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TRABAJO PRACTICO DE CIENCIAS POLÍTICAS

Consigna

 Realizar en grupo una muestra teatral en el que manifieste la forma de pensar


la política en las edades antigua, media, moderna y contemporánea. La duración
de la muestra teatral debe durar entre 5 a 10 minutos. Para ello, formarán los
siguientes grupos:

Los grupos deberán investigar y entregar un informe elaborado en computadora en el


que explique la forma de pensar la política en la etapa histórica que le tocó y además
explicar lo que desarrollaron en la muestra teatral. El trabajo debe tener una
extensión de 2 a 5 hojas impresas y debe ser realizada en tamaño de fuente 12. En
clase se realizará el sorteo para determinar el tema sobre el cual deberán trabajar.

A continuación, se adjunta información del tema. No obstante, deberán investigar de


otras fuentes bibliográficas.

LA POLÍTICA

En la actualidad, la palabra “política” implica una complejidad de significados y usos.


Se utiliza como sustantivo (“política educativa”), como adjetivo calificativo (“un acto
político”) o como sustantivo abstracto (“lo político”), entre otras posibilidades. La
política abarca entidades diferentes como una práctica (hacer política), un área de
estudios (la Ciencia Política), una estrategia (la política energética del gobierno, por
ejemplo).

La palabra “política” tiene su origen en el adjetivo griego politikós, que significa “todo
lo que se refiere a la polis y a su gobierno”. Las polis eran ciudades-Estados de la
Antigua Grecia, que incluían una zona urbana y otra rural, destinada a las actividades
agrícolas. Cada polis tenía sus propias leyes y organización.

En la polis de Atenas, en el siglo V a.C., gobernantes y gobernados (solamente varones


libre nacidos en la polis) opinaban y actuaban sobre cuestiones comunes a todos para
el progreso de esa pequeña comunidad.

Como muchas de las palabras que tienen que ver con las bases del pensamiento que hoy se
denomina “occidental” y que forma parte de nuestra cultura, en la Antigüedad, en Grecia,
encontramos las primeras definiciones de “política”.

EL PENSAMIENTO DE LOS SOFISTAS

Para los sofistas no había una verdad absoluta, sino que era relativa a cada situación y
a cada persona (lo que para alguien es verdadero en algún momento para otro puede sr
falso en otra circunstancia) y creían que la verdad se podía demostrar a través de
argumentos. No decían que algo “debía ser así” –como Platón-, sino que “así era en la
realidad y en la práctica”.

Los sofistas eran profesores de ciudadanos y políticos, cobraban por sus clases de
retórica y eran despreciados por los filósofos.

En el siglo XX, el filósofo Michel Foucault trabajó mucho con esta idea de verdad de
los sofistas. Para Foucault, toda verdad depende de un régimen, que es un sistema de
escritura y una forma de autoridad, es decir que algo es verdadero según como se
presenta y quién lo dice.

EL ORIGEN DEL PENSAMIENTO POLÍTICO

Los principales pensadores de la antigua Grecia reflexionaron sobre el ser humano y


sobre la comunidad y en esas reflexiones surgió la cuestión del poder como un tema
básico. Platón (filósofo griego del siglo V a.C., discípulo y difusor del pensamiento de
su maestro, Sócrates) en su libro La República propone un conjunto de definiciones
sobre el gobierno, la justicia, la ley y también sobre qué es el conocimiento y la
verdad, que están relacionados.

La ciudad debe ser conducida por los filósofos, es decir aquellos que pueden
contemplar con el pensamiento y saber la verdad acerca de lo que las cosas son
realmente y no lo que parecen. En sus textos, Platón polemiza con el pensamiento de
los sofistas, quienes tenían una idea distinta de la política porque su concepción de la
verdad y del conocimiento era diferente.

Por su parte, el filósofo Aristóteles (384-322 a.C.) definió las polis como comunidades
de ciudadanos organizados por una constitución y agrupados con el fin de llevar una
vida buena.

Para los griegos, el ideal humano incluía la actividad política: consideraban al hombre
como “animal político”, un ser cuya plenitud dependía de la participación en la vida
política de la comunidad y de su interés en el gobierno y los asuntos comunes. Así, la
praxis (acción) política era el medio tanto de la realización del ser humano como de
construcción de una polis virtuosa. Un hombre virtuoso, ser ciudadano, participar en la
comunidad y llevar una vida buena formaban parte de un todo.

OTRAS CONCEPCIONES DE LA POLÍTICA

A lo largo de la historia, la concepción de la política fue cambiando.

Entre los siglos V y XV, durante la Edad Media, la política estuvo vinculada con el
pensamiento religioso, hasta que en el Renacimiento se empezó a pensar en la política
separada de la religión, basada en el poder del Estado, la autoridad y el buen gobierno.

Nicolás Maquiavelo en El Príncipe, una obra de 1513, reflexiona sobre como tener
autoridad y que características debe poseer un gobernante.
Thomas Hobbes, en 1651, propuso una de las primeras teorías sobre el Estado como
autoridad absoluta.

A partir de los siglos XVII y XVIII, después de las revoluciones en Gran Bretaña,
Francia y Estados Unidos –cuando comenzaron a desarrollarse el comercio y la
manufactura, y surgió un nuevo grupo social: la burguesía-, se incorporan nuevos
elementos y preocupaciones al pensamiento político: la desigualdad, la vinculación del
Estado con el mercado y la lucha de clases.

LA POLÍTICA Y LO POLÍTICO

Como ven, a medida que las sociedades se complejizaban, la política incorporaba otros
temas y actividades e iba pasando de una práctica relativa al gobierno de la comunidad
a un espacio donde el Estado se relacionaba con la sociedad civil, con el mercado, con
organizaciones que representaban intereses y sectores, etcétera.

Esos sectores tenían y tienen intereses distintos: nunca existió una sociedad sin
conflictos y las sociedades modernas exacerbaron esta cuestión. Las sociedades
siempre han presentado una distribución desigual: por un lado, están quienes ejercen
el poder y la dominación y, por otro, los desfavorecidos que tratan de mejorar su
situación.

En la tradición marxista, cuya base se encuentra en los trabajos de Karl Marx y


Friedrich Engels del siglo XIX, el conflicto tenía que ver con la dominación de una
clase sobre otra: el poder político estaba encarnado en el Estado, pero se originaba en
la estructura económica en la que unos eran propietarios de los medios de producción
(burguesía), y otros, desposeídos de ella (proletarios).

Para Marx y Engels, la única manera de revertir esa dominación era a través de una
revolución para conquistar por la fuerza al Estado. Una vez logrado ese objetivo, la
revolución anularía la propiedad privada para modificar la conformación del poder
económico y la consecuente dominación de clases. Esta trasformación se presentaba
en la visión marxista como el “interés general” y era el fundamento de la actividad
política.

Con el paso del tiempo, ya en una época contemporánea, la conflictividad social se


tornó cada vez más fuerte y más compleja debido a la presencia de intereses más
variados y por la fortaleza creciente del mercado en detrimento de los Estados.
En la actualidad, predomina la idea de que la política consiste en ejercer el poder y
encauzar el conflicto por medio de consensos en el contexto del sistema democrático
y no a través de la práctica revolucionaria.

De este modo, la política es hoy un ámbito en el que se lucha por el poder, se resuelven
conflictos y se establecen leyes que, a través del Estado, obligan a los habitantes a
actuar de determinada manera con el riesgo de recibir sanciones.

Algunos autores –como la politóloga belga Chantal Mouffe- definen el espacio de


conflictos entre grupos sociales con intereses opuestos en una sociedad con el nombre
de “lo político”, que es diferente de “la política”. Según esta postura, “la política” es el
conjunto de prácticas e instituciones a través de las cuales se crea un determinado
orden, que organiza la coexistencia humana en el contexto de la conflictividad
derivada de lo político.

La política se piensa hoy como el ámbito en el que los desacuerdos pueden tratarse
colectivamente y procesarse hasta lograr decisiones para mantener la convivencia social.

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