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05/2023
Capítulo uno
Nicky
—¿Qué quieres?
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—Déjame entrar, Nicky.
Rodé los ojos y me alejé de la puerta principal. No tenía 05/2023
sentido cerrarla. Vinnie simplemente la abriría. Tan pronto
como estuve en medio de mi sala de estar, me di la vuelta y me
crucé de brazos, clavando mi mirada enojada en él.
Vinnie vestía su habitual traje Armani negro... camisa de vestir
blanca impecable con el cuello abierto, pantalones ajustados y
una chaqueta que ocultaba el arma en una pistolera. Tenía otra
escondida en sus botas hasta los tobillos.
Decir que se veía sexy era la subestimación de los milenios.
Era sexo en dos piernas, y quería lamerlo.
Maldita sea.
—Entiendes que no voy a hacer esto contigo, ¿verdad?
—Nicky...
—¡No! —Grité mientras toda la ira y el dolor que había estado
sintiendo durante la última semana brotó dentro de mí. —
Hiciste tu elección, Vinnie. He terminado.
Estuve al borde de las lágrimas desde el momento en que
escuché que Vinnie estaba comprometido para casarse con una
mujer que su abuelo había elegido para él.
—¡Qué diablos dices! —Vinnie me gritó de vuelta. —Tú me
perteneces. Siempre me pertenecerás.
—Solía pertenecerte, pero me regalaste.
—No te regalé.
—Bien, decidiste que ya no me querías y me tiraste. Lo mismo
malditamente.
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Era difícil mirarlo, sabiendo que él no me quería tanto como
yo lo quería a él. Yo había sido estúpido. Tan estúpido. Lo había 05/2023
convertido en el centro de mi mundo... y él no.
Para Vinnie, yo era un juguete que se sacaba del estante de vez
en cuando y se jugaba con él. Yo no era el amor de su vida.
Menos mal que él era el mío.
—Tienes que irte —susurré, deseando que se fuera antes de
que las lágrimas inundaran mis ojos y se derramaran por mis
mejillas. No necesitaba esa humillación encima de todo lo
demás.
—Este sigue siendo mi apartamento, Nicky.
Me negué a reconocer cuánto dolían esas palabras. Sí, Vinnie
pagó el apartamento, pero no necesitaba recordarme que yo era
una puta mantenida que solo tenía un techo sobre mi cabeza
porque le calentaba la cama.
Realmente había sido un estúpido.
Me acerqué y agarré mi chaqueta, me la puse y luego me
aseguré de tener mi billetera en el bolsillo. Seguro que la iba a
necesitar. Pensé en llevarme mi teléfono celular, pero Vinnie
también pagó por eso.
Recogí las llaves de la casa y las miré por un momento antes
de arrojárselas a Vinnie. Lo golpearon en medio del pecho antes
de caer al suelo.
—Es todo suyo, Sr. Borelli. Espero que pueda recuperar su
depósito.
Salí por la puerta y me deslicé entre los dos guardaespaldas
que estaban afuera antes de que pudieran detenerme. Escuché a
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Vinnie gritar mi nombre, ordenándome que regresara, pero
seguí caminando. Cuando escuché el chirrido de neumáticos 05/2023
detrás de mí, comencé a correr y no me detuve.
Probablemente debería haber empacado mis pertenencias
antes de irme, pero una vez más, Vinnie había pagado casi todo
lo que tenía, desde mi apartamento hasta la ropa que llevaba
puesta y la comida en mi mesa.
Pensé que había algo especial entre Vinnie y yo, pero él
demostró que esa teoría era incorrecta cuando me tiró como
basura de ayer cuando accedió a casarse con la mujer que su
familia había elegido para él.
Nunca ocuparía un lugar especial en su corazón. Siempre sería
una llamada de botín para él, su pieza lateral mientras construía
una familia con una mujer de la que ni siquiera sabía el nombre.
Nunca sería nada más que su puta.
Quería darme una bofetada por siquiera pensar que podría
haber algo especial entre nosotros o que lo que teníamos duraría
toda la vida.
Debería haber sabido mejor.
Vinnie era un caporegime en la familia del crimen Borelli, y
yo era su pequeño y sucio secreto. Nunca podría reconocerme en
público y ciertamente no podría casarse conmigo o incluso vivir
conmigo a tiempo completo. La gente no hacía “gay” en la
mafia.
Era una sentencia de muerte.
Cuando resbalé en la nieve y casi besé el pavimento, disminuí
la velocidad y comencé a caminar a un ritmo normal.
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Probablemente me había visto como un loco corriendo por la
acera de la forma en que hacía. 05/2023
Deslicé mis manos en los bolsillos de mi chaqueta, deseando
haber pensado en agarrar mis guantes. Estaban forrados de piel
y eran muy bonitos, pero eran una cosa más que Vinnie me
había comprado.
Me detuve de repente ahí mismo en medio de la acera y solté
una carcajada que seguro me hizo parecer loco. No tenía nada.
Había pasado los últimos dos años viviendo de Vinnie, y con la
excepción de una pequeña caja de artículos personales metida
en el fondo de mi armario, no tenía nada que Vinnie no me
hubiera proporcionado.
Acababa de perder todo.
Bueno, tal vez no.
Empecé a caminar por la acera de nuevo, caminando un poco
más rápido mientras me dirigía al cajero automático más
cercano. Vinnie me daba una mesada una vez a la semana, lo
llamaba dinero ficticio, pero ambos sabíamos lo que era.
Yo había sido una puta muy bien pagada.
Si tenía suerte, no habría vaciado mi cuenta bancaria. La
última vez que revisé, había un poco más de tres mil dólares allí.
Si pudiera llegar a ella lo suficientemente rápido, podría sacarlo.
Me impediría dormir en un banco del parque. Teniendo en
cuenta que había nieve en el suelo, preferiría evitar esa escena.
Eso no significaba que no iba a devolver cada centavo de los tres
mil dólares.
El apartamento y todo lo que me había proporcionado antes
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estaba sobre él. Había comenzado como un negocio. Mi cuerpo
por él cuidándome. Yo había sido el estúpido en ponerle 05/2023
emociones.
Todo lo que tomara después de irme tenía que ser devuelto.
Podría ser la puta de un mafioso, pero tenía mi orgullo. Le
devolvería el dinero a Vinnie aunque fuera lo último que
hiciera.
Tuve suerte. Vi una sucursal bancaria calle abajo. Caminé
directamente al cajero automático para verificar mi saldo. Tan
pronto como vi el saldo, las lágrimas brotaron de mis ojos.
Estaba todo allí.
Rápidamente entré al banco, saqué todo y luego cerré la
cuenta. Ya no la necesitaría. Bueno, una vez que consiguiera un
trabajo, necesitaría una, pero no estaría usando la misma cuenta.
Vinnie tenía acceso a ésta.
Después de poner el efectivo en mi billetera, saqué la tarjeta
de débito y la tarjeta de crédito que Vinnie me había dado. Le
sonreí a la mujer detrás del mostrador.
—¿Tiene un par de tijeras que pueda usar?
Tan pronto como me entregó las tijeras, corté ambas tarjetas
en tantos pedazos como pude. Sonreí de nuevo cuando se las
devolví.
—¿Tiene un bote de basura?
Sus ojos estaban un poco abiertos cuando se agachó y agarró
su bote de basura. Lo tomé y barrí todos los pedazos pequeños en
la lata y se lo devolví.
—Gracias.
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—¿Problemas de hombres?
Asentí. 05/2023
—Gran momento.
—Deberías haber llegado al máximo de su tarjeta primero.
Negué con la cabeza.
—Solo quiero que se acabe.
No quería otra cosa de Vincenzo Borelli.
Bueno, lo hacía, pero no era algo que él estuviera dispuesto a
darme, o que ni siquiera pensara en darme. Yo había sido el
estúpido idiota que había querido más. Todavía no podía creer el
error colosal que había sido. Puse todas mis esperanzas y sueños
en un hombre que nunca podría tener.
Debería haber sabido mejor.
Vinnie nunca me hizo ninguna promesa más que pagar mis
cuentas mientras lo dejaba follarme. Solo podía suponer que ese
arreglo terminaría ahora que él se iba a casar.
Por otro lado, podría tener planes para mantenerme como su
pieza secundaria, lo que nunca iba a suceder. Podría ser una
puta, pero era una puta de un solo hombre. Había sido fiel solo a
Vinnie durante los últimos dos años.
No sabía si él podría decir lo mismo.
Salí del banco con tres mil dólares en el bolsillo, nada a mi
nombre y sin idea de dónde dormiría esa noche. Probablemente
alquilaría una habitación de hotel para pasar la noche mientras
me reagrupaba, pero eso no podía durar mucho. Esos tres mil
dólares solo alcanzarían hasta cierto punto en la ciudad de
Nueva York. Necesitaba estar pensando a largo plazo.
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Necesitaba un trabajo.
La familia Borelli controlaba toda esta área de la ciudad, lo 05/2023
que significaba que necesitaba estar en otro lugar. Yo no era
estúpido. No había muchas áreas en esta ciudad donde pudiera
ir. Los cinco distritos estaban controlados por cinco familias
mafiosas diferentes.
¿Tal vez necesitaba considerar salir de la ciudad?
Me pregunté hasta dónde me llevarían tres mil dólares. ¿A
través del país? ¿A la mitad del país? ¿La siguiente ciudad? Tal
vez tomaría un autobús y simplemente viajaría hacia el oeste
hasta que encontrara un lugar que se viera bien y me bajaría allí.
En realidad, eso sonaba como un mejor plan que deambular
sin rumbo fijo por las calles de la ciudad de Nueva York.
¿Quizás un tren?
Hice una pausa cuando vi una tienda de segunda mano al otro
lado de la calle. Necesitaría algo para los próximos días. No
podía seguir usando mi misma ropa día tras día.
Me apresuré a cruzar la calle y entré en la pequeña tienda.
Miré algunos artículos colgados en los estantes y vi que los
precios no estaban tan mal. Si fuera frugal, estaría bien. Puede
que ahora fuera una puta de alto precio, pero todavía recordaba
lo que era vivir al día.
Elegí dos pares de jeans, cuatro camisetas, un par de suéteres,
un abrigo grueso, gorro, guantes y un buen par de botas de
invierno. Me compraría calcetines y ropa interior nuevos. La idea
de usar la ropa interior usada de otra persona me revolvió el
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estómago.
Lo último que agarré fue una mochila azul oscuro. Iba a 05/2023
necesitarla para toda mi ropa y cualquier otra cosa que recogiera
en el camino. Planeaba recoger algo de comida no perecedera en
algún momento. Saldría demasiado caro comer fuera.
Después de pagar todo, me senté y me puse las botas. Estaba
bastante seguro de que caminaría mucho en mi futuro, y no
quería hacerlo con mis mocasines delgados.
Cuando fui a ponerme la chaqueta de invierno, me di cuenta
de que todavía estaba usando la otra. Rápidamente las cambié y
luego llevé mi chaqueta original al mostrador.
—¿Cuánto me darás por esto?
La señora detrás del mostrador tomó la chaqueta y comenzó a
revisarla.
—Treinta y cinco dólares.
Resoplé mientras agarraba la chaqueta.
—En tus sueños.
Era una chaqueta de cuero de Louis Vuitton. Valía al menos
cinco mil dólares. Había sido un regalo de cumpleaños de
Vinnie. Por mucho que odiara separarme de ella, podría usar
más el dinero. Además, esta chaqueta no fue hecha para
mantener a alguien abrigado. Fue hecha para que se vieran bien.
Me veía muy bien en ella.
—¡Espera! —La dama gritó mientras me alejaba.
Seguí caminando. Conocía a alguien que me daría dos grandes
por ella, sin hacer preguntas. Tony se había ofrecido más de una
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vez. Le encantaba mi chaqueta. Estaba seguro de que podía
vendérsela y me daría un poco más de dinero para vivir hasta 05/2023
que pudiera decidir qué hacer con mi vida.
Metí la chaqueta en mi bolso, cerré la cremallera y luego me
la colgué a la espalda. Después de ponerme el gorro de lana
sobre la cabeza, me puse los guantes y luego comencé a caminar
por la acera, en dirección al metro.
Iría a ver a Tony y luego decidiría las cosas a partir de ahí.
Llegar al metro fue bastante fácil. Estaba a solo un par de
cuadras de la tienda de segunda mano. Pero una vez que abordé
el tren, no pude evitar la sensación de ser observado.
Era como un picor persistente en la nuca. Cuando di una
mirada casual a mi alrededor, no pude ver a nadie que se
destacara para mí, pero aún así no podía quitarme la sensación
de que alguien me estaba mirando.
Ese sentimiento continuó hasta que llegué a mi destino y bajé
del tren subterráneo. Corrí a través de la plataforma y bajé los
escalones para alejarme de quienquiera que me había estado
observando, y cuando llegué al nivel de la calle ya no tenía esa
sensación de picazón.
Seguí caminando a paso rápido. Por suerte, no tuve que ir muy
lejos para llegar al apartamento de Tony. Sólo esperaba que
estuviera en casa y solo. Tony salía con algunas personas
bastante desagradables. Bueno, desagradable clientela
masculina. No me gustaba visitarlo cuando estaban cerca.
Eché un vistazo rápido a mi alrededor para asegurarme de que
nadie estaba mirando antes de detenerme frente a su edificio,
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subir rápidamente los escalones y dirigirme al interior del
edificio de ladrillos descoloridos. 05/2023
No sé por qué me estaba volviendo loco tanto. Quería creer
que Vinnie nunca me lastimaría ni enviaría a alguien detrás de
mí para lastimarme, pero no podía estar seguro.
Ya no.
Era obvio que no significaba tanto para él como pensaba. Fui
un error desagradable que él querría mantener en silencio, y no
había muchas formas de hacerlo aparte de matarme.
Esa era otra razón por la que necesitaba salir del área lo más
rápido posible. Si Vinnie decidía que necesitaba deshacerse de
mí, no quería estar donde pudiera encontrarme.
Me causó un dolor punzante en el pecho el solo pensar que
Vinnie podría querer lastimarme. Yo no era estúpido. Yo era el
chico secreto del capo. Incluso si él no quisiera lastimarme,
había otros en su organización que lo harían si alguna vez
supieran de mí. Incluso podrían intentar matarme.
En serio necesitaba estar en otro lugar.
Capítulo dos
Nicky
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La roomete es una cabina con asientos que se convierten en cama.
Capítulo tres
Vinnie
Vinnie
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05/2023
Capítulo cinco
Nicky
Vinnie
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05/2023
Capítulo siete
Vinnie
Vinnie
—Está hecho.
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Levanté mis cejas.
—¿Hecho? 05/2023
—Tiago deshabilitó a Bobby como tú ordenaste —respondió
Marco. —Le disparó en la pierna y luego le disparó al teléfono
para que no pudiera llamar.
Oh, eso fue inteligente.
Y maldita sea, este tipo era bueno.
—Lo está vigilando, pero dijo que sería mejor que te dieras
prisa. Bobby está sangrando bastante. Tiago no está seguro de
cuánto tiempo más estará respirando —Marco resopló—. El
idiota ni siquiera ha tratado de detener el sangrado. Solo está
sentado allí gritando.
Maldición.
—En marcha —le dije a Anthony. Necesitaba interrogar a
Bobby antes de que muriera. Quería saber por qué nos había
vendido y a quién. Tenía una idea bastante buena, pero
necesitaba confirmación.
Fui empujado hacia atrás en mi asiento cuando Anthony pisó
el acelerador y comenzó a entrar y salir de los carriles de tráfico.
Extendí la mano y presioné mi mano contra el tablero mientras
miraba a Anthony de reojo. Quería llegar más rápido, pero
también quería llegar de una pieza.
—¡Jefe!
—¿Qué? —Pregunté mientras miraba hacia el asiento trasero.
—Tiago dice que vio una camioneta negra estacionada en el
lado norte del almacén. Solo puede ver al tipo en el asiento del
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conductor, pero quería que te advirtiera—. Marco levantó la
vista de su teléfono—. Dice que probablemente deberíamos 05/2023
entrar desde el sur.
Sí.
Miré al tipo que conducía.
—Anthony, ¿puedes traernos desde el lado sur del almacén?
—Claro, jefe.
Apreté mis labios para evitar gritar cuando la camioneta giró
repentinamente. Me sorprendió más allá de lo creíble cuando las
cuatro ruedas permanecieron en el suelo.
—¡No hagas eso!
Anthony me sonrió.
Rodé los ojos antes de volver mi atención a Marco.
—Llama a más de nuestros muchachos. Dales la ubicación de
la camioneta y pídeles que vengan desde el este y el oeste.
Quiero a quien sea que esté en ese vehículo, preferiblemente con
vida.
Parecía que tenía más de una persona a la que interrogar esta
noche.
Pasaron otros diez minutos antes de que el SUV comenzara a
reducir la velocidad y luego girara hacia la calle que bordeaba el
lado sur del almacén. Era un área oscura que tenía edificios a
ambos lados.
No estaba bien iluminado.
—Detente, Anthony —le ordené—. Caminaremos desde aquí.
No quería que nadie nos viera llegar, incluso si eso significaba
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caminar un poco, lo cual no me gustaba. Estaríamos al aire libre
y expuestos a cualquiera que pudiera estar vigilando este lado 05/2023
del almacén.
No era bueno.
Tan pronto como el vehículo se detuvo, salí. Esperé hasta que
los demás se unieron a mí antes de exponer el plan. Mi objetivo
era entrar en el almacén y llegar a Bobby para poder
interrogarlo. Su objetivo era asegurarse de que nadie más
estuviera involucrado en este espectáculo de mierda y
eliminarlos si lo estuvieran.
Bobby solo había trabajado para nosotros durante cinco años,
pero pensé que se podía confiar en él. Supongo que me
equivoqué, lo que me hizo preguntarme con cuántas otras
personas me equivoqué.
La lealtad era una cosa, pero no era tan estúpido como para
pensar que la lealtad no se podía comprar por el precio correcto.
Confié en Bruno y Marco por encima de todos mis hombres.
Habían estado a mi lado desde que éramos adolescentes. Cuando
subí de rango, los había llevado conmigo. Siempre me apoyaron.
Por eso, cuando empezamos a caminar hacia el almacén, me
quedé cerca de ellos. Si alguien venía hacia mí, sería el primero
en sacarlo.
—Tiago dice que los otros equipos están en su lugar, jefe.
—Gracias, Marco.
Miré hacia la azotea del edificio de al lado. No podía ver a
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Tiago, pero sabía que estaba allí. Solo esperaba que el tipo no
tuviera ese rifle de francotirador apuntándome. 05/2023
Necesitaba hablar con él cuando todo esto terminara, conocer
su personalidad. Si era tan bueno como dijo Marco, quería que
trabajara para mí como más que un guardia de almacén, pero
tampoco quería que Tiago decidiera sacarme algún día.
Necesitaba saber qué podía hacer para ganarme su lealtad.
Llegamos a la entrada sur del almacén sin incidentes. No tenía
idea de lo que encontraríamos una vez que entráramos.
—Bruno, dile a los otros equipos que se lleven a quien sea que
esté en esa camioneta tan pronto como entremos.
—Sí, jefe.
Miré a Marco.
—Dile a Tiago que esté atento a cualquier otra persona.
Marco asintió antes de mirar su teléfono celular. Empezó a
escribir, pero se detuvo cuando su teléfono sonó.
—Uh, jefe, Tiago dijo que otra camioneta se detuvo junto a la
calle. No se mueve, pero se parece a la primera camioneta, así
que pensó que eso podría ser significativo.
Lo era.
—Dividan los otros equipos, uno para cada una de las
camionetas—. Había sospechado que esto era una especie de
trampa, pero ahora lo sentía aún más—. Quiero que se las tomen
a las dos al mismo tiempo.
—¿Disparar a matar, señor? —Preguntó Marco.
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—Contener, si es posible, pero no a costa de la vida de nuestros
hombres—. Preferiría tener inmovilizados a los que capturamos 05/2023
para poder interrogarlos, pero no quería poner la vida de mis
hombres en más peligro del que ya corrían.
Desafortunadamente, esto significó que tuvimos que esperar
hasta que ambos equipos estuvieran en su lugar. No estábamos
totalmente a la intemperie. Había varias pilas de cajas y palets
de madera detrás de los cuales podíamos escondernos mientras
esperábamos, pero aún así no pude evitar sentir como si tuviera
un gran objetivo en mi espalda.
Diez minutos nunca me parecieron tan largos. Cuando Marco
me dijo que todos estaban en su lugar, yo estaba listo para
tirarme de los pelos. Mis nervios estaban más tensos que la
cuerda de un piano.
Le dije a Marco que lo había escuchado y luego señalé con la
mano la puerta.
—Dile a todos que se vayan.
Tan pronto como abrimos la puerta y entramos, los hombres
conmigo se extendieron. Bruno y Marco se mantuvieron cerca
de mi lado, con los demás viniendo detrás de nosotros,
protegiendo nuestras espaldas.
Como este no era uno de nuestros almacenes principales, no
pasé mucho tiempo aquí. Me tomó un minuto encontrar las
escaleras al segundo piso. Tan pronto como comencé a subir por
ellas, no fue difícil averiguar hacia dónde me dirigía.
El tipo gritando me avisó.
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Seguí el fuerte sonido hasta una oficina al final del rellano
superior. Bruno se me adelantó y empujó la puerta. Tan pronto 05/2023
como entré, mi mirada se posó en el hombre sangrando en el
suelo.
—¿Es realmente necesario todo ese ruido?
La boca de Bobby se cerró de golpe, afortunadamente
poniendo fin a los gritos.
—Bruno, coloca un torniquete en la pierna de Bobby para que
no se desangre.
Quedaba por ver si ordenaba que le quitaran el torniquete o
no. Si no querías trabajar para mí, está bien, déjalo. Pero las
personas que traicionaron a la familia no tuvieron una vida muy
larga.
—Jefe, jefe —graznó Bobby mientras se agarraba la pierna
lesionada—. Me han disparado. Tienes que llamar a una
ambulancia para mí.
Me acerqué y me apoyé en la esquina del escritorio más
cercana a Bobby, y luego me crucé de brazos.
—¿Por qué me traicionaste?
Fue interesante que Bobby palideciera aún más. Con su
pérdida de sangre y el nivel de dolor en el que debe estar, no lo
había creído posible.
—Nunca lo traicionaría, señor. Nunca.
—Sí, verás, podría haber creído eso si no fuera por el hecho de
que había un francotirador en el techo al otro lado del camino
esperando a que yo llegara. También hay un vehículo
sospechoso estacionado en el lado norte del depósito.
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—¡Te dije que alguien estaba disparando contra el almacén!
—Lo hiciste, ese era el punto, ¿no? ¿Traerme aquí para que el 05/2023
francotirador pudiera eliminarme? Porque fuiste el único que
reportó disparos. Fuiste el único que aparentemente los escuchó.
—No, no, te estoy diciendo- —Las palabras de Bobby
terminaron cuando Bruno sacó un arma y apuntó a su frente. —
Señor Borelli, por favor, le estoy diciendo la verdad.
—No, no lo haces, ¿y sabes cómo sé que no lo haces? —Sonreí
maliciosamente. —Porque hemos capturado a todos los hombres
que esperaban para derribarme, incluido el francotirador.
Aunque está muerto, así que...
Nadie se sorprendió más que yo cuando Bobby saltó sobre su
pierna lesionada, cruzó corriendo la habitación y se arrojó por la
ventana del segundo piso.
Qué idiota de mierda.
Bruno se acercó y miró hacia abajo.
—El morón se rompió la pierna.
Resoplé mientras negaba con la cabeza. Una caída desde una
ventana del segundo piso tenía la posibilidad de matar a alguien
si aterrizaba correctamente, pero lo más probable era que solo
los lastimara, como lo había hecho ahora.
—Que alguien vaya a buscarlo y arrástrenlo al almacén.
Amordácenlo si sigue gritando.
Estaba irritando mis nervios.
—¿Qué quiere que hagamos con los muchachos de las
camionetas, jefe? —Preguntó Marco.
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—Tráelos a todos al almacén.
—¿Tiago también? 05/2023
—No, quiero que esté pendiente hasta que esto termine—. Me
gustaba saber que había alguien ahí afuera vigilando—. Dile que
nos avise si aparece alguien más.
—Lo tienes, jefe—. Marco comenzó a escribir en su teléfono
celular.
Bruno agarró el brazo de Marco y lo sacó de la habitación
junto con el resto de nosotros. Mis hombres estaban
comenzando a traer a los muchachos que habían estado en las
camionetas cuando llegamos al piso principal.
Retrocedí y me tomé un momento para mirarlos por todos
lados mientras los registraban y luego los obligaban a
arrodillarse, con las manos juntas sobre la cabeza.
Algunos parecían asustados, otros parecían como si estuvieran
tratando de ocultar el hecho de que tenían miedo, y algunos
parecían enojados. Todos parecían querer estar en cualquier otro
lugar menos aquí.
Probablemente deberían haber pensado en eso antes de
acceder a atacar mi almacén.
Puse los ojos en blanco cuando arrastraron a Bobby al
almacén. Incluso con un trozo de tela metido en la boca, aún
podía escuchar sus gritos. Saqué mi arma y presioné el cañón
contra su frente.
—Me estás dando dolor de cabeza. Podemos encargarnos de
eso de dos maneras. Puedo meterte una bala en la cabeza y
callarte o simplemente puedes dejar de gritar. Tú eliges.
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Los gritos cesaron.
Hombre inteligente. 05/2023
Guardé mi arma en la cinturilla de mis pantalones y me giré
para mirar a los hombres que habíamos capturado.
—Ustedes sabes quién soy.
No era una pregunta. No había duda de que estos tipos sabían
exactamente a quién habían estado atacando.
—Tengo una pregunta para ustedes —dije simplemente. —
Contesten honestamente y los dejaré ir.
Hubo algunos bufidos de incredulidad, pero nadie dijo nada.
—¿Quién ordenó atacarme a mí y a mi almacén?
Un par de hombres miraron a los demás, pero de nuevo, nadie
dijo una palabra.
Lancé un profundo suspiro antes de sacar mi teléfono celular
y marcar a Dmitri. Tan pronto como empezó a sonar, puse el
teléfono en altavoz. Quería asegurarme de que todos escucharan
mi conversación con el hombre.
—Vinnie, estás interrumpiendo mi cena.
—Puedes ahogarte en tu vodka más tarde, Dmitri. Tenemos
negocios que discutir.
—¿Qué negocios? —Preguntó Dmitri, pero pude escuchar una
ligera vacilación en su tono.
—Los hombres que enviaste para eliminarme en mi almacén
están arrodillados en el suelo frente a mí. Bueno, excepto tu
francotirador, y me temo que está muerto.
—¿Muerto?
—Sí. —No pude evitar mi sonrisa, incluso si Dmitri no podía
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verla. —Incluso tengo al pequeño traidor que sobornaste.
Necesitará un viaje al hospital si sobrevive. 05/2023
Bobby gimió.
—¿Qué tiene que ver todo esto conmigo? —Dmitri preguntó.
—Admíteme ahora mismo que ordenaste este golpe y dejaré
que todos salgan ilesos, bueno, excepto el francotirador y Bobby,
por supuesto.
—¡No sé de qué estás hablando!
—¿En serio? —Me aseguré de mirar la cara de cada hombre
arrodillado en el suelo. —¿No admitirás que fuiste tú quien los
envió, incluso si eso significa sus vidas?
—Yo no los envié, Vinnie.
Casi le creí.
Casi.
—Si no los enviaste, entonces, ¿quién lo hizo?
—Eres un idiota, Vinnie. Podría ser cualquier número de
personas.
Bueno, esa parte era cierta.
Le hice un gesto a Bruno, quien caminó detrás del primer tipo
en la fila y presionó el cañón de su arma en la parte posterior de
la cabeza del tipo. Presioné el botón para llevar la conversación a
video y apunté al tipo.
—Lo digo en serio, Dmitri. Admite que fuiste tú y los dejaré ir.
Niégate a admitirlo y los enviaré a tu casa en pequeños pedazos.
—¡Joder, yo no lo hice, Vinnie! —Dmitri gritó. —Sí, me metí
con tu otro almacén, pero esta vez no envié a estos muchachos.
Fruncí el ceño mientras giraba lentamente el teléfono para
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poder ver la cara de Dmitri. Algo en su tono, tal vez
desesperación, me dijo que en realidad podría estar diciendo la 05/2023
verdad.
Quité el video y el altavoz del teléfono y luego lo acerqué a mi
oído.
—Háblame, Dmitri, y será mejor que derrames lo que sabes
porque mi paciencia se está agotando.
—Esos no son mis hombres, Vinnie. Lo juro.
—¿Qué pasa con el francotirador?
—Él tampoco es mío, pero creo que podría saber quién es, o
era. Últimamente solo he oído hablar de un asesino a sueldo
profesional en la ciudad. ¡Joder! No puedo creer que lo hayas
eliminado.
Sentí una sensación de hormigueo en la nuca.
—¿Quién es él?
—Nadie sabe su verdadero nombre, pero se hace llamar por el
distintivo de llamada de La Grande Faucheuse.
Mi francés estaba un poco oxidado, pero...
—¿The Grim Reaper?
—Ese es él.
—Háblame de él.
—No hay mucho que contar porque no hay mucho sobre él.
Llegó a la escena hace unos diez años, comenzó a hacerse un
nombre de inmediato. Él sacará a cualquiera por el precio
correcto, sin importar quién sea. No es quisquilloso. Sacaría a su
propia abuela si el precio fuera justo.
Eso no fue bueno.
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—Su precio es alto, Vinnie. Cuanto más importante es el
objetivo, más alto es el precio. Entonces, quien lo contrató tuvo 05/2023
que haber pagado un buen centavo si se suponía que iba a sacar
tu trasero peludo.
Fue desafortunado que Dmitri supiera exactamente lo peludo
que era mi trasero. ¿Qué podría decir? La universidad, una fiesta,
demasiado alcohol y un paseo de la vergüenza a la mañana
siguiente.
Nunca habíamos vuelto a hablar de eso.
—Te quiero fuera de mi negocio, Vinnie, pero no lo suficiente
como para dejarte fuera. Eso crearía un dolor de cabeza que
incluso yo no quiero enfrentar.
No estaba seguro de cuánto de eso era cierto. De acuerdo, las
cosas funcionaban más fácilmente en la ciudad cuando había
líneas claras y definidas entre territorios, y era obvio que alguien
estaba jugando con esas líneas.
La pregunta era, ¿quién lo estaba haciendo?
Capítulo nueve
Nicky
Vinnie
Nicky
Vinnie
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Capítulo trece
Nicky
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Capítulo catorce
Vinnie
Nicky
Vinnie
Vinnie
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Capítulo dieciocho
Nicky
Vinnie
Nicky
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Capítulo veintiuno
Nicky
Vinnie
Nicky
Vinnie
Vinnie
Nicky
Sé que Vinnie dijo que esta reunión no era sobre el lado más
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oscuro de los negocios familiares, pero aún así parecía que no
podía calmar mis nervios. Nos había recibido un hombre 05/2023
corpulento con un traje oscuro en el momento en que salimos
del ascensor e incluso ahora estábamos siendo escoltados a
algún lugar por él y otros dos guardias.
Estaba claro por los bultos debajo de sus trajes que sentían que
Vinnie era una amenaza. No ayudó que solo se nos permitiera
traer a Marco, Bruno y Gino con nosotros. Me habría sentido
mucho más tranquilo si tuviéramos más guardaespaldas.
—¿Dónde estamos? —Le susurré a Vinnie.
Esto parecía un edificio de oficinas común y corriente, pero
con tanta seguridad, ¿cómo podría ser?
—Esta es la sede de la empresa que posee y opera Jake
D'Amato. Es un inventor que fue lo suficientemente inteligente
como para patentar lo que inventó y venderlo a las personas
adecuadas. Ha ganado mucho dinero de esa manera.
—¿Y tú cómo sabes esto? —No pensé que la familia Borelli
estuviera en el negocio de los inventos.
—Jake y mi abuelo tuvieron una carrera hace un tiempo.
Pudieron llegar a un acuerdo entre los dos, pero un poco más
tarde encontré información vital que el Sr. D'Amato necesitaba
saber. Se la ofrecí libremente. Espero que lo recuerde.
Sí, yo también.
Nos hicieron pasar a una oficina de aspecto muy elegante.
Tenía mucho cuero negro, cromo y vidrio, pero también tenía
suficientes toques de color para que todo funcionara a la
perfección.
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No era mi estilo, pero me gustó.
—Gracias por acceder a verme, Sr. D'Amato —dijo Vinnie 05/2023
mientras se acercaba y estrechaba la mano del hombre de
cabello oscuro sentado detrás de un escritorio.
—Tenía la impresión de que nuestro negocio había concluido,
Sr. Borelli, así que tengo curiosidad por saber por qué estás
aquí—. Hizo un gesto con la mano hacia las dos sillas frente a su
escritorio. —Por favor tome asiento.
Rápidamente seguí a Vinnie y me senté a su lado. Miré
nerviosamente alrededor de la habitación, notando que Marco,
Bruno y Gino habían tomado posiciones cerca de la puerta.
Estaban rodeados por los otros guardaespaldas.
Esto no se sentía como un ambiente amistoso.
—¿Cómo está tu marido? —Preguntó Vinnie.
Me pregunté si esa era la pregunta correcta cuando la
mandíbula del Sr. D'Amato se apretó y sus ojos se enfriaron.
—Él está bien.
—Este es mi esposo, Nicky Borelli.
Y así de rápido los rasgos de D'Amato se suavizaron, pero no
mucho. Él asintió hacia mí.
—Señor Borelli.
—Por favor, llámame Nicky. Todavía me estoy acostumbrando
a ser un Borelli.
El Sr. D'Amato levantó una ceja mientras miraba a Vinnie.
—Nos casamos hace un par de días —agregó Vinnie.
—Felicidades. —Me envió una sonrisa tensa. —Por favor,
llámame Jake.
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Le devolví la sonrisa y dije:
—Gracias. 05/2023
Jake se recostó en su silla y juntó las manos sobre su
estómago.
—Entonces, dime, ¿por qué una pareja de recién casados
vendría a verme? ¿No deberías estar en tu luna de miel?
Ya me gustaría. Ni siquiera habíamos hablado de una luna de
miel. El viaje a Italia para ver a su abuelo no contaba. Eso no era
una luna de miel.
—Ayer alguien trató de secuestrar a Nicky para usarlo en mi
contra —explicó Vinnie. —Cuando eso no funcionó, intentaron
matarlo. Tampoco era la primera vez que intentaban
secuestrarlo.
—Mataron a mi amigo —susurré. Podría haber estado lo
suficientemente enojado con Tony como para no querer tener
nada que ver con él, pero nunca quise su muerte.
Los ojos de Jake se abrieron por un momento hasta que educó
sus rasgos.
—¿Supongo que te ocupaste de la situación?
—Con extrema retribución.
—Ya veo. —Jake respiró hondo y lo soltó lentamente. —
Entonces, ¿qué quiere de mí, Sr. Borelli?
—¿Recuerdas el artículo que le diste a mi abuelo?
Jake asintió.
—Me gustaría conseguir uno para Nicky—. Vinnie se acercó y
agarró mi mano, sujetándola con fuerza. —Nicky y yo tenemos
un conjunto de reglas muy firme que define nuestra situación
280
de vida y mi trabajo. Él no está involucrado de ninguna manera,
y nunca lo estará. Desafortunadamente, otros no seguirán las 05/2023
mismas reglas simplemente por quién es él. Necesito hacer todo
lo posible para evitar que lo que sucedió ayer vuelva a suceder.
Entendí de qué estaba hablando Vinnie, pero no entendí. Se
sentía como si hubiera un mensaje oculto allí que solo Jake
podría entender.
—Pagaré el precio que me pidas.
Tiré del brazo de mi esposo.
—Vinnie, no.
Se volvió hacia mí y palmeó la mano que sostenía.
—Está bien, amor. Vale la pena mantenerte a salvo.
Dios, tal vez debería haberme quedado como su pequeño y
sucio secreto.
—¿Sólo quieres uno? —Preguntó Jake.
Aparté mi mirada de Vinnie y miré al hombre. ¿Realmente lo
estaba considerando, fuera lo que fuera eso?
—Solo necesito uno para Nicky —dijo Vinnie. —Y como dije,
di tu precio.
—Un favor que se nombrará más tarde.
Oh...
—Hecho —dijo Vinnie—. Y sabes que soy un hombre de
palabra.
—Sí. —Jake asintió. —Sin embargo, tengo una mejor
sugerencia si estás dispuesto a escucharla.
—Lo estoy.
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—El rastreador que le di a tu abuelo era biodegradable. Tenía
un límite de vida de seis meses antes de que se degradara y ya 05/2023
no funcionara.
¿Rastreador?
—Nunca mencionaste esa parte.
—¿Por qué habría de hacerlo? —Jake se rió. —Necesitaba que
tú y tu familia no fueran una amenaza para mi esposo.
—Espera... ¿qué? ¿Una amenaza? —Miré a Vinnie. —¿Qué
amenaza?
Vinnie suspiró antes de darme un breve resumen de la
amenaza que su abuelo había representado para el esposo de
Jake. Cuando terminó, yo estaba echando humo.
—¿Y quieres que vuele a Italia para encontrarme con este
hombre?
—Cariño, solo eran negocios.
Entrecerré los ojos.
—Nicky, te juro que no nos dedicamos al tráfico de personas.
La familia de Jai tomó un préstamo usándolo como garantía. A
lo sumo, habríamos hecho algunas amenazas si no lo
devolvieran. No compramos y vendemos personas.
—¡Eso es exactamente lo que hiciste! —Rompí. —Permitiste
que alguien usara a otro ser humano como garantía para un
préstamo. Un ser humano.
Estaba tan enfadado que me puse de pie de un salto y comencé
a caminar.
—Si no hubieran pagado el préstamo, ¿entonces qué? ¿Le
habrías roto las piernas? ¿Le habrías puesto zapatos de cemento?
282
¿Le habrías metido una bala en el cerebro?
—Técnicamente —dijo Jake —no devolvieron el préstamo. Yo 05/2023
lo hice, con intereses.
Entrecerré los ojos hacia Jake.
—¿Compraste a tu marido?
No sabía con quién estaba más enojado.
La puerta del otro lado de la habitación se abrió de golpe y un
hombre de ojos verdes y cabello rubio rojizo entró riéndose.
—Me gusta este chico.
Jake le sonrió mientras le tendía la mano.
—Sabía que lo haría.
Tomó la mano de Jake y luego le tendió la otra.
—Jai D'Amato.
—Nicky Borelli—. Estreché su mano antes de asentir a Vinnie.
—Este es mi esposo, Vinnie Borelli.
—Nos conocemos —dijo Jai. —Después de que mi esposo me
compró de nuevo, el abuelo de Vinnie se aseguró de que todas
las demás familias supieran que no debían prestarle más dinero
a mi familia. Vinnie aquí se aseguró de eso.
No estaba muy seguro de qué decir a eso.
—No tengo mala voluntad hacia tu esposo o su familia. Para
ellos, era simplemente un negocio. Y después de que nuestro
asistente ejecutivo investigó a la familia Borelli, sabemos que no
se dedican al tráfico de personas, por lo que no tienes que
preocuparte por eso.
—Pero...
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—Me imagino que si mi familia no hubiera devuelto el
préstamo, lo que no tenían intención de hacer, me habrían 05/2023
llevado a algún lugar y me habrían escondido hasta que se
vieran obligados a devolver el dinero que tomaron. En el peor de
los casos, me habrían obligado a devolver el dinero.
Vinnie negó con la cabeza.
—Las únicas personas que pueden ser responsables de un
préstamo son las personas que firman los documentos del
préstamo. No hacemos que los miembros de la familia lo
devuelvan.
—Entonces, ¿cómo esperabas obtener el dinero si no tenían
intención de devolverlo? —Yo pregunté.
—Habríamos ido tras ellos —dijo Vinnie. —Primero sus
vehículos, luego sus pertenencias personales, tal vez su casa. No
compramos ni vendemos seres humanos.
Fruncí el ceño mientras me rascaba un lado de la cabeza.
Estaba tan confundido.
—Si no compras y vendes seres humanos, ¿por qué permitiste
que Jai se usara como garantía?
—Cualquier cosa puede usarse como garantía, Nicky. Eso no
significa necesariamente que eso es lo que tomamos si el dinero
no se devuelve. No somos una compañía de préstamos
convencional. Somos la maldita mafia. Cualquier cosa puede
tomarse como compensación si no se paga el préstamo.
—Entonces ¿por qué...?
—Estoy seguro de que los padres de Jai pensaron que, dado
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que somos quienes somos, estaríamos encantados de aceptar a
un joven como pago por la deuda que nos debían. 05/2023
Probablemente pensaron que lo pondríamos en un burdel o algo
así, excepto que no dirijo burdeles.
Jai resopló.
—Oh, no tengo dudas de que eso es exactamente lo que
pensaron. Primero me vendieron a Jake y luego se dieron la
vuelta y me vendieron a Carlos Borelli. No tenían vergüenza.
Mi frente se frunció con más confusión.
—¿Tenían?
—Mis dos padres actualmente están cumpliendo condena por
las cosas que hicieron.
Lo tengo.
—Los estamos vigilando —dijo Vinnie. —Arrastraron a la
familia Borelli a sus esquemas. Mi abuelo no estaba contento.
No hay duda.
Me hundí en la silla junto a Vinnie y tomé su mano.
—Lamento haber sacado conclusiones precipitadas.
—No tienes que arrepentirte, bebé. No sabes nada sobre los
negocios que maneja mi familia, y considerando cómo nos
retratan los medios, no tengo dudas de que todos piensan que
hacemos todo tipo de cosas ilegales.
Jake se rió entre dientes.
—Hay algunas cosas que haces con las que no estoy de
acuerdo, pero Stella me asegura que tu familia no participa en
muchos de los crímenes más oscuros.
¿Stella? ¿Quién diablos era Stella?
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—¿Dijiste que tenías una mejor sugerencia que el rastreador
que pusiste en la pasta de mi abuelo? —Preguntó Vinnie. 05/2023
—Espera... —Miré a Jake. —¿Lo pusiste en su pasta?
Jake se encogió de hombros como si pasarle un rastreador a
un capo de la mafia fuera algo cotidiano para mí.
—No es como si se lo hubiera tragado voluntariamente.
—Mi abuelo estaba bastante impresionado de que hicieras eso.
Había un poco de escarcha en los ojos de Jake cuando miraron
a Vinnie.
—No iba a permitir que alguien que controlaba todo el Lower
East Side dañara a mi esposo. Tenía que hacer algo.
El ceño fruncido de Vinnie fue inmediato.
—No controlamos el Lower East Side.
La frente de Jake se frunció con inquietud.
—La familia Borelli controla Manhattan.
El ceño de Jake se profundizó.
—Entonces, ¿por qué Stella me dijo que controlabas el Lower
East Side?
Vinnie se encogió de hombros.
—No puedo decirte eso.
—¿Quién controla el Lower East Side entonces?
La mandíbula de Vinnie se apretó.
—La gente que intentó hacerle daño a mi Nicky.
—Ya veo. —Jake jugueteó con los pulgares mientras miraba a
Vinnie. —¿Significa esto que te apoderarás de ese territorio?
—No en una apuesta —se rió Vinnie. —Lo más probable es
que alguien allá en Irlanda nombre un nuevo líder. En el peor
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de los casos, su hijo se hace cargo. Si lo hace, ten cuidado.
Michael O'Donnell es un idiota ambicioso. Todavía tengo que 05/2023
conocer a un O'Donnell con algún nivel de moral. Hubieran
puesto a tu marido en un burdel.
Me di cuenta de un momento a otro que ese podría haber sido
mi destino. La muerte casi parecía mejor.
Jake se inclinó hacia delante y le tendió la mano.
—Siente la piel entre mi pulgar y mi dedo índice.
Miré a Vinnie, quien me asintió con la cabeza y luego estiré la
mano y palpé el área que Jake indicó. Cuando sentí un pequeño
bulto, fruncí el ceño.
—¿Qué es eso?
—Eso es un rastreador. Jai y yo tenemos uno, al igual que
varios de mis amigos. Tiene un radio de quinientas millas.
También lee la frecuencia cardíaca, la presión arterial y la
temperatura para que aquellos que nos buscan puedan saber en
qué tipo de condición estamos si nos llevan. No son
biodegradables. Solo dejan de funcionar cuando se desactivan o
eliminan.
—¿Cómo se rastrean? —Preguntó Vinnie.
—Cada rastreador está codificado en una aplicación de rastreo
diseñada por mi empresa. Solo esa aplicación puede acceder a la
información del rastreador y cada uno debe tener un código.
—¿Algo así como la aplicación de rastreo que usaste con mi
abuelo? —Preguntó Vinnie.
Jake sonrió.
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—Similar.
—¿Qué quieres por uno de estos rastreadores y acceso a la 05/2023
aplicación?
—Como dije antes, un favor será nombrado más tarde —
respondió Jake.
—Hecho —dijo Vinnie sin dudarlo.
Jake se inclinó sobre su escritorio y estrechó la mano de
Vinnie.
—Si quieres seguirme, podemos implantar el rastreador ahora
mismo.
—Espera —grité mientras todos menos yo se ponían de pie. —
¿Vas a rastrear mi trasero?
Vinnie sonrió.
—Sí.
Oh, esto iba a ser un barril de risas.
Capítulo veintisiete
Vinnie
—Dmitri.
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Tenía planes. Grandes planes. No quería estar hablando con
este tipo en este momento. 05/2023
—Pensé que querrías saberlo, Irlanda puso al idiota a cargo.
—Figlio di Troia —gemí mientras cerraba los ojos
brevemente.
¿Qué tan estúpida puede ser la gente? Kirby O'Donnell había
sido un idiota. Su hijo era un idiota. Ninguno de ellos debería
haber sido puesto a cargo de Queens.
Suspiré mientras abría los ojos y me sentaba en mi escritorio.
Esto significaba que tenía que hacer una llamada telefónica en
lugar de ir a pasar tiempo con mi nuevo esposo.
—Gracias por hacérmelo saber.
—¿Qué hiciste con Kirby? —Dmitri preguntó.
Mi risa fue casi alegre.
—Lo envié de vuelta a Irlanda.
—Eso es bastante ingenioso —dijo Dmitri. —Me gusta.
A mí también lo hacía.
—¿Hay alguna posibilidad de que recupere esa arma pronto?
Boris se ha estado quejando.
—Entonces tal vez no debería habérsela pegado en la cara a mi
marido.
Dmitri suspiró pesadamente.
—Tú lo sabes, y yo lo sé, pero Boris es un idiota. De acuerdo, es
un gran guardaespaldas, pero no es bueno para pensar más alto.
—Bien. —Le compraría a Nicky un arma mejor. —La enviaré
en unos días. Solo mantén a Boris alejado de mi esposo, o dejaré
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que Nicky lo desmantele la próxima vez.
—Lo tengo de guardia en uno de mis almacenes ahora mismo, 05/2023
como castigo por haber perdido su arma.
Un deber de pesadilla si alguna vez he oído hablar de uno.
—Gracias por la llamada, Dmitri, pero tengo que irme. Nicky
y yo volaremos a Italia mañana para que pueda conocer a mi
abuelo.
Dmitri resopló.
—Buena suerte con eso.
Una vez más, Dmitri colgó sin despedirse. Siempre hacía eso.
Hacía tiempo que había renunciado a tratar de enseñarle lo
grosero que era y lo acepté como parte de su brillante
personalidad.
Llamé a mi abuelo y luego sostuve el teléfono en mi oído. Tan
pronto como terminara esta llamada telefónica, estaba apagando
el maldito teléfono.
—Hola, abuelo —dije tan pronto como escuché que la línea se
conectaba. —Tengo algunas noticias para ti.
—¿Algo que no podía esperar hasta que llegaras aquí?
—Preferiría terminar con los negocios antes de nuestra visita.
—Comprensible —respondió mi abuelo. —Entonces, ¿qué es
tan urgente que tuviste que llamarme ahora?
—Irlanda puso a Michael O'Donnell a cargo de Queens.
Podía escuchar el cansancio en la voz de mi abuelo cuando
dijo:
—Ya veo.
—Dado que firmamos el acuerdo con Kirby y él lo violó
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cuando entró en nuestro territorio e intentó secuestrar a Nicky,
lo cancelo todo junto. No quiero que Michael O'Donnell ponga 05/2023
un pie en Manhattan.
—Comprensible.
—Bruno pudo obtener información de uno de sus informantes
confidenciales. Parece que Kirby había estado entrando en
nuestro territorio durante bastante tiempo con el pretexto de
tener sexo. Tenía al amigo de Nicky, Tony, vigilándonos.
Planeaba usar la amistad de Nicky con Tony para secuestrarlo.
No había compartido esa información con Nicky y no estaba
seguro de hacerlo. Le había entristecido la muerte de Tony. No
quería que él también se sintiera traicionado.
También significaba que no sentía ni un ápice de culpa por la
muerte de Tony, aunque no hubiera sido yo quien lo hubiera
matado. Todo eso estaba en la cabeza de Kirby. Sospeché que
había estado sacando a Tony para que no chillara.
—O'Donnell también fue quien me golpeó. Me imagino que
tendrá que responder muchas preguntas sobre la muerte de
Grim Reaper. Sus superiores no estarán felices de que su asesino
haya sido asesinado en un trabajo que nunca debería haber
tomado.
—Espero que lo entierren.
Sí, yo también, pero no hasta que le torturaran hasta el último
fragmento de información. Quería que el hombre pagara por lo
que le había hecho a Nicky, y si no podía hacerlo personalmente,
quería que alguien más lo hiciera. Realmente no me importaba
quién.
291
—Kirby debería llegar a Irlanda en cualquier momento. Hice
que dos de mis mejores hombres lo escoltaran allí esta mañana. 05/2023
Con suerte, no volverá.
—No apuestes por eso —dijo el abuelo. —Kirby tiene una
racha vengativa en él de una milla de ancho. Si siente que le has
hecho daño, vendrá por ti.
—Por eso lo envié a Irlanda. Espero que lo vigilen para evitar
una guerra total.
—Pondré algunos sensores, veré si puedo vigilarlo desde aquí.
—Te lo agradecería, abuelo. Nicky está lo suficientemente
asustado con todo lo que ha pasado. No quiero que vuelva a
hacer un acto de desaparición.
Una vez había sido más que suficiente.
—¿Algún problema con el tío Frank? —Yo pregunté.
Habían pasado dos semanas muy tranquilas desde que lo
escoltaron a Italia. Quería que siguiera siendo así.
Realmente hubiera preferido no visitar mientras mi tío estaba
allí, pero era mejor a que él estuviera aquí. Al menos con mi
abuelo cerca, podría interferir si el tío Frank intentaba empezar
algo con Nicky.
—Nada de lo que debas preocuparte, muchacho. Tu abuela lo
está tomando en sus manos en este momento.
Casi sentí pena por mi tío.
—Creo que mientras estemos allí para la boda, haré que tu
abuela también pase un poco de tiempo con Frankie Jr. Tiene
treinta y tantos años. Es hora de que crezca.
Ya era hora, pero no iba a discutir con mi abuelo.
292
—No se tomó muy bien perder parte de su asignación, pero
una vez que le dije que era una orden tuya, dejó de discutir 05/2023
conmigo. Espero que esto lo ayude a mantenerla en sus
pantalones.
—Todos podemos esperar eso —respondió el abuelo—. ¿Algún
problema con Vito?
—No. —Me reí. —Marisa todavía lo lleva por la nariz.
—Bien.
No podría estar más de acuerdo.
—La boda es en tres meses. Si ella puede mantener sus
anzuelos en él tanto tiempo, en realidad podría llevarlo al altar.
—Lo hará —respondió mi abuelo. —Él ya firmó el papeleo.
Le quitaré su asignación si no se casa con ella.
Me reí.
—Está bien, abuelo, me voy a ir. Todavía tenemos que
empacar un poco antes de nuestro vuelo.
—Está bien, Vincenzo. Nos vemos mañana con tu Nicolas.
Colgué el teléfono y salí corriendo de mi oficina. Tan pronto
como entré en la sala principal, vi a Bruno y me dirigí
directamente hacia él, tendiéndole mi teléfono.
—A menos que sea una emergencia extrema, como que el
mundo se esté quemando, no me molestarás hasta que tomemos
nuestro vuelo mañana. Si alguien llama, toma un mensaje.
Tenía planes.
Bruno me sonrió mientras tomaba el teléfono.
—Sí, jefe.
293
Me di la vuelta y me apresuré hacia las escaleras, mis pasos
rápidos y casi agresivos por naturaleza. Mi único objetivo en ese 05/2023
momento era llegar al hombre que amaba.
Me apresuré a subir las escaleras y luego bajé por el pasillo
hasta la puerta de nuestro dormitorio. Asentí con la cabeza a
Gino, que había ocupado un puesto frente a la puerta de nuestro
dormitorio.
—Estás libre hasta mañana por la mañana—. No quería que
escuchara todos los ruidos que planeé que hiciera Nicky.
—Sí, jefe.
Esperé hasta que Gino se hubo marchado antes de abrir la
puerta del dormitorio y entrar. La habitación principal estaba
vacía. Cerré la puerta con llave y luego me dirigí a nuestro
dormitorio.
Tan pronto como entré y vi al hermoso hombre desnudo
acurrucado en mi cama, mi corazón pareció congelarse en mi
pecho y luego comenzó a latir fuera de control.
La sonrisa en su rostro mientras me miraba me robó el aliento.
—¿Fuera del trabajo?
Nada podría haberme quitado la sonrisa de la cara cuando
comencé a caminar hacia Nicky, quitándome la ropa.
—Soy todo tuyo, amor.
Y siempre lo sería.
FIN
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05/2023
01 El Contrato de Matrimonio 295
02 Matrimonio a la Fuga
03 Matrimonio Cambiado
05/2023
04 El Compromiso Matrimonial
05 La Fusión Matrimonial
06 El Chico del Capo
07 The Boss’s Boy
SOBRE EL AUTOR
Diseño y Edición
002 PISTACHO
EPUB 297
MARA
05/2023