Está en la página 1de 1

San Marcos

26/11/2021

Hola hermana, ya que la vida corre tan rápidamente, hoy quiero


dedicarte unas cuantas palabras que nacen de mi
corazón. Quiero aprovechar este momento de inspiración para
expresarte mis sentimientos.

Sé que muchas veces no suelo ser muy expresiva, pero


precisamente no es porque no quiera sino porque no sé de qué
forma podría dirigirme a ti.

Ni tu ni yo tuvimos en nuestro poder la decisión de ser hermanas,


fue Dios quien así lo dispuso, fue Él quien, con sus misterios,
pero sabia decisión nos eligió para que compartiéramos el mismo
padre, por un tiempo el mismo hogar, la misma sangre.

Nos hemos visto crecer una a la otra, hemos tenido muchos


cambios a lo largo de nuestra vida, cambios físicos, cambios de
pensamientos, de gustos, de personalidades, en fin. Sin
embargo, a pesar de todos estos cambios hay algo que debe
permanecer intacto; el bello recuerdo de nuestra infancia
compartida, en la que disfrutamos juntas de los juegos, las risas,
los programas de televisión entre otras cosas.
El día de hoy también quiero humildemente pedirte perdón por
las ocasiones en las que pude haberte lastimado con mis
palabras, con mis acciones o incluso con mis actitudes.
Espero que Dios y la vida nos sigan regalando muchos
momentos juntas. Tal vez estemos separadas por alguna
distancia o quizá las responsabilidades de nuestras vidas nos
impidan vernos más a menudo, pero a pesar de la distancia y de
las responsabilidades quiero decirte que te llevo siempre en mi
corazón, con un amor grande, ese amor que nos hace volver a
estar unidas a pesar de las diferencias que a veces nos separen.
Con cariño tu hermana XXXXXX

También podría gustarte