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Rev Esp Salud Pública 2005; 79: 133-144 N.

º 2 - Marzo-Abril 2005

COLABORACIÓN ESPECIAL

PRINCIPIO DE PRECAUCIÓN Y MEDIO AMBIENTE (*)

José Manuel de Cózar Escalante


Departamento de Historia y Filosofía de la Ciencia. Universidad de La Laguna

RESUMEN ABSTRACT
El principio de precaución nos exige que en caso de amenaza
para el medio ambiente o la salud y en una situación de incertidum-
The Precautionary Principle and
bre científica se tomen las medidas apropiadas para prevenir el daño. the Environment
No sin dificultades a lo largo de estos últimos años el principio ha ido
afianzándose como un elemento dentro del ámbito político y jurídi- The precautionary principle is a response to uncertainty in the
co de numerosos países y, sobre todo, a nivel europeo e internacio- face of risks to health or the environment. In general, it involves
nal. A pesar de los problemas suscitados, el principio representa una taking measures to avoid potential harm, despite lack of scientific
herramienta valiosa en la configuración de un nuevo paradigma para certainty. In recent years it has been applied, not without difficul-
las políticas públicas requeridas por los desafíos presentes y futuros. ties, as a legal and political principle in many countries, particularly
Palabras clave: Precaución. Medio ambiente. Salud. Legisla- on the European and International level. In spite of the controversy,
ción. Política pública. Riesgo. the precautionary principle has become an integral component of a
new paradigm for the creation of public policies needed to meet
today's challenges and those of the future.

Key words: Precautionary principle. Environment. Health.


Legislation. Public policy. Risk.

INTRODUCCIÓN tuales de contaminación del entorno cercano


que la conciencia ecologista denunciara a
Vivimos una época de graves riesgos y partir de los años sesenta y setenta del pasa-
peligros para las personas y los pueblos que do siglo se suman otros que atañen a una
amenazan la salud, la integridad física y la escala mucho mayor. La era de la globaliza-
propia supervivencia individual y colectiva. ción, se nos dice, globaliza también la mag-
Entre la heterogeneidad de las causas posi- nitud de las amenazas ambientales. Los eco-
bles (accidentes, catástrofes naturales, con- sistemas se degradan a nivel planetario, los
flictos armados, delincuencia, violencia de recursos se agotan a la misma escala. De
género, enfrentamientos étnicos, terrorismo, entre todas las amenazas la del cambio cli-
etc.), las relativas a los problemas ambienta- mático es sin duda la más grave, hasta alcan-
les no son, en absoluto, de un orden menor. zar extremos que nuestra imaginación ape-
A los problemas desgraciadamente ya habi- nas comienza ahora a atisbar de la mano de

Correspondencia:
José Manuel de Cózar Escalante (*) La realización del presente trabajo ha sido posible en parte
Departamento de Historia y Filosofía de la Ciencia. Universi- gracias al proyecto de investigación Protea (Protección
dad de La Laguna ambiental y calidad de la democracia), subvencionado por la
Campus de Guajara, 38200 La Laguna, Tenerife, España Dirección General de Investigación del Ministerio de Ciencia
jcozar@ull.es y Tecnología (SEC2002-02760).
José Manuel de Cózar Escalante

una evidencia científica cada vez menos dis- legislación norteamericana al principio son
cutible. escasas, pero hay todo un conjunto de nor-
mas y declaraciones que de alguna manera lo
Los problemas ambientales que venimos presuponen2.) Sea como fuere, la idea de
arrastrando desde hace décadas, por no ser actuar de manera precautoria en materia
capaces muchas veces de solventarlos satis- ambiental que, por así decirlo, se encontraba
factoriamente, unidos a los nuevos, distintos «flotando en el ambiente», irá concretándose
y más graves todavía, exigen un importantí- paulatinamente en una serie de formulacio-
simo replanteamiento conceptual, metodo- nes políticas y jurídicas que se suceden a
lógico y hasta ético para su adecuada com- partir de aquellas fechas3-5. Ofrecemos una
prensión y resolución. El denominado «prin- tabla con un conjunto de referencias, en
cipio de precaución» surge en este contexto documentos de diversos ámbitos jurídicos,
de búsqueda de herramientas analíticas que donde aparece el principio de precaución o,
puedan ser transformadas en instrumentos cuando menos, un enfoque claramente pre-
políticos, legales y de planeamiento más cautorio.
efectivos. Aunque existe una gran variedad
de formulaciones del principio, el significa- Además de las declaraciones políticas
do del mismo consiste en la idea de que ante oficiales y de la legislación propiamente
la amenaza de daños (considerados suficien- dicha, existe ya una significativa jurispru-
temente serios) al medio ambiente o a la dencia donde se recoge la aplicación del
salud humana no es necesario esperar a principio6-9. Como se observa al revisar la
alcanzar una certidumbre científica comple- tabla 1, el principio ha ido afianzándose y
ta para tomar las debidas medidas protecto- extendiéndose en el ámbito de su aplicación
ras. A menudo no es solo que no sea necesa- a un ritmo creciente10, al menos de manera
rio esperar, sino que es ineludible actuar nominal. La propia Constitución Europea,
antes de contar con esa evidencia científica en proceso de ratificación por los Estados
«incuestionable» (que, por lo demás, en Miembros, lo recoge en el apartado de
rigor nunca se alcanzará). medio ambiente, pero en el mismo también
se recoge que la política ambiental europea
incluye entre sus objetivos proteger la salud
EL DESARROLLO DEL PRINCIPIO de las personas, utilizar los recursos natura-
DE PRECAUCIÓN les de forma prudente y racional y promover
medidas a escala internacional destinadas a
Se suele coincidir en que el principio de hacer frente a los problemas regionales o
precaución (en ocasiones también se emplea mundiales del medio ambiente11. De ser con-
en nuestro idioma la expresión «principio de cebido como un principio estrictamente
cautela») tiene su origen más o menos lejano ambiental, el principio de precaución ha
en el Vorsorgeprinzip alemán, invocado pasado a tener la protección de la salud
hace ya unos treinta años en la antigua Repú- humana como uno de sus principales ejes,
blica Federal, especialmente a la hora de pero en la actualidad incumbe asimismo a
adoptar medidas contra diversos fenómenos cuestiones más amplias que cabe agrupar
de contaminación ambiental. Con todo, se ha bajo la desgastada pero todavía útil etiqueta
argumentado asimismo que los primeros de «sostenibilidad»12,13.
usos del concepto de precaución se produje-
ron al hilo de ciertas decisiones judiciales en No debemos olvidar las formulaciones no
los Estados Unidos en materia de salud, recogidas explícitamente en textos oficiales,
seguridad y medio ambiente con anteriori- aquéllas que aunque no se plasmen necesa-
dad al desarrollo legislativo europeo1. (En la riamente en esos textos son fruto del trabajo
actualidad las referencias explícitas en la analítico de los investigadores que trabajan

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Tabla 1

Principales documentos oficiales en los que se hace referencia a un enfoque precautorio

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Tabla 1 (Cont.)

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Tabla 1 (Cont.)

en el principio de precaución. Esta clase de que ha alcanzado ya proporciones más que


formulaciones abunda, las más de las veces considerables. Se discuten en ella, a menudo
se trata de aportaciones importantes, y cada con prolijo detalle, los aspectos conceptua-
una pone el acento en unos u otros aspectos les del principio, la adecuación de sus varia-
del principio. Por su carácter especialmente das formulaciones y, cada vez más, el nume-
significativo vale la pena citar la llamada roso y heterogéneo conjunto de derivaciones
Declaración de Wingspread sobre el princi- que presenta, políticas, económicas, éticas,
pio de precaución. Dicha declaración fue el legales, etcétera. Por descontado, en un artí-
resultado de una reunión que tuvo lugar en culo de las características introductorias del
enero de 1998 en Wingspread (Estado de presente no es posible hacerse eco de todas y
Winsconsin), en la que participaron científi- cada una de las dimensiones que cubre la
cos, filósofos, juristas y miembros de asocia- literatura15-17, a lo que hay que añadir las fre-
ciones ecologistas de Estados Unidos y cuentes discusiones que sobre el principio
Canadá. En ella se afirma que cuando una surgen en foros no académicos. Con todo,
actividad hace surgir amenazas de daño procuraremos transmitir en lo que resta una
para el medio ambiente o la salud humana, idea suficiente de cuál es el sentido del prin-
se deben tomar medidas de precaución cipio de precaución y de las razones por las
incluso si no se han establecido de manera cuales resulta necesario implementarlo en
completamente científica algunas relacio- las políticas públicas ambientales, pero tam-
nes de causa-efecto14. bién de sus limitaciones y, en particular, de
los problemas que su aplicación conlleva.

LOS CONSTITUYENTES BÁSICOS Si bien no existe un acuerdo unánime


sobre todos y cada uno de los elementos a
El principio de precaución ha generado incluir en el principio, sí se da el suficiente
una literatura especializada que ha ido cre- como para asumir como mínimo que: 1.
ciendo incesantemente en los últimos años y Existe una amenaza de daño (o un «peligro»

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Tabla 2

Posibles elementos constitutivos del principio de precaución

o «riesgo»). 2. Esta amenaza se produce en Algunos de los componentes citados en la


una situación de incertidumbre científica. 3. tabla 2 son suscritos por la inmensa mayoría
Ello trae consigo una acción para prevenir el de quienes de un modo u otro trabajan con el
daño o, en términos positivos, para proteger principio (especialistas, autoridades públi-
el bien en cuestión (la salud, el medio cas, activistas, etc.). Por ejemplo, la inver-
ambiente, etc.). Esta caracterización es no sión de la carga de la prueba. Otros, en cam-
obstante demasiado sucinta y sobre todo bio, son objeto de disputa, en especial los
queda lejos de sugerir el rico conjunto de concernientes a la relación entre principio de
aportaciones que para la elucidación del precaución y análisis y gestión de riesgos
principio se vienen produciendo. Por ello, la (incluido el análisis coste-beneficio). Así,
ampliaremos con otros elementos que se pongamos por caso, en la previamente men-
invocan a menudo, aunque los matices sobre cionada Declaración de Wingspread se sos-
los mismos varíen o no obtengan una acepta- tiene que los enfoques habituales basados en
ción absoluta (tabla 2). la evaluación de riesgos no han logrado pro-

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teger de una forma adecuada la salud huma- ción nos prepara mejor para afrontar los pro-
na y el medio ambiente. Se sugiere con ello blemas complejos y globales que, cada vez
que el principio de precaución establece un más, constituyen la nueva realidad de nues-
marco de comprensión y actuación muy dis- tro planeta. ¿Cómo sería ello posible? Pues
tinto al de la evaluación y gestión del ries- empleando una «nueva lógica»21, parte de la
go18,19. Este último ha sido ampliamente cri- cual queda recogida en las recomendaciones
ticado por abusar de unos planteamientos contenidas en la tabla 2. Se trataría ni más ni
tecnocráticos, los cuales son difíciles de menos que de aplicarlas todas o al menos un
disociar de tomas de posición previa de tipo conjunto suficientemente relevante de las
lisa y llanamente político. Y lo que es peor: a mismas. Y en caso de error la principal ven-
menudo ocultan bajo un ropaje técnico esas taja del enfoque basado en la precaución
tomas de posición, cuando no unas estrate- reside en el hecho de que siempre se permiti-
gias de dudosa moralidad para la imposición ría a las autoridades públicas equivocarse en
de decisiones. Sin embargo, a diferencia de favor de la seguridad, lo cual no es poca cosa
la Declaración de Wingspread, otras formu- cuando la magnitud del año puede ser más
laciones conectan directamente ambos con- que preocupante. La historia nos presenta un
ceptos (el de precaución y el de riesgo) o, en negro listado de casos que podrían haberse
otras palabras, abogan por un enfoque no tan evitado o al menos paliado de haber adopta-
«rupturista», más conservador. Por ejemplo, do con anterioridad un enfoque basado en la
en la Comunicación de la Comisión Europea precaución22.
sobre el recurso al principio de precaución se
acepta que la aplicación del mismo tiene Además el principio de precaución apunta
lugar cuando la incertidumbre científica no a una cuestión primordial acerca de la legiti-
permite una evaluación completa del riesgo midad con la que las autoridades deciden
y cuando los responsables consideran que el sobre cuestiones que nos afectan a todos.
nivel elegido de protección del medio Como ha sugerido el filósofo Jean-Pierre
ambiente o de la salud humana, animal o Dupuy, el problema fundamental planteado
vegetal puede verse amenazado. Pero nótese por el principio de precaución no sería tanto
que se habla de «evaluación completa», no el de la falta de conocimientos como el de la
de imposibilidad de evaluación del riesgo. Y falta de credibilidad (de los expertos y los
a renglón seguido se afirma tajantemente: La responsables públicos) ante el escenario de
Comisión considera que las medidas de una posible catástrofe23. El principio de pre-
aplicación del principio de precaución se caución constituiría una pieza importante a
inscriben en el marco general del Análisis de la hora de proporcionar a la sociedad civil
Riesgos, y más particularmente en la gestión una vía para exigir responsabilidades a los
del riesgo20. gobiernos y a las industrias por sus acciones,
dejar oír su voz en las cuestiones que les ata-
ñen y «democratizar el conocimiento exper-
SIGNIFICADO Y VALOR to». Planteando la cuestión en los términos
DEL PRINCIPIO más amplios, se trata de mejorar las políticas
públicas tanto desde el punto de vista de la
Llegados a este punto deberíamos pregun- efectividad y la eficiencia como, repetimos,
tarnos las razones para tomarse tantas de su nivel de calidad democrática24,25. La
molestias con el principio de precaución o, regulación de las sustancias químicas26 o de
en otros términos, cuál es su auténtico signi- los organismos modificados genéticamen-
ficado y el valor que puede poseer para la te27 son asuntos que se citan frecuentemente
lucha contra los problemas ambientales (en en este contexto, y este planteamiento habría
sentido amplio) que aquejan nuestro mundo. de aplicarse sin más demoras a las nanotec-
Se ha sostenido que el principio de precau- nologías28.

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Tabla 3

Críticas más frecuentes contra el principio de precaución

El principio de precaución supone, por las acciones y procesos se automaticen, que


tanto, un cambio de valores29,30 dando pri- los fines iniciales acaben coincidiendo con
macía al respeto (por los derechos de los ciu- el nuevo medio que acaba de emerger. Nada
dadanos, las generaciones futuras y el entor- de ello ocurre con la moralidad. En esta esfe-
no natural) y la humildad (en lugar de la ra nada queda encerrado en una caja negra
arrogancia que ha presidido habitualmente como algo en apariencia aproblemático, lis-
las relaciones de los humanos con el mundo to para ser utilizado. Al contrario, la preocu-
natural y nuestras creencias en la posibilidad pación persiste, los escrúpulos reaparecen,
de una comprensión y control científico-tec- las cajas negras se abren perennemente. En
nológico del mismo). este contexto, continúa el autor, el principio
de precaución no significa sencillamente
En un artículo de Bruno Latour, reputado que no debemos actuar hasta estar seguros
sociólogo de la ciencia y de la tecnología, se sobre el curso a seguir, pues tal visión del
hace una referencia tangencial al significado mismo nos retrotraería de nuevo al ideal tra-
del principio, la cual resulta a pesar de su dicional de dominio y conocimiento. Sim-
brevedad muy iluminadora31. Latour esta- plemente habría que esperar a obtener más o
blece una clara distinción entre la mediación mejores conocimientos. Pero la cuestión es
tecnológica y la moralidad. La tecnología que se espera conocimiento sobre algo que
moderna opera «cerrando cajas», haciendo por su propia naturaleza escapa para siempre
que los medios queden ocultos a la vista, que a un dominio completo. Ese «algo» es, en el

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artículo citado, la tecnología, pero podemos ción, como las de la citada comunicación de
añadir nosotros: igualmente la naturaleza, y, la Unión Europea en el año 2000. Por cierto
¿por qué no? la realidad toda. El significado que los desencuentros y las disputas entre
del principio de precaución reside entonces los representantes de la Unión Europea y
en lo contrario a lo que aspira el enfoque tra- los de los Estados Unidos en relación al
dicional de resolución de problemas. Se tra- sentido y justificación del principio se han
ta de reconocer la imposibilidad de conver- convertido ya en algo paradigmático38,39,
tirlo todo en una caja negra bien sellada. Nos siendo el episodio más reciente el de las
pide mantener constantemente la reversibili- disputas ocasionadas por una nueva regula-
dad de lo que pretendíamos, a toda costa, ción europea de las sustancias químicas,
«empaquetar» (en una innovación perfecta- denominada REACH (Registration, Evalua-
mente eficiente, en un saber completamente tion and Authorisation of Chemicals). La
cierto). La nueva forma de contemplar los reglamentación, que aboga explícitamente
problemas la encontramos así en la noción por un enfoque precautorio, está encontran-
de un producto reciclable, de un desarrollo do una respuesta airada entre numerosos
sostenible, de la trazabilidad de las operacio- representantes de la industria y responsables
nes productivas. Igualmente en la preocupa- públicos estaudonidenses40. Sin embargo, a
ción por la transparencia de las actuaciones y pesar de declaraciones más o menos rim-
en la demanda de responsabilidades. bombantes, también hay que advertir las
grandes diferencias que con frecuencia se
observan entre las formulaciones teóricas
LOS PROBLEMAS SUSCITADOS del principio y las que se recogen en los tex-
tos oficiales, por lo general más «débiles»,
Como se indicó en una sección anterior, se no digamos ya la distancia existente entre la
plantean serios problemas de aplicación del «letra» de los documentos y la realidad de su
principio de precaución, problemas deriva- aplicación (o falta de aplicación) posterior.
dos tanto de la diversidad de formulaciones Además, distintas legislaciones basadas en
cuanto de la interpretación que se efectúa de distintos enfoques del riesgo y la precaución,
los elementos que lo constituyen. La polémi- se superponen en las legislaciones naciona-
ca acerca de cuál es la mejor formulación del les, europeas e internacionales, dando lugar
principio no es una cuestión baladí, pues de a una maraña de normativas que en unos
dicha formulación dependen directamente casos resultan complementarias pero en
las consecuencias prácticas, en particular las otros pueden entrar en conflicto.
legales, de la aplicación de dicho principio.
Si bien el cuerpo legislativo aumenta, se De cualquiera de las maneras es importan-
establecen directrices más precisas y se te transmitir la idea de que el principio no
cuenta ya con una experiencia significativa actúa como algo que coarta, que paraliza,
en el empleo del principio, continúan las que frena la acción. Al contrario, genera
dificultades derivadas de la exigencia de tor- nuevas soluciones, nuevas posibilidades,
narlo operativo32 y las críticas contra su nuevas alternativas. En todo caso se esgrime
empleo33-35. para intentar evitar aquello que, según los
indicios disponibles y los valores comparti-
Se han elaborado líneas de respuesta para dos, debe ser evitado.
cada una de estas críticas36. Hay que decir
que desde las primeras formulaciones y La realización plena de una gobernanza
defensas del principio ha pasado suficiente participativa encuentra numerosos y compli-
tiempo como para que se haya precisado cados obstáculos, pues requiere amplios
notablemente37 e incluso desde hace años cambios en términos de las prácticas profe-
existen directrices oficiales para su aplica- sionales e institucionales actualmente exis-

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José Manuel de Cózar Escalante

tentes, así como el desarrollo de nuevos pro- futuro, probablemente a un ritmo acelerado,
cedimientos para compartir información, debido a que las actividades tecnológicas
deliberar y alcanzar acuerdos41. Los estudios que los causan aumentan en intensidad,
sobre la respuesta, en términos de políticas variedad y capacidad transformadora.
públicas, a enfermedades con presuntas cau-
sas ambientales sugieren que la articulación Las generaciones futuras se ven expuestas
de los ciudadanos como movimiento social a asumir las consecuencias, acaso terribles,
sigue siendo, a la postre, más efectiva que la de las decisiones equivocadas que la presen-
evidencia científica disponible42. Al impli- te está tomando a partir de modelos de análi-
car otra manera de pensar y actuar el princi- sis y gestión limitados, cuando no simple-
pio de precaución genera tensiones que se mente mal concebidos. Por tanto, viviendo
acrecientan por aplicarse con frecuencia dos como vivimos en una era de riesgo, incerti-
modelos distintos43 que se superponen. Pero dumbre, indeterminación e ignorancia, don-
a pesar de todas las críticas, problemas y de las repercusiones de las decisiones erró-
resistencias, lo que podría estar emergiendo neas, del egoísmo o de la negligencia des-
ante nuestros ojos es todo un nuevo paradig- bordan los mecanismos de control usuales,
ma para la administración y el gobierno de resulta una enorme irresponsabilidad no
las cuestiones ambientales, incluidas las hacer todos los esfuerzos posibles para ope-
repercusiones para la seguridad, la salud y el rar un cambio en nuestras prácticas, con
bienestar de los seres humanos44. objeto de que mejoren las perspectivas futu-
ras del bienestar y la supervivencia de nues-
tra especie y de la Tierra en su conjunto. El
CONCLUSIONES principio de precaución, sin ser una panacea
(que por lo demás no existen), es uno de los
Los seres humanos estamos provocando
nuevos instrumentos que han de utilizarse
un cambio global de una escala inconcebible
sensatamente a tal fin antes de que la situa-
hace tan sólo unos años. Algunas de las
ción alcance unos extremos de pesadilla. Por
transformaciones operadas en el planeta por
causas antropogénicas son ya sobradamente desgracia esta manera de expresarlo puede
conocidas: el agujero en la capa de ozono, la ser todo menos retórica.
alteración de los ciclos bioquímicos, el
colapso de las pesquerías, los compuestos
sintéticos que contaminan la vida animal y BIBLIOGRAFÍA
amenazan la salud de las personas y, por
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fenómenos sean conocidos no significa en ge (Mass): MIT Press. En prensa.
modo alguno que resulte sencillo establecer
con exactitud los efectos resultantes de las 3. Riechmann J. Introducción: un principio para reo-
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