Hola Jessica,

Esta carta la hago con amor para expresarte lo importante que es este paso que vas a dar

El bautismo, es un simbolismo de tu renacimiento en Cristo, de una vida nueva mas pura y es un

sacramento de acercamiento a Dios.

Para mi es muy especial este momento de tu vida en el cual es una decisión tuya, el aceptar a
Dios.

Definitivamente los tiempos de Dios Son perfectos. Lo a demostrado a lo largo de tu vida y de

todas tus vivencias, Dios nunca te abandonó inclusive en los mas difíciles y en los que mas lejos
de el estuviste.

Recuerdo lo difícil que fue para ti el accidente de tu papá, y como tu vida dio un giro radical pero
siempre fuiste fuerte, supiste reconocer los errores y aceptarlos.

Desde allí entendí el significado del perdón.

A pesar de las peleas con tus padres, quiero que estés convencida que Dios no se equivoco en
colocarlos a ellos.

Ellos te aman con su vida entera y están muy orgullosos de ti. Nunca dudes eso.

Mi amistad contigo fue cosechada con el tiempo, hemos pasado tantas situaciones difíciles y
alegrías que puedo decir que eres muy especial para mi en todos los aspectos.

Tu alegría es mi alegría y tus tristezas las mías. El tiempo nos a distanciado un poco pero incluso
en eso la vida nos une. Gracias por todos los ánimos que me distes y me das, y por recordarme
lo importante que es estar en paz con Dios por sobre todo.

Dios te a llenado de muchos dones que te tocan cultivar a lo largo de tu vida, el te conoce a la
perfección y tiene grandes cosas para ti. Eso siempre lo supe desde que te conocí, creetelo y
entrégate a el, hazlo todo en torno a el. Entrega tu noviazgo a el y verás las grandes cosas que
tiene para ustedes.

Son una pareja que a pasado por mucho y ver esa transformación a mi me llena de mucha alegria
y esperanza de saber que estas en buenas manos. Que Dios te dio a tu ideal y que se aman.

No es mucho lo que puedo transmitir pero espero sientas al espíritu Santo en tu corazón y
guardes este momento en tu corazón para siempre.

Te amo Jessica Iveth Navarro Santamaría y una vez más agradezco a Dios por ponerte en mi vida
como mi amiga y mi hermana del alma.

Atentamente,

Rebeca.