Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
La Tet solo tiene una pronunciación y es una letra que se abre hacia el cielo, es la letra de la
“renovación”. El origen de la palabra Tet viene del hebreo Tit que significa barro, y el barro
permite el aislamiento, cuando el barro se seca cae como piel vieja. Esta letra significa el
cambio de piel.
El Gran Agente Mágico es una fuerza real empleada todos los días por todos. Es la electricidad
cósmica, el principio de vida universal, la energía consciente que toma forma como todo
cuanto existe y construye todo de adentro hacia afuera. En la personalidad humana, se
manifiesta especialmente como una modalidad sutil de fuerza nerviosa a la cual los hermanos
orientales dan el nombre de Kundalini la "enroscada".
Elohim Tahor ocupa la posición número 9 en el alfabeto hebreo y su guematría es también 9.
Cuando vemos esta letra, lo primero que nos viene al pensamiento es una vasija, un
contenedor de Luz, y es que, efectivamente, eso es lo que representa. ¿Cómo sabemos que lo
que almacena es Luz? Su numerología, en todas las filosofías espirituales, significa conexión
Divina, porque el 9 representa el final del camino y, al mismo tiempo, es el inicio de un nivel
más elevado, el que nos lleva al décimo nivel, que es volver al inicio, pero en una dimensión
superior.
El Zohar nos explica que Tet ט se presentó al Creador para pedirle que la utilizara para crear el
mundo, porque con ella comienza la palabra Tov טוב (bueno, bondad), y Dios le respondió que
no crearía al mundo con ella, porque su bondad está oculta en su interior y no es visible. Este
punto es fundamental para la comprensión de todo lo que nos pasa en de nuestra vida. Cada
Sefirah del Árbol de la Vida es una vasija, y la Luz que la llena es interna, está oculta (por eso es
que no es tan simple encontrar la verdadera Luz dentro de un trabajo espiritual). Sin embargo,
esta Luz, aun cuando no se ve, es buena y bondadosa. Es a esto a lo que la Kabalah se refiere
cuando nos explica que todo es Luz (oculta o revelada). Una persona bonita, pero superficial o
sin ningún crecimiento espiritual, tiene Luz externa (y es por eso que es atractiva a los ojos de
la gente), pero no tiene Luz interna, es una vasija vacía. Al iniciar un trabajo espiritual y
comenzar a revelar Luz, su vasija comienza a llenarse, y, entonces, su Luz interna prevalece
sobre la externa.
Es muy común escuchar, dentro del mundo espiritual, que todo lo que nos sucede es perfecto,
y esto es cierto. Ésta es una de las grandes lecciones de esta letra: detrás de cada cosa
aparentemente mala, hay bondad, sólo que está oculta. Sin embargo, la Kabalah nos enseña
que todo eso que nos pasa (aparentemente malo), no es necesario que ocurra para que esa
Luz oculta se revele. Cuando llega a materializarse un problema, es porque la Luz no encontró
otra manera de manifestarse. El Zohar nos enseña que hay dos maneras de revelar esta Luz: a
través del estudio de la Kabalah o a través de los problemas. Sé que esto puede sonar a
sectarismos, pero detrás de esta afirmación hay una verdad muy simple.
Esta frase: "Vayar Elohim Ki Tov” (y Dios vio que era bueno), aparece en todas las frases de la
creación de los días, a excepción del segundo, con lo cual se nos deja muy claro que, de todos
estos aspectos buenos, sólo hay uno (el segundo día) que no es calificado como bueno, pero
tampoco se dice que es malo. Este segundo día representa la Sefirah de Guevurá, el deseo de
recibir, pero éste puede tener un propósito altruista (recibir para compartir) o un propósito
egoísta (deseo de recibir para sí mismo). Esta Sefirah está ubicada en el lado izquierdo de
nuestro cuerpo, en la columna del rigor y la fuerza. El egoísmo no es más que la llave que abre
el pilar del rigor, y es allí en donde se gesta la Ley universal de causa y efecto. Al usar esta llave,
estamos activando el sistema correctivo del universo, puesto que la creación está destinada a
ser toda buena, y esta Ley se creó para que la justicia y el orden sostengan a toda la creación.
El primer día, es la semilla del resto del árbol de la creación, y la frase” …y separó Dios la Luz
de la oscuridad", nos revela que no hay escapatoria. Estamos destinados a revelar toda la
bondad de la Luz interna que hay en nosotros, y esto lo podemos hacer a través del
crecimiento o a través del dolor (es nuestra decisión). En este sentido, el Zohar nos explica que
Tet ט es el atributo interno de la Sefirah de Yesod de Zeir Anpin. En esta Sefrirah se gerencia la
salud, las relaciones (el sexo) y el dinero. De acuerdo a lo que se exprese en nuestras vidas, en
estos tres aspectos, podemos tener un balance de cómo está revelada esa Luz en nosotros. Si
en nuestra vida hay abundancia, amor y buena salud, entonces nuestra conexión es Tov
(buena). El Zohar nos dice que esta esfera de Yesod de Zeir Anpin, es llamada Tzadik (justa), y
que ninguna fuerza impura puede aferrársele, con lo cual se nos deja claro que sólo cuando la
Luz es buena, se forma la conexión entre Yesod y Maljut.
El Zohar nos dice que la luz de Tet no brilla abiertamente, sino discretamente, dentro de Yesod
de Zeir Anpin, y por eso Nukva (Maljut) no podrá recibir esta Luz directamente, a menos que la
Luz se oculte dentro de Nukva. En nuestra vida diaria, esto se aplica de la siguiente manera:
cada vez que alardeamos de algo que logramos o tenemos, o cada vez que nos surge la
necesidad de demostrar lo que tenemos y de que el otro nos apruebe (expresiones todas que
indican falta de humildad), se cierra la puerta de Maljut, y se crea lo que se llama la Luz
retornante. Es decir, Maljut (el mundo físico) no puede recibir esta Luz porque no es discreta
(humilde), y ésta retorna, se derrama. Es decir, que la falta de discreción (falta de humildad)
sirve de especie de “tapa” que cubre la vasija, y se crea una especie de pantalla o espejo que
refleja esa Luz dándonos un brillo externo pero muy momentáneo. Entonces, esta Luz nos da
satisfacción por breves momentos, y las fuerzas impuras de envidia, avaricia, egoísmo y odio se
aferran a nosotros, creándonos todo tipo de problemas. La prosperidad depende del tamaño
de nuestra vasija, y ésta sólo se amplía cuando recibe Luz interna (la Luz retornante no sirve
para ampliar nuestra vasija).
Siendo así, podemos observar que la carta del Tarot de Marsella que corresponde a Tet, es El
ermitaño. Esto no quiere decir que tenemos que vivir la vida aislados del mundo, todo lo
contrario. Esta carta no nos habla de nuestro cuerpo físico, sino de nuestra alma. Tet ט nos
enseña que nuestro estudio debe ser dedicado a buscar revelar la Luz interna del alma; ésta es
la ermitaña, (encerrada en una cáscara y bloqueada por el ego), y la lámpara es símbolo de la
Luz que debemos revelar. El anciano de esta carta del tarot, eleva la lámpara para mostrarnos
el camino, el cual sólo puede ser aquel que está iluminado con esa lámpara (todo lo demás es
oscuro). En conclusión, la gran lección de Tet ט es que, para evitar que las fuerzas impuras se
aferren a nosotros (los problemas, la escasez, el dolor), toda nuestra energía debe ser dirigida
al encuentro con esa Luz.
La palabra bueno (טובtov), tiene guematría 17, y las
palabras brillar זחח y afortunado גדי también comparten esta guematría (17).
Recordemos que el valor numérico nos habla del tipo de energía interna que hay dentro de
una palabra. Por tanto, cuidar que toda nuestra energía sea buena, nos otorga brillo y buena
fortuna. Sin embargo, como lo vimos en el artículo de Jet, la palabra pecado חט tiene también
guematría 17, con lo cual la misma energía que se utiliza para prosperar y ser feliz, al
ser utilizada para propósitos egoístas (pecado) nos lleva al caos.
El órgano de nuestro cuerpo que se encarga de limpiarnos de las impurezas de nuestra
alimentación y de las emociones negativas, es el hígado. Por ello, el Sepher Yetzirah asocia
a Tet ט con este órgano. Las enfermedades vinculadas al hígado son bloqueos de Tet ט (son un
símbolo de las fuerzas impuras aferradas a él), así como problemas en las vértebras dorsales
superiores y lesiones en la mano derecha. Cuando tenemos necesidad de compañía extrema o
miedo profundo a la soledad, presentamos un bloqueo de Tet ט. De igual manera, el
aislamiento social es el otro extremo del bloqueo de esta energía. Otras manifestaciones de
bloqueos en este sendero psíquico, son los problemas económicos, o también el egoísmo y la
avaricia. En todos estos casos, hay un “cortocircuito”, y esto obliga al rigor y la fuerza a entrar
en acción para reparar la conexión, provocando mucho sufrimiento para poder liberar esos
cúmulos energéticos y corregirlos.
En fin, amigo, la sabiduría de la Kabalah no deja de fascinarme… Los innumerables beneficios
de meditar con las letras hebras no deben hacerse esperar en tu vida. Decide tú también
separar la Luz de la oscuridad, y no dejes que la vida te obligue a hacerlo. Toma las riendas de
tu vida en tus manos.
FORMA
Un recipiente con un borde invertido; la sefirá de iesod; paz.
Mundos:
· Forma oculta en la materia.
· Potencial oculto en lo real.
· Paz entre los elementos de la Creación.
· Paz entre el agua y el fuego en el cielo: "Aquel que hace paz en las alturas".
Almas:
· El alma oculta en el cuerpo.
· Paz entre las almas de Israel.
· El útero externo: el mundo impuro; el útero interno: la aspiración pura del alma.
Divinidad:
· Di-s oculto dentro de Su Creación.
· La revelación futura de la paz universal.
· La presencia de Di-s impregnada (preñada) en el mundo.
NOMBRE
Inclinación; bastón - serpiente; abajo; cama.
Mundos:
· La serpiente en el Jardín del Edén; el hígado; patrones innatos de comportamiento.
· Bajas inclinaciones mundanas.
· La tendencia a mentir.
Almas:
· El poder de juzgar correctamente.
· El poder de imaginar correctamente.
· Las doce tribus de Israel.
· Los doce sentidos.
Divinidad:
· La pechera del Sumo Sacerdote.
· La cama - unidad del hombre y su esposa en la presencia de Di-s.
· La tonada de la Torá.
NUMERO
Nueve
Mundos:
· Nueve materiales físicos que forman recipientes que contraen impureza.
· Nueve niveles de paz.
· Nueve torrentes de bendición de las sefirot en maljut.
Almas:
· Los nueve meses de embarazo.
· Los nueve mandamientos positivos en las leyes de Fundamento y Carácter.
Divinidad:
· El símbolo numérico de la verdad y la eternidad.
· Nueve bendiciones de Musaf en Rosh HaShaná.
· Nueve sonidos del shofar.
· Vida eterna.