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La primera civilización del mundo griego floreció en la isla de Creta.

El griego (Eλληνικά ), la lengua de una de las principales civilizaciones y una de las


literaturas más importantes del mundo, dentro de la familia de lenguas indoeuropeas es la
más estrechamente relacionada con armenio.
Y tiene una historia documentada que se remonta a más 3.500 años, siendo el registro más
antiguo de una lengua indoeuropea.
El griego moderno desciende del Proto-Griego, el antepasado de los antiguos dialectos
griegos que se hablaban en diferentes áreas de Grecia antes del siglo IV a.C., y que fueron
gradualmente reemplazados por una variedad de griego llamado griego común o Koiné
(κοινή ), basado en el dialecto ático hablado en Atenas.
La historia de la lengua griega suele dividirse en varios períodos caracterizados por factores
políticos y lingüísticos:
El griego micénico, fue la lengua de la civilización micénica (a partir del siglo XVI a.C.).
El griego clásico (o antiguo), conocido en todo el imperio romano, era el idioma del
período clásico de la civilización griega. El griego clásico cayó en desuso en la Europa
occidental durante la Edad Media, pero siguió usándose en el Imperio Bizantino y se
reintrodujo en el resto de Europa con la Caída de Constantinopla y la migración griega a
Italia.
El griego 'común' o koiné, una fusión de varios dialectos griegos con el dialecto de Atenas,
fue el dialecto griego común que se convirtió en una de las primeras lenguas francas del
mundo.
El griego medieval (bizantino) era la lengua literaria del Imperio Bizantino que se utilizó
hasta su caída en el siglo XV d.C.
El griego moderno se desarrolló a partir del griego koiné que se habla hoy en día.

La lengua griega, tal y como la conocemos hoy en día, ha sufrido fuertes transformaciones
desde la antigüedad. En la actualidad su variante moderna (demotikí) es el idioma oficial de
Grecia y de Chipre. También hay una minoría de lengua griega en Albania. El griego
pertenece a la gran familia de lenguas derivadas de una lengua común conocida como
indoeuropeo (también indogermánico).
DIALECTOS
La lengua griega de la antigüedad se hablaba no sólo en la antigua Grecia peninsular, sino
también en las colonias, dando lugar a los distintos dialectos que conocemos de la misma.

• Jónico: Se hablaba en Eubea, en las Islas Cícladas y en la región de Asia Menor que
comprende Esmirna, Éfeso y Mileto. Este dialecto es la base de la lengua de Homero,
Hesíodo y Heródoto.
• Eólico: Se hablaba en la parte norte de la costa de Asia Menor, en la isla de Lesbos, en
Tesalia y en Beocia.
• Dórico: Abarcaba el noroeste de Grecia, el Peloponeso, la parte sur de la costa de Asia
Menor, las islas de Creta y Rodas y en la Magna Grecia.
• Ático: Hablado en Atenas y sus alrededores.

El griego que a menudo se estudia como modelo de lengua de la antigüedad es el que


corresponde al dialecto ático, ya que literariamente llegó a superar a todos los demás
dialectos, principalmente en los siglos V a. de C., también conocido como el “Siglo de
Pericles”, y en el IV a.de C. En este dialecto escribieron los grandes autores de la literatura
griega: los poetas trágicos Esquilo, Sófocles y Eurípides, el poeta cómico Aristófanes, los
historiadores Tucídides y Jenofonte, el filósofo Platón y los oradores Lisias, Demóstenes y
Esquines.
A partir de la unificación de Grecia bajo Filipo de Macedonia, el dialecto ático, ligeramente
alterado por el contacto con los demás dialectos, se impuso como lengua literaria en toda
Grecia y se extendió con las conquistas de Alejandro Magno a todo el Oriente.
El dialecto resultante se llamó lengua común o koinè glôssa (κοινή γλωσσα). En ella
escribieron, entre otros, el filósofo Aristóteles, el historiador Polibio y el moralista Plutarco.
Asimismo, este dialecto constituye el fondo del griego bíblico, tanto del Antiguo como del
Nuevo Testamento.

Durante el período bizantino la lengua griega perdió su antiguo carácter, por la evolución
de sus formas y por la mezcla de elementos extraños, dando origen al griego moderno.

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