"Metamorfosis" de Franz Kafka y "Una habitación propia" de Virginia Woolf La novela "Metamorfosis" de Franz Kafka y el ensayo "Una habitación propia" de Virginia Woolf son dos obras literarias que abordan temas profundos y complejos. Mientras que "Metamorfosis" es una obra de ficción que narra la transformación de un hombre en un insecto y las consecuencias de esta transformación en su vida y en su relación con su familia, "Una habitación propia" es un ensayo en el que Woolf reflexiona sobre las limitaciones y los obstáculos que enfrentan las mujeres en la sociedad patriarcal y en el mundo de la literatura. Sin embargo, tanto la novela “Metamorfosis” de Kafka, como el ensayo de “Una habitación propia” de Woolf son obras literarias que comparten la temática de la identidad y la lucha por la autonomía. Aunque pertenecen a géneros diferentes, ambas obras cuestionan el papel que la sociedad juega en la vida del individuo y cómo esta puede limitar la libertad y la independencia de la persona. En "Metamorfosis" Kafka presenta una visión sombría y desesperanzada de la vida en la sociedad moderna. La obra cuenta la historia de Gregor Samsa, un hombre que despierta un día convertido en un insecto. La obra se centra en cómo los demás personajes tratan a Gregor después de su transformación y cómo él mismo experimenta su nueva condición. La obra de Kafka es una alegoría de la experiencia humana, donde el protagonista se siente marginado y excluido de su propia vida; con esto Kafka presenta el gran valor que tiene la sociedad para el individuo en su formación espiritual y su desempeño económico. Su metamorfosis lo obliga a luchar contra su propia identidad y contra la percepción que los demás tienen de él. Se da todo un proceso de deshumanización donde tanto Gregor como su familia lo aísla de la convivencia, todas las repercusiones económicas que tiene su ausencia hacen un cambio total en la familia y por ende el cómo ven y lo que sienten por Gregor. La alienación y la incomunicación son temas centrales en "La Metamorfosis". Kafka utiliza la figura de un insecto para mostrar cómo la sociedad puede rechazar a aquellos que no se adaptan a sus normas. Gregor Samsa se ve obligado a luchar contra su propia identidad e intentar adaptarse a su nueva condición. La obra muestra cómo el personaje es marginado por su familia y cómo esta lo trata como una carga económica. De esta forma, Kafka reflexiona sobre la dificultad que supone adaptarse a una sociedad que nos condiciona y que puede rechazar aquellos que no se adaptan. En contraste, "Una habitación propia" de Woolf es un llamado a la libertad y a la independencia para las mujeres en una sociedad que las oprime y las limita. "Una Habitación Propia" es un ensayo en el que Virginia Woolf reflexiona sobre las condiciones necesarias para que las mujeres puedan desarrollar su creatividad en un mundo dominado por los hombres. Woolf argumenta que la falta de autonomía y de independencia económica han limitado el acceso de las mujeres al mundo de las artes y la literatura, así como sus oportunidades y condición de libertad. De esta forma, "Una Habitación Propia" es una defensa de la igualdad de género y una crítica al patriarcado. Woolf cuestiona a grandes figuras femeninas literarias de la historia, autoras como Jane Austen, Emily Brontë o George Eliot, y cómo estas lograron escribir a pesar de su falta de libertad física y mental. La autora se interroga si sus obras hubiesen destacado más si estas mujeres poseyeran las mismas libertades de autores masculinos como Shakespeare Argumenta que una mente “bien educada, libre, que nunca había sufrido desvíos u oposiciones, que desde el nacimiento había podido, al contrario, desarrollarse con plena libertad en la dirección que había querido” (Woolf, 1929) se disfruta de mejor manera en la lectura, es estimulante y a su vez relajante la manera tan fluida, directa y clara, oportunidad que no se le había dado a las mujeres. Según Woolf, las mujeres necesitan un espacio propio, tanto física como mentalmente, para poder escribir y crear sin ser controladas por los hombres y por las expectativas de la sociedad. Woolf sostiene que la liberación de las mujeres es esencial para la liberación de toda la humanidad, ya que solo así se podrán crear obras literarias y artísticas que reflejen la diversidad y la riqueza de la experiencia humana. A pesar de sus diferencias, tanto "Metamorfosis" como "Una habitación propia" cuestionan la idea de que los individuos son libres y autónomos en una sociedad que impone limitaciones y restricciones. Ambas obras ponen en tela de juicio las estructuras sociales que condicionan la libertad del individuo al igual que sugieren que la libertad y la independencia son esenciales para la realización personal y creativa, ya sea para un hombre que se ha convertido en un insecto o para una mujer que lucha por encontrar su lugar en una sociedad dominada por los hombres. Kafka muestra cómo la sociedad puede rechazar a aquellos que no se adaptan a sus normas, mientras que Woolf denuncia cómo la falta de igualdad puede restringir las oportunidades de las mujeres. De igual forma, ambas obras critican es su escritura los roles de género y lo marcados que siempre han estado para la sociedad. Por un lado Kafka aborda al hombre como proveedor total de su casa, que cuando este deja de proveer también deja de tener importancia para la familia, y cómo toda la dinámica de esta cambia, menciona la decadencia de las cenas y la incomunicación en ellas por la ausencia del sustento económico, toda la familia se ve obligada a un cambio en su rutina y a laborar porque Gregor ya no cumple su rol como hombre proveedor. Por su parte Woolf a lo largo de toda la obra aboga por el derecho de la mujer por su libertad, de cómo a esta se le ha dejado de lado y solo ha sido útil para el hombre como su objeto de interés, limita su rol básicamente a estar pero sin tener presencia. Ambos autores experimentaron todos los cambios sociales surgidos a causa de las guerras, la época de principios del siglo XX se caracteriza por estar llena de violencia días en los que la confianza colectiva se había perdido. Tanto “Metamorfosis” como “Una habitación propia” son un reflejo de la sociedad cambiante, en una nos centramos en los roles económicos y el peso que estos implican debido a la modernización. Mientras que en la otra se aborda este mismo factor, pero sumando la exclusión para un grupo social, en este caso las mujeres. Las obras están cargadas de un sentimiento de soledad y dolor, tanto el personaje de Gregor como la misma Virginia se leen solos y frustrados porque es su misma sociedad la que los ha abandonado. Aunque estas obras parecen tener poco en común a primera vista, ambas tratan temas que son relevantes para nuestra comprensión de la naturaleza humana y de la sociedad en la que vivimos. En particular, ambas obras reflexionan sobre la relación entre el individuo y la sociedad, y sobre la forma en que las limitaciones sociales y culturales pueden afectar la vida y el desarrollo de un individuo; comparten la idea de la lucha por la autonomía y la identidad en un mundo que condiciona la libertad del individuo. En "La Metamorfosis", Kafka muestra cómo la sociedad puede rechazar a aquellos que no se adaptan a sus normas, mientras que Woolf denuncia cómo la falta de igualdad restringe las oportunidades de las mujeres. En conclusión, "Metamorfosis" de Franz Kafka y "Una habitación propia" de Virginia Woolf son dos obras literarias que, a pesar de sus diferencias en género y estilo, comparten una preocupación común por la libertad y la autonomía individual. Ambas obras cuestionan las limitaciones sociales y culturales que impiden el desarrollo personal y creativo de los individuos y abordan la importancia y necesidad de una libertad económica para que la realización del ser sea plena. Bibliografía Correa, M. M. P. (2021, 8 noviembre). Repositorio Institucional Universidad de
Antioquia. La habitación y el monedero, Representaciones sobre las mujeres en la