertad de pensamiento y expresión.
1. Toda persona tiene derecho a la libertad de pensamiento y de
expresión. Este derecho comprende la libertad de buscar, recibir y difundir
informaciones e ideas de toda índole, sin consideración de fronteras, ya sea
oralmente, por escrito o en forma impresa o artística, o por cualquier otro
procedimiento de su elección.
2. El ejercicio del derecho previsto en el inciso precedente no puede
estar sujeto a previa censura sino a responsabilidades ulteriores, las que
deben estar expresamente fijadas por la ley y ser necesarias para asegurar:
a) el respeto a los derechos o a la reputación de los demás, o
b) la protección de la seguridad nacional, el orden público o la salud o
la moral públicas.
3. No se puede restringir el derecho de expresión por vías o medios •
indirectos, tales como el abuso de controles oficiales o particulares de papel
para periódicos, de frecuencias radioeléctricas, o de enseres y aparatos
usados en la difusión de información o por cualesquiera otros medios
encaminados a impedir la comunicación y la circulación de ideas y
opiniones.
4. Los espectáculos públicos pueden ser sometidos por la ley a censura
previa con el exclusivo objeto de regular el acceso a ellos para la protección
moral de la infancia y la adolescencia, sin perjuicio de lo establecido en el
inciso 2.
5. Estará prohibida por la ley toda propaganda en favor de la guerra y
toda apología del odio nacional, racial o religioso que constituyen
incitaciones a la violencia o cualquier otra acción ilegal similar contra
cualquier persona o grupo de personas, por ningún motivo, inclusive los de
raza, color, religión, idioma u origen nacional”.
En Junio de 1931, un fallo de la Corte Suprema Federal de EE.UU. consagró
definitivamente la libertad-de prensa en ese país, al decidir que nadie
puede impedir, a ningún título y por ningún motivo la publicación de
ninguna noticia, opinión o comentario, en cualquier medio de difusión,
cualesquiera sean los motivos y las personas involucradas. Esa sentencia
revocó otra del inferior en grado, la Corte Suprema de Mineápolis, Estado
de Minnesota, que había prohibido la continuación de publicaciones, en un
semanario local, de una campaña iniciada contra la corrupción de algunos
funcionarios municipales.
El art. 296 del Código Penal dice lo siguiente: “Será sancionado con reclusión
de 6 meses a 3 años y multa de 30 a 200 días, el que ilegalmente impidiere
o estorbare la libre emisión del pensamiento por cualquier medio de
difusión,' así como la circulación de un libro, periódico o cualquier otro
impreso”.
3. - LA LIBERTAD DE PRENSA
Hemos dicho que la libertad de expresión, complemento natural de la
libertad de pensamiento, se manifiesta en la palabra hablada y esvcrita a
través de todos los medios de comunicación.
La palabra escrita tiene mayor significación, por su permanencia, extensión
y difusión, que puede cubrir el ámbito universal y prolongarse a través de los
años. Desde que se inventó la imprenta y a medida que mejoraron sus
técnicas cobró gran importancia la palabra escrita en boletines, folletos,
revistas, periódicos, libros y diarios, todo lo cual constituye la prensa,
considerada ahora el alimento espiritual del pueblo, orientadora y
educadora de la opinión pública, controladora del poder y de los servicios
públicos, guardián de los derechos fundamentales y medio de cultura
popular. Se ha dicho que la prensa es el cuarto Poder del Estado, porque se
ocupa de todas las manifestaciones de la vida pública y vela por el
bienestar y el progreso de la nación, identificándose con el sistema
democrático de gobierno, cuyos objetivos contribuye a alcanzar. A este
respecto, la Declaración de Principios de la Prensa Libre expresa:
1. “El periodismo honrado, libre e independiente es la mejor contribución
a la paz en el mundo de naciones libres, habitado por hombres libres.”
2. “Sin libertad de prensa no hay democracia. La libertad de
pensamiento, su expresión hablada o escrita, son inseparables derechos
esenciales. Juntos constituyen la garantía y defensa de otras libertades en
las que se basa la democracia.”
3. “El ejercicio del periodismo es libre. Las prohibiciones, restricciones o
permisos para ejercerlo, sea que afecten a los propietarios, editores,
directores, colaboradores o empleados de una publicación, violan la
libertad de prensa.”
4. “Los regímenes políticos que no respeten o restrinjan la plena libertad
do prensa no son democráticos”.
4.- RESTRICCIONES A ESTE DERECHO
Respecto a la libre emisión del pensamiento tenemos que distinguir les
restricciones legales de las que no lo son. Entre las primeras, es necesario
mencionar los excesos u ofensas en la expresión, que constituyen delitos al
tenor del Código Penal y de la Ley de Imprenta de 1925. El Capítulo Unico
del Título IX del Código Penal (arts. 282 a 290) tipifica los delitos de
difamación, calumnia, propalación de ofensas, injurias, etc.', señalando
penas para cada caso.
La censura previa está prohibida en todas las constituciones
contemporáneas y en las declaraciones de derechos, por estimarse que es
una limitación abusiva de la libertad de expresión ya que de manera
arbitraria se decide lo que puede o no publicarse.
El art. 13 párrafo 2 de la Convención Americana de Derechos Humanos
(transcrito en el punto 2 de este Cap.), prohíbe asimismo la censura previa.
El derecho de réplica está reconocido en la mayoría de las legislaciones
para personas naturales o jurídicas, cuando éstas han sido aludidas en
publicaciones de prensa, radio y TV, o por cualquier otro medio, con noticias
o afirmaciones que dañan su reputación, honra o prestigio; que tergiversan
la verdad y pueden constituir delito de calumnia e injurias sancionadas por
el Código Penal.
Este derecho de réplica se ejercita de acuerdo a normas que pueden variar
en la forma según cada legislación. Nuestra Constitución tiene el art. 196.11,
y el art.62, inc. 3, de la Ley de.19 de Enero de 1925 obliga a los editores e
impresores a "publicar las reivindicaciones y defensa de las personas
ofendidas en el mismo periódico, cobrando media tarifa". Al respecto, Bielsa
anota lo siguiente:
"Este derecho se ha reglado en leyes especiales que naturalmente son
distintas en cada régimen, pero que en substancia contienen el lincamiento
siguiente: a).- Toda persona aludida o designada (aunque no haya sido
nombrada) en publicaciones periodísticas, y en manera. perjudicial para su
reputación u honor, en que se falsea, tergiversa o mutila conceptos, hechos,
etc., puede replicar en forma documentada o no; b).- La réplica o respuesta
debe hacerse en el mismo periódico y en la misma sección o página en que
se publicó el escrito ofensivo y con la misma extensión, gratuitamente; c).- El
director del periódico
debe publicar la respuesta en el término de 3 días, so pena de multa
pecuniaria e indemnizaciones de daños y perjuicios, y también debe
publicar luego la condena judicial".
El tercer párrafo del art. 12 de la Constitución de Chile de 1980 prescribe, al
respecto, que "toda persona natural o jurídica ofendida o injustamente
aludida por algún medio de comunicación social, tiene derecho a que su
declaración o rectificación sea gratuitamente difundida, en las condiciones
que la ley determine, por el medio de comunicación social en que esa
información hubiera sido emitida".
La constitución brasileña lo reconoce en su art. 5, y la Convención
Americana de Derechos Humanos en su art. 14, que dice:
1. Toda persona afectada por informaciones inexactas o agraviantes
emitidas en su perjuicio a través de medios de difusión legalmente
reglamentados y que se dirijan al público en general, tiene derecho a\
efectuar por el mismo órgano de difusión su rectificación o respuesta en las
condiciones que establezca la ley,
2. En ningún caso1 la rectificación o la respuesta eximirán de las otras
responsabilidades legales en que se hubiese incurrido.
3. Para la efectiva protección de la honra y la reputación, toda
publicación o empresa periodística, cinematográfica, de radio o televisión
tendrá una persona responsable que no esté protegida por inmunidades ni
disponga de fuero especial.
La Ley de Imprenta comienza diciendo que: "todo hombre tiene derecho de
publicarsus pensamientos por la prensa, sin previa censura, salvo las
restricciones establecidas por la presente ley". El art. 64 de esta ley advierte
que "en ningún caso podrá decretarse la clausura de una imprenta".
a) Responsabilidad.- La responsabilidad por las publicaciones de prensa
corresponda, en orden sucesivo, a los autores, los directores y los editores de
diarios, revistas y publicaciones periodísticas, cuyos nombres deben
consignarse en las primeras páginas so "pena de ser consideradcjs como
clandestinos".
b) Publicación.- La ley de 19 de Enero de 1925 determina que no hay
delito de imprenta sin publicación, entendiéndose realizada ésta cuando se
ha distribuido tres o más ejemplares impresos; son leídos por cinco o más
individuos; se pone en venta, se remite por correo o se fija en un lugar o
paraje público.
c) Delitos.-Reconoce'tres clases de delitos contra la Constitución, contra
la sociedad y contra las personas individuales y colectivas.
Delitos contra la Constitución.- Son los escritos que se dirigen a trastornar,
destruir o inducir a la inobservancia, en todo o en parte, de la Ley
Fundamental. Sobre el particular, esta ley especifica que no existe delito
contra la Constitución cuando se señala sus defectos o errores, o los de los
actos legislativos, administrativos o judiciales, con objeto de hacer conocer
la necesidad de su reforma.
Delitos contra la sociedad.- Los que comprometen la existencia o integridad
de la Nación o la exponen a guerra internacional; cuando se tiende a
trastornar la tranquilidad y el orden público; cuando se incita a la conmoción
y a la desobediencia a las leyes; cuando son publicaciones que provoquen
la perpetración de un delito o cuando la publicación es obscena o inmoral.
Delitos contra las personas individuales o colectivas.-
Existen cuando se las injuria directa o indirectamente, sean o no falsas las
impugnaciones injuriosas.
d) Jurado.- Siguiendo los postulados del Derecho Público clásico que
concibe que los delitos de opinión requieren también de un tribunal de
opinión para su juzgamiento, introduce el sistema del jurado para juzgar los
delitos de prensa. Empero la misma ley franquea la vía judicial ordinaria para
la querella de los delitos de injuria y calumnia. De ahí que los particulares
injuriados o calumniados por la prensa, pueden potestativamente ocurrir
ante los tribunales ordinarios de justicia o ante el jurado.
En cambio, los funcionarios públicos sólo pueden acudir ante los tribunales
ordinarios si se les injuria o calumnia personalmente;
pero deberán ocurrir necesariamente ante el jurado si quieren querellarse
por ataques de la prensa en su calidad de tales.
El jurado se compone de 40 individuos en las capitales de Departamento y
de 20 en las provincias. El nombramiento de jurado de prensa es una carga
pública personal y su función es inexcusable, con ciertas excepciones. Los
jurados son nombrados por los Consejos Municipales con la atribución de
conocer de los delitos de prensa. Presentada una denuncia o querella, el
Juez de Partido hace el sorteo de los jurados hasta 24, da los cuales, los 12
primeros que no fueren recusados, forman el tribunal. El Juez cita al Jurado
con señalamiento de día y hora para la realización del juicio de imprenta en
una sola audiencia.
c) Sanciones.- Las sanciones son impuestas en sentencias por el Juez de la
causa, siendo las penas generalmente pecuniarias, además de la
publicación de las vindicaciones, de la retractación y de la explicación.
La institución del jurado no se ha aplicado en Bolivia y ha caído
prácticamente en desuso.
5.- OTRAS RESTRICCIONES LEGALES
1 lomos visto que el párrafo 5 del art. 13 de la C.A.D.H. prohíbe la
propaganda en favor de la guerra, del odio nacional, racial y religioso, lista
prohibición se basa en los postulados pacifistas de las Naciones Unidas y de
los organismos regionales, así como en los principios de universalidad délos
derechos déla personas que deben ser reconocidos sin discriminación por
raza, nacionalidad, sexo, color, religión o condición; principio recogido en
las declaraciones de derechos y en las constituciones políticas de los
Estados.
6.-CODIGO DE CONDUCTA EDITORIAL
Preocupados por el sensacionalismo periodístico que se ceba sobre la
intimidad de las personas, y particularmente de la familia real británica,
editores de ese país proyectaban establecer un Código de Conducta para
evitar "la promulgación de leyes restrictivas de la libertad de prensa". El
Código dispone el respeto a la intimidad y advierte que la intromisión
periodística en la vida privada "debe tener siempre una justificación de
interés público". (2)
7. - LA PRIMERA ENMIENDA DE LA C.P.E. DE E.U.A
Grupos.sobre derechos humanos en Estados Unidos y en otros países hacen
campaña para que se reprima la excesiva liberalidad en el lenguaje,
particularmente con referencia a la pornografía y a la prédica del odio,
sosteniendo que los derechos de los grupos tienen precedencia sobre los
individuales. Combaten a la pornografía "no por obscena, sino porque
degrada y viola los derechos humanos de las mujeres". Sin embargo, en 1986
la Suprema Corte Federal, basada en la Primera Enmienda a la Constitución
(mencionada en el punto 2 de este capítulo) se negó a revisar la decisión
de una corte de apelaciones que anuló en Indianápolis un decreto que
prohibía la pornografía. El mismo Tribunal Supremo Federal de los Estados
Unidos de América dejó sin efecto, en Julio de 1990, una ley que prohibía la
profanación de la bandera estadounidense, a raíz de varios incidentes en
los que se quemó públicamente dicha enseña. El juez Supremo Williams J.
Brennan Jr. fundamentó su opinión en que si existe un principio sólido
implícito en la Primera Enmienda es que el gobierno no puede prohibir la
expresión de una idea simplemente porque la sociedad encuentre que la
idea en si misma es ofensiva o desagradable". Este razonamiento se aplica
también a la pornografía.
Pese al cuidado que tienen los jueces norteamericanos en proteger el
santuario de la libertad de expresión (la Primera Enmienda), se afirma que la
misma es violada continuamente y que la censura política, religiosa, moral y
militar amenaza a la literatura, la danza, la ópera, la cinematografía y las
artes visuales. "Aun cuando sea este año el bicentenario de la Primera
Enmienda de la Constitución de los Estados Unidos, relativa a la libertad de
expresión, la censura so está sintiendo con más fuerza que nunca en este
país, al punto de que 1990 podría ser llamado el año del censor", escribe
Dolores Barclay, quien cita numerosos ejemplos de su aserto en el curso de
la historia. (4)
8. -RESTRICCIONES ILEGALES
Son numerosas las restricciones ilegales contra la. libertad de expresión,
principalmente las que ocurren de manera abusiva y prepotente durante los
gobiernos de fuerza. Dichas restricciones son directas e indirectas. Entra las
primeras están la persecución, arresto, confinamiento y destierro de
periodistas; el ataque armado a oficinas y talleres de prensa; el
"empastelamiento" de los mismos; la clausura de periódicos, etc:
Entre las restricciones ilegales indirectas están: amenazas, advertencias,
presiones morales y políticas; restricciones y/o supresiones de los permisos de
importación de papel de imprenta, maquinaria, materiales, equipo y/o
repuestos; restricciones o denegación de publicidad de parte de los órganos
de la administración pública, etc. (5)
El párrafo 3 del art. 13 de la C.A.D.H., transcrito en el punto 2 de este Cap.,
prohibe estas restricciones ilegales.
I-a auto-censura ocurre en determinados momentos, cuando los editores,
directores y periodistas de los medios de comunicación se sienten
presionados directa o indirectamente desde círculos oficiales o por personas
influyentes, y para evitar ataques a su integridad física, a ana centros de
tetbajo, o represalias perjudiciales, prefieren no
publicar lo quo consideren no será del agrado de dichos círculos.(6) NOTAS
(1) CARRASCO, José.- "Estudios Constitucionales".- Tomo TV, p. 381.
(2) Diario "Presencia" de La Paz, 24-X11-89.
(3) Diario EXCELSIOR, Ciudad de México, 21-7-90. El fallo del tribunal
Supremo deE.U.A. que implícitamente resguardó el derecho a
profanar públicamente la bandera de ese país, en nombre de la
Primera Enmienda, pilede parecer "chocante" a la opinión del
ciudadano común, pero fue apoyado por el 51% de los lectores de
TIME INTERNATIONAL (24-7- 90), contra un 43% que lo reprobaron. 6%
de esos lectores estuvieron indecisos.
(4) Diario "Los Tiempos", Cochabamba, 17-10-90.
(5) La Cámara Departamental de La Paz de Medios de Comunicación
Social, en un comunicado publicado en varios diarios nacionales al 17-1090,
denunció "reiterados atentados y restricciones a la libertad de expresión y
de prensa", declarando que "el Poder Ejecutivo y personas del gobierno... en
el intento de coartar y limitar la acción informativa... llegando incluso al
insulto y veladas amenazas...”, etc.
(6) La Asociación de Periodistas de'La Paz emitió un comunicado,
publicado el 20-9-90 en el diario "PRESENCIA" de La Paz, en el que
criticaba la auto-censura que se imponían algunos medios de
comunicación con referencia a un caso en el que "una conjura iba a
condenar a 15 años de cárcel a una persona inocente"; noticia que
"fue silenciada en varios medios de difusión... porque "personas
vinculadas con esa conjura llamaron a varios medios para impedir su
difusión".
CAPÍTULO XXI
DERECHO AL TRABAJO Y RÉGIMEN SOCIAL
I. TRABAJO
1. -CONCEPTO
El art. 46 dice que "toda persona tiene derecho al trabajo digno, con
seguridad industrial, higiene y salud ocupacional (...) a una fuente laboral
estable ... " Agrega que "se prohíbe toda forma de trabajo forzoso..."
Dice Rafael Bielsa que "el derecho de aplicar la libertad personal al trabajo,
es decir, las energías físicas e intelectuales, como esfuerzo consciente y
voluntario del hombre, para crear la utilidad a fin de proveer a sus
necesidades, es un principio, no de gobierno, sino de orden natural humano,
y de convivencia social, reconocido por la Constitución", (l) Como este
derecho emana de la esfera de la libertad, como atributo de la persona
individual libre que necesita subsistir y emplear sus energías en una actividad
admitida y regulada por la ley, no basta que el trabajo sea tal, sino que ha
de ser lícito, sano, seguro y provechoso al bien común.
El derecho al trabajo del cual emana la libertad de elegir profesión,
ocupación u oficio, es uno de los derechos fundamentales económicos y
sociales que reconoce y protege la Constitución. De este derecho deriva
también el de trabajar a domicilio, contemplado en la Ley
General del Trabajo, que parte del hecho de que el domicilio es
inviolable'según el art. 25.1 de: la Constitución.
2. -ANTECEDENTES HISTÓRICOS
A través de las edades, el trabajo ha sido considerado por el hombre como
una carga que debe sobrellevar para subsistir. Venimos al-mundo por un
designio anterior y superior a nosotros, y estamos forzados a vivir por una ley
natural que no puede quebrantar nuestro sentimiento religioso o nuestra
voluntad, salvo excepciones. En estas condiciones, no nos queda otro
remedio que trabajar. El trabajo aparece así impuesto como un designio
incontrastable, y no como algo decidido por nuestra voluntad. Aqui radica
el origen filosófico de la inevitabilidad del trabajo, por. el cual aparece
como algo impuesto y no elegido.
El origen mismo de la palabra laborviene de labare (latín) vacilar bajo una
carga pesada, y laborare (trabajar), penar, realizar un esfuerzo. La palabra
francesa besogne (trabajo) viene de bcsoin (necesidad).
En los tiempos primitivos el trabajo era predominantemente agrícola y
estaba a cargo de pobres campesinos que labraban el suelo con
herramientas arcaicas. La civilización griega, dice Jaccard, fue la única que
en la antigüedad dio a la ciencia y al trabado un lugar de 'primacía. En "Los
Trabajos y los Días", Hesíodo nos dice que "el hombre ocioso resulta odioso,
tanto para los dioses como para los hombres; es el insecto sin aguijón, el
abejón ávido que engorda sin trabajar, con el trabajo de las abejas". Pero
cuando en Grecia se generalizó la esclavitud como consecuencia del
acaparamiento de tierras y de las guerras al exterior, las clases dirigentes
propugnaron "el ocio para unos cuantos, el trabajo para los demás". En esta
forma, como había ocurrido antes en la India y en Egipto, en Grecia se
despreció al trabajador, y esta actitud se convirtió en un sistema político-
filosófico. Plutarco dice que un Esparta "una de las más bellas y afortunadas
instituciones de Licurgo fue el gran ocio de que hizo gozar a los ciudadanos
al prohibirles que se ocuparan en cualquier arte mecánica". Platón dice en
su República que "es propio de un hombre bien nacido despreciar el
trabajo". Para Aristóteles "todas las ocupaciones manuales carecen de
nobleza; es imposible que el que cultiva la virtud pueda vivir la vida de un
obrero o de un jornalero". La palabra griega Scholé significa ocio, estudio y
escuela a la vez.
Este desprecio uniforme de los pensadores y filósofos helenos por el trabajo
manual se explica en la defensa de los intereses y privilegios de la clase a
que ellos pertenecían. "Les asusta el ascenso de las clases populares en la
ciudad ateniense", dice un historiador y agrega: "...fue la abundancia
extraordinaria de mano de obra, más aun que la propia institución de la
esclavitud, la causa principal del envilecimiento de la condición de los
trabajadores".
En Roma sucede algo similar. Los patricios adoptan respecto al trabajo igual
actitud de menosprecio que sus antecesores griegos y orientales.
"Vulgar es el arte de los obreros que trabajan con sus manos", dice Séneca.
"Todos los artesanos se dedican a ocupaciones mezquinas", afirma Cicerón.
El cristianismo trata de reivindicar un sitio de honor para el trabajo. En la
Biblia, el trabajo es una orden de Dios. En la doctrina do Cristo, el trabajo
tiene valor cuando es inspirado por un sentimiento de obediencia a Dios.
"Cualquier trabajo que hagáis -recomienda San Pablo- hacedlo de corazón,
como obedeciendo al Señor y no a los hombres". Sin embargo, algunas
expresiones de las Santas Escrituras liaren considerar el trabajo como una
penosa imposición. "La tierra será maldita por tu causa -dice el Creador a
Adán-; con trabajo comerás de ella todo el tiempo de tu vida; te dará
espinas y abrojos y comerás tu pan con el sudor de tu frente hasta que
vuelvas ala tierra, pues de ella has sido tomado" (Génesis 3; 17).
La servidumbre es la forma dominante del trabajo durante la Edad Media.
Al igual que los esclavos en la antigüedad, los siervos habían nocido para
trabajar y los señores para mandar. En el campo filosófico, Ponto Tomás de
Aquino elogia en la SUMA TEOLOGICA la vida contemplativa, en
contraposición a la vida activa. La contemplación libera al hombre, es
divina, y le distingue de los animales, según Santo Tomás.
Con el ascenso de la burguesía en los siglos XVII y XVIII aparece un nuevo
tipo de hombre, esforzado, duro consigo mismo y con los demás, y una moral
burguesa que hace la apología del trabajo. "El hombre no ha nacido para
el reposo", dice Pangloss, personaje de Voltaire, quien en otro lugar dice: "El
trabajo aleja de nosotros tres grandes males: el aburrimiento, el vicio y la
necesidad". Rousseau afirma: "Rico o pobre, todo ciudadano ocioso es un
bribón". -
Esta moral fue el resultado de las relaciones puestas en juego por el
artesanado, primero, las corporaciones luego y los comerciantes después,
en un largo proceso de liberación de las fuerzas económicas. El trabajo
individualizado fue formando desde abajo una clase socialla burguesía- que
muy pronto habría de conquistar el poder económico y político gracias al
trabajo de sus integrantes.
Se ha hecho notar, sin embargo, que la moral burguesa adoleció pronto de
una doble postura: mientras por un lado ensalzaba el trabajo, el esfuerzo
individual y el progreso económico, por el otro despreciaba la masa de
trabajadores que eran su base de sustentación. Guizot había dicho:
"Enriqueceos por medio del trabajo, el ahorro y la probidad". Pero todos se
dieron a la tarea de enriquecerse y fueron pocos quienes lo hicieron con
probidad. (2)
3. - EL TRABAJO: UN DERECHO Y UN DEBER
La Revolución Francesa fue, como es sabido, obra de la burguesía. No es
extraño, pues, que en la Declaración de los Derechos del Hombre y del
Ciudadano se considere al trabajo como un derecho, y ya no como una
penosa obligación. Su art. 6o dice. "Todos los ciudadanos, siendo iguales a
sus ojos (de la ley) son igualmente admisibles a todas las dignidades, puestos
y empleos, sin otra distinción que la de sus talentos y virtudes". Es la primera
vez que en la historia de la humanidad se habla este lenguaje, después de
milenios de esclavitud, servidumbre y menosprecio al trabajo. Ya en 1776 el
ministro de Luis XVI, Turgot, se había adelantado con este pensamiento:
"Dios, al darle al hombre necesidades, hizo del derecho a trabajar la
propiedad de todo hombre, esta propiedad es la primera, la más sagrada y
la másimprescriptible de todas". Pero Turgot fue destituido de su ministerio y
nada pudo avanzar en esta materia.
La Declaración de la Revolución Francesa fue adoptada por los textos
constitucionales y de Derecho Público modernos. La Declaración
Americana de los Derechos y Deberes del Hombre dice en su art. XVI: "Toda
persona tiene derecho al trabajo dentro de su capacidad y posibilidades...".
El art. 23 de la Declaración Universal de los Derechos del Hombre contiene
una prescripción similar.
La Constitución española de 1931 decía en su art. Io que "España es una
república de trabajadores de toda clase". Las Constituciones de Colombia
(art.25), Costa Rica (art. 56) y Guatemala (art. 48), consideran al trabajo una
obligación social, y la última agrega que la vagancia es punible. El art. 6 del
Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales (PIDESC)
expresa:
1. Los Estados Partes en el presente Pacto reconocen el derecho a
trabajar, que comprende, el derecho de toda persona de tener
oportunidad de ganarse la vida mediante un trabajo libremente escogido o
aceptado, y tomarán medidas adecuadas para garantizar este derecho.
2. Entre las medidas que habrá de adoptar cada uno de los Estados
Partes en el presente Pacto para lograr la plena efectividad de este derecho
deberá figurar la orientación y formación técnicoprofesional, la preparación
de programas, normas y técnicas encaminadas a conseguir un desarrollo
económico, social y cultural constante y la ocupación plena y productiva,
en condiciones que garanticen las libertades políticas y económicas
fundamentales de la persona humana.
El art. 7 del mismo so refiere a las condiciones de trabajo, salario y descanso,
en estos términos:
"Los Estados partes en el presente Pacto reconocen el derecho de toda
personaal goce de condiciones de trabajo equitativas y satisfactorias que
le aseguren en especial:
a) Una remuneración que proporcione como mínimo a todos los.
trabajadores:
i) Un salario equitativo e igual por el trabajo de igual valor, sin
distinciones de ninguna especie; en particular, debe asegurar a las mujeres
condiciones de trabajó no inferiores a las de los hombres, con salario igual
por trabajo igual; :
ii) Condiciones de existencia dignas para ellos y para sus familias
conforme a las disposiciones de presente Pacto;
b) La seguridad y la higiene en el trabajo;
c) Igual oportunidad para todos de ser promovidos dentro de su trabajo
a la categoría superior que les corresponde, sin más consideraciones
que los factores de tiempo de servicio y capacidad;
d) El descanso, el disfrute del tiempo libre, la limitación razonable de las
horas de trabajo y las vacaciones periódicas pagadas, así como la
remuneración de los días festivos".
4. -DELITOS CONTRA LA LIBERTAD DE TRABAJO
El trabajo como un derecho no sólo está consagrado por la Constitución,
sino que el capítulo IV del título X del Código Penal (arts. 303 al 307) tipifica
los siguientes delitos contra la libertad de trabajo, y los sanciona con penas
de privación de libertad: actos que impiden, obstaculizan o restringen el
trabajo, profesión, oficio, comercio o industria; el monopolio de trabajo;
violencias y amenazas por empleados y obreros; coacciones ejercitadas por
patrones, empresarios o empleados.
II. RÉGIMEN SOCIAL
El Régimen Social fue introducido en la constitución de 1938, conjuntamente
con otros principios de orden social, económico, agrario y cultural que
responden al espíritu 'del constitucionalismo social inspirado en los principios
de justicia social y de economía pública.
Este Régimen se basa en el concepto de que las leyes y el contrato del
trabajo son de orden público y no de derecho privado, como los
consideraba el Estado liberal individualista que emergió de la Revolución
Francesa. Declara que el trabajo y el capital gozan de la protección del
Estado, y que la ley regulará sus relaciones en todos sus aspectos,
correspondiendo al Estado crear condiciones para el pleno empleo,
estabilidad en el trabajo y remuneración justa (arts. 46 a 50). Con este
propósito, advierte que los derechos reconocidos por ley en favor de los
trabajadores son irrenunciables, por lo mismo que son de orden público, y
que son nulos los acuerdos o convenciones en contrario o que tiendan a
burlar sus disposiciones (art. 48.III).
CAPÍTULO XXII
DERECHOS DE REUNIÓN, ASOCIACIÓN YPETICIÓN
I. GENERALIDADES
Hay quienes consideran estos tres derechos como eminentemente políticos,
por cuanto su ejercicio -dicen- tiene directa relación con los asuntos de
gobierno y de la administración. Sin embargo, hay que hacer notar que los
tres derechos corresponden a todos los habitantes de un país (arts. 21.4 y
24.), y no sólo a los ciudadanos; por lo que se trata más bien de derechos
fundamentales en sentido general, siendo también políticos en
determinadas circunstancias.
Los tres derechos pueden ser ejercitados también en el ámbito privado,
como expresiones de la libertad personal y de los derechos individuales;
pero es innegable que su importancia sobresale en el campo político o
público, donde persiguen propósitos de bien común.
Los tros derechos -reunión, asociación y petición- aparecen directamente
relacionados entré sí, porque la asociación presupone reunión, ambas
süponen libertad de opinión y suelen formularse peticiones cuando se
ejercitan en los campos públicos o políticos.
II. DERECHO DE REUNIÓN
El derecho de reunión emana de la esfera de la libertad y es una forma do
la libertad de locomoción y de la libertad de opinión, pues para reunirnos
nos damos cita en un lugar .al que concurrimos por nuestros propios medios
y de nuestra voluntad.
"El derecho de reunión consiste en comparecer a un lugar determinado dice
José Carrasco- mediante acuerdo previo, para deliberar sobre uno o varios
asuntos concretos".
El derecho de reunión pública o política supone también el de
manifestación, especialmente en países donde las instituciones
democráticas funcionan normalmente. A este respecto el art: XXI de la
Declaración Americana de los Derechos y Deberes del Hombre, expresa:
"Toda persona tiene el derecho de reunirse pacíficamente con otras, en
manifestación pública o en asamblea transitoria, en relación con sus
intereses comunes de cualquier índole".
El art. 15 de la C.A.D.H. reconoce el derecho de reunión pacífica y sin armas,
que sólo puede limitarse en interés de la seguridad nacional y del orden
público.
Nuestra Constitución no habla del derecho de manifestación pública y
pacífica. Sin embargo, se entiende que en las. formas de democracia
directa y participativa, asamblea y cabildo (art. ll-II.l) se incluye el derecho
a manifestar. Es claro que todas las personas tienen el derecho a manifestar
públicamente (en calles o. plazas) sus opiniones, peticiones, reclamaciones
y protestas, como un complemento de los derechos de reunión y de
petición, y sin otra condición que la manifestación sea pacífica y sin armas,
que no altere el orden y la tranquilidad pública, y que se guarde el respeto
debido a las autoridades, personas e instituciones.
El art. 37 de la Constitución de Panamá, de 1980 expresa: "Las
manifestaciones o reuniones al aire libre no están sujetas a permiso y sólo se
requiere para efectuarlas aviso previo a, la autoridad administrativa local,
con anticipación de 24 horas". El art. 79 de la Constitución de Honduras de
1983 dispone que "toda persona tiene derecho a reunirse con otras,
pacíficamente y sin armas, en manifestación pública o en asamblea
transitoria, en relación a sus intereses comunes de cualquier índole, sin
necesidad de aviso o permiso especial". El art. 37 de la Constitución de
Colombia dice que "toda parte del pueblo puede reunirse y manifestarse
pública y pacíficamente. Sólo la ley podrá establecer de manera expresa
los casos en los cuales se podrá limitar el ejercicio de este derecho". Las
reuniones políticas en asambleas y manifestaciones han sido siempre objeto
de limitaciones, a menudo violentas. En Francia, las reuniones de los clubes
políticos eran tumultosas, y participaban en las decisiones de gobierno
durante la Revolución, que en 1791 decidió autorizar solamente las
reuniones pacíficas y sin armas. La Convención reconoció el derecho a
reunirse sin restricciones, y en todas las ciudades de Francia se organizaron
clubes que se imponían a los gobiernos locales, ejerciendo el poder público.
"Cuando la autoridad resistía -dice Carrasco- se invocaba y se ejercitaba el
derecho de insurrección. Robespierre recurrió entonces a una medida
violenta: suprimió las reuniones populares. El Directorio fue más lejos: decretó
la pena de muerte para los que organizaran clubes o reuniones políticas. La
Constitución del año VIII dejó en pie esa disposición.
Tardó mucho en restablecerse el derecho a reunión y se refería simplemente
a los derechos políticos, porque se concedía sólo a los ciudadanos y no a
todos los estantes y habitantes del país".
El derecho de reunión está limitado por las leyes que resguardan el orden
público, la paz social, la moral y el interés general. Es decir que no puede
usarse este derecho para fines que no sean pacíficos y de bien común. En
nuestra legislación no se requiere autorización previa para reunirse, salvo
durante la vigencia del Estado de Sitio, cuando por autos de buen gobierno
prefecturales se restringe o se suprime este derecho.
III. DERECHO DE ASOCIACIÓN
Este derecho "consiste en la facultad que tienen las personas a poner en
común sus bienes, sus valores, su trabajo, su actividad, sus fuerzas individuales
o cualesquiera otros derechos para un fin desinteresado o no, intelectual,
moral, económico, artístico, recreativo o de beneficencia", (l) "Si algún
derecho personal debe garantizarse es éste -dice Bielsa-, sin duda, pues
tiene más importancia que el de reunión, no sólo por la inclinación natural
que el hombre tiene hacia la forma de sociedad y de asociación ya que la
unión con otros que tienen también vocación hacia los mismos intereses
pecuniarios y morales le permite obtener ventajas que aisladamente no
tendría, sino porque es un medio de lograr la REALIZACIÓN DE FINES
DETERMINADOS bajo las protección jurídica que la institución tiene". (2)
El derecho de asociarse emana también de la esfera de libertad, pues
complementa la libertad de reunión, de expresión y de trabajo. Este
derecho es relativamente nuevo, porque durante muchos siglos imperó la
agremiación o colegiación forzosa en nombre de la defensa de los intereses
comunes de los agricultores, comerciantes o artesanos, quienes contribuían
financieramente y se sometían a los estatutos de sus respectivas
organizaciones, llámense éstas "Sreni" en la India, colegios en Roma, guildas
en las ciudades escandinavas y germánicas, gremios, corporaciones o
cofradías en la Edad Media. Es precisamente en la Edad Media que las
corporaciones intervienen en todos los aspectos de la vida social, hasta que
Turgot, ministro de Luis XVI, las abolió por edicto en 1776. La Revolución les
dio el golpe de gracia cuando la asamblea de los Estados Generales
declaró el 4 de Agosto de 1789 que el trabajo era libre y en 1791 la Ley
Chapeller abolió toda forma de asociación, no sólo la coactiva, por ser
contraria a la libertad individual, sino también las voluntarias. La Declaración
Americana de los Derechos y Deberes del Hombre y la Declaración Universal
de los Derechos Humanos dicen, respectivamente:
"art. XXII.- Toda persona tiene el derecho de asociarse con otras para
promover, ejercer y proteger sus intereses legítimos de orden político,
económico, religioso, social, cultural, profesional, sindical o de cualquier otro
orden".
"art. 20.- Toda persona tiene el derecho a la libertad de reunión y de
asociación pacíficas.
Nadie podrá ser obligado a pertenecer a una asociación".
El art. 16 de la C.A.D.H. dispone:
1. "Todas las personas tienen derecho a asociarse libremente con fines
ideológicos, religiosos, políticos, económicos, laborales, sociales, culturales,
deportivos o de cualquier otra índole.
2. El ejercicio dé tal derecho sólo puede estar sujeto a las restricciones
previstas por la ley que sean necesarias en una sociedad democrática, en
interés de la seguridad nacional, de la seguridad o del orden públicos, o
para proteger la salud o la moral públicas o los derechos y libertades de ios
demás.
3. Lo dispuesto en este artículo no impide la imposición de restricciones
legales, y aun la privación del ejercicio del derecho' de asociación, a’los
miembros de las fuerzas armadas y de la policía".
1 .-LA ASOCIACIÓN EN LAS PROFESIONES LIBERALES
Se define estas profesiones como "las que se ejercen sin relación de
dependencia de patrón, sin salario, sin sujeción a instrucciones (que no sean
las de la propia idoneidad), en el modo de obrar profesionalmente, es decir
que se ejercen con cierta autonomía funcional". (3)
Los colegios profesionales (de abogados, médicos, odontólogos, ingenieros,
etc.) tienen por objeto resguardar la ética profesional, cooperarse en el
desempeño profesional, defender sus intereses legítimos, realizar tareas de
investigación, información y estudio, etc. En principio, el derecho de
asociación en el ámbito privado es libre y nadie puede ser obligado a
asociarse o a no hacerlo. Sin embargo, como las asociaciones profesionales
son de orden público (aunque no estíllales), por los fines que persiguen, se
admite en algunas legislaciones la colegiación forzosa en las mismas, como
lo dispone el D.L do 19 de Julio de 1979, llamado Ley de la Abogacía, en sus
art. 3 y 6, inc. 5, que previene que para ejercer la profesión los abogados
deban estar matriculados y tener sus cuotas pagadas al día.
A propósito do esta asociación obligatoria, la Corte Suprema de Justicia de
la República Argentina la ha confirmado en varios fallos
fundados en que "el Estado tiene facultad para reglar y limitar el ejercicio de
las profesiones por causa de utilidad general; y que la reglamentación de su
ejercicio no altera un derecho cuando sólo se le impone condiciones
razonables...". La misma Corte parte, en este caso, del principio de
solidaridad y del concepto de que "el trabajo humano... tiene características
que... exceden el marco del mero mercado económico y que se apoyan
en principios de cooperación, solidaridad y justicia, también
normativamente comprendidos en la Constitución Nacional". (4) Sin
embargo, un juez de primera instancia de la ciudad de Buenos Aires declaró
en 1985 la inconstitucionalidad de la Ley 23.187 que imponía a los abogados,
de esa ciudad la asociación obligatoria al Colegio Público de Abogados de
la Capital Federal, por entender, como alegaban los impugnadores, que
dicha ley violaba los siguientes derechos fundamentales: de trabajar, de
publicar sus ideas por la prensa sin censura previa; de usar y disponer de su
propiedad; de asociarse con fines útiles; de sindicalizarse libre y
democráticamente; la igualdad de los habitantes ante la ley y la
inviolabilidad de la propiedad.
En diciembre del mismo año, la sala I de la Cámara en lo Contencioso
Administrativo Federal confirmó el fallo del juez mencionado, fundándose en
que:
"En síntesis como en el caso no se está frente a una restricción razonable en
aras del bien común por motivos de seguridad social o asistencia previsional,
tampoco se justifica requerir una afiliación obligatoria a una asociación
cuyas funciones se limitan a la representación de un grupo de profesionales
y al gobierno de la matrícula respectiva, puesto que con ello sólo se atiende
intereses sectoriales despojados del objetivo público que resulta menester
para admitir tamaña limitación a las garantías tuteladas en el art. 14 de la
Constitución, según lo ha definido la Corte Suprema. Por consiguiente,
corresponde concluir que la asociación obligatoria al Colegio Unico de
Abogados de la Capital Federal instituido por la ley 23.187 como condición
para ejercer la profesión en el ámbito de esta ciudad, vulnera el art. 14 de
la Constitución Nacional, motivo por el cual deben ser relevados de ellas los
sectores (art. 18) así como de las consecuencias que de tal exigencia se
derivan; en especial, aquellas referidas a la emisión del voto (arts. 24, 27 y
30), el pago de una cuota anual (art. 53) y a ser representados por dicha
entidad (art. 20, inc. c.)". (5)
La diferencia de criterio entre las jurisprudencias transcritas de la Corte
Suprema y de la Cámara en lo Contencioso Administrativo de la República
Argentina, sobre el derecho de asociación, proviene, según se ve, de que el
Colegio Público de Abogados de la Capital Federal se ocupa solamente de
la representación de un grupo de abogados y del gobierno de la matrícula,
y no así de labores de seguridad social ni de asistencia provisional para los
afiliados, que darían a la institución una finalidad de orden público basada
en el interés social común de los colegiados.
La jurisprudencia comparada considera al ejercicio de las profesiones
liberales como un servicio público. Una decisión del Consejo de Estado
francés de 2 de abril de 1.943 decía:
"... el legislador ha querido hacer de la organización y del control de la
profesión un servicio público que confiere a las decisiones de organismos
profesionales, cuando se trata de la ejecución de dicho servicio, el carácter
de actos administrativos”.
Los colegios profesionales en Francia tienen tres atribuciones: de
representación, de organización y de disciplina. En cuanto a la primera,
representan a la profesión ante los poderes públicos, que pueden
consultarles sobre asuntos de su competencia. Respecto a la disciplina, los
colegios establecen sus códigos de ética, que están sometidos a controles
más o menos estrictos por parte del Estado, y según los cuales ejercen una
jurisdicción especial para sancionar las faltas de los agremiados. Estas
sanciones pueden llegar hasta la suspensión definitiva del ejercicio
profesional.
La Corte Suprema de Justicia de Venezuela, por su parte, en una decisión
de 22 de septiembre de 1.987, decía:
para el derecho moderno los organismos profesionales se sitúan en la
frontera del derecho público y del derecho privado... y que aun cuando las
directivas de los colegios profesionales no constituyen establecimientos
públicos, son ellas las encargadas de participar en la ejecución de un
servicio público, y, en consecuencia, sus decisiones reglamentarias e
individuales constituyen actos administrativos sometidos a la competencia
de la autoridad administrativa” (7)
Las sociedades y asociaciones deben obténer personalidad jurídica y
aprobación de sus estatutos de acuerdo al- Código Civil.-(arts. 58 al 61).
D.S. No. 0100, de 29 de Abril de 2.009.- En contra de la legislación y
jurisprudencia citados precedentemente, el gobierno dictó el D.S.
mencionado, por el que se centralizan en el Ministerio de Justicia el registro
y la matrícula de los profesionales abogados, como único requisito para el
ejercicio profesional; se dispone que la afiliación de los abogados a los
colegios y gremios será voluntaria; se suprime el cobro que realizan los
colegios de abogados "por el sellado, timbres y valorados en memoriales de
trámites, demandas, denuncias, querella o peticiones nuevas..."
IV. DERECHO DE PETICIÓN
1. -CONCEPTO E IMPORTANCIA
Todas las personas, con excepción de los militares, que deben hacerlo por
conducto regular, pueden dirigirse a los poderes públicos, en forma
individual o colectiva, para exponer sus peticiones, quejas, opiniones, etc.,
sobre materias de interés público o privado. Esta facultad es distintiva del
Estado de Derecho que impera en el sistema democrático de gobierno, en
el que el pueblo, titular de la soberanía, delega ésta en sus representantes.
Se ejercita este derecho por escrito, generalmente, aunque también puede
hacérselo oralmente; en forma pacífica y en términos respetuosos, ante
cualquier autoridad, de los tres poderes.
En la práctica no se usa este derecho, debido, dice Bielsa, "a la función
sustitutiva que la prensa diaria tiene en las democracias... que es un medio
de peticionar públicamente, y en general y de manera más práctica". El
mismo autor agrega que "huelga decir que para ello es necesario que haya
libertad de prensa". (8)
Las "cartas abiertas" que periódicamente registra la prensa, como avisos
pagados, son otras tantas peticiones dirigidas al Presidente de la República
y altos funcionarios del Estado, denunciando abusos o denegaciones de
justicia, y pidiendo las garantías de Ley.
2.-ANTECEDENTES HISTÓRICOS
Este derecho se originó antes de la Carta Magna. En este documento, a
cambio de la libertad de los barones, el Rey prometió respetar determinados
derechos considerados básicos ahora; de lo contrario, cuatro barones eran
encargados de presentar su queja al soberano y de pedirle se subsanará el
agravio. En otras palabras, los barones presentaban una petición al Rey,
redactada en términos respetuosos. En los siglos posteriores se extendió este
derecho a otras clases sociales, incorporándose en el constitucionalismo
inglés. El parlamento presentaba sus leyes como peticiones, para que fuesen
aprobadas por la corona (recuérdese la Petición de Derechos (1.628) y el Bill
de Derechos (1.689). Dice Carrasco que "este derecho fue prácticamente
establecido con el juzgamiento de siete obispos anglicanos que presentaron
al rey Jaime II una petición muy respetuosa contra la embajada que
constituyó ante el Romano Pontífice. Era la primera vez que un monarca del
Reino Unido se inclinaba a los pies del Primado de Roma. Sancroft, arzobispo
de Cantuaria, entregó la petición que formularon el y sois de sus colegas
contra esos actos que herían los sentimientos y loa bríos del pueblo inglés. El
rey se inmutó, los encerró en la Torre
de Londres y los sometió a juicio. El jury los absolvió entre las simpatías y
aclamaciones de toda la opinión". (9)
En Francia el derecho no fue reconocido por la monarquía absoluta hasta
que la Revolución lo introdujo en forma tumultuosa, pues dio lugar a escenas
violentas y en la Convención los peticionarios discutían con los diputados e
imponían su voluntad. Es por esto que las Constituciones modernas exigen
que las peticiones sean escritas y respetuosas, dice Carrasco.
La Declaración Americana de los Derechos y Deberes del Hombre dice en
su art.' XXIV: "Toda persona tiene derecho a presentar peticiones respetuosas
a cualquier autoridad competente, ya sea por motivo de interés general, ya
de interés particular, y el de obtener pronta resolución". NOTAS
(1) ORBAN, Cit. por Carrasco, José. Ob. cit.
(2) BIELSA, Rafael-Ob. cit.
(3) Ibídem.
(4) VANOSSI, J.R.- Ob cit. pp. 384-386.
(5) Noticia del diario "CLARIN" de la ciudad de Buenos Aires, de 21-12-85
y comentario editorial de "LA PRENSA" de la misma ciudad, de 26-12-
85.
(6) RIVERO, Jean, y WALINE, Jean.-DROIT ADMINISTRATIF.18°-
edición.DALLOZ, París, Francia, 2.000, pp. 498 y ss.
(7) Cita en Revista de la Facultad de Derecho de la Universidad Católica
ANDRES BELLO, N°- 50, septiembre 1.996.h Caracas, Venezuela.
(8) Ob. cit.
(9) Ob. cit.
CAPÍTULO XXIII
LIBERTAD DE COMERCIO E INDUSTRIA
1. -GENERALIDADES
El art. 47.1, de la Constitución establece que toda persona tiene de-recho
de "dedicarse al comercio, a la industria o a cualquier actividad económica
lícita, en condiciones que no perjudiquen al bien colectivo". Es otro derecho
que emana de la esfera de la libertad individual, y particularmente de la
libertad de trabajo, una de cuyas manifestaciones es. La libertad de
comercio e industria, que es otro de los principios del Estado de Derecho
burgués proclamado por la Revolución Francesa, dio origen a la revolución
industrial que ha transformado el mundo con el progreso técnico y material
que caracteriza a la civilización contemporánea.
Sabido es que la burguesía, como clase social, surgió en los burgos de la
Edad Media, al amparo de ciertas libertades que la vida en los municipios
fue creando para el individuo, y principalmente debido a que la artesanía
promovió la actividad comercial que dio lugar al nacimiento de una clase
acomodada en bienes mobiliarios, en contraposición a la riqueza territorial
de los señores feudales. Los artesanos se agrupaban en. gremios que
reglamentaban de manera estricta el desarrollo de su actividad y del
comercio; por esto, cuando la burguesía realizó la Revolución Francesa y
destruyó el antiguo orden, proclamó los derechos individuales como
atributos naturales de la persona humana, y, entre éstos, la propiedad
privada y la libertad de comercio e industria, que requería para fortalecer
su poder económico y político a través de las nuevas instituciones del Estado
de Derecho Burgués. La Declaración de los Derechos del Hombre y
del Ciudadano consagró la propiedad como "un derecho inviolable y
sagrado".
La libertad de industria y de comercio, al abolir las corporaciones medievales
separó a los factores de la producción, el capital y el trabajo, y los enfrentó
posteriormente a través de las luchas entre patrones y trabajadores que
dominan los siglos XIX y XX. En el taller familiar y artesanal, donde se incubó
la burguesía, el trabajo se desarrollaba en común entre maestros y operarios,
que compartían deberes, derechos, asistencia y cooperación. En las
fábricas que nacieron con la Revolución Industrial, producto de la libertad
de comercio e industria impuesta por la Revolución Francesa, se separan los
intereses de ambas partes: los empleadores, propietarios de los medios de
producción, tratan de obtener el mayor provecho del trabajo de sus
asalariados, cuyo número creciente los sumerge en una crisis de identidad,
de metas y de derechos, cada vez mayor. Cada trabajador es un número,
no una persona, en la legión de operarios reclutados en masa para los
grandes centros industriales. Así nació el proletariado industrial, y los
innumerables problemas engendrados por el maquinismo como un
subproducto de la libertad de industria y de comercio.
El régimen de libertad industrial aparejó cuatro facultades para el individuo:
la. libertad de establecimiento, por la que toda persona, nacional o
extranjera, podía instalar una fábrica o taller en cualquier lugar del país, sin
mayores restricciones que las de simple policía; 2a. el libre acceso al trabajo,
sin los requisitos previos de aprendizaje profesional ni de agremiación forzosa
en las corporaciones; 3a. La libre elección de los procedimientos técnicos a
emplearse en las fábricas y talleres; y 4a. la libre contratación de
condiciones de trabajo entre patrones y trabajadores, sin la intervención de
autoridades gremiales ni administrativas. (1)
2. -LIMITACIONES
Sin hablar de las restricciones que las llamadas democracias marxistas o
autoritarias imponen al comercio y a la industria, que son
monopolizados allí por el Estado, en las democracias liberales hay también
limitaciones de orden constitucional, legal y reglamentario, entre las que
podemos mencionar las siguientes:
a) Constitucionales.- Planificación.- La programación del desarrollo
económico del país requiere la formulación periódica de planes, por parte
del Estado, de ejecución obligatoria, a los que deben someterse todos los
sectores, público, privado y mixto (arts. 316.1 y 9 y 317.). El ministerio de
Planificación del Desarrollo tiene a su cargo estas tareas, según el art. 57 de
la Ley N5 3351 de 21 de febrero de 2006.
Regulaciones.- El art. 316.2 habla de "dirigir la economía y regular, conforme
con los principios establecidos en esta Constitución, los procesos de
producción, distribución y comercialización de bienes y servicios".
Intervención.- El art. 311-II.1 dice que "el Estado ejercerá la dirección integral
del desarrollo económico y sus procesos de planificación". El numeral 4 del
mismo artículo agrega que "el Estado podrá intervenir en toda la cadena
productiva de los sectores estratégicos..."
El control puede referirse a uno o muchos aspectos de la actividad
comercial o industrial: control de costos y precios para la producción y
comercio de artículos de primera necesidad, drogas y manufacturas de
consumo popular, (D.S. 12239 de 12 de Febrero de 1975); control de normas
y calidad (D.S. 12309 de 17 de Marzo do 1975); de distribución, de
condiciones de trabajo, etc. El estímulo consiste en los incentivos otorgados
a las inversiones de capitales a través del Instituto Nacional de Inversiones
(INI), por la. ley de inversiones y el D.S No 12509 de 21 de Mayo de 1975. Por
gestión directa se entiende la facultad que posee el Estado de organizar y
administrar empresas industriales y comerciales con fines de fomento al
desarrollo económico del País. (2)
Monopolios.- El art. 314 prohíbe el monopolio y oligopolio privados y toda
asociación que pretenda el control y la exclusividad en la producción y
comercialización de bienes y servicios.
El art. 316.8 dice que el Estado puede establecer el monopolio de
actividades productivas y comerciales "imprescindibles en caso de
necesidad pública".
Moneda, Bancos y Crédito.- El art. 326-1 faculta al Órgano Ejecutivo a
determinar los objetivos de la política monetaria y cambiaría, en
coordinación con el Banco Central de Bolivia. Este ejecuta dichas políticas,
: autoriza la emisión de moneda y administra las reservas internacionales
(art. 328).
b) Legales.- El Código de Comercio contiene normas sobre la naturaleza,
clases, autorización, registro, matrícula, administración, fiscalización,
disolución, liquidación, transformación, etc., de actividades comerciales e
industriales en general, que constituyen otras tantas limitaciones de orden
legal al ejercicio de este derecho.
El Código de minería regula la industria minera pública y privada,
ocupándose de la exploración,explotación, derechos y deberes de los
concesionarios, contratos y, sociedades mineras, extinción de las
concesiones, comercio de minerales, registro minero, procedimiento para la
obtención de minerales, etc.
c) Reglamentarias.- Los reglamentos de seguridad industrial, salud
ocupacional y salud ambiental se ocupan de las precauciones y
modalidades en que deben, desenvolverse determinadas industrias
consideradas insalubres, peligrosas o nocivas a la salud del trabajador y de
la población, como son la exploración y explotación de minas y minerales;
las que producen o emplean substancias químicas; las que trabajan en
ambientes caldeados o contaminados (hornos de fundición y calcinación,
prensas). El D.L. 16998, de 2 de Agosto de 1979, llamado Ley General de
Higiene, Seguridad Ocupacional y Bienestar, contiene normas generales
sobre obligaciones de patrones y trabajadores en estas materias,
organización de los servicios correspondientes, condiciones mínimas de
higiene y seguridad, infracciones, disposiciones técnicas, etc.
3. -DELITOS CONTRA LA INDUSTRIA Y EL COMERCIO
Consecuente con la proclamación constitucional del derecho a ejercer
libremente el comercio y la industria, el Código Penal tipifica y sanciona
varios delitos contra estas actividades en sus Artículos 232 al 239, entre los
cuales están los siguientes:
Sabotaje, causado por ocupación de establecimientos industriales,
agrícolas o mineros, o por daños a maquinarias, provisiones, aparatos o
instrumentos.
Monopolio, en la importación, producción o distribución de mercaderías.
Huelgas, Lock-out y paros ilegales.
Fraude comercial, cometido en lugar público o abierto al público
consistente en engaños al comprador entregándole una cosa por otra.
Desvío de clientela, de un establecimiento a otro, mediante en gaños o
artificios.
Tenencia, uso y fabricación de pesas y medidas falsas.
NOTAS
(1) GARCIA OVIEDO, Carlos.- “Tratado de Derecho Social", p. 11.- Cit por
PÉREZ PATON, Roberto, en "Principios de Derecho Social y de Legislación del
Trabajo". - Imprenta Ferrari Hermanos, Buenos Aires, 1946, p. 45.
CAPITULO XXIV
EL DERECHO DE PROPIEDAD
1. -GENERALIDADES
"En el concepto de propiedad se comprende todo lo que es susceptible de
valor económico o apreciable en dinero, -dice Bielsa- sea objeto corporal,
sea incorporal, como un crédito, un invento, ya se adquiera de manera
originaria, ya derivada, es decir, por contrato, ley, sentencia (V. gr.
indemnización). De una decisión administrativa -agrega el mismo autor
pueden surgir derechos que importen la atribución de propiedad, y en ese
sentido gozan de la protección constitucional del patrimonio'(v. gr.
concesión lícita)".
Según Planiol -citado por Carrasco- la propiedad es un hecho histórico
anterior a las leyes y no una creación de éstas, pues coexiste con la
sociedad. La ley reconoce y garantiza el derecho. “La propiedad es tan
antigua como el hombre -dice Carrasco-: la desigualdad económica se ha
fundado en la desigualdad de la naturaleza humana. No todos los hombres
tienen igual inteligencia, no son igualmente labo: iosos, previsores, fuertes y
morales.
Bentham, por el contrario -citado por Cabanellas- afirma que "la propiedad
y la ley han nacido juntas y juntas morirán. Antes de las leyes no hay
propiedad; quitad las leyes y toda propiedad cesa". Esta opinión coincide
con la de Escriche, quien expresa: "La propiedad es obra de la ley civil. Antes
del establecimiento de las leyes, el hombre no tenía sobre las cosas que
ocupaba más derecho que el de la fuerza con que las defendía y
conservaba, hasta que otro rival más fuerte le privaba de ellas; de suerte
que las cosas se adquirían por la ocupación, se conservaban por la posesión,
y se perdían con la pérdida de ésta. En medio de un estado tan precario
vino la ley civil y estableció cierto vínculo moral entre la cosa y la persona
que la había adquirido; vínculo que ya no pudo romperse sin la voluntad de
la persona, aun cuando la cosa no estuviese en su mano. Este vínculo era el
derecho de propiedad, distinto e independiente de la posesión; de modo
que desde entonces pudo uno ser propietario sin poseer la cosa, y poseerla
sin ser propietario. La propiedad es, pues,-un derecho, y la posesión no es
más que un hecho: la propiedad puede conservarse, aunque se pierda la
posesión; y la posesión puede conservarse asimismo aunque se pierda la
propiedad. Más la propiedad y la posesión se presumen en el propietario
mientras no conste lo contrario". Todos reconocen que el fundamento de la
propiedad está en la necesidad que tiene el hombre de proveer a su
subsistencia. Otros fundamentos derivan del anterior: la ocupación, la
victoria, el despojo, la producción de riqueza, la convención y la ley. Hay
quienes piensan que "la propiedad es un robo" (Proudhom); y otros que
deriva de un pacto tácito (Grocio y Pufendorf). Los comunistas no niegan el
fundamento del derecho de propiedad, sino que cuestionan su
organización.
2. - ANTECEDENTES HISTÓRICOS
No existe criterio uniforme sobre cuál era el régimen de la propiedad de la
tierra en los pueblos primitivos. La teoría del comunismo agrario sigue
teniendo seguidores. Sin embargo, algunos sociólogos deducen que, por
analogía con la conducta de los animales, el hombre trató siempre de
ocupar y poseer un territorio propio; pero estudios posteriores aseveran que
en esta materia no se puede generalizar, ya que muchos factores han
influido en diversos tiempos y lugares.
Se afirma que en los tiempos primitivos no existía generalmente la
compraventa de tierras, aunque había ciertos derechos sobre la misma
(préstamos) resultantes de alianzas políticas o de la incorporación de nuevos
sectores a un grupo social. La tierra se transfería sólo por herencia, porque
se la consideraba un bien sagrado de los ascendientes. Según el código de
Hammurabi, que es probablemente la codificación más antigua que se
conozca, la mayor parte de la tierra de Babilonia era de propiedad real, y
su venta estaba condicionada a ciertas obligaciones como proporcionar
hombres para el ejército y para las obras públicas. La tierra era cultivada por
el propietario, por sus empleados o por arrendatarios. Cada agricultor se
comprometía a entregar una cosecha mínima. La propiedad se transfería
por venta, donación, arrendamiento, depósito, prenda, préstamo o
promesa de venta, mediante contrato.
En Grecia, Licurgo instituyó la propiedad colectiva, y Solón la individual. En
Roma la propiedad era del Estado en el agerpublicus, que se formó con
tierras de los vencidos, de los condenados a muerte, de los bienes
abandonados y vacantes y de las instituciones testamentarias. La propiedad
privada existía en los dominios quiritario y bonitario. En el derecho romano la
propiedad individual tenía tres atributos: el jusutendi, el jusfruendi y el
jusabutendi (derechos de usar, disfrutar y abusar de las cosas).
Durante la Edad Media la propiedad asume diversas formas, según las
épocas y los lugares: alodial, beneficiaría, censal, servil y comunal, aunque
siempre encarnada en una persona en la cual se fundían los conceptos de
doininium (propiedad de la tierra) e imperium (soberanía o autoridad). El
señor feudal era el propietario; el vasallo percibía una parte de los frutos,
como renta; y los siervos cultivaban la tierra y tenían derecho de uso sobre
la misma.
La Revolución Francesa consagró a la propiedad como un derecho
individual, sagrado e inviolable del que nadie puede ser privado, “sino
cuando la necesidad pública, legalmente hecha constar, lo exige
evidentemente, y bajo la condición de una previa y justa indemnización"
(art. 17, Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano). Esta
fórmula fue reproducida en todas las constituciones francesas hasta la de
1848. Para los revolucionarios franceses la propiedad individual era una
extensión de la propiedad de cada uno sobre su propia persona. Esta
concepción liberal-individualista predominó durante más de un siglo, dando
lugar a excesos que despertaron las luchas sociales del siglo XIX y la
asociación de los trabajadores, a cuyo influjo ocurrió la crisis del
individualismo y el constitucionalismo social, que dieron ala propiedad el
carácter de un deber, más que un derecho. "De las escasas limitaciones del
dominio que la restringían antiguamente -dice Cabanellas- se ha pasado a
la efectividad mayor o menor de la función social de la propiedad.
Concluye de ese modo la opinión de que la propiedad, además del
derecho de uso, concedía el del abuso de las cosas, contrasentido jurídico
porque, donde comienza el abuso, el derecho termina".
Después de la Primera Guerra Mundial, las constituciones traducen el nuevo
concepto sobre este derecho. La de Weimar (1919) dice: "La propiedad
obliga; su uso debe hacerse contemplando al mismo tiempo el. interés
social". La Constitución de Querétaro, México, (1917), expresa: "art.27.- ...La
Nación tendrá en todo tiempo el derecho de imponer a la propiedad
privada las modalidades que dicte el interés público... Con este objeto, se
dictarán las medidas necesarias para el fraccionamiento de los latifundios;
para el desarrollo de la pequeña propiedad agrícola..'., etc. La Declaración
Americana de los Derechos y Deberes del Hombre dice en su art. XXIII: "toda
persona tiene derecho a la propiedad privada correspondiente a las
necesidades esenciales de una vida decorosa, que contribuya a mantener
la dignidad de la persona y del hogar".
Y la Declaración Universal de los Derechos del Hombre expresa: art. 17 “Toda
persona tiene derecho a la propiedad individual y colectivamente.
2. Nadie será privado arbitrariamente de su propiedad.” El
art. 21 de la C.A.D.H. dice:
1. Toda persona tiene derecho al uso y goce de sus bienes. La ley puede
subordinar tal uso y goce al interés social.
2. Ninguna persona puede ser privada de sus bienes, excepto mediante
el pago de indemnización justa, por razones de utilidad pública o de interés
social y en los casos y según las formas establecidas por la ley.
3. Tanto la usura como cualquier otra forma de explotación del hombre
por el hombre deben ser prohibidas por la ley.
3. - EL DERECHO DE PROPIEDAD EN LA LEGISLACIÓNBOLIVIANA El art. 56 dice
que "toda persona tiene derecho a la propiedad privada individual o
colectiva, siempre que ésta cumpla una función social". Agrega que "se
garantiza la propiedad privada siempre que el uso que se haga de ella no
sea perjudicial al interés colectivo". El mismo artículo, garantiza el derecho a
la sucesión hereditaria. Por su parte, el Código Civil vigente consigna las
siguientes disposiciones:
"art. 105 (Concepto y alcance general)
1.- La propiedad es un poder jurídico que permite usar, gozar y disponer de
una cosa y debe ejercerse en forma compatible con el interés colectivo,
dentro de los límites y con las obligaciones que establece el ordenamiento
jurídico.
II.- El propietario puede reivindicar la cosa de manos de un tercero y ejercer
otras acciones en defensa de su propiedad con arreglo a lo dispuesto en el
Libro V del Código presente".
"Artículo 106.- (Función social de la propiedad). La propiedad debe cumplir
una función social".
"Artículo 107.- (Abuso del derecho). El propietario no puede realizar lirios ron
id único propósito de perjudicar o de ocasionar molestias a otros, y, en
general, no le está permitido ejercer su derecho en forma contraría si lin
económico o social en vista al cual se le ha conferido el derecho". Vemos
en lo definición del art. 105 que el derecho de propiedad es un iloi echo real
(jus in rem) que permite al titular usar y servirse déla cosa, pen lint sus frutos y
disponer de la misma. En este concepto subsisten eljusutendi y el
jusfruendidel Derecho Romano, aunque subordinados “al interés colectivo”
y al “ordenamiento jurídico"; pero desaparece el jusolmlemli, quo es
reemplazado por el derecho de disponer, que consiste en eniijnniir, gravar o
transformarla cosa. Como todo abuso es irracional, ilegiro y perjudicial al
interés colectivo, el art. 107 se encarga de prohibir la realización de actos
que puedan considerarse un abuso del derecho de propiedad. Esta
disposición, recogida por primera vez en nuestra legislación civil, no es
nueva, pues responde al antiguo principio de "summum jus; sumiría injuria".
Nuestro antiguo Código Civil recogía en su art. 289 el triple carácter que se
le dio en el Derecho Romano, al decir: "La propiedad es el derecho de gozar
y disponer de las cosas del modo más absoluto, con tal que no se haga un
uso prohibido por las leyes o reglamentos".
Hasta 1938, las constituciones consagraban la "inviolabilidad" del derecho
de propiedad, a tono con el espíritu individualista que preside la Declaración
de los Derechos del Hombre y del Ciudadano. El art. 13 de la de 1880 decía:
"La propiedad es inviolable; la expropiación no podrá imponerse, sino por
causa de utilidad pública calificada conforme a ley, y previa indemnización
justa". El art. 17 de la Constitución de 1938 condicionaba esa inviolabilidad a
que llenará una función social; la expropiación podrá imponerse por causa
de utilidad pública calificada conforme a ley y previa indemnización justa,
decía.
En las constituciones de 1945 y siguientes desaparece el carácter de
"inviolable" y el derecho queda configurado en la forma actual.
4. - PROTECCIÓN CONSTITUCIONAL DE DERECHO DE PROPIEDAD La
Constitución no define el Derecho de propiedad; lo garantiza,
protegiéndolo frente al propio Estado y frente a los particulares, bajo
determinadas condiciones (siempre que su uso no sea perjudicial al interés
colectivo).
Esta protección tiene un triple carácter en los preceptos constitucionales: 1)
El art. 57 dispone que la expropiación sólo se impone cuando lo requiere la
utilidad pública, y previa indemnización justa. O sea que nadie puede ser
privado de sus bienes, en beneficio de otros o del Estado, sino
exclusivamente em provecho de la colectividad, lo que se apreciará
conforme a la ley, no dependiendo por tanto esta decisión de la voluntad y
del criterio subjetivo de los agentes de la administración, sino de la ley. 2) Los
bienes privados no pueden ser confiscados como castigo político. La
confiscación era la adjudicación que se hacia el fisco de los bienes de un
reo, generalmente de un condenado a "muerte civil". Ambas penas han sido
borradas de la mayoría de las legislaciones desde el siglo XIX, por infamantes
e inhumanas.
3) El hecho de que los impuestos deben ser aprobados por el Poder
Legislativo para ser obligatorios (art.323.II), y de que cualquiera pueda
recurrir ante el Tribunal Constitucional contra los impuestos ilegales (art.
202.4) es una protección contra impuestos arbitrarios o excesivos que
podrían afectar a la propiedad, "confiscándola" en todo o en parte.
5. - EL DERECHO DE PROPIEDAD EN LOS PAISESSOCLALISTAS
Según la Constitución de 1977, en la Unión Soviética se reconocía
lossiguientes tipos de propiedad:
a) La propiedad socialista del Estado sobre los instrumentos y medios de
producción; b) La propiedad cooperativa Koljoziana sobre los campos, los
instrumentos de cultivo, los ganados, etc. (los koljoz eran los agricultores que
explotaban los campos colectivamente); c) La propiedad familiar de cada
hogar,Koljoziano sobre la casa habitación, un pequeño terreno contiguo a
ella, ganado productivo, aves de corral y aperos de labranza; d) La
propiedad privada que se reconocía a los campesinos y artesanos sobre los
medios de producción que no requieren del trabajo ajeno; y e) La
propiedad individual sobre los bienes de consumo. El art. 10 de la
Constitución reconocía y garantizaba "el derecho a los ciudadanos a la
propiedad personal sobre los ingresos y ahorros provenientes de su trabajo,
sobre la casa vivienda y la economía doméstica auxiliar, sobre los objetos
de la economía y uso domésticos y sobre objetos de consumo y comodidad
personales, lo mismo que el derecho de herencia de la propiedad personal
de los ciudadanos".
El Derecho Estatal Soviético reconocía la propiedad personal, formada por
los objetos de uso y consumo que necesitaba la persona y la familia para su
subsistencia. No reconocía propiedad privada, constituida por instrumentos
y medios de producción, que son "base y resultado de la explotación del
hombre por el hombre". La propiedad 'personal es producto del trabajo
personal del ciudadano, y''como tal recibía reconocimiento y protección
del Estado Soviético.
República Popular .China.- La Constitución de 1982 contiene las siguientes
prescripciones:
"art. 10.- La tierra en las ciudades es propiedad del Estado. Las tierras rurales
y suburbanas son propiedad de los colectivos, con excepción de las
porciones que pertenecen al Estado según ley. El terreno de las viviendas,
las parcelas cultivadas en las granjas y las laderas son propiedad asimismo
de los colectivos. En interés público el Estado puede tomar la propiedad de
la tierra para usarla conforme a ley. Ninguna organización ni individuo
puede apropiarse,- comprar, vender ni arrendar tierras, ni transferir
ilegalmente tierras por otros medios. Todas las organizaciones e individuos
que trabajen la tierra deben hacer uso racional de la misma".
"art, 12.- La propiedad pública socialista es sagrada e inviolable. El Estado
protege la propiedad pública socialista. Se prohibe la apropiación y el daño
de la propiedad estatal y colectiva.por cualquier organización o individuo,
y por cualquier medio".
"art. 13.- El Estado protege el derecho de los ciudadanos sobre sus ingresos,
ahorros y viviendas legalmente, adquiridos, y sobre otra propiedad lícita. El
estado protege mediante ley el derecho de herencia de los ciudadanos a
la propiedad privada".
República de Cuba- La constitución socialista de, este país, de 1976,
contiene sobre la materia disposiciones similares a las de China Popular.
Veamos los siguientes artículos:
"art. 15.- La propiedad estatal socialista que es la propiedad de todo el
pueblo, se establece irreversiblemente sobre las tierras que no pertenecen
a los agricultores pequeños o a cooperativas integradas por los mismos;
sobre el subsuelo, las minas, los recursos marítimos naturales y vivos dentro de
la zona de su soberanía, los bosques, las aguas, las vías de comunicación;
sobre las centrales azucareras, las fábricas, los medios fundamentales de
transporte; y cuantas empresas, bancos, instalaciones y bienes han sido
nacionalizados y expropiados a los imperialistas, latifundistas y burgueses, así
como sobre las granjas del pueblo, fábricas, empresas e instalaciones
económicas, sociales, culturales y deportivas construidas, fomentadas o
adquiridas por el Estado y las que en el futuro construya, fomente o
adquiera".
"art. 20.- El Estado reconoce la propiedad de los agricultores pequeños sobre
sus tierras y otros medios e instrumentos de producción, conforme a lo que
establece la ley. Los agricultores pequeños tienen derecho a asociarse entre
sí, en la forma que la ley establece. La propiedad cooperativa es una forma
de propiedad colectiva de los campesinos integrados en ellas.
El Estado apoya la producción cooperativa de los pequeños agricultores así
como la producción individual, que contribuyan al auge de la economía
nacional.
El Estado promueve la incorporación de los agricultores pequeños, voluntaria
y libremente aceptada por éstos, a los planes y unidades estatales de
producción agropecuaria".
"art. 21.- El apicultor pequeño tiene derecho a vender la tierra previa
autorización de los organismos autorizados por ley. En todo caso, el Estado
tiene derecho preferente a la adquisición mediante el pago de su justo
precio.
Se prohíbe el arrendamiento, la aparcería, los préstamos hipotecarios y
cualquier otra forma que implique gravamen o cesión parcial a particulares
de los derechos y acciones emanados de la propiedad de los agricultores
pequeños sobre las fincas rústicas".
"art. 22.- Se garantiza la propiedad personal sobre los ingresos y ahorros
procedentes del trabajo propio, sobre la vivienda que se posea con justo
título de dominio y los demás bienes y objetos que sirven para la satisfacción
propia de las necesidades materiales y culturales de la persona".
"art. 24.- La ley regula el derecho de herencia sobre la vivienda y el dominio
propio y demás bienes de propiedad personal. La tierra de los agricultores
pequeños sólo es heredable por aquellos herederos que la trabajan
personalmente, salvo las excepciones que establece la ley. En relación con
los bienes integrados en cooperativas, la ley fija las condiciones en que son
heredables", (l)
Las transformaciones políticas y económicas ocurridas desde el segundo
semestre de 1989 en las ex democracias populares de Europa del Este y en
Alemania Oriental, (unida ahora a Alemania Federal), que afanosamente
transitan hacia economías de mercado, han determinado asimismo la
adopción de la propiedad privada. El parlamento checoslovaco aprobó en
abril de 1990 la propiedad y la empresa privada, sin limitaciones en cuanto
a tamaño ni a número de trabajadores. La ley sirve para abrir "un mercado
de capitales sobre la base de acciones y la participación racional del
capital extranjero en la economía checa...", asi como "para privatizar las
empresas estatales manejadas por burocracias". (2)
NOTAS
(1) Obligado por las presiones de la economía global y del embargo
impuesto a Cuba hace 36 años, el gobierno de este país, como el de China,
está abriendo su economía a las inoersiones extranjeras, que están
permitidas ahora hasta en un cien por ciento de capital extranjero, en
determinadas áreas.
(2) Despacho de AP, fechado en Praga el 19-4-90 y publicado por el
diario "LOS TIEMPOS" de Cochabamba, de 20-4-90.
CAPÍTULO XXV
LIMITACIONES AL DERECHO DE PROPIEDAD
1. -GENERALIDADES
El concepto clásico de la propiedad, según el cual este derecho era
perpetuo, exclusivo y absoluto, estaba limitado desde el Derecho Romano
por las siguientes instituciones jurídicas:
1).- La perpetuidad, por la expropiación, que puede ocurrir en cualquier
momento conforme a la ley; 2).- la exclusividad, por las servidumbres reales
que pueden ser legales, judiciales y voluntarias (arts. 255-290 C.C.) es decir
que pueden gravar a un terreno, independientemente de la voluntad del
propietario; y 3).-lo absoluto, por restricciones que establece la ley en interés
público o privado, como el acceso al fundo (art. 112 C.C.), las derivadas de
las relaciones de vecindad (arts.115 al 126 del C.C.).
2. - LA FUNCIÓN SOCIAL.
Dice el art. 106 del C.C. que "la propiedad debe cumplir una función social".
-De otro modo se entiende- no recibirá la protección de la ley. O sea que
este requisito es esencial para el derecho mismo.
Este artículo concuerda con los arts. 56 de la CPE y 21 de la CADH.
La función social se basa en el principio de que los bienes que la naturaleza
da al hombre son para la subsistencia, desarrollo y trabajo, en igualdad de
condiciones con sus semejantes, ya que la propia naturaleza no establece
sino diferencias formales entre los componentes de la especie humana. No
es natural, ni lógico ni lícito, por ello, acumular en pocas manos los bienes
que deben servir para el sustento y la superación de todos. La sociedad se
organiza sobre el supuesto de que todo ser humano tiene una función que
cumplir en beneficio de la comunidad, de acuerdo con sus facultades físicas
e intelectuales, que le son otorgadas nó para su provecho exclusivo, sino
para ponerlas en servicio de otros que pueden carecer de las mismas o
poseerlas en menor grado. Cada uno debe aportar al'bien común según sus
posibilidades, y no usar éstas en detrimento de sus congéneres.
3. -EL PENSAMIENTO SOCIAL DE LA IGLESIA
Desde la antigüedad, las religiones se preocuparon por la suerte de los
pobres. "Todos los hombres son tales que no pueden tolerar el ver a otros
sufrir", decía Confucio (551-479 A.C.); aunque bien es cierto que la realidad
demuestra lo contrario. Buda (565-486 A.C.) predicaba: "Los hombres deben
tener siempre presente que nada en el mundo puede ser considerado mío,
y lo que uno adquiere no debe ser considerado solamente suyo, pero debe
ser dividido con la comunidad y con los que no tienen nada". El Corán
contiene reflexiones similares, y en el Antiguo Testamento, los libros de los
Salmos y de los Proverbios hacen hincapié en este mandato:
"Los pobres NUNCA deben ser olvidados (Salmo 9-18); "Defiendas a los
pobres y a los huérfanos y hagas justicia a los afligidos y necesitados" (Salmo
82:3).(1)
Las encíclicas y documentos conciliares de la Iglesia remarcan una y otra
vez el carácter cristiano y humanitario de la función que debe cumplir la
propiedad. En la Encíclica RerumNovarum (1891) se dice que la autoridad
pública "puede atemperar su uso (el de la propiedad) y conciliario con el
bien común". En QuadragésimoAnno (1931) se alude a la misma autoridad,
que "guiada siempre por la ley natural y divina e inspirándose en las
verdaderas necesidades del bien común puede determinar más
cuidadosamente lo que es lícito e ilícito a los poseedores en el uso de sus
bienes", porque "sobre toda propiedad
privada grava-siempre una hipoteca social para que los bienes sirvan a la
destinación general que Dios les ha dado. La misma encíclica (Q.A.)
distingue el carácter individual y social en la propiedad: el primero es el
derecho en si, el segundo, el uso que se le da. Aquél sirve para que el
propietario "pueda atender a sus necesidades y a las de su familia"; éste a
que "los bienes que el Creador destinó a todo el género humano sirvan en
realidad para tal fin".
En Mater et Magistra JuanXXIII decía que "el derecho de propiedad privada
sobre los bienes es intrínsecamente inherente a una función social", y el
Concilio Vaticano II reflexionaba que "el hombre, al usar de los bienes, no
debe tener las cosas exteriores que legítimamente posee como
exclusivamente suyas, sino también como comunes, en el sentido de que no
le aprovechen a él solamente, sino también a los demás".
4. -ABUSO DEL DERECHO
Como hemos visto, el art.,107 del CC. prohibe al propietario realizar actos o
ejercitar su derecho de manera abusiva o contraria a los fines económicos
inherentes a la propiedad.
5. - REQUISICIONES MILITARES
Según la Ley Orgánica del Ejército de 22 de Enero de 1927, y sus reglamentos,
puede ser requisado en caso de guerra internacional todo lo que requiera
la defensa del país: edificios, terrenos, vehículos, aviones, armas, municiones,
ganado, caballos, alimentos, forraje, etc.' La requisición se practicará por
orden escrita que exprese la naturaleza, cuantía y tiempo del servicio,
extendiéndose un recibo al propietario. "Toda prestación da derecho a' una
indemnización del servicio prestado o del valor requisicionado en los casos
que determine el reglamento respectivo" (Art 70).
Según esto, la requisa puede ser de uso, de consumo, o de propiedad. Esta
limitación al derecho de propiedad tiene tres elementos característicos:
a).- debe fundarse en causa justificada
(necesidad de la defensa en una guerra internacional); b).- debe haber una
ley previa que la autorice; c).- debe indemnizarse al propietario. El
procedimiento de la requisición es más simple que el de la expropiación, y
comporta menos garantías para la propiedad privada.
6. -EXPROPIACIÓN
Es el acto por el que el Estado priva a una persona del derecho de
propiedad sobre un bien, cuando así lo requiera lautilidad pública, previa
indemnización justa" (art. 57).
Como lo hace notar Bielsa, ésta es lamayor de las limitaciones que el orden
jurídico impone al derecho depropiedad, porque el Estado puede por este
medio adquirir bienes privados por decisión unilateral y forzosa,
transformándose el derecho del propietario en otro relativo al precio del
bien expropiado y a la reparación del daño irrogado con la expropiación;
pues es lógico queda "indemnización justa" comprenda una reparación de
los daños, si los hay.
a) Naturaleza.-Algunos autores, sostienen que la expropiación es una
institución jurídica mixta, de derecho público y privado a la vez, porque el
Estado, institución de Derecho Público, se apropia de uno o más bienes
privados en beneficio de la utilidad pública. Nosotros creemos que es una
institución, de Derecho Público porque se establece en función del interés
público y conforme a normas de orden público. Por la expropiación pierde
la propiedad su carácter privado para transformarse en una porción del
dominio público, institución ésta que pertenece al Derecho Público y no al
Privado.
b) Fundamentos.- La expropiación se funda en el dominio originario que
tiene el Estado sobre el suelo y subsuelo con todas sus riquezas naturales, las
aguas, elementos y fuerzas físicas, (art. 334.11); y en su dominio eminente
sobre todas las cosas que están bajo su; soberanía en todo el territorio de la
república. Este dominio se llama eminente porque -dada su naturaleza, por
corresponder al Estado-, está por encima del derecho de propiedad de los
particulares, y se manifiesta concretamente en casos determinados, según
las prescripciones de la ley, cuando así lo exige el interés público o social.
c) Antecedentes.- En todos los tiempos y en todas las partes, desde la
más remota antigüedad, se ha practicado la expropiación de los
particulares por parte del poder público, con indemnización o sin ella, unas
veces por necesidades públicas y otras para beneficio privado.
La Revolución Francesa, al proclamar el carácter "inviolable y sagrado" de
la propiedad como un derecho individual, estableció que nadie puede ser
privado de la misma "sino cuando la necesidad pública, legalmente hecha
constar, lo exige evidentemente, y bajo la condición de una previa y justa
indemnización" (art. 17 de la declaración de los Derechos del Hombre y del
Ciudadano).
d) En la legislación boliviana.- El art. 108 del C.C. dice: "(Expropiación). I.
La expropiación sólo procede, con pago de una justa y previa
indemnización, en los casos siguientes:
1) Por causa, de utilidad pública.
2) Cuando la propiedad no cumple una función social. (Conc. con art.57
de la Constitución).
II. La utilidad pública y el incumplimiento de una función social se
califican con arreglo, a leyes especiales,las mismas que regulan las
condiciones y el procedimiento para la expropiación.
III. Si el bien expropiado por causa de utilidad pública no se destina al
objeto que motivó la expropiación, el propietario o sus causa habientes
pueden retraerlo devolviendo la indemnización recibida. Los detrimentos se
compensarán previa evaluación pericial".
Según este artículo, la expropiación tiene los siguientes caracteres:
Utilidad Pública.- Significa que el Estado no puede desposeer a nadie de sus
bienes en beneficio de otro propietario privado, sino solamente para el bien
común.
Función social.- La propiedad se instituye, reconoce y garantiza en función
de las necesidades sociales de la familia o de las personas individuales y
colectivas. Cuando no sirve a estas necesidades sociales, sino que se
emplea coñ fines egoistas de especulación, de acumulación o de
monopolio, su expropiación se impone para ponerla al servicio de la
sociedad.
Calificación por ley.- La utilidad pública y la función social se califican con
arreglo a leyes especiales. La primera está contemplada en el D.R. de 4 de
Abril de 1879, elevado a rango de Ley el 30 de Diciembre de 1884;
disposición anticuada que se refiere a obras de utilidad pública y no al
concepto general, que es más amplio.
Algunas legislaciones hablan de "necesidad pública"; otras de "utilidad
pública", que no es lo mismo, según la distinción del Código Civil brasileño,
citado por Carrasco: "Son casos de necesidad pública: l9.- La defensa del
territorio nacional; 2Q.- La seguridad pública; 39.- Los socorros públicos en los
casos de alguna calamidad social; 43.- La salubridad pública. Son casos de
utilidad pública:1º.- La fundación de poblaciones y de establecimientos de
asistencia, educación o instrucción pública; 29.- La apertura y prolongación
de plazas, calles, caminos y en general de cualesquiera vías públicas; 39.-
La construcción de obras o establecimientos destinados al bien general de
una localidad, a su decoración e higiene; 4". Las que se refieren a la
explotación de las mismas".
En sus comentarios al Código Civil vigente el Dr. Carlos Morales Guillen
presenta el triple concepto de utilidad pública que sigue: "Corresponde
señalar, de acuerdo a los principios universalmente admitidos, que la utilidad
pública abarca tres causas específicas: la utilidad pública en sentido
estricto, o sea cuando el bien expropiadose destina directamente a un
servicio público (caso de la Ley de Expropiaciones); la utilidad social, que se
caracteriza por la necesidad de satisfacer de una manera inmediata y
directa a una clase social determinada y mediante ésta a la colectividad
(el ejemplo más claro en la Ley de Reforma Agraria, arts. 63 y ss); a la utilidad
nacional que exige se satisfaga la necesidad que tiene una nación de
adoptar medidas para hacer frente a situaciones que la afectan como
entidad política y como entidad internacional (son ejemplos: la
nacionalización del petróleo en 1936 por vía de caducidad, la de la gran
minería en 1952 y la de la Gulf en 1969)".
El todo caso, la justificación de la expropiación debe calificarse por ley del
Congreso, Ordenanza Municipal (cuando impone contribuciones especiales
para su ejecución), o decreto del Poder Ejecutivo (art. 30 de la Ley de 30 de
Diciembre de 1884).
Las expropiaciones dentro del radio urbano se rigen por la Ley de 3-121883,
D.L. N° 3.819 de 27-8-1954, elevado a la Ley en 29-10-1956, D.L. N" 14375 de
21-2-1977 y D.L. N° 15071 de 15-10-1977.
Indemnización previa.- Calificada la utilidad pública o el incumplimiento de
la función social, la administración debe fijar la indemnización y pagarla
efectivamente al propietario antes de entrar en posesión del bien
expropiado. Si éste no acepta el monto, por considerarlo injusto, tiene los
recursos que franquea la ley para reclamar sus derechos; recursos que no
suspenden la ejecución de la expropiación. Estos recursos son la
reclamación ante las autoridades municipales o administrativas
correspondientes; los recursos de revocatoria y jerárquico y el juicio
contencioso- administrativo ante el Tribunal Supremo de Justicia. Al respecto
dice Bielsa, "que el monto de la indemnización debe ser determinado según
el valor adquisitivo de la moneda en el momento de la expropiación, y no
sobre el valor nominal de adquisición o de tasación. De no ser así se
afectaría el patrimonio del sujeto pasivo de la expropiación, pues no habría
reparación integral. El propietario debe recibir una cantidad que le permita
adquirir un inmueble del mismo valor o renta que el transferido por la
expropiación".
CAPÍTULO XXVI
LA PROPIEDAD INTELECTUAL Y OTRAS
1. - PROPIEDAD INTELECTUAL
El art. 102 dispone que "el Estado registrará y protegerá la propiedad
intelectual individual y colectiva de las obras y descubrimientos de los
autores, artistas, compositores, inventores y científicos, en las condiciones
que determina la ley".
Al exponer el concepto de propiedad dijimos que comprende todo lo que
es suceptible de adquirir un valor económico, sea corporal o incorporal,
caso éste de la propiedad intelectual, que puede ser literaria, artística y
científica. Este tipo de propiedad tiene un fundamento ético y jurídico
incuestionable -dice Bielsa- pues es "resultado de la más personal, respetable
y elevada actividad del hombre".
Los derechos de autor están declarados y protegidos en todas las
legislaciones. Hubo un tiempo en que se afirmaba que, no siendo materiales
el pensamiento y las ideas no eran susceptibles de apropiación, siendo más
bien patrimonio común de la humanidad. Luego se concedía al autor
derechos sobre sus obras, pero sólo por un tiempo limitado, y después
pasaba a ser propiedad común.
La ley N2 1322, de 13 de abril de 1992, abrogó y sustituyó a la ley de 13 de
noviembre de 1909, que estuVo vigente durante ochenta y tres años.
Dispone que los derechos de autor recaen sobre obras literarias, artísticas y
científicas; que estos derechos son de orden moral y patrimonial y nacen
con la creación de la obra, "sin que sea necesario
CAPÍTULO XXVII
EDUCACIÓN Y CULTURA
CAPÍTULO XXVIII
LIBERTAD DE CONCIENCIA Y DE RELIGIÓN
2. -ANTECEDENTES HISTÓRICOS
a) En general.- La libertad de cultos o de profesar creencias emana de la
esfera de la libertad individual y se asocia estrechamente con las libertades
de conciencia, de pensamiento, de opinión y de expresión.
Como todos los derechos fundamentales, el de cultos fue desconocido
durante la mayor parte de la historia dé la humanidad. Platón (Las Leyes, lib.
X), justificaba el castigo a quienes disentían de la religión griega. Sócrates
fue condenado a muerte por "atacar a los dioses", combatiendo la opinión
corriente que se tenía sobre ellos. Anaxágoras fue perseguido por haber
dicho que el sol no era el carro de Apolo.
Durante los primeros siglos de nuestra era, los cristianos fueron perseguidos,
torturados y ajusticiados como criminales. Después, la Iglesia habría de
perseguir a los "herejes" con la misma saña en nombre de la fe y a través de
la Inquisición. A raíz de la Reforma, sangrientas guerras de religión opusieron
a los pueblos en contra de la libertad de cultos. (1) Estas guerras fueron
desapareciendo desde el Acta de Tolerancia de 1688, que mantenía ciertos
dogmas fundamentales, remitiendo las penas impuestas a otras disidencias.
Quienes no profesaban la religión oficial eran "incapaces" para el
desempeño de funciones públicas.
Con la Revolución yel triunfo de los derechos individuales, la Declaración de
los Derechos del Hombre y del Ciudadano proclamó: "art. 10.- Ninguno debe
ser inquietado por sus opiniones, aunque sean religiosas, con tal de que sus
manifestaciones no turben el orden público establecido por la ley". La
Declaración Americana de los Derechos y deberes del Hombre dice: "art. III.-
Toda persona tiene el derecho de profesar libremente una creencia religiosa
y dé manifestarla y practicarla en público y en privado". Por su parte, la
Declaración Universal de los Derechos del Hombre establece: "art. 18.- Toda
persona tiene derecho a la libertad de pensamiento, de conciencia y de
religión; este derecho incluye la libertad de manifestar su religión o su
creencia, individual y colectivamente, tanto en público como en privado,
por la enseñanza, la práctica, el culto y la observancia".
La C.A.D.H. dispone en su art. 12 que:
1. "Toda persona tiene derecho a la libertad de conciencia y de religión, este
derecho implica la libertad de conservar su religión o sus creencias, o de
cambiar de religión o de creencias, así como la libertad de profesar y
divulgar su religión o sus creencias, individual o colectivamente, tanto en
público como en privado".
El Derecho Constitucional ha evolucionado en esta materia adoptando tres
clases de regímenes 1).- Estados que sostienen y reconocen una religión
como obligatoria para todos los súbditos (intolerancia). Es el caso de los
países musulmanes; 2).- Estados que reconocen una religión oficial; pero que
permiten el ejercicio de otros cultos (tolerancia); 3).- Estados donde existe
una completa separación entre ellos y la Iglesia, como por ejemplo en los
países comunistas:
En FRANCIA, una ley de 1905 proclamó que "la república no reconoce, ni
paga ni subvenciona ningún culto".
URSS.- El art. 52 de la Constitución de 1977 garantizaba el derecho de los
soviéticos a profesar cualquier religión o a no profesar ninguna, a practicar
cultos religiosos y a hacer propaganda atea, prohibiéndose, sin embargo,
incitar a la hostilidad y el odio en esta materia. La Iglesia estaba separada
del Estado y la escuela de la Iglesia.
Una "ley de libertad de conciencia y de organizaciones religiosas" aprobada
el l5 de Octubre de 1990 por el parlamento soviético consagraba la
separación de la Iglesia y el Estado, reafirmaba la libertad de conciencia y
de religión, proclamaba la igualdad de cultos, no ponían al ateísmo en el
mismo plano que la religión, prohibía que las organizaciones religiosas
participaran en las actividades de los partidos políticos, permitía a los
sacerdotes candidatear a puestos electivos; pero prohibía la enseñanza
religiosa en las escuelas estatales así como la celebración de servicio
religiosos en las fuerzas armadas. Por otra parte, se informa que cientos de
iglesias confiscadas por el Estado, que las había convertido en depósitos y
museos, fueron devueltas a las organizaciones religiosas. (2)
China Popular.- El art. 36 de la Constitución de 1982 dispone:
"Los ciudadanos de la República Popular de China gozan de la libertad de
creencias religiosas. Ningún órgano del Estado, organización pública ni
individuo pueden obligar a los ciudadanos a creer o no creer en ninguna
religión, ni discriminar a quienes profesan o no cualquier religión. El estado
protege las actividades religiosas normales. Nadie puede utilizar la religión
para actividades contra el orden público, la salud del pueblo o el sistema
educacional del Estado. Los asuntos y organizaciones religiosos no están
sujetos a la dominación extranjera".
En este artículo de la constitución vigente se ha eliminado la mención que
hacía el art. 46 de la Constitución de 1978 sobre el derecho de los
ciudadanos a “propagar el ateísmo”, como lo autorizaba también la
Constitución soviética de 1977, modificada por la ley de 10 de Octubre de
1990, según se ha visto.
Cuba.- La Constitución de 1976 prescribe, en su art. 54, lo que sigue:
ainstacio socialista, que basa su actividad y educa al pueblo en la
concepción científica materialista del universo, reconoce'y garantiza la
libertad de conciencia, el derecho de cada uno a profesar cualquier
creencia religiosa y a practicar, dentro del respeto a la ley, el culto de su
preferencia. La ley regula las actividades de las instituciones religiosas. Es
ilegal y punible oponer la fe o la creencia religiosa a la Revolución, a la
educación o al cumplimiento de los deberes de trabajar, defender la patria
con las armas, reverenciar sus símbolos y los demás deberes establecidos por
la Constitución”.
Las Constituciones de las "democracias populares" (Rumania, Hungría,
Polonia, Albania, Checoslovaquia y Yugoslavia), la mayoría de las cuales
han adoptado, a partir de 1989, un sistema democráticoliberal y una
economía de mercado, contenían disposiciones similares a las de los tres
países socialistas antes mencionados.
Japón.- La Constitución de 1947 declara, en su art. 20: “se garantiza a todas
las personas la libertad de religión. Ninguna organización religiosa recibirá
privilegios del Estado, ni ejercerá ningún tipo de autoridad política. Nadie
podrá ser obligado a participar en ningún tipo de actos, celebraciones, ritos
o prácticas de carácter religioso”.
Estados Unidos de América.- La Primera Enmienda de la Constitución
estadounidense, que inicia la parte conocida como "declaración de
derechos" de la misma, sentencia que "el Congreso no podrá aprobar
ninguna ley conducente al establecimiento de religión alguna, ni a prohibir
el libre ejercicio de ninguna de ellas".
El 19 de Junio de 1987 la Corte Suprema Federal de Estados Unidos declaró,
por 7 votos contra 2, la inconstitucionalidad de una ley de 1981 del estado
de Louisiana que requería que toda escuela pública que enseñara la teoría
de la evolución (sobre el origen del hombre), enseñara también como
ciencia la teoría creacionista. La Corte Suprema consideró que esadey
violaba la Primera Enmienda, porque en palabras del magistrado supremo
William J. Brennan Jr., "el propósito principal de la legislatura de Louisiana era
claramente introducir el punto de vista religioso de que un ser sobrenatural
creó a la humanidad", tratando de "alterar el curriculum científico en favor
de la creencia religiosa que se opone a la teoría de la evolución". (3)
La Corte Suprema de los Estados Unidos declaró en 1962 que eran ilegales
las plegarias realizadas en las escuelas públicas, y en 1992 prohibió la
intervención de clérigos y de plegarias en las ceremonias de graduación en
dichas escuelas.
América Latina.- La mayoría de las constituciones de América Latina
garantizan la libertad de cultos sin que el Estado adopte ni sostenga ninguna
religión en particular, aunque es bien sabido que la población es en todos
ellos predominantemente católica. Así lo hacen las constituciones de Brasil,
Colombia, Chile, Ecuador, Guatemala, México, Panamá, Perú y Uruguay.
Esta última declara que "el estado no sostiene religión alguna" (art.5). La de
Honduras "garantiza el libre ejercicio de todas las religiones y cultos sin
preeminencia alguna.." (art. 77), y la de Costa Rica es la única que declara
que "la religión católica, apostólica, romana, es la del Estado, el cual
contribuye a su mantenimiento sin impedir el libre ejercicio en la república
de otros cultos..." (art. 75). La de Argentina declara en su art. 2 que "el
gobierno Federal sostiene al culto católico, apostólico romano". Predomina
en América, como en la mayoría de los países del mundo, el régimen de
separación de la Iglesia y el Estado.
b) En Solivia.- A pesar de que en el proyecto de constitución remitido por
Bolívar no se decía nada sobre religión, los constituyentes de 1826 decidieron
prescribir que "la religión católica, apostólica, romana, es de la república,
con la exclusión de todo otro culto público. El gobierno la protegerá y hará
respetar, reconociendo el principio de que no hay poder humano sobre las
conciencias". Hay una manifiesta contradicción en esta declaración: se
impone un culto y se prohibe los demás, lo que constituye una absoluta
intolerancia; y a región seguido se afirma que "no hay poder humano sobre
las conciencias".
Este régimen se mantuvo hasta 1871, año en que se admitió la tolerancia de
cultos solamente " en las colonias que se formaren en lo sucesivo", con fines
de colonizar y atraer inmigrantes. La excepción fue suprimida en 1878 y
restablecida dos años después (1880). La Ley de 27 de Agosto de 1906
reformó la Constitución permitiendo el ejercicio público de otros cultos,
derogándose por Ley de 29 de Agosto de 1907 el capítulo que en el Código
Penal castigaba los delitos contra la religión del Estado.
Acorde con la tolerancia introducida en 1906, nuestra legislación civil fue
asimilado nuevas instituciones, como el matrimonio civil (Ley do 11 de
Octubre de 1911), el divorcio absoluto (Ley de 15 de abril de 1932), el
Registro Civil (D.R. de 3 de Julio de 1943), instituciones jurídicas agrupadas
ahora en el Código de la Familia sancionado el 23 do Agosto de 1972.
El art. 4 expresa que se respeta la libertad de religión y de creencias
espirituales y que el Estado es independiente de la religión; norma que
concuerda con la del. art. 21.3, que consagra el derecho "a la libertad de
pensamiento, espiritualidad, religión y culto, expresados en forma individual
o colectiva, tanto en público como en privado, con fines lícitos".
El art. 86 prescribe que se garantiza la libertad de conciencia y de le y la
enseñanza de religión en los centros educativos, "así como la espiritualidad
de las naciones y pueblos indígena originario campesinos ..." El art. 4 del
código de la Educación Boliviana expresa:
"Be reconoce la libertad de enseñanza religiosa. En los establecimientos
educativos fiscales se enseñará la religión católica. Eos padres o tutores que
no quieran que sus hijos o pupilos reciban Instrucción religiosa, lo harárT
constar así, por escrito, a tiempo de inscribirlos. Eos alumnos que no estudien
religión recibirán normas de educación moral.
El Estado reconocerá una partida en el presupuesto nacional para
subvencionar el servicio de la enseñanza religiosa". Esta disposición
concuerda con el Artículo 57 de la Ley de Reforma Educativa.
La libertad (tolerancia) de cultos corresponde a todos los demás derechos
individuales proclamados por la Revolución Francesa y garantizados en
todas las Constituciones contemporáneas.-"En un sistema jurídico político
fundado en la idea de libertad y de igualdad de los habitantes ante la ley
dice Bielsa- El Estado no puede tomar partido por una religión dada, aún
cuando la mayoría la profese o pertenezca a su iglesia o comunión". El
derecho de elegir y practicar libremente cualquier culto está limitado por las
leyes de orden público, la moral y las buenas costumbres.
NOTAS
(1) La Guerra de Treinta Años entre católicos y protestantes, (1618-1648),
que concluyó con el Tratado de Westfalia
(2) Despacho de laAP. desde Moscú, el 1-10-1990, publicado en el diario
"Los Tiempos" el 2- 10-90.
(3) "TheNew York Times", New York, EE.UU., 20-6-87.
CAPÍTULO XXIX
INVIOLABILIDAD DEL DOMICILIO Y DE LA
CORRESPONDENCIA PRIVADA
1. -EL DOMICILIO
El art. 25.1 dice que "toda persona tiene derecho a la inviolabilidad de su
domicilio"
El derecho a la inviolabilidad de domicilio es consecuencia de la libertad
individual y del derecho de propiedad y de posesión que le acompaña. Es
un derecho tradicional que viene desde la antigüedad. Se dice que los
romanos tenían en su hogar a sus dioses tutelares que les inspiraban y
protegían su tranquilidad y sus bienes.
Comprende todas las dependencias de una casa: interiores, jardines, patios,
huertos, etc.
El art. citado concuerda con los arts. 298 y 299 del Código Penal, que
establecen las penas contra allanamiento de domicilio por particulares y/o
funcionarios públicos. Es de notar que el Código Penal habla de
"allanamiento", cuando debe decir violación, que es el ingreso abusivo y no
autorizado, por la fuerza, aun domicilio particular. Allanamiento es el ingreso
de la autoridad competente con orden escrita y motivada, en los casos en
que la ley lo permite.
En el. precepto constitucional la palabra "domicilio" no tiene el mismo
sentido que en Derecho Civil, en el que significa residencia principal o
actividad principal (art. 24 CC.). Para la Constitución, domicilio es la
residencia, hogar, morada o habitación del propietario o locatario, sea esta
morada permanente o temporal. "Puede ser cuarto de hotel, camarote de
navio o un departamento en alguna casa de alquiler", dice Carrasco. No es
el concepto formal o jurídico de domicilio el que se aplica en este caso, sino
el material y personal, como lo señala Bielsa.
La Declaración Americana de los Derechos y Deberes del Hombre dice en
su art. IX: "Toda persona tiene el derecho a la inviolabilidad de domicilio". La
Declaración Universal de los Derechos del Hombre, por su parte, dice en su
art. 12: "Nadie será objeto de injerencia arbitraria en su vida privada, su
familia, su domicilio o su correspondencia, ni de ataques a su honra o a su
reputación. Toda persona tiene derecho a la protección de la ley contra
tales injerencias o ataques.
a) Limitaciones.- Este derecho está limitado por razones de justicia y do
seguridad colectiva que también protegen a los moradores, con carácter
general. En estos casos debe exhibirse una orden "escrita y motivada de
autoridad competente", que puede ser judicial, política o administrativa. La
inviolabilidad de domicilio no puede servir para encubrir delitos y
contravenciones a las leyes y a la moral, ni para impedir el auxilio necesario
y oportuno en determinadas circunstancias, como el delito in fraganti.- E1
art. 180 del Pr. Pen. dispone:
(Allanamiento de domicilio),- Cuando el registro deba realizarse en un
domicilio se requerirá resolución fundada del juez y la participación
obligatoria del fiscal.
Por su parte el art. 230 define la flagrancia:
(Flagrancia) Se considera que hay flagrancia cuando el autor del hecho es
sorprendido en el momento de intentarlo, de cometerlo o inmediatamente
después mientras es perseguido por la fuerza pública, el ofendido o los
testigos presenciales del hecho.
Se entiende que en estos casos la autoridad o cualquier persona pueden
ingresar sin permiso previo a un domicilio en que se esté cometiendo o se
haya cometido un delito, para aprehender al delincuente y entregarlo a la
autoridad competente, como lo dispone el Inciso 3 del artículo 36 de la Ley
Reglamentaria de 11 de Noviembre de 1886.
Casos de necesidad.- Entiéndese asimismo que la solidaridad social permite
que los vecinos y transeúntes ingresen a un domicilio particular, sin esperar
el permiso de su morador, para prestar auxilio urgente con objeto de "evitar
los estragos de un incendio, inundación u otra desgracia o peligro"; "para
evitar un asesinato, homicidio, suicidio u otro delito igualmente grave, de
cuya preparación a cometerse se tengan datos evidentes (art. 36 de la
citada Ley, incisos 1 y 2).
Sediciosos.- El inciso 4 del mismo artículo dispone que una casa o asilo
pueden ser allanados para capturar, previo conocimiento del hecho y
orden escrita de la Prefectura o Subprefectura, en su caso, a los sediciosos,
rebeldes y amotinados que se reúnan en alguna casa con el fin de organizar
una conspiración contra el orden público...".
En los hechos, esta previsión da lugar a abusos y represalias, ya que permite
allanar domicilios a simple denuncia de adversarios políticos o de agentes
policiales, con orden de la autoridad política y no de los jueces
competentes.
Por orden Judicial.- "Cuando las autoridades judiciales ordenan el
allanamiento conforme a las leyes comunes" (art. 36 Ley 11 - XI - 1886).
El art. 38 de esta ley detalla la forma cómo debe practicarse el allanamiento
de una casa, con orden de autoridad competente. El arl. 33 de la Ley Ns
2298 de 20 de diciembre de 2001 dispone que la correspondencia y los
papeles privados de los internos en las penitenciarías, son así mismo
inviolables.
2. LA CORRESPONDENCIA
El art. 25 dispone también la inviolabilidad de las comunicaciones privadas
en todas sus formas, así como de la correspondencia, los papeles y
manifestaciones privadas "contenidas en cualquier soporte", que no podrán
ser incautados, sino en los casos determinados por ley, previa orden
escrita y motivada de autoridad judicial competente. Agrega que "ni la
autoridad pública, ni persona u organismo alguno podrán interceptar
conversaciones o comunicaciones privadas mediante instalación que las
controle o centralice", y que no producirá efecto legal la prueba'obtenida
en violación a estos preceptos.
Los artículos 300 y 301 del Código Penal establecen penas a los delitos de
violación de correspondencia y papeles privados y de violación de secretos
en correspondencia no destinada a la publicidad; penas consistentes en
reclusión de tres meses a dos años o multa de sesenta a doscientos cuarenta
días.
Este derecho emana de la libertad personal, de opinión, de expresión y de
trabajo, y está consagrado en el artículo X de la Declaración Americana de
los Derechos y Deberes del Hombre que dice: "Toda persona tiene derecho
a la inviolabilidad y circulación de su correspondencia"..También se ocupa
de este punto el art. 12 de la Declaración Universal de los Derechos
Humanos, citado más arriba.
En los tiempos de la Inquisición y el absolutismo, cuando todo era propiedad
del rey y de sus áulicos, la correspondencia y los papeles de cualquier tipo
eran violados permanentemente. Este derecho fue proclamado por primera
vez en Francia bajo el reinado de Luis XI. La Convención lo ratificó; pero más
tarde lo desconoció al encargar a dos de sus miembros abrir la
correspondencia particular.
a) Limitaciones.- Este derecho está limitado por las leyes especiales que
autorizan al Juez en lo Penal “siempre que se considere útil para la
averiguación de la verdad (...) la incautación de correspondencia,
documentos y papeles privados o públicos”, (art. 190 Pr. Pen.)
En caso de quiebra mercantil, el auto que declara la misma debe contener
una orden para que el quebrado entregue al síndico "los libros de
contabilidad obligatorios y voluntarios, así como los documentos y demás
papeles..."; y otra "orden al correo, telégrafo y análogos para que entreguen
al síndico toda la correspondencia y comunicaciones dirigidas al quebrado"
(art. 1551, inc. 5 y 6, Código de Comercio). Por otra parte, una vez dictado
el auto de quiebra "se procederá de inmediato a la incautación de...
documentos y papeles del quebrado..." (art. 1604 del Código de Comercio).
CAPÍTULO XXX
EL DERECHO DE DEFENSA Y SUS GARANTÍAS
1. - DERECHO DE DEFENSA
La defensa enjuicio conforme a normas y procedimientos establecidos por
ley es un derecho umversalmente reconocido que integran garantías
constitucionales de las que trata este capítulo.
Los arts. 115 a 117 resumen así las garantías del derecho de defensa: - Toda
persona será protegida oportuna y efectivamente por los jueces y tribunales
en el ejercicio de sus derechos e intereses. El Estado garantiza el debido
proceso a través de una justicia gratuita, transparente y sin dilaciones.
-Ninguna persona será condenada sin haber sido oída y juzgada
previamente. Nadie será procesado ni condenado más de una vez por el
mismo hecho.
-Se garantiza la presunción de inocencia. En caso de duda, se aplicará la
norma más favorable al encausado.
-Toda sanción debe fundarse en una ley anterior al hecho punible. No se
aplica pena de privación de libertad a deudas u obligaciones patrimoniales.
Estos artículos concuerdan con el título I del libro I del Procedimiento Penal.
El art. 178.1 dispone la gratuidad, publicidad, celeridad y probidad en los
juicios. El art. 23 de Código Civil, por su parte, dice que "los derechos de la
personalidad son inviolables y cualquier hecho contra ella confiere al
damnificado la facultad de demandar el caso de ese hecho, aparte del
resarcimiento por el daño material o moral". El art. 70 del Código Penal
manda que "nadie será condenado a sanción alguna, sin haber sido oído y
juzgado conforme al Código del Procedimiento Penal. ("Nullapoena sine
juditio"). Dicho artículo concuerda con los arts. 1 y ss. del Procedimiento
Penal.
Estos preceptos consagran el principio universal de derecho de defensa y
de igualdad ante la justicia. "No basta que la Constitución proclámela
igualdad ante la ley-dice Bielsa-, Aun las leyes fieles al precepto
constitucional no aseguran por si solas esa igualdad definitivamente, pues si
los derechos que ellas atribuyen o reconocen son vulnerados o afectados
injustamente, sus titulares deberán defenderlos en justicia. De ahí que un
derecho que no tiene protección jurisdiccional (o más precisamente
judicial) es un derecho nominal, o virtual cuando más".
"Todo hombre se presume inocente hasta que haya sido declarado
culpable", dice el art. 9 de la Declaración de los Derechos del Hombre y del
Ciudadano. La Declaración Americana de los Derechos y Deberes del
Hombre consagra la igualdad ante la ley (art. III), ante la justicia (art. XVII) y
el derecho de defensa (art. XXVI). En igual forma la Declaración Universal de
los Derechos del Hombre proclama la igualdad ante la ley y el derecho a la
protección de ésta (art. 7); el derecho al recurso efectivo contra actos que
violen los derechos fundamentales (art. 8); el derecho a ser oído antes de ser
condenado (art. 10); y la presunción de inocencia, mientras no se pruebe lo
contrario (art. II).
El art. 8 de la C.A.D.H. declara que:
1. Toda persona tiene derecho a ser oída, con las debidas garantías y
dentro de un plazo razonable, por un juez o tribunal competente,
independiente e imparcial, establecido con anterioridad por la ley, en la
sustanciación de cualquier acusación penal formulada contra ella, o para
la determinación de sus derechos y obligaciones de orden civil, laboral,
fiscal o de cualquier otro carácter.
2. Toda persona inculpada de delito tiene derecho a que se presuma su
inocencia mientras no se establezca legalmente su culpabilidad. Durante el
proceso, toda persona tiene derecho, en plena, igualdad, a las siguientes
garantías mínimas:
a) Derecho del inculpado de ser asistido gratuitamente por el traductor
o intérprete, si no comprende o no habla el idioma del juzgado o tribunal;
b) comunicación previa y detallada al inculpado de la acusación
formulada;
c) concesión al inculpado del tiempo y de los medios adecuados para
la preparación de su defensa;
d) derecho del inculpado de defenderse personalmente o de ser asistido
por un defensor de su elección y de comunicarse libre y privadamente con
su defensor;
e) derecho irrenunciable de ser asistido por un defensor proporcionado
por el Estado, remunerado o no según la legislación interna, si el inculpado
no se defendiere por si mismo ni nombrare defensor dentro del plazo
establecido por la ley,
0 derecho de la defensa de interrogar a los testigos presentes en el tribunal
y de obtener la comparecencia, como testigos o peritos, de otras personas
que puedan arrojar luz robre los hechos;
g) derecho a no ser obligado a declarar contra si mismo ni a declararse
culpable; y
h) derecho de recurrir del fallo ante juez o tribunal superior.
2. S E ItV I CIO NACIONAL DE DEFENSA PÚBLICA (I ¡ay No. 249G de 4 de Agosto
de 2.003).
Esta I-oy se basa en los principios contenidos en los artículos 115 a 117 y 178,1
de la CPE., y en las Declaraciones Internacionales de Derechos
mencionadas en el punto 1: que el derecho de defensa es inviolable; que
desde el momento de su detención, todos tienen derecho a ser asistidos por
un defensor; la igualdad ante la ley y ante la justicia; que la justicia debe ser
gratuita, pública, rápida e imparcial.
El Cap. I del Título II (artículos 13 a 19) establece la estructura operativa y
administrativa del Servicio, compuesto por un, director Nacional, Directores
Distritales, defensores públicos, abogados,asistentes y otros. El Cap. II (arts.
20 a 34) se refiere a la estructura operativa; señala los requisitos, atribuciones,
derechos y obligaciones de sus integrantes. El Título III concierne al Régimen
Disciplinario; el IV al Régimen Económico y
Administrativo., . .
El art. 6 obliga a las entidades estatales a cooperar gratuitamente a este
Servicio, que, según el art. 7, es permanente, “durante las 24 horas del día,
incluyendo domingos y feriados”. El defensor público “tiene patrocinio y
poder suficiente para actuar en favor del imputado en los términos
señalados en el art. 109 del Código de Prosedimiento Penal...” (art. 25) Según
este artículo, los defensores públicos no requieren poder especial, ya que su
personería arranca del mandato que les da la ley.
3. -JURISDICCIÓN Y COMPETENCIA
Dice el art. 122 que "son nulos los actos de los que usurpen funciones que no
les competen, así como los actos de los que ejerzan jurisdicción o potestad
que no emane de la ley".
El art. 117-1 dice que nadie sufrirá pena que no le haya sido impuesta por'
sentencia ejecutoriada y por autoridad competente. Lo mismo disponen los
artículos 70 del Código Penal y l5 del Proc. Penal.
Jurisdicción "es la potestad que tiene el Estado de administrar justicia por
medio de los órganos del Poder Judicial de acuerdo a la Constitución
Política y a las leyes. Es de orden público, sólo emana de la ley y es
indelegable". Competencia "es la facultad que tiene un tribunal o juez para
ejercer la jurisdicción en un determinado asunto". Esta competencia se
determina en razón del territorio, de la naturaleza, materia y cuantía de los
asuntos, y de la calidad de los titigantes- (arts. 25, 26 y 27 L.OJ.).
4. - FUEROS
Dice el art. 110.1 que los que vulneren derechos y garantías constitucionales
quedan sujetos a ' la jurisdicción ordinaria. La Constitución de 1880 decía;
"Los que ataquen derechos y garantías constitucionales no gozan de fuero
y quedan sujetos ala jurisdicción ordinaria". El art. 5 del Código Penal dice
que "la ley penal no reconoce ningún fuero ni privilegio personal...".
Este precepto emana del principio de igualdad ante la justicia, según el cual
todos deben ser juzgados por los mismos jueces competentes, ya que no
pueden establecerse tribunales o juzgados de excepción, (art. 120.1), y
"nadie puede ser juzgado por comisiones especiales o sometido a otros
jueces que los designados con anterioridad al hecho de la causa..."
(concordante con el art. 2 del Proc. Penal). Esta es una garantía de que la
administración de justicia se hará con las mismas leyes y con los mismos
jueces, sin discriminación alguna.
En un Estado de Derecho no se admite los privilegios y distinciones que en
esta materia establecían las monarquías absolutas y los regímenes de la
antigüedad, que se traducían en los fueros en razón de castas, clases,
profesiones y religiones. Recordemos que la Carta Magna (1215) reconoció
a los barones el derecho a ser juzgados "por sus pares", vale decir por los de
su misma clase, y no por otros. Así existían fueros militar, eclesiástico y secular.
La Constitución de 1878 abolió los fueros en Bolivia, y las leyes de 29 de
Septiembre de 1906 y de 3 de Octubre de 1910 abrogaron los fueros
eclesiástico y militar, aun cuando el segundo rige todavía para el
juzgamiento de delitos e infracciones cometidos en el ámbito estrictamente
militar, dentro y como consecuencia de la actividad castrense. En estos
casos se aplica la ley de Organización Judicial Militar y el Código Penal
Militar de 22 de Enero de 1976. Los delitos comunes de los militares son
juzgados por la justicia ordinaria.
5. - LEY ANTERIOR AL PROCESO
La condena penal debe fundarse en una ley anterior al proceso y sólo se
aplicarán las leyes posteriores cuando sean más favorables al
encausado,según los arts. 116.11 y 123 conc. con el art. 2, in ñne, del Proc.
Penal, porque un principio universal de derecho prohíbe aplicar penas
creadas en leyes ex-post-facto (Nullapoena sine lege). Esta norma tiene la
excepción de leyes posteriores que sean más favorables al encausado, que
se aplicarán de preferencia, según lo ordena también los art. 4 del Código
Penal, siguiendo el principio de "ampliar lo favorable y restringir lo odioso".
Según la jurisprudencia norteamericana, son leyes ex-post-facto: "l9. Toda ley
que hace criminal un hecho anterior a su sanción, el cual no era punible al
tiempo de la comisión, y castiga ese hecho. 29. Toda ley que agrave un
crimen o lo haga mayor que cuando fue cometido. 39. Toda ley que cambie
la pena e imponga una mayor que la que correspondía al crimen al tiempo
de su comisión. 49. Toda ley que altere las normas legales de prueba y
admita menos o diferentes testimonios, para condenar al autor de un delito,
que la ley vigente al tiempo en que el mismo fue cometido". (1)
La Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano dice en su art.
8 que "nadie puede ser castigado sino en virtud de una ley sancionada y
promulgada con anterioridad al delito y legalmente aplicada". Disposiciones
similares contienen los artículos XXVI de la Declaración Americana de los
Derechos y Deberes del Hombre y II de la Declaración Universal de los
Derechos del Hombre.
6. - IRRETROACTIVIDAD DE LAS LEYES
El artículo 123 dice que la ley no tiene efecto retroactivo, salvo en materia
laboral, cuando lo determine expresamente; en materia penal, cuando
beneficie al imputado, y en materia de corrupción de los servidores públicos.
El principio de la irretroactividad se basa en la distinción' entre derechos
adquiridos y meras expectativas, que existen en todo régimen de derecho.
Una ley posterior a un derecho adquirido no puede modificarlo,
desconocerlo ni alterarlo, porqué este hecho introduciría la incertidumbre,
el temor y el caos en la vida social, que el derecho trata de ordenar y de
garantizar en beneficio general. En cambio, las meras expectativas, que son
ventajas o facultades potenciales, todavía no ejercidas, pueden ser
afectadas por leyes posteriores.
Las excepciones que establece este artículo en materia social y penal se
basan en el principio de "ampliar lo favorable y restringir lo odioso".
7. - DECLARACIONES CONTRA SI MISMO Y TORTURAS
Nadie será obligado a declarar contra sí mismo en materia penal, o contra
sus parientes consanguíneos hasta el cuarto grado inclusive, o sus afines
hasta el segundo, de acuerdo al cómputo civil, dice el art. 121.1 de la
Constitución, concordante con el art. 6 del Proc. Penal.
Este precepto nació en Inglaterra en el siglo XVI como reacción frente a los
métodos inquisitoriales de los tribunales eclesiásticos, y se aplica solamente
en materia penal, como una protección al encausado, porque en derecho
civil la confesión es prueba (art. 409 del Proc. Civil).
El art. 114 prohíbe toda forma de tortura, desaparición, confinamiento,
exacción, coacción y cualquier forma de violencia física o moral. Los
servidores que las apliquen, instiguen o consientan serán destituidos, sin
perjuicio de las sanciones consiguientes. Agrega que son nulas de pleno
derecho las declaraciones obtenidas por esos medios.
En épocas pasadas era frecuente aplicar tormentos y todo género de
coacciones para hacer confesar sus "delitos" a los encausados. Recuérdese
que las Leyes de Partida justificaban la tortura "para escudriñar y saber la
verdad de los malos fechos que se hacen encubiertamente o no pueden
ser sabidos ni probados por otra manera- (Partida III, ley 1, Tit. 3). En l'Vancia,
"la cuestión preparatoria" consistía en la aplicación de torturas para obtener
la confesión en juicio; procedimiento que se empleó hasta 1780. Escriche
dice que este "es un medio seguro de condenar al inocente débil y absolver
al delincuente robusto"... "Porque la verdad que persiguen no está
escondida en los músculos ni en las fibras".
Las enmiendas V y VIII de la Constitución norteamericana prohíben obligar
a que alguien declare contra si mismo, en materia penal, y aplicar "castigos
crueles e inusitados". Los arts. XXVI de la Declaración Americana de los
Derechos y Deberes del Hombre y 5 de la Declaración Universal de los
Derechos del Hombre prescriben que a nadie se impondrá penas crueles,
inhumanas o degradantes.
El 3 de febrero de 1985 se abrió a la firma en las Naciones Unidas, en Nueva
York, la Convención Contra la Tortura y otros Tratos o; Penas Crueles,
Inhumanos o Degradantes, aprobada por Consenso en la Asamblea
General de la ONU; la misma que compromete a los Estados signatarios a
tipificar estos actos en sus legislaciones como delitos punibles y a aplicar
medidas para impedirlos, aun en estados de guerra o de amenaza de
guerra, inestabilidad política o emergencia pública. (2) La XV Asamblea
General de la OEA., celebrada en Cartagena, Colombia, en la primera
semana de diciembre de 1985, tipificó la tortura como un crimen
internacional lesivo a la dignidad humana. El 24 de Septiembre de 1987 se
suscribió la Convención Interamericana para Prevenir y Sancionar la Tortura,
cuyo art. I2 dispone que las partes "se obligan a prevenir y sancionar la
tortura". Las Constituciones de 1826 y posteriores empleaban la frase "no se
usará más el tormento, ni se exigirá confesión por apremio"
(1826,1831,1834,1839). Otras prohibían, además del tormento, "toda pena de
infamia trascendental" (1843,1851); la pena de azotes y otras mortificaciones
(1858, 1871,1878,1880,1938,1945 y 1961). La redacción actual del art. 114 se
introdujo en 1967.
8. - PUBLICIDAD EN LOS JUICIOS
El art. 178.1 dispone la publicidad de los juicios como condición esencial de
la administración de justicia.
La publicidad en los juicios tiende a garantizar el derecho de defensa en
condiciones de igualdad ante la ley, a fin de que todos puedan seguir y
controlar la administración de justicia, que es de orden público porque
precautela la vida, la seguridad, la integridad de las personas y de los
bienes, todo lo cual es esencial para una convivencia armónica y civilizada.
El sumario, que es la primera etapa del juicio penal, llamado preparatoria
por el Procedimiento Penal (art. 277 y sgtes.), prepara el
juicio “mediante la recolección de todos los elementos que permitan fundar
la acusación del fiscal o del querellante Estas diligencias tienen por objeto
preparar el juicio mediante la averiguación de las circunstancias que
rodean el delito, y otros detalles relativos al mismo. Para asegurar el éxito de
estas investigaciones se rodeaba al sumario de la mayor reserva, a fin de
evitar interferencias. Pero el secreto daba lugar a abusos y arbitrariedades
que desvirtuaban su finalidad, tornándolo odioso. En efecto, a título de
secreto el imputado no conocía directamente los cargos que se le hacían
ni las pruebas que se producían en su contra, coartando su derecho de
defensa, que está garantizado por la
Constitución y las leyes.
El secreto del sumario se originó en los sistemas represivos que imperaban
antes de la Revolución Francesa (como la "cuestión preparatoria"), cuando
el imputado no era asistido por un defensor ni podía ofrecer testigos u otros
medios de prueba.
9. - PENAS DE INFAMIA Y DE MUERTE CIVIL
Está prohibida la infamia, la muerte civil y el confinamiento, dice el art. 118.1
La Ley.de Partidas (Partida VIII, Tit. VI, Ley la).- definía la infamia como "la
perdida o lesión del honor y reputación; o sea el descrédito, abominación o
mala fama en que cae alguno por su mal obrar. (3) Para Escriche, la infamia
equivalía a una ex comunión civil, pues quien la sufría quedaba aislado,
víctima del desprecio general, En Roma, la infamia era de hecho y de
derecho. Incurría en la primera el que cometía acciones deshonrosas o
contrarias a las buenas costumbres. La infamia de derecho era declarada
por la ley, como en los casos de mujeres adúlteras, rufianes, farsantes,
cómicos, militares degradados, usureros, abogados que pactaban "cuota-
litis" con sus clientes, etc.
Se ha señalado que, desaparecida la infamia legal en la Constitución,
subsiste la infamia moral, que "no la declara la ley ni el juez, la declara el
jurado inapelable de la opinión pública". (Luis Paz).
La muerte civil, que se aplicaba durante la Edad Media, consistía en la
privación total de los derechos civiles que "mataba" prácticamente a las
personas, pues las reducía a la inactividad y aislamiento completos. Esta
pena, como la anterior, ha sido borrada de las legislaciones de los pueblos
civilizados por su carácter oscurantista e inhumano. En España quedó
abolida en 1771 y en Francia en 1854. Nuestro antiguo Código Civil la
contemplaba en el Cap. 3a. Tit. Ia. del libro Ia.
El confinamiento era un castigo político aplicado durante el estado de sitio
a quienes el gobierno en funciones sindicaba de haber conspirado contra
el orden público. Debía cumplirse en una capital de departamento o de
provincia "que no sea malsana". En los hechos, esta última condición no solía
cumplirse, pues, por lo general, los sindicados eran confinados en las
fronteras más alejadas e insalubres del país.
10. -PENA DE MUERTE
La Constitución de 1967 abolió la pena capital, cambiándola con la de
presidio por 30 años, sin derecho a indulto en los casos en que se aplicaba
antes aquélla: asesinato, parricidio y traición a la patria.
Sin embargo, el Decreto Ley N9 09980, de 5 de Noviembre de 1971
(inconstitucional), restableció la pena de muerte para esos tres delitos y para
el terrorismo; para "los atentados contra la vida de dignatarios de Estado, de
los miembros de las Fuerzas Armadas de la Nación, del orden público, por
motivaciones políticas"; para el secuestro de personas y "actos de guerrilla
rural o urbana".
El Código Penal Militar la establece en su art. 22 para los siguientes delitos:
1). traición a la patria en sus diversas formas (art. 54); 2). espionaje (arts. 56 y
57); 3). revelación de documentos e informaciones secretas a naciones
extranjeras en tiempo de guerra (art. 58); 4). sustracción, alteración,
supresión, desvío o cambio de informes o documentos militares secretos,
para favorecer a naciones extranjeras o al enemigo (art. 59); 5)espionaje en
instalaciones militares, en tiempo de guerra (Art 60; 6) sabotaje en tiempo de
guerra (art. 63); 8).- rebelión para favorecer al enemigo (art. 70). El art. 15.1
dice que “no existe la pena de muerte”.
Aplicada desde los tiempos antiguos en el homicidio y en la ley del talión,
ésta era muy común entre los hebreos, griegos, romanos y en el derecho
canónico. La ejecución de la pena de muerte era motivo de discriminación
social, pues los plebeyos iban a la horca, los nobles sufrían el garrote y los
militares el arcabuceo.
Una controversia secular opone a los partidarios y a los impugnadores de la
pena de muerte.,
La Asamblea General de la OEA., realizada en Washington, EE.UU., en
noviembre de 1987 aprobó una resolución, a iniciativa de Uruguay,
recomendando la eliminación de la pena de muerte en las legislaciones de
los Estados miembros.
Pese a que los abolicionistas han ganado terreno se la mantiene, entre otros,
en estos Estados:
Estados Unidos de América, donde el Tribunal Supremo de Justicia Federal
autorizó en; 1976 a los estados a reimplantarla en sus legislaciones. Desde
entonces hasta el 20 de noviembre de 1990 se ejecutó 142 sentencias de
muerte, de las cuales 25 en el estado de Florida.
Bélgica, Irlanda y Grecia son los únicos países de Europa occidental que
mantienen esa pena, aunque no la ejecutan desde hace muchos años,
pues la conmutan con la de presidio.
Hasta 1.990 se la mantenía en los países ex-socialistas, con excepción de la
República Democrática Alemana (desaparecida ei 3 de octubre de 1990
con la reuniñcación) que la abolió en 1987,y en Nicaragua, que lo hizo en
1979. Se aplicaba la pena de muerte en esos países a los delitos de
homicidio, violaciones, atracos, terrorismo, desvío de aviones y falsificación
do moneda; pero podía ser conmutada por cadena perpetua y presidio. El
gobierno socialista de Francia la abolió en septiembre de 1981, después de
casi dos siglos de controversia al respecto; y en Australia, dundo no so la
aplicaba desde hacia 20 años, (se la conmutaba con la de cadena
perpetua) dejó de existir oficialmente en agosto de 1984.
Gran Bretaña la aplica solamente en tiempos de paz para delitos de traición
y de piratería. Un protocolo del Consejo de Europa permite a sus miembros
aplicar esta pena en tiempo de guerra; pero la asamblea parlamentaria de
dicho Consejo, reunida en Estrasburgo el 4 de'octubre de 1994, solicitó por
gran mayoría la abolición definitiva de la pena "tanto en tiempo de paz
como de guerra".
En Asia se mantiene la pena en todos los países, con excepción de Hong
Kong.
En China se la aplica a una diversidad de delitos en función a la "gravedad"
del caso y según "el nivel de indignación que provoque en las masas".
La pena de muerte fue restablecida en 1993 en Filipinas, donde se dice que
una asociación de jueces exige que cada uno de sus nuevos miembros se
inicie, como condición de admisión, con la sentencia a muerte de un
delincuente. El “Club de la guillotina”, como se llama, se describe como un
grupo de apoyo profesional y moral. (Revista TIME, 20-31995).
Todos los países de Oriente Medio tienen vigente la pena de muerte para
delitos como el asesinato, violación, atentados contra la seguridad del
Estado, crímenes económicos, narcotráfico, y, en los países islámicos,
además de los anteriores, el adulterio, la sodomía y otros.
En Africa conservan la pena, entre otros, Burundi, Camerún, Congo, Etiopía,
Guinea Ecuatorial, Ghana, Kenia, Mauritania, Namibia, Nigeria, Sierra Leona,
Somalia, Sudán, Zaire. En Sud Africa, la Corte Constitucional creada a
comienzos de 1995 abolió la pena el 6 de junio del mismo año. en una
decisión resistida por la minoría blanca.
En América Latina, no hay pena de muerte en los siguientes países, según sus
Constituciones: en Brasil, excepto el caso de guerra declarada por el
Congreso (art. 5 XLVII); en Ecuador (art. 23), Honduras (art. 66), Panamá (art.
29), Uruguay (art. 26), Venezuela, cuyo art. 43 dice que "el derecho a la vida
es inviolable. Ninguna ley podrá establecer pena de muerte ni autoridad
alguna aplicarla", y Colombia (art. 11).
NOTAS
(1) Citado por TRIGO, Ciro Félix, en Ob. Cit. pp. 407-408.
(2) El Proyecto de Convención en las Naciones Unidas fue presentado
originalmente por Argentina, Suecia y Holanda, países a los que se
sumaron luego Bolivia, Colombia, Costa Rica, República Dominicana
y España. La Convención fue suscrita el primer día por Argentina,
Afganistán, Bolivia, Colombia, Costa Rica, Dinamarca, República
Dominicana, España, Finlandia, Francia, Grecia, Islandia, Holanda,
Noruega, Portugal, Senegal, Suecia, Suiza y Uruguay.
Un informe de las Naciones Unidas difundido en Ginebra, Suiza, el 6 de Marzo
de 1986, decía que las torturas seguían propagándose en el mundo y que
podrían convertirse "en la plaga de la segunda mitad del siglo XX'. Agregaba
que "ninguna sociedad, independientemente de su sistema político o
ideología, es totalmente inmune a las torturas", que "van desde las golpizas
y las quemaduras a la extracción de las uñas y los dientes, descargas
eléctricas y violación. (Diario "PRESENCIA" de La Paz, 7-3-1986).
Jorge Carpizo, presidente de la Comisión Nacional de Derechos Humanos
de México, dijo que muchos policías en su país consideran la tortura como
"parte de su trabajo". (Despacho de AP., diario "LOS TIEMPOS",
Cochabamba, 17-10-90).
(3) CABANELLAS, Guillermo.- "Diccionario de Derecho Usual".
CAPÍTULO XXXI
GARANTÍAS SOBRE EL ORDEN JURÍDICO, LA
CAPACIDAD DE LAS PERSONAS Y LAS CARGAS PÚBLICAS
1. - LEYES Y REGLAMENTOS
El art. 410.11 expresa que "la Constitución es la norma suprema del
ordenamiento jurídico boliviano y goza de primacía frente a cualquier otra
disposición normativa". Por su parte, el art. 109-1 explica que "todos los
derechos reconocidos en la Constitución son directamente aplicables y
gozan de iguales garantías para su protección".
De ambas disposiciones se desprende que los derechos fundamentales, i
bien pueden ser regulados por ley en cuanto a detalles no previstos en el
texto constitucional, no pueden ser alterados en su esencia a título de esa
regulación. Esto es particularmente concerniente al régimen de policía,
donde, a título de reglamentaciones, son frecuentes las invasiones a los
derechos fundamentales. El dominio de aplicación de este gran principio es
tan extenso -dice Bielsa- que bien puede considerárselo como d mayor en
el orden de las garantías del sistema constitucional"; y hace notar el mismo
autor que no sólo se prohibe alterar derechos y garantías expresos, sino
también principios que sirven de base al sistema, aunque no estén
consignados a la letra en la Constitución.
En efecto, la potestad reglamentaria está limitada por la propia norma
constitucional, que no puede ser alterada en su esencia ni en su ejercicio
por otras normas jerárquicamente inferiores. Además, estos principios,
derechos y garantías no necesitan de reglamentación previa para su
cumplimiento, porque son preceptos básicos, fundamentales, de orden
público, expresados en términos claros, concisos y suficientes, cuyo
desconocimiento nadie puede alegar.
2. - DERECHOS Y GARANTÍAS NO ENUNCIADOS
El art. 13.11 contiene otra garantía de carácter general en cuanto a que los
derechos constitucionales no pueden tomarse "como negación de otros
derechos no enunciados”. En efecto, como la Constitución es un Código
Fundamental que contiene normas y principios básicos, no puede entrar en
detalles sobre todos los derechos y garantías que son propios de un sistema
democrático-representativo de gobierno basado en la soberanía popular.
Por esto, se aclara que no debe suponerse que sólo tienen validez los
derechos "proclamados" en el texto constitucional.:
La enmienda IX de la Constitución norteamericana dice: "La enumeración
de ciertos derechos que se hace en esta Constitución no deberá
interpretarse como denegación o menoscabo de otros derechos que
pertenecen al pueblo", II. CAPACIDAD JURÍDICA
1. -Dice el art. 14.1:
"Todo ser humano tiene personalidad y capacidad jurídicas, con arreglo a
la leyes y goza de los derechos reconocidos por esta Constitución, sin
distinción alguna. .
Este precepto deriva también del principio de igualdad ante la ley, y está
proclamado en todas las Constituciones, incluidas las de los países
socialistas.
El antiguo Código Civil (art. 62) decía que "todo boliviano goza de los
derechos civiles...". O sea que, según este régimen, los extranjeros quedaban
excluidos del goce de esos derechos, lo cual era uií resabio del Derecho
Romano que discriminaba entre los ciudadanos, a quienes se aplicaba el
juscivile, y los extranjeros, que se sometían al jusgentium. Por esta razón, el
art, 11 del antiguo Proc. Civil requería de los extranjeros demandantes la
"fianza judicatumsolvi" para asegurar el pago de daños y costas a que
pudieran ser condenados.
El Código Civil vigente (art, 3-) reconoce que "toda persona tiene,
capacidad jurídica. Esta capacidad experimenta limitaciones parciales sólo
en los casos especialmente determinados por la ley". Esta disposición
concuerda con el art. 52 del Proc. Civil que estipula: "Toda persona
legalmente capaz podrá intervenir en el proceso y pedir la protección
jurídica del Estado; ya sea directamente o mediante apoderado".
Las constituciones de 1826 (art. 149),1831,1834 y 1839 garantizaban "a todos
los bolivianos su libertad civil, su seguridad individual, su propiedad y su
igualdad ante la ley...". La de 1839 (art. 162) decía: "Todos los extranjeros, de
cualquier nación que sean, serán admitidos en Bolivia y podrán vivir en ella
mientras respeten las leyes de la república. La Constitución garantiza su
libertad civil, su propiedad, su seguridad y el ejercicio de su industria,
conforme a las leyes y a los tratados públicos”. En la de 1843 se garantiza los
mismos derechos "a los habitantes de la república". Las Constituciones de
1851,1861,1868,1871, 1878 y 1880 aluden a "todo hombre". Desde 1938 se
habla de "toda persona", y desde 1967 se dice "todo ser humano tiene
personalidad y capacidad jurídicas con arreglo a las leyes".
La DADDH y la DUDH proclaman que "toda las personas son iguales ante la
ley y tienen los derechos y deberes consagrados... sin distinción de raza,
sexo, idioma, credo ni otra alguna" (art. le). La CADH dice en su art. 3 que
"toda persona tiene derecho al reconocimiento de su personalidad jurídica",
El art. 140-1 y II dice: "Ni la Asamblea Legislativa Plurinacional, niningún otro
órgano o institución, ni asociación o reunión popular deninguna clase
podrán conceder a órgano o persona alguna facultadesextraordinarias
diferentes a las establecidas en esta Constitución. No podrá acumularse el
poder público, ni otorgarse supremacía por la que los derechos reconocidos
en esta Constitución queden a merced de órgano o persona alguna". Las
Constituciones anteriores a la de 1967 hablaban del "honor y los bienes de
los bolivianos", dando a entender así que a los extranjeros no alcanzaba esta
protección, porque no gozaban de iguales derechos. La disposición
contenida en el art. 140 aparece en todas las constituciones a partir de 1861.
En las de 1831 y 1851 se daba al Poder Ejecutivo "facultades extraordinarias"
que acompañaban la declaratoria del estado de sitio; facultades de las que
abusaban los gobiernos.
2. -SERVICIOS PERSONALES
El art. 15.V prohíbe la servidumbre, la esclavitud, la trata y tráfico de
personas. El art. 46.III prohíbe toda forma de trabajo forzoso u otra forma de
explotación “que obligue a una persona a realizar labores sin su
consentimiento y justa retribución”. ...
Con la liberación de las colonias españolas a comienzos de siglo XIX, las
primeras constituciones de los nuevos Estados declaraban que no existía la
esclavitud; que los niños nacidos en los territorios nacionales serían libres
("libertad de vientres"), y que quienes se introdujesen desde país extranjero
quedarían libres por el sólo hecho de pisar territorio nacional.
La esclavitud fue muy arraigada en el mundo hasta bien entrado el siglo XIX.
En Rusia existían las "almas muertas" hasta 1861. En Estados Unidos se prohibió
el comercio de esclavos en 1850, y la esclavitud provocó la guerra de
secesión. Lincoln proclamó la libertad de los esclavos el 23 de Septiembre
de 1862. Todavía hoy existen unos cien mil esclavos negros en Mauritania,
Mali, Niger y Arabia Saudita. (1)
Por esto las constituciones bolivianas anteriores a la de 1967 decían, en el
mismo artículo: "La esclavitud no existe en Bolivia. No se reconoce ningún
género de servidumbre" etc. La Constitución de ese año suprimió la primera
frase, entendiendo que no debe hablarse de esclavitud, abolida en la
primera Constitución de la República, y en la de 1831, que declaraba:
"Nadie ha nacido esclavo en Bolivia desde el 6 de Agosto de 1825. Queda
prohibida la introducción de esclavos en su territorio". La abolición de la
esclavitud responde al principio de que "los hombres nacen y permanecen
libres e iguales en derechos" (art. I5.- Declaración de los Derechos del
Hombre y del Ciudadano), y de que "es una verdad evidente por si misma
que todos los hombres han sido creados iguales» (Declaración de la
Independencia de los Estados Unidos de América, de 47-1776). Sin embargo
en nuestro país subsistió una forma de servidumbre, el colonato y el
"pongueaje», hasta el 2 de Agosto de 1953, fecha de la Ley de Reforma
Agraria, cuyos artículos 144 y 145 abolieron el colonato y toda forma de
prestación de servicios personales gratuitos o compensatorios,
estableciendo'el sistema de salarios en todos los contratos individuales y
colectivos. Los decretos supremos Nos. 318 y 319 de 15 de Mayo de 1945,
abolieron el "pongueaje" y el "mitanaje" antes de la ley de Reforma Agraria.
Varias constituciones de América (Argentina, Colombia, Costa Rica,
Ecuador, México y Peni) consignan todavía la prohibición de la esclavitud.
El art. 4 de la D.U.D.H. dice que "nadie estará sometido a esclavitud ni
servidumbre; la esclavitud y la trata de esclavos están prohibidas en todas
sus formas». Por otra parte, la C.A.D.H. consigna en su art. 6, lo siguiente:
1. Nadie puede ser sometido a esclavitud o servidumbre, y tanto éstas
como la trata de esclavos y la trata de mujeres están prohibidas en todas
sus formas.
2. Nadie debe ser constreñido a ejecutar un trabajo forzoso u obligatorio.
En los países donde ciertos delitos tengan señalada pena privativa de la
libertad acompañada de trabajos forzosos, esta disposición no podrá hit
interpretada en el sentido de que prohibe el cumplimiento de dicha pena
impuesta por juez o tribunal competente. El trabajo forzoso no debe afectar
a la dignidad ni a la capacidad física del recluido.
3. No constituyen trabajo forzoso u obligatorio para los efectos de este
urtículo:
a) Los trabajos o servicios que se exigen normalmente de una persona
recluida en cumplimiento de sentencia o resolución formal dictada por la
autoridad judicial competente. Tales trabajos o servicios deberán realizarse
bajo vigilancia y control de las autoridades públicas, y los individuos que los
efectúen no serán puestos a disposición de particulares, compañías, o
personas jurídicas de carácter privado;
b) El servicio militar y, eirlos países donde se admite exención por razones
de conciencia', el servicio nacional que la ley establece en lugar de aquél;
c) El servicio impuesto en casos de peligro o calamidad que amenace la
existencia o el bienestar de la comunidad, y
d) El trabajo o servicio que forme parte de las obligaciones cívicas
normales.
Pese a que la esclavitud ha sido oficialmente abolida en todas las
legislaciones desde las primeras décadas del siglo XIX, persiste, en los
hechos, por las tremendas desigualdades económicas que permiten la
explotación del hombre por el hombre. (2)
3. - CONFISCACIÓN DE BIENES
El art, 23 de la constitución abrogada decía: “Jamás se aplicará la
confiscación de bienes como castigo político”.
Hemos explicado en otra parte que esta pena regía en siglos pasados para
los condenados a muerte, cuyos bienes se apropiaba el fisco, castigando
en esta forma no sólo al reo, sino a los herederos también, aunque fueran
inocentes. En Bolivia era frecuente que durante el siglo XIX se confiscaran los
bienes de los adversarios políticos vencidos o derro cados en los numerosos
cuartelazos.
Las constituciones de 1826 hasta 1851 prohibían "toda confiscación de
bienes". En la de 1871 se agrega la frase "como castigo político, lo que daría
a entender que la confiscación procede como una sanción penal o de otro
tipo, lo que no es correcto. (3)
La D.U.D.II. expresa en su art. 17 que "nadie será privado binariamente de su
propiedad".
La Constitución brasileña dispone en su art. 5-LIV que "nadie será priZvado
de su libertad ni de sus bienes sin el debido proceso legal", y lade 1961 de
Venezuela (art. 250) decía que "el Congreso podrá decretar, mediante
acuerdo aprobado por la mayoría absoluta de sus miembros, la incautación
de todo o parte de los bienes de esas mismas personas (autores y
colaboradores de gobiernos de facto) y de quienes se hayan enriquecido
ilícitamente al amparo de la usurpación, para resarcir a la república de los
perjuicios que se haya causado". Es ésta una excepción al principio que
prohíbe la confiscación arbitraria de bienes; excepción fundamentada en
el enriquecimiento ilícito de quienes usurpan el poder por la fuerza, o se
aprovechan de tal usurpación para beneficiarse abusivamente en perjuicio
de la nación.
III. LAS CARGAS PÚBLICAS
1. IGUALDAD ANTE LAS CARGAS PÚBLICAS
En varios artículos (8.II, 13.1,14.11 y III) se subraya la igualdad en el goce y
ejercicio de los derechos y en el cumplimiento dé los deberes. Esta garantía
deriva del principio de igualdad ante la ley por el cual todos están obligados
a prestar al Estado determinados servicios de orden público en forma
gratuita y temporal, (art. 5, in fine) y en igualdad de condiciones.
La carga pública es de carácter personal, o sea que nadie puede ser
sustituido por otro en su cumplimiento. Entre éstas tenemos:
a) Servicio Militar Obligatorio.- Entre los deberes de los bolivianos, el art.
108.12 señala "prestar el servicio militar, para los varones", concordante
con la Ley del Servicio Militar Obligatorio de 16 de Enero de 1907 y su
D.R de 64-1907.
En algunos países donde no hay servicio militar en tiempos de paz, como los
Estados Unidos de América y Alemania Federal, los llamados a enrolarse en
tiempo de guerra tienen derecho a negarse a ello, de acuerdo con su
conciencia. El art. 4, inc. 3 de la Ley Fundamental de la República Federal
de Alemania de 8 de Mayo de 1949, dice:
"Nadie podrá ser obligado, contra su conciencia, a servir con las armas en
la guerra. La reglamentación se hará por ley federal".
b) Jurados Electorales.- Según el art. 205.1, el Órgano Electoral
Plurinacional (OEP) está compuesto, entre otros, por los jurados de las mesas
de sufragio, cuyos miembros son designados entre los ciudadanos hombres
y mujeres inscritos en los registros electorales. Según el Código Electoral, esta
carga es de carácter obligatorio, .salvo las incompatibilidades y las excusas
debidamente justificadas, contempladas en el Código Electoral, arts. 48 y ss.
c) Jurados de imprenta.- Son elegidos por los Concejos y Juntas
Municipales, "prefiriéndose a los abogados más notables, miembros
de Universidades y propietarios con residencia fija en el lugar", que sólo
podrán excusarse en los casos prevenidos por la misma ley, (Ley de 19-
II925). Como se ha explicado en otra parte, esta institución está
prácticamente en desuso.
2.-IMPUESTOS
La organización económica del Estado y la política fiscal se basan en el
principio de igualdad, dicen los arts. 306.III, 311.1 y 323.1 El art. 323.1V.4
agrega que los gobiernos autónomos "no podrán crear impuestos que
generen privilegios para sus residentes, discriminando a los que no lo son".
Pero esta igualdad no significa que todos contribuyan-al fisco con la misma
suma, pues siendo desiguales los ingresos que perciben las personas por
razón de sus trabajos, comercios, industrias, propiedades o rentas, que varían
grandemente según las condiciones intelectuales, físicas y económicas de
cada uno, sus contribuciones deben ser necesariamente proporcionadas a
sus ingresos, y aun más, -deben ser proporcionalmente mayores para los que
tienen más, ya que de otramanera el impuesto no sería igual, sino desigual.
Es con este espíritu que el artículo 323-1 dice que "la política fiscal se basa en
los principios de capacidad económica, igualdad, progresividad,
proporcionalidad...", etc.
"En la determinación del monto el legislador tiene presentes factores del
orden económico y financiero -dice Bielsa-. El no se limita a procurar recursos
a toda costa, por la mera exacción, pues esa política impositiva sería brutal
y nociva para el mismo sistema. No debe agotar las fuentes del impuesto, ni
trabar la industria y el comercio, ni destruir la propiedad". (4) Los caracteres
del impuesto, de acuerdo a la Constitución, son: igualdad, que se aplica en
proporción a la capacidad económica de los contribuyentes; generalidad,
porque afecta a todos, sin excepción, siendo ésta una característica de la
igualdad; equidad en su creación, distribución y supresión; y competencia,
desde el momento en que sólo el Poder Legislativo puede crear y modificar
impuestos, pudiendo los perjudicados interponer recursos ante el Tribunal
Constitucional contra los impuestos ilegales (art. 202.4 LTCP).
Hay que hacer notar que las tasas, que son contribuciones por servicios
públicos, son diferentes a los impuestos y no tienen las mismas características.
Al contrario, son voluntarias, porque nadie está obligado a usar el correo, el
teléfono, el telégrafo, etc., ni a pagar por algo que no se usa. Las tasas son
sumas fijas iguales para todos, cualquiera que sea la capacidad del usuario
que las paga. Esto hace que, aunque son de carácter general para todos,
no resultan iguales en los hechos, ni equitativas. De aquí que el adelanto
material de los pueblos se mida por el número de teléfonos o de kilovatios
de energía instalados, pues sabido es que las poblaciones atrasadas o
marginales no pueden pagar estos servicios.
3.- LIBRE ACCESO A LAS FUNCIONES PÚBLICAS
El art. 144.II.2 establece que todo ciudadano tiene "derecho a ejercer
Iunciónos públicas, sin otro requisito que la idoneidad, salvo las excepciones
establecidas por ley". (Concordante con los arts. 6, XXy 21 de la Declatración
de los Derechos del Hombre y del Ciudadano; de la Declaración Americana
de los Derechos y Deberes del Hombre, y de la 1 Induración Universal de los
Derechos del Hombre, respectivamente).
La CADH habla en su art. 23 de los derechos políticos que consisten en
"participar en la dirección de los asuntos públicos directamente o por medio
de representantes libremente elegidos... y de tener acceso, en condiciones
generales de igualdad, a las funciones públicas de su país". El art. 234 detalla
las condiciones requeridas para el desempeño de funciones públicas, así
como los impedimentos. Concuerda este artículo con los 236, 238 y 239. El
art. 240 señala las condiciones de revocatoria del mandato de los
funcionarios electos.
El libre acceso a la función pública es un principio de la democracia, en
contraposición a los regímenes de la antigüedad y de la Edad Media, donde
sólo eran admitidos los hombres libres, ciudadanos y patricios, y los miembros
de ciertas clases sociales.
Hay diferencia entre carga pública y función pública. La primera suele ser
gratuita, temporal y obligatoria, mientras que ¡el, empleo es remunerado,
indefinido y voluntario, requiere del consentimiento del empleado,
expresado en un contrato de trabajo o nombramiento escrito. Las llamadas
leyes de Servicio Civil Obligatorio, por las que los gobiernos de fuerza se
sienten autorizados a imponer el ejercicio de funciones públicas a
determinados ciudadanos, no pasan de ser imposiciones de fuerza,
inconstitucionales, incompatibles con un Estado de Derecho.
NOTAS
(1) Según un informe presentado a la Comisión de Derechos Humanos de
la ONU, basado en una investigación de la Sociedad Anti-esclavista
de Londres. Despacho de la Agencia EFE, pub. en el diario "EL
MUNDO", Santa
Cruz. 27-8-81. En Mauritania la esclavitud fue abolida, en el papel, en 1980;
pero se estima que 90.000 negros son “propiedad de bereberes que pueden
cambiarlos por camellos, camiones, armas o dinero, como cosas
materiales'1.
(2) Se estima que unos cien millones de personas viven hay en
condiciones de esclavitud debido a la servidumbre por deudas en la
India y otros países; la explotación del trabajo de los inmigrantes
ilegales en Estados Unidos y de los niños en el campo y en las fábricas;
la explotación de la prostitución; el “apartheid"; el trabajo en las
plantaciones, el colonialismo, etc. La sociedad Antiesclavista de
Londres informó en Agosto de 1984 al Grupo de Trabajo de la ONU
sobre Esclavitud que "la fuerza laboral en muchas plantaciones vive y
trabaja hay en condiciones de miseria similares a aquellas registradas
durante los siglos XVIII y XIX". (Crónica de Alian Whittaker publicada en
el diario "PRESENCIA" de La Paz, el 26-1-985). "El Comité Organizador
de Labor Agrícola“ en EE. UU. informó que un millón de niños mejicanos
viven en ese país en "tácita esclavitud", pues son forzados a trabajar
en campos cercados y en granjas, en condiciones deplorables.
(Despacho de EFE, procedente de México, D.F, publicado en el diario
"LOS TIEMPOS" de Cochabamba el 14-4-1988).
En Brasil, ANSA informó el 28-12-1986 que "cuatro mil trabajadores son
mantenidos en condiciones análogas de esclavitud en 167 establecimientos
rurales del país", en diferentes estados; y que en junio de 1986 "el gobierno
reconoció la existencia del trabajo de esclavos en el medio rural brasileño"
(Diario “EL MUNDO", Santa Cruz de la Sierra, 29-121986).
La Confederación Sindical Unica de Trabajadores Campesinos de Bolioia
(CSUTCB) denunció en octubre de 1990 que "indígenas guaraníes de la
provincia O'Connor de Tarija son sometidos a relaciones de esclavitud y
vendidos por algunos hacendados como parte de determinados territorios"
(Diario "PRESENCIA, La Paz, 16-10-1990).
Dos noticias curiosas se produjeron en 1995 sobre la esclavitud: el 16 de
marzo el estado de Mississipi (Estados Unidos) ratificó la Enmienda XIII de la
Constitución de ese país, que en 1865 abolió la esclavitud. Ese estado fue el
único que hace 130 años se negó a ratificar la Enmienda XUI porque los ex-
propietarios de esclavos reclamaban entonces el reembolso del valor de los
esclavos liberados. Por otro lado, en junio de 1995 la Convención Bautista
del Sur (Estados Unidos, reconoció finalmente que la esclavitud es un
pecado y pidió perdón a los negros por haber promovido la segregación
racial. La Convención, que es la secta protestante más numerosa en los
Estados Unidos, fue fundada en 1845 por esclavistas acérrimos que hasta
hace poco sostenían que Dios había ordenado la separación de las razas.
(3) Ver la edición publicada en 1992 por "Los Amigos del Libro" de la
Constitución Política del Estado, con introducción, notas, comentarios
y concordancias del autor.
(4) BIELSA, Rafael- "Estudios de Derecho Público1'.- Tomo IV.
CAPÍTULO XXXII
CONSERVACIÓN DEL ORDEN PÚBLICO
CAPÍTULO XXXIII
ESTADOS DE EXCEPCIÓN EN OTRAS LEGISLACIONES
SEGUNDA PARTE
DERECHOS POLÍTICOS,
ÓRGANOS DE GOBIERNO Y
REGÍMENES ESPECIALES
CAPÍTULO I
NACIONALIDAD Y CIUDADANÍA
CAPÍTULO III
PARTIDOS Y POLÍTICOS Y GRUPOS DE PRESIÓN
CAPÍTULO IV
SUFRAGIO
SISTEMAS ELECTORALES
CAPÍTULO VI
ÓRGANO LEGISLATIVO
BRASIL
1) Nepotismo.- Extraemos los siguientes datos de un despacho de AP.,
desde Brasilia, publicado en “Presencia” de La Paz el 23-5-9.
Una investigación realizada por María Aparecida de Oliveira para una tesis
de doctorado en ciencia política reveló que “casi la mitad de sus 560
miembros (del Congreso) practica abiertamente el nepotismo”, pues
“senadores y diputados emplean a esposas, hijos, hermanos y sobrinos como
“asesores” con remuneraciones que oscilan entre' dos mil y cuatro mil
dólares... El diputado José Mauricio Linares Barreto, del Partido Democrático
Laborista, empleó a su hijo de 14 años como asesor, con un salario
equivalente a 1176 dólares mensuales... Humberto Lucena (senador) del
mayoritario Partido Movimiento Democrático Brasileño (PMBD), de centro-
derecha... empleó a nueve miembros de su familia, incluyendo cuatro hijos,
un hermano, un yerno, una sobrina y una cuñada... Roseana Sarney, hija del
presidente José Sarney... ahora gana el equivalente a cuatro mil dólares. El
detalle es que Roseana vive en Río de Janeiro a más de 1200 Kmts. de esta
capital, que debería ser su lugar de trabajo”.
2) Burocracia.- “El senado tiene 5800 empleados y la cámara 10.000,
entre permanentes y temporales, y los salarios mínimos - que
corresponderían a ordenanzas- oscilan entre mil y. mil quinientos dólares Por
ley, los diputados tienen derecho a, cinco asesores y lossenadores a cuatro...
el columnista político Villas Boas Correa, del “Jornal do Brasil”, escribió que
las asambleas estatales y cámaras municipales de todo el país siguen el
ejemplo del congreso y están “llenas de empleados fantasmas” que cobran
sin trabajar.
3) Beneficios exorbitantes.- “Los senadores y diputados brasileños,
queademás de recibir salarios equivalentes a 4500 dólares
mensualeslíquidos gozan .de ventajas tales como automóvil con chófer,
combustible, residencia, cuentas telefónicas y pasajes aéreos a sus estados
de origen, todo pago por el contribuyente”.
MÉXICO
La “congeladora” y el “rodillo”.- No es nueva, en efecto, la práctica de
soslayar y dejar pendiente (en el Congreso) durante años las iniciativas de
ley presentadas por los partidos de oposición, al tiempo que las derivadas
del mayoritario (PRt) o del Poder Ejecutivo si son aprobadas, a menudo sin el
tiempo suficiente para hacer análisis a fondo y con el rigor necesario..., es
indispensable eliminar, la "congeladora’', “una de las instituciones más
vergonzosas de la Edad Media en el Congreso”. (Comentario del diario
EXCELSIOR, de la ciudad de México, en su edición de 21-790).
COLOMBIA
Un comentario sobre las propuestas para modificar al Congreso, “la más
desprestigiada de las instituciones colombianas”, revela la descomposición
a que ha llegado dicho órgano en ese país. Despacho de AIdesdo Bogotá,
diario “Los Tiempos” de 29-11-90).
“Los miembros del Senado de Colombia, preocupados por su mala imagen,
contrataron a expertos para que los asesoraran y éstos les recomendaron,
entre otras ideas, que durante las sesiones no coman, ni digan palabras
vulgares, no se quiten los zapatos ni se duerman, infirmó el domingo la prensa
local”. (Despacho de la agencia EFE, desde Bogotá, publicado el 27-95 en
“El Nuevo Herald” de Miami,M.E.U.U.).
ARGENTINA
Puñetazos en la Cámara.- Una noticia de la A.P., fechada eh Buenos Aires el
19 de enero de 1991 y leída en el diario “Los Tiempos” de Cochnbamba, del
día siguiente, daba cuenta de que “diputados oficialistas y opositores se
tomaron a golpes hoy cuando discutían unproyecto para permitir a dos
buques argentinos que están en el Golfo Pérsico prestar apoyo logístico a la
fuerza multinacional que.entró en guerra con Irak, mientras manifestantes de
izquierda golpearon a dos legisladores”.
Estos episodios en los que los legisladores demuestran sus aptitudes
“pugilísticas” no son raros en otros parlamentos, como los de Francia y
Ecuador, según noticias propaladas en los últimos años.
NOTAS
(1) Cari Schmitt usa el término “distinción'' porque "separación" -dice- da la
idea de "tresorganizaciones de la actividad del Estado aisladas entre sí"'
C. Schmitt, op. cil. pág. 212- 217
(2) Ver el Capítulo V, de la primera parte, “La Constitución"..
(3) C. Schmitt, op. cit. pág. 213.
(4) Montesquieu- "El Espíritu de las Leyes", Libro XI, Cap. VI. Hans Kelsen, por
su parte, sostiene que "las funciones fundamentales del Estado no son
tres, sino dos: creación y aplicación (ejecución) de la ley"... y que “no
es posible definir las líneas que separan estas funciones entre sí,.
Emplea, por tanto, el término “distribución de poderes".- ver "Teoría
General del Derecho y del Estado", págs. 318-323.
(5) DUVERGER, Maurice.- "Instituciones Políticas y Derecho
Constitucional". Ed. ARIEL, Barcelona, 1970, pp. 178-179.
(6) Ibid.-pág. 186
(7) BIDART CAMPOS, Germán J. "El Derecho constitucional del Poder".
EDIAR, Buenos Aires, 1967, Tomo I, p. 221:
(8) SCHMITT, Cari- Op. cit. pág. 340.
(9) J.A. GONZALES CASANOVA. - “Teoría del Estado y Derecho
Constitucional" pág. 259.
(10) Las cámaras altas fueron suprimidos en Nueva
Zelandia
(1949),Dinamarca(1963) y Suecia (1969). No existen en Turquía, los países
bálticos, los países del ex- bloque socialista (excepto Rusia) y en la mayoría
d e los nuevos países d eAfrica, En América Latina tienen una sola cámara:
Costa Rica, Ecuador, Honduras, Guatemala, Nicaragua, Perú y Venezuela.
CAPÍTULO VII
EL ÓRGANO LEGISLATIVO EN BOLIVIA
CAPÍTULO VIII
CÁMARAS DE DIPUTADOS Y DE SENADORES
CAPÍTULO IX
EL CONGRESO
(4) Citado por TRIGO, Ciro Félix Ob. cit. (5) BIELSÁ, Rafael. Ob. cit p. 546
CAPÍTULO XI
LEGISLACIÓN DELEGADA
1.- CONCEPTO
Este órgano de gobierno se llama así porque es el encargado de “ejecutar”
(hacer cumplir) las leyes y las sentencias emitidas por los otros dos (legislativo
y judicial, respectivamente). Se lo llama también gobierno porque administra
la cosa pública, conduce y dirige los negocios de la Administración; es decir,
gobierna.
I «as funciones del Ejecutivo son políticas y administrativas. Entre las primeras
están la de colegislar, que ejerce, como hemos visto en el Capitulo X, al
tomar la iniciativa con proyectos de ley, al intervenir en los debates
legislativos pertinentes por medio de sus ministros, y al promulgar o vetar las
leyes sancionadas por el Congreso. Son también funciones políticas las de
gobierno, concernientes al orden institucional y a la coordinación de sus
labores con las de los otros órganos.
has funciones administrativas son de dos clases: activas y jurisdiccionales (no
judiciales). Las primeras reitérense a los actos de administración en general,
y las segundas son motivadas por las redamaciones o controversias que
despiertan aquéllas, que deben resolverse en el ámbito (Jurisdicción)
administrativo. Al respecto, el art. Ii8 del Código Tributario menciona, entre
los derechos de los contribuyentes: “2.- A que la Administración Tributaria
resuelva expresamente las cuestiones planteadas en los procedimientos
previstos por este Código y disposiciones reglamentarias, dentro de los
plazos establecidos”, (i)
2.-ANTECEDENTES
En las autocracias de la antigüedad y de la Edad Media, los detentadores
del poder concentraban en una o en pocas manos todas las atribuciones
del mismo: ejecutivas, legislativas y judiciales. El concepto de gobierno
englobaba en un solo órgano todas las funciones. El Ejecutivo es, en
realidad, una supervivencia de ese gobierno, limitado por la doctrina
constitucional moderna que arrancó de la teoría de la separación de
poderes y cristalizó en las primeras constituciones escritas. Por esto, se
observa una tendencia generalizada a desnaturalizar el constitucionalismo
actual mediante la imposición de gobiernos de facto o de fuerza, que no
son otra cosa que Ejecutivos desembarazados de los •controles legislativos
y judiciales. Aun más, en los propios regímenes de Derecho se nota una
propensión del Ejecutivo a invadir la competencia de los otros órganos, a
expensas y en detrimento de éstos.
3.-ESTRUCTURA
El Poder Ejecutivo asume, según los países, tres formas: es unipersonal
cuando lo ejerce el presidente de la república, en los regímenes
preidencialistas,.como los Estados Unidos de América, México, Argentina,
Chile, Ecuador, Nicaragua y Honduras; es conjunto si lo ejercen el presidente
y los ministros de estado, como en Bolivia, Costa Rica, Guatemala, Panamá,
Uruguay, Venezuela, etc., y es colegiado cuando se encarna en un
directorio o consejo, como en Suiza y la URSS, antes de su disolución. (2)
Cada forma de Ejecutivo tiene sus ventajas e inconvenientes. La forma
unipersonal favorece la celeridad y unidad en la toma de decisiones y
circunscribe la responsabilidad; pero degenera fácilmente en autoritarismo.
La forma colegiada impide, al menos teóricamente, la concentración y
abuso de la autoridad; pero entraba o demora la adopción de cierto tipo
de decisiones. Todo esto es relativo y depende, en los hechos, de la
estructura y de las tradiciones constitucionales.
En Bolivia ha habido varios casos de Ejecutivos colegiados de hecho, no do
derecho, pues la Constitución no ha previsto nunca tal forma deHonduras;
cinco años en Bolivia, Ecuador, Guatemala, Perú, y Uruguay; seis años en
Nicaragua, México y Panamá; siete en Francia. La mayor duración del
mandato se justifica en la necesidad de una gestión continua y estable; pero
los partidarios de períodos más cortos aducen que es más democrático
renovar las representaciones con mayor frecuencia para garantizar, el
control y la alternabilidad en la. función pública.
En nuestro país ha variado la duración de este período. La Constitución
Bolívariana de 1826 establecía que el presidente, a la par que vitalicio, era
irresponsable, de acuerdo a una rara mezcla de monarquía constitucional y
democracia que Bolívar soñó aplicar en la época de transición que seguía
a la independencia. Las de 1831 y 1834 redujeron el período a 4 años, con
posibilidad de reelección. La de 1839 mantuvo los 4 años, pero admitía la
reelección solamente después de pasado un período. La de 1843 extendió
el mandato a 8 años (el más largo que hayamos tenido), sin reelección
inmediata. La de 1851 lo redujo a 5 años, sin reelección inmediata. La de
1861 lo redujo a 3 años (el más breve en nuestra historia constitucional), sin
reelección inmediata. En 1931, ante el intento fallido. de prórroga del
presidente Siles, las reformas refrendarías de ese año dispusieron que “el
presidente no podía ser re- electo sino pasados.8 años desde la terminación
de su mandato”, prohibición ésta que, considerándose excesiva, fue
derogada en la Constitución de 1938. En la Constitución de 1945 se fijó un
período de 6 años que debía regir desde las elecciones de 1948; pero en el
Congreso de 1947 se estableció un mandato improrrogable de 4 años, con
la posibilidad de ser reelegidos después de un período constitucional. La
reforma de 1.995 amplió el período a cinco años, que se mantiene en la
Constitución vigente, con posibilidad de reelección "por una sola vez de
manera continua", (art. 168). La reelección, que está permitida en los Estados
Unidos por un período consecutivo inmediato, está prohibida en la
generalidad de los países latinoamericanos, donde se la considera contraria
a la esencia del sistema democrático. En México fue prohibida la reelección
en forma absoluta desde la revolución de 1910, con el lema de “sufragio
efectivo, no reelección”, con que se q,...„o aventar todo vestigio de
“porfirismo”. (3)
d) Reemplazo.- Dice el art. 169. que en caso de impedimento o ausencia
definitiva del Presidente del Estado, lo reemplazará el Vicepresidente y, a
falta de éste y en forma sucesiva, el Presidente del Senado, y el de la
Cámara de Diputados. En este último caso se convocará a nuevas
elecciones dentro de noventa días.
Agrega el mismo artículo que en ausencia temporal del Presidente lo
reemplazará el Vicepresidente por no más de noventa días.
e) Cesación en el cargo.- El art. 170 dispone que el Presidente cesará en
su mandato por muerte, renuncia presentada ante la ALP, ausencia o
impedimento definitivo, por sentencia condenatoria ejecutoriada en
materia penal y por revocatoria del mandato. En este último caso -dice el
art. 171- el Presidente cesará de inmediato, debiendo asumir su cargo el
Vicepresidente, quien convocará de inmediato a elecciones para la
Presidencia, que habrán de realizarse dentro de los próximos noventa días.
f) Ausencia del país.- Dispone el art. 173 que el presidente requiere
autorización del Congreso para ausentarse del país, por más de diez días.
Dada la alta representación nacional que inviste el jefe del Poder Ejecutivo,
se explica que el Congreso, depositario de la voluntad popular, conozca los
motivos que inducen a aquél a salir del país y autorice previamente su viaje.
En algunos países el Presidente requiere permiso del Congreso para salir del
país cuando su ausencia sobrepasa más de 15 días, en Honduras; más de
un mes en Nicaragua. En Costa Rica y Guatemala no necesita autorización
para viajar a los otros países de Centro América y a Panamá.
7.- VICEPRESIDENCIA DE LA REPÚBLICA
a) Antecedentes.- Este cargo fue instituido por primera vez en los Estados
Unidos de América y existe en la mayoría de las Constituciones de América.
En algunos países, como México, el Congreso nombra un vicepresidente
interino en caso de ocurrir un impedimento definitivo del titular después de
dos años de iniciado el período; y se convoca a nuevas elecciones si no han
transcurrido los dos años. En Chile no hay vicepresidente, y cuando el
Presidente está impedido o ausente temporalmente le reemplaza el ministro
titular por orden de precedencia. En Honduras se elige a tres “Designados”,
juntamente con el Presidente, para reemplazar a éste en caso de ausencia
o de impedimento temporal o definitivo. En Venezuela, el Presidente escoge
a un ministro para suplirle en caso de ausencia o de impedimento temporal.
Las Constituciones bolivianas de 1826,1831 y 1834 instituyeron este cargo,
que fue suprimido en otras. Las de 1878 y 1880 lo restablecieron, siendo dos
los vicepresidentes en esta última. Por Ley de 24 de Enero de 1921 se eliminó
la segunda vicepresidencia y por Decreto-Ley de 4 de Diciembre de 1939 se
suprimió el cargo, habiéndoselo restablecido en la Constitución de 1945,
Muchas veces se ha dicho que este cargo es innecesario por ser meramente
decorativo; que lejos de cooperar al presidente, el vicepresidente entra a
menudo en conflicto con él y constituye un factor de perturbación. Se ilustra
este aserto con muchas referencias históricas de nuestro país y del
extranjero. (4)
b) Funciones.- Corresponde a la Vicepresidencia dos funciones: una
esencial, por la cual es llamado a ejercer la presidencia en casos de
impedimento o de ausencia del titular (como ya hemos visto), y otra
secundaria, que consiste en presidir la Asamblea (art. 153,1). A este
propósito, Bielsa observa: «A diferencia de una regla general de orden
administrativo, según la cual el sustituto eventual realiza una función igual al
titular, pero en orden jerárquico”, en este sistema el vicepresidente no realiza
ninguna.,.”. (5)
Al haber incorporado la Vicepresidencia al Organo Ejecutivo, como ya se
dijo en el punto 5 de este capítulo, se le ha asignado las siguientes nuevas
atribuciones (art. 174):
-Coordinar las relaciones entre los Organos Ejecutivo, Legislativo y los
gobiernos autónomos.
-Participar en las sesiones del Consejo de Ministros.
-Coadyuvar con el Presidente en la dirección de la política general del
gobierno.
-Formular, conjuntamente con el Presidente, la política exterior, y
desempeñar funciones-diplomáticas.
Se trata, según este artículo, de un cargo comodín que puede ocuparse de
cualquier asunto de manera general, en los dos principalesórganos de
gobierno, sin que tenga asignada ninguna función específica, excepto las
dos mencionadas al comienzo de este punto.
NOTAS
(1) Para una mejor información sobre las funciones jurisdiccionales de la
Administrüción, Cfr. los caps. XXIX al XXXIII de la obra DERECHO
ADMINISTRATIVO, del autor, 5ta. edición, Edit “¿TV, Cochabamba, 2001.
(2) Por primera vez en la historia de Bolivia el Congreso eligió en 1985 al
candidato que había obtenido el segundo lugar en los comicios generales
de ese año (Víctor Paz Estenssoro); y en 1989 eligió al que había resultado
en tercer lugar (Jaime Paz Zamora), por debajo de Gonzalo Sánchez de
Lozada y de Hugo Bánzer Suárez. Esta última elección sorprendió a todos,
inclusive a los partidarios del agraciado, pues respondió a un arreglo de
última hora entre ADN y MIR, partidos que, se suponía, no estaban próximos
en doctrina ni en antecedentes políticos. Estos hechos indujeron a la reforma
del art. 90 en su texto actual.
(3) De Porfirio Díaz, el dictador mexicano derrocado por la revolución de
1910, que gobernó durante 30 años ese país.
(i) Se recuerda las discrepancias políticas que condujeron a la ruptura de los
siguientes binomios, durante el pasado siglo: Hernando Siles y Ábdón
Saavedra (1925-1930); Enrique Hertzog y Mamerto Urriolagoitia (1947-1951);
Hernán Siles Suazo y Nuflo Chávez Ortiz (1956-1960); Víctor Paz Estenssoro y
Juan Lechín Oquendo (1960-1964). Este ultimo decía que la vicepresidencia
es la quinta rueda del carro. Al quejarse de la negligencia con la que le
trataba el presidente Hernán Siles Suazo, el vicepresidente Jaime Paz Zamora
(Octubre de 1982, Agosto 1985) llegó a decir que aquél no le mandaba “ni
a comprar pan" (!)
El vicepresidente de Nicaragua, Virgilio Godoy, dijo en Miami] EE. UU., en
conferencia de prensa, que el gobierno de la presidenta Violeta Chamorro
muestra “una tendencia al nepotismo bastante visible", y que “hacen lo
imposible para que yo pase por la acera de enfrente de la casa
presidencial'1. Agregó que en abril de 1990 él "no pudo obtener una oficina
en la sede del gobierno de Managua debido a que la propia presidenta le
comunicó que ya todas las oficinas se encontraban ocupadas por otros
funcionarios". (Diario “Las Américas", Miami, EE.UU., 206-
90).
En septiembre de 1990 la presidenta Chamorro viajó a Nueva York, a la
Asamblea General de las Naciones Unidas, "y prácticamente delegó su
cargo en su ministro de la Presidencia y yerno, Antonio Lacayo, como lo
había hecho “en otras ocasiones, provocando la irritación de Godoy".
(Noticia de EFE, desde Managua, publicada en el diario “Los Tiempos'1,
Cochabamba, el 29-9-90).
El vicepresidente de Filipinas, Salvador Laurel, “que se separó del gobierno
de (la Presidenta) Corazón Aquino hace, tres años”, dijo en una reunión con
periodistas que “urge dotar de liderazgo a la nación, en la que el deterioro
del orden público está llevando a una situación de anarquía”. (Despacho
de EFE, desde Manila, publicado en el diario "PRESENCIA", La Paz, el 2-10-90).
En el segundo volumen de sus memorias, "YearsofUpheaval”, Henry Kissinger
observa que entre los dos primeros magistrados norteamericanos se
desarrolla inevitablemente una “relación ambivalente”, y que el
vicepresidente es tratado con cortesía, pero ’como supernumerario1'.
(Revista TIME, 8-3-1982).
(5) BIELSA, Rafael.-Op. Cit. pág 627.
CAPÍTULO XIII
ATRIBUCIONES DEL PODER EJECUTIVO
CAPÍTULO XIV
LA INSTITUCIÓN MINISTERIAL
CAPÍTULO XV
MINISTROS DE ESTADO
I. MINISTROS DE ESTADO
1. - NOMBRAMIENTO, REMOCIÓN Y SUPLENCIA
Según el art. 172.22, el Presidente del Estado nombra a los ministros. El
nombramiento se hace efectivamente por decreto presidencial en todos los
casos; pero la remoción ocurre, en la práctica, por renuncias individuales o
colectivas que los ministros presentan al presidente “para dejarle en libertad
de escoger a sus colaboradores”, como dice la fórmula generalmente
adoptada, cuando sobreviene una “crisis de gabinete” por razones
políticas, administrativas u otras. La renuncia puede provenir también de un
voto de censura aprobado por una de las cámaras contra uno o varios
ministros.
Se afirma reiteradamente que la elección, nombramiento y remoción de los
ministros es “facultad privativa” del Presidente de la República; pero en los
hechos, la voluntad presidencial hállase condicionada en esta' materia por
varios factores de orden político, económico y social: las expectativas y
presiones de los partidos políticos, de los grupos parlamentarios, de las
Fuerzas Armadas, de las organizaciones gremiales, sindicales y profesionales,
y hasta, en algunos casos, las necesidades de la política internacional. Ha
habido gobiernos en que las organizaciones obreras, (la COB, por ejemplo,
durante los regímenes del MNR, 1952-1964) ocupaban algunos ministerios
“en propiedad», y ya era sabido que los ministros de Trabajo y otros debían
pertenecer a ese sector. Las Fuerzas Armadas, por su parte, reclamaban su
“cuota” ministerial, además del
Ministerio de Defensa, aún durante los gobiernos civiles y constitucionales. En
cuanto a la suplencia en casos de ausencia, enfermedad o impedimento
de los ministros, la Ley No 3351 (art. 2.II) dispone que el Presidente, mediante
decreto presidencial, encargará la suplencia a uno de los ministros.
Para ser ministro se requiere las mismas condiciones que para acceder al
servicio público (arts, 234, 236, 238 y 239); tener 25 años cumplidos; no ser
asambleísta; no ser director, accionista ni socio de empresas o entidades
que contraten con el Estado; ni ser cónyuge ni pariente consanguíneo del
Presidente o Vicepresidente del Estado (arts. 176 y 177).
2. - NÚMERO DE MINISTERIOS
El art. 2.1 de la Ley 3351, de Organización del Poder Ejecutivo (LOPE),
establece dieciséis ministerios, más dos "sin cartera" que por decreto
presidencial pueden designarse "para formular y ejecutar políticas
específicas" (art. 2.IV).
Las Constituciones de 1826,1831 y 1834 establecieron tres ministerios: del
Interior y Relaciones Exteriores, de Hacienda y de Guerra y Marina. Poco a
poco, con el crecimiento de la población, de los negocios del Estado y de
las necesidades sociales, fue aumentándose el número de ministerios.
3. - FUNCIONES MINISTERIALES
Ya hemos visto que las funciones del Poder Ejecutivo se dividen en dos
grandes ramas: políticas y administrativas. Como colaboradores directos del
Presidente de la República y jefes de sus respectivos Despachos, los ministros
cumplen un papel eminentemente político al elaborar y aplicar las líneas
maestras de los programas de gobierno, y al actuar como nexos entre el
Organo Ejecutivo y el Legislativo, y entre aquél y el pueblo a través de sus
diferentes instituciones. Por otra parte, siendo jefes de granes áreas de la
administración y de los servicios públicos, es .claro que dirijan labores de
orden administrativo, como lo señala el art. 175.1.1 al 6.
a) Funciones constitucionales.- La Constitución Política señala a los ministros
las siguientes atribuciones
1) Informes de la ALP..- Deben prestar a las Cámaras los informes que
soliciten (art. 175.1.7).
2) Informes sobre administración y rentas.- Hemos visto en el Capítulo XIII
que corresponde al jefe del Ejecutivo presentar anualmente a la ALP el
informe sobre el curso y estado de la administración pública, "acompañado
de las memorias ministeriales" (art. 172.12). De suerte que ese informe
consiste en los informes sectoriales que elaboren los ministerios.
b) Funciones Administrativas.- Están mencionadas en el art. 175.1.1 al 6.
CONSEJO DE MINISTROS
El Organo Ejecutivo se expresa y trabaja a través del conjunto de sus
representantes, es decir el Presidente con los Ministros. Este conjunto forma
el Consejo de Ministros, o “gabinete”, como se lo conoce, que se ocupa de
los asuntos de gobierno en sentido general. Lo preside el Presidente y lo
integran todos los ministros. Los Ministros son responsables solidariamente por
las decisiones que adopten en Consejo de "gabinete” (art. 165.11)
4.- RESPONSABILIDAD
Ya sabemos que una de las características del orden jurídico de la
democracia es la responsabilidad en el desempeño de las funciones
púdicas, a diferencia de lo que ocurría en el orden jurídico de la monarquía
(antiguo régimen), en que no existía tal responsabilidad. Ti atándose de lo
Ministros, la Constitución es clara: el art. 175.11 establece dicha
responsabilidad. Esta responsabilidad es de dos clases:
a) Responsabilidad parlamentaria.- Es la que les corresponde en forma
individual o colectiva por la política ejecutada en todos o en los respectivos
Despachos sobre asuntos de interés nacional o regional. Esta
responsabilidad se determina a través del acto parlamentario llamado
interpelación, que puede concluir en un voto de censura de la respectiva
Cámara, por dos tercios de votos, contra uno o más ministros (art. 158.1.18),
y que en tal caso motiva al despido del o de los ministros censurados. (Ver
Capítulo VIII, “Cámaras de Diputados y de Senadores, punto 3-b)
b) Responsabilidad jurídico-política- Es la que resulta de los delitos
cometidos por los ministros en el ejercicio de sus funciones (art. 1 Ley 2445).
Da lugar a lo que en Derecho se llama Juicio Político o Juicio de
Responsabilidades.
Esta responsabilidad puede determinarse en forma individual, solidaria y
conjunta. Es individual cuando se trata de delitos cometidos por un solo
ministro; es solidaria cuando emerge de actos o decisiones delictuosos
tomados en Consejo de Ministros (art. 165.11 de la Cons.) y es conjunta con
el Presidente, como consecuencia de decretos que firme uno o más
ministros con aquél (art. 102).
En cuanto a los delitos de orden privado en que pueden incurrir serán
sometidos a la jurisdicción ordinaria, ante los tribunales y por las leyes
competentes.
6.- CONSECUENCIAS DE LA JERARQUÍA EN LA ADMINISTRACIÓN CENTRAL
La jerarquía de la administración central da preeminencia al Presidente de
la República sobre los ministros y otros funcionarios que siguen a éstos. Esta
preeminencia se traduce necesariamente en la influencia preponderante
que tiene la autoridad y. la opinión del Presidente sobre la de sus ministros.
Por esto, en caso de discrepancias de opinión o de conducta entre aquél y
éstos, es lógico que prevalezca el criterio del Jefe de Estado, Si el ministro o
ministros discrepantes quieren salvar su responsabilidad o mantener sus
principios, no les queda otro camino que renunciar, porque la continuación
en sus cargos denotaría que acatan las decisiones presidenciales y que se
hacen moral y legalmente responsables por las mismas.
CAPÍTULO XVI
CAPÍTULO XVII
EL ÓRGANO JUDICIAL
I. GENERALIDADES
1. - CONCEPTO Y FUNCIONES
El Poder Judicial es el encargado de administrar justicia y de aplicar la ley.
La palabra justicia deriva de la vos latina Jus, que designaba el derecho
elaborado por los hombres, distinto al Fas, que era el derecho sagrado o
divino.
Platón definía la justicia como “la virtud que contiene a cada uno en los
límites de su deber y asegura a cada uno la posesión de lo que es suyo”.
Para Uipiano, “es la voluntad firme y constante de dar a cada uno lo que es
suyo”. En palabras de Escriche, es “lo que debe hacerse según derecho o
razón”. Según Cabanellas, la justicia es un ideal difícil de concretar en los
hechos, pues aunque justicia y derecho debieran ser sinónimos, no lo son en
la realidad porque a veces las motivaciones del ambiente apartan la justicia
del derecho, (l)
La función judicial o administración de justicia se desarrolla básicamente en
dos etapas: 1).- el juez o tribunal identifica el acto antijurídico según norma
establecida con anterioridad, que lo sanciona o se le aplica; 2).- ordena la
sanción estipulada en dicha norma. Respecto a la Constitución, se dice que
el PoderJudicial es su guardián, porque en cada caso en que es llamado a
hacerlo debe aplicarla con preferencia a las leyes, y éstas con preferencia
a cualesquiera otra resoluciones (art. 410.11).
2. - NATURALEZA Y ANTECEDENTES
La justicia es una necesidad social más que política, y por ello es anterior a
toda organización política del Estado -observa Bielsa-, ya que en una u otra
forma ha existido en todas las organizaciones primitivas. Por ello - agrega- el
principio de justicia es anterior al de la misma norma jurídica y la función
judicial ha sido una de las principales fuentes creadoras del Derecho', como
lo fue en Roma la de los pretores, que formó el “derecho pretoriano”. (2)
Desde la más remota antigüedad la aplicación de la justicia era confiada a
los ancianos, a los jefes de grupo o a las asambleas populares; es decir, que
la función judicial se asimiló siempre al principio de autoridad, mucho antes
de que apareciera el órgano judicial como una rama separada de
gobierno. Por ello es que hasta la edad moderna se consideró esta función
como una atribución, política del Estado: los jueces, jurados y pretores
dependían directamente de las autoridades políticas. Con la Revolución
Francesa y el nacimiento.del Estado domo-liberal, la distinción de poderes
que lo caracteriza determinó la aparición de la función judicial propiamente
dicha.
II. EL PODER JUDICIAL EN BOLIVIA
1.- ANTECEDENTES HISTÓRICOS
Durante la colonia, la justicia en América estaba organizada y sometida al
poder de la Corona Española, a través de las Audiencias y de otros
funcionarios. Tan pronto como el Alto Perú quedó libre, bajo la autoridad del
Ejército libertador, su general en Jefe, Antonio José de Sucre, dictó el
decreto de 27 de Abril de 1825 que estableció en Chúquisaca la Corte
Superior de Justicia de las provincias del Alto Perú, con las mismas
atribuciones y jurisdicción que teníala audiencia de Charcas, tribunal que se
instaló el 25 de Mayo de ese año.
La Constitución de 1826 creó la Corte Suprema de Justicia, que se instaló en
Sucre el 16 de Julio de 1826, bajo la presidencia de don Manuel María
Urcullo. La justicia era un apéndice de la administración, que nombraba y
removía discrecionalmentc a los magistrados. Por Ley de 17 de
Septiembrede 1855 se nombró por primera vez en forma constitucional a los
ministros de la Corte Suprema.
2. - CARACTERES
Según nuestra Constitución, la justicia en Bolivia tiene los siguientes
caracteres:
a) Independencia.- El art. 178 declara que la jústicia se basa, entre otros
principios, en el de independencia,que se garantiza con la carrera judicial y
la autonomía.presupuestar!a del Organo Judicial (conc. con arts. 12.1 y III,
120.1 y 140.1 y II). Este precepto responde a los principios de separación de
poderes y de igualdad ante la ley, garantizando la imparcialidad y
objetividad de la justicia, que la pone a cubierto de intromisiones y de
presiones de otros poderes y de personas ajenas a la misma. En los hechos
los jueces y tribunales son presionados por el Ejecutivo a seguir consignas,
para lo que proceden a frecuentes “renovaciones” del poder judicial, con
nombramientos que orí los gobiernos de facto provienen directamente del
Ministerio del Interior. (3)
La independencia de los jueces es un ideal tan antiguo como la institución.
En una obra publicada en Francia en 1795 bajo el título de "Exposición de los
Principios Fundamentales de la Monarquía Francesa”, se lee que “una parte
del deber de los jueces consiste en resistir a la voluntad del soberano cuando
se extravía”, y que “los magistrados no deben dejarse intimidar por la cólera
pasajera de los soberanos, ni por el temor a caer en desgracia, sino tener
siempre presente el juramento de desobedecer las ordenanzas, que son los
verdaderos mandatos de los reyes”. En dicho libro se menciona una orden
impartida a los jueces por Luis XIV para que “le desobedezcan, bajo pena
de desobediencia, si les dirige un mandato contrario a ley”, y que “tengan
por nulas todas las cartas de presentación que contengan indicaciones o
recomendaciones acerca del enjuiciamiento de las causas civiles o
criminales, e incluso que castiguen a los portadores de dichas carta" (4)
La independencia de los jueces aparece como precepto constitucional sólo
a partir de 1938.
Hasta fines del siglo XVII los jueces en Inglaterra mantenían sus cargos “
duringtheKing’sgoodpleasure” (mientras pluguiera al Rey). Después de la
GloriousRevolution (1.688-1.689), en Inglaterra, pero no así en las colonias, los
jueces eran nombrados “duringgoodbehaviour” (mientras abservaran
buena conducta). Esta frase aparece en varias constituciones
revolucionarias de la Unión Norteamericana, y la Convención Constitucional
de 1.787 la adoptó por unanimidad. En El Federalista (LXXVIII), Alexander
Hamilton decía:
“La regla que hace de la buena conducta la condición para que la
magistratura judicial continúe en sus puestos, representa con seguridad uno
de los más valiosos progresos modernos en la práctica gubernamental. En
una monarquía crea una excelente barrera contra el despotismo del
príncipe; en una república no es menos eficaz contra las usurpaciones y
opresiones de la entidad representativa (...) La independencia completa de
los tribunales de justicia es particularmente esencial en una constitución
limitada”.
b) Autonomía.- El art. 178.11 dice que serán garantías de la misma la
carrera judicial y la autonomía presupuestaria de los órganos
judiciales.(Conc. arts. 3.2 y 7 LOJ).
El Primer Encuentro Latinoamericano de Abogados realizado en Lima, Perú,
en octubre de 1988, resolvió desplegar acciones conjuntas para conseguir
la verdadera independencia del poder judicial, cuya base no es otra que la
autonomía económica. A dicho encuentro concurrieron representantes de
Argentina, Bolivia, Perú, Ecuador, Colombia, Brasil, Centro América y Cuba.
(5)
La autonomía económica del Poder Judicial se incluyó en la Constitución de
1967.
c) Gratuidad.- El art. 178 dice que la gratuidad, publicidad, celeridad y
probidad de los jueces son condiciones esenciales en la administración de
justicia. Esta gratuidad tiende a garantizar la igualdad ante la Ley, mediante
el libre acceso para todos, en igualdad de condiciones, a la administración
de justicia. La gratuidad significa que los litigantes no pagan honorarios ni
contribuciones de ningún género a los jueces y magistrados, que son
renumerados por la administración; pero debensufragar los honorarios de
sus abogados. (Cono. art. 10. LOJ).
CAPÍTULO XX
DEFENSA DE LA SOCIEDAD Y DEL ESTADO
1.-GENERALIDADES
Toda sociedad jurídica y políticamente organizada debe contar con
mecanismos idóneos para su defensa y preservación, en el entendido de
que, para que una sociedad sea sana, progresista y justiciera, debe estar
protegida, en primer lugar, contra las agresiones de todo género,
provengan éstas del poder constituido o de la propia sociedad civil. Esta
defensa debe ser instituida, mantenida y asegurada por el Estado, de cuya
organización responde la sociedad a través de sus contribuciones y de sus
votos. El Estado, a su vez, será expresión fiel de la voluntad general y cumplirá
sus fines en la medida en que la sociedad que le sirve de base esté a
cubierto de agresiones que tiendan a vulnerar su integridad física y moral.
La Constitución boliviana consigna, específicamente para este fin, dos
instituciones que han sido adoptadas en la mayoría de las Constituciones
contemporáneas.
2. - EL MINISTERIO PÚBLICO. (Ans. 124 al 126)
a) Naturaleza, finalidad y composición.- “Es un organismo constitucional
(...) que tiene por finalidad promover la acción de la justicia, defender la
legalidad, los intereses del Estado y la sociedad...” • (art. 1 LMPconc.
art.225.ICPE). Se ejerce por el Fiscal General del Estado, que es su autoridad
jerárquica y representativa superior, y por los fiscales departamentales, los
fiscales de materia y otros creados
por ley. Se rige por los principios de legitimidad, independencia funcional y
autonomía presupuestaria, legalidad, unidad, jerarquía, representación,
probidad, responsabilidad e inamovilidad. (LMP., título preliminar y art. 225. II
CPE).
b) Funciones.- Desempeña tres funciones básicas: la acción pública y la
dirección de las diligencias de Policía judicial; defensa del Estado de
Derecho, de las garantías constitucionales y de los intereses de la sociedad,
protegiendo a la familia, a los menores e incapaces; y defensa de los
intereses del Estado.y de su administración (art. 11 LMP).
En cuanto a la defensa del Estado de Derecho y de la sociedad le
corresponde velar por la primacía de la Constitución Política del Estado,
precautelar los derechos y garantías de la persona, asi como la legalidad
cuando el Estado actúa como demandante o demandado.
c) El Fiscal General.- Es el representante del Ministerio Público y ejerce
autoridad en todo el territorio nacional. Es designado por la ALP, por dos
tercios de votos, tiene su sede en Sucre y dura seis años en su cargo.
Requiere las mismas condiciones que los magistrados del TSJ. .
3.- EL DEFENSOR DEL PUEBLO.- (arts. 218 a 224).
En el Cap. XV, punto 3 de la Primera Parte, nos hemos ocupado del origen,
antecedentes y evolución de esta institución en Europa y América.
a) Naturaleza, elección, requisitos y período.- Se trata de un funcionario
independiente, elegido por dos tercios de votos del la ALP, por un período
de seis años, sin derecho a reelección. Requiere tener 30 años de edad y las
condiciones generales de acceso a la-función pública. Su cargo es
incompatible con el desempeño de toda otra actividad pública o privada
remunerada, a excepción de la docencia universitaria.
b) Atribuciones, facultades y perrogrativas.- El defensor del-pueblo vela
por la vigencia, promoción, difusión y cumplimiento de los derechos
.humanos, individuales y colectivos, en el ámbito de todo el
sector público y en el de las instituciones privadas que prestan servicios
públicos. Le corresponde, asimismo, la promoción y defensa de los derechos
de las naciones y pueblos indígena originario campesinos (art.
218.1 y II).
Corresponde, pues, una ¿oble función de orden público al Defensor del
Pueblo: por una parte su oficina debe divulgar y promover el conocimiento
de los derechos humanos y de sus garantías, según la Constitución, entre la
población, cuyos sectores mayoritarios desconocen, por lo general, cuáles
son sus derechos y obligaciones. Esta atribución supone una tarea de
educación, difusión y explicación en los distintos ciclos de la
enseñanzaaprendizaje, asi como en organizaciones políticas, cívicas,
laborales, profesionales, vecinales y otras, En segundo lugar, debe controlar
la vigencia y cumplimiento de esos derechos y garantías en favor de todas
las personas, principalmente de parte de autoridades y reparticiones de la
administración pública, donde esos derechos son a menudo desconocidos
y denegados, por ignorancia en unos casos, y por arbitrariedad en otros.
Entre sus facultades, tiene libre acceso a los establecimientos de detención,
reclusión o internación de personas; puede interponer los recursos de
inconstitucionalidad, el directo de nulidad, así como de Amparo, Libertad y
otros sin necesidad de mandato, Los funcionarios y empleados públicos
están obligados a proporcionarle la información que requiera para el
ejercicio de sus funciones, y, en caso de no ser atendido, iniciará las
acciones legales pertinentes.
Entre sus perrogativas, el Defensor del Pueblo no recibe instrucciones de los
poderes públicos, y goza de autonomía funcional financiera y
administrativa. Por-'otra parte, no podrá ser enjuiciado, perseguido ni
detenido por causa del ejercicio de sus funciones.
c) Obligaciones.- El Defensor del Pueblo debe presentar informes a la
ALP, por lo menos una vez al año, y podrá ser convocado en cualquier
momento por la Asamblea.
d) Ley del Defensor del Pueblo.- (No. 1818 de 22-12-97). Tiene seis títulos,
37 artículos y cinco disposiciones transitorias. El Título I contiene disposiciones
generales; el Título II se ocupa de su elección, incompatibilidades,
atribuciones, etc.; el III de sus adjuntos; el IV de algunas tareas propias de su
cargo; el V de los informes del Defensor del Pueblo al Congreso y especiales;
el VI de su organización y recursos económicos.
4. - PROCURADORÍA GENERAL DEL ESTADO
(Arts. 229 a 231). Se la define como la institución de representación jurídica
pública cuyo propósito es promover, defender y precautelar los intereses del
Estado (art. 229).
El Procurador General es designado por el Presidente del Estado,
designación que podrá ser objetada por el voto de dos tercios de la ALP en
un plazo no mayor a sesenta días desde el nombramiento. La objeción
determinará el cese en el cárgo del Procurador nombrado.
Para acceder a este cargo se requiere las mismas condiciones que para ser
magistrado del TSJ. Entre sus atribuciones podemos mencionar las siguientes:
- Defender judicial y extrajudicialmente los intereses del Estado,
asumiendo su representación jurídica.
- Velar por la diligencia de las acciones de las unidades jurídicas de la
administración pública.
- Atender las denuncias y los reclamos motivados de personas e
instituciones respecto a daños a los intereses del Estado.
- Incitar a la Fiscalía General del Estado a tomar las acciones pertinentes
en casos de delitos contra el patrimonio público.
- Presentar proyectos de ley sobre materias de su competencia. La ley
N2 064, de 5 de diciembre de 2010, de la Procuradoría General del Estado,
entrara en vigencia cuando la promulgue sus reglamentos.
CAPÍTULO XXI
JUICIOS DE RESPONSABILIDAD
1.- LA RESPONSABILIDAD
En el Estado de Derecho Constitucional, el ejercicio de toda la función
pública conlleva la consiguiente responsabilidad. Esta responsabilidad es
propia del régimen democrático-representativo de gobierno, en virtud de
que., siendo el pueblo titular de la soberanía, su ejercicio está delegado a
los poderes Legislativo, Ejecutivo y Judicial; vale decir, a los representantes
que aquél ha elegido por sufragio universal y directo, que deben
responderle de sus actos y delitos con motivo del desempeño de sus
funciones
Ya sabemos que en el orden jurídico de la monarquía el monarca era
irresponsable (legibussolutus), porque era el único titular de la soberanía y
concentraba en sus manos todos los poderes. El Estado de Derecho burgués,
por el contrario, se basa en las limitaciones de los poderes del Estado,
constituido por la voluntad general como expresión de la soberanía popular.
Por esto la Constitución Francesa de 1793 decía: “las garantías sociales no
podrían existir si los límites de las funciones públicas no estuvieran claramente
fijados en la ley, y si no se asegurara la responsabilidad de todos los
funcionarios”.
La responsabilidad no es solamente un concepto moral, sino también legal.
En Ciencia Administrativa se la define diciendo que es una obligación que
asumimos cuando aceptamos ejercer una función, pública o privada, sea
ésta general o específica.
2. - CLASES DE RESPONSABILIDAD
La responsabilidad jurídica, que deriva de las disposiciones de las leyes, es
civil, penal y administrativa.
La responsabilidad civil emerge del principio universal de derecho de que
todo aquel que causa un daño a otro está obligado a repararlo.Cuando un
funcionario o empleado causa daño a otro en el ejercicio de sus funciones,
es civilmente responsable, y está obligado a indemnizar al damnificado, sea
éste la administración pública o un particular. El art. 235.4 dispone la
responsabilidad de los servidores públicos.
Cuando un funcionario o empleado cometen delitos tipificados en el
Código Penal, son penalmente responsables y, en tal caso, pueden ser
condenados a sufrir las penas corporales, pecuniarias u otras previstas en
dicho Código. (Art. 34 Ley SAECO).
La responsabilidad administrativa procede contra los empleados y
funcionarios que incumplen sus deberes como tales.
La ley SAFCO de 20 de Julio de 1990 dispone que “todo servidor público
responderá de los resultados emergentes del desempeño de las funciones,
deberes y atribuciones asignados a su cargo” (art. 28). Divide la
responsabilidad en administrativa, ejecutiva, civil y penal; e incurren en
responsabilidad ejecutiva los servidores que no rindan cuenta de sus actos,
deberes y funciones, o que no eleven los informes a que están obligados, o
sean imputables por negligencia de las que resulte falta de eficacia y
economía (art.30). El art. 42, inc. g), advierte que el principal ejecutivo o la
dirección colegiada de una entidad pública serán suspendidos o
destituidos, sin perjuicio de la responsabilidad civil o penal a que hubiere
lugar. Aparte de la responsabilidad jurídica, en algunos países como los
Estados Unidos de América existe la responsabilidad política, que se ejerce
mediante un juicio político (“impeachment”) llevado ante el Congreso, que
no procesa judicialmente, no dicta sentencia ni aplica penas a los altos
funcionarios del Estado, sino que los separa de sus cargos, dejando a los
tribunales ordinarios ejercer las acciones civiles y penales que fueren
procedentes.
Responsabilidad parlamentaria es la que vincula directamente a los
miembros del gobierno con el parlamento en los sistemas parlamentarios y
que produce los efectos mencionados en el Capitulo XIV, La Institución
Ministerial. Algo parecido a esto existe en nuestro sistema de gobierno con
la interpelación, a la que nos hemos referido en el Capitulo VIII. Cámaras de
Diputados y Senadores, punto 3. b).
3.- ANTECEDENTES
El “impeachment” (acusación o cargo) nació en Inglaterra en 1370, bajo el
reinado do Eduardo III, y se aplicó desde entonces, especialmente en los
siglos XVII y XVIII, contra los altos oficiales de la Corona que después se
llamaron ministros; pero no contra el monarca, que, como el presidente en
las democracias parlamentarias, es irresponsable. La Cámara de los
Comunes acusaba ante la de los Lores por delitos contra la nación o el
monarca. Más tarde se acusaba también por mal desempeño y por falta de
idoneidad profesional y moral.
El “impeachment” cayó en desuso en Inglaterra en 1806 y fue sustituido por
el procedimiento de censura propio de los sistemas parlamentarios.
En Estados Unidos, donde el “impeachment” fue tomado del modelo inglés,
procede actualmente (1) por traición a la patria, soborno y otros delitos o
faltas graves cometidos por el presidente y/o vicepresidente de la república.
La Cámara de Representantes los acusa ante el Senado y éste juzga si los
cargos son verdaderos, y, en caso de serlo, si constituyen materia de este
procedimiento. Cuando el Senado está de acuerdo sobre ambos extremos,
se produce lo que se llama la “convicción”, que se pronuncia por dos tercios
de votos de los senadores presentes. El veredicto del Senado destituye de
sus funciones a los altos funcionarios, descalificándolos para ejercer
funciones públicas en el futuro.
4.- EN BOLIVIA
Los juicios de responsabilidades contra los altos funcionarios del Estado están
sujetos a las siguientes disposiciones legales: Constitución Política, artículos
159-11,160.6 y 161.7; Ley No. 044 de 3 (le octubre 3.010.
a) Objeto.- Este juicio tiene por objeto acusar y juzgar a los altos
dignatarios del Estado por delitos cometidos en el ejercicio de sus funciones,
para destituirlos de sus cargos y/o aplicarles las sanciones correspondientes.
b) Jurisdicción.- Es mixta, parlamentaria y judicial, como se verá en el
punto d), infra,
c) Delitos imputables.- El Presidente y Vice-Presidente de la República,
son responsables por: a) traición a la patria y sometimineto total o parcial de
la Nación al dominio extranjero (conc. arts. 124 CPE. y 109 y 110 C. Pen.); b)
violación de los derechos y de las garantías individuales consagrados en la
Primera Parte, Título II de la CPE.; c) uso indebido de influencias; d)
negociaciones incompatibles con el ejercicio de funciones públicas; e)
dictar resoluciones contrarias a la Constitución; f) anticipación o
prolongación de funciones; g)' delitos tipificados por los arts. 145,151,152.;
genocidio, tipificado por el art. 132. bis del C. Pen,; i) soborno y cohecho; j)
cualquier otro delito cometido en el ejercicio de sus funciones.
Además de la sanción penal, los condenados deberán resarcir al estado el
daño civil pertinente (art. 9 Ley 004).
La Constitución de 1826 (art. 80) exoneraba al Presidente de toda
responsabilidad, lo que era un anacronismo inclusive para esa época, pues
el Estado de Derecho burgués nacido de las revoluciones del siglo XVIII se
basaba, entre otros principios, en la responsabilidad de todos los agentes
públicos. La Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano
(1789) proclamaba, en su art. 15: “La sociedad tiene derecho de pedir
cuenta de su administración a todo agente público”. Sabido es que la
Constitución de 1826 se basó en el proyecto elaborado por Bolívar, que
disponía una presidencia vitalicia e irresponsable, a la manera de los
monarcas del viejo orden destruido en 1789. Los ministros eran responsables,
y lo era también el Presidente en la Constitución de 1831, mientras que en la
de 1834 (art. 77) respondía solamente por traición a la patria, retención ilegal
del mando y usurpación de otros poderes.
d) Procedimiento.- Cualquier ciudadano podrá presentar una
proposición acusatoria ante el Fiscal General del Estado. Este, en el plazo
máximo de 30 días hábiles deberá formular el requerimento acusatorio o, en
su caso, el rechazo de la proposición. En.el primer caso, requerirá el
enjuciamiento ante el TSJ, requerimiento que, previa consulta a su Sala
Penal, será enviado a la ALP pidiéndole su autorización.-
La autorización congTesal se dará por voto de dos tercios del total de sus
miembros, y remitirá antecedentes a la Sala Plena del TSJ. Este tribunal en
pleno juzgará en única instancia al Presidente y -Vicepresidente del Estado,
sin recurso ulterior, en forma oral, pública, continua y contradictoria, hasta
dictar sentencia por dos tercios de votos de loa magistrados presentes.
e) Inhabilitación de funciones.- Si los condenados hubiesen incurrido en
violación de derechos fundamentales y de garantías constitucionales, la
sentencia les impondrá la inhabilitación temporal o definitiva de su mandato
y/o ejercicio de sus funciones, y la prohibición de ejercer cualquier función
pública, hasta el máximo de tiempo previsto como sanción penal.
Cómplices, fautores y encubridores.- Estarán sometidos al mismo
procedimiento que el acusado principal, y su juzgamiento definitivo será
hecho también por el TSJ. Si no hubieran sido incluidos, serán enjuciados por
la justicia ordinaria.
f) Prescripción.- Esta acción prescribe en los plazos señalados en los arts.
29 a 34 del Pr. Pen., excepto páralos delitos de genocidio, de lesa
humanidad, de traición a la patria, crímenes dé guerra y los que atenten
contra el patrimonio del Estado y causen grave daño económico, que son
imprescriptibles.
g) Reparación de daños.- Además de las sanciones penales y de
inhabilitación de mandato y- para ejercer funciones públicas, los
condenados deberán resarcir el daño civil caúsado al Estado por los delitos
sancionados.
b) Delitos comunes.- Los funcionarios públicos que cometan delitos comunes
quedarán sujetos a la jurisdicción ordinaria. Según jurisprudencia sentada
por el auto supremo de 27 de diciembre de 1899, corresponde a los jueces
de grado determinar si un delito fue cometido dentro o fuera del ejercicio
de las funciones de un empleado público.
5. - JUICIOS DE RESPONSABILIDAD CONTRA MIEMBROS DEL TSJ, DEL TRIBUNAL
CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL, CONSEJO DE LA
MAGISTRATURA Y MINISTERIO PÚBLICO.
a) Jurisdicción.- Corresponde al Senado tomar conocimiento de las
acusaciones hechas por la Cámara de Diputados, por querella de los
ofendidos, o a denuncia de cualquier ciudadano contra los magistrados
mencionados en el subtítulo que precede, juzgándolos en única instancia e
imponiéndoles la sanción y responsabilidad consiguientes.
b) Delitos imputables.- La Constitución vigente se refiere a “delitos
cometidos en el ejercicio específico de sus funciones”.
c) Procedimiento.- Cuando el Comité del Ministerio Público y Defensa
Legal del Estado concluya su investigación remitirá un Informe en
. Conclusiones a la Comisión de Justicia Plural, Ministerio Público y Defensa
Legal del Estado de la Cámara de Diputados, recomendando que se
presente el proyecto de acusación al Pleno de la Cámara de Diputados, o,
alternativamente, que se decrete el sobreseimiento de los imputados. En el
primer caso, reunida la Cámara de Diputados, se leerá el proyecto de
acusación y se concederá el uso de la palabra en este orden: a los
miembros de la Comisión de Justicia Plural, Ministerio Público y Defensa Legal
del Estado, al denunciante, a la defensa, al o a los imputados y a los
miembros de la Cámara que se hayan inscrito en el rol de oradores.
Concluido el debate se votará el proyecto, que será adoptado por mayoría
absoluta; caso contrario, se lo tendrá por rechazado y por extinguida la
acción, debiendo archivarse los obrados.
La aprobación de la acusación determina la suspensión del o de los
acusados en el ejercicio de sus cargos, y el presidente de la Cámara de
Diputados los acusará formalmente ante la Cámara de Senadores.
d) Del Juicio.- En el Senado el juicio será oral, público, continuo y
contradictorio, de acuerdo a las prescripciones del Pr. Pen., para lo que la
Cámara se declarará en sesión permanente por materia y no podrá
ocuparse de ningún otro asunto hasta pronunciar sentencia. Concluido el
debate se procederá a deliberar y a votar públicamente el proyecto
elaborado por la Comisión o por cualquiera de los Senadores, por dos tercios
de votos de los Senadores presentes'.
Si la sentencia es absolutoria, se ordenará en el acto la libertad del o de los
acusados y la cesación de todas las medidas cautelares que pesaren en su
contra, su restitución inmediata en su(s) cargo(s), el resarcimiento de daños
y perjuicios y honras públicas, y, en su caso, se declarará la temeridad o
malicia de la querella o la denuncia para efectos de la responsabilidad
correspondiente.
c) Recursos.- Según la Ley No. 044 y el Pr. Pen., en el curso del juicio las partes
podran interponer los siguientes recursos:
Recurso de reposición.- Contra las diligencias de mero trámite dictadas en
la etapa preparatoria y en la del juicio, y contra las resoluciones
interlocutorias en el juicio.
Este recurso es de competencia del tribunal que haya dictado la resolución
impugnada.
Recurso de apelación incidental.- Contra las resoluciones interlocutorias
expresamente señaladas en el Pr. Pen. (art. 403), dictadas durante la etapa
preparatoria. Este recurso es de competencia de la Comisión de Derechos
Humanos de la Cámara de Diputados.
Recurso de apelación restringida.- Por inobservancia o errónea aplicación
de la ley, contra la sentencia condenatoria pronunciada por la Cámara de
Senadores. Este recurso es de competencia de las dos Cámaras reunidas en
Asamblea, y se resolverá por dos tercios de votos de los asambleístas
presentes.
Recurso de revisión extraordinaria.- Que el o los condenados podrán
presentar en cualquier tiempo por las causales del art. 421 del Pr. Pen., y que
la Cámara de Senadores resolverá dentro de los veinte días siguientes por,
simple mayoría de votos de los senadores presentes.
NOTAS
(1) En Estados Unidos de América se ha empleado este procedimiento una
sola vez, en 1868 contra el presidente Andrew Johnson, quien no fue
convicto por no haberse pronunciado contra él los dos tercios de votos del
Senado requeridos por ley. En 1974, el presidente Richard Nixon prefirió
renunciar a su alto cargo ante la inminencia de ser sometido al
impeachment por el congreso, debido al escándalo de "Watergate», del
que se habló mucho dentro y fuera de los Estados Unidos en ese tiempo.
CAPÍTULO XXII
RELACIONES INTERNACIONALES, FRONTERAS E
INTEGRACIÓN
1.- ANTECEDENTES
Los orígenes del Estado contemporáneo se remontan al Tratado de Paz de
Westfalia (1.648), esto es, cuando finaliza la Edad Media y se forman las
primeras unidades políticas que habrían de convertirse en los Estados
modernos. Como éstos son parte de un sistema internacional y no son entes
aislados, nace, simultáneamente -o se transforma- el instrumento con el que
habrían de relacionarse, el derecho internacional y su expresión práctica, las
relaciones internacionales, que desde ese momento no han cesado de
evolucionar, a través de casi cuatro siglos, pasando por- el Congreso de
Viena (1.815), la doctrina Monroe (1.823), el Congreso de Panamá (1.826), el
Primer Congreso de Ginebra (1.864), las Conferencias de La Haya y la
creación de la Unión Panamericana (1.899 y 1.907). Pero es en el siglo XX,
después de las dos grandes guerras, que el sistema internacional comienza
a organizarse a escala mundial, primero en la Sociedad de las Naciones
(1.919) y luego en la Organización de las Naciones Unidas (1.945), en
búsqueda de consolidar la paz internacional y la vigencia de los derechos
humanos.
El mundo globalizado en que vive actualmente la humanidad hace más
necesario este instrumento relacionador, que sigue, por lo tanto,
evolucionando. De ahí la importancia cada vez mayor de las relaciones
internacionales, por lo que la Constitución vigente ha incluido un capítulo
con ese título, y otros que le son relativos.
El art. 255.11 consigna, entre otros, los siguientes principios de política exterior.
-Independencia, cooperación y solidaridad.
-No intervención en asuntos internos. .
-Solución pacífica de las controversias.
-Defensa y promoción de los derechos humanos.
-Rechazo al racismo, la discriminación, colonialismo e imperialismo.
-Armonía con la naturaleza y defensa de la biodiversidad.
Cabe agregar aquí que Bolivia es signataria de la Resolución 2625 (XXV), por
la que la Asamblea General de las Naciones Unidad aprobó la Declaración
sobre los Principios de Derecho Internacional Relativos a las relaciones de
Amistad y a la cooperación entre los Estados, de conformidad con la Carta
de las Naciones Unidas. Dichos principios son: - Los Estados, en sus
relaciones'internacionales, se abstendrán de recurrir a la amenaza o al uso
de la fuerza contra la integridad territorial o la independencia política de
cualquier Estado, o en cualquier otra forma incompatible con los propósitos
de las Naciones Unidas.
- Los Estados arreglarán sus controversias internacionales por medios
pacíficos, de tal manera que no se pongan en peligro la paz y la
seguridad internacionales, ni la justicia.
- No intervenir en los asuntos internos de los Estados.
- La igualdad de derechos y la libre determinación de los pueblos.
- La igualdad soberana de los Estados.
- Los Estados cumplirán de buena fe las obligaciones contraídas por
ellos de conformidad con la Carta.
(Arts. 256 a 260). La Convención de Viena sobre el Derecho de los Tratados
los define como "un acuerdo internacional celebrado por escrito entre
Estados y regido por el Derecho Internacional, ya conste en un instrumento
único o en dos o más instrumentos conexos y cualquiera que sea su
denominación particular", (art. 2.1.a.)
Esta definición responde al derecho clásico, para el que sólo eran sujetos de
tratados los Estados. Sin embargo, el derecho internacional ha reconocido,
hace tiempo, capacidad para el efecto a otros sujetos, como las
organizaciones internacionales, que también pueden negociar y suscribir
tratados entre ellas y con los Estados. Por esta razón, se define el tratado
como "toda concordancia de voluntades entre dos o más Estados u otros
sujetos de derecho internacional, regida por este derecho, mediante la cual
so crea, modifica o extingue entre ellos determinada relación jurídica", (l)
Los tratados asumen otras denominaciones, según su forma, objeto,
importancia, etc.: convenciones, que son las suscritas en el marco de
organizaciones internacionales como las Naciones Unidas; convenios,
acuerdos, arreglos, protocolos, etc.
"Los procedimientos de celebración de tratados internacionales se regularán
por ley", dice el art. 258 de la CPE. Dichos tratados, ratificados, forman parte
del orden jurídico interno con rango de ley. Algunos requieren aprobación
previa mediante referendo popular vinculante (sobre límites, integración
monetaria y económica y cesión de competencias nacionales a organismos
supra-nacionales). Requieren asimismo aprobación mediante referendo
cuando lo solicite el 5% de los ciudadanos inscritos en el padrón electoral, o
el 35% de los miembros de la ALP (arts. 257 y 259). Los tratados sobre
derechos humanos que declaren derechos más favorables a los contenidos
en la Constitución, se aplicarán con preferencia a esta última. La denuncia
de los tratados se hará conforme a lo previsto en los mismos, según las
normas de derecho internacional y los procedimientos en la Constitución.
(Arts. 261 a 264). Son las líneas reales o imaginarias que demarcan el territorio
de dos o más estados, sobre el cual éstos ejercen su poder de imperio o
soberanía. Se establecen sobre puntos geográficos de referencia, mapas,
límites coloniales, montañas y otros medios naturales o arcifinios.
En el caso de Bolivia, sus fronteras tienen importancia vital porque es un país
encerrado en el centro de Sudamérica, que limita con otros cinco estados,
de los que le separan 6.750 kmts. fronterizos. Bolivia necesita convertir sus
fronteras en zonas vivas de integración con sus vecinos, mediante un plan
de desarrollo que incluya infraestructura básica (población, vialidad,
escuelas, sanidad, etc.) como lo dispone el art.264. El art. 262 establece una
zona de seguridad fronteriza de cincuenta kilómetros "a partir de la línea de
la “frontera", en la cual ningún extranjero, individualmente o en sociedad
podrá adquirir propiedad, directa o indirectamente, “ni poseer por ningún
título aguas, suelo ni subsuelo, excepto en el caso de necesidad estatal
declarada por ley expresa aprobada por dos tercios de la ALP". El art. 263
confia a las Fuerzas Armadas la defensa, seguridad y desarrollo de las zonas
fronterizas.
5.- INTEGRACIÓN
(Arts. 265 Y 266).- El movimiento hacia la integración económica es. muy
antiguo, pero ha adquirido mayor impulso y se ha diversificado después de
la Segunda Guerra Mundial, como instrumento para mantener la paz
acercando a los pueblos a través del desarrollo compartido y equilibrado de
sus economías, políticas, culturas y sociedades. La integración económica
es la base de todo proceso integracionista, porque al ampliar los mercados
se desarrollan las economías de escala que abaratan costos y precios en
beneficio de los países integrados.
Por su posición geográfica, sin salida al mar, Bolivia necesita integrarse
activamente con sus vecinos y con su región, para comunicarse y atenuar
los efectos asfixiantes de su "mediterraneídad", haciendo efectiva la política
de "tierra de contactos y no de antagonismos". Esto es lo que preconiza el
art. 265.
(Arts. 267 y 268). El art. 267 dice que "el Estado boliviano declara su derecho
irrenunciable e imprescriptible sobre el territorio que le dé acceso al Océano
Pacífico y su espacio marítimo". Agrega que "el ejercicio pleno de la
soberanía sobre dicho territorio" se debe alcanzar a través de medios
pacíficos.
Este artículo puede prestarse a diferentes interpretaciones. A principios del
siglo XX los "reivindicacionistas" propugnaban la recuperación de todo el
territorio cercenado a Bolivia por Chile en la Guerra del Pacífico, en
contraste con los "realistas" que no se aferraban a la recuperación total de
ese territorio, sino a encontrar soluciones prácticas y "realistas". El artículo
habla de un "territorio que le dé acceso", sin mencionar extensión alguna;
pero proclama la "soberanía plena" sobre el mismo, lo que descartaría
cualquiera otra solución que no incluyera ese carácter.
Un asunto tan complejo como éste, cuya solución depende de la
capacidad de los negociadores en un momento dado, no debe ser materia
de un precepto constitucional.
NOTAS
(1) PODESTÁ COSTA, L.A. y RUDA, José María.- DERECHO INTERNACIONAL
PÚBLICO.- Tipográfica Editora Argentina.-Buenos Aires, 1985, p. 13.
CAPÍTULO XXIII
ORGANIZACIÓN ECONÓMICA DEL ESTADO
1.-ANTECEDENTES
La Constitución de 1880 y las anteriores no contenían disposiciones sobre
estas materias, pues respondían al espíritu individualista y liberal que fue
expresión de la Revolución Francesa, y, con ese propósito, consignaban
solamente la forma de gobierno y los derechos fundamentales de la
persona. El referéndum de 1931 se hizo, como es sabido, al impulso do las
corrientes del constitucionalismo social qué irrumpieron después de la I
Viniera Guerra Mundial y que ya se habían impuesto en muchos países,
Dicho referéndum introdujo una sección nueva en nuestra Constitución,
llamada “Del Régimen Económico y Social”, en la que se creaba el Consejo
de Economía Nacional con representantes de “las industrias minera,
comercial, fabril, bancaria, de transportes, agropecuaria’ y otras de
capacidad económica efectiva, así como de las clases obreras, en
proporciones equitativas”. Dicho Consejo debía considerar los proyectos y
modificaciones de leyes sobre trabajo y economía.'
El la Constitución de 1938 y siguientes se incorporó la sección especial
denominada “Del Régimen Económico y Financiero”, que se mantuvo hasta
la constitución do 1995.
2. - PRINCIPIOS
El Estado reconoce al ser humano como su valor máximo y promueve su
desarrollo mediante la redistribución equitativa de los excedentes, Toda
actividad económica debe contribuir al fortalecimiento de la soberanía
económica del país; debe generar trabajo digno y contribuir a reducir las
desigualdades y la pobreza.' No se permitirá la acumulación privada de
poder económico en grado tal que ponga en peligro la soberanía
económica del Estado. Se prohíbe el monopolio y el oligopolio privado (arts.
306.V, 312 y 314).
3. - FORMAS DE ORGANIZACIÓN ECONÓMICA
El modelo económico boliviano es plural y comprende las economías
comunitaria, estatal, privada y social cooperativa.
La economía comunitaria se basa en los principios y visión de las naciones y
pueblos indígena originario y campesinos. La economía estatal comprende
a empresas y entidades de propiedad del Estado que en nombre del pueblo
boliviano administran los recursos naturales, los servicios básicos de agua
potable y alcantarillado, producen bienes y servicios, etc. El Estado
reconoce, respeta y protege la iniciativa privada; se garantiza la libertad de
empresa. Se reconoce y protege, asimismo, el trabajo solidario, sin fines de
lucro, de las cooperativas. Todas las formas de organización económica son
iguales ante la ley. (arts, 306 a 311.1).
4. - FUNCIÓN DEL ESTADO EN LA ECONOMÍA
El Estado ejerce la dirección integral de la economía, para lo que'podrá
intervenir en toda la cadena productiva de los sectores estratégicos;
industrializar los recursos naturales que son de propiedad del pueblo y son
administrados por el Estado; conduce la planificación económica y social
con participación ciudadana; determina el monopolio estatal de las
actividades que se considere imprescindibles por la necesidad pública;
fortalecerá la infraestructura industrial, manufacturera y de servicios básicos;
promoverá el desarrollo rural (arts. 311,316 a 319),
La planificación por parte del Estado se justifica no solamente porque el
interés colectivo prevalece sobre los intereses particulares, sino porque se
supone que el Estado posee datos reales sobre los recursos naturales,
humanos, financieros y monetarios con que cuenta el país, y conoce mejor
que otros las necesidades en todos los distritos y sectores de la población.
Esta labor corre a cargo del Ministerio de Planificación del Desarrollo según
la Ley LOPE (No. 3351).
5. - POLÍTICA ECONÓMICA
El Estado promueve la exportación de bienes con valor agregado; apoya a
las micro, pequeñas y medianas empresas productoras, urbanas y rurales; se
prioriza la inversión nacional con relación a la extranjera; toda inversión
extranjera estará sometida a la jurisdicción, a las leyes y a las autoridades
bolivianas, y nadie podrá apelar a situaciones de excepción ni a
reclamaciones diplomáticas para escapar a esta regla; las relaciones
económicas con estados y empresas extranjeras se realizarán en un marco
de independencia, respeto mutuo y equidad; se promoverá el consumo
interno de productos hechos en Bolivia (arts. 318 y 320).
6. - BIENES DE DOMINIO PÚBLICO Y PRIVADO DEL ESTADO
Considerado como una persona jurídica, el Estado ejerce un dominio
público y otro privado sobre los bienes, según asuma una personalidad
pública y otra privada como representante de la nación, en el primer caso,
y en sus relaciones con los particulares, en el segundo. Cuando los bienes
están al servicio de la sociedad, el Estado ejerce dominio sobre ellos como
guardián del interés público, como poder de Policía y no como propietario
de los mismos. Este es el caso de los caminos, calles, parques, plazas, ríos,
lagos, etc., que están fuera del comercio humano y no son susceptibles de
apropiación privada, porque son de uso común, inembargables,
inalienables imprescriptibles. En determinados casos los bienes de dominio
público pueden ser desafectados, incorporándoselos al dominio patrimonial
del Estado o de los particulares, con lo cual pierden su carácter de
inalienables e imprescriptibles. Pero la desafectación debe realizarse
siempre por un acto de derecho público, para surtir electos legales, aunque
se hubiera consumado antes en los hechos, como cuando, un río cambia
de curso y deja una parte de su lecho anterior convertido en terreno que
pueda incorporarse al dominio privado o patrimonial del Estado. Cuando el
Estado concede terrenos de dominio público para la instalación temporal
de teatros, circos, restaurantes, anuncios, etc., mediante el pago de la tasas
respectivas, no está desafectándolos del dominio público.
Son bienes de dominio privado del Estado los que le pertenecen con
carácter patrimonial o fiscal, y que aquél puede enajenar o disponer, como
una propiedad particular, de acuerdo con las leyes y normas del Derecho
Administrativo. Entre estos bienes tenemos los terrenos y edificios' donde
funcionan las escuelas y colegios fiscales, los ministerios y otras oficinas
públicas, los ferrocarriles del Estado, automóviles oficiales, los muebles,
máquinas, herramientas e instrumentos de las oficinas, fábricas y
establecimientos del Estado, etc.
A los primeros bienes se refiere el art. 339.11, cuando dice que "los bienes del
patrimonio del Estado y de las instituciones públicas constituyen propiedad
del pueblo boliviano, inviolable, inembargable, imprescriptible e
inexpropiable; no podrán ser empleados en provecho particular alguno ..."
Los arts. 372.1 y 359 dan este carácter a las minas nacionalizadas y a los
yacimientos de hidrocarburos al declararlos "patrimonio inalienable e
imprescriptible del pueblo boliviano".
7. - DOMINIO EMINENTE
Cabanellas lo define como las “atribuciones o facultades que tiene el Estado
para ejercer, como soberano, el dominio supremo sobre todo el territorio
nacional, y establecer los gravámenes y cargas que las necesidades
públicas requieren, ya sean impuestos, expropiaciones, limitaciones o
prestaciones”.
CAPÍTULO XXIV
POLÍTICA FISCAL Y FINANCIERA
ley que implique gastos para el Estado debe indicar la manera de cubrirlos
y la forma de su inversión.
• Estas previsiones se orientan a evitar los gastos excesivos e injustificados
que producen los déficits fiscales, a veces muy cuantiosos, para cubrir los
cuales se recurre a la emisión de papel moneda que acarréala inflación o
la devaluación que tiene peores consecuencias.
. Como ley de la nación, el presupuesto debe ser cumplido estrictamente, y
para el efecto existe un triple contralor presupuestario que proviene de otros
tantos órganos: en primer lugar el contralor administrativo, a cargo de la
propia administración, que no debe descuidar esta función. En todas las
secciones de la administración pública tiene que haber controles oportunos
y eficaces, como requisito indispensable de su propia organización. El
control es inherente a la responsabilidad en el ejercicio de la función
pública. En segundo lugar viene el contralor jurisdiccional, confiado a un
órgano independiente de la administración, que en nuestro caso es la
Contraloría General del Estado (ver infra, punto b), la Contraloría). Y en
tercer lugar, el contralor legislativo, que ocurre antes al aprobar el Congreso
el Presupuesto, antes de su ejecución, al considerar los planes de desarrollo
y al autorizar la contratación de empréstitos, art. 158.1. 7,10 y 11; durante la
ejecución presupuestaria, al ejercitar en cualquier momento sus funciones
de información, investigación, inspección y fiscalización de la administración
(ver art. 158.1.19, y al final de la gestión presupuestaria, al aprobar
anualmente la cuenta de gastos e inversiones que debe presentarle el
Ejecutivo en la primera sesión de cada legislatura, como lo dispone el art.
172.12. Este contralor comprende también a todas las empresas públicas y
en todas en las que participa el Estado. La ley SAFCO establece en su art. 13
dos sistemas de control en la administración pública; uno interno en cada
entidad, que es previo y posterior, y otro externo posterior a cargo de la
auditoria externa.
La administración económica y financiera del Estado se rige por el
presupuesto que el OE presentará a la ALP al menos dos meses antes de la
finalización de cada año fiscal,
b) Contraloría General del Estado. - (arts. 213. a 217). Ejerce el control
posterior de todas las entidades de la administración pública, incluyendo a
las empresas mixtas, y. determina responsabilidades administrativa,
ejecutiva, civil y penal. Tiene autonomía. funcional, financiera, administrativa
y organizativa. La dirige el Contralor General del Estado, que es designado
por dos tercios de votos de la ALP, previa convocatoria pública a concurso
y calificación de méritos. Para acceder al cargo se requiere, además de las
condiciones generales de acceso a la función pública, tener 30 años de
edad, "título profesional en una rama afin al cargo", y haber ejercido la
profesión durante al menos 8 años. Su período es de seis años
improrrogables. Debe presentar cada año un informe de labores a la ALP.
La Ley de 5 de Mayo de 1.928 ha sido abrogada por el D.L. No. 14.933 de 29
de Septiembre de 1.977, primero, y después por la ley SAFCo. Esta última
prescribe en su art. 23 que "La Contraloría General de la República es el
órgano rector del sistema de control gubernamental (...) emitirá las normas
básicas de control interno y externo; evaluará la eficacia do los sistemas de
control interno; realizará y supervisará el control externo y ejercerá la
supervigilancia normativa de los sistemas contables del sector público a
cargo de la Contaduría General del Estado del Ministerio de Finanzas...”, Los
arts. 41 y ss. de esta ley detallan las funciones y competencias de la
Contraloría General del Estado para cumplir el cometido que le señala el
art. 23 ya citado.
3.- FINANZAS PÚBLICAS
Se da este nombre a la ciencia que se ocupa de establecer, recaudar,
administrar e invertir los recursos públicos en los términos más convenientes
a la economía y al desarrollo social de la nación. En consecuencia, son tres
los objetivos o fenómenos financieros, como se los llama, do esta ciencia:
1).- Determinar gastos e inversiones socialmente necesarios y
económicamente reproductivos; 2).- Recaudar los mayores ingresos posibles
para el Erario; y 3).- Invertir estos últimos en función de la justicia social, del
desarrollo económico y de la administración científica.
4.- RENTAS DEL ESTADO
Ingreso público, dice Bielsa, es "todo caudal de dinero que afluye a una
entidad pública en virtud de su ejercicio financiero, y que so destina a la
realización de los fines públicos de esa entidad" (nación, departamento,
municipio y otras entidades autárquicas). (3)
El art. 340 divide las rentas del Estado en nacionales, departamentales,
municipales e indígena originario campesinas, y prescribe que las mismas se
invertirán independientemente por sus tesoros conforme a sus respectivos
presupuestos. Agrega este artículo que los recursos departamentales,
municipales, de autonomías originario campesinas, judiciales y universitarios
recaudados por oficinas dependientes del Tesoro Nacional, no se
centralizarán en dicho tesoro. Esta disposición se origina en la Ley de 21 de
Noviembre de 1.872. Sin embargo, la ley do Reforma Tributaria No. 843, de
20 de Mayo de 1.986, centralizó todas las recaudaciones tributarias en el
Tesoro General de la Nación, en contravención directa al citado art. 146 de
la CPE.
Los ingresos fiscales se dividen en ordinarios y extraordinarios. Los primeros
son aquellos que se recaudan regularmente en cada ejercicio fiscal con
arreglo al presupuesto aprobado, y que sirven para cubrir los gastos
ordinarios. Extraordinarios son los destinados a pagar gastos no previstos o a
cubrir el déficit que resulte al final de la gestión.
Bielsa subdivide cada una do estas categorías de ingresos en originarios y
derivados. Los ingresos ordinarios originarios son los patrimoniales o de
derecho privado, como las rentas o frutos provenientes de bienes del
dominio privado del Estado y el producto de la venta de tierras fiscales.
Ingresos ordinarios derivados son las contribuciones fiscales (impuestos, tasas
y contribuciones especiales). Ingresos extraordinarios originarios son los
bienes provenientes de herencias vacantes y de otros adquiridos por
accesión, aluvión, etc. Ingresos extraordinarios derivados son las
contribuciones directas establecidas por tiempo determinado y en forma
excepcional (casos de guerra y de calamidades públicas); las multas y
penas pecuniarias; los empréstitos. (4)
5. - DEUDA PÚBLICA
El art. 322 dice que la ALP autorizará la contratación de deuda pública
cuando "se demuestre la capacidad de generar ingresos para cubrir el 5
22
capital y los intereses y se justifique técnicamente las condiciones más
ventajosas ... " Agrega que esta deuda no incluirá obligaciones que no
hayan sido autorizadas y garantizadas por la ALP.
El art. 11 de la ley SAFCO dispone que la deuda pública interna o externa,
con plazo igual o mayor de un año "será contraída por la máxima autoridad
del Sistema de Tesorería del Estado, por cuenta del Tesoro General de la
Nación o de la entidad beneficiaría...", y la de plazo inferior a un año "será
contraída por cada entidad".
El crédito público es una institución del Estado moderno, que representa a la
nación en conjunto y no sólo a sectores de la misma, pudiendo obligarse por
esto durante largos períodos que comprometen el esfuerzo de varias
generaciones y loé recursos naturales del país. El crédito público nace de la
necesidad de financiar obras e inversiones para promover el programa
económico y social, que no se puede hacer solamente con los ingresos
ordinarios, que casi siempre son insuficientes incluso para pagar los gastos
ordinarios de cada gestión.
Por precepto constitucional (art. 158.1.10), la contratación de todo
empréstito debe ser autorizada previamente por el Legislativo, debido a que
es el pueblo quien paga dichas obligaciones mediante los impuestos. Este
requisito fue introducido por primera vez con la revolución inglesa de
1.648, que además separó el patrimonio del monarca del de la nación.
Comenzó entonces a usarse en Europa títulos de deuda pública y a
publicarse algunos tratados sobre créditos.
La deuda pública puede ser interna y externa, según se la financie dentro o
fuera del país. Se divide también en deuda flotante y consolidada. La
primera es la que se contrata por períodos no superiores a un año, por
necesidades fiscales urgentes. Equivale a una deuda de caja que ha de
reembolsarse dentro de la gestión en la que se contrata, y usualmente se
desembolsa por anticipos, préstamos o descuentos que obtiene el Estado
del Banco Central, cuando disminuye o se demora la recaudación de los
ingresos 'fiscales. La deuda consolidada, llamada también asegurada o
inscrita, se contrata por períodos largos,hasta 99 años, y se destina a la
ejecución de proyectos de desarrollo, generalmente de gran envergadura.
Para las amortizaciones periódicas de su capital e intereses se la hace figurar
en el Presupuesto Nacional y se la inscribe en el Gran Libro de Deuda
Pública, dándosele la forma de títulos o bonos al portador.
NOTAS
(1) Citado por CUADROS, Alfredo, en ‘'Compendio de Finanzas Públicas"
3a Ed. Cocliabaniba, EDIT. UNNERS1DAD, 1968, PAG. 128.
(2) BIELSA, Rafael.- “Derecho Constitucional", pág. 566.
(3) Bielsa, Rafael. "Derecha Administrativo”. 6a. Ed. Tomo IV, p. 558,
Editorial La Ley, Buenos Aires, 1965.
(4) Derecho Administrativo.-Ob. Cit.
CAPÍTULO XXV
RÉGIMEN AGRARIO-CAMPESINO
CAPÍTULO XXVI
RECURSOS NATURALES
CAPÍTULO XXVII
RÉGIMEN FAMILIAR
1.- LA FAMILIA
a) Concepto y funciones.- La familia es la institución que sirve de base a
la formación de la sociedad. Su origen es biológico, pero sus funciones
abarcan también los conceptos social y cultural, donde el hombre no podría
desenvolverse si no contara con la formación básica y con el apoyo moral
que le presta su familia.
b) Funciones biológicas.- Estas aseguran la perpetuación de la especie,
la supervivencia de los hijos y la asistencia económica y moral imprescindible
para aquéllos. Se ha señalado que el hombre es el más desvalido de los
animales desde su nacimiento y durante gran parte de su infancia.
Contrariamente a lo que ocurre con casi todos los animales inferiores, que
pueden alimentarse por si mismos en cuanto nacen, el niño no se emancipa
biológicamente sino después de varios años, requiriendo de la atención
constante e inmediata de su madre y de su familia.
c) Funciones culturales.- La familia interviene decisivamente, durante los
primeros años, en la formación del carácter y en el desarrollo de la
personalidad del individuó al transmitir la herencia cultural formada por
afectos, costumbres, sentimientos y tradiciones. En el seno de la familia el
niño da los primeros pasos y aprende las primeras letras, iniciándose el
proceso de socialización que lo incorpora después a la vida en sociedad.
Los estudios de psicología de la infancia han
demostrado que los niños educados por nodrizas, sin amor materno, sufren
retraso en su peso y en su crecimiento, alterándose su desarrollo intelectual,
social y moral y elevándose las tasas de morbilidad y mortalidad infantil. Se
ha demostrado también la relación que existe entre los desequilibrios
causados en la infancia por una familia desorganizada y la delincuencia
juvenil.
d) Importancia.- La filosofía individualista propagada por la Revolución
Francesa, que tanta influencia tuvo en las instituciones jurídicas y
económicas del siglo XIX, no era la más adecuada para el fortalecimiento
de los lazos familiares, y este peligro pareció acentuarse cuando, después
de la Revolución Rusa, los códigos soviéticos de 1918 y 1926 reconocieron el
matrimonio de hecho, el divorcio y el aborto. Sin embargo, en la
Constitución de 1936 la URSS, prohibió el aborto, reglamentó el divorcio y
exaltó la maternidad, la paternidad, la familia y el matrimonio.
La familia, que hasta la Primera Guerra Mundial era materia del Derecho
Civil, considerándosele una institución privada, fue incorporada al Derecho
Público y colocada bajo la protección del Estado a partir de la Constitución
de Weimar (1919). Francia promulgó su Código de Familia en 1939, régimen
que fue reforzado en la legislación posterior. La gran mayoría de las
Constituciones publicadas a partir de 1945 dan un lugar prominente al
Derecho de Familia. Tres aspectos, en esta materia, son comunes a las
nuevas Constituciones: 1) la familia y el matrimonio, fundamentos de la
sociedad, están bajo la protección del Estado; 2) los derechos de la familia
están legislados y garantizados; y 3) el Estado protege por igual a la
maternidad, lá infancia y la vejez.
Nuestra Constitución de 1938 incluyó por primera vez una sección relativa a
la familia, declarando que ésta, el matrimonio y la infancia quedaban bajo
la protección del Estado (art. 131), precepto contenido ahora en el art. 62
de la Constitución vigente y en el art. 4 del Código de Familia El art. 5 de este
último aclara que esta materia es de orden público y que las leyes
pertinentes no pueden renunciarse por voluntad de los particulares, bajo
pena de nulidad, salvo los casos expresamente permitidos por ley. na
Declaración Americana de los Derechos y Deberes del Hombre contiene los
siguientes preceptos:
“Art, VI.- Toda persona tiene derecho a constituir familia, elemento
fundamental de la sociedad y a recibir protección para ella”.
“Art. VIl.- Toda mujer en estada de gravidez o en época de lactancia, así
como todo niño tienen derecho a protección, cuidado y ayuda especiales”.
La Declaración Universal de los Derechos del Hombre dice:
“Art. 16.-1. Los hombres y las mujeres, a partir de la edad núbil, tienen
derecho, sin restricción alguna por motivos de raza, nacionalidad o religión,
a casarse y fundar una familia; y disfrutar de iguales derechos en cuanto al
matrimonio, durante el matrimonio y en caso de disolución del matrimonio.
2. Sólo mediante libre y pleno consentimiento de los futuros esposos
podrá contraerse matrimonio.
3. La familia es el elemento natural y fundamental de la sociedad y tiene
derecho a la protección de la sociedad y del Estado.
La Convención Americana sobre Derechos Humanos dispone, en su art. 17,
lo que sigue:
“Protección a la familia,
1. La familia es el elemento natural y fundamental de la sociedad y
debe ser protegida por la sociedad y el Estado.
2. Se reconoce el derecho del hombre y la mujer a contraer matrimonio
y a fundar una familia si tienen la edad y las condiciones requeridas
para ello por las leyes internas, en la medida en que éstas no afecten
al principio de no discriminación establecido en esta Convención. 3.
El matrimonio. no puede, celebrarse sin el libre y pleno consentimiento
de los contrayentes.
4. Los Estados Partes deben tomar medidas apropiadas para asegurar la
igualdad de derechos y la adecuada equivalencia de responsabilidades de
los cónyuges en cuanto al matrimonio, durante el matrimonio y en caso de
disolución del mismo En caso de disolución, se adoptará disposiciones que
aseguren la protección necesaria a los hijos, sobre la base única del interés
y conveniencia de ellos.
5. La ley debe reconocer iguales derechos tanto a los hijos nacidos fuera
del matrimonio como a los nacidos dentro del mismo”.
El Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales se
ocupa también de la materia en su artículo 10, que dice:
“Los Estados Partes en el presente Pacto reconocen que:
1. Se debe conceder a la familia, que es el elemento natural y
fundamental de la sociedad, la más amplia protección y asistencia posibles,
especialmente para su constitución y mientras sea responsable del cuidado
y la educación de los hijos a su cargo. El matrimonio debe contraerse con el
libre consentimiento de los futuros cónyuges.
2. Se debe conceder especial protección a las madres durante un
período de tiempo razonable antes y después del parto. Durante dicho
período, a las madres que trabajen se les debe conceder licencia con
remuneración o con prestaciones adecuadas de seguridad social.
3. Se debe adoptar medidas especiales de protección y asistencia en
favor de todos los niños y adolescentes, sin discriminación alguna por razón
de filiación o cualquier otra condición. Debe protegerse a los niños y
adolescentes contra la explotación económica y social. Su empleo en
trabajos nocivos para su moral y salud, o en los cuales peligre su vida o se
corra el riesgo de perjudicar su desarrollonormal, será sancionado por la ley.
Los Estados deben establecer también límites de edad por debajo de los
cuales quede prohibido y sancionado por ley el empleo a sueldo de mano
de obra infantil”.
El art. 53 de la Constitución soviética de 7 de Octubre de 1977 declaraba:
“La familia se encuentra bajo el amparo del Estado; El matrimonio descansa
en el acuerdo voluntario de la mujer y el hombre. En las relaciones familiares
existe absoluta igualdad de derechos entre los cónyuges”.
La Constitución de la República Popular China de 1982 dispone en su art. 49:
“El matrimonio, la familia, la maternidad y la infancia están bajo la
protección del Estado.-Marido y mujer deben practicar la planificación
familiar- Los padres tienen el deber de criar y educar a sus hijos menores, y
éstos, cuando son adultos, tienen el deber de sostener y asistir a su padres.
Se prohibe violar la libertad del matrimonio, así como el maltrato a los viejos,
mujeres y niños”. 2.- EL MATRIMONIO
lista palabra proviene de las voces latinas, matris y munium, que significan
“oficio u obligación de madre”. Es la unión de dos personas de sexo distinto
que se propone constituir una familia mediante la procreación, el
mantenimiento y la educación de los hijos, a quienes quedan vinculados
directamente a través de la sangre, del afecto y del dorocho.
El matrimonio es una de las qiás antiguas instituciones humanas, nacida de
la necesidad natural de unirse que tienen el hombre y la mujer para cumplir
sus funciones biológicas, materiales y espirituales. Como institución religiosa,
aparece en el primer capitulodol Génesis (27 y 28), donde se dice que Dios
creó al hombre a su imagen, varón y hembra, bondicióndoles con estas
palabras: “Creced y multiplicaos".
Durante toda la Edad Media sólo existía el matrimonio religioso que la Iglesia
sigue considerando como un sacramento en nuestros días. A partir del siglo
XVI comenzó a manifestarse el poder civil y después de la Revolución
Francesa fue incorporándose el matrimonio como un contrato civil en
algunas legislaciones, manteniéndose en otras como un sacramento. Así, el
art. 99 de nuestro antiguo Código Civil vigente en esta materia hasta la Ley
del Matrimonio Civil de 11 de Octubre de 1911, decía: “Estando en la
república elevado el matrimonio a la dignidad de sacramento, las
formalidades necesarias para su celebración serán las mismas que el
Concilio de Trento y la Iglesia tienen designadas”.
El matrimonio civil fue introducido en Bolivia por la mencionada Ley de 1911,
cuyos artículos l2 y 22. disponen: “La ley sólo reconoce el matrimonio civil.
Después de celebrado el matrimonio civil podrá realizarse el canónico o
religioso, pero no surtirá efectos legales sino el civil. El matrimonio religioso
sólo se efectuará en vista del certificado que acredite haberse realizado el
civil”.
Consecuente con este pensamiento, el Código de Familia contiene las
siguientes disposiciones sobre el matrimonio:
“Art. 41.- (Matrimonio civil). La ley sólo reconoce el matrimonio civil que debo
celebrarse con los requisitos y formalidades prescritos en el presente título”.
“Art. 42.- (Matrimonio religioso). El matrimonio religioso es independiente del
civil y puede celebrarse libremente de acuerdo a la creencia de los
contrayentes; pero sólo tendrá, validez legal y producirá efectos jurídicos el
matrimonio civil”.
“Art. 43.- (Matrimonio religioso con efectos civiles). No obstante, el -
matrimonio religioso será válido y surtirá efectos jurídicos cuando se lo realice
en lugares apartados de los centros poblados donde no existo o no se hallen
provistas las oficialías del registro civil, siempre que concurran los requisitos
previstos por el Capítulo II del presente título y se lo inscriba en el registro civil
más próximo debiendo el celebrante enviar para este fin al oficial del registro
civil el acta de celebración y demás constancias bajo su exclusiva
responsabilidad y sujeto a las sanciones que se establecerán en su caso, sin
perjuicio de que puedan hacerlo los contrayentes o sus sucesores”.
En el derecho comparado existen los siguientes sistemas respecto al
matrimonio: 1) el obligatorio, que sólo reconoce efectos legales al
matrimonio civil, y no al religioso, como ocurre en Suiza y en Francia, y como
ocurría en España desde 1932 a 1939; 2) el facultativo, según el cual surten
efectos legales tanto el matrimonio civil como el religioso, criterio adoptado
en los países anglo-sajones; y 3).el subsidiario, para quiénes no pueden
realizar el matrimonio civil, como lo prevé el transcrito art. 43 del Código de
Familia Boliviano.
3. - LA UNIÓN CONYUGAL LIBRE O DE HECHO
Además del connubium o justa nuptia, que era el matrimonio legitimo
reservado a los ciudadanos, existía en Roma el concubinatus, una unión de
categoría inferior a aquélla, más duradera que cualquier otra relación ilícita,
por la cual un romano se ligaba sin pacto especial a una mujer de otra
condición o indigna de ser su esposa por ser manumitida o de baja
extracción.
La ley Julia de Adulteris castigaba toda otra unión ilícita que no fuese el
concubinatus. Este no producía al comienzo ningún efecto legal y la mujer
no se colocaba en la condición ni en el rango social del marido. Los hijos
seguían la condición de la madre y no estaban bajo la potestad paterna. El
Código Napoleón, que en esta materia siguió los preceptos canónicos que
sólo reconocen el matrimonio religioso- ignoró totalmente las uniones de
hecho, como lo hizo nuestro antiguo Código Civil, inspirado en aquél. La
revolución bolchevique de 1917 transformó el derecho de familia, y por
ende, la institución del matrimonio, a la que primero dio un carácter civil
reconociendo después el matrimonio de hecho. En su obra “Principios de
Derecho Soviético”, Horacio de Castro dice que “se entiende que unión de
hecho es la vida habitual en común de dos personas de distinto sexo, de
modo tan especial que no quepa duda sobre la existencia de lazos íntimos
de unión”, (i)
Las uniones de hecho fueron legalizadas en Bolivia por primera vez en la
Constitución de 1945, cuyo art. 131, segundo párrafo decía: “Se reconoce el
matrimonio de hecho en las uniones concubinarias, con sólo el transcurso de
dos años de vida en común, verificada por todos los medios de prueba o el
nacimiento de un hijo, siempre que las partes tengan capacidad legal para
contraer enlace”. La Constitución vigente dispone, al respecto, en su art.
63.11: “Las uniones libres o de hecho que reúnan condiciones de estabilidad
y singularidad y sean mantenidas entre una mujer y un hombre sin
impedimento legal producirán los mismos efectos que el matrimonio civil,
tanto en las relaciones personales y patrimoniales de los convivientes, como
en lo que respecta a las hijas o hijos adoptivos o nacidos de aquéllas".
En concordancia con el precepto constitucional transcrito, los art. 158 y 159
del Código de Familia dicen lo siguiente:
“Art. 158.- (unión conyugal libre). Se entiende haber unión conyugal libre o
de hecho cuando el varón y la mujer, voluntariamente, constituyen hogar y
hacen vida en común en forma estable y singular, con la concurrencia de
los requisitos establecidos por los artículos 44 y 46 al 50.
Se apreciarán las circunstancias teniendo en consideración las
particularidades de cada caso”.
“Artículo 159.- (regla general) Las uniones conyugales libres o de hecho que
sean estables y singulares producen efectos similares al matrimonio, tanto en
las relaciones personales como patrimoniales de los convivientes. Pueden
aplicarse a dichas uniones las normas que regulan los efectos del
matrimonio, en la medida compatible con su naturaleza, sin perjuicio de las
reglas particulares que se dan a continuación”.
El Código de Familia ha avanzado más en esta materia, y toma en cuenta
las formas pre-matrimoniales indígenas como el tantanacu o sirvinacu, en el
art. 160 que dice:
“Art. 160.- (Formas pre-matrimoniales indígenas y otras uniones de hecho).
Quedan comprendidas en las anteriores determinaciones las formas
prematrimoniales indígenas como el “tantanacu” o “sirvinicu”, las uniones
de hecho de los aborígenes y otras mantenidas en los centros urbanos,
industriales y rurales.
Se tendrán en cuenta los usos y hábitos locales y regionales siempre que no
sean contrarios a la organización de la familia establecida por el presente
Código o que no afecten de otra manera al orden público y a las buenas
costumbres”.
Los arts. 171 y 172 del mismo Código se refieren a las uniones sucesivas e
irregulares de hecho en estos términos:
“Art. 171.- (Uniones sucesivas). Cuando hay uniones libres sucesivas y
singulares, se puede determinar el periodo.de duración de cada una de
ellas y atribuírseles los efectos que les corresponden”.
“Art. 172,- (Uniones irregulares). No producen los efectos anteriormente
reconocidos, las uniones inestables y plurales, así como las que no reúnen los
requisitos prevenidos por los arts. 44 y 46 al 50 del presente Código, aunque
sean estables y singulares.
Sin embargo, en este último caso pueden ser invocados dichos efectos por
los convivientes cuando ambos estuvieron de buena fe, y aun por uno de
ellos, si sólo hubo buena fe de su parte, pero no del otro.
Queda siempre a salvo el derecho de los hijos. (2)
4.- MATRIMONIO ENTRE HOMOSEXUALES
A pesar de la oposición militante de la Iglesia Católica y de sectores
conservadores de la sociedad, aumenta cada año el número de países que
otorgan reconocimiento legal a las uniones entre personas del mismo sexo,
con iguales efectos a los que produce el matrimonio entre un hombre y una
mujer, incluyendo, en muchos casos el derecho a adoptar hijos y a transmitir
herencia por parte de las parejas homosexuales.
El primer país en reconocer dichas uniones fue Holanda, en el 2.001; le
siguieron Bélgica (2.003), España y Canadá (2.005), Sudáfrica (2.006),
Noruega, Suecia y el distrito Federal de México, (Ciudad de México), el 2.009,
Portugal, Islandia y Argentina (2.010). En Estados Unidos de América sois
estados reconocen esas uniones: Massachussols, (2,004),
Connectitud (2.008), Iowa y Vermont (2.009), New Hampshire y Washington
D.C. (2.010). Otros países han reconocido estos matrimonios con el nombre
de uniones civiles, entre ellos Alemania, Australia, Austria, Dinamarca,
Finlandia, Francia, Reino Unido y Suiza.
Los partidarios de estos matrimonios arguyen que se trata de una cuestión
de derechos humanos, del principio de igualdad ante la ley y del derecho
a unirse con independencia de su orientación sexual. En esa forma se
inscribe la Declaración aprobada por la Asamblea General de las Naciones
Unidas el 18 de diciembre de 2.008, que exhorta a poner fin a las violaciones
de los derechos humanos fundadas en la orientación sexual y la identidad
de género; violaciones que en muchos países musulmanes llegan a la
aplicación de la pena de muerte. La Declaración expresa la alarma de los
firmantes (66 Estados miembros) por la violencia, acoso, discriminación,
exclusión y prejuicio en razón de la orientación sexual de las personas.
5. - CONDICIÓN JURÍDICA DE LOS CONYUGES
De acuerdo al Derecho Romano, la mujer casada estaba bajo la potestad
del marido y seguía la condición de éste en cuanto a los derechos y
obligaciones emergentes del matrimonio. El Código Napoleón se inspiró en
el derecho romano y nuestro viejo Código Civil se basaba en aquél, de
manera que sus artículos 130 y siguientes disponían la obediencia de la mujer
al marido; su obligación de seguirle adonde “él juzgue conveniente residir”;
la necesidad de pedirle licencia para comparecer en juicio, y de obtener su
consentimiento o ratificación posterior por escrito para dar, enajenar,
hipotecar y adquirir por título gratuito u oneroso cualquier bien. En caso de
impedimento o ausencia del marido, o de'haber sido éste condenado a una
pena aflictiva o infamante...”, la mujer sólo podía contratar y comparecer
enjuicio previa autorización del juez.
Esta manifiesta desigualdad en la situación jurídica de los cónyuges era un
resabio de las leyes y costumbres de la antigüedad y de la Edad Media, que
se arrastró en la mayoría de las legislaciones hasta después de la Primera
Guerra Mundial, pese a que la Revolución Francesa había proclamado que
“los hombres nacen y permanecen libres e iguales en derechos”, y que la
ley “debe ser la misma para todos, sea que proteja o que .castigue” (arts.
l2y 65 de la Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano), Con
la introducción del constitucionalismo social por obra de la sacudida
estructural que produjeron la Primera. Guerra Mundial y las Revoluciones
mexicana y rusa, so impuso en la mayoría de las legislaciones el principio de
la igualdad jurídica de los cónyuges, incorporado en nuestra Constitución
de 1945 (art. 131) y recogido en el art. 62 de la Const. vigente. El art. 3 del
Código de Familia advierte que “los miembros de la familia gozan de trato
jurídico igualitario y compatible con la dignidad humana, dentro de las
jerarquías que impone la organización familiar”. El art. 96 agrega que “los
esposos tienen, en interés de la comunidad familiar y de acuerdo a la
condición personal de cada uno, derechos y deberes iguales en la dirección
y el manejo de los asuntos del matrimonio, así como en la crianza y
educación de los hijos”.
6. - CONDICIÓN DE LA MUJER CASADA EN OTROS PAISES
Pese a la legislación que proclama la igualdad de derechos entre el hombre
y la mujer, ésta sigue siendo discriminada, de manera general, en la mayoría
de los países, en cuanto concierne a salarios, empleo y acceso a la función
pública. Su condición jurídica en el matrimonio es manifiestamente inferior a
la de su cónyuge en varios países, como veremos a continuación:
Las japonesas están entre las mujeres con mejor educación en el mundo y
su condición jurídica en el hogar está al mismo nivel que la de sus maridos,
según lo indica al art. 24 de la Constitución de ese país de 1947: “El
matrimonio se basará únicamente en el consentimiento mutuo de los
cónyuges de ambos sexos, y se mantendrá gracias la cooperación mutua
del marido y la mujer con derechos iguáles para ambos... En lo que respecta
a la elección de cónyuge, a los derechos de propiedad, a la herencia, a la
elección de domicilio, al divorcio y demás materias relativas al matrimonio y
a la familia, las leyes que se promulguen se basarán en la dignidad del
individuo y en la esencial igualdad entre los sexos”.
Sin embargo de esto, en los hechos se considera a las japonesas como
ciudadanas de segunda clase en su país, pues “los valores tradicionales no
favorecen su independencia de criterio ni de palabra, y las desmoralizan si
tratan de escalar en la jerarquía política o de negocios”. (3) Secularmente,
esposas e hijos obedecían ciegamente al padre.
En los países dominados por el Islam la condición jurídica de la esposa es
claramente inferior a la de su marido, porque según el Corán los hombres
son superiores debido a su mayor fuerzafísica; pueden tener hasta cuatro
esposas, y éstas un solo marido; y el testimonio déla mujer vale la mitad que
el de el hombre.
Una resolución de la Corte Suprema de Egipto desconoció en 1985 una ley
de 1979 que autorizaba a la mujer a divorciarse cuando su marido tomaba
una segunda esposa. El gobierno de Sudán no deja salir del país a mujeres
que no viajan acompañadas por su marido, padre o hermano, a menos que
tengan permiso escrito de éstos. El Código de Familia de Argelia concede al
marido el derecho a divorciarse por cualquier motivo y a echar a su mujer
del hogar. El Frente de Salvación Islámica de este país (fundamentalistas),
que ganó las elecciones locales en junio de 1990, trata de obtener una ley
que prohiba a las mujeres trabajar fuera del hogar. (4) El movimiento
llamado Walihabiyah, fundado en el siglo XVIII, que gobierna en Arabia
Saudita y es popular en Afganistán, prohíbe a las mujeres conducir vehículos
y viajar solas, y las mantiene con el rostro velado de por vida.
Un antiguo sistema de dotes y de matrimonios arreglados es fuente de
injusticias y de crímenes en India, donde las familias de las novias deben
aportar regalos y dinero en cantidades que varían según el status social del
novio. Cuando esto no ocurre, el marido suele asesinar a su mujer para volver
a casarse y obtener otra dote.
En 1989 se informó de 110 asesinatos por esta causa en Dchli, y el problema
se acentúa -dice- por la codicia que provoca la sociedad consumista. (5)
En Israel hay miles de mujeres conocidas como las agunot (ancladas), que
viven durante años separadas de sus maridos, pero sin poder divorciarse,
porque conforme a la ley religiosa hebrea requieren del consentimiento
marital para hacerlo, y muchos esposos se niegan a darlo. En varios países
de Asia, (China, Corea, India) particularmente en zonas rurales, se desalienta
el alumbramiento de niñas, recurriéndose al aborto y al infanticidio directo
o indirecto, de suerte que en algunas zonas los hombres no hallan novias
porque las mujeres son muy pocas, en relación de 10 a 1 con los hombres.
(6)
7. - SITUACIÓN DE LOS HIJOS
Debido a que en el Derecho Romano y en el Canónico sólo se reconocía
legalmente el connubio o justa nuptia y el matrimonio religioso, se instituyó
una distinción inveterada entre hijos legítimos, naturales e ilegítimos, que se
prolongó en la mayoría de las legislaciones civiles hasta el siglo XX. En nuestro
viejo Código Civil, por ejemplo, los hijos ilegítimos eran adulterinos,
incestuosos y sacrilegos, y los hijos naturales no tenían iguales derechos que
los legítimos.
Fue a partir de la Constitución de 1938 que se puso término en Bolivia a esta
injusta desigualdad, declarándose entonces que “la ley no reconoce
desigualdades entre los hijos; todos tienen los mismos derechos” (art. 132). El
art. 62 de la Constitución vigente prescribe que todos los miembros de la
familia tienen igualdad de derechos, obligaciones y oportunidades. Este
precepto concuerda con el art. 173 del Código de Familia.
Los arts. 249 y 250 del Código de familia disponen que el hijo menor de edad
se halla sometido a la autoridad de sus padres hasta que llega a su
mayoridad o se emancipa, y que no puede ser separado de éstos sino por
causa legitima. Además, el art. 251 dice que, durante el matrimonio, la
autoridad sobre los hijos comunes se ejerce por ambos padres.
En los casos de separación de los 'cónyuges -dispone el art. 145 CF- la
situación de los hijos se definirá teniendo en cuenta el mejor cuidado e
interés moral y material de éstos. Las convenciones que celebraren o las
proposiciones que hicieren los padres -dice el mismo artículo- pueden
aceptarse por la autoridad judicial, siempre que consulten dicho interés.
(Concordante con el art. 145 de Código de Familia).
8. - DECLARACIÓN JUDICIAL DE LA PATERNIDAD Y LA MATERNIDAD
El art. 65 dice que "la presunción de filiación se hará valer por indicación de
la madre o del padre. Esta presunción será válida salvo prueba en contrario
de quien niegue la. filiación". Se trata de una presunción juris - tantum que
favorece a los hijos y que puede conducir a la investigación de la
paternidad.
Esta previsión fue introducida-por primera vez en la Constitución de 1945,
cuyo artículo 182 decía: “Es permitida la investigación de la paternidad
conforme a la ley”.
Sin embargo, este precepto quedó en el papel durante muchos años
porque la ley reglamentaria sólo fue sancionada el 15 de Enero de 1962, y,
entretanto, la jurisprudencia de la Corte Suprema de Justicia era uniforme
en sentido de declarar la improcedencia de las demandas en esta materia
por falta de la ley reglamentaria mencionada.
El Código de Familia vigente contiene las siguientes disposiciones:
“Art. 185.- (Negación del hijo nacido antes de los 180 días del matrimonio). El
marido puede negar al hijo nacido antes de los ciento ochenta días
siguientes a la celebración del matrimonio, salvo que haya conocido el
embarazo de la mujer o que de otra manera lo haya admitido como suyo”.
“Art. 187.- (Desconocimiento de paternidad). El marido puede desconocer
al hijo concebido durante el matrimonio demostrando por todos los medios
de prueba que no puede ser el padre del mismo.
Sin embargo, el desconocimiento no es admisible si el hijo fue concebido-
por fecundación artificial de la mujer, con autorización escrita del marido.
La sola declaración de la mujer no excluye la paternidad”, -
“Art. 206.- (Declaración judicial de paternidad). Si no hay reconocimiento ni
posesión de estado, puede demandarse el establecimiento de la filiación
por declaración judicial de paternidad.
La acción solo procede en vida del pretendido padre y corresponde al hijo
o a quien lo represente y a sus herederos, conforme a las previsiones del
artículo 191, pudiendo también intervenir el organismo administrativo
protector de menores. Sin embargo, el hijo postumo o el que por ignorancia,
engaño o por causa de fuerza mayor, no hubiese reclamado
oportunamente su filiación, podrá dirigir su acción contra los herederos del
pretendido padre, siempre que no hayan transcurrido dos años desde la
muerte de éste último.
La demanda se interpone ante el juez de partido familiar del domicilio del
demandado y se la tramita en la vía ordinaria de hecho.
La improcedencia de la acción puede plantearse como excepción de
previo y especial pronunciamiento que se resolverá mediante auto
motivado".
“Art. 207.- (Prueba de paternidad). La paternidad puede declararse con
auxilio de todos los medios de prueba que sean idóneos para establecerla
con certeza.
En el caso de la prueba testifical serán necesarios cuatro testigos, libres de
tacha y excepción, y que sean uniformes, contestes y concluyentes en
personas, hechos, tiempos y lugares. Las declaraciones se recibirán en la
forma prevista por el artículo 392 del Proc. Civil, bajo la responsabilidad del
juez y del fiscal”.
“Art. 211.- (Reparación a la madre). Fuera de ello, la madre puede obtener
se le repare el daño material y moral que haya sufrido efectivamente”. El
art. 212 dispone que la maternidad se establece en cualquier tiempo por
todos los medios de prueba.
9. - EL PATRIMONIO FAMILIAR
Con la potestad que tradicionalmente ejercía el marido en el matrimonio en
virtud de la desigualdad jurídica de los cónyuges, el
antiguo Código Civil Boliviano le confiaba la administración de la sociedad
conyugal y le autorizaba a enajenar los bienes gananciales aun sin
consentimiento de la mujer. Esta administraba solamente los bienes
patrimoniales,
Al proclamarse la igualdad jurídica de los cónyuges en la Constitución de
1945, desapareció este régimen de administración unilateral del patrimonio
familiar y se dispone que “las leyes determinarán el patrimonio familiar
inembargable e inenajenable...” (art. 133).
El Código de Familia prescribe en su art. 30 que “el patrimonio familiar se
constituye por resolución judicial y a pedido de uno o más miembros de la
familia. El establecido por leyes especiales se rige por lo que éstas disponen”.
El art. 31 habla de su objeto y composición. (Dice que se concede en
proporción a las necesidades de la familia). El art. 32 le da su carácter
inalienable e inembargable. El art. 34 aclara que “la administración del
patrimonio familiar corresponde a ambos cónyuges o a sólo uno de ellos si
el otro falta o se halla impedido, o bien al padre o a la madre beneficiarios
o al que lo hace constituir sólo para sus hijos. En defecto de padres, la
administración puede confiarse al tutor”. En cuanto a los bienes comunes de
la sociedad conyugal (art. 111), son administrados por ambos cónyuges, al
tenor del art. 114, que agrega: “Los actos de administración de uno de los
cónyuges que se justifiquen por las cargas de la comunidad se presume que
cuentan con el asentimiento del otro y surten efectos con relación a él. Si los
actos no se justifican por las cargas de la comunidad, sólo obligan
personalmente al cónyuge que los realizó, siempre que el acreedor haya
conocido y debido conocer su carácter injustificado, con arreglo a las
circunstancias.
En caso de ausencia, incapacidad o impedimento de uno de los cónyuges,
la administración corresponde al otro solo”.
El art. 116 aclara que la disposición de los bienes comunes (venta, empeño,
hipoteca u otro gravamen) requiere del consentimiento expreso de ambos
cónyuges; y que todo acto unilateral de disposición o gravamen de dichos
bienes pueden anularse a demanda del otro.
10.- PROTECCIÓN DE LA INFANCIA
El art. 199 de la Const. manda “que el estado protegerá la salud física,
mental y moral de la infancia, y defenderá los derechos del niño al hogar y
a la educación”.
El Código del Niño, Niña y Adolescente (Ley N9 2026 de 27 de octubre . de
1999), declara en su artículo 1ro. que “el presente código establece y regula
el régimen de prevención, protección y atención integral que el Estado y la
sociedad deben garantizar a todo niño, niña o adolescente con el fin de
asegurarles un desarrollo físico, mental, moral, espiritual, emocional y social
en condiciones de libertad, respeto, dignidad, equidad y justicia”.
El Libro Primero detalla los derechos y deberes fundamentales de los
menores, desde el artículo 13 al 157. Regula el derecho a, la familia, la familia
sustituía, la tutela, la adopción nacional e internacional, el derecho a la
educación, la cultura y el esparcimiento y la protección en el trabajo.
El Título II, Capítulo II, Sección II del Libro Segundo crea las Defensorías de la
Niñez y de la Adolescencia como servicios municipales gratuitos de
protección y defensa sociojurídica. El Libro Tercero instituye la jurisdicción y
los procedimientos a cargo de los jueces de la Niñez y de la Adolescencia,
en las capitales de departamento y en las provincias respectivas.
NOTAS
(1) Citado por TRIGO, Ciro Félix, Ob. cit. p. 735
(2) El cantón Glaris del este de Suiza legalizó el concubinato en Mayo de
1985, mediante una asamblea realizada en la plaza pública por unos
7.500 ciudadanos que votaron con la mano levantada,
procedimiento tradicional en las elecciones de dicho cantón, que
también se utiliza en otros tres cantones de la Confederación
Helvética. (Despacho de EFE, fechado en Ginebra, Suiza, el S-5-85y
publicado en "LOS TIEMPOS’’, de Cochabamba, al día siguiente).
(3) TIME, Internacional, 3-12-90.- (Traducción del autor).
(i) lbídem
(5) lbídem
(6) lbídem.
CAPÍTULO XXVIII
RÉGIMEN MUNICIPAL
1.- CONCEPTO
Así como la familia es la base de la sociedad, el municipio es el origen del
Estado moderno, al que antecede políticamente, pues constituye la unidad
político-administrativa más simple y es la célula estatal básica. El Artículo 3ro.
de la Ley de Municipalidades (NQ 2028, de 28 de octubre de 1999) dice:
“I. Municipio es la unidad territorial, política y administativamente
organizada, en la jurisdicción y con los habitantes de la Sección de
Provincia, base del ordenamiento territorial del Estado unitario y
democrático boliviano.
III. La Municipalidad es la entidad autónoma de derecho público, con
personalidad jurídica y patrimonio propio que representa institucionalmente
al Municipio, forma parte del Estado y contribuye a la realización de sus
fines”.
Otras definiciones dicen:
“Es el núcleo social de la vida humana total, determinado o definido
naturalmente por las necesidades.de la vecindad”.- Adolfo Posada, (i)'
“La comunidad autónoma de personas asociadas por vínculos de
tradición, localidad y trabajo, dentro del territorio de un Estado, dirigida por
la autoridad que ella misma ha elegido para alcanzar los fines que le son
inherentesMario Alzamora Valdez. (2)
“Municipio es la reunión de familias que forman un conjunto social con
relaciones morales y materiales, debidamente organizadas”.- José Carrasco.
(3)
Municipalidad es el .'ente , que administra los bienes comunales y presta
servicios públicos. Municipio es el conjunto de esos bienes y servicios.
2. -ANTECEDENTES HISTÓRICOS
a) En general.- Los orígenes del municipio se remontan a las épocas
primitivas de la familia humana. Viene de épocas muy remotas y tiene su
fundamento sociológico en las relaciones que engéndrala vecindad. La
diferencia entre la tribu y la sociedad constituida está en que en la primera
la autoridad residía en el poder de la comunidad, que es como decir
municipal; mientras que en la segunda hay ya un poder central.
Sin embargo, el municipio como una institución organizada no apareció sino
mucho tiempo después. En Grecia no existe, por ejemplo, como lo
conocemos ahora, porque ta polis es ciudad y Estado al mismo tiempo, ni
en la civitas romana, similar a la polis. Sin embargo, aquí existen los aediles,
funcionarios ayudantes de los tribunos, que se encargaban de labores de
Policía y de conservación de los edificios públicos de la ciudad.
En la Edad Media, cuando comienza a declinar el feudalismo aparecen las
comunas que son el antecedente más cercano de los municipios.- actuales.
La vida giraba en tomo al castillo feudal, y cuando los señores del Medioevo
fueron empobreciéndose como resultado de las guerras que libraban entre
ellos y con los reyes, exigían mayores tributos de sus súbditos. Muchos de
éstos se habían liberado de la servidumbre de la gleba y ejercían artes y
oficios en los castillos, consiguiendo poseer algunos recursos con los que
pagaban sus contribuciones al señor, a condición de que éste les permitiera
fundar villas (burgos) fuera de loscastillos, donde pudieran organizar sus
trabajos con relativa independencia. Los artesanos, reunidos en gremios y
corporaciones, organizaron sus gobiernos locales para satisfacer las
necesidades emergentes de la vecindad. En España se opera un proceso
similar, y bajo la influencia de los árabes que dominan la península aparece
el funcionario Alcalde.
En los tiempos pre-coloniales existían en esta parte de América los ayllus,
tanto entre los aymaras como entre los keshuas. Se agrupaban en caseríos
o aldeas, donde realizaban asambleas (“ulakjas”) bajo la dirección de los
consejos de ancianos que se ocupaban de las necesidades de la
comunidad.
Durante la Colonia, los fundadores de villas y ciudades en América se
organizaban en cabildos, que, como en España, se ocupaban de las
relaciones de vecindad. Cada cabildo tenía uno o dos alcaldes, y el
“cabildo abierto” convocaba a los vecinos notables para resolver
problemas de importancia. Más tarde, estos “cabildos abiertos” asumieron
un carácter revolucionario y encendieron la chispa que propagó la lucha
por la independencia en América.
b) En liolivia.- En la Constitución Bolivariana no se contemplaba el municipio,
ni tampoco en la que sobre ese texto se aprobó en 1826. Sus funciones
fueron atribuidas a los intendentes de Policía. Esta institución aparece por
primera vez en la Constitución de 1839, para ser suprimida en la de 1843 y
restablecida definitivamente en la de 1851,
En un comienzo, las funciones municipales eran muy amplias: “promover la
agricultura, el comercio y la industria en general”, además de satisfacer las
necesidades de la comunidad.
Según la Constitución de 1880, en las capitales de Departamento había
Concejos Municipales; en las de provincia y en los puertos, Juntas
Municipales; y en los cantones, Agentes Municipales.
La primera Ley Orgánica de Municipalidades, de 21 de Noviembre de 1887,
disponía que los miembros de los Consejos y Juntas Municipales se eligiesen
por voto directo y secreto. Los agentes cantonales eran nombrados por las
municipalidades.
Durante muchos años, los cargos de Concejales municipales no eran
rentados, sino ad-honores, hasta que el D.S. de 14 de Agosto de 1936
(gobierno de Toro) instituyó las alcaldías municipales unipersonales y
rentadas, con el argumento de que la organización anterior no respondía a
sus. propósitos. Ese decreto dividió, las funciones municipales en un
departamento ejecutivo, a cargo de los alcaldes, y en otro consultivo,
formado en base a la representación funcional con delegados de las
Cámara de Comercio e Industria, de la Federación Obrera, de la Asociación
de Abogados, Cuerpo de Ingenieros, Médicos, Juntas
Vecinales, etc.
La Constitución de 1938 confirmó la existencia de Alcaldes rentados,
asistidos por un Concejo Deliberante, en reemplazo del Consultivo. Los
primeros eran designados por el Presidente de la República y los segundos
por el voto popular.
3. - RÉGIMEN MUNICIPAL VIGENTE
a) Autonomía.- El art. 283 de la CPE declara que el gobierno comunal es
autónomo (conc. con art. 4 de la L.M.). Como veremos luego, hay una
preocupación general en la mayoría de las Constituciones de América por
dar a los gobiernos locales la autonomía que reclaman los pueblos y que los
gobiernos centrales regatean. Los Congresos Panamericanos de Municipios
les han reconocido su calidad de “órganos de la soberanía del pueblo y de
la nación”..., particularmente el Cuarto Congreso, celebrado en
Montevideo, Uruguay, en 1953.
La Constitución brasileña vigente (1988) se refiere en sus arts. 29 al 31 a los
municipios, otorgándoles, entre otras atribuciones, las de legislar sobre
asuntos de interés local; instituir y recaudar impuestos, invertirlos, con la
obligación de rendir cuentas; prestar servicios públicos; mantener
programas de educación y de salud, etc. Son fiscalizados por el poder
legislativo municipal (Concejo) y por los controles internos del poder
ejecutivo municipal (alcaldía), con el auxilio de los tribunales de cuentas
(Cóntralorías) de los estados y de los municipios. Encontramos aquí los
caracteres de la autonomía: potestades de legislarse y administrarse, de
recaudar e invertir los impuestos municipales, con controles internos (no
ajenos a los municipios), y sin estar sometidos a la tutela administrativa del
gobierno federal (central) ni de los gobiernos estaduales.
Salvador Dana Montado concibe la autonomía como “la facultad'de
organizarse dentro de las condiciones de la ley fundamental o Poder
Constituyente, de darse sus instituciones o poder legislativo y de gobernarse
con ellos, con prescindencia de todo otro poder”. (El subrayado es nuestro).
éP Este es el criterio que hemos sostenido en la cátedra y en nuestros libros
de Derecho Administrativo y de Derecho Constitucional. Pero no todos los
autores tienen el mismo concepto; algunos utilizan el término sin precisión ni
rigor, dando lugar a que se confunda autonomía con autarquía. Zuccherino,
por ejemplo, distingue autonomía municipal absoluta y relativa, opinando
que la primera se presenta en cuatro planos 1).- institucional, lo cual supone
el efectivo ejercicio del Poder Constituyente de tercer grado o municipal,
facultad que lo permite el dictado de su propia carta orgánica municipal,
en dejfinitiva, la autonomía institucional supone la presencia de los famosos
municipios de convención o carta-; 2).- político; 3).- económico financiero;
y 4).administrativo-funcional. La relativa -dice- no corresponde al aspecto
institucional, sino los otros tres.fsj Para nosotros es claro que un régimen que
no tiene la potestad de legislarse no es autónomo, puesto que el vocablo,
como es sabido, viene de nomos, que en griego significa ley, norma.
El art. 168 de la Constitución de Venezuela (1.999) declara que “los
Municipios constituyen la unidad política primaria de la organización
nacional, gozan de personalidad jurídica y autonomía dentro de los límites
de la Constitución y de la ley. La autonomía municipal comprende; 1. la
elección de sus autoridades. 2. La gestión de las materias de su
competencia. 3. La^creación, recaudación e inversión de sus ingresos”.
Agrega el artículo que “los actos de los Municipios no podrán ser
impugnados sino ante los tribunales competentes, de conformidad con la
Constitución y la Ley”.
No dice nada sobre la facultad de legislarse que supone la autonomía.
La Constitución de Perú (1993) dice que “las municipalidades son los órganos
del gobierno local. Tienen autonomía, política y administrativa en los asuntos
de su competencia “ (art. 191).
La Constitución de Ecuador de 1998 dispone en su artículo 228: -
“Los gobiernos seccionales autónomos serán ejercidos por los consejos
provinciales, los concejos municipales, las juntas parroquiales y los
organismos que determinan la ley...
Los gobierno provincial y cantonal gozarán de plena autonomía y en uso de
su facultad-legislativa podrán >dictar ordenanzas, crear, modificar y
suprimir-tasas y contribuciones especiales de mejoras”.
El art. 207 de la C.P.E. de Panamá (1972) establece que “el municipio es la
organización política autónoma de la comunidad establecida en un
distrito”. El art. 214 confiere a los ciudadanos “el derecho de iniciativa y de
referéndum en los asuntos atribuidos a los consejos” (municipales). Con estas
dos instituciones de la democracia semidirecta (iniciativa popular y
referéndum) se refuerza el concepto de autonomía de los municipios, y se
da participación activa a los ciudadanos en las decisiones de orden político,
jurídico y social de sus comunidades, lo que es una función básica de los
municipios. -
Las citas precedentes demuestran que la autonomía municipal está
reconocida de manera más o menos explícita en todas las Constituciones
de América.
b) Formación de sus órganos.- El art. 283 dice que el gobierno municipal
autónomo consta de un Concejo Municipal deliberante, fiscalizador y
legislador y de un órgano ejecutivo presidido por el Alcalde. Los miembros
del Concejo Municipal son elegidos por sufragio universal. Las naciones y
pueblos indígena originario campesinos pueden elegir a sus representantes
ante el Concejo en forma directa, mediante sus normas y procedimientos
propios y según la Carta
Orgánica Municipal. La ley determinará los "criterios generales" para la
elección y el número de concejales municipales, (art. 284).
Radio Urbano.- La Ley de Participación Popular determina que la jurisdicción
del radio urbano es la sección de provincia. Lo mismo dice el artículos 6 de
la L.M.
El art. 57 dice que la propiedad inmueble urbano no está sujeta a reversión.
Patrimonio Municipal.- El artículo 84 de la Ley de Municipalidades dice:
“Los bienes municipales se clasifican en:
a. -Bienes de dominio público
b. -Bienes sujetos al régimen jurídico privado, y
c. - Bienes de régimen mancomunado”.
Los artículo 85 y 86 mencionan los bienes de dominio público y los de
patrimonio institucional. El artículo 89 se refiere a los bienes sujetos a régimen
privado; el 93, a los bienes de régimen mancomunado, y el 95 a los bienes
del patrimonio histórico, cultural y arquitectónico de la Nación. Son bienes
patrimoniales, o de régimen privado, los activos de las empresas municipales
y las inversiones financieras en acciones, bonos y otros títulos y valores
similares. Son de régimen mancomunado los provenientes del interés de dos
o más gobiernos municipales y otras entidades de derecho público o
privado producto de su hacienda.
1 ios ingresos municipales son de carácter tributario y no tributario (art. 100);
tributario son los impuestos, tasas y patentes (art. 101). No tributario los que
provienen de concesiones y actos jurídicos realizados con los bienes
municiples; de venta o alquileres de bienes municipales; de donaciones,
legados, multas, sanciones y operaciones de crédito público (art. 102)
La Ley de Reforma Tributaria N2 843, de 20 de Mayo de 1986, delimitó los
dominios tributarios de los gobiernos central y municipales, reconociendo a
éstos como dominio tributario exclusivo las patentes, tasas de servicios
públicos municipales, contribuciones para obras públicas municipales e
impuestos sobre hechos generados no gravados por tributos creados por el
gobierno central; y como dominio tributario de coparticipación, las
participaciones que la ley les reconoce (art. 95).
Para contratar empréstitos, las Municipalidades requieren la autorización la
ALP (art. 158.1.10)
4. - CLASIFICACIÓN DE LAS FUNCIONES MUNICIPALES
Estas se clasifican en dos grandes áreas: de policía y de servicios públicos.
a) Funciones de policía.- “En un principio -dice Bielsa- el poder de policía
comunal consiste en la atribución de dictar las pertinentes ordenanzas,
reglamento y decretos (jusedicendi) y de ejecutar sus decisiones (jusagendi),
pues se trata de actos administrativos “ejecutorios” por excelencia. (6)
Las funciones de policía municipales tienen por objeto precautelar la moral
pública, las buenas costumbres, la salud del pueblo y la higiene; controlar
los precios y reprimir la especulación; vigilar el cumplimiento de las normas
sobre edificaciones y urbanismo y aplicar las ordenanzas municipales.
Para José Cretella Júnior, poder de policía es “la facultad discrecional del
poder público de limitar la libertad individual en pro de los intereses
colectivos”.
Algunos tratadistas asignan diferentes significados a los términos policía y
poder de policía; el primero se refiere a una función de vigilancia y control
del orden público y social, mientras que el segundo entraña la facultad de
legislar sobre la materia. La palabra policía se originó en Francia, a comienzo
del siglo XV, en las ordenanzas reales de 1425, y la expresión poder de policía
fue empleada por vez primera por el presidente de la Corte Suprema de
Justicia de Estados
Unidos de América, John Marshall en el caso judicial “Brown v. Estado de
Maryland”, resuelto en 1827.(7)
El poder de policía tiene entre sus funciones ejecutar las limitaciones a los
derechos individuales estudiados en la.parte primera, en beneficio
colectivo; mediante la policía de tránsito reglamenta y restringe la libertad
de locomoción; limita la libertad de reunión, (al reglamentar el juego y los
espectáculos públicos etc.). .
El Capítulo II del Título I de la Ley de Municipalidades establece la jurisdicción
y competencia del Gobierno Municipal, que divide en las siguientes
materias:
I. De Desarrollo Humano Sostenible;
II. De Infraestructura;
III. De Administración y finanzas;
IV. De Defensa del Consumidor (que son, propiamente las funciones de
Policía Municipal);
V. Servicios; y
VI. Otros
Los servicios públicos son otorgados en concesión o prestados directamente
conforme al Plan de Desarrollo Municipal.
La municipalización de los servicios se justifica en los casos en que los mismos
son utilizados directamente por toda la población urbana y suburbana, no
pudiendo prescindir de ellos cada día. La municipalización ofrece las
siguiente ventajas: se puede rebajar los precios o tasas porque la
Municipalidad los presta al costo, más un pequeño recargo en concepto de
gastos generales, eliminándose el lucro de los particulares o intermediarios.
Además se asegura la regularidad y continuidad en su prestación puesto
que no están sujetos a los intereses de las particulares, casi siempre
fluctuantes. Entre sus desventajas se señalan la ineficiencia que, en cierto
modo, es una característica generalizada en las administración pública de
los países atrasados. .
5.- GOBIERNO LOCAL CON PARTICIPACIÓN
Por su naturaleza, el gobierno municipal debe desempeñarse en contacto
directo con el pueblo y sus instituciones, a través de diferentes forma de
participación.
a) Cabildos abiertos.- O sesiones públicas de los concejos municipales
donde los vecinos pueden concurrir a formular preguntas, emitir opiniones,
quejas y proposiciones, todo conforme a un reglamento detallado. Los
concejos deben convocar para estas reuniones a las organizaciones cívicas,
laborales, gremiales, sociales, culturales, deportivas, comunitarias, etc. para
dar una amplia base a dichos cabildos.
b) Iniciativa popular.- Los vecinos pueden presentar a los concejos
municipales proyectos de ordenanzas o solicitar la abrogación de otras que
estimen perjudiciales a sus intereses comunes.(art. -11.11.1)
Estas dos formas de participación están previstas en la Ley Orgánica del
Régimen Municipal de Venezuela, de 1978 (arts. 147 y ss).
c) Referéndum.- Que es la consulta que se plantea al electorado sobre
materias legislativas y de administración municipal, como ocurre en Irlanda,
Alemania, Francia, Dinamarca, Italia, Luxemburgo, Suiza, Panamá y
Uruguay!
En Bolivia la Ley del Referéndum, No. 2769 de 6 de julio de 2.004 prevé el
referendo municipal en su art. 2, que puede ser convocado por iniciativa
popular del 10% de inscritos en el padrón electoral de la sección municipal.
Los referendums son facultativos cuando proceden a iniciativa de las
autoridades y de los ciudadanos; obligatorios cuando conciernen por
ejemplo a asuntos financieros, tributarios y de presupuesto, en caso de que
los gastos o contribuciones excedan de cierto límite.
En Chile existe el Consejo de Desarrollo Comunal, presidido por el Alcalde e
integrado por representantes de organizaciones comunitarias de carácter
territorial y funcional y de actividades relevantes, “para hacer efectiva la
participación de la comunidad en el progreso económico, social y cultural
de la comuna”, (arts. 109 y 110 de la Constitución),
6.- PARTICIPACIÓN POPULAR. (Ley No. 1551 de 20-4-94)
El Título II, capítulo único de esta ley, delimita la jurisdicción territorial de los
gobiernos municipales, amplía sus competencias e incrementa sus recursos,
transfiriéndoles a título gratuito la infraestructura física de los servicios de
educación, salud, cultura, deportes, caminos vecinales, micro- riego, con la
obligación de administrarla, mantenerla y renovarla. El art. 14 amplía todas
las competencias municipales al ámbito rural de su jurisdicción territorial. El
art. 17 dispone que los agentes municipales cantonales y subalcaldes deben
apoyar a las Organizaciones Territoriales de Base, que según el art. 32 son los
sujetos de ¡a participación popular (comunidades campesinas, pueblos
indígenas y juntas vecinales). En esta forma, se vincula directamente a los
gobiernos municipales con este proceso, llamado a “articular a las
comunidades indígenas, campesinas y urbanas, en la vida jurídica, política
y económica del país”, para hacer “una más justa distribución y mejor
administración de los recursos públicos” y “para perfeccionar la democracia
representativa El Título VI, Capítulo único de la L.M. se refiere al control social
y participación popular, concordante con la Ley N21551.
7.- DERECHO MUNICIPAL
Los pequeños vecindarios de los primeros tiempos se hantransformado en las
urbes gigantescas de nuestros días, con el cúmulo de necesidades y de
problemas que engendran las relaciones de convivencia en ciudades
superpobladas como las actuales. Es natural que las Municipalidades
requieran de un orden normativo especial para reglar estas relaciones, lo
que ha venido en llamarse “Dereeho Municipal”, nueva disciplina que es
objeto de estudio especializado.
Podemos decir que un antecedente en esta materia son los Fueros
Municipales españoles durante la Edad Media, siglos VIH al XIV, conjunto de
leyes civiles, políticas, penales, administrativas y económicas que los
monarcas concedían a las ciudades, villas y pueblos con motivo del
fraccionamiento nacional que produjo la invasión árabe. Los fueros de
Castilla, de Toledo, de León y otros son ejemplos de esta legislación.
Alzamora define el Derecho Municipal como “una rama de derecho público
que trata de los preceptos jurídicos que rigen la estructura y los fines de esa
forma de sociedad humana que se denomina municipio, de los órganos que
lo gobiernan, de los poderes que le corresponden y de las atribuciones que
ejercen para realizar los servicios públicos que demanda el bienestar
común”.
Es ya antigua la polémica entre quienes reconocen autonomía científica al
Derecho Municipal y quienes se la niegan. Entre estos últimos están Bielsa y
Greca, el primero de los cuales sostenía que el Derecho Municipal no trata
de normas específicas que formen un derecho autónomo, sino de principios
generales. Dana Montaño, por el contrario, piensa que esta rama tiene
como objeto él estudio del gobierno municipal, que es diferente al gobierno
y administración del Estado. Korn Villafañe tiene la misma opinión, y el primer
Seminario Interamericano de Estudios Municipales (Sao Paulo, Brasil,
noviembre de 1958) reconoció “la autonomía científica del Derecho
Municipal” y recomendó la creación de la cátedra en las Universidades para
la enseñanza de esta disciplina, cátedra que existe desde hace años: en la
Habana (1906); en Madrid (1910); en Lima (1962); y en varias universidades
argentinas. (8).
NOTAS
(1) Citado por TRIGO, Ciro Félix, Ob. cit. p. 694.
(2) DERECHO MUNICIPAL. EDDILI, Lima, 1985, pág. 9.
(3) Ob. cit., Tomo TV, pág. 318.
(4) ZUCHERINO, Ricardo Miguel- “Teoría y práctica del Derecho
Municipal’’.- Ed. Depalma, Buenos Aires, 1986, p. 108.
(5) Ibídem, pág. 28.
(6) “Derecho Administrativo".-6a Ed.-'La Ley", Buenos Aires, 1964.- Tomo 1,
p. 453.
(7) ZUCHERINO, R.M. - Ob. cit. pp. 27Í280.
(8) ALZAMORA VALDEZ, Mario,- Ob. cit, pág. 13.
CAPÍTULO XXIX
RÉGIMEN DE LAS FUERZAS ARMADAS