1. Pelado: El pelado se realiza de forma manual. Se puede considerar que se
necesitan de 6 a 8 obreros para preparar cerca de 1000 kg de materia prima. 2. Inmersión: Esta inmersión en solución de dióxido de azufre al 1%, por cinco minutos, se hace con el fin de evitar la oxidación del plátano y los posteriores cambios no deseados que se pudiesen dar. 3. Cubileteado: Los plátanos ya pelados se cortan con cuchillo o con máquinas troceadoras para obtener trozos más pequeños que pueden ser en forma de cubos o rodajas. Este paso es necesario para aligerar el proceso de secado. 4. Tratamiento térmico: Este tratamiento se hace con el fin de extraer humedad. La deshidratación s lleva a cabo en secadores. 5. Molienda: Se puede utilizar un molino de martillos, por el cual se pasan los trozos de producto seco para ser finamente divididos hasta partículas pequeñas, formándose así la harina. 6. Cernido: La harina que se obtiene tiene diferentes tamaños de partícula y partículas extrañas, por lo que pasa por un tamiz para obtener las diferentes fracciones por separado. De esta forma se llega a obtener un producto más fino. 7. Empaque: Una vez lista la harina se puede empacar. Las cantidades para colocar en cada empaque y el tipo de este dependen del tipo de cliente, pero la cantidad que se usará frecuentemente será de 600 gramos. 8. Almacenamiento: Una vez listas las bolsas, se llenan debidamente para evitar que entre humedad del medio al producto y también que se vaya a contaminar con insectos o materias extrañas.