Mariana Itzel Hernández Hernández

Biografía

Nació el 06 de abril del 2002, en Querétaro, México. La segunda de tres hijas, cuyos
padres son Claudia Yolanda Hernández Pinto y Rafael Hernández García. Su padre
es un destacado ingeniero químico en la empresa de Mission Hills y su madre, una
entusiasta mujer, religiosa y artística. Tiene 2 hermanas: Karen Grisel, que es 5 años
mayor que ella y Andrea, un año menor. Su atmósfera familiar tiene tintes
disfuncionales, en donde no existe comunicación entre sus padres y la cooperación
es casi nula. Los roles están confusos; la hija menor regaña a la mamá, la mamá
hace caso a los consejos de Mariana, y el padre, es un hombre ausente. Toda familia
tiene sus altos y sus bajos, y los altos de esta familia son el cariño que se tienen y la
presencia de Dios, fuente de apoyo para salir o soportar las tormentas.

En su historia familiar, Mariana tiene un rol de “base”, es quien consuela a su madre,

platica con su hermana mayor acerca de lo que siente, ayuda a estudiar a su
hermana menor y le ayuda con sus tareas, y atiende en lo más posible a su papá.
En las peleas de hermanas la mayoría de las veces es neutral, pero en las peleas de
sus padres se pone más del lado de su madre ya que pasa más tiempo con ella, y
eso causó una ruptura entre Mariana y su padre.

Mariana desarrolló un interés temprano por la música, sin embargo, al sufrir su padre
de migraña toda su vida, escuchaba constantemente de su padre “Mariana habla
más bajo”, “no hagas ruido”, “practica cuando yo no esté”. Aún así, Mariana no se
desanimó con la música, entró a un coro a los 10 años y permaneció hasta
convertirse en la coordinadora de un coro juvenil desde los 16 años. La música fue
su elemento, lo que la conectaba con su alma, con la que expresaba, oraba, lloraba
y reía. Estuvo en grupos versátiles, como “Relato 52”, en donde tocaba en bodas,
fiestas, cumpleaños y reuniones, desarrolló confianza en el escenario y se dio un
poco de más crédito a sí misma.

A los 12 años lidereó un grupo de jóvenes, en donde compartía temas acerca del
crecimiento personal, la integridad de la persona y la importancia de tener a Dios en
el diario vivir. Desde pequeña mostró un gran interés por los demás, una niña con
mucha empatía y comprensión por los problemas de los que la rodeaban.

En su adolescencia participó en muchos retiros vocacionales católicos, charlas

encaminadas a ser feliz y libre de la mano de Dios y grupos juveniles con temas
actualizados, lo que fue algo muy importante e influenciable en ella, ya que vivió su
juventud de manera muy diferente a otros, siempre buscó cuidar las películas que
veía, la música que escuchaba, los temas que aprendía y los amigos que
influenciaban en ella, lo que tal vez psicológicamente es beneficioso, ya que ella
pensaba que todo lo que está alrededor puede sucumbir en el inconsciente, por lo
que los aspectos del ambiente que ella pudiera controlar siempre intentaba que
fueran aspectos positivos. Pensaba esto porque en muchas ocasiones en sus
sueños aparecían personajes de películas que veía, pero que sólo tenían una
pequeña escena o eran insignificantes, por lo que se preguntaba el efecto que podría
impactar en ella no sólo psicológicamente sino también espiritualmente, lo que ve,
escucha y aprende, de ahí su teoría “Cuida tus sentidos” ya que todo puede influir
en la personalidad.

Durante los 2 últimos años de preparatoria pasó por un momento difícil a lo que ella
lo llamó “piloto automático”, ya que sentía su vida muy rutinaria, sin sentido y sin
ninguna dirección, se aisló de sus amigos y familia, se salió de todas las actividades
en las que era parte y las que dirigía, se alejó de la oración y al final cayó en un
profundo sentimiento de tristeza, sabía que algún iba a pasar por un momento así
por lo que desde antes se había prometido no dejarse estancar y buscar ayuda, y
ese constante pensamiento la llevó a buscar orientación en el Santuario de
Schoenstatt con una de las hermana de María, y ayuda psicológica. La orientación
que recibió en Schoenstatt tuvo un gran impacto en ella, ya que la pedagogía de lo
que enseña el fundador de Schoenstatt es acerca de la libertad y es muy
organísmico.

A los 18 años, Mariana decide estudiar la Licenciatura en Psicología en la

Universidad del Valle de Atemajac (UNIVA) lo cual fue la base para interesarse en
los temas del desarrollo personal. En el año 2024 ingresa a la Maestría en
Psicoterapia, lo que le permite acompañar a personas y darse cuenta del valor de
los procesos terapéuticos para modificar pensamientos y conductas y en
consecuencia desarrollar una vida mas plena. En el año 2026 inicia el Doctorado en
Desarrollo del Potencial Humano y una especialidad de terapia de pareja y de familia,
así como un diplomado en musicoterapia.

Como parte de sus tesis para Maestría y Doctorado, inicia diversas investigaciones,
que la llevaron a descubrir su gusto y facilidad por la escritura y así comienza su
camino como escritora de los libros “Fractura familiar: fractura social”, “Cuida tus
sentidos” y “Cómo sanar tus relaciones familiares”.

A los 30 años, decide ingresar por 5 años al Instituto Secular de las Hermanas de
María en Schoenstatt, Alemania, donde funda una organización civil dedicada a la
contención y acompañamiento de las familias.
Marco conceptual

Atención.
Se refiere a un acto voluntario de la actividad mental o de los sentidos a un
determinado estímulo u objeto mental o sensible. Mariana cree que en donde se centra
la atención, se centra la energía.

Creencias.
Completo crédito que se presta a un hecho o noticia como seguros o ciertos.

Discernir.
Es una virtud ligada a un juicio moral que permite al individuo valorizar si una acción
es buena o mala.

Estímulos externos.
Todo aquello que provoca una respuesta. Es el punto de interacción del sistema
humano con el ambiente.

Estructura del yo.

Es la organización interna que asegura la interacción dinámica entre los procesos
intrapsíquicos (emociones y pensamientos) y las actividades externas manifiestas
(comportamientos). Para que sea una estructura sólida, el yo debe estar integrado y
ser congruente.

Filtrar.
A partir del discernimiento adquirido a través del repertorio de valores, y el juicio crítico,
el sujeto es capaz de separar lo que aporta a su integridad humana o a la sociedad y
lo que no.

Identidad.
Es nuestra comprensión de quiénes somos y quiénes son los demás, y
recíprocamente, la comprensión que los otros tienen de sí y de los demás, incluidos
nosotros.

Inconsciente sensorial.
Es toda aquella información que captan los sentidos y de los cuales no somos
conscientes.

Juicio crítico.
Capacidad para interpretar o exponer un juicio sobre la calidad.

Mensajes subliminales.
Señal diseñada para pasar por debajo de los límites normales de percepción.

Personalidad. Es una construcción psicológica en la cual el individuo instaura sus

creencias de sí mismo y de su realidad. Es el conjunto de peculiaridades que
posee un individuo que lo caracteriza y lo diferencia de los otros, determina su
conducta, lo cual también permite predecir su respuesta ante una determinada
circunstancia. La personalidad puede ser clasificada por las actitudes o por la
parte subjetiva de la salud mental del individuo, bien sea por la autoestima, el
juicio que realiza el individuo así propio, el bienestar que presenta, entre otros
puntos.

Relativización.
Acción y resultado de relativizar. Se refiere a
considerar un asunto introduciendo determinadas circunstancias que, en general,
disminuyen su importancia o valor

Repertorio de valores.
Son una serie de elementos de valor inculcados por los padres y la familia, mismos
que sirven como intermediarios para el discernimiento de la bondad o maldad de los
actos. Pueden ser amor, justicia, solidaridad, verdad, responsabilidad, compromiso,
equidad, honor, respeto, etc.

Sensorial.
Se refiere a la capacidad del ser humano para percibir el mundo a través de los
sentidos corporales.

Sentidos.
Son el mecanismo fisiológico de la sensación, que permiten obtener información de lo
que está a nuestro alrededor, así como determinados estados internos del organismo.
Esta teoría se enfoca en 2 sentidos: la vista y el oído.

Super yo.
Concepto Freudiano en donde los padres prodigan al niño de cuidados y protecciones
del mundo exterior, con el fin de instaurar en él normas y reglas que lo encuadran en
un contexto y cultura determinados. Conforme el niño va creciendo e introyectando
estas reglas y normas y por medio de la renuncia edípica se instaura el superyó, que
pasa a cumplir las funciones de los padres sin que estos estén físicamente presentes,
es decir, ya hay una representación de los padres, y del otro significativo, en la instancia
psíquica conocida como superyó. Es entonces cuando el niño ha alcanzado una cierta
autonomía y control interno de las pulsiones.

Triada de la personalidad. Es la composición psicológica del ser humano:

Emociones, pensamientos y conductas. Esta triada Mariana no la considera como
fenómenos aislados, sino que se influyen continuamente al estar interconectados. De
estos tres va a depender nuestro equilibrio personal.

Vínculo afectivo.
Concepto relacionado a la teoría de Bowlby. Se refiera a un lazo afectivo entre el
niño y quienes le cuidan, mediatizado por sentimientos y en interacción con otros
sistemas de conducta.
 Teoría
“Cuida tus Sentidos”

El desarrollo emocional e intelectual de un niño se vale tanto del vínculo afectivo

recibido en sus primeros años de vida como en el ambiente social en el que se
encuentra. Los niños son potencia de la sociedad, y la familia es el núcleo de esa
sociedad, en donde se define la mayor parte de la integridad de una persona. Sin
embargo, hoy cientos de familias se fracturan causando mayor vulnerabilidad en los
hijos. Los padres son como un caparazón, el cual protege al niño del exterior y le da
las herramientas necesarias para poder relacionarse con el mundo, en el cual hay
demasiada información incontrolable, diferentes formas de pensar, confusión, caos,
información falsa, movimiento, felicidad efímera, publicidad, mercados, muerte,
actos egoístas, injusticias, entre otras muchas cosas de las que hay que tener una
estructura fuerte para comprenderlas, analizarlas y discernirlas, capacidad que
deviene de la familia ya que ésta da una pauta de lo que es bueno y malo, de los
actos egoístas y los solidarios, pero, ¿qué pasa si esta estructura familiar también
está siendo confundida y relativizada?

Esta relativización presenta argumentos no siempre apegados a la realidad a fin

de justificar un medio. Estamos en una época relativista en la que nada es bueno y
nada es malo, en donde no hay definición de familia, en donde no hay una sola
identidad, en donde asesinar a un bebé antes de nacer es válido si lo permite la ley.
A lo largo de mi vida me ha tocado presenciar debates con mis compañeros de
estudio, en donde una situación realmente inmoral, la han logrado tergiversar y
cambiarle la cara a la moneda, una opinión puede valer más que una razón. Y es,
otra vez, el repertorio de valores inculcados y vividos en la familia, los que
permiten adoptar una opinión como verdad, o, valorar esa opinión y discernirla.
Con base en la teoría Freudiana, el ambiente familiar juega un gran papel en el
proceso de la instauración del “super yo”, debido a que si es facilitador el niño tendrá
un control de impulsos como el surgimiento de la culpa, lo que permite entender lo
bueno y lo malo, así como también el ambiente familiar es un parteaguas en las
relaciones sociales, donde el niño adquiere confianza suficiente para las siguientes
relaciones, la independencia y la autonomía (2018).

En este sentido, la familia contribuye a la formación de la personalidad con juicio

crítico que permite valorar las circunstancias que presenta la vida y brinda un
repertorio de valores sólidos para el bien común, que ayudarán en un futuro para
resolver retos, filtrar la información del exterior y el interior, y al mismo tiempo, no
caer en el agua de alta marea que nos aleja de la autenticidad del “yo”.

En este sentido, se ha de proteger al niño y adolescente de lo que ve y escucha en

los medios de comunicación y en las redes sociales que hoy en día son parte de la
cotidianeidad, que han llegado hasta los comedores en una cena familiar, en las
fiestas, en los últimos 20 minutos antes de dormir y los primeros 10 minutos al
despertar. Así, los niños y jóvenes están en constante acceso a información, que
no muchas veces es segura, y si el niño no cuenta con un suficiente repertorio de
valores impactará sin ningún
filtro en su inconsciente lo que formará su personalidad. Por ejemplo, un estudio de
hace más de 10 años en EU, reveló que un norteamericano promedio recibe más
de 1500 impactos diarios que compiten por meterse en su mente; y estos impactos
de los medios de comunicación y redes sociales son distractores que nos llevan a
lugares, situaciones y personas que no deseamos, que nos llevan a enfrentar
situaciones o retos que no son los nuestros, a preocuparnos por causas que no
están en nuestro control, y todo ello nos distrae para desarrollar el potencial de
nuestra personalidad.

Esto es así, porque somos seres sensoriales, que a través de lo que observamos y
escuchamos captamos información de nuestro alrededor, muchas veces
inconscientemente, a esto lo llamo inconsciente sensorial.

Inconsciente sensorial.

Existe un sinfín de información en nuestro ambiente que ofrece mensajes al

receptor, como un anuncio para vender zapatos o un comercial en Youtube para
que te registres a una clase de piano, este tipo de información es información
directa. Y, por el contrario, la información indirecta es aquella cuyo contenido
principal aparece oculto, como mensajes subliminales, y que no alcanzamos a
comprender de manera consciente. Esta información que recibimos del mundo, ya
sea directa o indirecta, impacta considerablemente en la formación de nuestra
personalidad, son señales y signos codificados que están en la sociedad y en la
cultura y al mismo tiempo, en las redes sociales y medios de comunicación. Esta
información puede ser tanto negativa como positiva, y si no hay una estructura sólida
en la persona, con capacidad de discernimiento, no se filtrará de manera congruente
en relación con el desarrollo personal.

La personalidad no sólo se forma en los primeros años de vida, sino que considero
que está en constante movimiento ya que va de la mano con el continuo aprendizaje
a través de nuestras experiencias y la información que recibimos a través de ellas.

De esta manera, los sentidos son las herramientas para nuestra percepción de la
realidad, lo que vemos, lo que escuchamos, lo que sentimos, e incluso lo que olemos
y degustamos, nos permiten tener acceso a toda la información del mundo en que
vivimos, funcionando por sí mismos, pero nosotros podemos elegir lo que vemos y
escuchamos conscientemente hacia donde queramos enfocar nuestra atención.
Así, para este trabajo, me enfocaré en los sentidos de la vista y el oído.

La música, las películas, los comerciales, los anuncios, los videojuegos, los libros,
las series, los videos, los artículos, etc. nunca habían estado al alcance de todos
como lo están ahora. Es raro que una persona no lleve un teléfono celular consigo.
En esa pequeña cajita digital está toda la información al alcance, a la hora y lugar
que quieras, no sólo jóvenes y adultos, sino que los niños también están siendo
parte de esta facilidad de información, muchas veces sin ningún cuidado.
Es por ello la importancia de filtrar toda la información que llega a nosotros, ya que
tiene una gran influencia en nuestro sentir, pensar y actuar, y en tanto en nuestra
personalidad. Somos seres que al experimentar y aprender algo podemos cambiar
nuestras estructuras, y si esa información no nos beneficia, podríamos llegar hasta
a una pérdida de identidad. Por ejemplo, los medios de comunicación influyen total
o parcialmente en los ideales, sueños y pensamientos de las personas. Las redes
sociales, llevan consigo un mensaje manipulador, condicionando el ser de una
persona y limitando su personalidad, basta señalar el caso de las cuentas de
Instagram de muchos influencers que venden la idea de que si te vistes como ellos
tendrás una ganancia en la sociedad y contribuirá con tu autorrealización y felicidad,
distorsionando el sentido de vida de una persona de acuerdo con su personalidad
auténtica.

Cuida tus sentidos.

Esta teoría se centra en la influencia del mundo exterior en la persona, a lo que

estamos expuestos y muchas veces no tenemos las herramientas necesarias para
filtrar la información, lo que puede confundir nuestra identidad. Esto es así porque
nuestro cerebro ha diseñado y construido redes neuronales que mediante la
sinapsis responden ante el estímulo externo, esto es, lo que percibimos mediante
nuestros sentidos, por tanto, el pensamiento y la lógica se componen de la
información de la cual se alimenta a la mente, y desde aquí se construye la noción
de verdad, con la que se procesa la realidad y que en último término constituye la
personalidad.

Cuida lo que escuchas.

Hoy los científicos confirman que el oído es el más capacitado de los estímulos
sensoriales cerebrales: el 50% corresponde al oído, que despierta e impulsa al
cerebro, además de protegerlo contra el deterioro (2003). Y hablando de lo que se
escucha, tomaré como objeto de estudio a la música. Ésta ha tenido una gran
influencia en la sociedad a través de los años. Aristóteles decía “la música imita
directamente las pasiones o estados del alma”. Por esto, cuando las personas
escuchan determinado género musical se sienten invadidos por estos sentimientos.
La música siempre ha sido uno de los principales elementos para la formación
cultural, que pueden ser de gran influencia en las emociones, pensamientos y
conductas de los seres humanos, esto es, en su personalidad.

Ésta ha tenido grandes cambios que han influenciado a cada una de las
generaciones, recayendo generalmente sobre los adolescentes y en tanto es un
elemento que ha modificado la prioridad de los valores.

En la mayoría de las letras de canciones actuales parece que lo que importa ahora
es el estatus, la competencia, el bienestar, el ocio, el placer momentáneo y el poder
económico, y donde el sexo es más importante que el amor y la identidad es relativa.
Los adolescentes son los más propensos a las influencias, porque están en la etapa
de formación y delimitación de su personalidad que, para cubrir su necesidad de
aceptación y pertenencia al grupo, han de coincidir con la de sus pares, y a partir de allí va
a depender como se conformará su conducta, valores e identidad, y en tanto su yo.

Al respecto, concluyo que la música nos ayuda en nuestro desarrollo psíquico y

emocional, proporcionándonos el equilibrio necesario para alcanzar un nivel
adecuado de bienestar y felicidad, por lo que es necesario elegir música que no se
aleje de este objetivo; así como que la música tiene una enorme capacidad para la
integración neuronal, que contribuye a desarrollar la percepción sonora, estados de
ánimo, conductas cognitivas, perceptivo–motrices y otras, que se sintetiza en una
función tanto receptiva como ejecutiva del cerebro, que permite generar y modificar
conductas (2003), esto es, no solo contribuye a formar la personalidad sino a
modificarla.

Cuida lo que ves.

Los ojos son un órgano visual que nos permite captar numerosos estímulos
externos y conduce esa información al cerebro. La aparición de la televisión a color
fue un invento orgullosamente mexicano que ha abierto los horizontes de la
creatividad. Desgraciadamente, también hay innumerables videos y películas que
inducen al consumo de drogas, pornografía, injusticias sociales o bullying
cibernético. Al ver una película, hasta los personajes más secundarios y que
tuvieron menos de una escena se han visto reflejados en nuestros sueños, esto nos
dice que, todo lo que captan nuestros ojos de alguna manera quedan en nuestro
inconsciente y al mismo tiempo influye en nuestra manera de percibir la realidad,
otro factor de la personalidad.

Existe evidencia empírica que indica que las narraciones de ficción ejercen efectos
significativos más allá del puro entretenimiento y el impacto afectivo. Las
investigaciones desarrolladas han permitido concluir que la exposición continuada
y repetida a contenidos televisivos de ficción influye en las actitudes y creencias de
los televidentes (2008), lo que insisto, es formativo de su personalidad.

Conclusiones

Esta teoría induce a reflexionar acerca de la importancia de discernir y filtrar los

estímulos externos e internos, por lo que idóneamente debemos elegir lo que aporta
para nuestro desarrollo personal, informándonos y cuidando lo que vemos y lo que
oímos, en cualquier medio, sea televisión, redes sociales, internet, música, pues
toda esta influencia se interioriza y forma nuestras creencias, mismas que una a
una concentran nuestro sistema de creencias, el cual es el detonador de nuestras
emociones, las cuales forman nuestros pensamientos y con base en éstos es que
actuamos, y esta triada de sentir, pensar y actuar constituye nuestra personalidad.
Ejemplos de casos.

1. Caso lineal
Mónica tiene 20 años
Buena familia
Valores
Estructura fuerte – creencias positivas desde niña
Busca sus pares, pero sin dejar de ser ella
En cada decisión ve si es bueno para ella o si no afecta a terceros.
Investiga de que trata antes de escuchar una nueva canción o ver una nueva
peli
Se burlan de ella porque no ve películas de terror ni de guerra innecesaria
No vio los Simpson, Bob esponja, o las wings porque sus padres creen que
no tienen buenos mensajes.
No escucha las canciones del momento a menos que no encuentre algo
sospechoso en ellas.
Es autentica
Sus sueños e ideales son realistas y buenos para ella

2. Caso desviado, pero con solución

Oscar tiene 25 años
Familia dentro de lo normal
Desde los 5 años sus padres le compraron una Tablet en donde jugaba todos
los días Fortnite y Call of Duty
Busca a sus pares y quiere ser como ellos
Le gusta el reggaetón
Se viste con pantalones rotos y cadenas, quiere un tatuaje de león como el de
Maluma.
Para conquistar una chica primero le enseña su carro y liga en fiestas a través
de un buen baile sensual
Las opiniones de los demás las adopta
Después de terapia se da cuenta que vive a partir de irrealidades y sueños
inalcanzables, por lo que busca realizarse y buscar su propio camino.

3. Ver pornografía. La utilización de internet ha crecido en menos tiempo más

rápido que cualquier tecnología en la historia, podemos tener acceso a
información a la hora y lugar que queramos, y esto también ha facilitado el
acceso a contenido sexual. Este negocio se ha expandido en todo tipo de
plataforma, desde anuncios en redes sociales hasta virus que entran
desprevenidamente a tu equipo y con hipervínculos que te direccionan a este
contenido, a veces, incluso sin nuestro consentimiento, tentando al público a
frecuentar este contenido. ¿Cómo afecta en la personalidad? Este tipo de
materiales pueden producir en niños y jóvenes una imagen distorsionada de
la sexualidad y afecta la percepción de la realidad. Se ha reducido a la mujer
a un objeto de placer y las relaciones sexuales lo muestran sólo como un acto
físico ajeno al contexto de la finalidad unitiva de una relación. Este contenido
puede utilizarse para la excitación sexual de manera individual, por lo que al
momento de buscar pareja uno de sus objetivos prioritarios es simplemente el
placer y la satisfacción personal.

Tal es el caso del asesino en serie Ted Bundy, que mató al menos a 36
mujeres y tuvo en jaque a la policía de Estados Unidos durante años. Bundy
explicó y alerta en una de sus entrevistas que uno de los principales motivos
que le llevaron a violar y asesinar
brutalmente a una treintena de mujeres
fueron las revistas eróticas a la venta
en kioscos y librerías. Ted Bundy marca
en su entrevista que la pornografía no
es la culpable de todos los actos
violentos que cometió, sin embargo, la
atribuye como la semilla que modificó
su comportamiento a uno violento y
sexual.
Críticas.

Esta teoría abarca el ámbito del ser humano en cuanto a lo sensorial y empírico, esto
es, se sitúa más en el ambiente, por lo que no considera el aspecto genético de la
personalidad.

De esta teoría se observa que refiere a los estímulos externos que reciben los niños,
adolescentes y jóvenes, pero no se encontró en su lectura nada referente al ser
humano en su desarrollo prenatal, aun cuando existe evidencia científica de cómo a
través de lo que escucha y siente dentro del vientre materno, va formando su
estructura personal.

De igual manera, no contempla a los adultos y adultos mayores, aún cuando refiere
que la personalidad se encuentra en continua formación. Por lo que al no ser estática
debiera entonces referir que lo que se escucha y ve también afecta a estos sectores.

Se concentra en dos sentidos, vista y oído, pero se conoce que también a través del
olfato, gusto y tacto se percibe la realidad e igualmente éstos son generadores de
estímulos formativos de la personalidad.

Cabe cuestionar si efectivamente los estímulos percibidos a través de los sentidos

forman la personalidad o si mas bien es la personalidad ya formada la que permite
interpretar los estímulos de acuerdo a ésta, ósea, si el escuchar un determinado tipo
de música aporta rasgos a la personalidad o si son estos rasgos los que marcan la
tendencia a elegir un determinado tipo de música.

Es una teoría esperanzadora, ya que no comparte la idea de Freud de acuerdo de

que “infancia es destino”. Es cierto que la infancia da ciertas herramientas con las
que ayudan a sobrellevar los retos y desafíos de la vida, sin embargo, esta teoría
postula que las personas pueden estar en constante aprendizaje de acuerdo a lo que
escuchan y observan, de acuerdo a como alimentan a su cerebro, es decir, las
personas no eligen en dónde nacer, pero sí eligen cómo ser.

Finalmente, y aun considerando los elementos expuesto como crítica a la teoría

presentada, me parece interesante y fundamentada la Teoría de los sentidos como
formativos de la personalidad, dado que los estímulos percibidos generan emociones
y pensamientos que se traducen en conductas, y esta triada constituye el yo, esto
es, la personalidad del sujeto.
Referencias bibliográficas

López, S., Islas K., (2018). ¿CÓMO SE ESTRUCTURA EL YO?: Una visión desde
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