Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Hebreos :57 Cristo, en los días de su vida física, habiendo ofrecido ruegos y súplicas con fuerte clamor y
lágrimas al que lo podía librar de la muerte, fue oído por su temor reverente. 8 Aunque era Hijo,
aprendió la obediencia por lo que padeció. 9 Y habiendo sido perfeccionado, llegó a ser Autor de eterna
salvación para todos los que le obedecen
Los jóvenes contemporáneos son probablemente iguales a los de siempre. Son tan astutos y tan
hábiles; tan inteligentes y tan imprudentes; tan rebeldes y tan indolentes; tan inquietos y tan
sorprendentes. tan fascinantes, tan desesperantes. Sin embargo, parece también haber algunas
diferencias notorias y una de ellas es su fragilidad, su vulnerabilidad y su poca tolerancia a la
frustración y al fracaso. Tal parece una generación de cristal (Córdova, 2016
De esta forma podemos ver que la fe es un don divino que nos da Dios en lugar de un fruto de la
capacidad humana, la fe está disponible en la gracia de cualquier cristiano genuino (Efesios 2:8
Ciertamente la gracia de Dios los ha salvado por medio de la fe. Ésta no nació de ustedes, sino que es
un don de Dios).
3. CREER QUE DIOS ES Y QUE ESTÁ DE NUESTRO LADO
2 Corintios 5:6-8 6 Por eso vivimos siempre confiados, pues sabemos que mientras estemos en el
cuerpo, estamos ausentes del Señor 7 (porque vivimos por la fe, no por la vista). 8 Pero confiamos, y
quisiéramos más bien ausentarnos del cuerpo y presentarnos ante el Señor.
estamos en contacto con el Señor por fe, no por vista. No lo vemos; Él no viene y se sienta a nuestro
lado y nos habla y pone su brazo alrededor de nuestros hombros y nos anima, pero, sin embargo,
tenemos Su presencia con nosotros. Jamás habrá circunstancia por la que pasemos que signifique que
estamos abandonados y dejados a nuestros propios recursos.
El Señor mismo lo expresó de esta manera a los discípulos en el aposento alto. Ese fue un momento de
turbación; sus vidas estaban en peligro; pero Él dijo: “No se turbe vuestro corazón; creéis en Dios,
creed también en mí" (Juan 14:1). Y un poco más tarde: 18» No los dejaré huérfanos; vendré a
ustedes. 19 Dentro de poco, el mundo no me verá más; pero ustedes me verán; y porque yo vivo,
ustedes también vivirán.. Él ha prometido: “Y yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del
mundo” (Mateo 28:20b). Espero que, como cristianos, nunca olvidemos esta promesa. Eso es real y
vital. Eso nos sostendrá y nos alentará, no importa cuál pueda ser nuestra situación. No estamos
solos. Él está con nosotros. Caminamos por fe, no por vista. Tenemos una provisión plena de amor,
paz y gozo para mantenernos en medio de cualquier cosa. ¿No es esa una razón suficiente para decir:
“Así que vivimos confiados siempre”
DIOS NO ANDA JUGANDO AL ESCONDITE CON SUS HIJOS
4. QUE ES GALARDONADOR
Dios es galardonador de los que lo buscan. La humanidad hoy necesita invocar a Dios de todo corazón,
clamar y humillarse delante de Él. DIOS nos está haciendo una invitación, no solamente para
transformarnos, sino para bendecirnos, Él sabe de qué tenemos necesidad, pero nosotros no
recibimos los milagros lejos de Dios, recibimos los milagros delante de su presencia, Él nos está
diciendo que, si le buscamos, Él nos oirá y se dejará hallar por nosotros. Nadie se queda con las manos
vacías cuando se determina a buscar a Dios de forma apasionada, y si todos juntos lo buscamos y
hallamos, grandes cosas van a acontecer. “HAGAMOS QUE LA COSAS SUCEDAN”
En el desierto, el pueblo de Israel se le olvidó que Dios los había sacado de Egipto para darles una
tierra mejor, Pero lo que tenían como recuerdo era el pasado y vivían el presente, a raíz de sus
recuerdos olvidaron de que Dios no nos saca de un lugar para dejarnos igual, sino que nos saca para
llevarnos a uno mejor.
Hebreos 10:35-39: “No perdáis, pues, vuestra confianza, que tiene grande galardón; porque os es
necesaria la paciencia, para que habiendo hecho la voluntad de Dios, obtengáis la promesa. Porque
aún un poquito, y el que ha de venir vendrá, y no tardará. Mas el justo vivirá por fe; y si retrocediere,
no agradará a mi alma. Pero nosotros no somos de los que retroceden para perdición, sino de los
que tienen fe para preservación del alma.”
No perdamos la confianza de que hay un galardón frente a nosotros. Dios le tiene un premio a los que
terminen esta carrera, a los que no se debiliten en su fe. Cuando nos acercamos a Dios, nos damos
cuenta de que empezamos a vivir para una visión más alta que la nuestra, y cuando la abrazamos,
entendemos que ya no podemos vivir para nosotros, y que su voluntad es agradable y perfecta
(Romanos 12:2).
LA GRANDEZA DE UN HIJO DE DIOS NO ESTÁ EN ENTENDER, SINO OBEDECERLE.
Dios no nos llamó para vergüenza, sino para honra. Dejemos de pensar que Dios quiere quitarnos algo
o dejarnos con las manos vacías, ese no es el Dios en el que hemos creído, el Dios que nos llamó y
escogió, nos sacó para darnos honra ante los hombres, para mostrar su gloria sobre nosotros, y para
que todos vean su favor sobre sus hijos que le buscan diligentemente. No perdamos la visión de
nuestro galardón, porque la recompensa viene de Dios, y ella es transgeneracional, tocará a nuestros
hijos y nietos, hasta que Cristo venga.
Hebreos 6:10-12: 10 Porque Dios es justo, y no olvidará el trabajo de ustedes y el amor que han
mostrado hacia él mediante el servicio a los santos, como hasta ahora lo hacen. 11 Pero deseamos
que cada uno de ustedes muestre el mismo entusiasmo hasta el fin, para la plena realización de su
esperanza 12 y para que no se hagan perezosos, sino que sigan el ejemplo de quienes por medio de
la fe y la paciencia heredan las promesas.
Todo lo que hacemos con amor para Dios, Él no lo va a olvidar. Dios nunca aparece con las manos
vacías, siempre llega con recompensa, salud y salvación para nuestras familias, porque Él es un Padre
amoroso, bueno y galardonador.
5. PIDE AUTENTICIDAD Y COHERENCIA
Jesús nos pide autenticidad en nuestra vida alejando de nosotros todo tipo de vanidad y de hipocresía
para manifestarnos como verdaderos creyentes en todo lo que hagamos.
(Mateo 6:1-2 “Guárdense de hacer su justicia delante de los hombres para ser vistos por ellos. De lo
contrario, no tendrán recompensa de su Padre que está en los cielos. 2 Cuando, pues, hagas obras de
misericordia, no hagas tocar trompeta delante de ti, como hacen los hipócritas en las sinagogas y en
las calles para ser honrados por los hombres. De cierto les digo que ellos ya tienen su recompensa.
“EL BIEN NO HACE RUIDO, Y EL RUIDO NO HACE BIEN”. Para que Dios nos comprenda no hace falta
gritar, ni hablar mucho. Él “ve en lo escondido”, ve el corazón.
En los seres humanos siempre ha existido el deseo de agradar a Dios, pero nos equivocamos
continuamente creyendo que agradamos a Dios porque hacemos cosas para él, porque cumplimos
con ciertas normas religiosas o porque hacemos obras buenas.
Mateo 23:1-8
23 Después de esto, Jesús dijo a la gente y a sus discípulos: 2 «Los maestros de la ley y los fariseos
tienen la responsabilidad de interpretar a Moisés. [a] 3 Así que ustedes deben obedecerlos y hacer
todo lo que les digan. Pero no hagan lo que hacen ellos, porque no practican lo que predican. 4
Atan cargas pesadas y las ponen sobre la espalda de los demás, pero ellos mismos no están
dispuestos a mover ni un dedo para levantarlas. 5 »Todo lo hacen para que la gente los vea: Usan
filacterias grandes y adornan sus ropas con borlas vistosas;[b] 6 se mueren por el lugar de honor en
los banquetes y los primeros asientos en las sinagogas, 7 y porque la gente los salude en las plazas
y los llame “Rabí”. 8» Pero no permitan que a ustedes se les llame “Rabí”, porque tienen un solo
Maestro y todos ustedes son hermanos.
Nada hay más desagradable que una persona falsa y vanidosa, que no sabe ser congruente en la
vida, que lo que hace no es otra cosa que aparentar y querer dar una figura de lo que realmente no
es, ni siente.
Manifestarnos con verdad, expresar realmente lo que somos, alejar de nosotros actitudes farisaicas y
de hipocresía son valores muy a tener en cuenta.
CONCLUSON:
No importan las experiencias que tenga que enfrentar si mantenemos nuestra confianza absoluta en
Dios: esa fe me llevará a acercarme a Dios, el acercarme a Dios me convencerá de que Dios es y está y
una sonrisa brillará en nuestros labios porque experimentaremos que Dios es galardonador de los que
lo buscan.