Los juicios orales durante la pandemia COVID tienen una serie de limitaciones y retos únicos.

Muchos tribunales han tenido que adaptar sus procesos para cumplir con las regulaciones
sanitarias y las restricciones relacionadas con la pandemia. En algunos casos, se han detenido
por completo las audiencias judiciales, mientras que en otros se han llevado a cabo virtualmente.

En los casos en los que se han llevado a cabo juicios orales virtuales, los procedimientos han
sufrido cambios significativos. En lugar de encontrarse en una sala de tribunal, los abogados,
testigos y jueces se conectan a través de una plataforma de videoconferencia. Se han establecido
reglas para garantizar la privacidad y la seguridad de las conexiones a internet.

Una ventaja de los juicios orales virtuales es que permiten continuar con el procesamiento legal, a
pesar de las limitaciones de la pandemia. Los juicios virtuales también pueden ayudar a reducir los
costos de los viajes para los abogados y los testigos, lo que a su vez puede disminuir el costo total
del proceso.

Por otro lado, un desafío de los juicios orales virtuales es que no es lo mismo que un juicio
presencial. La calidad del audio y el vídeo pueden ser un problema, lo que dificulta la comprensión
del juego de las palabras y los matices de la comunicación no verbal. Además, la falta de conexión
y el contacto visual puede reducir la comunicación entre los participantes e impedir la transmisión
emocional.

Ventajas:

- Permiten seguir adelante con la celebración de juicios incluso en una situación de pandemia. Los
juicios orales virtuales o híbridos pueden ayudar a reducir el riesgo de contagio, garantizando al
mismo tiempo el acceso a la justicia.

- Los juicios virtuales pueden ahorrar tiempo y recursos. Al no requerir desplazamientos por parte
de los distintos implicados, los juicios orales virtuales pueden resultar en procesos más ágiles y
económicos.

- La utilización de tecnología remota puede aumentar la accesibilidad para las personas que
residen en localizaciones más lejanas o que tienen limitaciones de movilidad.

Desventajas:

- Los juicios orales virtuales pueden tener algunas limitaciones, ya que el contacto virtual no es lo
mismo que el presencial y puede dificultar la comprensión de ciertos matices y aspectos de la
comunicación no verbal.
- El hecho de que los juicios orales se lleven a cabo de manera virtual puede generar problemas
como interrupciones en la conexión, problemas técnicos, filtraciones de información, etc.

- La tecnología puede generar problemas de seguridad y privacidad que no existirían en una

situación de juicio presencial.

- La falta de conexión personal durante los juicios puede dificultar la transmisión de emociones y
enfatizar una sensación de distancia, especialmente en casos donde los manejos de emociones
resultan imprescindibles en la obtención de justicia.